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¿Qué tal amigos?

Bienvenidos a AQUÍ ENTRE


NOS, un programa pensado en los Maestros de
Escuela Sabática.

Continuamos nuestra marcha a través de las


ETAPAS FAMILIARES, un tema trascendental
para todo individuo que quiera verse realizado en
esta vida, y preparado para la comunión con la
familia de la eternidad.

LECCIÓN 4: Esta semana conversaremos sobre la manera de


CUANDO ESTAMOS SOLOS. enfrentar aquellos momentos marcados por la
Edición para Maestros de la Guía de Estudio de la Biblia soledad, un estado para el que nunca fuimos
creados.

Déjame insistir en que veas la VISIÓN PANORÁMICA DEL TRIMESTRE, donde el pastor
Claudio Consuegra (autor de la lección) nos dice los puntos más importantes de cada una de las
13 lecciones de manera muy amena.

Su esposa también nos hizo un resumen general bastante puntual, y donde nos abren su corazón
de la manera en que solo una pareja cristiana sabe hacerlo.

Ahora te invito a que juntos le saquemos provecho al folleto de maestros. Vayamos a la sección
EL SÁBADO ENSEÑARÉ en la página 50.

Nuestra propuesta para conducir la lección es usar el Ciclo del


El Sábado aprendizaje. Como mínimo necesitarás 30 minutos para dar la
clase, aunque idealmente, son 45. No vas a repetir lo que los
alumnos ya leyeron durante la semana, sino que los llevarás a
Enseñaré P. 14 través de 4 etapas llamadas MOTIVA, EXPLORA, APLICA Y
CREA.
En su orden, estas etapas realizan lo siguiente: muestran por qué
es importante la lección, se resaltan el contenido principal, se habla sobre cómo aplicarla y se
desafía a incorporarla la vida.

Comencemos con la fase inicial que es MOTIVA. Esta es muy


MOTIVA importante porque abre la mente al aprendizaje ya que muestra
porqué es importante la lección. Es una fase introductora y debe
[3 Minutos] dejar un clima que facilite el diálogo grupal.

Como maestro introduciría la clase así: “si eres soltero y vives


independiente de tus padres, o si eres divorciado, viudo o casado con un cónyuge que no te
acompaña a la iglesia, sin dudas estás experimentando en alguna medida la soledad. La lección de
esta semana se enfoca en cómo ayudar a quienes viven esa experiencia dentro de la iglesia”.
Eso lo saqué de la RESEÑA de la página 50 del folleto de maestros, de donde de manera natural
surge la sección MOTIVA. Como ves no nos toma mucho tiempo. Lo máximo que debes
demorarte son 3 minutos.

Con esto podemos pasar a la fase siguiente. ¿Cuál es? Se llama


EXPLORA EXPLORA, en la que generalmente nos demoramos unos 15
minutos y consiste en hablar de los puntos importantes de lo que se
[15 Minutos] estudiado.
El folleto de maestros tiene una sección llamada COMENTARIO
que nos da muy buenos aportes para esta parte. Toquemos cuatro
puntos:
1. LA SOLTERÍA. Como recordarán, la lección nos resaltó una frase dicha por Dios en la
creación: “no es bueno que el hombre esté sólo”. Pide a alguien que lea Génesis 2:18 y
pregúntale a la clase: ¿qué hizo el Creador para que Adán se percatara de la importancia de
tener un cónyuge?
Sin duda la clase hablará de que Dios le dio la tarea a Adán de poner nombre a los animales
para que se diera cuenta que estaban en parejas y luego de eso creó a Eva, de esa manera
resaltó la tendencia de vida en hogar para la que fuimos diseñados.
Sin embargo, en nuestra iglesia encontramos muchos hermanos que nunca se han casado y a
lo mejor nunca lo harán. Aunque el plan divino es el matrimonio, quedarse soltero no es
pecado. Invita a la clase a buscar al menos 5 ejemplos de personajes bíblicos de los que no se
dice que fueron casados, y sin embargo sirvieron a Dios poderosamente.
Luego pregunta las ventajas potenciales de quedarse soltero. [Nota: Algunos solteros bíblicos
son Jeremías. Pablo, Juan el Bautista, Daniel y Jesús].
2. EL DIVORCIO. La Biblia deja claro que “lo que Dios juntó no lo separe el hombre”. Sin
embargo, la triste realidad es que algunos matrimonios de nuestra iglesia están pasando por
ese escenario.
Las situaciones pueden variar, puede ser que llegaron en ese estado al evangelio, o que su
cónyuge nunca aceptó al Señor y ahora se divorció, o que se casó en yugo desigual y esta es
una consecuencia de esa situación o que siendo ambos creyentes su matrimonio fue fallido.
La realidad es que muchos están sufriendo la soledad después de un divorcio, y que es
nuestro deber cristiano aplicar bálsamo y vendar heridas, sobre todo en los casos en los que
bíblicamente la persona está obligada a quedarse solo, sin volverse a casar, como lo dice
Pablo en 1 Corintios 7:10,11.
Lee las siguientes promesas bíblicas y pregunta: ¿Cómo podemos usar estos textos para
edificar a nuestros hermanos? Isaías 54:5; Oseas 2:19-20.
3. LA VIUDEZ. El matrimonio tiene una cláusula: “hasta que la muerte los separe”.
Posiblemente alguno de nuestros hermanos de la iglesia tuvo un matrimonio lindo, pero la
muerte lo separó de su cónyuge.
Su vida le cambió radicalmente. Dependiendo de su edad tendrá diferentes desafíos, pero
muchas veces los pasamos desapercibidos ya que, aunque los primeros días recibieron
nuestro apoyo, los quehaceres de la vida nos enfoca en nuestra realidad y olvidamos la de
ellos.
Lean Isaías 57:1,2 y Apocalipsis 14:13 y conversen sobre las razones por las que Dios
permite la muerte aparentemente prematura de sus justos.

