Iglesia de St.

Mary’s 31 de
Octubre
231 Church St. Poughkeepsie New York 12601 (845) 452- 8250 2010

EVANGELIO
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS (19, 1-10)

En aquel tiempo, entró Jesús en Jericó y atravesaba la ciudad. Un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos
y rico, trataba de distinguir quien era Jesús, pero la gente se lo impedía porque era de bajo de estatura. Corrió
más adelante y se subió a una higuera para verlo, porque tenía que pasar por allí. Jesús, al llegar a aquel sitio,
levantó los ojos y dijo:
--Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa.
Él bajó en seguida, y lo recibió muy contento. Al ver esto, todos murmuraban diciendo:
--Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador.
Pero Zaqueo se puso en pie, y dijo al Señor.
--Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré
cuatro veces más.
Jesús contestó:
--Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del Hombre ha venido
a buscar y a salvar lo que estaba perdido.

Palabra del Señor.

Gloria a ti Señor Jesús.
 XXXI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Octubre 31, 2010
LA SANTIDAD NO ES UN LUJO ES UNA
NECESIDAD
Jesús es el ejemplo deseado para todos nosotros. Lo
decimos y lo repetimos continuamente. Pero, ¿es cier- Los santos que la liturgia celebra en esta solemnidad
to? Somos capaces de llegar, incluso de lejos, hasta no son sólo aquellos canonizados por la Iglesia y que
donde Él llega para, por ejemplo, salvar un pecador. se mencionan en nuestros calendarios. Son todos los
Cuando Jesús de Nazaret decide ante toda la población salvados que forman la Jerusalén celeste. Hablando de
de Jericó irse a hospedarse a casa de un pecador la los santos, San Bernardo decía: «No seamos perezosos
gente le mira mal y murmura. ¿Iríamos nosotros a ese en imitar a quienes estamos felices de celebrar». Es
sitio sucio o de mala fama para ayudar a alguien? Pues, por lo tanto la ocasión ideal para reflexionar en la
lo más probable es que no lo hiciéramos. Y no porque «llamada universal de todos los cristianos a la santi-
no tuviéramos ganas de ayudar a esa persona que vive dad».
en ese ambiente tan mal visto. No lo haríamos porque
tememos, sobre todo, la crítica de la sociedad. Defen- De dos maneras entramos en contacto con la santidad
demos nuestro buen nombre. E importa más la fama de Cristo y ésta se comunica a nosotros: por apropia-
que la salvación de un hermano. ción y por imitación. La santidad es ante todo don, gra-
cia. Ya que pertenecemos a Cristo más que a nosotros
mismos, habiendo sido «comprados a gran precio», de
Zaqueo era en Jericó un ser odiado. Era jefe de recau-
ello se sigue que, inversamente, la santidad de Cristo
dadores de impuestos. Personas puestas al servicio de
nos pertenece más que nuestra propia santidad. Es éste
los inversores romanos y que además explotaban a la
el aletazo en la vida espiritual.
gente que no podía pagar sus impuestos, quedándose
con sus haciendas. Era poderoso. Pero, era físicamente
Junto a este medio fundamental de la fe y de los sacra-
muy poco agradable. Y tan bajito, tan bajito que para
mentos, debe encontrar también lugar la imitación,
poder ver a Jesús, rodeado de la multitud, tuvo que
esto es, el esfuerzo personal y las buenas obras. No
subirse a un árbol. Y la decisión de encaramarse a la
como medio desgajado y diferente, sino como el único
higuera --no muy fácil, propia de un niño e impropia
medio adecuado para manifestar la fe, traduciéndola en
de un hombre poderoso• es lo que le salvó para toda la
acto. Cuando Pablo escribe: «Esta es la voluntad de
Eternidad. La mirada de Jesús le convirtió desde el
Dios, vuestra santificación», está claro que entiende
primer momento. Y además el Maestro, ante toda la
precisamente esta santidad que es fruto del compro-
multitud, se auto-invitó a residir en la casa de Zaqueo.
miso personal. Añade, de hecho, como para explicar en
Y esto se parece al arrojo de aquel que abandona las 99
qué consiste la santificación de la que está hablando:
ovejas para buscar una perdida. ¿No hubiera sido me-
«que os alejéis de la fornicación, que cada uno sepa
jor que pensara en la seguridad de las otras 99? No,
poseer su cuerpo con santidad y honor» (1 Ts 4, 3-9).
claro; que no. Y es igual para nosotros tenemos una
responsabilidad grave su no hacemos todo lo que está
«No hay sino una tristeza: la de no ser santos», decía
en nuestra mano para ayudar en la conversión de un
Léon Bloy, y tenía razón la Madre Teresa cuando, a un
pecador. Incluso, para ello hemos de asumir esfuerzo y
periodista que le preguntó a quemarropa qué se sentía
riesgos. Además, sabemos que el Señor estará con no-
al ser aclamada santa por todo el mundo, le respondió:
sotros cuando lleguen esos peligros y nos ayudará en
«La santidad no es un lujo, es una necesidad».
nuestro cansancio.
FIESTA DE LA VIRGEN DE GUADALUPE
En fin; Jesús busca a Zaqueo. Y a todos nosotros tam-
¿Estas interesado en apoyar para la festividad de
bién. Pero hemos de correr delante de la multitud, sin
Nuestra Señora de Guadalupe el 12 de Diciembre?
importarnos lo que digan de nosotros o del propio
Por favor comunicate con Erick Santos al 845 380
Jesús para reunirnos con Él y abandonar el camino
7358; Rosa López al Tel. 845 380 8744 ó con Fran-
equivocado. Y es que en definitiva vivimos tiempos
cisco al Tel. 845 489 3361. Muchas gracias de ante-
duros y difíciles. Y no son dichos tiempos para falsas
mano y que la Virgen de Guadalupe te cubra con su
vergüenzas.
santo manto.