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Luján Sánchez, V., Sánchez Daniel, J. (2018). Una educación artística del siglo XXI. La investigación en artes
y las nuevas pautas epistémicas de la educación artística en el marco de las post-metrópolis. Revista Sonda.
Investigación en Artes y Letras, nº 7, pp. 175-186.
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Victoria.lujan@gmail.com
Sanchez.fatimada@gmail.com
Citación: Luján Sánchez, V., Sánchez Daniel, J. (2018). Una educación artística del
siglo XXI. La investigación en artes y las nuevas pautas epistémicas de la educa-
ción artística en el marco de las post-metrópolis. Revista Sonda. Investigación en
Artes y Letras, nº 7, pp. 175-186.
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El presente trabajo dará cuenta de la necesaria Palabras clave: Educación, Arte, conocimiento,
construcción de nuevas estrategias para operar en la contemporaneidad
construcción de la realidad, en el marco de este sis-
tema de mediaciones socioculturales, en el entorno Key Words: Education, Art, knowledge, Contem-
de las metrópolis contemporáneas, donde tanto la porarity
investigación en artes, como las producciones artís-
ticas aportan nuevos marcos epistémicos a la educa- 1. INTRODUCCIÓN
ción artística en particular y por ende a la formación
integral del ciudadano contemporáneo. El vínculo entre arte y conocimiento estuvo reduci-
do en el marco de la modernidad occidental, a una
Abstract destreza técnica en la producción y una formación
In the Western modernity scheme, the link between de “connaiseur” en la recepción, que en palabras
art and knowledge was reduced to a technical ski- de Abad Molina y Palacio Garrido “explicaba esos
ll in production and a “conneiseur” and humanistic cuadros en la clase para que el alumnado aprendiera
formation in the reception. With the emergence of cuáles eran sus características y su mérito” (2011-
cultural industries, within the framework of a mass 227). Lo mismo podría suceder con la música, la
society, the power of image, sound and performan- danza, la arquitectura o incluso a partir del desarro-
Una educación artística del siglo XXI. La investigación en artes y las nuevas pautas epistémicas de la educa-
ción artística en el marco de las post-metrópolis
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artístico interactúa desde lo expresivo, estratégico y trucción del conocimiento, especialmente las vincu-
constructivo y puede ser sistematizado y puesto en ladas a la educación universitaria.
diálogo con otras disciplinas, para operar desde un
campo específico y a su vez vinculado en igualdad Estas instituciones insertas en lo que respecta al
de condiciones con otros campos de conocimiento. campo de las ciencias sociales y las humanidades, en
los marcos teóricos del progresismo de raíz mate-
En lo intrínseco al objeto de estudio del arte, se rialista, especialmente en la segunda mitad del siglo
parte de entender lo artístico como cualidad huma- XX, replicaron con el mismo desprecio que la inte-
na inserta en el mismo proceso de hominización y lectualidad europea lo había hecho en la etapa de
entendido no como como concepto unívoco sino entre guerras y posteriormente en los años sesenta,
como proceso relacional y situacional. De ese modo la instalación en la sociedad de masas de las indus-
se articula una estructura relacional entre el deno- trias culturales. Estas fueron entendidas como un
minado artista, la obra, el público, que toma dimen- nuevo “opio de los pueblos” parafraseando la famo-
sión específica en un espacio-tiempo determinado. sa cita de Marx con relación a la religión y la clase
Esto es en un entorno relacional y situacional. De obrera en el siglo XIX (1843.Crítica de la filosofía
esta manera no hay un concepto universal de arte del derecho en Hegel).
desde lo estructural y no solamente desde el con- Sin embargo, no se tenía en cuenta que, salvo excep-
tenido o significado. Del mismo modo tampoco se ciones específicas en países litorales sudamericanos
plantea una historicidad meta-histórica como la ge- como Argentina y Uruguay, las clases populares ni
nerada por el marxismo sino un devenir aleatorio en leían, ni escribían y fue el acceso a las industrias cul-
el marco de una dimensión compleja de la realidad turales el primer indicio de acceso a los valores di-
(Morin.2004) námicos, de algún modo más integradores del pro-
ceso de modernización del campo social y cultural
Se rompe la relación sujeto-objeto propia del pen- en América Latina.(Barbero 1991)
samiento moderno, para establecer un marco me-
todológico relacional tomado desde el campo de la
hermenéutica (Gadamer. 1960). Desde esta pers-
pectiva hermenéutica relacional se analiza el pro-
ceso artístico y se llega a la construcción del cons-
tructo conceptual de sentido del trabajo. Hablar de
hipótesis aquí en este marco metodológico sería un
contrasentido.
