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Universidad de Concepción

Facultad de Humanidades y Arte


Departamento de Historia

Análisis de Lectura:
Comparado.
Informe de análisis
Internacional.
“Análisis de Sistemas-Mundo. V/s “El fin de la historia y el último
Una Introducción” hombre”
Immanuel Wallerstein. Francis Fukuyama.

Integrantes: Fabrizzio Abarzúa Integrantes: Carla Hernández

Victoriano Piñeda.

Ricardo Díaz Venegas Daniel Sobarzo Pereira

Roberto Escare Gutiérrez Patricia Retamal Garrido

Pablo Ortiz Orellana Geanina Zagal Ehrenfeld

Curso: 4to Año


Carrera: Pedagogía en Historia y Geografía
Asignatura:
Profesor: Juan Eduardo Mendoza P.

Barrio Universitario, 11 de noviembre 2009


Preguntas para la lectura de varios textos:

1. ¿Cuáles son las tesis fundamentales o puntos clave en los que se


podrían resumir las posiciones de cada autor?
“Análisis de Sistemas-Mundos. Una Introducción.” Inmanuel Wallerstein:
puntos clave.
En primer lugar la tesis fundamental o clave en los que se podría resumir la
posición del autor del libro “Análisis de Sistemas-Mundo. Una Introducción”;
Immanuel Wallerstein, es la cual afirma que el actual sistema-mundo
capitalista, entendiendo a este mismo como un sistema que “da prioridad a la
incesante acumulación de capital” (40-41), en el cual vivimos, está en una crisis
teminal: en donde los costos de producción se han ido elevando
paulatinamente (la remuneración del personal, la compra de insumos y el pago
de impuestos) a pesar de todos los esfuerzos por reducirlos y en donde la
geocultura liberal centrista que mantenía al sistema-mundo unificado está
totalmente socavada.

Esta crisis surgió como una combinación de un descontento de larga data entre
el funcionamiento del sistema-mundo y el fracaso de los movimientos
antisistémicos, que condujeron a la revolución mundial de 1968.

La hipótesis principal del autor es que esta crisis puede continuar por “unos
veinticinco a cincuenta años más” (106). Para Wallerstein, el actual sistema-
mundo “ya no puede funcionar adecuadamente dentro de los parámetros
definidos” (105), por lo que inevitablemente se genera un proceso de
bifurcación.

Una segunda hipótesis que se desprende del libro es que el mundo actual debe
cambiar, desarrollando un sistema alternativo al capitalismo. Para el autor, este
espíritu lo encarna el Foro Social Mundial (FSM), reunido inicialmente en Porto
Alegre, donde se reúnen militantes de muchos tipos e ideas. Su lema es otro
mundo es posible, en tanto que “perciben que el sistema- mundo se encuentra
en una crisis estructural y que las opciones políticas son reales” (118), en
contraposición con el espíritu de Davos, donde el Reino Unido y los Estados
Unidos dieron promoción al neoliberalismo. Wallerstein se niega a creer en la
idea de “No hay alternativa” (9) contra el capitalismo.

