Universidad Nacional de Colombia

Departamento de Filosofía
Curso: Pensamiento Colombiano
Docente: Ciro Roldan
Estudiante: Diego Alejandro Sánchez Alzate

¿Qué es la ilustración?

“¡Sapere aude!¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! He aquí el lema de la ilustración”

-Kant, Respuesta a la pregunta: ¿Qué es la ilustración? -

La ilustración, movimiento intelectual y cultural que nació a mediados del siglo XVIII y que forjó los
siglos venideros. Sin embargo, la definición de ilustración es de cierta forma mucho más ambigua
por su propia magnitud al autodefinirse como “aquella empresa que disipara las tinieblas de la
ignorancia de la humanidad mediante las luces del conocimiento y la razón”. Por eso es necesario
entenderla a partir de su contenido más esencial, tomando como petitio principii: La libertad en la
sociedad es inseparable del pensamiento ilustrado, ella misma se proclama como la que liberará a
los hombres del oscurantismo que dejo el mito, de la opresión de los monarcas y de la naturaleza
misma, dando como arma revolucionaria la razón y el entendimiento, que toman forma en el
positivismo científico, el racionalismo y en la tecnificación e institucionalización de la sociedad.

Immanuel Kant califica este movimiento como una “salida de una autoproclamada minoría de
edad”, pues para él aquel que es incapaz de servirse de su propio conocimiento o por falta de
decisión y valor o incluso por pereza, no hace uso de su entendimiento, no es diferente de un niño
que necesite de “tutores” que lo guíen, que decidan por él y por lo tanto lo gobiernen. Estos
llamados “tutores” a su vez pueden generar en aquellos que no han salido de la minoría de edad
una dependencia a ser gobernados; parece difícil el camino de la ilustración y más difícil es
empezarlo desde la cómoda posición del animal doméstico, que lo cree imposible, pues no está
acostumbrado a actuar de dicha manera, pero el hombre libre es capaz de ilustrarse a sí mismo, la
libertad va a devenir necesariamente en ilustración. No obstante, ella sólo se puede dar en una
completa libertad, pues aquellos que han estado bajo el yugo de los “tutores” y siendo incitados por
algunos de ellos solamente cambiarán su papel de víctimas al de victimarios en un intento de falsa
ilustración. Debido a la inversión de roles en el ejercicio del poder y otros factores, como lo es que
la legitimidad de los dirigentes sea dependiente de la libertad del pueblo, pues solo así puede
representar su verdadera voluntad; el hombre ilustrado no sólo debe servirse de la razón, sino
también hacer un uso público de ella, lo cual se puede matizar en hacer un empleo del
entendimiento y del conocimiento para que la sociedad llegue un fin común, utilizando mecanismos
que generen unanimidad artificial para elegir y evitar la destrucción de dichos fines públicos, estos
mecanismos son las instituciones del Estado. Sin embargo, la autonomía que le ofrece la ilustración
al hombre no es la antítesis de la “obediencia”, ya que, como miembro de la totalidad de un Estado,
está sometido a obedecer las órdenes dadas, aunque no está obligado a seguir las órdenes
ciegamente, por el contrario, está en el deber de cuestionarlas haciendo un uso público de la razón.
Es en el cuestionar lo establecido que se basa el pensamiento ilustrado, pues gracias a la Critica que
se puede hacer una valoración con la que se llega al cambio, que es a su vez progreso. Nada puede
ser permanente, aquello solamente traerá estancamiento a la humanidad y la apartará del camino
de la verdadera ilustración.

