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“EL HOMBRE DE LAS RATAS”: SU VALOR EPISTÉMICO, CIEN AÑOS DESPUÉS 65

que la Asociación Psicoanalítica Colombiana se había afectado y empobrecido, sobre todo


supere lo que Garza Guerrero (2006: 217) después de que apareció la obsesión según la
ha denominado la “epistemofobia institu- cual su padre y la señora bienamada serían
cionalizada a escribir y publicar”, ya que la sometidas a la tortura, de la cual había oído
tendencia colectiva así identificada interfiere hablar, de introducirles ratas por el ano, Para
notoriamente con la labor científica de nues- conjurar esta idea recurría a ensalmos, ges-
tra institución. tos, palabras y ritos ceremoniales.
Espero que resulte fructuoso el ejercicio Sus reminiscencias provenían de la edad
de revisión del caso y que las conclusiones fi- de cuatro a cinco años y se relacionaban con
nales, en concordancia con el análisis clínico, la muerte de una hermana mayor y con un
conformen un modelo de la adecuada inter- ataque de ira contra el padre. Por esa misma
conexión que los psicoanalistas estamos obli- época había tenido intensa curiosidad sexual
gados a lograr entre el conocimiento teórico y, a los seis años, había creído que sus deseos
y la práctica terapéutica. Dicha interconexión, voyerísticos matarían a su padre. Para impe-
ejemplar en los trabajos de Freud, es la base de dir esta muerte, debía llevar a cabo rituales
la investigación, la formación y la divulgación compulsivos tendientes a anular los efectos
del Psicoanálisis como disciplina científica. de los impulsos escoptofílicos. Estos temo-
res persistieron después de la muerte de su
A. EL CASO CLÍNICO padre. A los veinte años, a raíz de su ena-
moramiento de una prima y de su posterior
“El Hombre de las Ratas” es el nombre con rechazo, se produjeron nuevas obsesiones.
el que se conoce habitualmente la publicación Las relaciones sexuales eran ocasionales
A propósito de un caso de Neurosis obsesiva, y sentía repugnancia por las prostitutas.
realizada por Freud en 1909. Se trataba del La masturbación no tuvo un papel prepon-
caso de un abogado austriaco de 29 años que derante.
buscó ayuda profesional después de participar Las obsesiones tenían cuatro años de du-
en unas maniobras militares como oficial de ración, cuando comenzó el tratamiento y el
reserva. Había reconocido sus propios proble- caso fue considerado moderadamente seve-
mas por la lectura previa del libro de Freud ro. Algunas obsesiones cedieron fácilmente,
Psicopatología de la vida cotidiana y, una vez incluso sin relación con el análisis, como el
que se le propuso, aceptó el tratamiento y lo episodio durante el cual supeditó el ataque
inició de inmediato. Fue dado de alta por me- de la rata a la dama al hecho de no pagar el
joría, después de once meses de psicoanálisis, correo al teniente. Como el capitán se equi-
pero la persistencia de los efectos positivos no vocó y, en realidad, él no debía ningún dine-
pudo verificarse por cuanto murió en la Pri- ro, esta evidencia suprimió la preocupación
mera Guerra Mundial (1914-18). obsesiva.
La primera consulta del doctor Lanzer con Entre los antecedentes personales mas
Freud fue el primero de octubre de 1907, a importantes se cuenta la muerte del padre,
causa de sus temores de que algo podía pa- nueve años antes de iniciado el tratamien-
sarle a dos personas que admiraba, su padre to. Como tal circunstancia le ocasionó mu-
y una dama apreciada. También experimenta- cha culpabilidad y, además, coincidió con el
ba compulsiones a cortarse la garganta con inicio de algunos síntomas, para Freud re-
una navaja y obsesiones de prohibición sobre sultó obvio interpretar el odio al progenitor.
varios temas. Su vida personal y profesional El analizando no estuvo muy convencido al