“El Fin de la Historia y el Ultimo Hombre”. Francis Fukuyama: puntos


claves:
Fukuyama plantea como tesis fundamental la Legitimidad de la Democracia
Liberal, la cual se ha librado de las contradicciones internas fundamentales,
que mostraron otros sistemas político – económicos, como las dictaduras
autoritarias militares de derecha y los totalitarismos de la izquierda comunista.
Argumenta porqué la democracia liberal constituiría “el punto final de la
evolución ideológica de la humanidad”, y como esta forma final de gobierno
constituiría “el fin de la historia”. Dentro de esta exaltación que hace el autor de
las democracias liberales, sostiene que las falencias que se le adjudican a este
modelo político y económico son producto de la mala implantación del mismo y
no a la evolución natural de este sistema.
Dentro de los argumentos que utiliza Fukuyama para dar fundamento a su tesis
esta la referencia a la idea hegeliana de evolución de las sociedades, en el
sentido de que estas pasan por distintas etapas hasta llegar a las democracias
liberales expresadas en plenitud en el capitalismo producto de los avances
tecnológicos y la predominancia de las ciencias naturales y la razón.
A su vez, recurre a la idea del Thymos griego que se entiende como el deseo
de reconocimiento, advirtiendo que este deseo es el que moviliza a todos los
hombres y ha sido el motor de la historia. Este deseo de reconocimiento habría
sido alcanzado por la humanidad en el mundo moderno con el advenimiento
del estado liberal y el reconocimiento universal que se desprende de la
legalidad a que se adscribe el estado liberal que parte reconociendo la dignidad
de todo ser humano en tanto ser humano.
Fukuyama ve en el problema del reconocimiento la motivación principal por la
que los estados se ven envueltos en grandes batallas, ya que estos estados
buscan el reconocimiento por parte de otros estados y al no conseguirlo se
enfrascan en fuertes conflictos bélicos.
Al solucionar el problema del reconocimiento las democracias liberales
están destinadas a evitar los conflictos con otros países que compartan sus
valores, por lo que en un mundo de estados democráticos liberales no deberían
existir conflictos entre estados.
“Esta afirmación la hacia Kojéve con toda seguridad y merece que la tomemos
en serio. Pues cabe entender el problema de la política en los milenios de la
historia humana como el esfuerzo por resolver el problema del reconocimiento”
(Pág. 23).

