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CAPITULO 7

Placas
7.1. Introducción
La mayor parte de los miembros que constituyen una estructura metálica, ya sean perfiles
laminados en caliente, secciones compuestas por varias placas unidas entre sí por medio de remaches o
soldaduras, o perfiles hechos con lámina delgada doblada en frío, están formados por un conjunto de
elementos planos ligados entre sí a lo largo de sus bordes los que, cuando trabajan sometidos a compresión,
pueden alcanzar un estado de equilibrio inestable y pandearse localmente antes de que la pieza falle en
forma integral, originando un colapso prematuro de la barra, caracterizado por una distorsión de sus
secciones transversales. Por consiguiente, en el diseño de la mayor parte de las piezas de acero utilizadas en
estructuras debe estudiarse la estabilidad de las placas planas que las componen, con objeto de asegurarse
de que no fallarán antes que la pieza en conjunto o, en caso contrario, para determinar la carga que ocasiona
el pandeo local y adoptar un coeficiente de seguridad adecuado con respecto a este fenómeno.
La posibilidad de que una placa se pandee no se presenta solamente cuando actúan sobre ella
fuerzas de compresión distribuidas a lo largo de sus bordes, sino siempre que está sometida a solicitaciones
que ocasionan esfuerzos de compresión en alguna región o dirección determinada, como sucede en flexión
pura, producida por pares aplicados en los bordes, o en cortante puro, ya que en el primer caso la mitad de
la placa está comprimida y en el segundo uno de los esfuerzos principales es de compresión; una situación
análoga, que puede llevar también a la iniciación del pandeo, existe siempre que la placa está sometida a
cualquier combinación de cortante con flexión y/o compresión, producida por fuerzas aplicadas en su
perímetro.
En este capítulo se estudian exclusivamente placas rectangulares cargadas en los bordes, ya que
el problema de estabilidad de placas se va a investigar aquí con el único objeto de entender el
comportamiento de las secciones más complejas que se usan en estructuras, las que están formadas por
conjuntos de elementos planos rectangulares, más o menos alargados.
Las solicitaciones más importantes son:
1. Compresión uniforme, la que se presenta en patines de vigas y patines y almas de columnas.
2. Flexión pura, solicitación a la que están sometidas las almas de trabes en regiones de cortante
nulo.
3. Cortante puro, condición cercana a la existente en almas de vigas en zonas en las que el
momento flexionante es reducido.
4. Esfuerzos cortantes y normales combinados.
Mientras que el primer caso es muy frecuente, el segundo y el tercero se presentan raras veces en
la práctica (de hecho, el estado de cortante puro, sin flexión, no existe) y se cae, casi siempre, en el cuarto;
sin embargo, al diseñar una estructura suele bastar con suponer que el alma está sometida sólo a la acción
de la mayor de las dos solicitaciones, flexión o cortante, ignorando el efecto de la otra, y únicamente es
necesario considerar la interacción de ambas cuando las dos tienen intensidades elevadas en la misma zona
como sucede, por ejemplo, en apoyos intermedios de vigas continuas.
El problema básico, que corresponde a la última de las condiciones de carga mencionadas arriba,
se ilustra en la Fig. 7.1, en la que se muestra una placa rectangular de longitud a, ancho b y espesor t,

1
soportada en los cuatro bordes, con fuerzas cortantes txyt y txyt distribuidas uniformemente a lo largo de
ellos y fuerzas normales sxt, que varían linealmente, en los bordes x = 0 y x = a. Esta condición de carga
corresponde al caso más general que puede presentarse en un tablero del alma de una trabe, comprendido
entre los patines y dos atiesadores verticales, cuando actúa sobre ella una fuerza axial además de las cargas
transversales; las otras tres condiciones pueden considerarse como casos particulares de ésta. (En la Fig. 7.1
se muestra una condición de carga idealizada, ya que los esfuerzos cortantes reales nunca están distribuidos
uniformemente en los bordes, y los esfuerzos normales en las secciones x = 0 y x = a no son iguales, pues
son función del momento flexionante, que varía a lo largo del eje de la trabe; sin embargo, la complejidad
del problema del pandeo lateral de placas obliga a introducir simplificaciones en las solicitaciones, pues de
lo contrario la solución matemática se volvería sumamente complicada o aún imposible; por otro lado, el
error que se comete es pequeño, si el estudio se basa en valores promedio de los esfuerzos cortantes y
normales.)
En forma análoga a lo que sucede en columnas y vigas, las placas esbeltas se pandean en el
intervalo elástico, pero el esfuerzo crítico de elementos planos relativamente robustos puede ser más alto
que el límite de proporcionalidad del material, y si esto sucede los resultados deben corregirse por
inelasticidad; por otro lado, las placas esbeltas y con condiciones de apoyo adecuadas tienen una resistencia
importante después de que se inicia el pandeo y antes de llegar al colapso, que debe tenerse en cuenta en
muchos problemas de diseño. Por consiguiente, y con objeto de cubrir el fenómeno íntegramente, el estudio
de cada una de las condiciones de carga consideradas en este capítulo se divide en tres partes: en la primera
se investiga el pandeo elástico, en la segunda se discuten las correcciones que deben hacerse cuando la
inestabilidad se presenta en el intervalo inelástico o en el de endurecimiento por deformación, y en la tercera
se cubre el comportamiento posterior a la iniciación del pandeo.

