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Walmert Letona S.
1
Este material se preparo como guía en el estudio
del libro de Apocalipsis para la clase enseñada en
el Seminario Bautista Teológico Horeb – Lima.
Todas las Escrituras han sido tomadas de la Reina-
Valera 1960. Todo énfasis (letra negrita, cursiva,
subrayada, etc.) de los pasajes bíblicos y todos los
comentarios parentéticos [como este] dentro de una
cita bíblica en esta obra son los del autor.
2
DESCRIPCION DEL CURSO
¿Cómo será el futuro? ¿Cuál es el plan de Dios y cómo se desarrollará? ¿Qué esperamos en este mundo y en
el venidero?¿Qué estaremos haciendo durante el Milenio y por toda la eternidad? ¿Qué tiene que ver todo
esto con la vida cotidiana de hoy día? Las respuestas a estas preguntas (y muchas otras que tenemos sobre el
futuro) se hallan en el último libro de la Escritura: El Libro de Apocalipsis.
Pero, a pesar de su contenido sumamente gráfico, es posible discernir en el libro de Apocalipsis un mensaje
de fe y esperanza. Por estas y otras razones, este curso consistirá en un estudio textual detallado del libro de
Apocalipsis: su significado, función y mensaje; poniendo atención específica al género literario, y al
contenido teológico del libro. El estudiante desarrollará y defenderá su propia comprensión del Apocalipsis.
El curso intentará dirigir al estudiante a desarrollar una fe profunda en Dios y su eterno propósito así como
un compromiso duradero en y con Cristo.
TIEMPO DE ESTUDIO:
3
Introducción _
El libro de Apocalipsis cierra el canon de las Sagradas Escrituras y culmina la revelación escrita
dada por Dios a los hombres, es un libro de riqueza inagotable. El título griego de este libro es
Apokalupsis (revelación), el libro de Apocalipsis parece que no logra lo que su título promete,
confundiendo a sus lectores con todas las imágenes, metáforas y números con los que se
encuentran.
Los pastores suelen predicar sólo una serie de siete sermones sobre las cartas a las siete iglesias en
Asia Menor, que se encuentran en los capítulos dos y tres. Se considera que el libro es parte de las
sagradas Escrituras, pero no lo utilizan como tal. Para muchos lectores, Apocalipsis no es una
revelación sino más bien un misterio profético que sobrepasa la comprensión humana. Con todo, en
este último libro de la Biblia, Dios nos permite ver algo de Cristo y de la iglesia en el cielo y en la
tierra, y lo que vemos es, en verdad, sobrecogedor.
El mensaje del libro y su contenido son cruciales para entender cómo Dios ha de establecer su
soberanía en medio de los hombres. El Apocalipsis describe los acontecimientos que culminarán
con la entronización de Jesucristo como Rey de reyes y Señor de señores. Es al Nuevo Testamento
lo que el libro de Daniel es al Antiguo Testamento.1
Al examinar con cuidado este libro, comenzamos a darnos cuenta de que no es una simple
composición humana como parecida a los Apocalipsis pseudoepigráficos que circularon entre los
judíos y los primeros cristianos, obras tales como el Libro de Enoc, el cuarto Libro de Esdras, el
Apocalipsis de Baruc, los Testamentos de los doce Patriarcas, los Oráculos Sibelinos,2 entre otros.
El libro que empezaremos a estudiar, ha sido a través de los tiempos como un imán que ha atraído a
sí cristianos de todas las escuelas de pensamiento, algunos movidos por la curiosidad. Hay quienes
se ven confundidos por la diversidad de interpretaciones que hay tocante al libro. Para muchos
Apocalipsis es un libro enigmático y recóndito. Rh. Cahrles escribe lo siguiente:
“Desde los primeros tiempos de la iglesia, todo el mundo ha reconocido que Apocalipsis es
el libro más difícil de toda la Biblia”. 3
1
Evis L. Carballosa, Apocalipsis, (Editorial Portavoz, 1997), p. 15.
2
Ibid., p. 15
3
R. H Charles, Lectures on the Apocalypse
4
El Dr. Wilbur M.Smith en su comentario a Apocalipsis dice lo siguiente:
“Calvino no quiso escribir comentario alguno de Apocalipsis, y lo tuvo muy en poco en
cuenta en sus cuantiosos escritos. Lutero durante mucho tiempo eludió sus enseñanzas.” 4
Al mismo tiempo, existe un número de creyentes que desean ahondar en el estudio de las profecías
de este libro, y a dirigirse a él una y otra vez en busca de una profunda comprensión de sus temas y
revelaciones, por ello, el estudio del Apocalipsis requiere de una exegesis seria y ponderada.
En Apocalipsis el Dios trino revela su palabra al lector; es decir, Dios mismo habla a su pueblo.
Esto se ve con claridad en las palabras introductorias «Esta es la revelación de Jesucristo, que Dios
le dio» (1:1), y en las cartas a las siete iglesias. Ahí escuchamos la voz de Jesús, quien concluye
cada una de las cartas con las palabras «el Espíritu dice a las iglesias» (2:7, 11, 17, 29; 3:6, 13, 22).
El último capítulo consigna la voz de Jesús (22:7, 12–20), la voz del Espíritu (22:17) y la
advertencia divina de no agregar ni quitar nada en este libro (22:18–19). Hacer caso omiso de este
mensaje equivaldría a modificar las Escrituras. 5 Este libro del Nuevo Testamento, pues, no es un
misterio, sino una revelación. Como es indicado claramente en sus páginas, la revelación fue hecha
por medio de palabras, figuras, signos y símbolos.
Dios nos dice que consideremos a Apocalipsis como su Palabra santa, y nos insta a que lo leamos
con reverencia. 6 La advertencia que Jesús pronuncia en 22:18–19 se puede comparar con la nota de
derechos de autor en el anverso de la página del título en un libro moderno.
En todo el libro de Apocalipsis se orienta la atención hacia su autor principal, Dios. Él es el artista
divino, el arquitecto principal. Es un libro divinamente construido en el que Dios muestra su obra.
Importancia
Todos los libros de la Biblia, sin excepción alguna, son importantes, sin embargo el último libro
constituye la consumación y culminación de la revelación de Dios a los hombres y se merece toda
nuestra atención. Como dice W. M. Smith:
“Las Escrituras del Nuevo Testamento habrían quedado incompletas y sus lectores habrían
quedado en un estado de depresión, si este libro no hubiera sido escrito e incluido en el
canon. No sólo es el último libro en el orden canónico de nuestra Biblia, sino también la
necesaria conclusión de la revelación de Dios a los hombres.” 7
El Apocalipsis es el libro que trata sobre “las cosas que deben suceder pronto”, y ¿Cuáles son
aquellas cosas que han de suceder pronto?, pues, el Señor Jesús nos revela aquellas profecías
referentes a Cristo como Rey de reyes, la condenación final de Satanás, del Anticristo, de los falsos
profetas y de todos los enemigos de Dios, describe la instauración del postrer sistema político
dictador más poderoso de la historia humana, como también menciona el arrebatamiento (3:10), y
describe el tiempo de los siete años de la tribulación, la segunda venida de Cristo, la batalla de
Armagedón, los mil años del reino terrenal de Jesucristo, el juicio final de los pecadores no
arrepentidos, y el estado final de los malvados en el infierno y de los redimidos en el cielo nuevo y
la tierra nueva.
4
Wilbur M.Smith, Comentario Bíblico Moody, p. 535
5
Simon J. Kistemaker, Apocalipsis, (Libros Desafío, 2004), p. 13.
6
William Milligan, The Revelation of St. John (London: ManMillan, 1986), p. 6.
7
Wilbur M. Smith, en The Wycliffe Bible Commentary, p. 1491
5
Canonicidad del Apocalipsis
Para que un libro forme parte del canon de la Biblia tenía que cumplir con los requisitos de ciertas
pruebas o reglas8, al parecer era importante que el libro fuera escrito o avalado por un profeta o un
apóstol.
Tal parece que la iglesia occidental aceptó muy temprano la inspiración del libro de Apocalipsis.
Pero la iglesia oriental no actuó del mismo modo, pareció resistirse a adoptar la misma posición, y
no estuvo de acuerdo con la canonicidad de Apocalipsis hasta el siglo cuarto. 9 El Dr. Carballosa cita
al respecto:
“Es evidente que el rechazo que algunos hicieron del Apocalipsis en la iglesia oriental se
debió fundamentalmente a razones teológicas. La iglesia griega, por ejemplo, excluyó
dicho libro del uso litúrgico.”10
A lo largo de los siglos se admitió como canónico.11 Además existen muchas referencias de parte de
los padres de la iglesia y de otros autores cristianos antiguos con respecto al Apocalipsis. Entre ellos
está Papías, el obispo de Hierápolis, que fue un discípulo directo del apóstol Juan, por lo que debe
ser incluido entre los Padres Apostólicos, en el año 130 atestigua la autenticidad del Apocalipsis
como un escrito del apóstol, según testimonio de Andrés de Cesarea, del s. IV, que pudo consultar
las obras de Papías12. De la misma manera en Pastor Hermas, considerado como un escrito del año
140, habla de la imagen de la esposa engalanada, haciendo referencia a Apocalipsis 21:2 13. En ese
mismo texto hay otra referencia a la persecución, que probablemente corresponde a una aplicación
de 7:14. Una interesante referencia al libro en los escritos antiguos aparece en el Apócrifo de Juan,14
cita Apocalipsis 1:19, y recordando también el pasaje de 1:13-18. En el escrito se afirma que el
libro es del apóstol Juan, que fue hermano de Santiago y ambos hijos de Zebedeo. Aunque la copia
más antigua del escrito data del s. IV o V, el original debe datarse sobre el año 150. Justino Mártir,
entre los años 153 al 156, escribe según recoge S. Bartina: “Entre nosotros, un varón por nombre
Juan, uno de los apóstoles de Cristo, profetizó en la Revelación (Apocalipsis) que se le hizo que los
que hubieran creído en Cristo pasarían mil años en Jerusalén”15 Melitón de Sardis, alrededor del
8
-Dirigido por Dios - Escrito por hombres redimidos (2 Pedro 1:21) - Obra sin contradicción con los demás escritos.
9
Wilbur M. Smith, en Comentario Bíblico Moody (Apocalipsis), p. 541.
10
Alfred Wikenhauser y Josef Schmid, Introducción al Nuevo Testamento, p. 963. Obra citada por Evis Carballosa en
Apocalipsis, p. 20.
11
La referencia más antigua al Apocalipsis, como parte de los escritos inspirados, aparece en la Carta de las iglesias de
Lyón y Viena a las iglesias de la región del Asia Menor. Se dice que la persecución de aquellas comunidades
cristianas era el cumplimiento de la Escritura. El catálogo de los Libros Sagrados que suele atribuirse a Gelasio,
aunque probablemente proceda de Dámaso, en el Concilio Romano del año 382, se cita el Apocalipsis de Juan.
Más adelante, en el año 393, el Concilio Hiponense, llamado también Cartaginense I, plenario de toda África,
establece el canon de los Libros Sagrados incluyendo el Apocalipsis. En una carta de Inocencio I a Exuperio,
obispo de Tolosa, de 20 de febrero del 405, indica que el Apocalipsis debe ser considerado como del Canon
distinguiéndolo de otros apócrifos que debían ser repudiados. En el año 495 Gelasio lo incluyó en su Catálogo de
Libros Canónicos. Dos siglos más tarde, en el año 633, el Concilio Toledano IV, reconoce, en su capítulo 17, la
autenticidad, canonicidad y autoridad en la Iglesia, del Apocalipsis del evangelista Juan, imponiendo pena de
excomunión al que no lo acepte. El Concilio Florentino del año 1441, en el Decreto Pro Iacobitis, declara que
recibe y venera como divinamente inspirado, el Apocalipsis de Juan. Finalmente el Concilio Tridentino del año
1546, en el decreto sobre el canon de las Escrituras, declara que quien no reciba por sagrado y canónico el
Apocalipsis del apóstol Juan, sea anatema. Samuel Pérez Millos, Comentario del NT-Apocalipsis, p.19.
12
Padres Apostólicos. Andreas Caesariensis in Apocalypsin. Citado por Samuel Pérez Millos, Comentario del NT-
Apocalipsis, p.19.
13
Pastor Hermas. Visio 4, 2, I.
14
Pap. Berol. 8502. Chenoboskion Codex X [III].
15
Sebastián Bartina. o.c., pág. 575.
