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¿Qué pasó el 2 de abril?

El reclamo que la República Argentina mantiene en torno a la soberanía en las islas Malvinas, que se
extiende a otras islas del Atlántico Sur y los espacios marítimos circundantes, se remonta a 1833, cuando el
Reino Unido usurpó ese territorio argentino mediante el uso de la fuerza.

Uno de los aspectos centrales de la cuestión Malvinas se relaciona con el uso y aprovechamiento de los
recursos naturales. Porque los recursos naturales son una de las formas posibles de la soberanía. Su
utilización forma parte de una discusión estratégica en la que están en juego no solo el presente de la flora,
fauna y minerales disponibles sino su preservación a futuro. Buena parte de la exhibición permanente del
Museo está dedicada a este eje ya que da cuenta de los vínculos naturales que conectan a las islas con el
territorio continental. La presencia de los mismos tipos de flora, común en ambas costas, así como zonas de
alimentación compartida, reproducción y circulación para la fauna, evidencian la existencia de un importante
ecosistema de recursos naturales.

El uso y aprovechamiento de estos recursos es desde hace muchos años objeto de disputa en torno a las
políticas de preservación y explotación sobre ellos, en el marco de las mismas discusiones por la soberanía
nacional.

La Constitución Nacional en su reforma de 1994 incorporó una Disposición Transitoria que afirma “La Nación
Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y
Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del
territorio nacional. La recuperación de dichos territorios y el ejercicio pleno de la soberanía, respetando el
modo de vida de sus habitantes, y conforme a los principios del derecho internacional, constituyen un
objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino”.

El 70% de los soldados del Ejército que participaron en la guerra de Malvinas eran conscriptos. En la Armada
la cifra es similar y en la Fuerza Aérea la cifra se invierte. Muchos de ellos tenían entre 19 y 20 años y
provenían de distintas regiones del país. Combatieron con mucha valentía en condiciones adversas debido a
la enorme improvisación de los responsables de la conducción política y militar. Durante el conflicto bélico,
murieron 649 argentinos y resultaron heridos 1093.

En los años de la posguerra, si bien no hay cifras oficiales, se calcula que se quitaron la vida más de 400 ex
combatientes. Este alto índice de suicidios no solo debe atribuirse a los efectos traumáticos de una
experiencia límite como la guerra, sino también a causa de la falta de reconocimiento social en los años
posteriores al conflicto.

En homenaje a los caídos, el 22 de noviembre de 2000 el gobierno nacional estableció el 2 de abril como el
“Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas”. Desde 2006 es un feriado nacional inamovible.

Bibliografía: www.educ.ar

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