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REVISTA PSICOGENTE

ISSN 0124-0137
Universidad Simón Bolívar
Diciembre 2005-
Vol. 8 - No. 14 - 65-79

HACIA UNA PSICOLOGíA


DE LA CONVIVENCIA'
CARLOS A. ARANGO CÁLA02

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Colombia ha venido padeciendo en las últimas cinco décadas una ola de violencia, día a día
más creciente, caracterizada por asesinatos de toda índole, desapariciones, secuestros, extorsiones
(Gonzalo Sánchez, 1987) (Álvaro Camacho, 1990); inicialmente como una expresión de lucha
política por el poder formal del Estado en sus más altas esferas y posteriormente sumándose otros
componentes sociales como la delincuencia común, el narcotráfico y el terrorismo (Orlando Fals
Borda, 1996). Los índices de violencia superan en proporciones significativas a lo que pueda ocurrir
en cualquier otro país que no se encuentre directamente comprometido en una guerra (Estanislao
Zuleta, 1991). La Defensoría del Pueblo ha expresado que en nuestro país se presentan más de
30.000 muertes violentas al año, obligando a hablar de un fenómeno de violencia estructural. En la
ciudad de Cali, por ejemplo, según datos de la Consejería Desepaz (1997), la tasa de homicidios se
ha incrementado cuatro veces desde 1993, cuando se tenía una tasa de 23 por 100.000 habitantes
hasta 102 por 100.000 habitantes en 1996. Este fenómeno ha llevado a que se ubique a nuestro país
entre los países más violentos del mundo y a peligrosas generalizaciones que sostienen la hipótesis
de que pertenecemos a una "Cultura de la Violencia". Este panorama de terror ha generado un clima
tenso y hostil en los ciudadanos que solo atinan a reaccionar con angustia y escepticismo.

En estas circunstancias ha cobrado gran importancia hablar de paz y convivencia pues la


gente siente que se ha quebrado el orden "natural" de los vínculos interpersonales y las relaciones
sociales. El problema de la convivencia adquiere más importancia en la medida que la vida va
perdiendo terreno en el contexto de las luchas entre los que codician el poder. Hoy día, todos los

1 Conferencia presentada en el II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE PSICOLOGÍA HUMANISTA-EXISTENCIAL de la


Asociación Colombiana de Análisis Existencial ACDAE.
2 Psicólogo. Ph.D. Profesor Titular Escuela de Psicología de la Universidad del Valle. Cali. Colombia.
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sectores sociales resaltan la importancia de nómeno, quedándonos reducidos al trabajo de


elaborar propuestas de paz en términos esen- la rehabilitación, la intervención en desastres y
cialmente de crear condiciones para resolver la realización del inventario sobre los efectos
los conflictos de manera pacífica y disminuir psicosociales de la violencia? ¿Estamos coop-
la utilización de formas violentas. De acuerdo tando los subproductos de la violencia y convir-
a COLCIENCIAS, los estudios sobre la violencia y tiéndolos en un negocio rentable y respetable,
el conflicto realizados en Colombia le permiten que no modifica en nada la situación del país?
ocupar el primer lugar a nivel mundial. Estos ¿ O escasamente introducimos modificaciones
estudios se han centrado en la violencia como un en el contexto personal del que puede pagar un
producto social y solamente en las conclusiones servicio psicológico? ¿En el nivel personal nos
han destacando la importancia de que se avance colocamos como espectadores pasivos o como
en una dirección preventiva y educativa, que víctimas de la violencia social? La indiferencia,
contribuya a la democratización de la sociedad y la apatía, la pasividad, además de ser indicado-
a la construcción de la convivencia. Por ejemplo res de un estado depresivo es el terreno a partir
el estudio "El Cali que queremos" se refiere a del cual se legitiman y se afirman las acciones
la necesidad de la construcción de una cultura de los violentos.
para el desarrollo humano mediante acciones
educativas integrales para la convivencia, la Tenemos la responsabilidad de desarrollar
democracia y la participación ciudadana. Por lo estrategias de trabajo psicológico que contri-
tanto, además de pensar en estrategias correc- buyan a revertir este proceso y a construir una
tivas de la violencia, a través de propuestas y cultura de la convivencia.
diálogos de paz, es necesario trabajar preventi-
vamente para contrarrestar de raíz los factores Al interior del "Grupo de Investigación
causales de la violencia estructural. En estas en Psicología Comunitaria" de la Universidad
circunstancias surge la imperiosa necesidad de del Valle y del "Programa de Educación para
construir caminos para entender y fortalecer los la Participación y la Convivencia Ciudada-
procesos de convivencia tratando de sobreponer na" EouPARhemos asumido el reto y estamos
al discurso negativo de la violencia, el lenguaje construyendo una estrategia investigativa y de
creativo de la convivencia. intervención psicosocial que apoye los procesos
de educación ciudadana para la convivencia.
La violencia en Colombia no es más que Trabajamos con un grupo de 30 líderes del
la resultante de la sumatoria de los actos u omi- barrio Calimio-Decepaz de la ciudad de Cali.
siones intencionales de todos los colombianos. Presentaré algunos avances que se derivan de
En este contexto, es pertinente preguntarnos esta experiencia, realizada con la financiación
de qué manera y en qué sentido los psicólogos de COLCIENCIAS.
colombianos estamos contribuyendo a recrear
y reproducir esta situación de violencia. ¿Rea- No podemos plantearnos el proble-
lizamos nuestro trabajo profesional haciendo ma de la convivencia sin haber hecho una
caso omiso de la existencia de este problema? observación y descripción de la vida coti-
¿Actuamos de manera reactiva frente a este fe- diana de un sector de la comunidad. A par-
CARLOS A. ARAN(jC) CALAD 67