6
año 170, produjo algunos escritos con el título Acerca del diablo y del Apocalipsis de Juan16. El
escrito es importante por cuanto refleja el pensamiento de los cristianos en Sardis, una de las siete
iglesias que se mencionan en el libro y en un tiempo relativamente próximo al de composición del
libro. Policarpo, sobre el año 155, discípulo inmediato de Juan, en su carta a los Filipenses, utiliza
frases idénticas a algunas que aparecen en el, considerando el libro como divinamente inspirado 17.
En el año 195, Ireneo, que fue discípulo de uno de Policarpo, a su vez discípulo del apóstol Juan,
citaba frecuentemente el Apocalipsis, aceptándolo como Escritura y como obra de Juan, el discípulo
de Jesús18. El canon de Muratori19, del año 170, recoge el Apocalipsis como inspirado, teniendo la
importancia de tratarse de una reseña crítica de los libros canónicos, distinguiendo el Apocalipsis de
Juan de otro con el mismo título atribuido a Pedro, que ya era considerado como apócrifo 20. En el
mismo texto el canon de Muratori dice que aunque el escrito está dirigido a las siete iglesias en
Asia, comprende a todas. Pasando al s. III, Tertuliano de África del Norte, en el año 207, citaba a
menudo porciones del Apocalipsis, refiriéndose a él como un escrito del apóstol Juan 21. De la
misma manera Clemente Alejandrino, en escritos anteriores al año 215, comentaba partes del
Apocalipsis y, según eruditos, es posible que haya explicado todo el libro en las Hipotiposis22.
Sobre el año 230, Hipólito de Roma escribió un comentario a todo el libro que se ha perdido que
cita Jerónimo 23. Además en su escrito Del Cristo y del Anticristo, acepta el Apocalipsis como
Escritura proveniente del apóstol Juan24. Clemente y Orígenes, en el año 233, líderes en Alejandría,
confirman que el libro es de origen apostólico y es Escritura, identificando al autor como uno de los
discípulos de Jesús y autor de uno de los Evangelios25. De igual modo Atanasio de Alejandría, es un
defensor de la canonicidad del Apocalipsis.
Autor
Se aprecia que el autor tenía la suficiente autoridad en la iglesia y el reconocimiento general, por lo
que no le era necesario utilizar otra identificación. No cabe duda que usa la misma forma epistolar
propia de los escritos apostólicos. Nadie con ese nombre en esa dimensión puede ser otro sino el
apóstol Juan. Pero debemos notar que hay quienes negaron la autoría de Juan. La primera oposición
fue expresada por Dionisio obispo de Alejandría en el siglo III; dice MacDonald que “el no quería
que fuese de Juan porque se oponía a la doctrina del Milenio” (Ap. 20).26
Evidencias internas:
La interna nos muestra buenas razones para pensar que el apóstol Juan es el autor. El libro mismo
nos dice que es Juan (1:1, 4,9; 22:8). Tenemos que aceptar que las siete iglesias de Asia conocían al
16
Eusebio. HE 4, 26.
17
Policarpo. Ad Philippenses, Inscriptio, 6, 8.
18
Ireneo. Adversus haereses. 4, 20, 11.
19
Se trata de un antiguo escrito descubierto por Ludovico Antonio Muratori (1672-1750), fundador de la ciencia
historiográfica en Italia. Este escrito da una lista de libros del Nuevo Testamento, con valiosas indicaciones acerca
de varios de ellos. (Biblioteca electrónica e-Sword)
20
K. Stendahl. The apocaliypse of John and the Epistles of Paul in de Muratonian Fragment. Essays O. A. Piper.
Nueva York, 1962.
21
Tertuliano. Adversus Marcionem. 3, 14, 24.
22
Eusebio, HE, 6, 14.
23
Jerónimo. De viris ilustribus, 61.
24
F. X. Kraus. Realenzyclopädie der christlichen Altertümer. Freiburg 1882.
25
Orígenes. In Ioannem, I,14.
26
William MacDonald, Comentario Bíblico de William MacDonald, p. 1081.
7
autor con esta simple designación. No sólo eso, sino que tiene que ser un hombre de autoridad para
que la iglesia reciba su revelación como inspirada por Dios. Aunque, para algunos el nombre de
Juan suena genérico, también debemos notar el uso idiomático de ciertas palabras que son propias
de Juan. De las evidencias internas el Dr. Samuel Pérez Millos escribe: 27
a) El uso del término Logos, en sentido personal para calificar al Verbo de Dios, sólo
aparece en el Nuevo Testamento, en los escritos de Juan (Jn. 1:1, 14; 1 Jn. 1:1; Ap. 19:13).
b) El título Cordero, referido a Jesús aparece veintiocho veces en el Apocalipsis y en el
Evangelio según Juan; si bien en el Evangelio se usan dos palabras diferentes una de ellas,
es diferente a la del Apocalipsis28 (Jn. 1:29, 36) y la otra es la misma que repite en el
Apocalipsis29 (Jn. 21:15). c) Otra característica típica de Juan es el uso que hace del
nombre Jesús, sin artículo, tanto en el Evangelio como en Apocalipsis. d) El uso del
adjetivo verdadero ( aparece sólo cinco veces en otros escritos del N. T. mientras
ocurre trece veces en el Evangelio y diez veces en Apocalipsis. e) Otra palabra típica de
Juan es vencer ( ), aparece sólo tres veces en otros escritos del N. T. mientras ocurre
seis veces en la primera Epístola de Juan, otra vez en el evangelio y dieciséis veces en
Apocalipsis. f) La palabra habitar, en la forma verbal del sustantivo tabernáculo (κήνωμα)
aparece una vez en el evangelio (Jn. 1:14) y cuatro veces en Apocalipsis. g) La expresión
fuentes de aguas vivas ( γή ὕδατ ) aparece sólo en el evangelio y en
Apocalipsis (Jn. 4:14; 7:38; Ap. 7:17; 21:6). g) La profecía de Zacarías 12:10 respecto a
que el rey rechazado por Israel sería traspasado es citada en Ap. 1:7 y en Jn. 19:37. En
ambos pasajes la misma palabra es utilizada con el significado de traspasar, una palabra
que no aparece en la LXX del pasaje de Zacarías.
Evidencias externas:
Aunque hay que admitir que la evidencia interna para algunos no es tan clara, existe la evidencia
externa que es eficaz al demostrar un firme fundamento histórico. Al respecto Carballosa escribe:
“…Justino Mártir (100-165d.C.) en su diálogo con Trifon, dice: «Hubo cierto hombre con
nosotros, llamado Juan, uno de los Apóstoles de Cristo, quien profetizó mediante una
revelación». De igual modo, Ireneo (120-202 d. C.) dice que el Apocalipsis fue escrito por
Juan, el discípulo del Señor, quien no podía ser otro que Juan el apóstol. El gran apologista
Tertuliano (160-220 d.C.) dice que el apóstol Juan contemplo la ciudad descender del
cielo, refiriéndose a Apocalipsis 21:10-23…”
“La opinión de los padres orientales también favorece al apóstol Juan como autor del
Apocalipsis. Clemente de Alejandría (150-220 d.C.) escribió tocante al regreso de Juan el
apóstol de su exilio en la isla de Patmos, una posible referencia a Apocalipsis 1:9. De igual
manera Orígenes de Alejandría (185-254 d.C.) en su obra De Principiis se expresa así:
«Escuchad de la manera como Juan habla en el Apocalipsis» y seguidamente cita 1:8.
También cita la frase «el evangelio eterno» (Ap. 14:6)… El gran defensor de la ortodoxia,
Atanasio (296-373 d.C.), autor de varias obras importantes y quien se destacó en el
27
Samuel Pérez Millos, Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento, Apocalipsis, p. 30.
28
En estos dos pasajes Juan utiliza el término ἀμ , traducido por cordero.
29
En este caso utiliza el término ἀρ ί , que expresa un sentido diminutivo, aunque no necesariamente, y que se usa
sólo por Juan.
8
concilio de Nicea (325), expreso su convicción de la canonicidad del Apocalipsis y de la
paternidad juanina del mismo” 30
Más recientemente se descubrió en Egipto un libro llamado el Apócrifo de Juan (de alrededor del
150 d.C.), que atribuye específicamente Apocalipsis a Juan el hermano de Jacobo. Los argumentos
de algunos críticos antiguos y modernos pasan por alto la opinión tradicional de que el apóstol Juan
fue el Juan identificado como el autor inspirado de Apocalipsis, y que esto se ajusta mejor a las
evidencias. El Dr. John MacArthur escribe de este asunto:
“El fuerte testimonio de la iglesia casi desde el tiempo en el que se escribió Apocalipsis,
las similitudes entre Apocalipsis y los otros escritos de Juan, la ausencia de algún autor
alternativo creíble, y lo improbable que dos hombres destacados llamados Juan vivieran al
mismo tiempo en Éfeso, son argumentos convincentes para la paternidad apostólica. 31”
Fecha
Existen dos tesis que se han propuesto como fechas para Apocalipsis; durante el dominio de Nerón
(68 d.C.) o Domiciano (96 d.C.). La primera opinión sufre de evidencia exegética e histórica.
MacArthur:
“La fecha más temprana la sostienen fundamentalmente los que adoptan al interpretación
preterista de Apocalipsis… Esta se basa mayormente en la cuestionable exégesis de varios
pasajes en el libro, e intenta relegar su cumplimiento profético totalmente al periodo antes
de la destrucción de Jerusalén en 70 d.C. Los que sostienen la fecha más temprana ven en
la destrucción de Jerusalen la profetizada segunda venida de Jesucristo en su primera
fase…”32
Carballosa también escribe al respecto:
“Los argumentos usados por quienes defienden esta fecha son internos, derivados de
ciertas conjeturas interpretativas.” 33
La fecha más tardía cuenta con evidencias para ser la más acertada, pues cuenta con el testimonio
de la iglesia primitiva. Los padres de la iglesia indican de manera específica la última parte del reinado de
Domiciano (alrededor del 96 d.C.) como el tiempo en que Juan recibió la Revelación en Patmos. Por cuanto
ésta es una postura antigua, informada y extendida entre los cristianos ortodoxos, tenemos todas las razones
para aceptarla. Esto favorece una fecha para la escritura del libro de Apocalipsis entre los años 90-95 d.C.
Los Destinatarios
Históricamente el libro fue dirigido a las siete iglesias de Asia (1:4), Éfeso, Esmirna, Pérgamo,
Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodisea. Las mencionadas son una selección de otras que habían sido
fundadas allí, como las congregaciones en Hierápolis, Troas, Colosas, Tralles y Magnesia. ¿Por qué
solo se dirige a siete iglesias? Aunque los destinatarios primarios son las siete iglesias, el mensaje
no se limita a esas congregaciones.
30
Obras citadas por Carballosa, op. cit., p. 18.
31
John MacArthur, Comentario MacArthur del Nuevo Testamento: Apocalipsis, p. 17.
32
Ibid., p. 17.
33
Carballosa, op. cit., p. 20.
9
Con respecto a la ubicación, las siete congregaciones forman una trayectoria oval desde la que se
podía llegar a muchas otras iglesias, Simon J. Kistemaker dice:
“En círculos cada vez más amplios el mensaje ha ido extendiéndose por todo el mundo, de
modo que ninguna iglesia queda dejada de lado. El número siete simboliza lo que es
completo y sugiere que Jesús se dirige a todos los creyentes cristianos de todos los lugares
y épocas. El mensaje de Apocalipsis es para «todo el que oye las palabras de la profecía de
este libro» (22:18).”34
Sin duda el libro de Apocalipsis es extensivo a toda la iglesia en cualquier tiempo y lugar, a quien
se dirija la Palabra inspirada.
Propósito
Apocalipsis es un libro profético, pero esto no le impide ser un libro de bendición. La naturaleza
profética del libro no es solo para predecir acontecimientos futuros, sino para fortalecer a los
creyentes y traer consolación a quienes están sufriendo por el testimonio de su fe. Juan escribe a
quienes están pasando por intensa aflicción, señalándoles el futuro glorioso que Dios tiene para
ellos y dándoles a conocer lo que el Señor hará también en el mundo cuando se cumpla el tiempo
determinado para ello.