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comienzo, pero aceptó la coincidencia. En el A raíz de las observaciones hechas sobre el


fondo sintió que Freud había acertado, pues caso, Freud cimentó las bases de su concep-
asoció que desde los siete años temía que los ción sobre la Neurosis obsesiva, cuyo núcleo
padres le adivinaran sus pensamientos. central fue el complejo paterno, debatido am-
Los impulsos suicidas fueron interpreta- pliamente en su momento por Stekel, Sadger,
dos como autopunitivos, debido a sus deseos Hitschmann, Schwerdtner, Rank, Federn, Graf,
de matar a la madre, de quien sentía celos Adler y Steiner (Masotta y Jinkis, 1973).
porque la mujer amada se dedicaba a cuidar-
la. La compulsión a contar durante las tor- B. ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS
mentas fue considerada una medida defen-
siva contra el temor de que alguien corriera Freud complementó su teorización sobre
peligro. las neurosis obsesivas, tanto en sus trabajos
Entre las causas precipitantes sobresale el sobre Metapsicología, como en otro más es-
conflicto entre si debía permanecer fiel a la pecífico sobre La predisposición a la neurosis
dama, a pesar de la pobreza de ésta, o identi- obsesiva. En 1952, Mark Kanzer publicó La
ficarse con su padre y buscar una mujer rica neurosis de transferencia de “El Hombre de
y encantadora. Al desarrollar la enfermedad las Ratas”, destacando los elementos trans-
evitó resolver el conflicto entre los deseos ferenciales en una época en que se daba pre-
del padre y su propia predilección amoro- ferencia a la reconstrucción de sucesos an-
sa. Agravó este conflicto, el antecedente de teriores antes que al análisis dinámico de la
que el padre acabó con la masturbación del transferencia inmediata. Sin embargo, en las
paciente a la temprana edad de seis años, a explicaciones teóricas de Freud se observa la
partir de lo cual se generó un resentimiento habilidad y la intuición para el manejo de las
soterrado. La madre, a su vez, lo había casti- situaciones transferenciales que, en el caso
gado por morder a alguien. en cuestión, se relacionan inicialmente con
La evolución fue clara para Freud. El ana- desconfianza y agresión hacia el analista, y
lizando enfermó a los 20 años, cuando esta- posteriormente con acercamiento afectivo.
ba enfrentando el deseo de casarse con una Desde las primeras sesiones quiso el anali-
mujer distinta a la que había amado. La duda zando que Freud representara el papel del ca-
lo llevó a la incertidumbre y a la ambivalen- pitán cruel y de la rata que se introducía en el
cia entre el amor y el odio. Para corregir esta ano; más tarde violó e invirtió la regla psicoa-
duda, o inhibición, desarrolló la compulsión. nalítica al pasearse de un lado a otro mientras
Reemplazó la decisión final mediante actos observaba al analista, declarando que temía
preparatorios regresivos. Por último, el pen- que éste lo atacara por su desvergüenza; y, en
samiento ocupó el lugar de la acción. el sueño más alusivo, veía a la hija de su ana-
Freud tomó notas sobre este caso por es- lista, de pie ante él, con dos montones de ba-
pacio de cuatro meses. El manuscrito fue en- sura en lugar de ojos, lo que Freud interpretó
contrado en Londres, después de su muerte, en el sentido de que el sujeto se casaría con su
como un curioso hallazgo, ya que constituía hija, no por sus lindos ojos sino por su dinero.
una excepción a la costumbre que tenía de En algunas fantasías suplementarias, Freud
destruir el material original cuando apare- aparecía como un hombre rico y poderoso
cían sus publicaciones. Fue transcrito por cuyo interés por el joven era fruto de su deseo
primera vez en la Standard Edition inglesa, de tenerlo como yerno. Pero, en otras actua-
en traducción de Alix y James Strachey. ciones, de manera ambivalente preguntaba a