2. ¿En qué puntos o cuestiones se dan las principales diferencias entre


los autores?
- El libro de Wallerstein está basado principalmente en la comprensión de las
dinámicas del sistema-mundo capitalista, como un sistema total y las
problemáticas que a este le afectan. El libro de Fukuyama dice relación con el
nuevo escenario internacional que se dibuja a fines de la década de los 80s
con la caída del bloque ideológico comunista representado por la URSS.
- Wallerstein le da importancia y énfasis a los cambios de las ciencias sociales
en términos de poder generar un marco explicativo de naturaleza efectiva para
los actores concretos que tendrán la posibilidad de actuar en el momento
actual y futuro del sistema mundo. La tesis de Fukuyama está fundamentada
de forma vertical por la herencia del pensamiento filosófico, haciendo un
recorrido y una contestación al debate en torno a la Historia y la política,
planteada con mayor profundidad a partir de la visión Hegeliana del tiempo
histórico.
- La tesis central de Wallerstein es que el actual sistema-mundo capitalista en el
cual vivimos está en una crisis terminal, en donde la geocultura liberal centrista
que mantenía al sistema-mundo unificado está totalmente socavada. Esta crisis
surgió como una combinación de un descontento de larga data entre el
funcionamiento del sistema-mundo y el fracaso de los movimientos
antisistémicos, que condujeron a la revolución mundial de 1968. La hipótesis
principal del autor es que esta crisis puede continuar por “unos veinticinco a
cincuenta años más”. La tesis central planteada por Fukuyama dice relación
con la Legitimidad de la Democracia Liberal, la cual se ha librado de las
contradicciones internas fundamentales, que mostraron otros sistemas político
– económicos, como las dictaduras autoritarias militares de derecha y los
totalitarismos de la izquierda comunista. Argumenta porqué la democracia
liberal constituiría “el punto final de la evolución ideológica de la humanidad”, y
como esta forma final de gobierno constituiría “el fin de la historia”, proceso que
comienza en 1989 con la caída del sistema comunista en Europa.
- El mundo actual, según Wallerstein, debe cambiar, desarrollando un sistema
alternativo al capitalismo, se niega a creer en la idea de que “No hay
alternativa” contra él. Fukuyama sostiene que se ha llegado al “fin de la
historia”, al no existir una ideología que le haga frente a las Democracias
liberales y, por ende, al capitalismo.
- Wallerstein utiliza un método de reflexión crítica desde la perspectiva de las
ciencias sociales, que se basa en un enfoque unidisciplinar que integra los
aportes conceptuales y metodológicos de diferentes disciplinas como lo son la
historia, la economía, la sociología y la ciencia política, resultando de esta
combinación una visión bastante crítica y global de la historia del capitalismo
desde sus inicios en el siglo XVI, hasta la actualidad. Fukuyama tiene un
método de análisis histórico hipotético deductivo que busca en la historia
universal los fundamentos de su tesis y sus argumentaciones principales. No
lo define explícitamente pero se puede ver principalmente en que toma la idea
de historia de Hegel (en la interpretación de Kojève) para analizar los hechos
que lo llevaron a escribir su obra.
- Wallerstein plantea que en el actual sistema mundo necesariamente existe un
centro y una periferia. Es por esto que hay lugares más desarrollados que otros
(países ricos y países pobres). Fukuyama sostiene que el modelo de
democracia liberal tarde o temprano se expandirá hacia todo el mundo,
logrando un mundo más igualitario (idea de “paz perpetua”)
- Wallerstein pertenece al corriente marxista crítico, fuertemente influenciado por
Fernand Braudel y la escuela de los annales, adhiriéndose al pensamiento
realista. Fukuyama adhiere al pensamiento neoidealista, postulando que en los
países donde se instauró la democracia liberal no tendrían más conflictos
bélicos.
- Wallerstein abarca el espacio temporal desde el nacimiento del capitalismo en
el siglo XV hasta la anticipación de que el actual sistema mundo está en una
crisis que lo llevará a su fin en cerca de cincuenta años más. Fukuyama abarca
desde el surgimiento de las democracias liberales, las colonias
norteamericanas y la revolución francesa, hasta la polarización mundial y el fin
de la guerra fría.
3. ¿Dónde encuentro afirmaciones o posturas coincidentes?
Los dos autores toman al sistema capitalista democrático liberal y
la acumulación intrínseca de este, como punto de partida de sus
análisis y como fuente para la explicación del devenir humano,
aunque lo hacen de formas totalmente opuestas.
Una de las primeras posturas o afirmaciones que pueden acercar a
autores tan divergentes como Wallerstein y Fukuyama se relaciona
con que ambos autores han establecido como punto de partida del
dominio de los estados liberales a la coyuntura de la revolución
francesa en 1789 y el surgimiento de los estados modernos,
aunque Fukuyama añade a este hito la revolución de las colonias
norte americanas en su análisis.
Otra de las posturas coincidentes radica en el carácter universal
del estado moderno, universal entendido como un marco legal que
es aplicado a todos los ciudadanos de un estado de manera
igualitaria amparado bajo el concepto de igualdad de los seres
humanos ante la ley, y que ambos autores consideran
fundamental para el sistema liberal y uno de los logros del sistema
democrático liberal.
Para Wallerstein, el “universalismo” es uno de los logros asociados
al sistema-mundo moderno y lo define, en términos generales, “la
prioridad de reglas generales aplicadas en forma igual a todas las
personas, y por lo tanto, el rechazo a las preferencias particulares
en la mayoría de las esferas”. (Wallerstein)
Para Fukuyama se trata del “reconocimiento universal” que se
desprende de la racionalidad del estado liberal, y es racional según
Fukuyama, en tanto que reconcilia las exigencias de reconocimiento
sobre las bases de la identidad individual, como ser humano. Y seria
universal ya que reconoce a todos los ciudadanos porque son seres
humanos y no porque sean miembros de tal o cual grupo.
Otro punto en común es la importancia que dan los autores a la
legitimidad y soberanía que en Fukuyama se entiende como un
reconocimiento reciproco.
Para Wallerstein “la soberanía es antes que nada una cuestión de
legitimidad”. Y en el sistema-mundo moderno, la legitimidad de la
soberanía requiere el reconocimiento recíproco. Que da entre el
estado y la sociedad un intercambio hipotético, en el que dos
bandos potencialmente (o en verdad) en conflicto, respetando la
realidad de facto del poder, intercambian semejante reconocimien-
to como estrategia menos costosa.
Fukuyama ve a su vez en el reconocimiento reciproco cuando el
estado y el pueblo se reconocen el uno al otro. El estado concede
derechos a los ciudadanos y estos acceden a respetar las leyes del
estado.
En el fondo de los planteamientos de ambos autores no podemos
encontrar posturas coincidentes o afirmaciones profundas entre
ellos, y las posturas coincidentes que detallamos anteriormente
son principalmente consensos a que ha llegado la ciencia histórica
y que trascienden a ambos autores.
4. ¿Existen posturas intermedias?

Los autores estudiados no presentan puntos intermedios porque ambos


representan posturas muy distintas, como ya se ha mostrado en la pregunta
numero 2.

5. ¿Dónde encuentro los puntos más fuertes y más débiles de cada autor?

