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*No puedo alcanzar imaginar el tumulto de grandes oraciones que no llegaron a alcanzar el papel y

que se perdieron para siempre en la mente de sus creadoras y creadores. Imagino las memorias y las
paginas ardiendo y quedando petrificadas en Pompeya para siempre en el olvido. Troya y tantas
muertes e incendios. ¿Cuántas palabras no hubieron de decirse nunca y aun tuvieron que ser más
grandes que las que conocemos? Las ideas perduran por reproducción como nosotros, células
sexuales, por un lado, padres, familiares, educadores, libros, por el otro. Útero y cultura. Algunos
linajes de ideas se extinguen en el tiempo, como todo lo que posee vida, o a todo lo que procuramos
insuflarle una, como los imaginarios. Los genes fabrican estos cuerpos para transitar hacía otros
cuerpos hasta llegar a los callejones sin salida de la enfermedad, la esterilidad o hasta que el deseo,
o la muerte logren impedirlo. Son ellos, los genes, los que son inmortales (o casi). Las ideas o las
creencias subsisten dentro de la cultura pasando de cuerpos a cuerpos igualmente, mueren o
subsisten con nosotros o fuera de nosotros. Se amontan igualmente en el ostracismo y en la carencia
de significación. Las oraciones, elocuencias y grandes palabras, son como los huesos que llenan
todo el subsuelo, en verdad, son menos que eso, ni siquiera polvo. Si las grandes ideas, y el acceso
al conocimiento fueran a salvar al mundo, o hacerlo menos peor lo hubieran hecho hace mucho
tiempo. Los tiranos siempre han tenido la puerta más grande a las bibliotecas y a las mejores
universidades, pese a esto, como todos los presidentes, lideres o caudillos de la actualidad con sus
maestrías, doctorados y sus impresionantes bibliotecas no han abandonado la tiranía al estar mejor
amaestrados, al estar más avezados en humanismo, o democracia. No solo el conocimiento no nos
hará libres, sino, que nos hace igualmente esclavos a los que lo ignoramos todo. Si el conocimiento
es poder, es una cualidad maldita. Ahora que el acceso a las ideas es mucho más general ¿somos
menos desgraciados? ¿se culpará a los que no quieren saber de todas las desgracias, de por ejemplo
la democracia? Si hemos sido cada día más desgraciados es por el mero hecho de que para las ideas
el universo es irrespirable, ellas son inmateriales, y para nosotros que no somos más que una
maquinaria para el movimiento de las células, con una doble carga evolutiva de adaptación; órgano
(cerebro) y órgano (cultura). No nos queda más que hablarnos con tanta certeza frente al espejo que
casi nos convencemos que, en vez de ser partículas de materia imbécil, fuimos los elegidos por los
dioses o los fantasmas. Como aquellos espejismos que queremos socorrer con el lenguaje nada de
esto nos apartará del matadero. Mientras vivamos juntos aquí hacemos el destino, el de oprimirnos
los unos a los otros y todo cuanto alcancemos.

-Hablar sobre el conocimiento ancestral que se transmitió oralmente y que fue un lenguaje mucho
más sencillo y más discernible para la naturaleza;
-los primitivos tenía la misma capacidad cerebral que nosotros, solo que no habían desarrollado la tecnologia,
ni llegado al perfeccionamiento ni a la sistematización de los pensamientos en teorías, tesis, verdades
absolutas y dogmas

- conversaciones con cris al respecto; Cris: Y mira que para los ejemplos que te pongo el conocimiento
siempre es cambiante, es orgánico, nunca se queda como una verdad absoluta, si no que va mutando a
través de la experiencia, del error... Nunca se queda quieto.

S: yo creo que eso depende de la cultura del los pensamientos que premia y los que castigala cultura se ha encargado de
hacer vivir o de exterminar muchas ideas en la historia se ve, como las voces por ejemplo de las personas subordinadas
quedan olvidadas

Cris: Sí y es por eso que precisamente la tradición oral está muriendo, o bueno está prácticamente muerta.
S: pero igual cuando hubo tradición oral

y casi nadie sabía leer o escribir también hubo imposición y tiranía


a no ser que nos remontemos hasta lxs cazadorxs-recolectorxs
que eran nómadas
y vivían en un mundo en el que los humanos no había proliferado tanto

Si pensamos en roma, o en Grecia. Podemos decir que la tradición oral forjaba la cosmogonía en un panteón. Poseían sus
memorias ancestrales e inclusive mitos fundacionales super fantásticos. Antes de usar por primera vez un alfabeto fenicio
para escribir, los griegos llevaban filosofando cientos de años dentro de la tradición oral. Eso no les impidió por ejemplo,
creer que todos los que estaban fuera de la polis, osea fuera de las murallas de Atenas eran unos brutos que no valían nada,
las mujeres era valoradas como "objetos" de menor valor que un esclavo
Tampoco impidió a los romanos invadir grecia
ya existía la escritura
pero casi todo lo que se enseñaba era oral
no sé
abría que analizar muchas cosas. El rito, el nacimiento del Estado, el direccionamiento del estado del conocimiento y la
memoria oral.

Cris:
Si tienes razón, la religión no más debió haber
empezado con un orador... igual creo qué hay
conocimientos que no están mal tenerlos y te dan
libertad de elegir cómo cuidarte por ejemplo, hay
otros que simplemente se imponen,
Y debes seguirlos
Fin de la conversación

S:
algo puedo sacar de todo lo que hablamos
y de pronto deba no descuidar otro tipo de conocimientos
más simples, más basicos o más espontaneo
que eran mucho menos complicados porque no estaban imbuidos dentro de sistemas intelectuales, ni sistemas sociales

*A qué sazón seguir en este mundo, en qué contener estas horas siempre tan desoladas, en los
propios artificiosos rencores en los que forje esta suerte tartamuda de culpas.
Debería abrirme las venas como un diestro anatomista, y usarlas en todo su largo como unidad de
medida, como los centímetros que coronen mi reino sobre el vacío y mi cuerpo abrazado por la
tierra.
Si me muestro licencioso en la descomposición es porque prefiero que mi corazón nutra la tierna
edad los gusanos, que mi sentimiento se procure un ala en el alma de los buitres y una ventana a la
tierra más profunda en los élitros de los escarabajos mortecinos. No quiero las cenizas de un amor
consumado en la llama, sino, uno que atraviese el mundo en la sangre de las plantas y las hojas de
un plumaje. En el estómago que empuja a otro ser hallaré mi testamento.
Lamento realmente el día que morí, cuando deje de mirar aquellos ojos con el amor que me
indicaban y ellos a su vez dejaron de mirarme un eternidad en la que soy prisionero como un
inmortal marchito en la vergüenza, todavía en la muerte me procure otra alienación de aquella de la
que nombraba la única libertad que no sembraba sus pilaras sobre la muerte. Me hice de nuevo este
acervo de palabras inútiles sobre el dolor como tantas veces en mi vida, para que ellas me lleven
más adentro, tan adentro que su pronunciación empieza a tambalearen la carencia del oxígeno. Sigo
llamando a quien no puede contestarme. Soy culpable, soy el desierto y la sal que marchita el brillo
en ojo de los niños. Ame con odio, a quien me amo con un comprensión. Que me dispense ahora,
ahora que amo por sobre todo ese dolor que afortunadamente me perdona un poco más de mi vida,
poco a poco, por ese último acto de amor doy gracias.

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