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Freud: “¿Cómo es posible que usted consienta Freud había explicado esta neurosis como
dejarse injuriar por un hombre despreciable producto de la represión del odio edípico
como yo? Debe usted arrojarme de su casa. hacia el padre y hacia la mujer que lo ha-
No merezco otra cosa” [Freud (1909), citado bía rechazado, seguida de una regresión a la
por Kanzer (1952 : 178]. fase sádico-anal y a la esfera del pensamien-
Elizabeth R. Zetzel (1967), puso el énfa- to erotizado. En realidad, no había quedado
sis en las cualidades positivas del paciente: satisfecho con la interpretación pulsional
un encantador sentido del humor, capacidad y buscó en las constelaciones psicológicas
para la fantasía imaginativa y capacidad una explicación más completa, es decir, que
para la regresión al servicio del yo. En su con- el paciente se hallaba dividido en tres per-
cepto, la recuperación sintomática no puede sonalidades: una inconsciente, que contenía
basarse exclusivamente en la comprensión las emociones reprimidas, y dos preconscien-
del desarrollo temprano del paciente. Incluso tes, una correspondiente a su estado normal
el Hombre de las Ratas tenía un pensamien- (bueno, jovial, reflexivo y prudente) y la otra,
to tan realista que hasta resultó profética la a la superstición y el ascetismo. Este fue el
interpretación que hizo sobre la niña de doce comienzo de la concepción de la mente a
años que creyó ver en las escaleras de la casa. partir de un modelo tripartito, en el cual la
Por ese tiempo Anna Freud tenía esa edad y conducta era el resultado de tres conjuntos
la historia se encargó de hacer realidad el tri- de características funcionales en conflicto
buto que él le hizo al decir: entre sí.
En realidad, El Hombre de las Ratas siem-
Fue la niña la que resolvió el problema con
pre consideró sus obsesiones como irracio-
alegre superioridad; con un virtuosismo
nalidades ajenas a su vida mental ordinaria.
sonriente puso en descubierto muchas
Su prueba de realidad permaneció intacta y
de las máscaras que determinan tanto
su funcionamiento era el de una persona que
la predisposición a la neurosis obsesiva
había superado en buena parte la fase edípi-
como el tratamiento de la misma”. [Freud
ca. Las regresiones que padeció nunca des-
(1.909), citado por Zetzel, (1952: 119)]
organizaron su personalidad. El pensamiento
mágico persistió al lado de una desmentida
John E. Gedo y Arnold Goldberg en su li-
(escisión vertical de Kohut, 1971) relacionada
bro Modelos de la Mente (1973) utilizaron el
con la muerte del padre, cuya irreversibilidad
caso del Hombre de las Ratas para ejempla-
nunca pudo admitir. En efecto, Freud demos-
rizar el modelo tópico y la batalla defensiva
tró que su intento por rechazar la realidad de
que tiene lugar en la barrera de la represión.
la muerte del padre era la premisa de toda
Se centraron en la etapa religiosa, especial-
la neurosis de su paciente. Esta desmentida
mente en las plegarias a las que se interpo-
se originó en el trauma por la muerte de la
nían fórmulas que las transformaban en lo
hermana, acaecida antes de que la función
contrario.
sintética hubiese alcanzado una autonomía
En efecto, el paciente inventó la palabra
irreversible frente a los conflictos, según
Glejisamen en la que después de unir Gise-
Gedo y Goldberg, arriba citados.
la con Samen (semen), o sea el cuerpo de la
A pesar de los vacíos inevitables que tie-
mujer amada con su semen, introducía letras
ne la presentación de un caso con una teoría
con significado simbólico para construir esta
todavía incipiente, nadie puede negar el ri-
fórmula protectora. Señalaron, además, que
gor teórico-clínico de Freud, el valor de los

