Está en la página 1de 9

El Clima y condiciones geográficas

Buenos días, quiero precisar que las opiniones en los diferentes foros
deben tener un sustento y ser aportes muy valiosos con información de
fuentes confiables. Me preocupa que se indique que: El clima influye en
las obras, esto es una verdad que todos conocemos. Pero de qué manera,
el calor, la altura, la lluvia, la nevada, etc. afecta en el rendimiento y la
productividad? Esto es importante porque las empresas y las obras no
pueden parar porque llueve o porque nieva. Que soluciones planteamos
como solución. Estoy criticando sus respuestas y eso es para todos los
grupos. Estamos en una maestría, ya no es pre grado. Exijo más seriedad
y responsabilidad a todos los participantes.

Para poder opinar debemos tener una fuente primaria o secundaria, que
puede ser una artículo, publicación de algún diario, algún texto o
publicación que hable del tema. Y a consecuencia de este punto de partida
nosotros damos nuestra apreciación desde nuestro punto de vista.

Durante la ejecución de una obra vial,

Según la Ley de Contrataciones del Estado en el artículo 178. Suspensión del


plazo de ejecución
DECRETO SUPREMO Nº 344-2018-EF

Reglamento de la Ley N° 30225, Ley de Contrataciones del Estado

178.1. Cuando se produzcan eventos no atribuibles a las partes que originen la paralización de la
obra, estas pueden acordar por escrito la suspensión del plazo de ejecución de la misma, hasta la
culminación de dicho evento, sin que ello suponga el reconocimiento de mayores gastos generales
y costos directos, salvo aquellos que resulten necesarios para viabilizar la suspensión. 178.2.
Reiniciado el plazo de ejecución de la obra corresponde a la Entidad comunicar al contratista la
modificación de las fechas de ejecución de la obra, respetando los términos en los que se acordó la
suspensión.
Trabajar con condiciones climatológicas

Trabajar con condiciones climatológicas


adversas como lluvia, nieve o granizo entraña
riesgos que conviene conocer para evitar
accidentes
En el entorno laboral se produce la exposición de los trabajadores a diferentes tipos de riesgos. Entre ellos,
las condiciones ambientales del trabajo conllevan la exposición a riesgos físicos asociados a las
condiciones climáticas.
Concretamente, en el caso del sector de la construcción y, en particular en obra civil, la exposición a
condiciones climatológicas adquiere una gran relevancia, puesto que muchas de las tareas se realizan a la
intemperie, lo que supone que los trabajadores estén expuestos durante una parte de la jornada laboral a
condiciones muy variables y, en algunos casos, extremas, como frío o calor intenso, viento, lluvia,
radiaciones solares, etc.
Existen numerosos daños que pueden derivarse de este tipo de fenómenos, desde caídas por resbalones,
hasta aplastamientos, contactos eléctricos, quemaduras, insolaciones, etc., especialmente cuando se
alcanzan valores extremos. Se trata de riesgos que deben tenerse en cuenta tanto en la evaluación de riesgos
como en la planificación de las actividades preventivas de cada empresa que, si bien en la mayor parte de
los casos no pueden evitarse, sí es posible tomar medidas preventivas para minimizar sus efectos y evitar
daños a la salud de los trabajadores.
Ya hemos visto anteriormente la importancia de protegerse del frío y en esta ocasión hablaremos
especialmente de los riegos y medidas de prevención necesarias en trabajos que se desarrollan bajo la
lluvia, el granizo o la nieve.

La lluvia, un factor de riesgo en trabajos de


construcción más importante de lo que
pensamos
Cuando se producen precipitaciones de lluvia, nieve o granizo, los trabajos pueden verse afectados
haciéndose más complejos y, en muchos casos, más peligrosos. Se reduce la visibilidad, se dificulta el
tránsito de vehículos y trabajadores, etc. Además, cuando ocurren de forma persistente pueden producir el
deslizamiento o desprendimiento del terreno, lo que afecta especialmente a trabajos de movimiento de
tierras (excavaciones, terraplenados, etc.).
Además, en el caso de que haya tormentas eléctricas, existe riesgo de caída de rayos en la zona de trabajo,
con la consiguiente posibilidad de que se produzcan daños, tanto para los trabajadores como para las
instalaciones eléctricas.
En cuanto al efecto que pueden tener sobre las condiciones de trabajo, las precipitaciones pueden afectar
a:
 La estabilidad del terreno. Uno de los principales efectos que provoca la lluvia persistente e intensa es el
deslizamiento o el desprendimiento del terreno, por lo que deberá tenerse en cuenta cuando se realicen
trabajos de movimiento de tierras, como terraplenados o excavaciones, por las consecuencias que pueden
derivarse de estas situaciones.

Tras un periodo de lluvia o nieve intensa, el suelo sobre el que se apoyan equipos de trabajo o medios
auxiliares (como andamios o escaleras) puede quedar anegado o inestable, por lo que deberán adoptarse
medidas de seguridad para evitar que estos equipos vuelquen, basculen o se desplacen
intempestivamente por pérdida de estabilidad.

