Piezas Jnaestt•as de la

A•·q••it~.:·t•••·a ~•et••al

Ya se lwrr corr struído en esta época edificios que harr de qrredar, en la historio del arte,
co mo auténticas piezas maestros de la arquitectura d el siglo
Hemos so licitado de algunos arquitecto~ indiquen cuáles son, a su juicio, los dos o tres edi-
ficios que más destacadom nte cumplerr esta furrcián d sin gular llwestría . o h emos podido soli-
tar eslfl opinión o los mil setecierrtos arquit ectos espruiole.<. quienes. desde esta s lín eas quedan irr-
vitados, co rdialm ente invitados, a esta encu esta.
Publicaremo.< la.< respuestas qu e v ayr11110S recibiendo. Creemo., que co n ello despertar emo.<
el int erés co mún h r1cio la m ejor arquitectura del ti empo que v ivimos.

RIOL BOIHG 0- ) con e LO

e LO ele acuerdo con poca gent e- so d
' looqur
IJIIC'

creo qu e la arquitectura mod e rna 11 va un e m-

puj e ini c ial ex traordinario. Que todas la s fil i-
qu e qui era n hace r ~ la ' últimas ¡! ne ra-
no son nada ni re pr e ntan nada al lado
er acione,;: ant riore;; al año 30.

a, no -
euenta d e que co n Cropiu ~, orlw ier, 'Tic ~
ri ¡!h t ya ~e dijo
e dijo, ad má,, mu bi en. los d e máF
ha tocado re pe tir, pe rfecc ionar, ha ce r v iabl e~
id eas d e lo ~ rand e8. rn aman ramiento , , i
tú quiere, aunque un amaneramiento d !!ran
altura. laro qu alguna z alen aportaciones
importantes co mo la de alto. O a vec s son l m:
mi smo viejos maes tros los que aportan nu eva::
per pecti a d~ ine perada lra cen d nc ia , co mo
H.on champ o handi¡rard. O quizá , e n e fe ras
má limitada Jos mi 8 mo ~ in ge niero qu e ca da
día se e tán acreditando como lo m ejore ar-
quitectos. P e ro todos lo de más on di sc ípulo ,
es tupe ndos di cípulos, di 8cípulo qu ti e n n tela
para •·ato hasta qu e ha _ an a~otado aqueila ca n-
l nt maravillo amente fec unda. (Lo [eo e que,
d cuando e n cuando, ha al~uien qu e quirrc
gcnializar _ se p ne a in voca •· no sé qu' estúpi-
da JHeeed e nc ia hi tórica s, , naturalm e nte, , ale
un mon truo como la Ton ela sca de Ro g 1-o.)
Por tanto, yo creo qu la Lre. obra. más im-
1 orlantes on la Bauhau , la illa avoye y e1
pah llón bat·ce lon és del 29. Entre las tres repr -
nlan la aportación el finitiva d e todos, abi'\o-
lutam e nte todos lo ~ yal01·cs d la arquitectura

/Jrwlwu s. Cro piu s. Pab ellón Barcelona,

Mi es va n d er Rohe. V il/e avoye. L e
orbusier.
tnoderna. ltay lodavía una obra que, en cierto
aspecto, ti ene una mayor trascendencia, y es,
pot· lo menos, má representativa del e fuerzo
de toda e a generación de creadore . Me refiero
a los gra nde inmuebles de vivienda de Le Cor-
bu ier, no sólo en u reciente ver iones de Mar-
s J la, de Nantes o de Berlín, ino a lo largo d e
toda la ge tación de la idea, iniciada ya el
a ño 22 con su " Inmuebles-Villa ". E s como un
reswnen de todo lo valore de este hombre ex-
traordinario, este arquitecto insólito, al que nun-
ca acabaremos de compt·ender ha tante, porque
nunca llegaremo a admirar todo lo que merece.
E o, amigo De Miguel: Si algún día me pregun-
tara qué arquitecto e el más importante del
mundo, sin titubear te diría que e Le Corbu-
ier. Claro que te conte taría lo mi smo i me
preguntaras cuál era el arquitecto más impor-
tante de lo último cinco iglo . O el mejor es-
cultor. O el artista más sobre aliente de nue tra
é poca.
Si te parece bien ahora podemo hacer corno
en la traducción de los manuales extranj eros:
añadir un pequeño epílogo obre la arquitectu-
ra española. A mí no me cabe ninguna duda que
Ja obra de mayor trascenden cia cultmal fué el
conjunto de realizacione del GATEPAC, y espe-
cialmente el Dispen ario Central Antituberculo-
o. De la po guerra eñaiaría do obra : el pa-
bellón de Brusela y la vivienda unifamiliare
de So tre Maluquer, obre todo una en Ciudad
Diagonal o pongo l a ca a de la Ricarda, cle
Bonet, porque está en construcción y no cono-
cemo aún al detalle un proyecto tan promete-
dor. i el bellí irn o estudio de Miró, en Mallor-
ca, última obra de Sert, porque no creo que sea
exactamente aleccionador. La "eneración de lo
Sert y los Rogers no acaba de ser fiel a sí mi ma
y a vece- pierden el rigor inicial titubeando en -
tre folklore e historicismos.
Y nad a má . Me acrradará comparar la opi-
niones de otros arquitectos.