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elementos intuitivos y creativos, la actitud se al proceso de convergencias y divergen-


profesional, la capacidad para explicar los cias teóricas.
modelos del funcionamiento mental, la téc- La historia del Psicoanálisis muestra cómo
nica sistemática del procedimiento empleado, Freud, en el año 1900, construyó el modelo tó-
su habilidad para mantenerse alerta (empáti- pico para describir el acceso de los contenidos
co) y, a la vez flexible, para aceptar modifica- mentales a la consciencia; y en 1923, expresó
ciones a sus concepciones anteriores. la idea de las unidades funcionales desigua-
Precisamente, utilizando el caso de El les que conforman un aparato mental, a fin
Hombre de las Ratas, Grünbaum (1990) se- de explicar los conflictos que se originan en el
ñaló como un error atribuir relación causal a nivel intrapsíquico. Con el caso del El Hombre
las conexiones de significado que Freud hizo, de las Ratas, inició la concepción del modelo
basándose sólo en afinidades temáticas. Sen- tripartito, y lo perfeccionó con el caso de El
tenció que, aun si hubiera existido un víncu- Hombre de los Lobos. Estos dos modelos co-
lo causal entre la experiencia pasada de ser rresponden a una etapa de la mente en plena
castigado, a la edad de tres o cuatro años, diferenciación. La investigación de Gedo y Gol-
por comportarse con furia, como una rata al dberg (1973) dejó en claro que durante varias
morder a su nana y el odio reprimido por su décadas el Psicoanálisis no contó con modelos
padre, esta relación no explica que ese mismo útiles para comprender los estados funciona-
odio fuera el elemento protagónico de sus les que van desde la psique del recién nacido
ideas obsesivas en el presente conectadas a hasta la psique plenamente diferenciada. En
las ratas. En otras palabras, la convergencia dicha investigación se destaca que solamente
de afinidades temáticas en la transferencia, después de que Waelder (1902) propuso un
no autoriza la relación de patogenicidad di- esquema de clasificación epistemológica de
recta entre pasado y presente. las proposiciones psicoanalíticas, apareció en
Varios autores coinciden en que la co- 1963 el primer modelo que reconocía un es-
nexión simbólica o de significado entre las pacio de acceso ininterrumpido a los estratos
metáforas de distintas escuelas y las corrien- más profundos de la personalidad, expuesto
tes teóricas que orientan la interpretación por Kohut y Seitz (1963).
sobre el desarrollo temprano (“inconsciente Los casos clínicos fueron, sin lugar a du-
presente”), no garantiza una relación cau- das, la base para muchas de las deducciones
sológica entre reconstrucciones del pasado clínicas y teóricas que hizo Freud. Y tanto es-
y acontecimientos del presente (Sandler y tos, como otros casos suyos, seguirán siendo
Sandler, 1984; Wallerstein, 1990; Kernberg, fuente de inspiración para el Psicoanálisis.
1993; Garza-Guerrero, 2006). Por eso es lamentable que Freud hubiera in-
En realidad, las metáforas no son cientí- terrumpido la presentación formal del caso
ficas en sí mismas. Pertenecen más al campo de El Hombre de las Ratas, dejando a un lado
de la literatura o del arte. Pero, en su signi- el esclarecimiento de algunas manifestacio-
ficado simbólico, son el único lenguaje cien- nes de su analizando.
tífico que posee el Psicoanálisis, junto a otra En lo relativo a la técnica, Kris (1951) puso
ciencias, a no ser que se pudiera recurrir a de presente el adoctrinamiento intelectual que
símbolos matemáticos [Wurmser (1977), prevalecía en la época y la poca utilización de
citado por Garza-Guerrero (2006 239)]. Lo la transferencia, a pesar de que Freud ya había
importante es que los sistemas metafóricos señalado que ésta era un agente terapéutico
pueden relacionarse con la clínica y someter- efectivo. Es así como, a pesar de que Freud

