Universidad Arturo Michelena

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Psicología Mención Clínica
Técnicas de Investigación

“DETERMINACIÓN DE LAS CAUSAS

PSICOLÓGICAS QUE INFLUYEN EN
LA CONDUCTA DE UN
DELINCUENTE Y COMO AFECTA A
LOS ESTUDIANTES DEL PRIMER
SEMESTRE DE PSICOLOGÍA DE LA
SECCIÓN 1M”

Integrantes:
 Lira Simón 30.210.346
 Sánchez Mariangel 28.433.871
 Tablante Ada 27.764.668
 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

La psicología criminal, estudia el comportamiento de las personas

que han cometido un delito y tratan de entender el por qué y el cómo, es
decir, estudia las conductas delictivas, los tipos de delincuentes y el
fenómeno de la delincuencia en el ámbito de la sociedad.
El trabajo del psicólogo criminal se centra en la víctima y en el delincuente.
La psicología criminal trata de averiguar qué es lo que impulsa a una
persona a cometer un delito y por qué el castigo (la privación de libertad)
no le hace renunciar a delinquir. El uso de la psicología para capturar
criminales tuvo inicios literarios que datan de 1841 con los “asesinatos de
la calle morgue” de Edgar Allan Poe; sin embargo, en la vida real esta
aplicación tuvo principio en Gran Bretaña en el año de 1888 cuando el Dr.
George B. Philips, patólogo forense, diseñó el método “modelo – herida”;
este modelo se basaba en la comprensión de la naturaleza de las lesiones
de la víctima como base para la elaboración estadística del perfil del
delincuente. (Turvey 1.999).

El doctor G. E. Partridge, psicólogo de profesión, quien ofrece la idea de

cambiar la antigua denominación de "personalidad delictiva" por la de
“conducta delictiva”, resaltando como base fundamental de tal conducta "la
falta de aceptación y el no conformismo con los códigos y valores de la
sociedad, considerada ésta como la suma de los sistemas sociales". Así́
tenemos que el nuevo concepto incluye los rasgos indicados por Partridge
y de una manera general engloba los términos personalidad delictiva,
estado constitucional psicopático y reacción sociopática, definiéndose tal
conducta delictiva como la que ofrece un individuo crónicamente antisocial,
con una tendencia permanente a crear problemas, que no obtiene provecho
de la experiencia o del castigo, y no mantiene ninguna vinculación de
lealtad con personas, grupo o código social.
Ellos son frecuentemente agresivos, impulsivos, fríos emocionalmente,
insensibles, mostrando marcada inmadurez emocional, con ausencia del
sentido de responsabilidad, falta de juicio y una habilidad para racionalizar
su conducta a fin de que aparezca lógica o justificada ante las demás
personas. Es interesante señalar que en la subcultura delictiva esta
personalidad sociopática muchas veces posee una gran facilidad
manipulativa, fácilmente pueden manejar a otras personas para su propio
provecho.

Con el paso de los años, se han utilizado los psicólogos clínicos con la
finalidad de tratar a personas que ya han cometido los delitos, por ello es
tiempo que se deje estructurado cuáles son los rasgos más resaltantes de
la personalidad criminal o delictiva, cuál es la dinámica de esta
personalidad, cuáles son los lineamientos para el tratamiento psicológico y
cuál es el estado de actual del desarrollo de nuestras especialidades
clínicas en el sector penitenciario. Ha costado muchos años a la
criminología el poder estructurar un concepto de conducta criminal o
delictiva, fue la Escuela Psicoanalítica fundada por el pensador Dr.
Sigmund Freud, la que abordó este campo bastante olvidado y
menospreciado por las ciencias de la conducta del hombre para aplicarle
una interpretación de psicología dinámica al comportamiento del individuo
sometido a proceso judicial y punición por la comisión de un delito.

En vista de que en el medio científico-profesional de la salud mental se

utiliza el campo de aplicación de la psicología clínica, se considera de
interés reseñar ciertas causas que influyen en la dinámica de la
personalidad delictiva y cómo afecta este tipo de personalidad que
presentan algunas personas a los estudiantes del primer semestre de
psicología de la sección 1M.
 OBJETIVOS

Objetivo general:

 Aumentar la probabilidad de éxito en la detección y prevención de

delitos en la universidad Arturo Michelena.