tir de esta descripción nos preguntamos: Capra que propone una razón integrativa orien-
¿Cuáles son los núcleos temáticos y las prác- tada por un pensamiento intuitivo, sensible,
ticas culturales alrededor de las cuales se pro- sintético, holístico, histórico, dialéctico y crítico
ducen relaciones de reconocimiento, acepta- donde se realicen los valores de conservación,
ción, intercambio, encuentro, compromiso y cooperación, calidad y asociación, que respe-
fortalecimiento de los vínculos personales y tan el proceso de la vida y la dignidad de los
comunitarios? seres humanos. Consideramos que este sería
un pensamiento orientado por la compasión
¿Cuál es la relación entre estas prácticas en el sentido budista del término, o mejor, por
culturales de convivencia y el desarrollo integral el amor desinteresado hacia los demás. Por tal
de las personas? A partir de esta información, motivo, este trabajo pretende ser un ejercicio de
¿qué acciones educativas pueden conducir al la razón, sensible al servicio de la vida, donde
fortalecimiento de la convivencia social? la producción del conocimiento sea un acto
estético que nos vincule cariñosamente con las
La racionalidad que puede orientar personas involucradas en el proyecto común de
el trabajo psicológico sobre la convivencia. vivir y conocer para amar.
Para responder a las anteriores preguntas nos
preguntamos ¿hasta qué punto los paradigmas Al interior de este paradigma integrativo
clásicos del conocimiento que adoptamos los trabajamos desde una perspectiva psicosocial.
psicólogos generan, mantienen o fortalecen El ámbito de lo psicosocial es el campo de la
los problemas que supuestamente pretendemos interexperiencia, donde, a partir de la interac-
resolver?
ción y el intercambio de significados entre las
personas, se configuran los procesos y objetos
¿La pretensión del conocimiento como el
en función de los cuales construimos nuestra
ejercicio de la razón asertiva donde un pensa-
subjetividad, nuestra identidad, la realidad
miento racionalista, analítico, reduccionista y
personal, social y cultural que hacen parte de
lineal vinculado a los valores de la expansión,
nuestra vida cotidiana. Este ámbito es entonces
la competición, la cantidad y la dominación ha
un contexto relacional. Desde esta perspectiva,
impulsado la idea del control sobre la natura-
la experiencia individual, es desde el nacimiento
leza y el comportamiento humano, tendrá algo
de la persona, un ámbito relacional. La expe-
que ver con el problema actual? ¿No es este un
riencia personal no es algo interno inherente al
pensamiento orientado por la codicia de poder?
individuo sino el producto de la interiorización
Consideramos que la racionalidad funcional
de las relaciones o interacciones sociales que
e instrumental, centrada en la producción de
han hecho parte de la vida del individuo y que
conceptos cerrados o Ratioides, que convierte
permanentemente se transforman, se mantienen
al comportamiento humano en un objeto a ser
manipulado por otros, se encuentra en la raíz o debilitan de acuerdo a las relaciones que el
misma del problema de la violencia. individuo mantiene con otros en el presente
inmediato. Mi experiencia personal en este
Para abordar el tema de la convivencia momento depende de las relaciones que aquí
nos identificamos con la posición de Fritjof y ahora entablo con los que me escuchan o me
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interpelan, y como tal no se encuentra en mi de la vida cotidiana que se repiten en pautas de


interior y si hubiera que establecerse una dicoto- comportamiento y de relación específicas para
mía entre lo interior y lo exterior se encontraría cada unidad temporal. Identificamos en este
fuera de mi cuerpo y en este lugar. Por lo tanto, trabajo el ciclo diario, semanal, mensual, anual,
toda experiencia personal es social y relacional. vital e intergeneracional que permite acceder
La experiencia colectiva desde una perspectiva a procesos que van más allá del nacimiento y
psicosocial se refiere al grado de confluencia, muerte de los individuos.
en el acuerdo o desacuerdo al que puede ac-
cederse entre dos o más personas. Se refiere A partir de la descripción de la vida coti-
a la consciencia del compartir un conjunto de diana podemos identificar los significados que
significados que hacen posible las relaciones de son intercambiados en los procesos de comu-
acuerdo o desacuerdo entre las personas. nicación e interacción, así como los procesos
objetivos y subjetivos mediante los cuales se
De acuerdo a Berger y Luckmann, acer- construyen y mantienen como válidos dichos
camos psicosocialmente al estudio de la vida co- significados. En una dimensión objetiva iden-
tidiana implica reconocer que la aprehendemos tificamos los procesos de institucionalización
como una realidad ordenada que se presenta expresados en las formas de organización y
en pautas: "Vivo en un lugar geográfico, uso distribución de roles en los programas insti-
objetos determinados y me muevo en una red tucionales, así como los diferentes niveles y.
de relaciones humanas. La realidad de la vida estrategias de legitimación desde la concep-
cotidiana se organiza alrededor del "aquí" de mi tualización incipiente hasta el conocimiento
cuerpo Y.el "ahora" de mi presente. Este aquí y científico-técnico y los universos simbólicos
ahora es el foco de la atención que presto a la propios de las formaciones socioculturales.
realidad de la vida cotidiana. La realidad de la Accedemos así a la comprensión del papel que
vida cotidiana no se agota por estas presencias las instituciones y la estructura social juegan
inmediatas sino que abarca fenómenos que no en la configuración de la vida cotidiana, y
están presentes "aquí y ahora". Experimento la viceversa. De fonna complementaria en la di-
vida cotidiana en grados diferentes de proxi- mensión subjetiva identificamos los procesos
midad y alejamiento, tanto espacial como tem- de socialización primaria y secundaria así como
poral". En la dimensión espacial identificamos los procesos de identificación social que nos
diversas categorías de contextos, desde el nivel permiten acceder a la manera como ha sido in-
microsocial donde localizamos la persona y su teriorizada la sociedad y se ha configurado una
experiencia de si, avanzando en el seguimien- subjetividad que se concreta en la experiencia
to de niveles contextuales y relacionales cada sensible de las personas.
vez más amplios, como la relación con el otro
o la otra y el pequeño grupo de referencia, la De esta forma este enfoque psicosocial
familia, el vecindario, el barrio, la comuna, nos permite acceder conceptualmente a los
la ciudad y los ecosistemas correspondientes fenómenos sociales tanto en su dimensión ob-
hasta al nivel macrosocial más amplio. En la jetiva como subjetiva de una manera integral,
dimensión temporal identificamos los ciclos haciendo posible reconocer de una manera
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ordenada la complejidad de la vida cotidiana y mico y social hace posible la preserva-