“Análisis de Sistemas-Mundo. Una Introducción”. Immanuel Wallerstein


Un punto fuerte de la obra es que de Wallerstein, intenta entender el fenómeno
del capitalismo desde un enfoque unidisciplinar que integra los aportes
conceptuales y metodológicos de diferentes disciplinas como lo son la historia,
la economía, la sociología y la ciencia política, resultando de esta combinación
una visión bastante crítica y global de la historia del capitalismo desde sus
inicios en el siglo XVI, hasta la actualidad. Este enfoque metodológico es
completamente justificado, ya que capitalismo es un fenómeno global que
trasciende barreras geográficas e involucra a la sociedad planetaria en su
conjunto, y que requiere de todas las herramientas y visiones que nos pueden
otorgar las ciencias sociales.

Otro punto fuerte es su herencia historiográfica basada en el pensamiento


braudeliano y la Escuela Francesa de los Annales que hace énfasis en los
procesos a largo plazo de la historia (longue durée). Este enfoque da prioridad
a las estructuras históricas por sobre los acontecimientos o el tiempo a escala
corto plazo que debería ser materia de estudio del cronista o periodista. Las
estructuras a las cuales se refiere Wallerstein en su libro, no son solo históricas
sino que también son estructuras económicas, políticas y sociales, como es el
caso del liberalismo, capitalismo o los sistemas-mundo, ya que haciendo
referencia al punto anterior es imposible abordarlas desde una sola dimensión
y requieren de un tratamiento interdisciplinar.

Otra fortaleza, quizás menos evidente a simple vista, pero que se puede
desprender como hipótesis del autor, es que si bien Wallerstein critica al
capitalismo y ve a este sistema-mundo en una crisis terminal, no se queda solo
en la crítica y en el pesimismo que puede desembocar el caos y la bifurcación
del sistema, y plantea de que es posible desarrollar un sistema alternativo al
capitalismo, y que este espíritu de superación y de que existe otro mundo
posible, se ve encarnado en el Foro Social Mundial (FSM), reunido inicialmente
en Porto Alegre, donde se reúnen militantes de muchos tipos e ideas, que se
dedican a una variedad de tareas desde demostraciones colectivas mundiales
o regionales a organizaciones locales en todo el mundo. Para Wallerstein esta
crisis del sistema-mundo capitalista nos ofrece individual y colectivamente la
posibilidad de la creación, o al menos de contribuir a la creación de algo que
pueda satisfacer más plenamente nuestras posibilidades colectivas.
El afán por las estructuras, derivado del pensamiento braudeliano y que
Wallerstein hace patente en su obra, puede hacer caer su análisis en el
estructuralismo, entendido como un movimiento heterogéneo del área de las
humanidades, que a partir de una metodología científica, pretende elaborar
teorías objetivas y verificables, a través del control científico a las ciencias del
espíritu. A partir de esta visión se puede desprender un punto débil del autor,
ya que los estructuralistas miran al hombre como un objeto de la historia y no
un sujeto, ya que miran al ser humano desde afuera, como a cualquier
fenómeno natural, y no desde adentro como lo hacen los estudios de las
conciencias y las mentalidades. Para el estructuralismo la noción fundamental
no es el sujeto sino la estructura, la relación. Los hombres, como las piezas de
ajedrez no tienen significado y no existen fuera de las relaciones que los
constituyen y especifican su conducta. El hombre, un ser inmerso en
estructuras psicológicas, económicas y sociales pierde su sentido como “yo”,
“conciencia” o “espíritu”.

“El fin de la Historia y el Último Hombre” Francis Fukuyama

• Puntos Fuertes:

1.- Generar una visión holística de la sociedad capitalista pos guerra fría,
constituyendo para bien o para mal un referente de opinión y análisis del
nuevo escenario mundial, una voz que se atrevió a constatar de manera
critica una época de profundo quiebres y cambios.

2.- La estructuración de su análisis en base al pensamiento filosófico,


teniendo como génesis en la filosofía clásica de platón, generando un
transitar hasta llegar un análisis Hegeliano.

3.- Integración interdisciplinar, haciendo dialogar a la ciencia política con la


historia, la sociología y la economía.

4.- Convicción en el modelo que plantea, fuerte convencimiento en sus


postulados y defensa de la democracia liberal.