Objetivos específicos:

 Fomentar campañas de motivación para que los jóvenes dediquen

más tiempo a los estudio disminuyendo su tiempo de ocio.
 Desarrollar métodos de sana recreación para el tiempo de ocio.
 Realizar campañas informativas en las cuales los estudiantes de la
universidad Arturo Michelena sean consientes que las conductas
criminales se pueden corregir con terapia.

Preguntas:

¿Cómo afecta la presencia de un individuo con tendencias delictivas

al ambiente de estudio en la universidad?

¿Se puede eliminar una conducta criminal con terapia?

¿Qué se debe hacer si se tiene conocimiento de un compañero con

tendencias delictivas?
 JUSTIFICACIÓN

Según la Universidad de Barcelona (2007) se puede describir a la

delincuencia como uno de los problemas sociales que requieren mayor
intervención psicológica debido a que generan la presencia de
conductas antisociales en la sociedad, maltrato, agresiones físicas,
psicológicas y sexuales, consumo de alcohol y otras drogas vinculados a
muchos delitos, frustración como base para la agresión, o el terrorismo,
creando un daño notable en las sociedades y que requieren
de un estudio más completo que oriente hacia su prevención. En los
comportamientos delictivos se implican interacciones, pensamientos y
elecciones, emociones, recompensas, rasgos y perfiles de personalidad,
aprendizajes y socializaciones, creencias y actitudes, atribuciones,
expectativas.

Es importante destacar que todos los humanos presentan tendencias

criminales, pero existen causas que contribuyen en el desarrollo del
comportamiento de cada individuo, ya sean causas genéticas o sociales,
influyendo en el crecimiento y la personalidad de un individuo.
Cuando se habla de una persona desestabilizada mentalmente, se puede
observar que la mayoría de los casos se han desarrollado por hechos
traumáticos durante su infancia, adolescencia, psicopatías,
neurosis, trastornos de personalidad, violencia intrafamiliar, una persona
con perfil delincuente tiende a carecer de simpatía y/o de piedad con él
prójimo, pensando siempre en satisfacer sus propias necesidades,
mintiendo y manipulando a su víctima.
En otros casos, se presentan desordenes de conducta debido a
frustraciones provenientes de pérdidas o abandonos de seres queridos en
donde este comete delitos para obtener un castigo que lo ayude a alejarse
del sentimiento de culpabilidad, además, se pueden generar
por autorreferencias subliminadas a la realidad, es decir, hacen uso
constantemente de juegos, videos, aplicaciones que los desconectan de la
realidad y viven en una fantasía, generando su incapacidad de poder
discernir la realidad de la fantasía, exponiéndolos a ser propensos a
cometer actos delictivos.
Por otra parte, las personas que han sufrido maltrato en el hogar, y que
buscan salir de este, son psicológicamente débiles, por lo que no
responden a la agresión en el hogar, y esto genera que anden sin rumbo y
se refugien en pandillas criminales, donde les muestren un poquito de
afecto.
Si no se detienen o se tratan estas causas a tiempo, pueden traer
consecuencias como homicidios, trastornos mentales, delitos contras las
personas o propiedades, violencias o suicidios, siendo grave para la
sociedad y es aquí, donde entra el papel del psicólogo, para buscar explicar
y corregir su comportamiento.

Cabe destacar que según las estadísticas de la ONU (2010) en América

Latina se comete anualmente el 27% de los homicidios del mundo, a pesar
de que en ella vive sólo el 9% de la población mundial, 10 de 20 países con
mayores tasas de homicidios en el planeta son Latinoamericanas, y los
segundos lugares los ocupan Honduras y El Salvador, dejando en primer
lugar a Venezuela.
La presencia de la delincuencia a nivel mundial, genera miedo e
inseguridad, y Venezuela es víctima de esta situación, creando un
desequilibrio e intranquilidad en la sociedad, migración, cierre de negocios,
desintegración familiar e incluso deserción escolar.
Ludwing Mendoza, del Movimiento Estudiantil de la Universidad Arturo
Michelena (UAM) indicó que la Universidad tuvo una deserción escolar de
casi el 50%, ya sean por problemas económicos, e incluso por problemas
de inseguridad debido a la presencia de delincuentes, generándoles temor
por poder llegar a ser víctimas.
Por este motivo, el presente trabajo busca explicar las causas mentales que
pueden generar una conducta delictiva y que genera en los estudiantes de
la Universidad Arturo Michelena, específicamente, en la Facultad de
Ciencias Económicas y Sociales, en la Escuela de Psicología en el 1er
semestre de la sección 1M.