Michel Foucault hace énfasis en esta última parte, debido a que es por medio de la critica que el
hombre logra contraponerse a algo, ya sea la religión por medio de la secularización que se dio
después de la reforma luterana o al estado monárquico durante el periodo de la revolución francesa.
La crítica, según Foucault, es sinónimo de ilustración, más aún cuando es por medio de ella que se
enfrenta a las tradiciones poniendo en duda la veracidad y justicia de las leyes establecidas por
medio de la pregunta: ¿Cómo no ser gobernados? Lo que busca la formulación de esta pregunta no
es encontrar el método para liberarse de todo tipo de gobierno, pues la política como arte de
gobernar a los hombres es el arte de artes, ya que es la encargada de dar dirección a la conciencia
y de encaminar los esfuerzos de la sociedad a un fin. Por el contrario, a lo que aspira dicha pregunta
es a encontrar los límites del arte de gobernar, hasta donde llega el poder de la autoridad y el poder
del gobierno al estar enfrentada en oposición a unos derechos universales imprescindibles, el
conocido derecho natural. El poder deja de tener veracidad por sí mismo, pues todo juicio que
pretende llegar a ser conocimiento verdadero ha de ser filtrado por el positivismo, desprendiéndolo
de las categorías universales que a su vez transforma en mito, el Estado debe servirse por lo tanto
de la razón y racionaliza la historia, la economía y la sociedad, además de generar una ciencia del
Estado. La sociedad se tecnifica en todos sus frentes. Lo anterior se ve reflejado en la formación del
capitalismo y la constitución del mundo burgués, donde el saber se utiliza en relación con una serie
de mecanismos que inducen a comportamientos o “discursos verdaderos” que se articulan por
medio de las estructuras de racionalidad, legitimando los términos de conocimiento y dominación,
puesto que en su intento de constituir a los hombres en señores asemeja a Dios gracias a que les
otorga soberanía sobre lo existente. Esta conexión entre los mecanismos de coerción y
entendimiento es lo que Foucault llama eventualización, lo cual permite aprehender lo que es
aceptable en un sistema, puesto que se logra hacer una valoración de un juicio a partir de su
positividad. La verdad no solo significa la conciencia racional, sino también, su configuración en la
realidad. No le importa encontrar la verdad sino en la operación y el procedimiento eficaz,
centrándose en el obrar y el trabajar, en el descubrimiento de datos desconocidos para lograr una
mejor vida. Así es como la ilustración logra llevar a cabo su objetivo de liberar a los hombres del
miedo a lo desconocido, por medio del desencantamiento del mundo, pretendiendo servirse de la
naturaleza para dominarla por medio del conocimiento, dado que la superioridad del hombre reside
en el intelecto; y el saber que es poder no conoce límites y devine en la esclavización de las criaturas
y de los hombres. El hombre de la ciencia conoce la naturaleza en la medida en que puede
manipularla y de esta forma el en sí se convierte en para él. La materia por fin es dominada sin la
ilusión de las fuerzas superiores doblegando todo al criterio del calculo en vista de que el número
se convierte en canon de la ilustración. De esta manera el pensamiento se independiza de los
objetos y el hombre se distancia de ellos, dejando de conocerlos por medio de la asimilación
totémica, sino que son entendido mediante el trabajo. Sin embargo, la ilustración no es la antítesis
del mito, por el contrario, este es un primer estadio de ella, ya que intenta dar sentido al mundo a
través de la proyección de lo subjetivo en la naturaleza.
Por lo tanto, la Ilustración más que un movimiento dado a mediados del siglo XVIII ha de ser
entendido como parte de un devenir histórico, como fin al que pretende llegar la humanidad que
utiliza a la razón para aspirar a la libertad. Una razón que toma forma en el pensamiento crítico, que
plantea los limites de los sistemas dados, encontrando sus negaciones y superándolos en un
continuo progresar. Que separa el conocimiento racional de las ilusiones e imaginaciones de los
mitos del pasado que a su paso dejan tradiciones que han de ser depuradas. Que utiliza la ciencia
para liberar al ser humano de las calamidades que trae la naturaleza y que la estudia para utilizarla
en beneficio propio, moldeando la materia por medio de la tecnificación e industrialización del
trabajo. Todo esto, organizado en un Estado que se rige por las instituciones que velan no por
controlar, sino evitar el entorpecimiento entre la gente y dirige sus esfuerzos para llegar al fin
presupuesto manteniendo la libertad de aquellos su voluntad representa.