Fig. 7.1. Condición general de carga de un tablero del alma de una trabe.

7.2 Comportamiento de placas comprimidas


Para ilustrar el comportamiento de las placas en los diferentes intervalos, en la Fig. 7.2 se muestran
las gráficas esfuerzo normal medio(s=P/bt)-deformación longitudinal unitaria media e, y esfuerzo normal
medio-deflexión lateral (w) de placas rectangulares, perfectamente planas y con distintas relaciones
ancho/grueso, sometidas a fuerzas de compresión P de intensidad creciente, aplicadas en una dirección. (La
Fig. 7.2a se tomó de la Ref. 7.1).
La gráfica esfuerzo-deformación del material se muestra en un croquis en la Fig. 7.2a. Las cargas
se aplican de manera que los bordes horizontales se mantienen rectos durante todo el proceso, y los verticales
están apoyados libremente (véase el croquis correspondiente, Fig. 7.2a). El ancho de la placa es b, y su
grueso t.

2
Las gráficas OABC muestran el comportamiento típico de una placa con relación b/t elevada. En
ellas pueden observarse varias regiones diferentes: al principio las deformaciones e crecen linealmente con
el esfuerzo s, que es constante en todo el ancho de la pieza, y no hay deflexiones laterales. Esta etapa
termina cuando s alcanza un cierto valor crítico, scr (puntos A), a partir del cual la placa empieza a
deformarse lateralmente, es decir, se pandea, pero a diferencia de lo que sucede en columnas, en las que la
carga crítica es con frecuencia casi igual a la de colapso, puede soportar cargas adicionales importantes
debido a que las deformaciones laterales están restringidas por la resistencia a la flexión entre los bordes
verticales.
Cuando la carga es mayor que la de pandeo los esfuerzos dejan de estar uniformemente repartidos
(zona AB); crecen más rápidamente en los bordes que en el centro, hasta que llegan en ellos al valor de
fluencia (puntos B de las curvas), y las regiones plastificadas se extienden rápidamente hasta que se alcanza
la resistencia máxima de la placa (puntos C); el esfuerzo medio correspondiente es su. Si las relaciones b/t
son altas, el incremento de esfuerzo arriba del crítico de pandeo puede ser muy importante.
(La placa perfectamente plana se conserva así hasta que los esfuerzos alcanzan el valor crítico, y
a partir de entonces se deforma lateralmente, siguiendo cualquiera de las ramas ABC de la Fig. 7.2b; al
llegar al punto C las deflexiones siguen creciendo sin incremento de carga. Las placas reales tienen, desde
un principio, pequeñas deformaciones laterales que hacen que su curva s-w sea del tipo de la dibujada con
línea interrumpida; cuando las deformaciones son grandes esta curva tiende hacia la ideal, lo que indica que
pequeñas imperfecciones iniciales tienen una influencia insignificante sobre la capacidad total de carga,
Ref. 7.2).

Fig. 7.2. Comportamiento de placas comprimidas.

En placas con relaciones ancho/grueso menores el esfuerzo crítico está cerca de sy, y el flujo
plástico se inicia casi inmediatamente después de que empieza el pandeo; la resistencia última es poco mayor

3
que la carga crítica (curvas OA’B’C’).
Si la relación b/t está por debajo de un cierto valor específico, el esfuerzo medio puede llegar al
punto en que comienza la fluencia sin que se inicie el pandeo, y las deformaciones crecen bajo esfuerzo
constante de acuerdo con la línea OB"C" de la Fig. 7.2a. Eventualmente la placa se pandea y falla, ya sea
cuando la deformación no llega todavía al punto C" o cuando es mayor que la correspondiente a él, ya que
si su relación b/t es suficientemente pequeña, puede entrar en el intervalo de endurecimiento por
deformación sin pandeo previo.
El comportamiento de placas con otras condiciones de apoyo y sometidas a cargas aplicadas en
los bordes distribuidas de una manera diferente a la considerada es cualitativamente semejante al descrito,
aunque tanto la magnitud del esfuerzo crítico como la importancia de la resistencia posterior al pandeo varía
de unos casos a otros.

