2013 clarin

de lunes a sábado, 1.204.533 trabajadores del Gran Buenos Aires ingresan a la Capital en trenes,
colectivos o autos en viajes que pueden insumir una o dos horas para dirigirse a sus
trabajos ubicados en la Ciudad de Buenos Aires. Y luego otro tanto para volver a sus casas del
conurbano bonaerense.

Es un número que equivale a casi la mitad (47,7%) de los puestos de trabajo porteños, y
que está en aumento ya que, en los últimos 20 años, esa participación estuvo entre el 40% y el
45%. Durante la crisis de 2002, por el desempleo, bajó al 36%, pero alcanzó el 48,8%, a fines de
2011, de acuerdo a los datos de la Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos
Aires.

La mayoría de esta gente gana menos que sus pares porteños, registran mayor
informalidad, ocupan puestos de menor jerarquía y son mayoría en la construcción y entre
el personal doméstico.

“Los residentes del conurbano ganan en promedio un 16% menos de lo que reciben sus pares
que viven en la Ciudad”, dice el informe.

Así, se puede decir que gran parte del conurbano es un “gran dormitorio” que provee de mano
de obra más barata y de menor calificación a una ciudad que tiene 2.525.227 personas ocupadas.
En proporción a la superficie o población, supera largamente a los 3.700.000 empleos que hay
en el Gran Buenos Aires.

En cambio, son muy pocos –227.000 o el 6,2%– los porteños que van a trabajar al conurbano.

Estadísticas y Censos aclara que el mercado de trabajo de la Ciudad es una parte del que
corresponde a toda la región metropolitana. Y que la estructura productiva genera una cantidad
de puestos de trabajo superior a la que pueden ocupar sus habitantes. “Eso determina que la
demanda de trabajo local, sobre todo en lo que se refiere a puestos de trabajo de menor
calificación, necesite de mano de obra extracomunal ”. En otras palabras, la Ciudad se
encuentra en un área que excede su jurisdicción política.

El costo de la vivienda es uno de las grandes factores que obliga a refugiarse en el GBA por los
altos valores de los alquileres o la propiedad (ver Vivir cerca...). A eso se agrega en los últimos
años el incremento de los asentamientos.

No obstante, hay una minoría que se desplazó a los barrios cerrados y

“countries” ubicados en el conurbano y desarrollan sus actividades en la Capital, ahora con un
gran trastorno por la saturación de las autopistas y embotellamientos. Por esa razón muchos
están volviendo a vivir a la Ciudad.

El informe estadístico porteño dice que, entre los residentes del conurbano, se observa una
“preponderancia de los puestos de trabajo de menor calificación (no calificados y operativos)”. Y
agrega que las características de estos ocupados del GBA respecto de sus pares porteños son:
Predominan los varones (66%) contra las mujeres (34%).

Trabajan en promedio más horas que los porteños. Un 34% trabaja más de 46 horas semanales
contra un 28% de los porteños. Si se agregan las horas de viaje, la jornada se prolonga a
más de 12 horas.

Registran mayores proporciones de empleo “en negro”. Uno de cada cuatro asalariados del GBA
que trabaja en la Ciudad está en la informalidad, contra uno de cada seis entre los residentes
porteños.

Los del GBA son amplia mayoría en algunas actividades porteñas. El 88% de los empleos de la
construcción son de trabajadores que viven en el conurbano. Y el 66% del personal doméstico.
Eso suma unos 250.000 empleos.

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 Disponen de menor nivel de educación. Por ejemplo, los universitarios son el 12% de los
residentes del GBA que trabajan en la Ciudad, mientras entre los porteños alcanza al 31%.

El 75% de los empleos operativos está ocupado por gente del GBA, contra el 65% que
corresponde a los residentes en la Ciudad.

De los 2,5 millones de empleos en la Ciudad, el grueso –1,7 millones– son servicios y comercio,
otros 350.000 son actividades del transporte, comunicaciones y servicios de agua, gas y luz, casi
200.000 están en la construcción y 250.000 en la industria. El año pasado, hubo un descenso
de los empleos en la construcción, servicio doméstico, y en actividades de recreación y
entretenimiento. En tanto en el GBA, casi el 40% de los asalariados se desempeñan en la
informalidad o “en negro”.

