Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
responder a sus necesidades afectivas. Este es el tipo de apego más positivo para una
relación de pareja estable y satisfactoria
Confían en el otro cuando necesitan ayuda, del mismo modo que dan soporte
cuando se les necesita.
Es el estilo que más estabilidad mantiene durante la vida adulta y sólo es susceptible
de alterarse ante situaciones traumáticas.
Estilo inseguro ansioso-ambivalente: estos niños han tenido madres o padres muy
inestables, que cubrían sus necesidades en función de su propio estado de
ánimo (sobreprotegen, atemorizan, rechazan o incluso maltratan a sus hijos). Por ello,
aprenden a vivir las relaciones con miedo e inseguridad. Las personas con este tipo de
apego son muy propensas a desarrollar dependencia afectiva.
Tienen una mala imagen de sí mismos y una baja autoestima. La imagen de los
otros es bastante inestable, pasan del amor al odio con facilidad.
Tienen una pobre gestión emocional, sus reacciones suelen ser intensas. Los
conflictos son frecuentes
Estilo inseguro evitativo: son niños que han sufrido mucho rechazo y desprecio por parte
de sus padres (negligencia, ausencia de cariño, maltrato…). Las personas con este tipo de
apego son propensas a evitar las relaciones cercanas y duraderas, pues aprendieron que sólo
proporcionaban dolor. Se sienten orgullosos de su independencia, sin darse cuenta de que
podría ser una actitud defensiva que les protege de tener que establecer esa relación de
intimidad que tanto temen.
Suelen ser suspicaces y no suelen confiar en el otro ni pedir ayuda. Del mismo
modo, se sienten incómodos ante las peticiones de ayuda de su pareja.
Suelen tener el sistema de apego inhibido, por lo que se sienten incómodos ante la
intimidad. Respecto al sexo, pueden vivirlo con satisfacción, pero separado de la
parte afectiva.