Dos cosas respecto a esta sugerencia ele Bohigas. En primer lugar, que es de
wt gran interés y, de consiguiente, será de desear que los que opinen se extiendan
a la arqu.itectura españ.ola. D espué~, que 110 se acompañan las correspondientes ilu s.
traciones a esta selección español.a de Bohigas porque 11.0 disponemos ele momento
de fotos de estos edificios. Que espera mos reproducir en el número próximo .

•
J UA GOMEZ GO ZALEZ. A continuación
trato de resumir mi impresione personaJe so-
bre tan interesante a unto.
Creo que no debo hablar má que de la cosas
que h e visto personalmente, po rqu e de l as que
conocen por fotografía s o por planos no pue-
de decir e que e ti ene de ellas un conocimie nto
completo, a que faltan elemen to de juicio e
incluso en muchas ocasiones l a fotografía on
" tend encio a"; es to es, que se toman tratando
de imp1·e ionar con un efecto más o menos fa] o
a quien h a de contemplarlas.
H e reconido diver os países de Europa en
husca de lo que en cada uno de eJlo e con i-
dera como Ja pieza fundamenta1e de la arqui-
te lura mod e rna: Italia, Francia, Alemania, Ho-
l anda, Dinamarca, Suecia ... Otro vari o me fal-
tan por conocer. Puedo decir qu e si en cada uno
de e1lo h e encontrado algo o mucho intere an-
te, para poderlo considerar como aportación po-
siti va a la hi stori a moderna de Ja arq uitectura ,
tal vez los dos países que más me h a n impresio-
nado en este sen tid o, en ambo casos por la
ohra persona] de dos grand e" arquitecto , han
sido uecia y Holanda.
Gun nar Asplund ha dejado e n lo países e -
candinavos Ja hu ella de una obra que ha t enido
muchos eguidores y puede decil'Se que eR el sello
caracte rí ti co de la arquitectura actual en dichos
paí e . E n u corta pero fecunda vida profe io-
ual se aprecia una línea evolutiva muy curio a,
que empieza con ohras de carácter román ti co

21
 Crem atorio d el
Cem ent erio d el
' ur . Estocolm o
(1939). A rqui-
tecto : C. As·
pluud.

hi lori isla (BiblioL ca d t ermina En Holanda me nconlr ~ con la r c1a p e r o-

con r alizacion anli ipa d clat·a- mdida l d otro " pionero", qu tambi é n m e im-
dam nt a la más auda e fot·nu• mod rna n presionó profundam nte. M r efi r a uclock ,
1 empleo d el hormi gón , 1 cri tal y e l acero otro gran arti la qu e s anti c ipó a su ' poca. E
inoxidabl , como e · la .E po ición de .E tocol- ómo mu chos arquile los j óv -
mo u 1930. n n ignorar nombr como lo le Du-
P ro el todo c uanto d ~¡ h
d plund , centrando u pr f r ncias, t'mi-
camenl n la Bauhau y d eri aclo· . Ci rlo
I:Jl"Odujo un v rdad •·o impacto
qu e Dudock , omo ri ght mé ri ca audí
Cr enwtorio del Cem entl'rio del
n • paña , no on arquite lo imitabl e ni qu e
nw (1939) . p ar d trata r eal-
pu edan cr ar cu la , p ro no pu ed n egarse la
•u enl d e un pléndido n1onum nlo fun rario
enorm e imp rlaq ia el eu r ealizacion n 1
11 no d e po sía e r nielad y n 1 qu e e aúnan
uadr d la a1·quitectura el l s igl ·x.
Jo · ' O a al paree r onlradi clorias, qu e on la
D nlr lo edifi cios qu e pud vi, itar el es te
grandiosidad d 1 le ma y la ,<e ncill ez hasta la
gran arquit cto, de tacaré la Escuelas Públicas
hu mil dad en la cj c uc ión.
de Hilver ' utll , ncantador edifi c io el ladrill o
mi jui io, es és ta una obra maes tra d e Ja en tal rodeado d e jardine, qu e ll e a con truí-
aJ·qttÍlec tura mod erna , p e rf lam nl la ifi cable do má d e tr inta año , y, in mb a rgo admira
para la nl logia el 1 • c incuenta prim ro a ño ho má " qu e nunca por la auda c ia no edad
d 1 ¡,]o ·x. d u forma y su enorm fu rza xpr 5iva.

Escuelu s Púúli<"lls d e Jlil versum .

A rquit ecto : IV. M . Dudoc!,·.