Volver a tejer los sueños y pedalear hacia el futuro
Por: Álvaro Córdoba Obando
Contratista – Oficina Asesora de Planeación
Indeportes – Antioquia – Colombia
“Ésta es, quizás, la mejor escuela que hay en
Colombia, y creo que como ésta no hay otra en el
país”, me dijo Don Javier mientras tratábamos de
salir de la ciudad rumbo al oriente, un viernes
después de medio día. “Es mi favorita, yo quisiera
que así fueran todas las escuelas del
departamento, se ha tratado de colaborarles pero
la liga tampoco tiene mucho con qué, sin embargo
en lo que a mi respecta, asumiendo los gastos con
mi jubilación me voy a acompañarlos en todo lo
que hacen”. En el camino iba preguntándome con
prudencia sobre mi vida y de vez en cuando
lanzaba algunas afirmaciones que parecían una
muestra exagerada de sus expectativas con el
gobierno y el trabajo nuestro en el Instituto. Me
habló de la escuela de Granada durante una
conversación sobre el ciclismo en el Departamento
en la que yo debía obtener algunos elementos de
diagnóstico para la formulación de un proyecto y
aunque mi interés estaba en el suroeste, él había
sugerido, sin insistir demasiado, en que debíamos
conocer ésta, para tener una idea de lo que, en su
opinión, debería ser un modelo. “Es una escuela
que surgió como estrategia para evitar el
reclutamiento de los muchachos”, me dijo, sin que
yo le hubiera preguntado sobre las características
particulares o cuáles sus atributos especiales para
considerarla ejemplar.
Taxis, buses o camiones llenos de gaseosas o
cerveza parecen irse encima del vehículo, porque
don Javier conduce con calma y cierta lentitud para
el afán y estrés de la ciudad, por eso prefiere
manejar afuera, me dice, y en seguida completa la
frase “me gusta puebliar como una forma de
trabajar por el deporte, por los muchachos; es para
mi una forma de encontrarle sentido a mi vida,
además el ciclismo es mi pasión desde que estaba
estudiando”. Yo no hice ninguna asociación entre
la costumbre de puebliar de Don Javier y la pasión
por el ciclismo, para inferir la razón por la que
estamos viajando ahora hacia un pueblo, excepto
porque desde que lo conozco ha estado en la liga
de ciclismo, lo que en la mayoría de los casos me
resulta casual.
Me cambió la cita de la reunión de miércoles a
lunes, pero no importó, quizá uno de los dos se
confundió en la agenda, por que el primero de
mayo cayó en martes, y por eso el lunes parecía
viernes y el miércoles en cambio parecía lunes.
Hablamos de cuál ha sido el proceso y cuáles
serían los componentes básicos de un proyecto
para promover el ciclismo en Antioquia,
empezando en el suroeste y cubriendo
progresivamente las demás subregiones que han
sido identificadas como canteras de grandes
talentos: el oriente, el norte y el Urabá para la pista.
El proyecto que se formularía tiene unas
limitaciones presupuestales y por lo tanto se trata
de orientar los recursos a apoyar los aspectos más
importantes que permitan fortalecer la formación e
iniciación como el desarrollo de talentos,
vinculando y comprometiendo las entidades
territoriales para un acompañamiento integral a los
deportistas.