11/07/2015

 Ciudad De Buenos Aires

Casi la mitad de los 2.214.000 puestos de trabajo porteños están ocupados por gente que vive en
el Gran Buenos Aires. Y esos 1.100.000 trabajadores bonaerenses (47,8%), en promedio, ganan
menos que sus pares porteños, trabajan más horas y casi una cuarta parte –23,6%-- se
desempeña “en negro”, de acuerdo a los datos de la Dirección de Estadísticas y Censos de la
Ciudad de Buenos Aires.
En cambio, el informe agrega que “en los Partidos del Gran Buenos Aires el 6,3% de los puestos
de trabajo está ocupado por personas que residen en la Ciudad de Buenos Aires: 1,5 puntos
porcentuales menos que en el 2013”.
A su vez, la cantidad de trabajadores del conurbano que trabaja en la Capital viene subiendo ya
que, en los últimos 20 años, esa participación estuvo entre 40% y 45%. Durante la crisis de
2002, por el desempleo, bajó al 36%, y “a partir del 2005 se registra un aumento que se
mantiene con pocos cambios hasta el 2014”.
La mayoría de esta gente gana menos que los ocupados porteños, registra mayor informalidad,
ocupa puestos de menor jerarquía y son mayoría en la construcción y entre el personal
doméstico.
Por ejemplo, “el 82% de los ocupados en la actividad de la Construcción en la Ciudad proviene
de los Partidos del Gran Buenos Aires. En la rama Transporte, comunicación, información,
servicios de electricidad, gas, agua y servicios conexos el porcentaje también es alto (58%, que
suman 331.500 ocupados). Más de la mitad de las personas que trabajan en Servicio doméstico,
residen en los Partidos del Gran Buenos Aires. En contraste, en las ramas Enseñanza y salud
privadas e Intermediación financiera y seguros los residentes de la Ciudad tienen mayor peso”.
Además, “el 79% de los puestos profesionales y el 63% de los técnicos está ocupado por
porteños”.
El informe precisa que “el 23,6% de los residentes de los Partidos del Gran Buenos Aires que
trabajan en la Ciudad son asalariados no registrados (no les hacen descuentos jubilatorios y
tampoco aportan por sí mismos al Sistema de Seguridad Social); además un 23,2% no tiene
beneficios sociales.”. En tanto, “en el caso de los residentes en la Ciudad, la proporciones son
más bajas: 16,5% y 16,1% respectivamente”.
También “en los puestos de la Ciudad los residentes en los Partidos del GBA reciben menores
ingresos que los porteños y trabajan, en promedio, 2 horas más por semana”.
Otro dato preocupante es que “entre los que provienen de los Partidos del Gran Buenos Aires es
elevada la frecuencia de ocupados con hasta secundario incompleto (41,3% versus 15,6% de los
residentes de la Ciudad)”.
Así, se puede decir que gran parte del conurbano es un “gran dormitorio” que provee a la Capital
de mano de obra más barata y de menor calificación.

19 de enero de 2014
En la ciudad de Buenos Aires hay alrededor de dos millones y medio de puestos de trabajo y casi
el 48% de ellos es ocupado por una persona que llega desde el conurbano. Y de los diez millones
de habitantes del Gran Buenos Aires, el 34% reconoce viajar, al menos una vez a la semana, hasta el

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centro porteño. El 25% de los residentes en la ciudad dice trasladarse hacia el conurbano una
vez por semana, aunque sólo el 5% por trabajo.
Las datos surgen de la encuesta de "cohesión y percepción social", realizada en noviembre
pasado sobre 3000 casos por la Subsecretaría para el Área Metropolitana de la ciudad. El
trabajo refleja que en ambos lados de la General Paz la salud y la educación públicas porteñas
son bien valoradas. En 12 de los 29 hospitales de la ciudad, más de la mitad de las consultas
provienen del conurbano.
Datos de la Dirección General de Estadística y Censos de la ciudad, sobre la base de información
del Indec y la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), sostienen que, de los 2.525.000
individuos que ocupan puestos laborales en territorio porteño, el 48% (1.205.000) reside en
partidos del Gran Buenos Aires.

Efectivamente, el empleo es uno de los principales motivos por los que los habitantes del
conurbano cruzan la General Paz, según surge de una encuesta de cohesión y percepción social
realizada por la Subsecretaría para AMBA, a cargo de Diego Valenzuela y dependiente del
Ministerio de Gobierno de la ciudad.