 La visibilidad. Cuando se producen precipitaciones intensas se produce de forma considerable una


disminución de la visibilidad, que afecta a la percepción de las señales y del entorno.
 Las superficies de tránsito. Otro de los efectos derivados de las precipitaciones es que el terreno por el
que transitan los trabajadores se vuelve resbaladizo, especialmente si, además, circulan vehículos,
incrementando el riesgo de caídas. Para evitarlo, se debe proporcionar a los trabajadores calzado
adecuado.

Medidas preventivas en trabajos con lluvia


Cuando trabajamos al aire libre tenemos que tener en cuenta tanto las medidas preventivas, como los
equipos de protección individual. Además, la preparación previa mediante una adecuada información, el
conocimiento del entorno y las situaciones de riesgo, así como el sentido común son imprescindibles para
evitar accidentes en la mayor medida de lo posible.
Los trabajadores de una obra sólo deben emplear equipos de trabajo que sean seguros para el uso previsto,
por lo que el empresario debe asegurarse de que, por diseño o por características constructivas, el equipo
seleccionado es adecuado para el trabajo a realizar, incluyendo las influencias externas a las que estará
sometido, como puede ser la humedad por efecto de la lluvia, nieve o granizo.
Los equipos de protección individual empleados deben estar realizados de materiales aislantes e
impermeables que impidan que la ropa se humedezca. Del mismo modo, es importante emplear unas
buenas botas que eviten la entrada de agua, bien botas de seguridad reforzadas o botas de agua. Pero lo
más importante es que éstas dispongan de una suela antideslizante en terrenos inestables para evitar caídas
y resbalones.
En caso de ser necesario trabajar con equipos eléctricos, hay que tener en cuenta que la lluvia o cualquier
otra precipitación como nieve, granizo, llovizna, rocío o escarcha, pueden reducir drásticamente el
aislamiento de los equipos utilizados. Para evitar daños a los trabajadores, la norma establece que, en caso
de tormenta, lluvia o viento fuerte, nevadas, o cualquier otra condición que dificulte la visibilidad o la
manipulación de las herramientas, los trabajos deberán prohibirse o suspenderse, cualquiera que sea el
método utilizado.
Además, es importante tomar precauciones en caso de realizar trabajos en espacios confinados. En estos
espacios, es necesario prever circunstancias especiales como una inundación por efecto de lluvias intensas.
Por ello, es importante planificar el trabajo considerando las previsiones meteorológicas que pueden
ocasionar un cambio de nivel por efecto de aguas pluviales y el trazado de las instalaciones, ya que las
lluvias pueden originarse lejos del lugar de operación y, sin embargo, afectar las instalaciones donde se
está trabajando.
Proyectos no ejecutados comprometen S/.4.293 mlls. El 74% de obras públicas paralizadas
se agrupa en los gobiernos locales

Elida Vega03.07.2015 / 08:54 am

De mal en peor. Si hasta enero el estado de avance de las obras


públicas era preocupante, debido a que 339 proyectos estaban
paralizados, cinco meses después la situación se ha vuelto más
preocupante.

Según un reciente reporte de Infobras –el observatorio de obras


públicas de la Contraloría General de la República–, al 20 de
mayo último se han identificado 560 proyectos paralizados. Es
decir, 221obras públicas adicionales a la cifra que se tenía
mapeada a inicios de año, lo que representa un incremento de
más del 65% y una inversión comprometida de S/.4.293 millones.

Sigue a Portafolio en Facebook

A TODO NIVEL
Si bien los gobiernos locales encabezan la lista con 408 proyectos
paralizados (S/.3.037 mlls.), los gobiernos regionales y el
Gobierno Nacional no se quedan atrás.

Así, mientras el primero tiene 119 obras públicas (S/.1.178 mlls.)


en la misma condición, las entidades que se desempeñan bajo el
segundo ámbito tienen 33 proyectos por S/.88 mlls.

A nivel de municipalidades, la distrital de Echarati y la provincial


de Espinar, ambas en Cusco, cuentan con el mayor número
deobras paralizadas. Y entre los gobiernos regionales, Cusco,
Lima y Moquegua lideran el ránking, en tanto que a nivel de
Gobierno Nacional, encabezan la lista el Fondo de Cooperación
para el Desarrollo Social (Foncodes) y el Programa de Desarrollo
Productivo Agrario Rural (AgroRural).

LOS MOTIVOS
Con relación a las razones de la paralización,
la ContraloríaGeneral de la República identificó tres problemas
centrales: la transferencia de gestión, la falta de asignación
presupuestal y los factores climatológicos desfavorables.
Sobre los problemas suscitados por el cambio de gestión, el
órgano de control precisó que las municipalidades son las únicas
que han reportado esa dificultad para justificar la paralización de
las obras, por lo que resulta primordial que los alcaldes retomen la
ejecución.

También podría gustarte