garantiza que las masas comprendan lo que sucede, sentido, como legitimación de las condiciones obje-
ni que vivan y piensen mejor. tivas del mundo
Las esperanzas nuevas se afincan más bien en los “…Para interpretar cabalmente una expresión no
sectores populares urbanos. En las “solidaridades basta con decodificar “el contenido semántico…”
duraderas y personalizadas” (Barbero. 1991) de la (Aguilar.2007. pág. 3). Es necesario también captar
cultura barrial y de los grupos artísticos, en los gra- la intención del enunciador para percibir lo implí-
ffitis y en la música juvenil, en los movimientos de cito, lo que genera la verosimilitud y construye la
mujeres y de pobladores pobres, ve los resortes de subjetividad. Y en la medida que no se dimensionen
una “institucionalidad nueva, fortaleciendo la socie- desde el campo epistémico y se democraticen las
dad civil”. (Barbero 1991) herramientas que permitan captar esas intenciones
del enunciador, la tendencia será la homogeneiza-
Ese tipo de mediaciones insertas en el campo de ción y la jerarquización: “… Se remplaza la virtual
la cultura de masas y desde las lógicas de las in- multiplicidad de experiencias y valores posibles a
dustrias culturales, no fueron, ni son en muchos ca- desarrollar en cada individuo, por una masividad
sos tenidas en cuenta, ya no sólo en el campo de la degradada que oculta lo mejor de cada uno y usual-
educación superior como herramientas de acceso a mente desnuda lo peor de la sociedad, sus prejuicios,
la incorporación de conocimiento y por tanto a la intereses y miserias…” (Aguilar. 2007.pág 9)
incorporación de herramientas para contribuir a la
incorporación de derechos, sino en campo mismo Del igual modo se transforman en el campo cog-
de los niveles primarios y medios de la educación. nitivo las nociones espaciales y temporales en la
Frente a ello, en muchos casos se asocia la construc- experiencia urbana contemporánea (Lindon 2009,
ción de capacidades cognitivas y de incorporación Soja 2008). El concepto de realidad se transforma
de derechos de ciudadanía para relacionarse con la en el marco urbano. El esquema moderno de rea-
realidad y sus semejantes, exclusivamente a las he- lidad/ficción se destruye. La realidad es otra, no es
rramientas de la lecto escritura clásica y las opera- más la realidad moderna. Construir un nuevo pa-
ciones lógico-matemáticas insertas en el concepto rámetro epistémico implica reconstruir un nuevo
de racionalidad moderno. modelo crítico donde no estén por fuera las redes
ni la experiencia, especialmente audiovisual. Esto es
En línea con este escenario contemporáneo de las incorporar las operaciones y procesos insertos hasta
construcciones situadas del concepto de realidad ahora en el campo estético y artístico. Esto es cons-
y sus dimensiones epistémicas, Hugo Aguilar, au- truir una epistemología de las artes, trasladable a la
tor de la Universidad Nacional de Río Cuarto de educación artística desde lo curricular.
