Mensaje del Señor.

La caída de la economía mundial.

Buenos Aires, 14 de septiembre de 2015.

Argentina

“Niño mío, durante tu viaje hacia el trabajo deseo hablar con urgencia al
mundo por medio vuestro. La necesidad de salvar almas por parte de mi Sagrado
Corazón es infinita e insondable, a pesar que mis criaturas se alejan de mi, aún deseo
derramar mi Amor que hay en Él para salvar por lo menos un alma más, por lo menos
una. Amor contenido de Mi Padre Eterno en Mi Sagrado Corazón para ser entregado
de generación en generación y restaurar con Él, al género humano lacerado por el
pecado, el cual no tiene piedad en destruir todo lo bueno.

Debo alertar a mi pueblo de lo que esta pronto por suceder. No preocupéis si no

cree el mensaje, a medida que vaya leyendo cada palabra sentirá en su corazón que es
verdadera y cuando vea que todo está tomando su forma respectiva acorde al
transcurso de los días, los ojos se abrirán y entenderá mi llamado.

La caída económica será desastrosa para las naciones más poderosas y ricas,
especialmente para Estados Unidos y regiones como Europa, Asia, Latinoamérica y
aquellas que se relacionen con la moneda norteamericana, porque el ataque será al
sistema del dólar. En muchas naciones el llanto será terrible, las empresas poderosas
caerán y el suicidio de muchos se verá en distintas partes del mundo. El dólar y
aquellas monedas locales sujetas a la primera de nada servirán. Será un papel más
arrastrado por el viento en las calles de las ciudades y poblados. Se observarán
montículos alimentando fogatas para calentarse en tiempo de frío. Pero esta caída
económica no será causada por la mano de Dios, sino por el propio peso de las
artimañas ocultas de hombres malvados para esclavizar a sus semejantes. Esta Torre
de Babel caerá estrepitosamente ya que el hombre desea llegar más allá del mundo
con su dios dinero, bien alto y desafiar al Dios Creador y Omnipotente. Pero el
sistema económico del mundo tiene bases constituidas por cimientos humanos e
infernales, una mezcla de ambos. A medida que la torre ha ido creciendo en el
tiempo, la propia corrosión de la codicia y avaricia humana fue carcomiendo su
estructura, debiendo emparcharse con soluciones y revoques más frágiles que la
propia estructura de la Torre de Babel económica. El hombre quiere desafiar a Dios y

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llegar al mismo Cielo para apoderarse de él, pero la corrupción no se puede mezclar
con la perfección y la rectitud. Con un solo soplido de Dios, ésta caerá. El Dragón
Rojo ha envuelto a las naciones con su cola, las ha engañado simulándola ser su
cabeza, les ha prometido riquezas, libertad y crecimiento. Ha engañado a los
poderosos introduciéndose en sus propias tierras y hogares. Ahora está listo para
devorar a su presa y mostrar su verdadera cabeza, está listo para reclamar lo que dice
perteneceros, las naciones mismas. Sacudirá su cola y una vez rodeada la presa, con
ella estrangulará a su víctima, lo que parecía ya no lo es y lo que era seguro tampoco
lo es y lo que estaba dormido tampoco lo estaba, sino que parecía dormido esperando
el momento para morder. Sacudirá la economía mundial y se apoderará de las bolsas
del mundo. Dios se valdrá también, de este enemigo (el comunismo) para purificar
los pueblos y destruir al dios dinero y aquellos otros dioses relacionados con él. Ante
la desesperación de los pueblos, Dios los llamará para que coloquen su atención hacia
el Faro que ilumina y guía a las barcas en medio de la noche: Yo, Cristo por medio de
Mi Iglesia. Incontables de almas correrán y pedirán clemencia, correrán a los brazos
de la Madre Iglesia. Otros renegarán de Dios, endurecerán aún más sus corazones,
insultarán a Dios y su odio será en extremo a las cosas celestiales. Así, como Dios
llamará a las almas a ver y buscar la Luz de salvación, paralelamente el inicuo
aprovechará la oportunidad para surgir como el que posee la solución de la crisis
mundial. A la mirada de Dios nada escapa.

La movida destructiva el Dragón Rojo no es por sí sola, es permitida por el

ejército armado de satanás, la masonería que se mueve en las sombras. En alianza con
el dragón, ambas harán caer la Torre de Babel con el peso de todo tipo de iniquidad
para dar paso al que desean como gobernante del mundo, al Desolador, al Anticristo.

