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LA APLICACIÓN E INTERPRETACIÓN
DE LAS NORMAS JURÍDICAS. CLASES DE INTERPRETACIÓN. LA ANALOGÍA. LA
EQUIDAD. LA EXÉGESIS, LA DOGMÁTICA Y LA CRÍTICA.
1.-TEORÍA DE LA INTERPRETACIÓN
La realización del Derecho en la vida social tiene lugar en un doble plano, el de la interpretación
y el de la aplicación. Ambas actividades han de llevarse a cabo en íntima conexión de manera que
no se conciba al intérprete como un autómata pero tampoco dotándole de excesivo protagonismo.
De esta forma, y como afirma el profesor DE CASTRO, el conjunto de normas que constituyen un
ordenamiento jurídico no sólo son una representación de la realidad social, sino algo que tiende a
realizarse socialmente, y para ello, como primera actividad, se requiere de la interpretación, que
es tanto como averiguar QUÉ REGLA JURÍDICA es aplicable al caso concreto.
En sentido genérico el término interpretación se utiliza para designar la ejecución de una obra
literaria o artística. El intérprete dramático y el intérprete musical son intermediarios en la
comunicación intelectual o estética, que se produce entre el autor y el público destinatario de la
obra.
A partir de finales del siglo XIX básicamente, la interpretación ha seguido dos modelos que, en
principio, corresponden con dos momentos históricos bien determinados:
2. El segundo momento está relacionado con la crisis del mencionado proyecto emancipador
y la confianza en el progreso. Especialmente, se encuentra vinculado a la aparición de lo
que se ha de dominado la filosofía de la sospecha (Marx, Niestzshe, Freud). El eje central
estaría ahora constituido por la idea de que el objeto, el texto, oculta algo. En este sentido,
el objeto a interpretar se presentaba bajo dos aspectos, utilizando la metáfora del iceberg:
uno de ellos es el conocido, que resulta más o menos explícito, pero existe otra parte, el
aspecto sumergido, que no es inmediatamente apreciable y que se encuentra de alguna
En cuanto a las diferentes concepciones sobre la interpretación, hay que señalar que el
concepto que se sostenga acerca de la misma se encuentra íntimamente condicionado por la
posición del intérprete sobre el Derecho en su conjunto y, en particular, por el reconocimiento de
unos criterios de justicia situados por encima del Derecho positivo.
a. En este sentido, las escuelas iusnaturalistas parten de la existencia de unos criterios
de justicia que deben presidir la elaboración y aplicación de la norma. Por el
contrario, las escuelas positivistas sostienen que el Derecho sólo viene integrado
por normas y no por valores éticos.
b. En este sentido, nos referiremos a las teorías normativistas y decisionistas.
A-En cuanto a las teorías normativistas, éstas propugnan la primacía de la norma escrita en el
proceso de interpretación del Derecho e incluyen la teoría legalista, la teoría de la voluntas legis y
la teoría conceptualista.
a) que en los modernos sistemas políticos concurren a la formación de la Ley una gran
variedad de personas, instituciones, órganos legislativos… que hace imposible
determinar cuál sea la intención o voluntad del legislador.
b) Que una vez constituido el texto de la ley, se desgaja ésta del pensamiento del
legislador para vivir una vida propia e independiente; se convierte en una entidad,
separada de su fuente directa y esencialmente subordinada al medio social y a sus
transformaciones.
B-En cuanto a las teorías decisionistas, éstas parten de la primacía del caso concreto en el
proceso de interpretación y sostienen que el Juez no resuelve cada caso partiendo de una
interpretación abstracta de las normas sino que intuye primero la resolución justa y busca después
la norma con que fundamentarla. Por tanto, estas teorías se muestra partidaria de autorizar al Juez
para prescindir de la norma legal cuando no le parezca equitativa
2. TEORÍA DEL DERECHO LIBRE - Que entiende que es imposible que las leyes puedan dar
respuesta a todas las necesidades sociales según las variables con las que éstas se presentan en
cada caso concreto y por tanto se debe dejar libertad al juez en la búsqueda y fijación del sentido
de la norma en vez de someterlo a investigar lo que el legislador quiso. Para ello, el juez debe
llevar a cabo la realización de deducciones lógicas para averiguar lo que la norma significa en sí
para adaptarla al caso, aunque ello suponga modificar la ley.