la Provincia de Córdoba Argentina, en un artículo
titulado La performatividad o la técnica de la cons- 4. EL CAMBIO DE CONCEPTO DE ARTE
trucción de la subjetividad (2007), trabaja el modo EN ESTA NUEVA REALIDAD
de construir verdad en el marco de las mediaciones
de la sociedad contemporánea, sean los viejos me- Todo tiempo humano es un tiempo histórico y
dios masivos de las tradicionales industrias cultu- como tal sujeto a una interrelación entre la inte-
rales como las denominadas TICs. En ese marco ligencia humana, el entorno y sus semejantes, que
utiliza el concepto de performatividad en el uso del determina cosmovisiones, Lebenswelt (mundo de la
discurso para la construcción de subjetividades y ge- vida), Weltanschauung, (visión de mundo) para ha-
nerar una autoridad de verdad. cer una construcción modélica paradigmática y con
ella operar en el mundo. El tiempo moderno dio
Desde esta perspectiva trabaja con el concepto y la prioridad en esta operación a la mediación de la ra-
acción de lo performativo como un componente zón como cualidad universal humana, estructurada
esencial del proceso de enunciación e imprescin- de acuerdo con parámetros construidos a partir del
dible para comprender cualquier enunciado y no mundo griego y el posterior devenir histórico eu-
como un fenómeno aleatorio y secundario en la ropeo. Ese paradigma dominó el planeta y lo operó
interacción lingüística. (Aguilar. 2007.pág. 2). Se autoritariamente hasta la segunda mitad del siglo
entiende lo performativo como la instauración de XX, cuando sus promesas de libertad, igualdad, fra-
Una educación artística del siglo XXI. La investigación en artes y las nuevas pautas epistémicas de la educa-
ción artística en el marco de las post-metrópolis
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ternidad y certeza de verdad perdieron consistencia disciplinario, donde no sólo dialogan arte y ciencia,
y mostró sus límites. sino que además se reconfigura la experiencia artís-
tica tradicional, fundada en una relación mediada
El tiempo histórico contemporáneo se presenta por el discurso.
en el marco de una complejidad al cual la visión
de mundo o el mundo de la vida moderno le re- La emergencia del valor de la experiencia y el aporte
sulta insuficiente, si no quiere resignarse a un mo- del papel de la imagen y la dimensión virtual (Levy
delo discriminador y excluyente de derechos hacia 1995) como nuevos constructores del conocimiento,
los seres humanos y de plazo limitado en el hábito se inserta en un proceso dialéctico de homogeneiza-
extractivista y explotador del entorno. Este tiempo ción-diversificación, en el cuál interviene la acción
contemporáneo requiere de una construcción epis- política en el campo del mundo académico, que se
témica que tenga en cuenta la diversidad, la com- inserta en el proceso de incorporación de derechos,
plejidad, la relacionalidad y la situacionalidad, para (por ejemplo, de los pueblos originarios o un mar-
operar en un marco inclusivo de los seres humanos co educativo inclusivo) Lo tradicionalmente visto
y amigable con el entorno. El proceso artístico con- como arte desde los paradigmas de la modernidad
temporáneo, en la medida que se lo construya desde ha quedado reducido al circuito de elite.
una dimensión epistémica contempla estos requeri-
mientos. Por tanto, puede entendérselo como un sa- 5. UNA EDUCACIÓN ARTÍSTICA EN EL
ber emancipador. Pero como todo tiempo humano, SIGLO XXI
al ser histórico, es proactivo a partir de acciones y
decisiones sociales y culturales, no se instalará como El paradigma es una interrelación entre las tradi-
paradigma por sí solo sino a partir de una acción ciones y las aspiraciones de los proyectos políticos y
política. culturales. Pero no deja de ser una decisión política.
Esto implica entender que, por naturaleza, ningu-
na disciplina y mucho menos ningún contenido es
natural o determinadamente necesario. Son con-
secuencias de un proyecto, que como tal tiene que
tener a su vez, mecanismos sistemáticos de evalua-
ción, que permitan una constante y ágil adecuación.
Del mismo modo, un saber integrado como disci-
plina y contenidos en el diseño curricular no son los
mismos saberes académicos de las disciplinas en el
marco de su especificidad como disciplina con su
objeto, lenguaje y método de conocimiento.