Al principio, el efecto del debacle económico se sentirá en todo el mundo,

como un temblor global, será el eje principal de los medios de comunicaciones,
surgirán grandes discusiones de los economistas, buscarán soluciones para salir de la
crisis. Habrá naciones que serán menos afectadas que otras, será para ellas como algo
más por pasar, pero indefectiblemente serán alcanzadas por los tentáculos del plan
masón.

El mundo ingresará en una crisis en todos los niveles de vida, porque han
hecho del dinero un estilo de vida, en el comer, en el viajar, en el trabajar, en el
estudiar, en la salud, en los seguros de vida entre otras cosas. El tentáculo del dios
dinero no solo se limitó en los ordenes macroeconómicos y políticos, también se ha
dividido en múltiples tentáculos menores en la vida cotidiana de cada individuo, en la

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familia y en la sociedad toda. Todas las falsas estructuras serán tiradas por el piso y la
supuesta seguridad colocada en lo material desaparecerá en un instante.

Todo sucederá de repente, el mundo se despertará con este gran evento, el cual
será el inicial para los eventos que vendrán luego.

Los pueblos ingresarán en un estado de crisis social, la comida escaseará y los

saqueos serán vistos por doquier, reclamarán a los gobernantes soluciones en
violentas manifestaciones y destrozos. Los estallidos sociales serán inevitables como
los ataques terroristas. Los líderes políticos estarán indefensos para repeler cualquier
ataque.

Los gobiernos no tendrán otra salida por miedo a sus pueblos, y por no perder
el lugar de poder, se rendirán ante las pautas que el Anticristo exponga ante ellos;
acceden o sus pueblos mueren de hambre.

Pero un escenario más hará falta para que el anticristo ocupe su lugar en el
mundo, que las naciones ingresen en un estado de guerra por los recursos. Occidente
querrá tener el control por la fuerza de Medio Oriente, para recuperar su poderío
económico, pero será tarde, irá directamente a una trampa perpetrada por el imperio
musulmán, liderado por Irán y Siria con respaldo de China y Rusia. A pesar que Rusia
es aliada de China, también se verá afectada por la crisis, pero en menor escala, pero
encadenada con mayor fuerza de parte de la nación amarilla.

Oh! Mis niños. ¿Puedo dejar a mi pueblo a la deriva y en el abandono?. Mi

Madre y mis mensajeros tanto os habéis hablado año tras año sobre la proximidad de
este tiempo. Mi Sagrado Corazón sangra al ver lo que vendrá, porque una vez que de
inicio un acontecimiento será suficiente para que los restantes comiencen a sucederse.

Mi pueblo fiel nada debe temer, porque en medio de la crisis y de la

persecución de las tinieblas he preparado un lugar de abundante trigo, leche y miel,
lugar oculto a la mirada de satanás. Cuantas veces se os ha dicho sobre la reserva de
alimentos, todavía tienen un instante para almacenar lo mínimo. Cuantas veces se os
ha dicho que estuvierais preparados.

Apelad a mi Divina Providencia, recurrid a ella para que nade falte, pero para
eso os pido una sola cosa: Abrid vuestro corazón para que Yo lo asista. Venid a mi
encuentro e ingresad a Mi Sagrado Corazón, consagrad vuestras vidas, vuestras
familias, amistades y seres queridos. Deseo que cada nación consagré a su pueblo a
Mí Sagrado Corazón y al Inmaculado Corazón de María a la brevedad, para que los
dolores que se aproximan solo sean una brisa matutina. Pueblo mío, llamad a vuestros
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sacerdotes, obispos y cardenales a la pronta consagración de vuestros países, no
demoréis. Que todo el mundo se consagre a los Sagrados Corazones. No deseo ver
padecer a nadie, deseo salvaros a todos. Mis niños, no rechacéis mi pedido. ¿Ustedes
también me abandonaréis en la Pasión de Mi Iglesia?.

Es Mi Infinita Misericordia la que me mueve a socorreros, pero depende de

ustedes, Mis niños amados, en escuchar a mi pedido desesperado, como un padre ante
el inminente peligro que corren sus hijos. Orad mis niños y con el Santo Rosario en
vuestras manos todas las dificultades solo serán unas simples cuentas por resolver,
porque quien ora y se detiene a dialogar con Dios y contemplar su infinita bondad,
todas las dudas desaparecerán y la visión será más clara.

Os bendigo en el Nombre de Mi Padre que tanto os ama, en Nombre mío que

los amo hasta el extremo de entregar Mi Vida y en Nombre de Mi Santo Espíritu
portador de Vida Eterna.”

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