4. SOLEDAD ESPIRITUAL. La otra clase de soledad en la iglesia es la de ese hermano o


hermana a la que su cónyuge no comparte su fe y por consiguiente no le acompaña a la
iglesia.
Los vemos sentados solos en los bancos, o con sus hijos, pero con el anhelo interior de que
algún día ese cónyuge se convierta al Señor, y lo acompañe a adorar en la congregación.
En la mayoría de los casos les toca una lucha ardua por la falta de apoyo en la orientación
espiritual de los hijos. Están casados, pero se sientes espiritualmente solos y sin apoyo.
Invita a la clase a leer Isaías 41:10,13 y pregunta: ¿Cómo pueden ayudar estas promesas en
esos casos?

La tercera estación en nuestra conducción de la clase la llamamos


APLICA APLICA, y debemos buscar que sea muy conversacional; por lo
menos le tenemos que dedicar unos 10 minutos. Los alumnos
[10 Minutos] debieran en ella participar con sus opiniones sobre cómo dar
solución a situaciones hipotéticas que les planteemos.
Aquí tenemos un lema: HABLAR POCO y lograr que los alumnos
PARTICIPEN MUCHO. Encontramos ese tipo de preguntas en la sección del folleto de maestros
titulada APLICACIÓN A LA VIDA que en esta ocasión está en la página 53, pero que también
se pueden extraer de la sección de los viernes llamada PREGUNTAS PARA DIALOGAR, o de
algunos interrogantes al final de las lecciones de cada día.
Te prepongo estas preguntas para que tengas como punto de partida:
1. ¿Por qué es imprudente hacerle comentarios públicos a un hermano o hermana sobre “cuando
piensa casarse”?
2. Invita a los miembros de la clase a que compartan alguna situación en la que hayan
experimentado profundamente la soledad y que comenten qué los hirió, que los ayudó y que
aprendieron de esa experiencia.
3. ¿De qué forma práctica y sin prejuicios se puede ayudar a alguien que está atravesando un
divorcio?
¿Cómo podría nuestra congregación crear un ministerio de apoyo para los miembros viudos o
cuyo cónyuge no asiste a la iglesia?
La fase final de nuestra lección es CREA, en ella desafiamos a la
CREA clase con una tarea, que la mayoría de las veces es personal. Sin
embargo, la asignación que les sugiero esta vez es grupal:
[2 Minutos] Invita a la clase entera a visitar a un hermano viudo, soltero o
separado, pasen un tiempo con él o ella y atiéndanlo emocional y
espiritualmente.
CONCLUSIÓN.
Para terminar la lección debe decirse una frase que la concluya. Debe ser simple y elegante para
cerrar con broche de oro. Yo lo haría diciendo lo siguiente: “El Señor dejó las congregaciones
locales para mitigar la soledad de la vida, usemos eso para cumplir la misión”.

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