la realidad social. ción de la vida del planeta?
- ¿Estamos permitiendo que la vida de
Una vez reconocida la realidad de la vida los demás pueda realizarse de manera
cotidiana como el contexto humano fundamen- libre y creativa?
tal, podremos enfocar lo que entendemos por - ¿Aceptamos a los demás sin distinción
convivencia. Siendo coherentes con nuestro de credos, agrupación política, origen
marco conceptual, el primer paso necesariamen- social o étnico, sexo, género u orienta-
te es el de acceder al conjunto de significados re- ción sexual?
lacionados con la convivencia que expresaron - ¿Pennitimos vivir libremente a los seres
los participantes de esta experiencia. Para ellos: que amamos?
"Convivir se refiere al hecho de "vivir con", es - ¿N os permitimos a nosotros mismos
decir que se refiere, en primer lugar, al proceso experimentar la vida, dando rienda
integral de la vida, y en segundo lugar, a que esa suelta a nuestra libertad de sentir ple-
vida se da en relación con otros. Convivencia namente?
es la forma como nos relacionamos con los
- ¿N os hemos llegado a aceptar hasta
demás". "El hecho de que haya una relación
el punto de saber amamos a nosotros
no implica necesariamente que esa relación
mismos?
sea de convivencia. Hay personas con las que
- ¿Es nuestro amor por los demás una
coexistimos y personas con las que convivimos.
extensión del amor propio o nos rela-
Igualmente convivimos con la naturaleza, con
cionamos con otros para huir de nuestra
plantas y animales, con todo lo que nos rodea
soledad?
como seres vivos, con todo lo que podemos
mirar, tocar, oler, sentir, admirar y soñar. Por
El estudio de la convivencia nos remi-
lo tanto no es la coexistencia con otros lo que
te pues a caracterizar las formas en que las
define la convivencia sino la calidad de esas
personas se vinculan entre sí, desde el nivel
relaciones" .
personal, siguiendo por niveles interpersonales
De acuerdo con los aportes de este gru- cada vez más amplios, hasta la forma en que se
po, la convivencia se refiere a la calidad de la vinculan con la vida y la naturaleza como una
vida resultante de las relaciones en las que nos totalidad más amplia, a la vez que nos remite
involucramos. El preguntamos por la calidad a caracterizar la génesis y desarrollo de los
de las relaciones interpersonales nos remite al vínculos sociales. Entonces, desde esta pers-
estudio de las formas de vinculamos los seres pectiva psicosocial y holística, entendemos la
humanos entre nosotros. Pero más allá de ello, psicología de la convivencia como el proceso
estudiar estas relaciones desde el punto de vista de reconocimiento, elaboración, fortalecimiento
de la convivencia nos remite a desentrañar las y/o transformación de nuestros vínculos inter-
relaciones con la vida en sus diferentes niveles personales de tal forma que hagan posible la
de complejidad llevándonos a hacemos pregun- realización de la vida.
tas como las siguientes:
Uno de los desarrollos actuales de la psi-
- ¿Nuestro modelo de desarrollo econó- cología que más ha contribuido al trabajo sobre
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la convivencia es el enfoque de la "Terapia del orientan. En este sentido reiteramos que el fin no
Reencuentro" desarrollado por Fina Sanz. De justifica los medios. Para estudiar los procesos
acuerdo con la autora concebimos el trabajo de convivencia, debemos construir los escena-
sobre lo psicosocial a partir de la autopercep- rios y las situaciones donde las relaciones de
ción que las personas tienen de sí mismas, de convivencia y la posibilidad de su estudio sean
su forma de relacionarse o vincularse con las evidentes y estén al alcance de los interesados
demás y de su contexto sociocultural. Esto es a la vez que respeten su naturaleza intrínseca:
lo que la autora denomina el Espacio Personal "La vida social en su totalidad está inmersa en
(EP) que se desglosa en el Espacio Interior, el una atmósfera estética, la vida está hecha ante
Espacio Relacional y el Espacio Social: "Según todo y cada vez más, de emociones, de senti-
una persona se siente, se percibe, según sus va- mientos y de afectos compartidos" (Maffesoli,
lores y creencias, se relaciona con los/as demás 1997). Por tal motivo la estrategia metodológica
de una forma u otra. Ese sistema de creencias y debe reconocer y respetar la dimensión sensible
valores son fundamentalmente sociales. Y a su y afectiva de los procesos de convivencia. En
vez, una sociedad que funciona con base en un esta dirección hemos adoptado los principios
sistema de valores educa a sus miembros para y procedimientos de la Investigación-Acción-
que se relacionen de acuerdo a la interiorización Participativa, buscando ser cada vez más
de los mismos. Todo se produce coordinada- precisos en la implementación de técnicas de
mente" (Sanz, 1993). Es decir que reconoce- recolección y procesamiento participativo de la
mos una relación dialéctica entre la estructura información que no distorsionen el carácter sen-
sociocultural y la experiencia de la persona que sible y la dimensión afectiva de la convivencia.
se concreta, se interioriza, se exterioriza, se Cuando se habla de la Investigación-Acción-
desarrolla y cambia a través de las formas de Participativa nos referimos a un procedimiento
relación o los vínculos entre las personas: "La metodológico sistemático, insertado en una
forma en que los individuos de una sociedad estrategia de acción definida, que involucra a
se vinculan afectivamente es una clave para los beneficiarios de la misma en la producción
entender la estructura social. O dicho de otra colectiva de los conocimientos necesarios para
forma: cada sociedad educa afectivamente a sus transformar una determinada realidad social
miembros para que reproduzcan o mantengan (Arango, C. 1995). Como muy bien lo señala
un orden social establecido" (Sanz, 1995). De Schutter (1981) se trata más de una estrategia
esta autora retomamos algunas estrategias que metodológica para la acción que genera co-
serán descritas en la metodología de trabajo. nocimiento, que una estrategia metodológica
orientada a la producción del conocimiento.
El papel del conocimiento sensible. No Desde este punto de vista la producción del
es suficiente contar con unos valores ideales y conocimiento está subordinada a la realización
un enfoque conceptual explícito para abordar de acciones, y es en esas acciones donde se va-
el problema de la convivencia. Para actuar en lida el conocimiento producido. Al integrar una
consecuencia es necesario adoptar un método metodología de investigación que es sistemática
de trabajo que sea coherente con el objeto de sobre procesos activos, se constituye en sí mis-
investigación, los intereses y valores que lo ma en una estrategia de acción definida, a través
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de la cual se generan conocimientos colectivos. relacionales a través de las cuales el otro surge
Por lo tanto no es solamente una estrategia de como un legítimo otro en convivencia con uno;
investigación sino también una estrategia de y la agresión es el dominio de las conductas
educación popular (Fals-Borda, 1990). relacionales a través de las cuales el otro es
negado como legítimo otro en convivencia con
La metodología adoptada está orientada uno", También sustenta la idea de que "no hay
a la creación de una situación donde pueda que enseñar valores sino vivirlos" por lo que
darse una "experiencia abierta de aprendizaje" la mirada del profesor (e investigador) debe
es decir "una situación en la que un grupo de dirigirse a acoger a la persona en su totalidad
personas, a las que se puede llamar coeducan- y legitimidad y no al resultado del proceso
dos, se reúne para crear y mantener un clima educacional" .
de relaciones interpersonales significativas, que
facilite el desarrollo de un ambiente de aprendi- Retomando estos principios desarrolla-
zaje que promueva el crecimiento integral de los mos una metodología de investigación donde se
participantes" (Gómez Del Campo, 1978). trabaja vivencialmente a partir de las emociones
que dan vida a las relaciones de convivencia.
Esta metodología tiene en cuenta tanto En el cuadro anexo presentamos un esquema
la dimensión racional como la emocional del del proceso metodológico implementado en
proceso de aprendizaje. El paradigma de inves- seis etapas:
tigación a través de la acción, permite integrar
las investigaciones recientes que afirman de la FASES EN LA
existencia de una inteligencia racional y una INVESTIGACIÓN-ACCIÓN-
emocional en todas las personas de tal manera PARTICIPATIVA
que "el intelecto no puede operar de manera óp-
tima sin la inteligencia emocional". "El antiguo 1. Montaje institucional y metodológico
paradigma sostenía un ideal de razón liberado de la investigación. Tres reuniones y un taller.
de la tensión emocional. El nuevo paradigma
nos obliga a armonizar cabeza y corazón", de 11. Caracterización de la convivencia
tal manera que el conocimiento sensible vuelva en el contexto de la vida cotidiana. Técni-
a ocupar un lugar en el espacio público.
cas básicas entre otras. Historias de vida
participativa y mapas parlantes. 14 Talleres.
En esta dirección nos acogemos a la pro-
puesta educativa de Humberto Maturana cuando
IIl. Análisis participativo de la convi-
plantea que la experiencia educativa debe cons-
vencia en referencia a los vínculos sociales
tituirse a partir de un contexto relacional donde
lo social se exprese y desarrolle plenamente. y los ciclos de la vida cotidiana. 14 talleres.
Para ello desarrolla su teoría sobre la biología
del amor, "el curso que sigue la vida es el de IV. Definición de núcleos problemáticos
las emociones, no el de la razón" y donde el y prácticas culturales dinamizadoras de la con-
amor, por ejemplo, "es el dominio de conductas vivencia. 5 Talleres.
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V. Formulación de propuestas de acción. como el cuidado de sí mismo y la búsqueda