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desde un principio destacó la elección de ob- Los síntomas obsesivos dejaron de ser
jeto homosexual del paciente, no incluyó este simple descripción psiquiátrica para con-
hecho en el análisis de la transferencia. Tam- vertirse en una construcción psicodinámica
poco interpretó como transferencia defensiva estratégica contra el deseo y la angustia, in-
o resistencial el desplazamiento al analista de cluida la defensa inherente. En el transfondo,
la relación que el Hombre de las Ratas refirió el complejo paterno se constituía en la ex-
con el amigo que lo apoyaba moralmente ase- plicación inconsciente de las preocupaciones
gurándole que era una persona de excelente religiosas, metafísicas y morales del obsesivo,
carácter y que únicamente tenía la costum- de los temas iterativos sobre el orden, la pre-
bre de verse a si mismo en forma negativa. El cisión y la pureza y de las cavilaciones sobre
paciente buscó en el análisis este apacigua- el cuidado físico, el tiempo y la muerte.
miento, incluido el ambivalente manejo del La misma importancia que tuvo el des-
superyó. El temor de que sus padres pudieran cubrimiento de la psicogénesis, lo tuvo la
leer sus pensamientos tuvo que influir tam- comprensión del funcionamiento mental del
bién en el manejo que hizo de la regla de la obsesivo que derivó, en el nivel de la técnica
asociación libre, primero con sumisión y luego general, en una actitud terapéutica particu-
con rebeldía evidente. lar, hoy en día convertida en elemento esen-
Tanto la regla fundamental como la ta- cial del procedimiento clínico.
rea analítica estuvieron siempre asociadas a El valor epistémico primordial del caso
la penetración placentera y sádica que podía debe centrarse, sin embargo, en la interco-
hacer el analista en su vida anímica (“casti- nexión paradigmática que hizo Freud entre la
go de las ratas”). Tampoco se ligó el recuer- teoría que iba construyendo y los hallazgos
do de haber herido al hermano después de clínicos que iba encontrando en el análisis de
convencerlo de que mirara dentro del cañón su paciente. Mas allá de los logros obtenidos
de la escopeta con algún aspecto de la re- en la terapia, cuya estabilidad y persisten-
lación analista-analizando. Ni se estableció cia nunca pudieron determinase debido a
la relación con el hábito que desarrolló de la muerte del analizando durante la Primera
interrumpir sus estudios entre las doce de la Guerra Mundial, se destaca dicha interco-
noche y la una de la mañana, abrir la puerta y nexión como esencial para el psicoanálisis
después contemplarse el pene en el espejo. como disciplina científica.
Freud encontró una relación explicativa
C. VALOR EPISTÉMICO entre los síntomas de su analizando y los
conceptos psicodinámicos de agresividad,
El Hombre de las Ratas, el caso del joven analidad, homosexualidad, Edipo invertido,
abogado que padecía una neurosis obsesiva, ambivalencia y formación reactiva; ubicó en
se afianza, después de un siglo de su publi- el deseo de la muerte del padre el epicentro
cación, como uno de los hitos históricos de de la neurosis, sin desconocer la queja ma-
la investigación en Psicoanálisis, entre otras terna sobre la inoperancia paterna; y conectó
razones porque fue la base de la conceptuali- la prohibición del padre sobre el matrimonio
zación sobre la estructura obsesiva, tarea que con la prima al daño del vínculo y a la difi-
Freud complementó en sus obras, La predis- cultad que tuvo el analizando para identifi-
posición a la neurosis obsesiva (1913), Traba- carse con el ideal del yo. En tales condiciones
jos sobre metapsicología (1915) e Inhibición, la función del padre se vio afectada por tres
síntoma y angustia (1926). puntos conflictuales: el miedo al padre, la