Don Javier fue uno de los pocos dirigentes de ligas
que no opuso resistencia a los criterios y al
procedimiento que se definió en el año dos mil
cuatro para recibir el apoyo del municipio de
Medellín. Asistía a las sesiones de trabajo para
capacitación y orientación, o para asesoría y
revisión de proyectos acompañado de la secretaria
con quién se encargaba de la formulación. Me
cuenta que le dedicaban los sábados a hacer esa
tarea, para poder concentrarse y que fue así como
aprendieron a manejar los famosos formatos BPIN
que se exigía para gestionar recursos públicos
para actividades deportivas en Medellín. De esa
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manera se ahorraba pagar los dos o tres millones demolido, literalmente, medio casco urbano, lo que
que cobra un personaje por hacer los proyectos de me revivía una imagen dantesca que únicamente
las ligas, y esa “platica” le servía para el había visto, en las películas sobre la segunda
funcionamiento de la sede o los gastos guerra mundial. Le conté que para esa época yo
administrativos de la liga. Me contó sus hacía parte de una red nacional de iniciativas por
decepciones con la idea de un velódromo en el la paz y que como los bomberos, no daba abasto
oriente ofrecido años atrás y de lo que tuvo que para atender tantos incendios a principios de siglo,
“voltear” en gestiones con alcaldes y buscando frente a la ola de actos terroristas en el país como
terrenos, porque se suponía había un presupuesto una táctica de guerra para demostrar poder o para
inicial de diez mil millones de pesos como case del obligar a una negociación política del conflicto
departamento para la construcción de uno nuevo y armado. Nuestra tarea era acompañar a la
mejor que el de Medellín, pero que al final de población civil, promover prácticas de resistencia
cuentas, a pesar de las declaraciones públicas y noviolenta y reclamar el cumplimiento de las
compromisos oficiales, no se puso un ladrillo en normas internacionales del derecho humanitario
ninguna parte. en lo referente a respeto a la población civil,
eliminar el uso de armas no convencionales, las
Ya en la autopista Medellín – Bogotá yo había minas antipersonas y el reclutamiento de niños y
podido contarle algunos de los criterios con los niñas; una de las primeras acciones que el
cuales se haría la distribución de los recursos en Gobernador Guillermo Gaviria conjuntamente con
las regiones de acuerdo con los cálculos que se las organizaciones sociales y las ongs habían
hacen del presupuesto departamental y las realizado como alternativa a la estrategia de los
prioridades de los territorios o sectores en el plan “soldados campesinos”, de la “red de informantes”
de desarrollo. Insistía que igual que en el dos mil y las “zonas de normalización” planteadas por el
cuatro, cuando Fajardo empezó a gobernar en gobierno nacional de la época en el Plan Colombia
Medellín, el deporte debe entenderse en relación elaborado e impuesto por los Estados Unidos.
con los problemas sociales y económicos de la
población y no pensarse por fuera de los demás Le menciono con cierta nostalgia que ante las
temas del desarrollo departamental, de las
inequidades entre regiones que son tan
evidentes. Ante eso,
Don Javier con
paciencia y parsimonia
respondía nuevamente
con las frases que daban
cuenta de su confianza y
sus expectativas en el
gobierno y por eso insistía
en que debíamos conocer
la escuela de ciclismo del
Municipio de Granada, en el
Oriente Antioqueño. “Usted
conoce el municipio?”, me
dijo, y yo le conté que había
estado allá luego de un ataque
de la guerrilla que había
propuestas de seguridad armada que se

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hacían desde Bogotá, el Gobernador y su asesor ambiental que ha logrado desarrollar en sus
de paz habían propuesto la seguridad alimentaria, deportistas; me dice que él sugirió a los líderes del
como una forma efectiva de disminuir y acabar con club invitar al alcalde para exponerle la historia y
la inequidad que además era iniquidad, porque desarrollo del mismo y dar fe de lo que se ha hecho
resultaba injusto y vergonzoso que en un hasta ahora. Aunque está demás, le advierto que
departamento con tanta riqueza los niños se yo no tengo autoridad para hablar en nombre del
estuvieran muriendo por desnutrición, tan instituto, ni muchos menos autorización para hacer
repudiable como la guerra misma y que ese había acuerdos o asumir compromisos, que voy
sido el contexto y el motivo por el cual se creó el únicamente con el interés de informarme más
programa MANÁ, que ha logrado sobrevivir a pesar sobre tema del ciclismo, conocer de primera mano
de los cambios políticos en los últimos doce años. una experiencia o iniciativa local que me generó
mucha curiosidad por eso de promover el ciclismo
Salimos de la autopista para tomar una vía más como una forma de evitar el reclutamiento de
estrecha hacia Granada; a lado y lado del camino niños, ya que en la conversación en la oficina, él
se van divisando los cultivos y las casas me había hablado de la preocupación de algunas
campesinas que surten de alimentos al Valle del personas por los “parches de pelados” en el atrio
Aburrá y otras partes del país, pero también se ven de la iglesia y la forma como lograron seducirlos
las ruinas de las casas abandonadas durante la para la bicicleta como una alternativa para el
violencia de los noventa y parte de este principio tiempo libre, lo que me pareció extraño, pues la
de siglo, por la acción de la guerrilla primero, por mayoría de las iniciativas recurren al fútbol como la
los paramilitares cuando entraron a disputarse el única o mejor opción y que, aunque le incluyan
control territorial y luego durante su
hegemonía antes de la “desmovilización”
de los bloques que operaban en esta
región y que generó uno de los más
grandes desplazamiento masivos de la
población que dejó al municipio con cerca
de la mitad de habitantes. Don Javier me
cuenta que en esa época, organizó una
competencia con deportistas de varios
municipios del oriente, a quienes les tocó
ver los cadáveres de muchachos
asesinados, tirados en la vía al paso de la
carrera, y yo voy recordando la ruta de la caravana
algunos cambios en la forma de juego no deja de
que vino desde Medellín a acompañar
mover motivaciones e intereses extradeportivos
simbólicamente a los habitantes del municipio ante
(legales e ilegales) que riñen con los propósitos
la magnitud de los daños y del sufrimiento de la
iniciales o con el nombre de los torneos, con el
gente.