6 Talleres. de armonización interior han sido desplazadas
por las funciones familiares y las obligaciones
VI. Evaluación y sistematización del laborales que tienen los participantes.
proceso. 2 Reuniones.
Las relaciones familiares se configuraron
El proceso de recolección de la informa- como el referente principal de la convivencia.
ción correspondiente a la segunda etapa se rea- Todos los participantes plantearon un ideal de
lizó en dos direcciones. En la primera se estudió familia e invierten gran parte de su atención y
la convivencia como experiencia individual energías en la realización de este ideal. Objeti-
donde se integraron técnicas vivencia les en el vamente se identificaron pocos casos de fami-
marco de la realización de "Historias de Vida lias nucleares, la tendencia general es la mujer
Participativas" (Montero. 1991). En la segunda cabeza de hogar, con varios hijos, a veces de
se estudió la convivencia barrial como un pro- varios padres. El proceso real de conformación
blema práctico a ser manejado por los líderes, de las familias de origen como de los nuevos
donde se utilizaron los Mapas Parlantes (Bonilla hogares ha sido vivido como un drama o destino
y Findji) como técnica facilitadora. inevitable de la vida, más que como una opción
libre y responsable. La irrupción del amor y/o
los embarazos tempranos, acompañados de una
LAS RELACIONES DE CONVIVENCIA fuerte presión familiar, determinan la salida del
hogar y la búsqueda de un nuevo horizonte.
En esta exposición presentaré solamente En algunos casos la mujer tiene que enfrentar
los resultados relacionados con la caracteriza- sola este proceso de conformación de la nueva
ción de las convivencias obtenidas a partir de la familia. La resultante es encontrar numerosos
experiencia personal de los líderes, la cual nos hogares constituidos de manera forzosa y ho-
permitirá captar algunas dimensiones a trabajar gares rotos.
desde una psicología de la convivencia.
Las relaciones de amistad se identifican
A partir de la descripción del mundo como el modelo ideal de convivencia donde se
personal, se estableció el orden de importancia da la aceptación incondicional del otro/a y se
que las diversas categorías de relaciones de superan las relaciones de posesividad, celos,
convivencia tienen para los líderes, encontrán- envidias, etc. Y se dan experiencias de solida-
dose una mayor valoración de las relaciones ridad, cooperación y ayuda mutua de carácter
con la naturaleza, la familia, la comunidad, la desinteresado. Sin embargo, la experiencia
gente y los amigos, quedando en los últimos general es la de realizar pocas acciones para
lugares la relación consigo mismo y el mundo cultivar y recrear las amistades y la sensación
del trabajo. general de que la sociedad de consumo instaura
valores y dinámicas antagónicas al ejercicio de
En términos generales, podemos afirmar la amistad.
que las relaciones consigo mismo, entendidas
CARLOS A. ARANGO CALAD 73