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hostilidad contra el padre y la falta de con- Estas relaciones, y otras más que se nos
fianza en el padre. Lacan (1953), posterior- escapan, son prueba fehaciente de la interco-
mente, amplió el concepto sobre la función nexión teórico-clínica permanente que Freud
del padre. estableció durante el tratamiento psicoanalí-
En cuanto al erotismo anal, Freud no sólo tico de El Hombre de las Ratas, el valor epis-
llamó la atención sobre la prohibición preva- témico más importante para la práctica del
lente que existía sobre esta etapa del desa- Psicoanálisis.
rrollo, sino también sobre la forma como este
erotismo se expresaba. No sólo por sorpresa, D. CONSIDERACIONES FINALES
sino también mediante múltiples y compli-
cados desplazamientos determinados por la 1. Aun cuando la concordancia entre los
represión. hechos clínicos observados y las teorías
La sobrecarga narcisista propia del pre- propuestas por Freud en el caso de El
domino anal y de la disminución de la libido Hombre de las Ratas pueda cuestionarse,
sexual por la regresión, le permitió a Freud e incluso reformularse a la luz de nuevos
explicar la omnipotencia mágica presente en conocimientos, no hay duda de que en su
las obsesiones del Hombre de las Ratas. La momento constituyó un admirable ejem-
misma omnipotencia estaba presente en la plo de interconexión teórico-clínica, o sea
anulación del deseo parricida. Tan omnipo- de organización coherente y eficaz de las
tente era el deseo de muerte hacia el padre abstracciones teóricas en función de la
como su anulación. Sobre la evolución del práctica clínica.
narcisismo se desarrolló posteriormente un 2. La correspondencia entre teoría y práctica
nuevo enfoque a partir de la psicología del no sólo tiene un valor heurístico, defini-
self (Kohut, 1971). tivo para la búsqueda de nuevas solucio-
Sobre las características del pensamiento nes psicoanalíticas a los problemas que
obsesivo, hizo Freud otra magnífica concep- plantea tanto la psicopatología como la
tualización relacionada con la clínica del fa- demanda del analizando, sino también un
moso caso. Al lado del pensamiento agresivo valor creativo y formativo en sí misma.
determinado por desplazamientos y sustitu- 3. El psicoanálisis no puede abandonar la tarea
ciones, encontró en su paciente un pensa- de obtener la verificación de sus hipótesis,
miento evolucionado y dotado de cualidades no sólo para satisfacer el deseo ancestral de
sobresalientes. Una de las características del Freud de que llegase a ser reconocido como
pensamiento regresivo, la duda, fue relaciona- ciencia natural, sino porque en la realidad
da con el instinto de aprehensión y su repulsa; actual perdería el reconocimiento que ha
el deseo de saber y conocer equivaldría a la logrado como disciplina clínica que aspira
captación del pene, mediante el mecanismo a convertirse en ciencia.
de introyección anal, pero como tal pulsión 4. Si bien la verificación de hipótesis ha de
de nuevo es sometida a la represión, la duda provenir de las ciencias afines, la con-
termina ocupando el lugar del saber. Como solidación como disciplina clínica debe
corolario de estas deducciones Grunberger conseguirse a partir de la adecuada inte-
(1960) infirió que el carácter timorato de los gración teórico-clínica, del estudio sobre
pacientes obsesivos se debía a que la acción convergencias y divergencias, del análisis
queda despojada del componente instintivo, de investigaciones sobre consenso meto-
por lo cual terminará también en la duda. dológico y de la evaluación de casos en la

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situación y en el proceso psicoanalítico. 6. Para describir acertadamente por el medio