Otro de los propósitos del libro tiene que ver con la enseñanza que debe materializarse, tanto en la
vida de la iglesia, respondiendo al llamado de atención sobre los peligros que entonces, tanto como
ahora, se ciernen sobre ella, como en la vida de los creyentes que integran las congregaciones
locales de la iglesia en cualquier tiempo. …Dios llama a la iglesia pero la respuesta al llamado de
Dios es siempre individual, de cada creyente que se siente apelado por las advertencias que el Señor
hace. Es más, el mismo apóstol exhorta a los creyentes a guardar, las palabras de la profecía (1:3;
22:7).35
Este libro de consuelo, por tanto, dirige la atención de todos los creyentes hacia el juicio del mundo
y a la victoria final para la iglesia. Aunque Satanás se opone al avance del evangelio y al
crecimiento de la iglesia en todo el mundo, su poder es limitado y, llegado el momento, acabará
cuando él y sus agentes sean arrojados al lago de fuego (20:10). Cristo ha conseguido la victoria
para su iglesia en su triunfo sobre las fuerzas de Satanás y sus huestes. En consecuencia, el mensaje
de Apocalipsis es un mensaje de esperanza, porque Cristo, que ha vencido al mundo, vengará a sus
santos. Llevará a su pueblo a un estado de bienaventuranza eterna en la que él es el esposo y ellos la
esposa (19:1–9; 21:2, 9).
34
Simon J. Kistemaker, op. cit., p. 68
35
Samuel Pérez Millos, op. cit., p. 32.
10
destacadas de la literatura apocalíptica. Símbolo es el uso de una cosa en representación de otra o el
uso de un objeto material para representar una verdad moral o espiritual. 36
El Dr. Charles C. Ryrie ha escrito:
“…los símbolos suelen hacer el significado más claro. El futurista no niega la presencia de
símbolos en el libro, ni pretende ser capaz de explicar cada detalle con certeza.”37
De modo que el libro de Apocalipsis tiene una buena dosis de símbolos como vehículos literarios
para la comunicación del mensaje.
Métodos de interpretación
Cuando se trata de interpretar un texto bíblico y especialmente si se trata de un libro profético, debe
considerarse el sistema o método interpretativo que ha de aplicarse, ya que de ello dependerá el
resultado final de la interpretación. Hay diferentes sistemas, de los que se sintetizan los más
comunes.
1) Preterista: El nombre preterista es una combinación de dos palabras latinas praeter
(pasado) y ire (ir) y quiere decir lo que ya es pasado, es decir, que pertenece al pasado.
Según este punto de vista, todo lo que se menciona en Apocalipsis se cumplió en el
siglo primero, en la época en que Juan escribió este libro. Los preteristas enseñan que el
simbolismo en Apocalipsis describe eventos históricos que ocurrieron durante la
segunda mitad del siglo primero; el libro de Apocalipsis se refiere a lo que ocurrió en el
pasado sin ninguna referencia al presente y al futuro.38
2) Histórica: Este punto de vista de la interpretación encuentra en Apocalipsis un registro
de la historia de la iglesia desde los tiempos de los apóstoles hasta el presente. John
MacArthur escribe al respecto:
“Los intérpretes historicistas a veces recurren a la alegorización del texto a fin de
hallar en él los varios acontecimientos históricos que creen que el texto describe
(p. ej. La caída de Roma ante los bárbaros, el surgimiento de la Iglesia Católica
Romana, la llegada del Islam, incluso la Revolución Francesa). No es sorprendente
que tal método subjetivo y arbitrario haya dado origen a un gran número de
interpretaciones conflictivas de los reales acontecimientos históricos en
Apocalipsis.”39
Kistemaker por su parte escribe:
“Asignan los siete sellos y seis trompetas a la iglesia primitiva y a la Edad Media,
entienden que Apocalipsis 10 y 11 habla de la época de la Reforma, y aplican el
mensaje de la sétima trompeta a la verdadera iglesia. Las dos bestias en el capítulo
13 son el papa y el poder papal, las siete plagas se cumplieron en la revolución
36
Carballosa, op. cit., p. 22.
37
Charles C. Ryrie, Apocalipsis, p. 10.
38
Simon J. Kistemaker, op. cit., p. 52.
39
John MacArthur, op. Cit., p. 20.
11
francesa y en las revoluciones modernos, y la destrucción de Babilonia es la caída
del papado.”40
Las variaciones en cuanto al método de aplicar el mensaje de Apocalipsis a la historia
son numerosas y autodestructoras.
3) Idealista: La escuela idealista ve descrita en Apocalipsis la batalla sin fin entre el bien y
el mal en cada siglo o época, según esta opinión, Apocalipsis no es un registro histórico
ni una profecía. Una vez más citamos a Ryrie:
“Este enfoque ve en el Apocalipsis un desarrollo gráfico de los grandes principios
en conflicto constante. El libro no registra acontecimientos reales que hayan sido
cumplidos o que hayan de acontecer, más bien, retrata simplemente el forcejeo a lo
largo del tiempo entre el bien y el mal. Este punto de vista espiritualiza y alegoriza
el texto”41 concluye Ryrie.
Es evidente que los idealistas se concentra más en interpretar el texto del Apocalipsis a
la luz de alguna situación cultural o sociopolítica que en interpretar dicha realidad a la
luz del texto bíblico.42
4) Futurista: Por último, esta escuela sigue un sistema de interpretación sencilla, literal o
normal. El método futurista ve que desde el cuarto capítulo del libro todavía está por
cumplirse. El método futurista, a diferencia de los otros tres, reconoce plenamente el
reclamo de Apocalipsis de ser una profecía.
Esta escuela de interpretación ofrece un enfoque más objetivo y claro del mensaje de
dicho libro. Por su parte Carballosa aporta lo siguiente:
“La escuela futurista, sin tener que apelar a la alegorización ni a la espiritualización
del lenguaje simbólico utilizado en el Apocalipsis, proporciona un acercamiento a
la interpretación de dicho libro que produce una comprensión armoniosa de las
profecías tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento… ” 43
12
Las cosas que Juan ya había visto, se refieren al contenido del capítulo 1, donde encontramos la
visión de Cristo glorificado. Todo lo revelado acá puede considerarse pasado.
II. LAS COSAS QUE SON (Cap. 2-3)
¿Qué cosas son, que ha de escribir?: Las cosas que son se refieren a las siete iglesias que
encontramos en los capítulos 2 y 3. Aunque estos mensajes fueron escritos a siete iglesias de
Asia Menor que existieron en aquél tiempo, muestran la condición espiritual de las iglesias de
Cristo aún hoy.
También enseñan proféticamente la historia de la iglesia desde los días apostólicos hasta el
arrebatamiento. Por eso, podemos decir que el contenido de estos capítulos eran para Juan y es
para nosotros, presente.
III. LAS COSAS QUE HAN DE SER DESPUÉS DE ESTAS (Cap. 4-22)
¿Qué cosas son las que han de ser después de estas? (es decir, de las que ha visto y de las que
son): Las cosas que han de suceder después de éstas (el tiempo presente de la iglesia) se aplican
al resto de material del libro, o sea los capítulos 4-22 – La Consumación.
Todo esto es clave para entender la sucesión de eventos proféticos del Libro. Así también lo
explica Scofield:
“Las tres mayores divisiones del Apocalipsis deben tenerse muy presentes si la
interpretación ha de ser correcta y coherente. A Juan se le ordenó “escribir” acerca
de tres clases de “cosas” (1: 19) I. Cosas pasadas: “Las cosas que has visto”, es
decir, la visión de Patmos, 1: 1-20. II. Cosas presentes, “las cosas que son”, o sea
las cosas que entonces existían, evidentemente las iglesias. El templo había sido
destruido; los judíos estaban dispersos; por consiguiente, el testimonio de Dios se
había encomendado a las iglesias (1 Ti. 3: 15). En armonía con esto, tenemos aquí
siete mensajes dirigidos a siete iglesias representativas, 2: 1-3: 22. Es digno de
notarse que la iglesia no se menciona en los capítulos 4-18. III. Cosas futuras, “las
cosas que han de ser después de estas”, esto es, después de haberse terminado el
período de la Iglesia, 4: 1-22: 21”
Capítulo 4:1, asegura esta interpretación porque dice con claridad: “Sube acá, y yo te mostraré
las cosas que sucederán después de estas”.
Evidentemente, el Señor se estaba refiriendo a las cosas que iban a ocurrir después de que la
Iglesia fuera arrebatada a los Cielos, ya que los capítulos 2 y 3 del libro, nos resumen en su
conjunto, el mover de la Iglesia, protagonizado por las siete de Asia, que son tipo de la Iglesia
universal. Juan obedece, y una vez recibida toda la revelación, que no sabemos cuánto tiempo le
tomaría, empieza a poner en limpio y en orden todas las cosas recibidas.
Hay dos cosas que debemos notar acá:
1. Nos muestra sin lugar a dudas de que con este capítulo comienza la tercera división del
libro;
2. También nos hacer ver que las cosas reveladas desde este punto no pueden tomar lugar
hasta que termine el tiempo presente, o sea la iglesia.
Los capítulos 4 al 22 se refieren a lo que eran para Juan, y también será para nosotros, futuro.
13
LA CONSUMACIÓN DE APOCALIPSIS
LOS TIEMPOS
“Escribe las cosas que has “… las [cosas] que son”: “y las [cosas] que han de ser
visto”: MENSAJES A LAS SIETE después”:
LA VISIÓN DE IGLESIAS caps. 2–3 TRIUNFO DE
JESUCRISTO cap. 1 JESUCRISTO caps. 4–22
Salutación 1:1–8 Lo que Cristo requiere de las Dios y el Cordero caps. 4–5
Jesucristo en medio de los iglesias: Juicios de los Sellos cap. 6
candeleros 1:9–20 Éfeso Dos multitudes cap. 7
Amor a Dios 2:1–7 Juicios de las Trompetas caps.
Esmirna 8–9
Firmeza en el sufrimiento 2:8–11 El ángel y el librito cap. 10
Pérgamo El templo y los dos testigos
Ser verdad en medio de las cap. 11
tinieblas 2:12–17 La mujer y el dragón cap. 12
Titatira Las dos bestias cap. 13
Vivir en santidad 2:18–29 Tres visiones del fin cap. 14
Sardis Juicios de las Copas caps. 15-16
Realidad espiritual 3:1–6 La gran ramera cap. 17
Filadelfia La caída de Babilonia cap. 18
Visión 3:7–13 La venida de Jesucristo cap. 19
Laodicea El reino milenial cap. 20
Entrega total 3:14–22 La Nueva Jerusalén 21:1–22:5
Conclusión 22:6–21
14
LAS COSAS QUE HAS VISTO
Salutación 1:1–8
La revelación de Jesucristo (v. 1) puede significar que es un libro de revelaciones acerca de él o que
él es el que revela las enseñanzas de este libro. El v. 1 indica que Juan se refiere a lo segundo,
porque habla de la fuente y el medio de comunicación de esas revelaciones: Dios las entregó a
Jesucristo para que él las manifestara a Juan por medio de un ángel. Juan, a su vez, debía escribir las
enseñanzas para los siervos de Dios. Pero, además, el lector aprenderá mucho acerca de Jesús.
Juan saluda a las iglesias de Asia con el deseo acostumbrado en la correspondencia cristiana,
enviándoles gracia y paz. El inmerecido favor de Dios y el bienestar divino vienen primero del
Padre eterno, pero también de los siete espíritus que están delante de su trono. Esta frase se refiere
al Espíritu Santo y sus múltiples cualidades, expresiones y actividades, tal vez reflejando Isaías 11:2
(comp. Hebreos 2:4, 1 Corintios 12:11).
Después, cuatro versículos describen a Jesucristo. Jesús dio fiel testimonio de las perfecciones del
Padre a través de sus enseñanzas que constituyen la verdad, y delante de sus jueces y
atormentadores (Juan 14:6; 1 Timoteo 6:13). Juan sigue señalando la resurrección y el señorío de
Cristo sobre las naciones. Vemos que el Salvador es profeta, sacerdote y rey. Después, el apóstol le
alaba por su constante amor por los creyentes, su perdón, y por hacerles “un reino de sacerdotes”.
Israel fracasó en su tarea de ministrar el mensaje de Jehová a las naciones. Ahora le toca a la iglesia
representar a Dios en el mundo. El versículo 7 es un eco de Daniel 7:13; Zacarías 12:10–13:1 y
Mateo 24:29–30, donde dice que el pueblo judío lamentará haberlo crucificado.
Al final del párrafo, Juan cita el testimonio de Jesús mismo, con palabras que lo identifican con el
Padre, como iniciador y culminación de todo, el único completo y perfecto. Es eterno como el Padre
(comp. v. 4), y tiene autoridad sobre todo.
44
Orth, Stanford: . Puebla, Pue., México :
Ediciones Las Américas, A. C., 1998, S. 81
15
Señor —época que abarca los tiempos difíciles antes de la segunda venida de Cristo y
también su venida, los juicios y su reino. 45
El Dr. Carballosa por su parte escribe:
La frase «en el día del Señor» parece referirse más bien al sentido veterotestamentario de
dicha expresión (véanse Am. 5:5:18; Jl. 2:1, 2; 2:11, 31; 3:14; Is. 2:12; 13:6,9; Zac. 14:1).