Las relaciones comunitarias: Todos los en el desarrollo de sus programas, así como la
participantes realizan de manera gratuita y vo- ausencia de atención de las instituciones so-
luntaria trabajo con la comunidad, promoviendo bre los efectos que sus programas tienen en
el desarrollo de proyectos de beneficio común. la convivencia social como una resultante de
Muchos de ellos trabajan y dedican su tiempo sus acciones particulares. Desde el punto de
libre a la vida comunitaria, dejando poco tiem- vista de la construcción de la convivencia ten-
po disponible para su familia e hijos. El grupo dríamos que interrogamos sobre el mundo del
señala que el clima de convivencia que se da trabajo como un espacio posible de creatividad
entre los diferentes líderes del barrio presenta y realización personal, que pueda proyectarse
características negativas. Los líderes se dedican sobre el fortalecimiento de la convivencia so-
a competir entre ellos y a buscar protagonismo cial como un producto de las diversas acciones
ante la comunidad, sin tener en cuenta las ne- institucionales.
cesidades colectivas y los intereses comunes.
Se adelantan los proyectos buscando un bene- Las relaciones ciudadanas: Se identificó
ficio personal y animados por una concepción una tendencia a referirse a la gente a partir de
egocéntrica del liderazgo y sin que se asuma informaciones de tipo impersonal proveniente
una visión global del barrio, Esta situación es de los noticieros y los medios masivos de co-
interpretada como el fiel reflejo de las acciones municación. La gente hace parte más de un
institucionales sobre la comunidad, donde se imaginario de origen virtual, que de una expe-
busca el protagonismo de la institución, no se da riencia real de contacto y conocimiento de los
un verdadero trabajo de coordinación interins- habitantes del barrio. Se encontró una ausencia
titucional, se desconocen los problemas reales de reconocimiento y valoración de las carac-
de la comunidad y se obtiene como resultante terísticas sociodemográficas de la población y
un desarrollo desordenado y desarticulador del de las diferencias étnicas, culturales, políticas
tejido social. y de orientación sexual que puedan existir
en la comunidad. Solamente se mencionaron
Las relaciones laborales: El trabajo es diferencias de carácter religioso relativas a las
uno de los aspectos de la vida cotidiana que es dificultades de comunicación y relación con
necesario asumir para subsistir pero que en sí los practicantes del cristianismo no católico.
mismo, en la mayoría de los casos, no es fuente Por la influencia de los medios masivos de co-
municación en la relación con la gente puede
de identificación ni de realización personal. La
afirmarse la institucionalización progresiva de
característica fundamental es su carácter rutina-
una cultura del consumo, competitiva e insolida-
rio y la impersonalidad de las relaciones que en
ria, y la poca institucionalización de una cultura
él se dan. Es necesario destacar la gran cantidad
del reconocimiento explícito de las diferencias
de tiempo que los participantes de este sector
sociales, los derechos y oportunidades que
social invierten en actividades y relaciones la-
permiten la coexistencia y convivencia entre
borales, el alto grado de institucionalización de
personas diferentes.
las tareas realizadas, que se expresa en la forma
de rutinas y la poca importancia que las institu-
Las relaciones con la naturaleza: Si bien
ciones otorgan a las relaciones de convivencia
las relaciones con la naturaleza son altamente
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valoradas en la experiencia subjetiva, se iden-