Para contribuir a dicha consolidación, lo escrito un proceso de interconexión teóri-
menos que podemos hacer como tera- co-clínico, con la intención de publicarlo,
peutas responsables es atender la exi- se requiere que el psicoanalista desarrolle
gencia de escribir sobre estos aspectos, a la capacidad de concebir claramente los
partir de la descripción de casos, tal como modelos y principios del funcionamiento
lo hizo Freud hace cien años. mental que orientan la metodología del
5. Escribir y publicar bajo los estándares ac- procedimiento clínico (técnica, estrategia
tuales, tal como lo demandan las revistas y táctica). En realidad, cuando una con-
calificadas, entre éstas la de la Asociación, ceptualización se explica por escrito, a
es una tarea intolerable para algunos psi- más de que se gana en precisión y nitidez
coanalistas; pero, es la única manera de por la elaboración implícita, se promueve
hacerlo dentro de los parámetros exigi- la superación de las confusiones perso-
bles para cualquier disciplina científica. nales y se evita la escotomización de las
Lo cual no quiere decir que toda publi- nociones previas. Freud gozaba de esta
cación hecha bajo estos parámetros sea cualidad, entre sus muchos talentos y
de utilidad y beneficio para el desarrollo destrezas, lo cual favoreció la expansión
científico del psicoanálisis. En esta misma del Psicoanálisis, al tiempo que le aseguró
Revista, y dentro de los esquemas técnicos un lugar destacado como creador de una
convencionales, se han publicado trabajos nueva disciplina científica.
que, pese a la buena intención del autor 7. Para desarrollar la capacidad de hacer
y pese a su valor literario y humanístico, interconexiones válidas entre los conoci-
desdicen de una disciplina científica por mientos teóricos y la práctica clínica, los
el alto grado de especulación que contie- Institutos de Psicoanálisis deben fomen-
nen; por ejemplo, en un trabajo el autor tar en los candidatos el hábito cotidiano
dedujo las características psicodinámicas de pensar, registrar y anotar observacio-
del terrorista, abusando de las teorías nes e inferencias sobre los fenómenos
propuestas por otros psicoanalistas y sin clínicos que presentan sus analizandos. El
haber referido ningún caso estudiado o logro de interconexiones teórico-clínicas
tratado. Otro muy distinto es el caso de con sentido es el fundamento del traba-
Robert J. Stoller (1991), quien exploró el jo analítico y de muchas investigaciones
mundo del sadomasoquismo consensual que relacionan diagnóstico, proceso y re-
por observación directa en la comunidad sultados (González V. 2008).
S & M de West Hollywood, sobre bases 8. Algunos han reducido las manifestacio-
científicas y con enfoque psicoanalítico, nes obsesivas de El Hombre de las Ratas
dando origen a su libro Dolor y pasión a la regresión sádico-anal y, en particu-
(1991) como resultado de esa investiga- lar, a la captura anal del pene paterno.
ción de campo. En cambio, de otra parte, Otros han concebido el síntoma obsesivo
se da el caso de trabajos con importantes de la constatación, o verificación, como
y sólidas interconexiones teórico-clínicas una expresión del parricidio edípico.
que no han pasado las estrictas exigencias Pero, mas allá del significado simbólico,
reglamentarias y de buen uso del idioma lo importante para la clínica es la forma
y, en consecuencia, no han merecido su como Freud captó las fantasías de muerte
publicación. de su analizando y pudo deducir el odio

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hacia el padre, la regresión al nivel anal terminar el análisis expresó confianza en las
(pene fecal) y el impulso homosexual in- potencialidades de su analizando, circuns-
trínsecamente agresivo por retorno a la tancia contratransferencial positiva y es-
fase sádica. Las conexiones inconscientes tructurante. No se sabe tampoco hasta qué
de estas vivencias siempre darán pie a punto se desarrollaron las transferencias
nuevas elucubraciones, pero lo de mayor que tienen lugar a partir de una actuación
trascendencia fue la concordancia entre empática como la que Freud tuvo. Creemos
la evidencia clínica y la teoría construida. que por la brevedad del análisis solamente
9. En la concepción contemporánea se da tan- quedó plantada la semilla.
to valor a la interpretación, como a tres ac-
titudes sobresalientes de Freud que fueron
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
altamente terapéuticas: El ímpetu científico
y emocional que favoreció en el analizando FREUD, S. (1900), La interpretación de los sueños,
la idealización del analista, tal como había Obras Completas, IV, Amorrortu, Bs. Aires, 1988
deseado poderlo hacer en la infancia con su ________ (1909), A propósito de un caso de neu-
padre, con lo cual se estimuló, sin habérselo rosis obsesiva, O. C. IX
propuesto, el desenvolvimiento incipiente ________ (1913), La predisposición a la neurosis
de una transferencia de fusión que lo con- obsesiva, O.C. XII
dujo a una elaboración más adecuada de ________ (1915), Trabajos sobre metapsicología,
sus relaciones objetales; la convicción de O.C. XIV
que al procurar una completa compren- ________ (1923), El yo y el ello, O.C. XIX
sión de los síntomas y de lo que sucedía ________ (1926), Inhibición, síntoma y angustia,
en la mente de su analizando, con miras O.C. XX
a impedir la regresión confusional propia GONZÁLEZ, M. (2008), Comentario en la Mesa re-
del obsesivo, aseguraría el desarrollo de la donda sobre Actividades científicas en Institu-
neurosis de transferencia, mostrando así su ciones psicoanalíticas y Creatividad, Sociedad
Colombiana de Psicoanálisis, en Psicoanálisis
compromiso contenedor; y la tercera acti-
(Rev. APC., XX, 1:114.
tud, la validación y acogimiento que Freud
GRÜBAUM, A. (1993), Validation in the clinical
dio a su analizando, lo elogió y estimuló, le
theory of psychoanalysis:A study in the phi-
transmitió confianza y respeto, sin que se losophy of psychoanalysis International Uni-
socavara su neutralidad, derivándose un es- versites Press, Madison Connecticut:
pejamiento y reconocimiento que ayudó El GRUNBERGER. B. (1960), Al margen de “El Hombre
Hombre de las Ratas a superar, en parte, su de las Ratas”. En O. Massota y J. Jinkis (Eds).
relación con la madre, a la vez que favoreció Los casos de Sigmund Freud (129-149), Nueva
su pronta recuperación. Visión, Bs. Aires, 1973.
10. Freud reconoció en su paciente transforma- KANZER, M. (1952), La neurosis de transferen-
ciones narcisistas maduras como el sentido cia del “Hombre de las Ratas, en O. Massota
del humor, capacidad de insight y capaci- y J.Jinkis (eds). Los casos de Sigmund Freud
dad para lograr relaciones benéficas como (171-179), Nueva Visión, Bs. As, 1973.
KERNBERG, O.F. (1993), Nature and agents of es-
la buena alianza de trabajo que exhibió en
tructural intrapsychic change, en M.J. Horowitz,
su análisis. Nunca se supo hasta dónde se O.F. Kernberg y E.M. Weinshel (eds). Psychic
desarrolló su sexualidad y su relación afec- structure and psychic change. Eassys in honor
tiva, ya que, en buena parte, persistió la of Robert S. Wallerstein (327-344), Internatio-
ambivalencia con la madre. Pero, Freud al nal Universites Presss, Madison - Connecticut:.

