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El mundo grita por ayuda

En una galaxia muy muy lejana a la tierra habitaba un pequeño extraterrestre,


era muy curioso, pero aunque apenas tenía unas semanas de haber nacido el ya
construía máquinas, elementos tecnológicos entre muchas mas cosas, porque el
desarrollo de su especie era muy elevado.
Pasó el tiempo y el ya tenía la edad suficiente para poder viajar por el espacio,
como este sería su primer viaje, decidió investigar sobre que planeta era el
mejor, entre tanto buscar encontró a la tierra miró que era un planeta hermoso
lleno de zonas verdes, variedad en fauna y flora, diferentes e interesantes
animales. Así que no esperó mas para tomar su nave y viajar. En un cierto tiempo
logró llegar pero se sorprendió al ver que todo lo que esperaba experimentar en
el planeta tierra, no era tan bonito como esperaba.

Tuvo un sentimiento de enojo, pero al mismo tiempo de tristeza pues todo se


veía tan deteriorado tan contaminado, su desilusión era bastante grande, porque
los maravillosas bosques y sus cascadas enormes fueron remplazdas por grandes
fábricas que lo único que hacían con todo su humo era contaminar el aire, el cielo
tenía un color rojizo causado por el humo de todos los automoviles, pero no todo
terminó ahí, cuando pensó que nada podía ser peor se dio cuenta de los
encendios forestales, el petroleo derramado en los ríos hasta la falta de agua
potable que afectaba en mayor parte a los seres humanos, tuvo un impacto en
este extraterrestre tan alto que subió a su nave y durante el viaje medito en todo
lo que vio.
Al llegar a casa todos le preguntaron cosas como -¿traes algún recuerdo?, ¿era
muy hermoso verdad?, ¿volverás a visitarlo?. Cómo podría responder tales
preguntas, ¿un recuerdo? Lo que menos quería era recordar esa tormentosa
visita, ¿hermoso? No saben la decepción que sintió por ver como los ríos y las
calles se inundaban de desechos, pero le hicieron una pregunta que lo marcó
¿volverías a visitarlo? El concluyó que si podía inventar tantas cosas increíbles
porque no con toda esa inteligencia ayudaba a este planeta que a gritos de dolor
pedía ayuda, no quería quedarse quieto cuando tenía muchas facultades para
poder cambiar esa situación espantosa.
Ingenió varias ideas para este problema que cada vez avanzaba con mayor
fuerza. ¿Pero como lo haría sin que los humanos se sorprendan por ver un
extraterrestre en su planeta? Se perturbó tanto con esta pregunta que la
desmotivación lo empezaba a dominar, aunque no fue demasiado para
desanimarlo entonces inventó un dispositivo que dominaba la mente humana,
podía ser manipulado al antojo del que la usaba y obviamente la usaría en los
grandes y poderoso políticos. Ya tenía el plan muy bien creado para ponerlo en
práctica. Volvió a la tierra, cuando aterrizó salió de su nave y miró al cielo ahí
solo respiró profundo para tomar el valor de hacerlo, en este momento solo
pensaba en la felicidad y la vida que le devolvería a la tierra, cuando al pasar un
par de hermosas mariposas azules frente a él se dio cuenta que existía una
esperanza, una oportunidad para el verdadero cambio, al ver revoletear
contentas a estas mariposas por ellas y en nombre de toda la naturaleza
encendió su dispositivo tecnológico, solo ahí se sintió aliviado porque aquí
terminaba una época de sufrimiento y dolor pero empezaba una nueva donde
¡la naturaleza estaba viva!.

Keisy Paz.

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