juego limpio o los valores para la convivencia y que
Después de dos horas de viaje nos vamos en el peor de los casos terminan legitimando
acercando al municipio y le pregunto a Don Javier prácticas y actores ilegales.
cuál será la actividad a la que me invitó. Me cuenta
que hoy los muchachos del club iban a estar en una
jornada de siembra de árboles apoyada por
Cornare en la cual el club trabaja de manera
voluntaria como parte de la educación y conciencia

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Entramos al pueblo, parqueamos junto a la iglesia arreglaron, acondicionaron y aún están pagando
y mientras nos bajamos del vehículo, las imágenes las cuotas. Que sirve para transportar a los
del entorno del parque me recuerdan las casas y muchachos y las bicicletas a municipios cercanos
edificios caídos hace más de diez años, una cuando van a competir y también es una forma de
persona se acerca y nos saluda, es el gestor del generar unos ingresos para la fundación, la
club y de la idea de promover el ciclismo en el escuela o el club de ciclismo, porque al final, (sin
pueblo. Onofre Yepez Ossa es una persona joven, mayor complique ni leguleyadas, pienso yo), para
de apariencia afable y sencilla que nos invita a ellos son la misma cosa.
tomar tinto antes de la reunión. En la cafetería nos
cuenta brevemente que se fue del pueblo hace En el taller – almacén trabajan varios muchachos
mucho, en tiempos de la violencia, a buscar futuro del club que han aprendido del entrenador del
en Medellín, donde logró una forma de vida digna equipo la mecánica de las bicicletas y se encargan
como comerciante. Después de unos años decidió de hacer el mantenimiento de todas las que tienen,
volver de visita a su tierra natal y ese día, a la además de ofrecer un servicio al público.
entrada del pueblo, se sorprendió al ver a tantos
Ya son más de las cinco y media de la tarde y
pelados fumando marihuana lo que lo
motivó a hablar con el alcalde de la
época y preguntarle qué iban a
hacer para enfrentar a ese
problema. Sin muchas
discusiones le contó al alcalde
que, se buscaría unas bicicletas
de las que la gente no usa y deja
guardadas en los parqueaderos de
la casa para prestarles a los
muchachos o comprar algunas y
pagar a plazos de alguna forma.

Mientras nos terminamos el tinto,

llegaron otros socios del club, se
sientan y nos cuentan algunos
recuerdos de la violencia que sufrió el
pueblo, con tanto respeto y sobriedad
como si hubiera ocurrido ayer, se siente
el dolor tan vivo y tan reciente, que no acierto a
nada más que guardar silencio.
Salimos rumbo a la reunión pero Onofre se
adelanta para marcarnos la ruta y nos dice que nos
va a mostrar algunas de las actividades y logros del
proyecto. Al otro lado de la cafetería hay un bus
escalera o chiva, cuidadosamente pintado y lavado
parqueado al frente de un taller de bicicletas y
almacén de repuestos atendido por jóvenes.
Onofre señala primero el bus y cuenta que lo
compraron dañado, que ellos mismos lo
pienso que es
necesario afanarnos a hacer la reunión para no
volver tan tarde a Medellín, por la lluvia y el estado
de la vía. Sin embargo los socios del club
aprovechan para presentarnos a todos los
muchachos que aún están en el taller y que
estuvieron en la mañana y hasta después del
medio día en la siembra de árboles.