La aplicación del derecho es una operación sumamente importante. Consiste en una actividad de
determinación de los efectos y consecuencias jurídicas que produce la subsunción del hecho en la
hipótesis legal prevista. La aplicación de las normas implica a su vez la realización de 3
operaciones:
BÚSQUEDA; para hallar la norma aplicable al caso de entre todas las normas que componen
el ordenamiento el aplicador jurídico debe buscar la que resulte propia al caso concreto. Para esta
operación no existen reglas determinadas sino que el jurista debe servirse de la intuición, su
conocimiento y experiencia.
CRÍTICA; una vez encontrada la norma aplicable, debe proceder a su crítica puesto que la labor
del aplicador del Derecho no se limita a una mera subsunción de los hechos a la norma legal. La
crítica se realiza en una doble vertiente:
- Crítica FORMAL; comprende operaciones tales como corregir defectos gramaticales o erratas
de la norma pero sin que pueda el juez subsanar vicios sustanciales de redacción o
coordinación conceptual.
1. Que la norma aplicable sea de rango inferior a la ley, en cuyo caso no debe ser aplicada.
En este sentido, el Art. 6 de la LOPJ dispone que los Jueces y Tribunales no aplicarán los
reglamentos o cualquier otra disposición contraria a la CE, a la ley o al ppio de
jerarquía.
2. Que la norma aplicable tenga rango de ley y el Juez o Tribunal estime que es contraria a
la CE. En estos casos hay que distinguir:
En cuanto a la determinación de la fuerza imperativa de la norma, baste aquí decir que las
normas del ordenamiento jurídico español son aplicables a los españoles y a los extranjeros que se
encuentren en territorio español, y, en ciertas materias, a los españoles que se encuentren en el
extranjero. En cuanto a la entrada en vigor, esta se produce a los 20 días de su completa
publicación en el B.O.E si no dispusieren de otra cosa, y el cese de su vigencia viene dado,
principalmente por su derogación; (no obstante, son objeto de estudio en otro tema del programa).
Afirma PUIG BRUTAU que la interpretación consiste en la operación jurídica básica dentro del
conjunto de actividades en que consiste la aplicación del Derecho, ya que para individualizar y
aplicar las normas hace falta empezar por determinar su sentido.
Fue SAVIGNY quien, en el siglo XIX, estableció los medios principales de interpretación de las
normas que han pasado a convertirse en clásicos, convirtiéndose en puntos de referencia obligados
para la mayoría de los juristas. Estos medios o elementos son: literal o gramatical; lógico y
teleológico; sistemático e histórico. En este sentido se pronuncia el Código Civil, tras la
modificación por ley de Bases de 1973 al establecer en el Art. 3.1 como regla hermenéutica que
las normas se interpretarán según el sentido propio de sus palabras, en relación con el contexto,
los antecedentes históricos y legislativos y la realidad social del tiempo en que han de ser
aplicadas, atendiendo fundamentalmente al espíritu y la finalidad de aquellas.
Lo primero que llama la atención de este artículo es que el legislador se haya decidido a
introducir en el Código Civil criterios hermenéuticos. Y ello, porque siempre había existido una
polémica en torno a si era o no misión de los códigos establecer normas sobre la interpretación,
habiendo estado bastante difundida la tesis negativa. La tesis negativa tiene en cuenta las ventajas
de una mayor libertad por parte del intérprete y remite el problema de los criterios utilizables al
campo de la doctrina. La tesis afirmativa pondera los beneficios de cierta uniformidad en el modo
Diez Picazo que mantiene una tesis negativa, dice que lo que hay que conseguirse es una cierta
uniformidad en el modo de proceder, no una uniformidad total. Por otra parte, también dice que los
criterios que la norma acoge no son cerrados y que se deja al intérprete la utilización de otros y,
sobretodo, se le deja en libertad respecto a su utilización.
Estudiaremos cada uno de los criterios a los que hace referencia el código
No basta casi nunca como criterio interpretativo porque las palabras pueden tener distintos
dignificados.
En segundo lugar a la norma con la institución jurídica a la que pertenece hasta llegar a los
ppios fundamentales del sistema, se trata de ver el lugar de encuadramiento de la norma en
el sistema.
a) Precedentes remotos: Derecho romano y los demás derechos históricos que han
contribuido a la formación del nuestro, entre los que destaca el germánico y el
canónico.
