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Administración de Planes de Cuidados Trabajo Final 2 Julio
Administración de Planes de Cuidados Trabajo Final 2 Julio
El sistema nervioso está encargado de regular y dirigir las actividades del organismo humano.
Dispone de una extensa red de comunicación formada por tejidos sensibles y especializados.
Entre estos se encuentran los nervios, que comunican las órdenes del cerebro a cada órgano
o sistema y perciben los estímulos exteriores captados por los sentidos.
La mayor parte de esta información es conducida por la médula espinal, especie de "línea
central" que corre desde la base del encéfalo hasta la región lumbar (parte baja de la espalda).
Debido a su importancia y delicadeza se encuentra protegida por un canal formado por huesos
articulados: la columna vertebral.
Dicho conducto óseo cuenta con espacios (orificios intervertebrales) que permiten la salida
de raíces nerviosas o terminales de gran calibre que se ramifican y desplazan hasta el último
rincón del cuerpo humano.
A pesar de que la columna vertebral es una estructura precisa y segura, es posible que sufra
deterioro, enfermedades o accidentes que afecten a los orificios intervertebrales, con lo cual
se da origen a radiculopatías o lesiones en una raíz nerviosa.
Este tipo de problema incluye la conocida ciática, episodio que involucra dolor en la parte
baja de la espalda, glúteo y pierna. Es la segunda causa de incapacidad laboral, después de
resfriado y gripe.
SÍNTOMAS DE NERVIO APRISIONADO
Las lesiones en una raíz nerviosa ocurren cuando éstas son comprimidas. Los síntomas de
radiculopatía dependen de la parte afectada de la columna vertebral, si bien los más
característicos son:
Dolor.
Falta de sensibilidad.
Entre las más frecuentes están las hernias discales. Las vértebras están separadas por
segmentos de cartílago (discos intervertebrales) que amortiguan movimientos bruscos de la
espalda. La superficie dura de estos compactadores puede dañarse y permitir la salida de su
parte interna blanda (núcleo pulposo), este derrame reduce el espacio disponible y causa
aprisionamiento de las terminales sensibles.
Las hernias en discos intervertebrales pueden ser propiciadas por factores genéticos
(heredados de los padres), pero en la mayoría de los casos se vincula a:
Falta de movimiento (vida sedentaria).
Sobrepeso.
Movimientos bruscos.
Practicar deportes en los que se realizan movimientos bruscos (por ejemplo, pesas o futbol
americano).
Descalcificación de huesos.
Por otra parte, cabe recordar que existen otros factores de riesgo de radiculopatía:
Debilitamiento de vértebras. Las raíces nerviosas pueden ser aplastadas (sufrir colapso)
cuando los huesos de la columna pierden fuerza debido a un golpe accidental o a pérdida
de minerales (osteoporosis).
DIAGNÓSTICO
Una vez que se obtiene el diagnóstico se procede a establecer el tratamiento, mismo que
dependerá de la causa y gravedad de los síntomas. A grandes rasgos, las medidas a seguir
son:
En casos de radiculopatía por tumores medulares se indica cirugía, radioterapia
(tratamiento en que los tejidos anormales son destruidos mediante radiaciones) o ambas.
En caso de hernias discales se requiere reposo y evitar actividades que demanden esfuerzo
en la columna (levantar objetos pesados, agacharse o hacer esfuerzos). Se aconseja dormir
en un colchón rígido, así como efectuar ejercicios abdominales y flexiones que consisten
en mantener la espalda recta contra la pared o piso mientras se realizan movimientos con
las extremidades. Si los síntomas se agudizan puede considerarse cirugía.
Cuando se trata del colapso de una vértebra como consecuencia de osteoporosis es poco lo
que se puede hacer, excepto sujetar la espalda con un corsé para limitar el movimiento.
Los analgésicos son útiles para controlar el dolor, cualquiera que sea la causa, y también
se utilizan relajantes musculares.
-. Contribuye a
221004 Elegir el
reducir el riesgo de
analgésico o
producir efectos
combinación de los
adversos por
mismos cuando es más
interacción de
de uno.
sustancias entre sí.
140016 Evaluar la -. Contribuye
eficacia de las medidas información sobre
de alivio del dolor a la eficacia del
través de valoración tratamiento y el
continua de la estado general del
experiencia dolorosa. paciente relativo a
su afección.