La misma fórmula se usa en el Nuevo Testamento con relación a acontecimientos
escatológicos (véanse Hch. 2:20; 1Ts. 5:2; 2Ts.2:2:2 P. 3:10)46
El Dr. John MacArthur diverge al respecto:
La frase griega traducida aquí el día del Señor (tê kuriakê hêmera) es diferente (tê hêmera
tou kuriou, o hêmera kuriou; cp. 1 Co 5:5; 1 Ts 5:2; 2Ts 2:2; 2 P 3:10) también traducidas
“el día del Señor” y aparece solo aquí en el Nuevo Testamento. Además de eso, la visión
que Juan recibió no tenía nada que ver con el escatólogico Día del Señor; era una visión
del actual misterio de Cristo en la iglesia. Por último, en el segundo siglo la frase kuriakê
hêmera se empleaba ampliamente para referirse al domingo…La frase día del Señor vino
a ser la forma acostumbrada de referirse al domingo, ya que la resurrección de Cristo
ocurrió un domingo.47
La descripción de Jesucristo evoca un impacto visual y auditivo que debe impresionarnos tanto
como al autor, quien cayó como muerto a los pies del ángel. El apóstol sintió asombro, temor,
humillación y sumisión ante su Señor. Además, cada detalle de la visión describe cualidades y
actividades de Jesucristo. La Biblia guía al lector para que entienda la descripción.
45
Véase Orth, Stanford: .
46
Evis Carballosa, op. cit., p. 51.
47
John MacArthur, op. cit., p. 51
16
Cristo tiene el derecho y la responsabilidad de decir lo que piensa de su iglesia porque ésta le
pertenece. Él dijo: “…edificaré mi iglesia” (Mateo 16:18). Él la compró con su sangre (Hechos
20:28). Él es su Cabeza (Efesios 1:22–23). Por estar en Cristo, la iglesia glorifica a Dios (Efesios
3:21). En estos dos capítulos él dice siete veces yo conozco. Él la conoce íntimamente, porque anda
en medio de ella (1:13). Él es el Príncipe de los pastores y el obispo de ella, el que vigila de noche y
de día su santidad, obediencia y frutos (1 Pedro 5:4; 2:25). Quiere lo mejor para la iglesia, que es su
cuerpo. La mayoría de aquellas iglesias tenía un defecto serio y Jesús tenía que señalarlo. ¿Qué es
lo que quiere el Señor de la iglesia? El mensaje a cada iglesia contesta esa pregunta.
48
Basado en las anotaciones del Doctor y Expositor bíblico: J. Vernon McGge
17
e. Por su Sufrimiento - vs. 3
f. Por su Gobierno Democrático – v.6
3. La Acusación - vs. 4
a. Esta iglesia ocupada y separada había dejado su primer amor.49
b. Dios no solo ve nuestras acciones pero también nuestra actitud.
c. Había pasado su luna de miel.
d. Su acción había reemplazado su adoración – su pureza su pasión.
4. La Amonestación - vs. 5-7
a. Dios da tres pasos para la restauración:
- Recordar nuestra posición. Debemos recordar de dónde caímos, es decir, nuestra
salvación y el amor y la gracia de Dios que envió a Jesucristo y nos dio el perdón, la
vida, la esperanza y el gozo. Si contemplamos esto, no podemos contentarnos con
llevar una vida cristiana mecánica, legalista, rutinaria y fría.
- Arrepentirnos de nuestro pecado. Debemos arrepentirnos de la falta de amor y
cambiar nuestro pensar que, a la vez, cambiará nuestro rumbo. Es rechazar cualquier
pecado que está alejándonos de la intimidad con Dios, así como a los ídolos, que son
las prioridades de la vida que no nos permiten dar a Dios el primer lugar.
- Repetir las primeras obras. el cristiano debe volver a hacer las obras que
caracterizaban su primer amor y buscar, como un mendigo hambriento, el alimento
de la palabra santa. Debe deleitarse en la comunión con Dios y con los hermanos en
Cristo, así como obedecer con gozo cada mandato de la palabra.
b. Verso 5 enseña que la iglesia que pierde su amor perderá su luz.
Si la iglesia no vuelve a manifestar el amor a Dios, Jesús advierte que quitará su
candelero, o sea, su luz que brillaba en las tinieblas de Éfeso con el resplandor del
evangelio. Esaiglesia, que antes iluminaba toda la provincia, perdería su oportunidad de
manifestar a Dios en el mundo.
c. Verso 7 hace claro que siempre hay los que pueden ser fieles creyentes genuinos (1Jn.
5:4) - ARBOL DE LA VIDA.
5. La Asignación.
a. Etapa más pura de la iglesia
b. Llamada iglesia apostólica - (30 – 100 D.C.)
49
La falta de amor no es una cosa pequeña o sólo indiferencia. El primer mandamiento de Jesús es:
“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente” (Mateo
22:37). El amor a Dios es esencial, porque Cristo dijo: “el que tiene mis mandamientos, y los
guarda, ése es el que me ama” (Juan 14:21). Pablo escribió que el cumplimiento de la ley es el
amor, y que el amor en la vida del creyente es mayor que la fe y la esperanza. (Romanos 13:10; 1
Corintios 13:13). Amar a Dios es el motor de nuestra adoración, de nuestra entrega a Dios y de
nuestra obediencia a él.
18
ESMIRNA - LA IGLESIA MÁRTIR O CORONADA (vs. 8-11)
Se encontraba a unos 64 Km. Al norte de Éfeso. Era una ciudad espléndida de rara belleza situada
en una amplia bahía. Estaba en la ruta directa entre India, Persia y Roma. Era muy conocida por sus
escuelas de ciencias y medicina, por sus hermosos edificios y bien pavimentadas calles. Allí se
hallaba el templo de Baco, el dios del vino. Muchos judíos apóstatas vivían allí.
Esmirna representa el siguiente período, hasta aproximadamente el año 313. Esmirna significa
“MIRRA”, que era uno de los ingredientes del perfume usado para embalsamar a los muertos.
Tiene que ver con tiempos severos de dificultad y amargura.
El Señor se dirige a esta iglesia hablando de Él mismo como el que “estaba muerto y volvió a la
vida”. Es la iglesia en la tribulación y la persecución, no en vano está el mensaje del Señor (v.10).
Hay registrado un período de martirio así en la historia de la iglesia. El doctor Charles Ryrie
escribe:
El número diez es de especial interés, porque la historia nos informa que hubo precisamente diez
grandes persecuciones de cristianos bajo los emperadores romanos. Fue la obra del diablo. La
persecución de los santos de Dios por la Roma pagana, por la Roma papal, o por cualquier otro
poder, es siempre la obra del diablo. A continuación, las diez grandes persecuciones romanas
durante esta época:
b. DOMICIANO (81-96 d.C.). Pensó que el cristianismo era ateo. Murieron miles de cristianos.
Desterró a Juan a Patmos.
c. TRAJANO (98-117 d.C.). Fue el primero en promulgar leyes contra los cristianos. Quemó a
Ignacio.
d. ANTONINO PÍO (137-161 d.C.). Bajo su reinado murió Policarpo, discípulo de Juan.
e. MARCO AURELIO (161-180 d.C.). Pensaba que el cristianismo era una superstición
absurda. En su tiempo murió Justino Mártir, el gran escritor y defensor de la fe.
g. MAXIMINO (El Tracio: 235-238 d.C.). Bárbaro brutal. Mandó a matar a todos los líderes
cristianos.
50
Ryrie, op. cit., p. 24
19
i. VALERIANO (253-260 d.C.). Mandó matar a Cipriano, obispo de Cartago.
a. JUSTINO MÁRTIR (100-167). Uno de los primeros defensores del cristianismo. Murió por
Cristo en Roma.
b. IRENEO 130-200). Discípulo de Policarpo, quien a su vez lo fue del apóstol Juan.
Pero, ¿Quiénes son los mencionados aquí y en el mensaje a Filadelfia, que dice aseguran ser judíos
y no los son, sino sinagogas de Satanás? Es un cristianismo judaizante y con él un Evangelio
corrompido y oscurecido. Este mal está presente en la edad apostólica, y se manifiesta plenamente
en nuestros propios días.
Niegan el Evangelio de gracia y ponen en su lugar el Evangelio de obras y salvación por medio del
carácter, al guardar la ley. Es la iglesia negativa o falsa, tal como la vemos por todas partes
alrededor de nosotros.
1. El Anuncio - vs. 8
a. El nombre indica “amarga” tiene relación a la palabra “mirra”
b. Iglesia perseguida por su fe.
c. Jesús se identifica con ellos por estas palabras: “el que estuvo muerto y vivió”.
2. La Aprobación vs. 9
a. Su servicio
b. Su sufrimiento
- Por no transigir y decir que César era Señor lo cual la excluía del sindicato.
- A manos de los judíos - Ro. 9:6
Los judíos estaban exentos de las demandas de adorar al emperador, pero buscaban
agradar a las autoridades acusando a los cristianos de ser desleales. Ellos causaron
muchos problemas similares a Pablo y su equipo misionero. Al oponerse a la genuina
comunidad de la fe, se hicieron “sinagoga de Satanás”.
c. Su pobreza - ricos delante de Dios
3. La Amonestación - vs. 10
a. No temas en los que vas a padecer
20
b. Sé fiel - no importa la amenaza. Ya estaban siendo atribulados, pero sufrirían más.
Algunos sufrirían prisión y tribulación “por diez días”. Algunos morirían. No se sabe cuál
es el significado de los diez días. Quizá, como piensan algunos, simboliza un período
breve de tiempo. Tal vez fue un tiempo literal de diez días de intenso sufrimiento en que
las autoridades decidieron erradicar la iglesia o hacer de los creyentes un escarmiento
para las personas que no juraran obediencia al dios-emperador.
c. Recibirás la corona de vida (Stgo. 1:12)
d. Promesa de no ver segunda muerte. (Ap 20:14; 21:8). Los que fueran fieles demostrarían
su fe viva y verdadera y recibirían la corona de la vida, o sea, la vida eterna. Los que
vencen son los creyentes genuinos. Escaparán de la “segunda muerte”, que es la muerte
espiritual y eterna reservada para quienes no conocen a Cristo
4. La Asignación.
a. Etapa de la iglesia perseguida - (64 a 312 D.C.)
b. 10 edictos romanos durante 3 siglos (peor emperador, Diocleciano: 303 – 313 D.C.)
c. Algunos creen que cinco millones de personas fueron martirizados.
21
El nombre de Balaam aparece también. Cuando no pudo maldecir a Israel, puso a las hijas de
Madián y de Moab entre el pueblo de Dios y en la mezcla ilícita que siguió consiguió perjudicar a
Israel (Nm. 31:16; 25:1-2; Judas 2).
También se les menciona a los nicolaítas por segunda y última vez. Este nombre proviene de dos
palabras griegas: Nikao significa “Dominar o Conquistar”; Laos significa “el pueblo”.
“Conquistadores del pueblo”. Había aparecido una casta sacerdotal en la iglesia que dominando al
resto de los miembros, llamados legos.
Y esta casta dominante pretendía tener un lugar superior en el cuerpo de Cristo, un sacerdocio que
con derecho pertenecía al Señor Jesucristo.
Este mal fue rechazado en la Iglesia de Éfeso pero es plenamente sacramentado y tolerado en
Pérgamo. Esto es lo que nuestro Señor aborrece, y lo que Él aborrece, nosotros también tenemos
que aborrecerlo.
1. El Anuncio vs. 12
a. La ciudad tenía el primer templo dedicado a la adoración al César.
b. La iglesia aquí había sido perseguida por la espada de Roma.
c. Dios hace claro que es Él quien dará el juicio final.
2. La Aprobación vs. 13
a. Su servicio
b. Su fidelidad en medio de la idolatría
c. Su firmeza en medio de la muerte.
3. La Acusación vs. 14-15
a. Había resistido los ataques de afuera pero no de adentro
b. Los que seguían la doctrina de Balaam (Nm. 22:15, 31:16)
Balaam motivado por la avaricia, él maquinó una estrategia para corromper a los
israelitas. Las moabitas sedujeron a los varones hebreos para que participaran de sus
fiestas idólatras e inmorales. La inmoralidad los llevó a practicar la religión falsa. Tal vez
en la iglesia de Pérgamo algunos decían: “…pequemos para que la gracia abunde”
(Romanos 6:1, 15). El deseo de seguir participando en la inmoralidad de las religiones
paganas los llevó a aceptar doctrinas equivocadas. Como en la iglesia de Éfeso, el Hijo de
Dios aborrece esa doctrina (v. 6). Muchas veces, comprometer las normas éticas y
morales conduce a la doctrina falsa.