Es un criterio progresivo, pues permite dar a la Ley el sentido que corresponde al momento
de su aplicación, que no puede ser el mismo que el del momento de su formación; sin
embargo, tiene el riesgo del relativismo y de la inseguridad jurídica, y así la jurisprudencia
ha recalcado la necesidad de su uso muy prudente “ porque envuelve grave riesgo de
arbitrariedad al entregar el criterio subjetivo del Juez apreciaciones tan delicadas como la
de la conciencia moral de un pueblo”
Para completar y controlar los resultados de la interpretación gramatical, hay que penetrar
en el pensamiento y el espíritu de la Ley. Esta tarea se realiza a través del elemento lógico o
racional. Pero este elemento no siempre ha tenido el mismo significado. De Castro hace
notar que la Doctrina Antigua, y con ella Savigny, entendía por interpretación lógica la
dirigida a buscar el fin o motivo de la Ley, mientras que en los autores más modernos, pro
el influjo del positivismo jurídico, se va reduciendo el influjo del elemento lógico a la
relación abstracta, formal, de las distintas partes de la norma y a las conclusiones que
puedan obtenerse con el mero razonar lógico.
La LOPJ, ART 5.1, proclama un principio de interpretación conforme a la CE al afirmar que los
Jueces y Tribunales interpretarán y aplicarán las leyes y reglamentos según los preceptos y
principios constitucionales, conforme a la interpretación que de los mismos resulte de las
resoluciones dictadas por el TC en todo tipo de procesos.
- Hay que entender que la CE constituye el “contexto” necesario de todas y cada una de las
Leyes, Reglamentos y normas del ordenamiento a efectos de su interpretación y aplicación, aunque
sea un contexto que a todas excede en significado y rango.
La CE en su artículo 10.2 dispone que “Las normas relativas a los derechos fundamentales y a
las libertades que la Constitución reconoce se interpretaran de conformidad con la Declaración
Universal de Derechos Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas
materias ratificados por España”
II-Clases de Interpretación
1. Privada o Doctrinal, que es la que llevan a cabo los teóricos o científicos del derecho
en el ejercicio de su actividad investigadora o de reflexión. Es un tipo de interpretación que
no se dirige a la aplicación de las normas.
2. Pública o Usual, que es la llevada a cabo por los órganos del Estado en el ejercicio de
su función y que está especialmente orientada a la aplicación del derecho, destacando la
interpretación judicial.
3. Interpretación auténtica, o interpretación del legislador con una ley posterior que
explica el contenido de una ley anterior, sin que sea necesario que la disposición venga de
la misma persona aunque sí que tenga el mismo rango. La doctrina ha puesto objeciones en
cuanto que la labor del legislador es dictar normas y no interpretarlas.
A diferencia de las normas ordinarias, las leyes de carácter interpretativo tienen carácter
retroactivo, con lo que sus efectos se retrotraen a las relaciones creadas con anterioridad
aunque sean objeto de un pleito pendiente. Solo se salvan de la retroacción los negocios ya
sentenciados o transigidos
4. Cautelar, que es la llevada a cabo por personas que asumen un papel de asesoramiento,
como notarios, abogados, consultores etc.
Hay que tener en cuenta, que, como viene exigiendo nuestro TS, las leyes prohibitivas,
sancionadoras y limitativas de la capacidad de obrar y del libre ejercicio de los derechos no son
susceptibles de interpretación extensiva. En cambio, las normas de derecho singular o excepcional
admiten, con algunas reservas, esta interpretación.
La existencia de deficiencias y lagunas en la Ley ha sido admitida de antiguo por la ciencia y las
legislaciones.
Sin embargo, a partir del siglo XIX se ha negado su existencia por algunos sectores científicos y
se ha originado, en torno a la existencia, una viva discusión.
La tesis contraria a la existencia de lagunas del ordenamiento legal, propugnando la “plenitud
del ordenamiento jurídico”, se ha fundado unas veces en la fuerza de expansión lógica del
Derecho positivo y otras en la existencia de una norma tácita complementaria que encierra el
sistema jurídico abrazando y comprendiendo negativamente todos los casos no previstos.
Esta teoría de la plenitud del ordenamiento ya ha sido objeto de críticas muy fundadas. Con
razón se ha observado que la lógica es impotente para llenar todos los vacíos resultantes de la
insuficiencia de los textos.
-La analogía-
I- Concepto
II- Requisitos
Para que proceda la aplicación analógica en nuestro derecho es necesario que concurran los
siguientes requisitos:
El Código Civil se refiere a estos requisitos en el ART. 4.1 al establecer que procederá la
aplicación analógica de las normas cuando éstas no contemplen un supuesto específico pero
regulen otro semejante entre los que se aprecie identidad de razón. El apartado 2 del ART. 4
establece unos límites, al afirmar que las leyes penales, las excepcionales y las de ámbito
temporal no se aplicarán a supuestos ni en momentos distintos a los comprendidos expresamente
en ellas.
