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1) Leer el siguiente relato e identificar: cinco sustantivos comunes y cinco propios, tres adjetivos

y diez verbos.

El mito de Narciso

Narciso era hijo del dios boecio del río Cefiso y de Liriope, una ninfa acuática. El famoso vidente
Tiresias ya había hecho la predicción de que viviría muchos años, siempre y cuando no se viese a sí mismo. A
los 16 años Narciso era un joven apuesto, que despertaba la admiración de hombres y mujeres. Su arrogancia
era tal que, tal vez a causa de ello, ignoraba los encantos de los demás. Fue entonces cuando la ninfa Eco,
que imitaba lo que los demás hacían, se enamoró de él. Narciso rechazó a la pobre Eco, tras lo cual la joven
languideció.

Su cuerpo se marchitó y sus huesos se convirtieron en piedra. Sólo su voz permaneció intacta. Pero no
fue la única a la que rechazó y una de las despechadas quiso que el joven supiese lo que era el sufrimiento
ante el amor no correspondido. El deseo se cumplió cuando un día de verano Narciso descansaba tras la
caza junto a un lago de superficie cristalina que proyectaba su propia imagen, con la que quedó fascinado.
Narciso se acercó al agua y se enamoró de lo que veía, hasta tal punto que dejó de comer y dormir por el
sufrimiento de no poder conseguir a su nuevo amor, pues cuando se acercaba, la imagen desaparecía.

Obsesionado consigo mismo, Narciso enloqueció, hasta tal punto que la propia Eco se entristeció al
imitar sus lamentos.

El joven murió con el corazón roto e incluso en el reino de los muertos siguió hechizado por su propia
imagen, a la que admiraba en las negras aguas de la laguna Estigia. Aún hoy se conserva el término
«narcisismo» para definir la excesiva consideración de uno mismo.

2) Leer el siguiente relato y completar las actividades:

Leyenda de la flor Mutisia (leyenda mapuche)

Hace mucho tiempo, en la zona del volcán Lanín, existían dos tribus enemigas irreconciliables que
guerreaban a menudo y se guardaban mucho rencor.
Un día, el joven hijo del Cacique de una de las tribus y la hija del Cacique de la otra se enamoraron
locamente. Pero dado el intenso odio que existía entre las familias, no podían tratarse a menudo y verse
abiertamente.
Una oscura noche, la machi (hechicera), vigilaba junto al rahue (altar) mientras se realizaba el
Nguillatún (acto de petición). De repente rompió el silencio el graznido del pun triuque (chimango de la noche).
La machi se estremeció, pues sabía que ese era un grito de mal presagio.
Miró a su alrededor y escuchó un ruido sospechoso. Observando atentamente, vió a la querida hija del
cacique que escapaba sigilosamente con el hijo del cacique enemigo. En ese momento la machi se dio cuenta
que ese era el peligroso suceso anunciado por el pájaro agorero.
La machi creía que esa acción merecía ser castigada, pero antes de comunicar al padre la fuga de su
hija, consultó con el pillán o deidad de su devoción:
– ¿Debo o no dar parte de rapto al padre de la niña?
–Sí –contestó el Pillán.
La machi corrió al toldo del cacique y delató la fuga. Enseguida se escuchó por segunda vez el
alarmante grito del pun triuque.
El padre, muy enojado, ordenó la persecución y captura de los enamorados que pronto fueron
apresados, juzgados y condenados a muerte.
Ambos jóvenes fueron atados a un poste y con lanzas y machetes todos se arrebataron contra ellos
dándoles la más cruel de las muertes.
A la mañana siguiente, los ejecutores de este bárbaro crimen, quedaron asombrados al ver que en el
lugar del suplicio de los jóvenes enamorados, habían nacido unas flores de pétalos anaranjados nunca vistas.
¡Quiñilhue! – gritaron los primeros que la vieron, y con ese nombre, “quiñilhue” se conoce la flor que
produce una enredadera que se abraza y trepa por los árboles, como se abrazan los jóvenes enamorados.
Avergonzados y arrepentidos, los mapuches empezaron a venerar esa flor llamada Mutisia por los
blancos. Las almas de los jóvenes amparados por la Futa Chao en el país del cielo, se amaron por siempre
mientras esa delicada flor de pétalos rojos nos recuerda el martirio de los jóvenes dado por los hombres
injustos.

a) Identificar: los personajes, el lugar en el que se desarrolla el hecho, el tiempo y la


acción/conflicto. Marcar la introducción, el nudo y el desenlace de la historia.

3) Analizar sintácticamente las siguientes oraciones (reconocer el sujeto y el predicado, el


modificador directo, el modificador indirecto y las aposiciones):

 El primo de Bautista juega al fútbol

 La chica con anteojos es mi hermana

 El libro de Lengua es muy difícil de leer

 El sol de la mañana entra por la ventana

 Las zapatillas rojas me lastiman los pies

 Lagartijas gigantes brotaron de la tierra

 Diego, el profesor, es muy exigente

 Un meteorito descomunal se avecina hacia la tierra

 Una lluvia torrencial lo obligó a volver a su casa

 Nuestra vecina riega el patio todos los días

 Juana, mi mejor amiga, viajó a Estados Unidos

 La comida, aunque estaba fría, era muy rica.

 Mujeres con pancartas marcharon el 8 de marzo


 El regalo para Mateo me costó una fortuna

 El mantel a cuadros era de mi abuela.

 El reloj, regalo de mi abuelo, dejó de funcionar ayer

 La pieza de mi hermana está llena de humedad

 Un gato sobre el techo lloró toda la noche

 Una ciudad entre la selva es difícil de encontrar

 Simón, mi perro, es muy juguetón

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