La alcaldía le entregó al club, en calidad de
comodato, un local en el viejo edificio al lado de la
iglesia que el municipio le compró a unas monjas y
donde funcionó durante muchos años el colegio.

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Aunque el local fue por mucho años salón de
clases del colegio, terminó como una bodega por
el deterioro de sus pisos y paredes; los socios
lograron adecuarlo de tal manera que resulta
agradable para reuniones con todos los
deportistas, para cursos y
charlas, además de las oficinas y la bodega donde
guardan todos los implementos y más de
doscientas bicicletas que han conseguido en sus
escasos tres años de funcionamiento.
En video beam hacen una presentación del origen
y recuento del proceso del club con todos los
resultados en estadísticas juiciosamente
elaboradas por uno de sus socios, licenciado en
filosofía y ciencias teológicas, coordinador de
convivencia de la institución educativa del
municipio. Me entero que la fundación se llama,
Fundación Deportiva y Cultural “Tejiendo
Sueños”, que cuenta con el reconocimiento de
Indeportes, tiene como objeto social la formación
humana. Sus beneficiarios, sin que hubiera
habido una decisión previa o criterio de priorización
son jóvenes que han sido víctimas, que nacieron y
crecieron en la violencia de mediados de los
noventa y principios de siglo, varios de
ellos huérfanos de padre y
madre. La exposición del profesor Cesar Augusto
García Aristizábal, vicepresidente del club es
pausada, precisa y clara, sin ningún asomo de
morbosidad cuando menciona el tema de los niños
y niñas víctimas de la violencia, ni chicanería a la
hora de mostrar las estadísticas de los logros de
los deportistas en las competiciones.
Al finalizar la exposición sugiero una ronda de
presentación de los socios del club y una breve
reseña de la manera como llegaron y se
vincularon, me sorprende que varios son
educadores jubilados y licenciados en educación
física, todos padres o madres de familia con hijos
en el club, dedican mucho tiempo al trabajo
voluntario y tienen responsabilidades permanentes
en un comité o frente de trabajo del club; y como si
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el destino hubiera juntado a las personas y podios que han ganado, me cuentan que tienen
planificado minuciosamente los tiempos, El videos de todo lo que han hecho desde el principio
profesor Alfonso Aristizábal cuenta su historia y yo les pregunto si alguna vez los periódicos
como normalista, docente, jubilado, y su paso por regionales o nacionales, o un programa de
Támesis, donde estuvo más de veinte años como televisión ha venido a conocer y documentar la
entrenador del club de ciclismo en ese municipio, experiencia y me dicen que no, pero que ellos
en Cali otros cinco, en Rionegro un poco menos y tienen un blog en internet donde tratan de publicar
la espera de un contrato en el equipo Orgullo Paisa lo que consideran es más importante. Don Javier
que nunca llegó, para regresar a su pueblo natal, y ofrece publicar en otro blog de ciclismo algunas
por las vueltas que da la vida, a ser el entrenador cositas del club, que es un blog de “gomosos” del
y director deportivo del club. Y aunque yo ciclismo y que eso no tiene nada que ver con su
interrumpo para hacer preguntas capciosas, condición de director ejecutivo de la liga de
responden con tranquilidad y espontaneidad que ciclismo de Antioquia.
para nada obedecen a formato o libreto alguno de
esos que elaboran y se aprenden de memoria Yo hago unas observaciones respecto de los
quienes no tienen nada que mostrar y nada que textos sobre la justificación y antecedentes del
hacer. Me explican cómo hacen el seguimiento de proyecto que presentaron, en donde no aparecen
los deportistas cruzando la información del las características particulares, la naturaleza y
rendimiento académico con el rendimiento composición del club, según las historias que me
deportivo, del apoyo médico que ofrece el hospital acaban de contar y por los fenómenos sociales y el
del municipio y las dificultades para que los niños contexto histórico del municipio en los últimos
y jóvenes con quince o veinte años.
problemas
Son más de las siete de
la noche, nos
despedimos en medio
de un aguacero aún
más fuerte, con el
compromiso de hacer
un taller más
descansado con
todos los muchachos
deportistas y
recoger de ellos su
versión y sus
testimonios.

