SER HUMANO: CONSIDERADO COMO ¿PERSONA?

Hotel Rwanda un duro acontecimiento mundial marcado por tortura, abusos de toda
clase, genocidios de más de un millón de personas, donde domina la desigualdad,
la corrupción, el soborno por mantener vidas de personas, donde reina solo el que
tiene, y muere el indefenso y falto de economía, la falta de respeto por la libre
expresión de la persona, estaba dividido en dos grupos Tutsi y Hutus, sin importar
el respeto de pasar por encima de la vida de un niño, mujer o anciano, solo el poder
de caracterizar a la “oposición” o “contraparte” como “ratas”, personas inservibles,
“buenos para nada” y demás atrocidades.
Actualmente nos encontramos en un mundo triste, desolado, violento, donde solo
tiene voz y voto las personas con poder, se forman “alboroto”, “revuelos” por la
muerte, secuestro o cualquier tipo de siniestro hacia ellas, solo ellas son
escuchadas y captan la atención del mundo. ¿Y dónde quedan las personas
vulnerables, sin protección?, ¿no tienen derechos, como cualquier ser humano?
No se dice que el mundo esté totalmente “hundido”, porque si hay personas que
escuchan a los más vulnerables, existen entidades mundiales como la ONU, fondo
de defensa para los niños, UNICEF, UNESCO, OMS entre otras que velan por los
derechos humanos, además de personas naturales que se dedican a luchar por la
justicia y salvar personas vulnerables.
Si queremos ser más concisos, en el entorno laboral, vemos mucha corrupción,
injusticias laborales, sobornos por querer más cargos, más contratos, donde el ser
humano es capaz de pasar por encima de cualquier persona para satisfacerse a él
y solo el, donde reina el pensamiento de “SOLO YO PUEDO TRIUNFAR”, “SOLO
YO TENGO OPORTUNIDAD”, discriminamos no solo por el sexo, color de piel,
capacidades económicas, intelectuales, físicas o mentales. Como sociedad
poseemos un conjunto de normas establecidas (valores éticos), pero la moral de las
personas cada vez baja, a pesar, de que somos seres racionales y con capacidad
de pensar en un bien y un mal, nos volvemos egoístas e insensibles.