En la actualidad existe una tensión de paradigmas
entre lo que podríamos definir como los colectivos
que hacen hincapié en la alfabetización científica y
el denominado pensamiento crítico (Sanmartí Par-
chan 2015) y aquellos que priorizan la formación de
recursos humanos para la preparación como fuerza
laboral. Pero ambas coinciden en que “…debe po-
tenciarse el trabajo por proyecto interdisciplinarios,
Joaquín Torres García. América Invertida. 1943.
el desarrollo de competencias, la motivación, el in-
terés del alumnado y la conexión de la escuela con el
En el proceso artístico contemporáneo. los concep- mundo real…” (Sanmartí Parchan.2015.31)
tos de artista, de obra y de público han tomado una
dimensión diferente. Ello deriva, que los modelos 6. ARTE PARA LA VIDA.
teóricos modernos, desde los cuales se construyeron
los relatos acerca de este proceso, sean insuficientes Hasta la primera mitad del siglo XX la educación
para integrar las nuevas manifestaciones. Los nue- artística tradicional tenía claro su objetivo. Era ins-
vos modelos teóricos demandan un trabajo inter- trumentalista en el marco del modelo académico
y positivista. Un estudiante de pintura tenía que Hayman, jefa por entonces de la novedosa sección
aprender a dibujar y pintar, el de música a tocar el dedicada a la Educación artística en la división de
instrumento específico o a componer bajo las reglas artes y letras de la UNESCO. El título del artícu-
de la música occidental o dirigir en el marco para- lo es “Arte como elemento de vida. Una experien-
digmático de la orquesta de cámara o sinfónica. Y la cia que todos pueden y deben compartir”. En él se
bailarina a bailar bajo las reglas de la danza clásica o dimensiona el paradigma de la educación artística
si era innovadora de la danza moderna. Lo mismo desde tres ópticas teóricas:
si el artista visual elegía la vanguardia o el musical 1. El concepto de libertad de Jean Paul Sartre
la música dodecafónica, por ejemplo. Los modelos 2. El de juego y placer vinculado al arte de
de enseñanza de las artes al estilo Bauhaus, espe- Herberd Read
cialmente la primera época de Weimar, se ubicaban 3. El de la síntesis de inteligencia y sensibili-
en el marco de las entonces denominadas escuelas dad, basado en la diferencia entre fantasía y verdad
de “Artes y oficios”, destinadas al marco de la en- objetiva, basado en el modelo de unicidad humana
señanza técnica. El objetivo era claro. Formar ar- sintetizado por el zenbudismo y las filosofías orien-
tistas con metodologías que en un tiempo sirvieron tales.
para los talleres y academias que trabajaban para las
cortes y luego para las elites burguesas o estatales Los tiempos presentes nos permiten asistir a una
cuando se produjo la revolución bolchevique y su verdadera transformación antropológica. Pie-
contra revolución stalinista. La contracultura de rre Levy (2004.Prólogo) nos habla de un cambio
vanguardia también generó una contra academia de humanidad, a la que identifica como un nuevo
que también funcionó en general en esos circuitos y nomadismo, que en vez de seguir rebaños sigue el
del cual Andy Warholl fue quizás el paradigma que devenir humano, a partir de un marco de incerti-
unió ese tipo de formación con la lógica de las in- dumbre y complejidad, al cual nos vinculamos y
dustrias culturales y Josef Beuys el de estos ámbitos operamos desde estrategias de inteligencias, que
con la militancia de los movimientos contracultura- en su caso denomina “inteligencia colectiva”. Este
les civiles, europeos post marxistas, en el ámbito de cambio de época, tradicionalmente denominado
las artes visuales y la música de la industria cultural como “sociedad del conocimiento” (Mateo 2006.
folklórica o pop, beat o rock en el campo musical de 145-151) ya viene siendo analizado desde los años
la post guerra. sesenta por pensadores como Peter Drucker, que en
la década del noventa del siglo XX acuñó el concep-
to “post-capitalista”, Manuel Castells “la era de la
información”, Daniel Bell “sociedad postindustrial”,
Zigmunt Bauman “modernidad líquida”, etc., etc.
Pero mientras que el enfoque sociológico y en ge-
neral de las diversas ciencias sociales, se lo aborda
desde una matriz socioeconómica, con marcos epis-
témicos y estructuras de pensamiento tradicionales
de la modernidad occidental, son los pensadores
como Levy, Serres , Morin , De Souza Santos y en
líneas generales pensadores anclados en el campo
de la filosofía y la educación, quienes han tomado
cuenta de la dimensión del cambio y la necesidad
de una transformación socio-institucional rotunda,
que haga fundamento especial en la educación.
