ESTRATEGIAS EMPRESARIALES FRENTE AL TRATADO DE LIBRE COMERCIO EN NORTEAMERICA

MICRO, PEQUEÑA Y MEDIANA EMPRESA.

PRÓLOGO

La dinámica de la economía mundial, caracterizada por una intensa competencia e

interdependencia, ha llevado a la mayoría de los países desarrollados a buscar una nueva estrategia
industrial y comercial.

En este proceso, las micro, pequeñas y medianas empresas tiene un papel estratégico dada su gran
flexibilidad y capacidad para adaptarse a las cambiantes necesidades del mercado, así como por su
papel decisivo en el desarrollo regional y en la distribución del ingreso. Es por ello que varios países
desarrollados o de desarrollo intermedio cuentan con políticas específicas de apoyo y fomento para
las empresas de esta escala industrial. Tal es el caso de países como Estados Unidos, Japón, Italia,
Canadá y Francia, entre otros.

México no se encuentra al margen de esta tendencia mundial ya que, de acuerdo con el Programa
de Modernización y Desarrollo de la Industria Micro, pequeña y mediana 1991-1994,
aproximadamente el 98 por ciento del total de los establecimientos de transformación existentes
en nuestro país, absorbe el 49 por ciento del producto manufacturero (10 por ciento del producto
interno bruto).

La política de fomento industrial para apoyar estas empresas se encuentran establecida en el

Programa de Modernización y Desarrollo 1991-1994 y en la ley Federal para el Fomento de la
Microindustria y la Actividad Artesanal.

El propósito de estos y otros instrumentos de fomento industrial es el de contribuir a superar los

problemas operativos y de mercado de estas empresas, así como favorecer su instalación, operación
y desarrollo a través de las siguientes estrategias: organización interempresarial, servicios
tecnológicos, promoción de la calidad total, financiamiento, gestión empresarial y capacitación.

INTRODUCCIÓN

Por la complejidad de la economía actual, muy pocos países podrían aspirar a ser realmente
autosuficientes, es más, a ninguno le conviene. Resulta absurdo y antieconómico el producir aquí
más caro y de menor calidad lo que podemos obtener del extranjero a mucho mejor precio y calidad,
dando a cambio aquello que nosotros producimos con mayor eficiencia.

La búsqueda de autosuficiencia ha generado:

1. Qué países como el nuestro dilapiden sus escasos recursos pretendiendo abarcar
demasiados campos y como consecuencia de ello elaboren un gran número de productos
de mala calidad y alto precio que no se venden en el extranjero.
2. Que el proteccionismo del que disfrutaron muchas empresas les significará para mejorar
sus productos, ¿para qué si tenían un mercado cautivo? A final de cuentas fue la economía
en su conjunto, y especialmente los más afectados con estas medidas.

Hay quienes creen que esta división internacional del trabajo nos levaría, fatalmente, a convertirnos
en eternos exportadores de materias primas y mano de obra barata. Tal suposición no tiene bases
sólidas, demuestra una visión fatalista y negativa de la realidad que ya ha sido numerosas veces
negada en los hechos.

Durante más de dos siglos, lo economistas lanzaron sus argumentos tanto a favor como en contra
de la división internacional del trabajo, hoy todas las naciones la aceptan como un paso necesario
y deseable para sus economías.

El libre mercado promueve la competencia, ya que significa el más directo estímulo para que las
empresas nacionales se vuelvan más eficientes, ampliado con ello la libertad de elegir consumidores
y desarrollar nuevas unidades para un mercado externo al que anteriormente no tenían opción.

Una economía, que durante medio siglo o más ha estado protegida, generará reacomodos, quiebras
de empresas y desempleo.

El reacomodo de una economía a través del libre comercio significa que miles de personas se van a
desplazar de empresas poco eficientes y competitivas a otras que lo son más, y con ello van a
incrementar su productividad y eficiencia, generando con ello más producto y éstos, para su
adecuada distribución, comercialización, promoción, etcétera, requerirán de más empleos.

1 LA ECONOMIA DEL MERCADO