tificaron graves problemas relacionados con La realización de las necesidades biológi-
la insalubridad ambiental por la presencia de cas básicas y el uso del tiempo libre. Los partici-
zancudos y de basuras y pocas actitudes y ac- pantes describieron que diariamente se duerme
ciones orientadas a la conservación del medio y se despierta, se respira y se alimenta, se evacúa
ambiente. y se realizan actividades de aseo, autocuidado
y ordenamiento de la realidad más inmediata.
A partir de este apretado resumen pode- Objetivamente el tiempo libre tiende a estar co-
mos afirmar que las relaciones de convivencia pado por los medios masivos de comunicación
vistas en conjunto, presentan un panorama des- que irrumpen en la vida privada imponiendo
articulado y sin armonía donde la mayoría del mensajes que son recibidos de manera pasiva
tiempo se utiliza en la lucha por la subsistencia y acrítica. La carencia en este sector social de
en el mundo del trabajo y el mejoramiento de las recursos económicos suficientes y la presencia
condiciones de vida y del reconocimiento perso- de los medios masivos de comunicación, alta-
nal en el ámbito de la vida comunitaria, donde mente institucionalizados por la economía de
las instituciones juegan un papel fundamental mercado y la cultura del consumo, permiten
orientando un desarrollo desordenado. En un caracterizar el principal influjo del ciclo diario.
segundo plano encontramos el mundo familiar, El ciclo diario es normalmente vivido como algo
que se vive más como un destino que como una rutinario y sin interés Este fenómeno cambia
opción libre, y frente al cual se proyectan las significativamente en los momentos en que las
más profundas aspiraciones personales. Estos personas se retiran del influjo de estos medios
dos mundos, el trabajo y la familia absorben y desarrollan una actividad de trabajo espiritual
gran parte de la atención y energía de los par- en diversas prácticas identificadas. En los días
ticipantes quedando relegadas las relaciones festivos se describen actividades del estar con
de amistad y el autocuidado o relación consigo los hijos, mayor descanso y conversaciones con
mismo. Finalmente, se observa una relación familiares y amigos y en pocos casos se reportan
descuidada con los demás ciudadanos y con el actividades de autocuidado creativo.
ecosistema o la naturaleza, relaciones estas me-
diadas por una cultura del consumo, insolidaria La realización de las necesidades de la
y competitiva impuesta por los medios masivos subsistencia. A partir del ciclo semanal se dife-
de comunicación. renció el día laboral del día de descanso. El día
laboral comienza con el desplazamiento a los
sitios de trabajo y se concreta en las actividades
LOS CICLOS DE LA VIDA COTIDIANA correspondientes a los roles de trabajo dentro
de las programaciones institucionales o empre-
A partir del seguimiento al ciclo diario, sariales. A partir del ciclo mensual se identificó
semanal, mensual, anual, vital e intergeneracio- la manera como estos roles se estructuran en
nal hemos podido objetivar algunos procesos función de las programaciones institucionales
estructurantes de la convivencia y su relación Adicionalmente se describen las actividades
con algunas necesidades. relacionadas con el trabajo comunitario y las ac-
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ciones de liderazgo no remunerado, igualmente culturales, con excepción de la mención de un


regulado por las instituciones y la situación de grupo de danzas folclóricas impulsado por uno
inestabilidad de los desempleados. de los líderes participantes.

Los participantes señalaron la notoria di- La realización de la necesidad de parti-


ferencia entre las actividades de los hombres y cipación política. La reconstrucción del ciclo
de las mujeres. Se comentó el exceso de trabajo anual permitió reconocer los ritmos y ciclos de
y el poco descanso de las mujeres, en particular la administración pública para la asignación de
de las madres comunitarias y de las madres de presupuestos a proyectos y programas y la apro-
hogar, quienes no tienen momentos reales de bación de contratos. En función de este ciclo se
descanso ni de relación consigo mismas. Se dan relaciones de amistad entre miembros de la
identifica una situación de inequidad social comunidad con los sectores de la administración
adscrita al rol del género, y en particular al rol que asignan recursos a los proyectos. Adicio-
de madre. nalmente se menciona el proceso de ejecución
de obras públicas en los períodos previos a las
La realización de las necesidades de jornadas electorales, como un mecanismo de
identidad y participación cultural. A partir de captación de votos de los electores. Se identifi-
la reconstrucción del ciclo anual, se identificó ca una gran apatía, desinformación y ausencia
el proceso de recreación de la cultura en sus de interés de la mayoría de los participantes
diferentes variantes de acuerdo a los orígenes frente al manejo de los recursos públicos, y el
étnicos de los participantes, así como el ciclo de interés de unos pocos vinculados al desarrollo
fiestas comerciales de la sociedad de consumo. de proyectos. Objetivamente es evidente el alto
Se reconstruyó la secuencia anual de eventos grado de institucionalización de una cultura
y fiestas culturales alrededor de las cuales se política cliente lista y populista frente al manejo
realizan importantes experiencias de encuentro, de los recursos públicos y la débil instituciona-
celebración y convivencia colectiva. Cada uno lización de una cultura política democrática y
describió con euforia y con nostalgia las tradi- participativa.
ciones de sus tierras de origen y los esfuerzos
que realizan para mantenerlas vivas. Si bien se EL CICLO VITAL. Se refiere al proceso
pueden inferir altos niveles de identificación transcurrido entre el nacimiento y la muerte de
con sus culturas de origen, se observa incerti- una persona y los eventos más significativos en
dumbre ante la ausencia actual de formas de ese recorrido. Las regularidades encontradas
encuentro entre los habitantes del barrio a partir a partir de las historias de estas personas nos
organizaciones étnicas o culturales claramente permiten afirmar que la mayoría de los parti-
constituidas. Objetivamente, el ciclo cultural se cipantes:
ha visto alterado por los procesos de migración
y cambio de contexto ecológico y cultural. Las l. No ha contado en la primera infancia con
condiciones sociales, económicas y técnicas han vínculos afectivos estables y sólidos. Han
cambiado y no se observan procesos de promo- crecido en un contexto de conflicto y dolor
ción y desarrollo de alternativas y proyectos basado en experiencias de abandono con
76 HACIA UNA PSICOLOGÍA DE LA CONVIVENCIA