- Se hicieron vecinos
- Adoptaron las costumbres paganas
- Transigían (nombre significa “casados”)
c. Los que seguían la doctrina de los nicolaítas
- Los que dominan al pueblo
- Separación del clero y laicos
22
4. La Amonestación vs. 16-17
a. Arrepentirse
Si no, juicio contra los seguidores con la palabra - la espada. En ese centro de doctrinas
y actividades satánicas, Cristo dice que la verdad tiene que triunfar en la iglesia. La
espada de la palabra de Dios necesita enseñarse, creerse y obedecerse. Si no, esa misma
espada se convertirá en el instrumento de castigo.
b. Oír
c. Promesa
- Comer maná - pan de vida. Trae a la memoria el maná que se escondió en el arca
del pacto para recordar a los hebreos la milagrosa provisión de alimento en el
desierto. Pero Cristo es el pan verdadero que sustenta y satisface al que cree en él.
Así como las otras promesas a los vencedores son distintos aspectos de la salvación
futura, éste también es el pan de vida que eternamente satisfará a su pueblo. “Si
alguno comiere de este pan, vivirá para siempre” (Juan 6:48–51cp. Ef. 1:3).
- Piedra blanca. Es difícil decidir el significado de ella. Se ha sugerido que es una de
las piedras que había en la coraza del sumo sacerdote51, o una piedra para votar52, o
una invitación o boleto de entrada a un banquete u otro evento, o bien un premio por
alcanzar la victoria en los deportes, un amuleto, o una piedra para contar. Pero en
este contexto, quizá podemos entenderla como un boleto de entrada. Para los
verdaderos creyentes que rechazan los banquetes paganos, Cristo promete entrada a
su banquete celestial donde él mismo satisfará el corazón.
5. La Asignación.
a. Etapa de la iglesia transigente
b. 312 - 606 D.C.
c. Edicto de Constantino
51
Ex 28:15, 30; Lv 8:8; Nm. 27:21; Dt. 33:8
52
Hch. 26:10
23
La apostasía católico-romana ha puesto a una mujer en el lugar del Hijo de Dios. La corrupción de
ella se ve plenamente en el v.20. A Jezabel, que se llama a sí misma profetisa, se le permitió que
sedujera a los siervos de Dios a cometer fornicación y a comer cosas sacrificadas a los ídolos.
Jezabel, la mujer malvada, representa al papado. Jezabel era una mujer pagana casada con un rey
del pueblo de Israel. Era una reina idolátrica, persiguió a los verdaderos profetas de Dios (1R.18-
19). Jezabel tiene un doble significado: “CASTA O ESTERCOLERO”. Roma pretende ser la
Esposa de Cristo, pero en realidad es un estercolero de toda inmundicia y corrupción.
El Hijo de Dios se identifica como el que tiene ojos penetrantes (v. 18) y “el que escudriña la mente
y el corazón” (v. 23). También es el que puede juzgar con firmeza y dureza (v. 18) y el que dará a
cada uno según sus obras (v. 23).
1. El Anuncio vs. 18
a. Su nombre - el Hijo de Dios (existía un templo de Apolo-Sol)
b. Su descripción - sus ojos y sus pies.
2. La Aprobación vs. 19
a. Obras que crecían.
Cristo señala varias virtudes de los cristianos de Tiatira. Hacían buenas obras como los
efesios, pero además mostraban el amor que les faltaba a aquéllos. Asimismo, eran
perseverantes, cosa que necesitaban los de Esmirna. También tenían la fe que algunos de
Pérgamo estaban perdiendo. Pero junto con esas virtudes, habían aprendido la necesidad
de crecer: “tus obras postreras son más que las primeras”. Éfeso retrocedía. Tiatira
avanzaba. El Nuevo Testamento describe la vida cristiana como un crecimiento constante
para llegar a la imagen de Cristo, y desarrollando cada día más la devoción, el fruto del
Espíritu, la santidad, la sumisión a Dios y el servicio humilde.
b. Amor
c. Fe-fidelidad
d. Servicio
3. La Acusación vs. 20-23
Sin embargo, en medio de su crecimiento, los creyentes toleraban la influencia de una
profetisa falsa. Algunos creen que el amor exige ser tolerantes aun con personas que
corrompen la vida moral y espiritual de una congregación. Pero Cristo enseñó que no es así.
a. Dejaron que una profetisa guiara a la gente a transigir
- Jezabel (1R. 16:29–34; 2 R 9:30–37)
b. Orgulloso y no dispuesto a arrepentirse
c. Advirtió que la usaría como ejemplo
- Idolatría y transigencia son representados en la Biblia por fornicación e infidelidad. (Jer.
3:6; Os. 9:1)
4. La Amonestación vs. 24-29
a. A los fieles - retened lo que tienen - hasta que venga
24
b. Promesa de reinar con El (1:6; 3:21; 20:6; Mateo 25:21, 23)
c. La estrella de la mañana - 22:16
5. La Asignación
a. 600 - 1500 D.C. - El Oscurantismo
b. Una mujer puesta en lugar de hombre
25
SARDIS - LA IGLESIA REFORMADA O DÉBIL (vs. 3:1-6)
Se hallaba a unos 50 Km. al sur de Tiatira y era la capital de Lidia. Se pensaba que la ciudad era
inexpugnable, por el área geográfica en la que estaba edificada, precisamente en la colina de un
cerro y esto les daba a los lugareños la idea de no ser propensos a un ataque enemigo.
Las monedas fueron acuñadas por primera vez aquí. En esta ciudad predominaba el culto a Ceres, la
Démeter (madre de los dioses) de los griegos.
En el tiempo en que Juan escribía el Apocalipsis, Sardis decaía rápidamente, abocada a una muerte
segura, a lo que parece aludir el versículo 2, comparándola con la decadencia espiritual de su
iglesia. En sus tiempos de esplendor, Sardis era renombrada por sus industrias de lana y de
tintorería, y sus habitantes tenían fama de licenciosos y arrogantes (tanto por sus riquezas en oro
como por la supuesta imposibilidad de invasión a la ciudad).
Sardis significa: “LOS QUE ESCAPAN”. Es el período de la Reforma., el período que produjo el
protestantismo. La Reforma misma era de Dios y los grandes hombres que fueron usados en ella
eran poderosos instrumentos del Espíritu Santo.
La Reforma empezó bien, pero pronto se desarrolló en diferentes sistemas protestantes, algo muerto
y sin vida.
Para el 3:1, se encuentra la condena de parte Dios y es importante leer lo que dice el Doctor
J.Vernon McGee.
“Tenemos aquí un cuadro del protestantismo. Las grandes verdades que se recuperaron
durante la Reforma han quedado abandonadas por una iglesia transigente. Aunque las
grandes denominaciones e iglesias todavía recitan los credos de la iglesia, los han
repudiado en realidad en sus mentes, corazones y vidas. Programas, rituales elaborados y
la multiplicación de organizaciones han ido sustituyendo a la Palabra de Dios y a la vida
espiritual auténtica. Hay actividad pero sin acción; movimiento pero sin progreso;
programas sin poder. Aunque las formas externas continúan, la vida se ha salido del
cuerpo.”
“...Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto”. Para los cristianos no
cabe duda de que dichas frases aluden al estado general de la iglesia en Sardis, la cual estaba
viviendo (como la población pagana de Sardis en lo material) de las pasadas glorias, de recuerdos
antiguos, de la rutina de una formas eclesiales muertas, de unas estructuras carentes de vida, de una
ortodoxia muerta. Exteriormente no parecía nada reprochable. No se mencionan enseñanzas falsas,
problemas personales o eclesiales, persecuciones que apremien. Esta iglesia gozaba de una
reputación que no se merecía. Como dijera alguien: “ r r
53
”.
Pero al Señor no se le oculta el estado interior de su iglesia y, por ello, puede sin equivocarse, qué
grupo realmente es una “Iglesia Viva” y qué grupo es sólo la apariencia de “iglesia”; qué es lo que
vive realmente y qué es lo que sólo aparenta tener vida.
Como dijo el profesor J. Grau:
53
M. Henry, Comentario a Apocalipsis, p.1935
26
Muchos que profesan ser cristianos, miembros de iglesia, tal vez por haber hecho una
“decisión” un día (decisión sin arrepentimiento, decisión sin saber lo que se hacía, etc.) no
son más que aquellos de quienes escribió Pablo en 2Ti.3:5; y a la vez el Señor Jesús los
mencionó dándoles una severa advertencia (Mt.7:21-23).
La palabra Sardis demuestra que la Reforma no fue la restauración del a iglesia ideal del Nuevo
Testamento.
Entre los personajes sobresalientes de este tiempo se encuentran:
a. Martín Lutero (1517-1700). Es una de las más grandes figuras de todos los tiempos;
fue el que inició la etapa del protestantismo. Se graduó en la escuela de leyes y a
continuación decidió ingresar en el sacerdocio. Después de tres años miserables
encontró por fin la paz que buscaba en Romanos.1:17. En 1508 se encontraba
enseñando en la universidad de Wittenberg, y fue en esta ciudad, el 31 de octubre de
1517, que Lutero clavó sus noventa y cinco tesis en la puerta de la iglesia, atacando las
ventas de indulgencias. Copias de estas tesis se leyeron ávidamente en toda Alemania, y
se demostró que era la chispa que se necesitaba para incendiar a toda Europa. En la
dieta de Worms en 1521, Lutero rehusó retractarse, pronunciando su famosa frase de
“Aquí estoy, y no puedo hacer otra cosa. ¡Dios me ayude!”. El legado precios que
Lutero dejó, incluye:
- El sacerdocio universal de los creyentes.
- La Biblia como la única autoridad para la fe cristiana.
- La justificación por la fe y no por las obras.}
b. Zwinglio (1484 – 1531). El gran colaborador de Lutero.
c. Juan Calvino (1509 – 1564). Es uno de los grandes teólogos de la fe cristiana. Sus
cinco puntos principales de doctrina son:
- La depravación total del hombre.
- La elección incondicional del hombre por Dios.
- Expiación limitada (Cristo murió sólo por los elegidos).
- La gracia irresistible.
- La perseverancia de los santos (La eterna seguridad).
d Juan Knox (1515 – 1572). El solo barrió el catolicismo romano de Escocia.
e Roger Williams (1604 – 1684). Llegó a Bay Colony (Massachustts) en 1631. Después
de ser echado de allí se fue a Providence, Rhode Island, donde fundó la primera Iglesia
Bautista de América.
1. El Anuncio
a. El que tiene los 7 espíritus-E.S. en su plenitud (1:4-5; 4:5; 5:6)
b. El que tiene las 7 estrellas-Autoridad
2. La Aprobación vs. 4
27
Unas pocas personas quienes no habían manchado-transigido
3. La Acusación vs. 1-2b
a. Una iglesia activa - aparece progresiva - recomendada
Cristo señala la debilidad de esa congregación. Tenía mucha actividad y una reputación
(“nombre”), pero sólo tenía la apariencia de ser una iglesia buena. Tal vez los cultos y
proyectos impresionaban y hacían sentir que tenía poder, pero no tenía vida.
b. Dios dice que estaba muerta. En el v. 2, agrega: “no he hallado tus obras perfectas delante
de Dios”, o sea, que las suyas no eran obras “cumplidas”. Delante de los hombres, tenían
actividades y cualidades; delante de Dios, no cumplían con su voluntad. Isaías había
condenado al pueblo hipócrita (Isaías 29:13). Cristo condenó a los fariseos que oraban
mucho y daban limosnas y diezmos diciéndoles: “os mostráis justos a los hombres, pero
por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad” (Mateo 6:1–6, 16–18; 23:5, 27, 28).
Pablo profetizó que habría personas así en las iglesias (2 Timoteo 3:5). En Sardis,
cumplían con las actividades y costumbres cristianas, pero no se esforzaban en crecer
hacia la imagen de Cristo; no proyectaban un amor genuino hacia los que necesitaban a
Cristo, y no compartían su fe.
c. Dios no hallo sus obras perfectas delante de El - hipócritas
4. La Amonestación vs. 2-3
a. Sé vigilante y afirma las otras cosas que están para morir.
