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Relato breve de una experiencia en una Capilla Mormona junto a Pedro,un hombre de la calle que tiene un mensaje de enseñanza espiritual.
Escrito por mí: Juan Pedro López-Montevideo-Uruguay/2015
Relato breve de una experiencia en una Capilla Mormona junto a Pedro,un hombre de la calle que tiene un mensaje de enseñanza espiritual.
Escrito por mí: Juan Pedro López-Montevideo-Uruguay/2015
Relato breve de una experiencia en una Capilla Mormona junto a Pedro,un hombre de la calle que tiene un mensaje de enseñanza espiritual.
Escrito por mí: Juan Pedro López-Montevideo-Uruguay/2015
El hombre entró en el salón con temor,miraba cabizbajo.Quizás se sentía
diferente dada su apariencia ante todas aquellas personas de corbata. Vestía una campera de invierno sucia y manchada,en sus manos traía una bolsa y un palo de escoba,que usaba de bastón para ayudarse ya que según supe había tenido un accidente y le costaba caminar. Respetuosamente dijo permiso y se sentó a mi lado.Durante el rato que estuvo allí escuchaba atentamente y cuando se le permitió manifestó su testimonio sobre la divinidad del Maestro Jesús el Cristo,luego agregó: Soy pecador,fumo y bebo pero sé que él me salvó cuando fuí atropellado.Sé que mucha gente se aleja de mí por mí apariencia;estoy sin bañarme y mi ropa está sucia,duermo en la plaza,vivo en la calle y soy cuida-coches pero tengo fé en Jesús.Mucha gente me pregunta : ¿ Cómo podés tenér fé en Jesús y creer ? Si miráte como estás, y yo les contesto que él me salvó la vida. Ante éste testimonio no pude más que sentirme emocionado,porque aquellos hombres de impecable apariencia y lenguaje sacro no habían compartido un testimonio tan rico y verdadero. El Lider que había venido de visita y estaba frente a mí,lo miró de costado;se acomodó en su silla y no dijo una palabra. Cuando la clase terminó,permanecí junto a él. Le pregunté su nombre : Pedro - me dijo - ¡ Igual al mío ! - le constesté. Comencé a hablar sobre su vida y cuando me dí cuenta me encontraba solo junto a él,totalmente solo en el salón.Nadie se acercó a hablarle,saludarle o hacerle sentír bienvenido;creo que estaba acostumbrado a que la gente lo ignore. Me habló cortésmente y luego se levantó de la silla saludándome con un apretón de manos.Todo el mundo iba y venía por el pasillo,pero nadie le dirigió la palabra. Pensé por un instante : Si Jesús viniera de visita vestido de la misma manera,de seguro que nadie se percataría de su presencia. Cuando me retiraba,en la calle junto a mi bicicleta le ví alejarse y le grité : Pedro !!!!!! Y él me contestó : Bendiciones amigo !!!