padres ausentes y madres que asumen el y la búsqueda permanente de un amor


hogar como una carga. inalcanzable, por un lado, y la experiencia
del amor incondicional y desinteresado por el
2. Han vivido una experiencia de migración otro, enmarcan las vidas de los participantes,
familiar del campo a la ciudad en un contexto y señalan el tema fundamental del problema
de dificultades económicas y/o persecución de la convivencia.
política.
7. La enfermedad fue descrita como un evento
3. Han reportado como una experiencia posi- que altera los ciclos de la vida cotidiana
tiva la vida de escolarización primaria y y exige la revisión del estilo de vida y las
secundaria. relaciones consigo mismo y los demás.

4. Se han vinculado al mundo del trabajo 8. En todos los casos la muerte de un ser
desde la temprana infancia para ayudar a la querido implicó cambios profundos en el
subsistencia de su familia viéndose obligados camino de la vida. Para este sector social la
en muchos casos a abandonar los estudios. Se muerte es un tema tabú, del cual no se habla,
trabaja en diversas ocupaciones dependiendo y que está profundamente relacionado con la
de la oportunidad, más que de la vocación convivencia.
o interés y en pocos casos se describen op-
ciones de vida profesional.
EL CICLO INTERGENERACIONAL
5. Han vivido la experiencia de conformación O LA TRAMA DE LA VIDA
de nuevos hogares como algo inevitable y
forzado más que como una opción libre y La reconstrucción de las historias relacio-
responsable de vida. La lucha por la con- nadas con la formación o disolución de la fami-
formación de la familia ideal es la fuerza lia de origen, permitieron identificar una trama
básica que orienta sus vidas. de relaciones familiares, constituida alrededor
de mitos y modelos arquetípicos de identifica-
6. Cada uno de los participantes ha adoptado ción o rechazo personal, que se transmite a lo
una estrategia particular para realizar la largo de varias generaciones.
experiencia del amor. Se encontraron notables
diferencias en la manera como los hombres Los modelos arquetípicos de identifica-
y las mujeres viven y asumen sus estrategias ción masculina fueron:
de realización amorosa. La mayoría de los
hombres describen con orgullo historias Líderes políticos. Fundadores de pueblos,
de conquista amorosa y la mayoría de las personas emprendedoras, en ocasiones con mu-
mujeres describen historias de abandono. cho dinero, multifacéticos y mujeriegos. Orgu-
Ambos se mantienen en la búsqueda del llosos de sus numerosas conquistas, dominantes
verdadero amor o del hombre o la mujer e infieles con su compañera o esposa. En algu-
de su vida. El dilema del enamoramiento nos casos se reportan historias de persecución
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política y enfrentamientos armados. se rebela contra su padre (el abuelo) y lo


echa de la casa. Esta madre se vincula con
Hombres silenciosos. Trabajadores, fie- otro hombre mil amores y la hija se rebela.
les y reservados, estrictos y religiosos, pobres y Se presenta la historia como un intento de
muy dedicados al hogar y a sus hijos, defensores romper el esquema de las mujeres sumisas,
del modelo de familia tradicional. sacrificadas, tolerantes y bobas.

Los modelos arquetípicos de identifica- 2. La bisabuela, la abuela, la madre y la hija se


ción femenina fueron: han ido aburridas de la casa con un hombre
mayor que ellas. Ellas han sido fieles y so-
Mujeres abandonadas. Fieles, sometidas metidas y los hombres han sido infieles,
al marido, que han huido de sus casas para bus- mujeriegos y maltratantes. El mensaje
car al hombre de su vida y se han quedado solas transmitido de generación en generación ha
criando a sus hijos, o que han repetido varias sido. "Mi abuela fracasó y de ahí salió mi
veces la historia de vincularse nuevamente con mamá, mi madre fracasó y ese fracaso soy
el mismo tipo de hombre y el mismo desenlace. yo y ahora tengo miedo de fracasar con mi
Usualmente han recibido maltratos físicos y hija".
psicológicos.
Si a partir del ciclo vital identificamos el
Mujeres con poder. Solas y con capacidad proceso amoroso como el motivador fundamen-
de trabajo y autonomía que odian al marido y tal de la convivencia, a partir del ciclo interge-
lo echan, tienen mucha dificultad o temor de neracional identificamos los contenidos que en
mantener un vínculo estable. la forma de mitos y modelos de identificación le
dan significado a la trama de la vida. A partir de
Las "mujeres de cuatro en conducta", mu- aquí nos encontramos con el reto de encontrar
jeres liberadas que no coinciden con el modelo la manera para transformarlos. Esto implicaría
de familia tradicional, ni se quejan del abandono el construir modelos diferentes de identificación
de los hombres. y de relación entre hombres y mujeres.