-. Favorece al
-. Ofrecer actividades
mejoramiento del
que distraen al paciente
pronóstico la
y mantener en un
tranquilidad mental.
ambiente tranquilo y
calmado. -. Contribuye a
-. Brindar asistencia en promover la salud y
sus cuidados personales. la autoestima.
-. Disminuye riesgo
-. Proporcionar
de lesiones por
seguridad: subir
caídas y otros
barandales, restringir si
factores.
procede.
-. Contribuye a desarrollar
-. Proporcionar un
confianza con el personal
ambiente cómodo, seguro
durante el proceso de aseo.
y con privacidad
adecuada para el paciente. -. Contribuye al monitoreo
-. Discutir con el paciente de la efectividad del
el uso de silla para la tratamiento como también
bañera o ducha. ayuda a determinar de lo
que el paciente es
físicamente capaz.
-. Puede influir en la
-. Discutir el dolor y sus
capacidad del paciente
características durante los
para cooperar o no con el
procedimientos
personal al momento de
realizados.
realizarse los
procedimientos.
El neurinoma del acústico corresponde al tumor más frecuente del ángulo pontocerebeloso.
En su etiopatogenia se involucran factores genéticos que permiten su aparición, estando en
algunos casos ligados a enfermedades como la neurofibromatosis tipo 2 expresándose de
manera bilateral.
ETIOPATOGENIA
El neurinoma del acústico se origina de las células de Schwann de los nervios vestibulares
superior o Inferior en la zona de transición entre la mielina central y periférica (zona de
Obersteiner-Redilch), que ocurre en la zona lateral del ángulo pontocerebeloso y medial del
conducto auditivo Interno. Este se origina como resultado de muta-clones en un gen supresor
de tumores alojado en el brazo largo del cromosoma 22 que codifica para la proteína llamada
merlina, que es la encargada de controlar la proliferación de las células de Schwann,
regulando su abundancia y localización. Un solo gen funcionante de la merlina es suficiente
para prevenir la formación del tumor, por lo que la aparición esporádica del tumor requiere
de la mutación de ambas coplas del gen de la merlina. La probabilidad de aparición de dos
mutaciones espontáneas e Independientes en un locus, predicen la presentación del
schwannoma vestibular hacia la cuarta y sexta década.
SÍNTOMAS Y SIGNOS
Clásicamente el cuadro clínico del neurinoma del acústico ha sido dividido en 4 estadios de
acuerdo al grado de compromiso del conducto auditivo interno y cisterna pontocerebelosa
dando distintos síntomas y signos de acuerdo al grado de compresión, llegando en su etapa
final a un estado hidrocefálico (Tabla 1).
En general se pueden extender en tamaño hasta 4 cms de diámetro considerándose pequeño
cuando mide menos de 1,5 cms, moderado 1,5-3 cms y grande de 3 cms o más.
La pérdida auditiva es el síntoma más frecuente, llegando a estar en el 95% de los casos,
siendo en la mayoría unilateral lentamente progresiva. El patrón más frecuente corresponde
a una hipoacusia sensorioneural (HSN) con pérdida de frecuencias agudas, aunque cualquier
patrón puede estar presente. La hipoacusia súbita se puede presentar durante su evolución
hasta en el 25% de los casos, sin embargo, el schwannoma vestibular es causa de solo el 1%
a 3% de éstas. Otra característica es la disminución marcada de la discriminación de la
palabra, destacando sin embargo que el nivel de la hipoacusia no es predictor del tamaño
tumoral. Es así como la discapacidad auditiva en pacientes con neurinoma del acústico se
debe principalmente a la compresión de los vasos de la cóclea y/o del nervio coclear. Pese a
esto la audición puede mantenerse inalterada.
El tinnitus es el segundo síntoma en frecuencia, presente en cerca del 65% de los pacientes,
habiltualmente de tono agudo y en el lado afectado por el tumor.
Por otro lado, el vértigo sólo se ve en cerca del 20% en los que está afectado el vestibular
inferior, siendo más común en los tumores pequeños. Es así que es mucho más frecuente la
inestabilidad y el desequilibrio.