Podemos distinguir tres partes en la exhortación de Jesús. Primera: “Sé vigilante, y afirma
las otras cosas que están para morir”. Había todavía algunos aspectos de su vida y
ministerio que eran reales (comp. v. 4) y que estaban “para morir”. Pero con cierta
vigilancia era posible conservarlos todavía. Dos veces, Cristo habla de velar. Estaban
dormidos; debían despertar al peligro, tomar acción inmediata y “afirmar” las cosas
débiles.
2 veces la fortaleza de la ciudad cayó en manos a causa de los guardianes dormidos
b. Acuérdate, guárdalos, arrepiéntete – si no vendrá como ladrón.
c. Promesa:
1º. Vestiduras blancas
2º. Nombres en el libro de la vida
Veamos algunas interpretaciones del texto.
El profesor Stanford: “Es una promesa de la seguridad de la salvación. Algunos
interpretan que sólo los nombres de los creyentes están escritos en ese libro, y que
no hay peligro de que alguno sea borrado de él. Sin embargo, otros intérpretes
sugieren que el libro tiene los nombres de todas las personas por las cuales Cristo
murió —de toda la humanidad. Entonces, los que no creen en Cristo son borrados
del libro. Pero los que son creyentes tienen la seguridad de que sus nombres estarán
siempre en el libro del Cordero.”
28
Carballosa: …en el libro de la vida solo permanecen inscritos los nombres de
quienes tienen vida espiritual por haber puesto su fe y confianza en la persona de
Jesucristo (1 Jn. 5:1)54
54 54
Evis Carballosa, op. cit., p. 87.
29
Andan en el camino de la separación, del enjuiciamiento propio, de la humildad de la mente; tienen
poca fuerza, que significa debilidad; son todavía pocos. Dos veces habla el Señor de obediencia a su
Palabra: “Has guardado mi Palabra”, “Has guardado la palabra de mi paciencia”. Y Filadelfia
no niega su nombre. La Palabra y el nombre son negados en los últimos días.
La apostasía de la cristiandad consiste en el rechazo de la Palabra escrita y la Palabra viva. En
Filadelfia hay un avivamiento de la verdad profética, un sincero esperar de la venida del Señor.
Filadelfia no es un período definido de la iglesia, sino más bien la descripción de un remanente leal
llamado por el Espíritu de Dios y que da un testimonio final a todo el consejo de Dios por medio de
la Palabra y de los hechos.
1. El Anuncio vs. 7
a. El Santo
b. El Verdadero
c. La Llave de David (Is. 22 – Sebna, Eliaquim)
d. Es una puerta abierta - con resistencia
2. La Aprobación vs. 8
a. Servicio
b. Has guardado mi palabra, aunque tienes poca fuerza
c. No has negado mi nombre (Cristo la totalidad)
3. La Acusación
No hay
4. La Amonestación vs. 9-12
a. Retén lo que tienes
b. Promesas:
- Entrega de sus enemigos
- Protección de la tribulación
El Señor promete libra a su iglesia de la hora misma de la prueba. Esta liberación no
será una protección a través de la prueba, sino una liberación que consistirá en sacar
a la iglesia de la tierra antes que esos juicios tengan lugar. El propósito de la
tribulación es someter a prueba al mundo incrédulo, no a la iglesia (véanse Ap. 3:10;
1Ts 5:9)55
- Su pronta venida
- Hacerles columna en el templo de Dios
55
Evis Carballosa, op. cit., p. 101.
30
- Darles nuevo nombre
5. La Asignación
a. 1750 - 1950
b. Época Misionera
1. El Anuncio vs. 14
a. El Testigo Fiel y Verdadero
b. La fuente de la creación
2. La Aprobación
No hay
3. La Acusación - vs. 15-17,20
a. Ni eres frío ni caliente57 - no tiene fervor
56
Charles Ryrie, op. cit., p. 31
57
Laodicea recibía el agua de manantiales calientes del sur y era traída por un acueducto de nueve kilómetros de
extensión. El agua estaba tibia cuando llegaba a la ciudad. En términos duros, Jesús dice que sus vidas eran así,
tibias, anémicas y repugnantes, como para escupirse de la boca.
El cristiano ubica a Dios en primer lugar y los demás intereses, responsabilidades y compromisos son dominados y
orientados por Dios. Hemos de ser “fervientes en espíritu” y avivar “el fuego del don de Dios” (Ro 12:11; 2 Ti
31
b. Piensas que eres rico - orgullo
c. Desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo
4. La Amonestación - vs. 18, 19
a. Compres oro para ser rico – justicia (Job 23:10, Pr. 11:22)
b. Vestiduras blancas para cubrir tu desnudez (19:8)
c. Unge tus ojos para que veas
d. Sé celoso y arrepiéntete
e. Promesa:
- Castigo para los suyos
- Comunión
- Sentarse con él
5. La Asignación
Iglesia bien materialista pero pobre y fría
1:6). Dios requiere una entrega total de la persona, un compromiso incondicional con él y completa sumisión al
señorío de Jesucristo.
32
LAS COSAS QUE HAN DE SER DESPUÉS DE ESTAS (4 – 22)
LAS COSAS QUE HAS LAS COSAS QUE LAS COSAS QUE HAN DE SER DESPUÉS DE
VISTO SON ESTAS
(Cap. 1) (Cap. 2-3) (Cap. 4-22)
33
Si es así, ¿por qué no está mencionado el rapto en términos claros al principio de este capítulo?
Indudablemente la respuesta se encuentra en el hecho de que la Biblia está escrita para que la
escudriñemos. En el tiempo del A. T. Los profetas tuvieron que inquirir y diligentemente indagar
para poder comprender la mente del Espíritu (1P. 1:10,11; 2P. 1:19-21). La Biblia se ha escrito de
tal manera que nos obliga a estudiarla profundamente para poder sacar sus verdades más preciosas.
Sin embargo, comparando Escritura con Escritura y, dependiendo del Espíritu Santo, podemos
llegar a conclusiones concretas sin especular.
La posición pretribulacional dice que esto sucederá antes de la Gran Tribulación descrita en
Apocalipsis 6-19. En este pensamiento, el arrebatamiento sucederá probablemente entre
Apocalipsis 3:22 y 4:1, aunque algunos la modifican para decir que el rapto viene al final del
capítulo 6.
Vale repasar los argumentos mayores a favor del rapto pretribulacional. 60
1. Hay una diferencia entre Israel y la iglesia (Ro. 11:25). Las 70 semanas de Daniel 9:24-27
están determinadas sobre Israel, no la iglesia. Hay un paréntesis entre la semana 69 y 70, y
en ese paréntesis podemos asumir la existencia de la iglesia, el tiempo de los gentiles. La
semana 70 es el periodo de la gran tribulación. Cómo la iglesia no estuvo presente durante
las primeras 69 semanas, se piensa que no estará presente durante la semana 70, la gran
tribulación. Por tanto, tendría que ser arrebatada antes de la gran tribulación. 61
2. Identificamos a la semana 70 con el día del Señor en el cual la ira de Dios vendrá sobre los
moradores de la tierra . La ira de Dios empieza en sí en el Apocalipsis 6 (6:16,17), pero los
capítulos 4 y 5 serían una introducción a ella. La Biblia muestra que los creyentes no
recibirán la ira de Dios; por tanto, estarían fuera de la tierra durante la ira. 62
Este argumento tiene una posible deficiencia. Van a ver creyentes en la gran tribulación
(Ap. 7:9,14; 13:7). Si ellos experimentan ira, entonces 1 Tesalonicenses 5:9 se referiría a la
ira del juicio eterno y no la ira de la gran tribulación, y entonces no habría razón por qué
sacar a unos creyentes (iglesia) y dejar a otros (post-iglesia).
Si los creyentes en la gran tribulación no experimentan ira, es porque Dios derrama su ira
sobre los moradores de la tierra (incrédulos), mas no sobre los creyentes (Ap. 3:10). Si Dios
puede hacer distinción entre los incrédulos y creyentes que sí estarán en la gran tribulación,
entonces ¿no será posible que pasen también los creyentes de la iglesia por la gran
tribulación sin experimentar la ira de Dios?
3. Parece que el Espíritu Santo dejará de permanecer en la tierra durante el tiempo del
anticristo (2 Ts. 2:1-9). Siendo que Jesús dijo que el Consolador siempre estaría con la
iglesia, se supone que entonces la iglesia tampoco estará en la tierra.
4. No se menciona a la iglesia durante los castigos de Dios en Apocalipsis 6-19. Esto puede
indicar su ausencia.
60
Basado en las notas del curso de Apocalipsis por Jonathan Stilwell, profesor en el Seminario Bautista del Perú,
Trujillo.
61
Rom 11:25
62
1 Ts 5:9; Ap 3:10
34
EL TRONO EN EL CIELO (4:2)
La primera cosa que Juan vio en el cielo era un trono, que simboliza el gobierno universal de Dios.
Notemos algunos detalles dados acerca de este trono:
“El Trono Establecido”
Mientras que en los tronos de la tierra hay inestabilidad y los gobiernos tambalean, hay un “trono
establecido” en el cielo que está tan firme que no puede ser removido (Sal. 2:1-4); o según Dn. 7:9
recién establecido.
La Persona Gloriosa Sentada en el Trono (vs. 2-3)
El ocupante del trono, quién es Dios, se describe en términos que nos hacen ver que Juan vio
solamente una Presencia, no la realidad de este Augusto Ser. Su gloria era semejante a piedra de
jaspe y de cornalina Estas piedras eran la primera y la última piedra en el pectoral del Sumo
Sacerdote, con acepción que aquí se invierte el orden. Los nombres de Benjamín (hijo de mi
diestra) y de Rubén (he aquí un hijo) fueron grabados sobre estas piedras. (Ex. 28:15-20)
El Arco Iris Alrededor del Trono (4:3b)
Alrededor del trono estaba un arco iris como esmeralda (verde) que muestra que aun en juicio, Dios
se acuerda de la misericordia (Hab. 3:2b). La esmeralda es la piedra de Judá y habla de la eternidad
y misericordia de Dios. Hay muchas evidencias en los caps. 6-19, que comprenden el juicio de la
Tribulación que Dios manifiesta su misericordia.
Los Relámpagos, Truenos, Voces (4:5)
Esta escena está repetida varias veces (8:5; 11:19; 16:18). Todo muestra que Dios está alistándose
para juicio.
El Mar de Vidrio (4:6)
Este mar delante del trono nos hace recordar el lavacro del tabernáculo que fue usado para la
limpieza de los sacerdotes (Ex. 30:18-21), los creyentes se limpian por el lavacro del agua por la
Palabra (Ef. 5:25 Versión Antigua). Ahora el mar es de vidrio en vez de agua, porque los salvados
no necesitan más limpieza, pues, han conseguido una perfección completa. Todavía el mar
representa la Palabra de Dios, mostrando que es firme, segura y gloriosa en la cual el pueblo de
Dios siempre puede confiar. Ex. 24:10,11; Ez 1:22; Ap. 21:21.
35
LOS VEINTICUATRO ANCIANOS (4:4)
¿Qué representan los veinticuatro ancianos? Hay una diferencia de opinión acerca de la identidad de
estos personajes. Si Dios no nos explica este misterio, entonces no es tan importante conocerlo. Lo
importante es notar el mensaje o lección que nos enseñan estos ancianos. Notemos algunas
interpretaciones:
Algunos como el Dr. Guillermo Newell, los interpretan como seres literales creados especialmente
para asociarse con Dios en Su gobierno sobre el universo. Algunos sugieren que los 24 ancianos
representan a los redimidos de todo tiempo, y se basan en las siguientes razones:
a) Están sentados sobre tronos. Esto representa reino. Los redimidos van a reinar con Cristo;
los ángeles no reinan, sólo sirven. 63
b) El número 24 puede reflejar la unión de las doce tribus y los doce apóstoles, unión del
Antiguo y Nuevo Testamento, unión de judíos y gentiles en un cuerpo (Ef. 2,3). Puede
también reflejar las 24 clases de sacerdotes (1 Cr. 24).
c) Tienen ropas blancas, algo más relacionado con los santos (3:4;7:9). Sin embargo, los
ángeles también tienen ropas blancas (versos).
d) Tienen coronas, las coronas simbolizan autoridad para gobernar con Cristo (Tercero, 3:21;
5:10; 20:4, 6; 22:5; 2 Ti. 2:12)
e) Tienen copas llenas de incienso que representan las oraciones de los santos (5:8). Sin
embargo, un ángel también maneja las oraciones de los santos (Ap. 8:3,4).
f) Cantan un cántico que es nuevo y que atestigua de una redención personal (5:9,10).