Estos personajes o modelos arquetí-


picos establecen tramas de relación que se CONCLUSIONES
repiten de generación en generación de una
manera bastante esquemática, y que son La convivencia se refiere a la manera como
asumidos como el guión de vida o el desti- vivimos colectivamente. Nuestras relaciones
no personal en algunos participantes. Dos con nosotros mismos, los demás y la naturaleza,
ejemplos muy evidentes identificados fueron: son la consecuencia en un primer momento de
nuestro aprendizaje y en un segundo momento
1. Un abuelo mujeriego (mil amores) y una de la forma cómo consciente y deliberadamente
abuela sumisa y amargada. Se dan situaciones optemos por construir nuestro mundo. El cri-
de maltrato psicológico a la mujer. La madre terio último de calidad de la convivencia es la
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vida misma. Que la vida se exprese en toda su


riqueza en nuestro medio ambiente, que respe- 1. De la cultura patriarcal judeo-cristiana
temos la vida de los demás y sus formas de ser en función de la cual se reproducen
diferentes, que permitamos la realización plena los roles masculinos y femeninos en
de nuestros seres amados y nos permitamos a un contexto de inequidad social que
nosotros mismos vivir plenamente, depende de afecta tanto a hombres como a mujeres.
la capacidad que hayamos desarrollado para
aceptarnos a nosotros mismos plenamente y 2. De una cultura tecnocrática, centrada en la
para vincularnos afectivamente con los demás economía del mercado y el consumo, que
y con la vida como una totalidad. impone valores competitivos e insolidarios y
destruye el tejido social propio de las diversas
En la dimensión subjetiva los procesos formaciones étnicas y culturales con graves
de convivencia son una resultante de la manera consecuencias sobre la vida del ecosistema.
como hemos interiorizado el mundo de la cul-
tura en la socialización primaria y secundaria 3. De una cultura de la corrupción, el clientelismo
y de la manera como hemos construido nuestra político y la intolerancia democrática,
identidad personal y grupal. Como un producto que mantiene un contexto de violencia,
del aprendizaje de la vida adquirido en el con- desapariciones, asesinatos y favores a los
texto del drama familiar donde se han producido amigos.
identificaciones y rechazos, hemos adoptado
un plan de vida que se concreta en la manera Los procesos de socialización y de insti-
como nos vinculamos y nos relacionamos con tucionalización de la convivencia se concretan
los demás adoptando posiciones y roles deter- en las relaciones entre las personas, en las
minados. El meollo subjetivo de la convivencia interacciones familiares y laborales, o más pre-
radica en el hecho de que "reproducimos un cisamente en la manera como nos vinculamos
programa familiar, social o cultural a partir de afectivamente en todos los ámbitos.
experiencias y mensajes" interiorizados en las
primeras etapas de nuestra vida a partir de la La transformación de la convivencia
identificación con ciertos modelos o personajes •
implicaría el construir modelos diferentes de
arquetípicos. Imaginamos que gracias al hecho identificación y de relación entre hombres y
de comportarnos como ellos "seremos más mujeres. Este no es un problema meramente
queridos/as y tendremos el reconocimiento de personal y subjetivo, es un problema colectivo
la persona amada" (Sanz, 1995). en el cual juega un papel crucial las instituciones
sociales y sus programaciones. La construcción
En la dimensión objetiva, identificamos de un plan para el desarrollo y fortalecimiento
el papel jugado por las instituciones (familia, de la convivencia en el contexto del barrio no
escuela, empresas y medios de comunicación) tendrá sentido sin el concurso y respaldo de las
en el mantenimiento y reproducción de valo- instituciones.
res, mitos y creencias de varias formaciones
socioculturales:
CARLOS A. ARANGO CALAD 79

REFERENCIAS

Arango, C. (1995) La Metodología de Inves-


tigación Acción Participativa. Capítulo
de: El Rol del Psicólogo Comunitario en
la Comunidad Valenciana. Tesis Doctoral.
Universidad de Valencia.
Berger Peter L. y Thomas Luckmann (1993)
La Construcción Social de la Realidad.
Amorrortu editores. Buenos Aires.
Berger Peter L. y Thomas Luckmann (1997).
Modernidad, Pluralismo y Crisis de Sentido.
Ediciones Paidós. Barcelona, España.
Maturana, H. (1991) El Sentido de lo Humano.
Dolmen Ediciones. Chile.
Max-Neef, M., Elizalde, A. y Hopenhayn, M.
(1986) El Desarrollo a Escala Humana.
Una opción para el futuro. Editorial Nordan
Comunidad - Montevideo. Icaria Editorial
S.A.
Montero, M. (1991) El uso de historias de
vida participativas en la psicología social
comunitaria. Cuadernos de Psicología, Vol
11, N° 1, pags 37-51.
Sanz, F. (1995) Los vínculos amorosos:
Amar desde la identidad en la Terapia del
Reencuentro. Editorial Kairós. Barcelona.

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