Bandera Mapuche.
David Perkins (1997; 2009), Inés Aguerrondo
Es en la segunda mitad del siglo XX cuando se em- (1996; 2009) enuncian el concepto de “escuela in-
pieza a pensar en una educación artística destinada teligente” para dar dimensión al modelo institucio-
a toda la población. Es modélico el artículo apare- nal educativo sobre el cuál operar y que implican
cido en el Correo de la Unesco en 1961, escrito por transformaciones profundas, fundamentalmente en
la artista y educadora estadounidense Dra d’Arcy el marco del concepto de conocimiento y a partir
Una educación artística del siglo XXI. La investigación en artes y las nuevas pautas epistémicas de la educa-
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Esta concepción habilita el concepto del conoci- La identidad humana es la tercera de las lagunas,
miento como comprensión y articulación, en donde ya que no se enseña qué es el ser humano. El cuarto
opera fundamentalmente la noción de inteligencias aspecto problemático de la educación tiene que ver
(Gardner.1983 (2010), mente (Perkins.1981. 2009) con la globalización del mundo actual, en la que in-
saberes (Morin.1999) (De Souza Santos. 2014). Y tervienen múltiples factores relacionados entre sí y
es aquí donde “… El trabajo de la escuela se redefine que cambian cada vez a mayor velocidad. Ante esta
superando el compromiso de enseñar a pensar por situación acelerada y variable, es necesario enseñar
el compromiso de enseñar a pensar-para-saber-ha- la dificultad de entender el mundo, en su unidad y
cer…” y de pasar del “...adiestramiento de la memo- su diversidad. Otro de los denominados puntos ne-
ria a la educación de la mente…” gros de la educación es que se enseñan más certezas
que incertidumbres. El sexto punto se basa en que a
Finalmente, en lo que respecta a la educación desde menudo no se enseña a comprender, a entender a la
la acepción o dimensión de la formación del suje- gente en sus razones, en su complejidad. Por último,
to educativo, esta gestión del conocimiento en la Morin aboga por la enseñanza de una ética indivi-
educación (Aguerrondo.2009), implica cambios en dual, social y de la especie, íntimamente relaciona-
el paradigma tradicional del sistema educativo en das y que deben enseñarse de manera integrada.
conjunto.
Desde esta perspectiva, es necesario dimensionar el
Desde el marco epistemológico se elimina el de- papel que cumple lo estético en el proceso históri-
nominado “fascismo epistemológico” (De Souza co-social contemporáneo de esta nueva humanidad.
Santos 2014) de la modernidad eurocéntrica, dan- Si se toma como referencia al texto de Hans Ulrich
do lugar a la prioridad de la práctica ya que “…la Gumbrecht titulado Producción de presencia. Lo
superioridad de un determinado saber deja de ser que el significado no puede transmitir (Gumbrecht
definida por el nivel de institucionalización y pro- Hans 2005) se encontrará que, en la contempora-
fesionalización de dicho saber para pasar a ser defi- neidad, la experiencia estética ha dejado de tener
nida por su contribución pragmática a determinada un carácter hermenéutico de construcción de signi-
práctica…”. Desde el concepto de sujeto educativo ficado de modo absoluto, para pasar a estar en una
o pedagógico, se parte de una interrelación dialógi- instancia de oscilación entre los que Gumbrecht
ca e intersubjetiva (Freire.1970) Gadamer (2000). denomina “efectos de presencia” y “efectos de signi-
(Habermas.1987), teniendo en cuenta que el sujeto ficado”. Esta oscilación genera que muchas veces la
se construye y construye el objeto de conocimiento, comunicación deja de transmitir significados para
a partir de la selección de problemas y problemáti- generar presencias, desarrollando construcciones
cas, el aprendizaje permanente y la evaluación como de subjetividades que escapan al modelo epistémi-
retroalimentación, en el marco de un rol docente co tradicional. Estas construcciones de subjetivi-
como facilitador y no como transmisor de conoci- dad son performativas, en los dos sentidos de ese
Una educación artística del siglo XXI. La investigación en artes y las nuevas pautas epistémicas de la educa-
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