Otros sugieren que los 24 ancianos son seres celestiales como los ángeles o los cuatro seres
vivientes. Están asociados más con otros seres vivientes o ángeles que con la humanidad (4:9,10;
5:6, 8,11; 7; 11,12; 11:16-18; 14:3; 19:4). La Biblia nunca dice que representan a los santos. Mas
bien, Apocalipsis parece tratar a los santos como un grupo aparte de los 24 ancianos (Ap. 19:4-8).
Los 24 ancianos están sentados en tronos que hablan de autoridad gubernamental (comparar 1Co.
6:2,3; Ap. 29:6). La iglesia tendrá el privilegio de reinar con Cristo en alguna manera durante el
milenio. Están vestidos de ropas blancas, hablan de justicia perfecta. Los redimidos ya están con
Cristo y son semejantes a El (1Jn. 3:1-2; Fil. 3:20-21). La justicia perfecta del creyente es la de
Dios que recibió por el hecho de estar con Cristo (2Co. 5:21). También los vestidos de ropas
blancas podrían hablar de las acciones justas de los santos, como se menciona acerca de la
vestimenta de la esposa de Cristo en las bodas del Cordero (19:8).
En sus cabezas los ancianos tienen coronas de oro. La palabra que se usa para corona es
“stephanos” que se refiere a la corona de laurel o de pino, dado como premio al vencedor en los
juegos griegos (2Ti. 4:8). Si los ancianos nos hablan de la iglesia, las coronas nos muestran que ya
han sido juzgados delante del tribunal de Cristo y han recibido sus recompensas.
63
Ex. 19:6; Dn 7:18; Mt 8:11;1 Co 6:2,3
36
C. LAS SIETE LÁMPARAS (4:5B)
Delante del trono ardían lámparas de fuero que son los siete espíritus de Dios, o la plenitud del
Espíritu Santo (como en 1:4; 3:1; 5:6).
No son siete espíritus distintos, sino el número siete siendo representativo del algo perfecto o
completo, habla de la perfección y plenitud del Espíritu Santo de Dios. El fuego ardiendo de las
siete lámparas podría hablar del juicio divino que está para caer sobre la tierra. En esta visión del
trono celestial, se presenta cada miembro de la trinidad (Is. 11:2 cp. Jn 16:7-13)
1. Muchos comentaristas los asocian con los querubines descritos en Ezequiel. Aunque
hay ciertas cosas parecidas, las diferencias entre los seres y los querubines presenta un
problema para esta interpretación. Los querubines de Ezequiel tenían cuatro cabezas
cada uno, pero los cuatro seres vivientes cada uno de un rostro diferente. También los
cuatro seres vivientes cada uno tenía seis alas, pero los querubines sólo tienen cuatro
alas cada uno.
2. La segunda interpretación dice que los seres creados especialmente para servir delante
del trono de Dios. Aunque la identificación de estos seres es difícil, la interpretación
más natural es que son seres vivos creados por Dios.
Los rostros diferentes de los seres vivientes nos hablan de Cristo en 4 maneras. El primero era
semejante a un león y habla de Cristo como el Rey de Israel, así lo presentó Mateo. El segundo era
semejante a un becerro que habla de Cristo como Siervo de Jehová, igual que el evangelio de
Marcos. El tercero tenía rostro de hombre que habla de la humanidad de Cristo como lo presentó
Lucas. Finalmente, el que era semejante a un águila volando habla de la deidad de Cristo tal como
lo presenta el evangelio de Juan.
Estos seres están vinculados con la autoridad judicial de Dios y fueron creados con este propósito.
Son los guardianes del rostro de Dios. El hecho de que están llenos de ojos sugiere que están alertas
y llenos de conocimiento son seres muy inteligentes y espirituales.
Día y noche no cesan de alabar a Dios por ser EL CREADOR Todopoderoso; es notable que la
alabanza de los seres vivientes resalta en tres aspectos del carácter de Dios. Algunas razones del
porqué de su alabanza:
Alaban a Dios por ser Santo (Is. 6:3). La idea básica de santidad es algo separado diferente.
Algo que es santo es diferente o separado de las cosas comunes. Dios es completamente
diferente o separado de los hombres (Hab. 1:13), y por eso merece nuestra alabanza por su
carácter santo.
Alabarán a Dios por ser Omnipresente, Dios es Todopoderoso. ¡Qué consuelo de poder
confiar nuestras vidas en manos de uno que es ilimitado en poder!.
Alabarán a Dios por su Eternidad, Dios es Eterno. Los imperios se levantan y hacen
grandes cosas, al fin pasan, sólo Dios continúa para siempre.
37
LA ADORACIÓN SIN CESAR DELANTE DEL TRONO (4:9-11)
Los veinticuatro ancianos se juntan con los seres vivientes para dar continua alabanza a Dios. Con
humildad los ancianos echan sus coronas ante el Ser sentado en el trono, alabándole por ser Creador
de todo. No sólo reconocen a este Ser como Creador sino se dan cuenta de que El es la motivación
de todo. Su voluntad es causa de la creación y el agente. Si las coronas representan los premios de
los santos de la iglesia, entonces muestra que ellos devuelven a Dios sus premios reconociendo que
aún en lo bueno en sus vidas ha sido obrado por Dios mismo, por su gracia.
1. La Posición del Libro. Estaba en la mano derecha del que estaba sentado en el trono
cuando Juan lo vio por primera vez. Según vs. 7 más tarde el Cordero recibe de la
mano de Dios el libro para desatar sus sellos.
2. Las Características del Libro. Cuando leemos la palabra libro no debemos pensar en
un libro tal como conocemos hoy, sino más bien en un rollo de pergamino. El rollo
había sido enrollado hasta cierto punto y un sello se había puesto en el borde, de modo
que no se podía abrir sin romper el sello. Se enrollaba un poca más y se aplicaba otro
sello, y así hasta aplicar el séptimo sello. Rompiendo el primer sello una parte de rollo
quedaba abierto para leer su contenido.
3. El Contenido del Libro. Un erudito bíblico comenta: “El libro sellado en la mano del
que estaba en el trono..., contiene el secreto de los capítulos siguientes, y es la clave
para el entendimiento de todo el libro de Apocalipsis.” Cuando se rompen los sellos en
el capítulo 6 los juicios de Dios comienzan a derramarse sobre la tierra. Cuando se
abre el séptimo sello, salen las trompetas (8:1). En otras palabras, la redención de la
tierra está completada.
El libro contiene los juicios justos de Dios sobre la tierra. Cuando el primer hombre pecó, perdió su
señorío sobre la creación y por medio de las revelaciones de este libro, vemos la historia de la
recuperación de esta autoridad por el hombre, Cristo Jesús. Satanás había usurpado lo que Dios
había dado originalmente al hombre en Adán. En Apocalipsis, Cristo reclama por el derecho de su
muerte en la cruz todo lo perdido en Adán, recuperando así su legítima autoridad sobre la tierra.
38
David), la cual estará puesta por pendón a los pueblos..., y su habitación será gloriosa (Is.
11:1,10). Cristo es el cumplimiento de esta profecía dad por el profeta.
Las palabras “ha vencido” significan que había adquirido el derecho de poder abrir el libro como
resultado de triunfo en un conflicto o lucha. Cristo venció en su cruz sobre todos los principados y
potestades (Col. 2:15) y ahora en esta escena están alistándose para tomar su posición legal de Rey
sobre la tierra.
De las 26 veces donde ocurre el verbo “vencer” en el N.T. , 23 se encuentran en los escritos de
Juan. Mirando hacia la cruz de Cristo, éste dijo: “...Yo he vencido al mundo” (Jn. 16:33). Nosotros
también podemos ser vencedores por medio de su victoria (1Jn. 5:4,5), y los vencedores se sentarán
con Cristo en su trono (Ap. 3:21).
Cuando Juan miró para ver el León de Judá y la raíz de David de que hablaba el anciano, él vio un
Cordero en pie (vs. 6). La descripción de este cordero no es como la de un Cordero común y
veamos por qué:
1. La primera cosa que nos llama la atención es que está en pie en medio del trono, de los
seres vivientes y de los ancianos. ¿Por qué?. Porque Él es el centro de toda la escena;
El es el centro de toda la atracción, El es el enfoque de todo ojo (Jn. 1:29).
2. La segunda cosa llamativa es la apariencia del Cordero; es como “Inmolado”. A pesar
de ser inmolado está en pie. ¿Qué significa? El énfasis no está en la crucifixión, sino
en su resurrección. Las señales de su muerte permanecen inalteradas, pero él no está
yaciendo muerto; sino que está parado victorioso. Seguramente a través de la eternidad
sus heridas serán visibles para hacer recordar a su pueblo el costo de su Redención.
3. La tercera cosa resaltante de este cordero es que tiene siete cuernos. En el A.T. los
cuernos son utilizados como símbolos de Autoridad (Dn. 7:7,8 y son reyes o
autoridades cívicas), Fuerza (Dt. 33:17; 1R. 22:11; Zc. 1:18,19), y Honor (1S. 16:1;
Sal. 89:17; 148:14); el número 7 denota siempre perfección o algo completo. Por lo
tanto, Cristo es la autoridad perfecta con poder completo y merece todo honor. La
muerte no ha debilitado su fuerza, más bien ha resaltado el honor debido a su persona.
Ahora el Cordero con siete cuernos está listo para tomar su posición como Rey de
reyes.
4. La última cosa que notamos del Cordero es que tiene siete ojos, los cuales son los siete
espíritus de Dios. Los siete ojos representan la plenitud del Espíritu de Dios. Cristo es
todavía un hombre en el cielo, pero está investido de poder por el Espíritu Santo,
teniendo la plenitud de su poder y percepción.
En este cuadro vemos al mismo tiempo la majestad y humildad del Señor Jesucristo. En un solo
cuadro está combinado la humillación de la muerte y la gloria y victoria de su resurrección.
39
LA ADORACIÓN DE LOS SERES VIVIENTES Y LOS ANCIANOS. 5:8-10
Aquí hay una gran escena de alabanza que sucede de repente como consecuencia de que el Cordero
toma el libro. Los cuatro seres vivientes se juntan en la alabanza con los 24 ancianos, tienen las
arpas y las copas de oro.
El género del participio ´teniendo´ muestra que sólo los ancianos usan las arpas y lo tazones y no
los seres vivientes64. Las arpas expresan gran gozo y alabanza mientras que las copas de oro
denotan el ministerio sacerdotal de los redimidos. El incienso son las oraciones de los santos. La
oración aquí en la tierra es incienso en el cielo. A veces somos tentados de sentir que nuestras
oraciones no tienen valor, pero no es así para Dios. El Señor pone un valor alto a las intercesiones y
gemidos de los suyos.
Hay una distinción entre las alabanzas de los dos capítulos. En el capítulo anterior el tema de la
alabanza era por ser el CREADOR, aquí en el capítulo 5 alaban al Cordero con un cántico nuevo
por ser el REDENTOR.
En el griego hay dos palabras para “Nuevo”. Neos significa algo nuevo en cuanto al tiempo, pero
necesariamente es nuevo en género. Kainos describe una cosa que nunca ha existido antes. La
palabra aquí en v. 9 es Kainos. La redención de Cristo es algo nuevo que nunca había existido
antes. También por medio de su redención él trae a la vida un gozo y paz completamente nuevos.
En los vs. 9-10 hay un problema de texto que se debe notar y que tiene que ver con los pronombres.
Esto es si debieran ser “nosotros” o “ellos”. Si es “nosotros”, entonces claramente los ancianos
cantan su propia redención en la tercera persona en lugar de la primera. (Vea un ejemplo en Ex.
15.14-17).
64
Ryrie, op.cit., p. 42
40
juicios y de las actividades que realizará Satanás en esa época antes de la segunda venida de
Cristo.65
Comparación entre Mateo 24 y Apocalipsis
Mateo 24 Apocalipsis
Señales del fin “principio de Los sellos cap. 6
dolores” vv. 3–14
“La abominación desoladora” a la El anticristo (2 Tesalonicenses 2:3–12) cap. 13
mitad de los siete años (Daniel
9:27) v. 15
Gran tribulación vv. 16–28 Persecución de los judíos cap. 12
Segunda venida de Cristo vv. 29–31 El Rey de reyes cap. 19
Muchos detalles confirman esta conclusión. Por ejemplo, los eventos de Apocalipsis 6 corresponden
a las circunstancias que Cristo llama “el principio de dolores” en Mateo 24:3–14. El carácter y
actividades de la “bestia” de Apocalipsis 13 y 17 concuerdan con lo que se aprende de ella en
Daniel 7, 9 y 11. La mención de los tres años y medio de Apocalipsis 11:2; 12:6 y 14 concuerdan
con el mismo período de las profecías de Daniel 7 y 12.