El 34% de los consultados dijeron haber visitado la ciudad por lo menos una vez durante la
semana previa al relevamiento, que incluyó 3000 casos y fue realizado en noviembre de 2013. El
porcentaje varía entre 36,3% en la zona norte y el 33,1% en la zona sur.

A los fines del estudio, la zona sur abarcó los partidos de Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora,
Quilmes, Almirante Brown, Florencio Varela y Berazategui. La zona oeste quedó compuesta por
Esteban Echeverría, Ezeiza, La Matanza, Morón, Merlo, Ituzaingó, Hurlingham, San Miguel,
José C. Paz y Moreno. Por último, Malvinas Argentina, Tigre, San Fernando, San Isidro, Vicente
López, San Martín y Tres de Febrero integraron la zona norte.

Sumados los vecinos de estas tres zonas (9.916.715) más los de la Capital (2.890.151), se trata de
una masa de 12.806.866 personas, el 32% de la población del país.

De los oriundos del norte y el sur del Gran Buenos Aires, el 15% viajó a la Capital por trabajo.
Desde el Oeste, lo hizo el 13 por ciento.

La encuesta también reveló que el 74% de los bonaerenses que concurren por actividades
laborales a la ciudad trabajan en el ámbito privado, frente a un 26% que está empleado en el
sector público.

Los datos difieren cuando se analiza el traslado de los porteños más allá de la General Paz. Entre
los entrevistados, siete de cada diez no habían abandonado los límites de la Capital; sólo un
25,2% (10 puntos menos que en el sentido contrario) había atravesado por lo menos una vez la
provincia durante la semana anterior.

Y apenas el 5% lo había hecho para trabajar en el conurbano. De ellos, el 80% tiene puestos en
empresas privadas y el 20%, en oficinas públicas.

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El esparcimiento, la salud y la educación son los otros motores del tránsito de personas entre los
distritos.

Para quienes viven en la zona norte, el principal motivo de acercamiento a la Capital es el

esparcimiento, con un 20%. Como se dijo, otro 15% lo hace por trabajo, mientras que el 5%
acude a establecimientos educativos y el 3%, a centros sanitarios. Un 10% mencionó "otras
actividades", como visitar parientes o amigos.

Los vecinos de la zona oeste cruzan por esparcimiento (14%) casi en igual medida que por
trabajo (13%) y por "otras actividades". En tanto, un 5% se moviliza a centros de salud y un 3% a
establecimientos educativos.

Finalmente, la realización de "otras actividades" encabeza el ranking de razones por las que
visitan la Capital los habitantes de la zona sur, un 17% de los casos. Le siguen el trabajo, con un
15%; el esparcimiento, un 14%; la salud, un 4%, y la educación, con un 3%.

Según los resultados de la encuesta de cohesión social efectuada por la Subsecretaría de AMBA
porteña, el 73% de aquellos que se trasladan a la ciudad desde todo el conurbano para asistir a
establecimientos sanitarios eligen clínicas privadas, frente a un 27% que se atiende en hospitales
públicos.

La diferencia es notable respecto de las instituciones educativas: el 67% de los bonaerenses que
viajan a la Capital por educación concurren al sistema público, contra un 33% que dice asistir a
casas de estudio privadas.

Los traslados de bonaerenses tienen su correlato en otras estadísticas: en 12 de 29 hospitales

públicos porteños, más de la mitad de las consultas corresponden a pacientes del Gran Buenos
Aires. La mayor proporción de pacientes de otros distritos (entre el 52 y el 68%) se registra en
los centros de salud situados en el sur de la ciudad.

En cambio, las escuelas públicas dependientes del gobierno porteño con más matrícula
bonaerense son las que funcionan en los barrios periféricos del noroeste, según fuentes oficiales.

Del 25,2% de porteños encuestados que dijo cruzar la General Paz con frecuencia, un 13% se
moviliza por esparcimiento y un 11%, por "otras actividades". La clara búsqueda de otros
servicios es la motivación de los porteños, que no se mueven en grandes cantidades ni por
trabajo ni por salud o educación.

"Todo esto demuestra que hay que fomentar la coordinación entre gobiernos reconociendo
como algo positivo y natural la interacción entre porteños y bonaerenses. Es nuestro objetivo",
sostuvo Valenzuela a LA NACION.