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“EL HOMBRE DE LAS RATAS”: SU VALOR EPISTÉMICO, CIEN AÑOS DESPUÉS 73

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2. REFLEXIONES ALREDEDOR DE LA TERMINACIÓN


DE “EL HOMBRE DE LAS RATAS”, SEGÚN CONFERENCIA
DEL DR. GLEN O. GABBARD
DR. EDGARD YAMHURE1

Difícil tarea la de hoy, intentar unas re- sapiencia y comprensión empática del Psi-
flexiones sobre la Terminación de un análisis coanálisis, no sólo dirigido a los analizados,
de un hombre de quien no tenemos el ma- también a la formación académica de mu-
terial clínico del proceso, de cómo lo hizo el chos analistas y la rigidez de ésta.
Dr. Freud. El análisis del Dr. Lanzer, (el llamado Hom-
El Psicoanálisis ha evolucionado a través bre de las Ratas) lo inició Freud en octubre 1
de los años; se le han hecho críticas, como de 1907 y fue escrito en 1909. Freud nos dice
que aún estamos con los criterios del inicio que luego de un año entero (once meses)
de los tiempos, cuando Freud, su creador nos estaba completamente analizado, el objeti-
lo enseñó. Entendemos que a pesar de su ge- vo del tratamiento era superar los síntomas
nialidad, era imposible abarcar todo el alcan- (Mannoni 1965). En el tratamiento se logró
ce que sus discípulos hayan podido aportar. reconstruir completamente la personalidad y
El doctor Mario González, en su trabajo, nos suprimir las inhibiciones (Freud 1909), y con-
invita a romper con la tendencia de algunos sideró que debía terminar ahí el análisis. Sin
analistas al estancamiento y darle un enfo- embargo, Mannoni dice en un escrito, que
que epistemológico contemporáneo. Freud dijo que el análisis había sido incom-
El Dr. Glen Gabbard, en esta misma línea pleto porque se había mejorado “demasiado
de desarrollo, nos aportó, en su conferencia, pronto”.

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Miembro Titular- con función Didacta APC, Director IDEAL edyamhure@yahoo.com

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