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DROGAS ESTIMULANTES

Como el nombre sugiere, los estimulantes son una clase de drogas que intensifican la
actividad cerebral, ocasionan un aumento en la agudeza mental, en la atención y en la
energía, que son acompañados por un alza en la presión arterial y un aumento en
la velocidad del corazón y en la respiración. Históricamente los estimulantes se utilizaban
para tratar el asma y otros problemas respiratorios, la obesidad, trastornos neurológicos y
una variedad de otras dolencias.

Las consecuencias del abuso de estimulantes pueden ser peligrosas. Cuando se toman
dosis altas de algunos estimulantes repetidamente durante un corto período de tiempo, se
pueden producir sentimientos de hostilidad o de paranoia. Además, el uso de dosis altas
de un estimulante puede ocasionar que la temperatura del cuerpo suba peligrosamente y
causar latidos irregulares del corazón. También existe la posibilidad de un fallo
cardiovascular o convulsiones letales.

ESTIMULANTES MENORES: Los estimulantes menores, son unas


drogas estimulantes del sistema nervioso central, es un grupo de sustancias que aceleran
el funcionamiento habitual del cerebro, provocando un estado de activación que puede ir
por ejemplo, desde una mayor dificultad para dormir, hasta reacciones de ansiedad y
depresión. Los estimulantes menores son la teobromina (extraída del chocolate),
lateofilina (proveniente del té) y la cafeína (proveniente del café). Todas se agrupan, por
su estructura química, como metilxantinas

(este podrías ser el ejemplo)

NICOTINA Y EL TABACO

El tabaco es una planta cultivada por sus hojas, las cuales se fuman, se mastican o se
inhalan. El tabaco contiene un químico llamado nicotina. La nicotina es una sustancia
adictiva. Los productos del tabaco sin humo se colocan ya sea en la boca, la mejilla o el
labio y se chupan o se mastican, o se colocan en las fosas nasales. La nicotina de estos
productos se absorbe en la misma proporción que el tabaco que se fuma y la adicción es
igualmente muy fuerte. Tanto el consumo de tabaco para fumar como del tabaco sin humo
ofrecen muchos riesgos para la salud.

El uso de la nicotina puede tener muchos efectos diferentes en el cuerpo, puede disminuir
el apetito: el temor a aumentar de peso hace que muchas personas no quieran dejar de
fumar, estimular el estado anímico, dar a las personas una sensación de bienestar,
incrementar la actividad en el intestino, crear más saliva y flema, incrementar la frecuencia
cardíaca alrededor de 10 a 20 latidos por minuto, incrementar la presión arterial a 5 a 10
mm Hg, posiblemente causar sudoración, náuseas y diarrea, estimular la memoria y la
vigilia: las personas que consumen tabaco con frecuencia dependen de este para
ayudarlos a cumplir ciertas tareas y desempeñarse bien.
ESTIMULANTES MAYORES: Como estimulantes mayores se consideran la estricnina,
las anfetaminas y derivados (metilfenidato, pemolina), y la cocaína.

(Ejemplo)

ANFETAMINA

Las anfetaminas son unas drogas estimulantes muy adictivas. Aceleran las funciones del
cerebro y del cuerpo. Las anfetaminas se pueden tragar, fumar, esnifar o inyectar.

Independientemente de cómo se tomen, las anfetaminas causan un rápido subidón,


haciendo que el consumidor se sienta lleno de energía, poder y en un estado de alerta
máxima. Estos "elevadores" aceleran la frecuencia cardíaca, la respiración y la tensión
arterial y también pueden causar sudoración, temblores, dolores de cabeza, insomnio y
visión borrosa, su uso prolongado puede causar alucinaciones y paranoia intensa. Incluso
después de que las personas las dejen de consumir, pueden seguir teniendo problemas
como la agresividad, la ansiedad y el deseo incontenible de consumirlas.

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