De regreso el
viaje se hace
más lento por la lluvia,
la falta de señalización de las vías, y la hora de
nutricionales puedan
retorno. Don Javier insiste en sus expectativas
recibir, este año, el apoyo del programa MANÁ de
frente a la gestión del gobierno en estos cuatro
la Gobernación de Antioquia, igual que en los
años, yo trato de explicarle que va a ser
anteriores. Me muestran las fotos de todas las
complicado porque el recurso es escaso y se tiene
competiciones en las que han participado, los
que priorizar, pero el me aclara que ésta es la

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primera vez que un funcionario de Indeportes
escucha sin afán a un grupo como este y que eso
es muy importante, que no se trata de dinero –me
dice- sino de reconocimiento, estímulo, valoración
así sea simbólicamente. Me cuenta que desde su
infancia en Yolombó y hasta antes de jubilarse en
Fabricato siempre se soñó dedicándole todo el
tiempo necesario al ciclismo, que antes de entrar a
trabajar ahí y mientras estudiaba filosofía y
teología para ser cura, tenía como su pasión el
ciclismo, que ahora, después de que sus cuatro
hijas son todas profesionales, después de la
muerte de su esposa, con quién había hecho
planes para descansar juntos en una casita en
zona rural de Guarne, el ciclismo es todo en su
vida. Y yo me quedo pensando en todo eso.
Ahora entiendo mejor porqué usa la palabra
mística para referirse a la manera en que se
comprometen y realizan las actividades los
integrantes del club escuela de ciclismo de
Granada y que a mi me parece exagerada, cuando
se usa en el mundo laico o secular. Sólo ahora
vengo a entender un poco que la acción del club
encarna una mística que trasciende la falsa
dicotomía cartesiana entre cuerpo y espíritu
(asunto del que me hablaron varias veces en el
bachillerado y en la universidad), recuperando el
sentido original en el que el cuerpo era el alma,
como nos recordaba alguna vez el poeta William
Ospina cuando empezábamos a preparar los IX
Juegos Deportivos Suramericanos Medellín 2010.
Que el club encarna la mística del pueblo a pesar
del sufrimiento que ha vivido en cuerpo y alma.
Ahora entiendo porque lo de puebliar tiene relación
con el ciclismo: el ciclismo es un deporte popular o
sea pueblerino, de los pueblos, más que de las
ciudades, del pueblo más que de las élites, aunque
haya algunas excepciones. Que la solidaridad en
los pueblos es una actividad natural, cotidiana,
práctica, como respirar o montar en bicicleta, por
eso lograron conseguir varias bicicletas, aunque
eran usadas, por eso compraron la chiva vieja y la
dejaron como nueva, por eso tienen una sede
bonita, con oficina, taller, almacén y bodega, a
punta de rifas, bazares, meriendas y trabajo
voluntario que hace que otros se comprometan y
colaboren (Pienso en “Seguir la Corriente” de la
Teoría del Caos). Por eso aunque no tienen mayor
habilidad para formular proyectos, tienen clara su
misión y su visión del futuro.
Ahora siento que en Granada la solidaridad y el
ciclismo se volvieron una forma cotidiana de
respirar juntos, (o sea con-spirar) contra el miedo,
la violencia, la guerra, la muerte. Una forma de
hacer el duelo, volver a tejer los sueños y “pedalear
hacia el futuro”, como dicen el lema del club y el
nombre de la fundación que son lo mismo, el
mismo sueño de futuro en una bicicleta.
Me pregunto entonces, si esto se puede hacer en
otras partes, si el modelo sirve para otros pueblos
y comunidades? Si este club tiene algo en común
con la Carrera de Miguel que amigos a quienes aún
no conozco iniciaron en un pueblo de Argentina, el
Municipio de Rio cuarto y ahora la conocen y
realizan en otras parte de América y Europa, como
homenaje a las víctimas y en su memoria. Me
pregunto si esto es prevención o resiliencia,
resistencia o reparación, silenciosa, sin discurso,
sin retórica.
Medellín, mayo 7 de 2012.
Alvarocordoba50@hotmail.com