1ª- En leyes prohibitivas y leyes sancionadoras que por regla general deben ser
interpretadas de una manera restrictiva
3ª- Tampoco deben ser analógicamente extendidas las normas del llamado derecho
excepcional y ello por su mismo carácter, pues si el Derecho excepcional es aquel que está
establecido contra “tenorem rationis”, no será posible apreciar fuera de su estricto marco la
“identidad de razón” de que habla el artículo 4.1
1. Analogía legis, que es aquella en la que se parte de una norma concreta y sobre la base de
su razón o idea fundamental, se aplica a casos idénticos en su esencia jurídica. Se afirma
que en ella, se va de lo particular a lo particular. Es la admitida por el CC 4.1
2. Analogía iuris, que por el contrario, procede cuando se toma por base no un precepto
particular sino un conjunto de supuestos y por vía de inducción se extraen ideas o
principios para deducir de ellos consecuencias y aplicaciones no previstas en ninguna de las
disposiciones de la ley. (Se diferencia de los Principios Generales del Derecho porque ellos
tienen un contenido más amplio).
4.-LA EQUIDAD.
I-Concepto:
Esta palabra procede del latín aequitas y su contrario es iníquitas (iniquidad) y su adjetivo
inícuus (inicuo), que se emplean con un valor bastante más extenso. Es la justicia del caso
concreto y particular.
Con Pacheco, encontramos que la equidad ha sido considerada como juris legitimi enmendatio
(legítima corrección del derecho), según Aristóteles; como legis supplementum (suplemento de la
ley), que debía suplir a la ley, y, a la cual debía acudirse para interpretar ésta y que había de
prevalecer en caso de duda según diversos aforismos romanos y justinianeos. La libertad o
licencia que otorga la equidad no debe ser confundida con el enfoque jurídico personal
parcializado por momentáneas conveniencias, o favoritismo que tuerce la rectitud de la justicia.
“Todo el movimiento de ideas que se agrupa hoy bajo las banderas de la Escuela del Derecho
libre, de la teoría sociológica del Derecho y de la jurisprudencia de intereses, ha logrado abrir a la
equidad los ventanales de la interpretación y la aplicación del Derecho al proclamar, como canon
fundamental, que el juez debe investigar minuciosamente las circunstancias y situaciones sociales,
que son como el subsuelo del caso jurídico sometido a su consideración, y para poder juzgar
adecuadamente todas estas particularidades debe gozar, frente a las reglas del Derecho, de la
mayor libertad posible" (José Castán Tobeñas)
Como afirmaba CICERÓN puede decirse que es más fácil reconocer una injusticia que definir
la justicia e igualmente es más fácil tener el convencimiento de que una solución es equitativa que
tener el acierto de definir la equidad. No obstante, puede ser definida como una regla de
interpretación, y en su caso de aplicación de las leyes consistente en un criterio general de
rectitud y de sentido de la justicia natural que deberá ponderar la aplicación de las normas al
caso concreto. La idea de la equidad gira en torno a distintas concepciones, de las que se extraen
sus funciones:
a) Por un lado, sirve para FLEXIBILIZAR la norma cuando de la rígida aplicación de la misma
resultara una injusticia manifiesta; así, BARTOLO, en sus Comentaria ad Digestum afirmaba
el ppio Aequitas praerfetur rigore iuris (se prefiere la equidad al rigor del derecho).
La equidad, como afirma CASTÁN, se proyecta sobre un campo de actuación distinto del de la
analogía; así, mientras la analogía suple la falta de ley, la equidad supera las deficiencias de los
preceptos legales existentes cuya aplicación provocaría una solución injusta.
En la Ética a Nicómaco de Aristóteles lo equitativo y lo justo son una misma cosa; y siendo
ambos buenos, la única diferencia que hay entre ellos es que lo equitativo es mejor aún. En todo
caso, la dificultad está en que lo equitativo siendo lo justo, no es lo justo según la ley, sino que es
una “dichosa rectificación de la justicia rigurosamente legal”
La causa de la diferencia entre justicia legal y justicia equitativa es que la ley necesariamente es
siempre general y que hay ciertos objetos sobre los cuales no se puede regular convenientemente
por medio de disposiciones generales. Y eso sucede en todas las cuestiones respecto de las que es
absolutamente inevitable decidir de una manera puramente general, sin que sea posible hacerlo
La equidad no es incompatible con la justicia; sino que, al contrario, aquilata el valor de ésta, lo
afianza, le da vida. La equidad atenúa el efecto de la norma de derecho positivo, disminuye el rigor
de la ley cuando ésta es concebida como contraria a los principios de justicia; pero no es una
fuente del derecho.
Por la justicia, se busca educar a los hombres, sobre la base de la recompensa y castigo, para
una convivencia social armoniosa.