La voz del ser viviente es como el trueno (Mt. 24:27), lo cual es simbólico de un tormento venidero.
El trono es de terror, majestad o juicio que procede del trono que representa el gobierno de Dios.
65
Orth, Stanford, op.cit.
41
La tempestad de la ira de Dios se acerca u está lista para romper en todo su furor. El grito es muy
breve, solo: “ven”. Puede ser traducido también, “vé”. La mayor parte de comentaristas
concuerdan en que la palabra mira no estaba en los textos originales.
El significado del primer sello ha provocado más discusión que los otros que le siguen. Algunos
sugieren que el jinete que viene montado sobre el caballo blanco representa al evangelio o a
Jesucristo (como en 19:11) y otros, que representa al anticristo. Sin embargo, los demás sellos son
circunstancias negativas y no representan a personajes específicos, sino condiciones y sucesos que
caracterizarán a esa época. También, es temprano en el libro para ver la segunda venida de Cristo
(cap. 19) o la victoria del anticristo (cap. 13).
Aunque el Anticristo será un líder mundial, el énfasis aquí se da a su victoria provisional y al hecho
de que tiene menos autoridad que el personaje del capítulo 19. Aquí aparece como alguien de
confianza que conquista el corazón de las multitudes, pero su verdadero carácter se manifiesta como
la bestia en la mitad de la tribulación.
El segundo caballo que Juan ve es de color bermejo, o rojo vívido como de sangre, (Ap. 12:3), lo
cual es símbolo de venganza y carnicería. Al jinete se le da el poder (autoridad) para quitar la paz
de la tierra y una gran espada. Un periodo de anarquía (1Ts. 5:3) se inicia en todo el mundo a pesar
de la conquista y promesas del anticristo (2Ti. 3.3).
Como Jesús dijo: “oiréis de guerras y rumores de guerras” (Mateo 24:6). Aunque el anticristo, líder
político, hará un tratado de paz con Israel (Daniel 9:27), habrá guerras entre muchas naciones. Es
lógico que las conquistas del primer sello requieran y provoquen un conflicto armado. Seguiremos
observando los motivos de sufrimiento de los habitantes de la tierra en ese tiempo.
42
EL CUARTO SELLO (6.7-8)
Mientras se experimenta todo esto, un cuarto sello se abre, y sale otro caballo aun más terrible. Este
es el último y el clímax de esta serie de juicios. El color del caballo no es un amarillo bonito, sino
es el color de la muerte, la palabra se traduce “verde” en Ap. 8:7; 9:4 y “verdosa” en Lv. 13.49;
14:37 refiriéndose a la lepra. Es entonces un amarillo medio verde como el de un cadáver.
Describe a este caballo como algo indeciblemente horrible.
El jinete tiene por nombre a la Muerte y el Hades. La Muerte no es una persona sino es el fruto del
pecado que ha entrado en el mundo. Aquí la Muerte es personificada como un poderoso rey
triunfante; tampoco el Hades es un ser, sino es el lugar donde va la parte inmaterial, del hombre
cuando su cuerpo muere. Aquí como un monstruo del Hades se personifica entrando en el mundo
de los vivientes causando asolación.
Los medios de esta plaga son los que Ezequiel llama “cuatro juicios terribles” (Ez. 14:21) que
cayeron sobre Jerusalén en su destrucción la espada, el hambre, la mortandad, y las fieras. Parece
que todo lo que ha precedido en los otros sellos se repite acá pero con más intensidad. Es también
el resultado acumulado de la anarquía y la escasez de los sellos. Todo este sufrimiento, no es
causado por la intervención directa de Dios, sino por calamidades permitidas por El. Una vez que
la obra restringidora del Espíritu Santo termina, todo lo que hace el hombre para traer paz y
abundancia sería inútil.
Una cuarta parte de la población del mundo será afectada. Esto será la destrucción más grande que
la humanidad jamás haya conocido, pero no es el fin de las calamidades porque cosas más terribles
se esperan bajo las trompetas y copas. La población del mundo en 1973 era aproximadamente
3.842´000,000 y aumenta más o menos 2% al año, o sea 75 millones de personas. Para el año 2,000
se calcula que la población será 6,494’000,000. Una cuarta parte de la población hoy será
aproximadamente 1,000’000 de personas, o más o menos toda la población de Europa y América
Latina.66
66
Datos tomados de la enciclopedia World Book, Vol. 1 pag. 344, edición 1973
43
A primera vista, esta escena difiere de los otros sellos, porque enfoca el sufrimiento de los santos en
vez de las condiciones que hacen sufrir a los habitantes de la tierra en general. Sin embargo, el
clamor de los mártires del cielo enfoca el juicio de los enemigos de Dios. Este sello es paralelo a la
enseñanza de Cristo: “Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de
todas las gentes por causa de mi nombre” (Mateo 24:9). Pero también enfoca la pronta
reivindicación de Dios ante los otros pobladores de la tierra que persiguen a los santos.
67
Véase Charles Ryrie, op. cit.
44
LOS SELLOS
1) Conquista
2) Guerra
3) Hambre
4) Muerte
5) Martirio
6) Terremoto
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enfatizar la urgencia del proyecto. Las instrucciones son claras: Suspender el juicio durante un
tiempo.
Designio de la Suspensión (vs. 3)
El propósito de la suspensión es que un grupo en particular puede ser sellado. Son judíos de
cada una de las doce tribus y realizan algún servicio particular para Dios. De alguna forma son
sellados. Si vienen implicada alguna señal o característica visible no se declara en el texto.
Algunos sugieren algo visible como Ez. 9:4 o como la gloria con la que resplandeció el rostro de
Moisés, pero un sello no tiene que ser visible para que sea real (Ef. 4:30). Principalmente es una
garantía de propiedad y seguridad, y estas dos ideas son evidentes en el sellar de estos 144,000.
Son propiedad de Dios, lo que significa que son gente redimida, y Dios los guarda con seguridad,
lo que quiere decir que tienen seguridad física frente a sus enemigos en la tierra mientras están
cumpliendo su servicio para el Señor.
68
J. A. Seiss, The Apocalypse, p. 161. Citado por Charles Ryrie, op. cit., p. 52
46
Cualquiera que sea la razón de que se omita a Dan de las tribus de donde vendrán los 144,000
elegidos, no acaba aquí el trato de Dios con esta tribu. Los danitas recibirán una porción de la tierra
durante el reinado milenial. Verdaderamente en Ez. 48:1 Dan encabeza la lista de las tribus cuando
se divide la heredad entre ellos (cf. también vs. 32). Así que la exclusión de Apocalipsis no es
permanentemente, ya que los dones y la llamada de Dios con respecto a Su pueblo incluyendo a
Dan, son sin arrepentimiento”.
47
Muchos de estos, sin duda, serán salvados creyendo el mensaje que predican los 144,000 en los
días de la tribulación.
Provisiones de la Salvación (vs. 15-17)
Servicio (vs. 15) Este grupo (junto con otros) servirá a Dios. “En su templo”, probablemente
indique algún servicio especial en el templo milenial.
Satisfacción (vs. 15-16) Están satisfechos porque gozan de la presencia de Dios. Dice el versículo
15, “el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos”. Su dote es el amparo,
pastoreo y protección de Dios. Están satisfechos porque gozan de las provisiones de Dios (vs. 16),
que incluyen no tener hambre ni sed, ni estarán expuestos al sol en su fuerza.
Suficiencia (vs. 17) La provisión final para la salvación de ellos mencionada en este capítulo es la
suficiencia del ministerio de pastoreo del Cordero. Dice el versículo que el “Cordero que está en
medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de agua de vida”. La mención de vida eterna
trae consigo la seguridad de que no habrá lágrimas. El Cordero de esta escena no es solamente la
satisfacción y suficiencia de estos redimidos en el mundo sino que Su presencia es seguridad. A la
vez los redimidos le sirven sin interrupción.
Estos dos grupos de Apocalipsis 7, los 144,000 y la multitud salvada que son mayormente gentiles,
demuestran claramente que la tribulación será un periodo de mucha salvación. A pesar de que el
cuerpo de los santos, conocido como la iglesia, será completado y raptado, y por tanto, la residencia
del Espíritu Santo en el mundo será, en un sentido especial, retirada, Dios no cesará de salvar a los
hombres que creen en Su Hijo, la actividad de la gracia de Dios no cesará mientras el tiempo
continúe.
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recapitulación. Este escritor piensa que la comprensión más sencilla de estos versículos favorece la
idea de sucesión.
a. Su Relación.- Primero Juan vio siete ángeles. Son un grupo distinto, hay rangos (Job 1:6;
Mt. 18:10; Judas 9) y están ante, o en la presencia de Dios. Con la presentación de estos
ángeles no se vuelven a mencionar los siete espíritus de Dios, que aún más indica su
relación especial con Dios y sus propósitos. (¿Uno de ellos podría ser Gabriel? Cf. Lc.
1:19).
b. Su Responsabilidad.- Tienen la responsabilidad de anunciar los juicios de trompetas. Esta
responsabilidad la tienen porque se les dan las trompetas (vs. 2). El sonido de trompetas
siempre va seguido de algo de importancia especial. El primer caso fue cuando la ley fue
dada (Ex. 19:16; 20:18; Jr. 4:5, 19; 1Co. 15:51-52; 1Ts. 4:16; Nm. 10:1; 1R. 1:39).
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No es necesario decir que esta cuestión no es la interpretación literal frente a la figurativa,
sino que es cuestión de hasta dónde se emplean los símbolos dentro del marco de la
interpretación literal o llana del libro. La interpretación consistente en relación al lenguaje
de estos versículos, parecería eliminar cualquier símbolo aquí. Como con frecuencia se ha
señalado, sería muy inconsistente entender estos juicios simbólicamente e interpretar estas
plagas de Egipto en forma llana y actual.
El juicio de la primera trompeta presenta un cuadro feo de devastación en la vegetación de
la tierra.
b. Segunda Trompeta (vs. 8-9)
El instrumento de segundo juicio se describe con una figura “como una gran montaña
ardiendo en fuego”. No hay que intentar hallar algo en la experiencia de esta descripción.
Realmente Juan no dice cuál será el resultado del juicio. La tercera parte del mar se
tornará en sangre, causando la muerte de una tercera parte de los seres del mar y la
destrucción de una tercera parte de los barcos del mundo. Las implicaciones de largo
alcance sobre tales juicios conmueven a la mente humana (Cf. Os. 4:1-3; Is. 2:16).
c. Tercera Trompeta (vs. 10-11)
El juicio de la tercera trompeta afecta el suministro de agua dulce en la tierra. Se volverá
amarga a causa de esto morirán muchos. El instrumento del juicio serán una gran estrella
que se llama Ajenjo. “Muchas variedades de ajenjo crecen en Palestina... Todas las
especies tienen un mismo sabor fuerte y amargo, lo cual hace que la planta se use como
símbolo de amargura, pesar y calamidad” (Jer. 9:13-15).
d. Cuarta Trompeta (vs. 12-13)
El cuarto juicio afectará al sol, la luna, las estrellas y la uniformidad del ciclo día-noche.
El sol, la luna y las estrellas serán heridas en una tercera parte, de forma que,
aparentemente, el ciclo de veinticuatro horas se reducirá a un ciclo de dieciséis horas. El
Señor mismo predijo en el discurso del monte del Olivar estas “señales en el sol, en la luna
y en las estrellas”, (Lc. 21:25; Is. 13:9; Ex. 10:21-23). A lo mejor este acortamiento de los
días y las noches es a lo que se refiere en Mt. 24:22 (aunque naturalmente este versículo
puede intentar decir que se acortará el número total de los días).
Al llegar a este punto, Juan vio un águila (no “ángel” como nuestra versión) anunciando
que vendrán calamidades. Estas se infligirán en “los que moran en la tierra”. Los métodos
de castigo serán las tres últimas trompetas de los ángeles que todavía han de sonar. Por
muy terribles que sena los primeros cuatro juicios de trompeta, los tres últimos serán
peores, y por lo tanto se les designa con el nombre de “ayes”. (Lc. 17:34-37; Mt. 24:6-8).
“La advertencia es que la quinta, sexta y séptima trompeta traerán consigo una nueva
calidad y grado del disgusto divino y el desastre consiguiente. Veremos el primer “ay” en
las langostas (9:1-11); el segundo, en los jinetes y ejércitos del Eufrates (9:13-21) y las
plagas con las cuales los dos testigos (11:5-6) dañan la tierra. El tercer “ay” lo vemos en la
entrega de la tierra a la adoración de la Bestia del capítulo 13 que es mucho peor que los
otros”.
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