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El perjurio y la reforma política

El gobierno del presidente Martín Vizcarra con el apoyo de expertos e instituciones promovió seis
proyectos de ley destinados a la reforma política que han sido desvirtuados, en su opinión, por el
actual parlamento, por lo que el 28 de julio en su mensaje a la nación estableció un nuevo
planteamiento de adelantar las elecciones para que el 2020 Ejecutivo y Legislativo cesen en sus
funciones.

Independientemente de la resolución de esta propuesta presidencial, que por lo que se ve, podría
terminar en empate, y todos acaban funciones el 2021, hay la necesidad de identificar cuál es el
problema público principal que debemos resolver a nivel de la política.

Para los ciudadanos, el problema central de la política y los políticos en el Perú, tiene que ver con
el no cumplimiento de la palabra y con la falsedad con la que suelen actuar políticos electos o
designados respecto de promesas, información y otras acciones hechas bajo juramento.

En democracias avanzadas y, en las que no lo son tanto, el perjurio es un delito penal. Realizar
cualquier afirmación falsa bajo juramento constituye delito de perjurio. Entendiéndose como
perjurio afirmar una falsedad, negar la verdad o callar la verdad, o decir una media verdad o
manifestar una afirmación falsa con intencionalidad o manifestar algo por cierto sin estar
plenamente seguro.1

Alemania en su código penal señala que cuando una persona hace falso juramento puede ser
sancionado con pena de prisión entre 6 meses o 5 años en casos calificados como menos graves.
También son penalizadas con prisión las declaraciones juradas, la negligencia para que se brinde
una falsa información, el soborno y la tentativa para prestar falso juramento.

En Francia, un falso testimonio bajo juramento ante un tribunal tiene 5 años de prisión y 75 mil
euros de multa, excepto si se retracta previamente antes que finalice el proceso. Tiene 7 años de
prisión y 100 mil euros de multa quién miente por banalidad o promesa de recompensa o quien
realiza un falso testimonio a favor o en contra de alguien. Y el perjurio en materia civil es
sancionado con 3 años de prisión. En el Reino Unido, si una persona juramentada ante tribunal o
persona competente por ley realiza una falsa declaración o hace que no se consigne la verdad será
culpable por perjurio como delito menor. Si se le condena por perjurio como delito grave será
sancionado a realizar trabajos comunitarios hasta por 7 años.

Los Estados Unidos, consigna que si una persona que prestó juramento o una promesa legal ante
tribunal competente o persona autorizada por ley, realiza una falsa afirmación o realiza una
afirmación falsa intencionalmente o manifiesta como cierto algo que no está seguro puede tener
pena privativa de la libertad por no más de 5 años.

En América Latina también se considera el perjurio como delito penal. En Chile se establece que
cuando se falta la verdad en declaración prestada bajo juramento o promesa exigida por ley se
castiga con pena privativa de la libertad en cualquiera de sus grados. En República Dominicana, se
penaliza hasta con dos años de prisión a quien afirme un hecho falso o prometa decir la verdad
ante funcionario o persona competente para recibir el juramento. Finalmente en el Ecuador se
sanciona por faltar a la verdad al confesar, informar o traducir ante autoridad competente hasta

1
Neciosup Santa Cruz, Víctor. Informe Temático N° 156/2014-2015. Congreso de la República del Perú
con 5 años de prisión. El falso testimonio sin juramento tiene hasta tres años de prisión y faltar a la
verdad ante notario público, tiene hasta 10 años de prisión.

Hanna Arendt en “Verdad y Política” comentando a Platón señaló que “Siempre se vio a las
mentiras como una herramienta necesaria y justificable no sólo para la actividad de los políticos y
los demagogos, sino también para la del hombre de Estado”.

En el Perú, requerimos recuperar la confianza de la política (autoridades electas o designadas) y


una de las formas tiene que ver con recuperar el valor de la palabra dada en el ejercicio público,
donde muchas veces se exagera o se omite información adrede en declaraciones juradas, Acto que
busca salir bien librado de requisitos usando para ello exageraciones, ausencias, especulaciones o
simplemente la mentira escrita u oral.

Incorporar el perjurio como delito, también depende de este parlamento. ¿Se atreverán?

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