Los síntomas derivados de los nervios facial y trigémino ocurren temporalmente después de
las fallas auditivas y vestibulares y en general corresponden a tumores grandes de más de 2
cm de diámetro. Los pacientes tienen habitualmente parestesias faciales e incluso ausencia
del reflejo corneal. Espasmos o pérdida de la fuerza en los músculos faciales se ve en el 17%
de los casos. La cefalea, alteraciones del estado mental, náuseas y vómitos son propios de la
etapa hidrocefálica. Además, se pueden ver alterados los nervios III, IV o VI causando
diplopía o bien los nervios IX y X causando disfagia, aspiración y carraspera.
DIAGNOSTICO
También se han utilizado en el diagnóstico los potenciales evocados auditivos del tronco
cerebral que en pacientes con neurimoma se aprecia ausencia o retardo de latericia en la onda
V en el oído afectado.
Pese a la orientación que brinda la audiología, la prueba con mayor impacto corresponde a la
imagenología a través de la resonancia magnética (RM) con gadolinio, constituyendo
actualmente el gold standard en el diagnóstico, permitiendo además la planificación
prequirúrgica. Es así como característicamente en el neurimoma del acústico se observa una
imagen hipointensa en T1 con aumento de la Intensidad al agregar gadolinio. Otra alternativa
es la RM con la técnica de Fast Spin Eco, obteniendo Imágenes ponderadas en T2 sin la
necesidad de uso de gadolinio como medio de contraste, con el consecuente menor costo, sin
embargo con algo menor de sensibilidad en la detección de tumores de menor tamaño.
TRATAMIENTO
El tratamiento clásico más aceptado es la extirpación del tumor mediante cirugía, existiendo
diferentes técnicas quirúrgicas, cada una de las cuales estará más indicada en función del
tamaño del tumor y del grado de pérdida auditiva principalmente. Todas ellas, dada la región
anatómica tan delicada en la que se encuentra el tumor, tienen un cierto índice de mortalidad
(entre el 0,4% y el 4% según la técnica empleada) y, en ocasiones, secuelas pos-quirúrgicas
como pérdida auditiva completa en ese oído, parálisis facial, inestabilidad, etcétera., que
variarán en porcentaje también según el tamaño tumoral y la técnica quirúrgica empleada.
El tratamiento quirúrgico presenta unos resultados variables según los distintos equipos de
cirugía. Habitualmente publican sus casuísticas los neurocirujanos que tienen una especial
dedicación a este tipo de tumor, ya que, al no ser muy frecuente, es difícil alcanzar una cifra
de operaciones que permita que los resultados sean significativos.
Por la localización del tumor en la base del cráneo y en contacto con los nervios craneales,
con las arterias de la circulación posterior y con el tronco cerebral que tiene una
microvascularización muy delicada, a veces no es posible la extirpación completa del tumor
sin causar lesiones de estas estructuras. Otras muchas veces el tumor ha alterado tanto los
nervios estatoacústico y facial, que es muy difícil extirpar el tumor conservando estos
nervios.
Otra alternativa a la cirugía es la llamada radiocirugía. Con esta técnica no se extirpa el tumor,
sino que se le somete a un tipo de radiación específica que detiene o frena su crecimiento.
En el momento actual, el paciente con un neurinoma de menos de 3 cm de diámetro, debe ser
informado de las posibilidades de curación y de secuelas o efectos secundarios, tanto con
cirugía, como con radiocirugía.
El tratamiento con radiocirugía, proporciona un control del crecimiento tumoral (no crecen
o se reducen) del 85 al 97 % según diferentes series.
Los efectos secundarios de la radiocirugía, según diversas series son: nueva afectación facial
entre el 4 y el 10 %; afectación sensitiva del trigémino entre el 5 y el 20 %, afectación de la
audición entre el 10 y el 30 %, afectación cerebelosa menor de un 3 %. La mayoría de estos
déficits cuando aparecen es entre 3 y 12 meses, y pueden ser reversibles en la mayoría de los
casos, al igual que ocurre con las complicaciones de la cirugía.
Una tercera opción consiste en la abstención terapéutica (no hacer nada) con una estrecha
vigilancia del tumor mediante Resonancia Magnética. Esta actitud se suele emplear en
pacientes con una edad muy avanzada en los que el tumor sea muy pequeño, y siempre tras
haber ofrecido al paciente y a la familia todas las alternativas posibles.
-. La distracción
-. Promover actividades
contribuye a la relajación
que distraen al paciente y
y a la tranquilidad general
lo mantienen ocupado
en el paciente.
como escuchar música,
leer, ver televisión.