5.- Una voz que se alza en el momento justo de necesidad de análisis, por
eso decimos que Francis Fukuyama, fue un profundo lector de su época.

• Puntos Débiles

1.- Presentación de una mirada unipolar de la Historia, principalmente con


su crítica al sistema comunista, mostrándose poco objetivo en el sentido de
poseer una crítica menos visceral con respecto a la URRS. El autor, de
manera antojadiza no toma en cuenta las condiciones materiales en que
surgió el comunismo, sino que lo muestra como un modelo fallido, casi sin
fundamento.
2.- Considerar aspectos como la drogadicción, la delincuencia y la pobreza
como “carencias de la implantación incompleta de la democracia liberal y no
como una falla de esta” nos parece un simplismo, ya que estos problemas
sociales, deben tener una explicación mucho más profunda que decir que
es, porque falta mayor democracia liberal.

3.- Reduccionismo económico, el autor no considera aspectos como los


ciclos económicos, sus descensos y subidas y los efectos que cada ciclo
puede ir teniendo en los procesos políticos y sociales.

4.- Casi no considerar a Oriente en su análisis y las nuevas formas


productivas que países como Japón ha ido adquiriendo, además de las
formas culturales distintas que no tendrían el mismo devenir histórico de
occidente, o por lo menos procesos diferentes.

5.- Y la más importante de las críticas o puntos débiles, que a algunos


pareció casi una herejía contra la Historia y las Ciencias Sociales es el
hecho de plantear que la Historia había terminado, siendo una aberración y
una actitud narcisista por parte del autor.

6. Comentario de grupo sobre estos dos textos.


Para empezar, sentimos que el haber conocido la teoría del segundo autor,
tanto para el grupo de Francis Fukuyama como para el de Immanuel
Wallerstein respectivamente, fue muy fructífero pues nos permitió ampliar los
contenidos con respecto a los temas tratados. Pudiendo responder y
contraponer ambas visiones lo cual se logro con facilidad ya que las diferencias
estan claras y acentuadas en ambos autores por medio de sus respectivas
tesis.
Cada uno de los grupos se apodera de las ideas del autor, y por medio de ello
se logra generar debate, criticas e ideas.
Para Fukuyama las conclusiones son compartidas pues se cree que al señalar
que la democracia liberal constituye el final de las ideologías de la humanidad y
por tal, el fin de la historia, es para ambos grupos extremista y muy sesgado.
En cuanto a su fundamentos y postulación a la existencia de las fuerzas de la
lógica de la ciencia moderna y la lucha por el reconocimiento, nos parece un
análisis interesante y creemos que por estos cimientos logro generar tal
repercusión pues de otra manera puede haber sido considerada una obra
banal, lo que al contrario provoco resistencia de parte de críticos, intelectuales
e investigadores, los que se hicieron manifestar y creemos pudieron hasta
haber influenciado a Immanuel Wallerstein.
Además sorprende como este autor cree que la democracia liberal acabaría
con la « lucha del reconocimiento » y por ende con los conflictos entre Estados
de la misma política, lo que solo se explica entendiendo la situación histórica
vivida por el autor, post guerra fría y auge de Estados Unidos como única
potencia mundial, fue singular y única para los intelectuales de la época,
provocando tal fatídico análisis sobre la historia.

El tipo de análisis que realiza el autor sobre el sistema mundo a nuestro


parecer se basada desde un punto de vista de la historia lineal en donde el
autor describe los orígenes del actual sistema mundo enfocándose
posteriormente en el presente se trata el tema de la crisis del actual sistema
mundo y a partir de esta información hace una proyección de la caída del
sistema mundo. El tema que desarrolla sobre el presente esta dentro la
situación del contexto político que observa del autor lo que a nuestro parecer
se basa la construcción de la obra al igual como lo hizo Fukuyama, esto podría
significar que como paso con la tesis de Fukuyama que parte del mismo
principio de considerar su contexto y a partir de esto hacer una proyección en
el futuro en el cual se produciría la hegemonía de Estados Unidos, Wallerstein
puede estar cayendo en una proyección anticipada y equivocada de lo que
pudiera suceder.
Consideramos importante el aporte que realiza Wallerstein en esta obra
en sobre la reformulación del sistema mundo como una unidad con una sola
división del trabajo y con múltiples sistemas culturales.

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