Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
¿QUE ES LA RECAÍDA?
Nada nos obliga a recaer, podemos elegir, la recaída nunca es un accidente, indica que
aun tenemos reservas con nuestro programa. Empezamos a menospreciarlo y a darnos
pretextos para eludirlo en nuestra vida cotidiana.
La segunda definición es más específica de las enfermedades adictivas: una recaída en una
enfermedad adictiva es un regreso a pensamientos, actitudes, sentimientos, emociones y
comportamientos que conducen de nuevo a la adicción activa.
Mire más de cerca esta segunda definición y notará que, primero, una persona regresa a
sus viejos patrones de pensamiento y de sentimientos- las viejas actitudes y conductas-
luego reasume su adicción activa.
¿Qué hace recaer a la gente? No existe una respuesta sencilla o definitiva para esta
pregunta. Las razones varían, dependiendo de las personalidades y circunstancias
individuales. Rara vez es una sola razón por la que se recae.
Asimismo, parece ser que la gente recae por no haber hecho lo que podría haber
prevenido esa recaída. Como se diría en A. A. por no utilizar las herramientas del
programa.
Las personas que no aceptan el hecho de que son adictas y que no sienten el dolor que su
adicción ocasiona, generalmente no hacen lo que necesitan hacer para recuperarse.
Durante la recuperación pueden aparecer viejos fantasmas. La vida puede volverse otra vez
monótona, aburrida y sin sentido.
Es posible que nos cansemos mentalmente de repetir nuestras nuevas ideas y físicamente de
nuestras nuevas actividades, aunque sabemos que si dejamos de recibirlas empezamos otra vez
con nuestros viejos hábitos.
Tarde o temprano volvemos a caer en la ilusión de que las drogas nos hacen la vida más fácil.
Creemos que pueden cambiarnos y olvidarnos que estos cambios son mortales. Cuando pensamos
que las drogas resolverán nuestros problemas y olvidamos lo que pueden hacernos estamos de
verdad en un apuro.
Puede que nos enojamos con cualquier persona o cosa y estemos resentidos, que comencemos a
rechazar a quienes están cerca de nosotros. Nos aislamos y nos hartamos muy rápido de nosotros.
Retrocedemos a nuestros patrones de conducta más enfermos sin tener siquiera que consumir
drogas.
Hay algo en nuestra personalidad autodestructiva que nos pide a gritos el fracaso. La mayoría
sentimos que no nos merecemos el éxito. Es algo muy común entre los adictos. La autocompasión
es uno de nuestros defectos más autodestructivos, nos consume toda la energía positiva.
Los síntomas y los sentimientos que tuvimos al final de nuestra adicción activa volverán y esta vez
más fuertes que antes: falta de gratitud, la soledad que nos destruye internamente, la
autocompasión, el falso orgullo, y el uso de sustancias casi siempre viene a continuación.
Porque se falla en hacer las cosas que podrían ayudarnos a evitar la recaída.
13. Fantasear sin hacer nada: el síndrome de “si tan solo”, deseando escapar o ser
rescatado.
15. Deseo inmaduro de ser feliz: querer se feliz, sin definir que es necesario para serlo.
19. Hábitos irregulares de comida: Comer demasiado o muy poco. Una dieta bien
balanceada es reemplazada por “comida chatarra”.
23. Periodos de depresión profunda: por lo general ocurren cuando no hay estructura
y se magnifican con fatiga y hambre. Tiende a aislarse a irritarse o enojarse,
mientras que al mismo tiempo te lamentas diciendo o pensando: a nadie importo.
26. Estar a disgusto con la vida: comenzar a pensar que “las cosas están mal, que mas
a si me drogo”.
27. Rechazo abierto a la ayuda: evitar las fuentes de ayuda (en ocasiones
abiertamente, con enojo y otras veces silenciosamente, con aislamiento).
32. Perdida total de autoconfianza: sentir que no puedes salir de la trampa, aunque
trates de hacerlo.
33. Resentimientos irracionales: enojo hacia el mundo en general, hacia algún chivo
expiatorio o hacia ti mismo.
35. Soledad, frustración, enojo y tensión abrumadores: pensar que la única opciones
intoxicarte (miedo a la locura o suicidio, con sentimientos de desesperación y
desesperanza).
36. Uso de alguna droga a la distinta: pensar que con otra droga no pasa nada.
38. Perdida de control: A veces después de algunos patrones de uso controlado. Sin
embargo, el uso vuelve a ser tan o mas severo que cuando dejaste de usar.