7.3 Placas comprimidas en una sola dirección


Las placas rectangulares comprimidas en una dirección por una carga uniformemente distribuida
en su plano medio son de importancia básica en el diseño de estructuras de acero, pues forman parte de
muchos de los elementos que se utilizan en ellas. Debido a su importancia y sencillez relativa, éste es el
caso que se estudiará primero.
Como en todos los problemas de inestabilidad, los valores críticos de las cargas que actúan en el
plano medio de una placa pueden determinarse suponiendo que ésta se sale ligeramente de su configuración
plana inicial, y calculando las magnitudes que deben tener las fuerzas para mantenerla en equilibrio en esa
posición deformada, infinitamente cercana a la original.
La ecuación fundamental para la solución del problema, cuando el pandeo se inicia en el intervalo
elástico, es la B.15, deducida en el Apéndice B.
A continuación se estudia el pandeo elástico de placas rectangulares comprimidas en una sola
dirección, bajo la acción de cargas alojadas en su plano medio, y con diferentes condiciones de apoyo en
los bordes; más adelante se discute el pandeo inelástico.

7.3.1 Pandeo elástico


Las hipótesis fundamentales son:
a).- El material es perfectamente elástico y homogéneo.
b).- La placa es originalmente perfectamente plana.
c).- Las cargas de compresión están aplicadas en el plano de su superficie media.
En la Fig. 7.3 se muestra el caso en estudio.

Fig. 7.3. Placa comprimida en una sola dirección.

Puesto que los bordes cargados son los b, los esfuerzos sx, son constantes y no hay esfuerzos sy,
ni txy, de manera que la ecuación B.15 adopta la forma simplificada

4
∂4 w ∂4 w ∂4 w 1 ∂2 w
+ 2 + = N
∂x 4 ∂x 2 ∂y 2 ∂y 4 D ∂x 2
x

que puede escribirse


⎛ ∂4 w ∂4 w ∂4 w ⎞ ∂2 w
D ⎜ 4 + 2 2 2 + 4 ⎟ + σ xt 2 = 0
⎝ ∂x ∂x ∂y ∂y ⎠ ∂x
7.1
ya que Nx, fuerza normal por unidad de longitud de las caras b, es igual a sxt, y tiene sentido
contrario al considerado en la deducción de la ecuación B.15.
Esta ecuación diferencial homogénea desempeña en la teoría de la inestabilidad de placas
d 2v
EI + Pv = 0
comprimidas el mismo papel que la ecuación dx 2 ,también diferencial y homogénea, juega en
la de columnas.
De manera análoga a lo que sucede en la teoría de las columnas, solamente hay soluciones w de
la ecuación 7.1 para ciertos valores característicos scr del parámetro sx; cada una de esas soluciones describe
una configuración deformada de la placa en equilibrio inestable, asociada con el valor característico scr
correspondiente. Si sx es diferente de los valores característicos, la ecuación 7.1 es satisfecha tan sólo por
la solución trivial w=0.
Si sx crece gradualmente desde cero hasta su valor característico más pequeño se llega a una
condición en la que, además de la forma plana de equilibrio, w=0, es también posible una configuración
deformada en equilibrio inestable. La bifurcación de la posición de equilibrio indica que se ha alcanzado el
valor crítico de sx, es decir, la carga de pandeo. Desde un punto de vista matemático, el cálculo de scr
consiste en determinar los valores característicos de sx en la ecuación 7.1.
En la forma como se ha obtenido, la ecuación 7.1 es válida solamente en el intervalo de aplicación
de la Ley de Hooke, y debe ser modificada cuando sx excede el límite de proporcionalidad.

Solución general de la ecuación 7.1


La solución de la ecuación diferencial parcial 7.1 debe satisfacer las condiciones de frontera en
los cuatro bordes; primero se consideran solamente las de los bordes cargados b, que se suponen libremente
apoyados, y más adelante se tienen en cuenta las de los lados descargados a. (Las condiciones de apoyo de
los bordes cargados influyen muy poco en la carga crítica de las placas comprimidas largas, del tipo de las
que forman las columnas o vigas; en cambio, es decisiva la manera en que están apoyados los bordes
paralelos a la dirección de la carga, Ref. 7.3).
Puesto que los bordes b están libremente apoyados, los desplazamientos w y los momentos Mx
deben ser nulos a lo largo de ellos, lo que permite escribir las cuatro condiciones de frontera siguientes (Fig.
7.3):
w)x=0,a = 0

⎛ ∂2 w ∂2 w ⎞
(M x )x=0,a = −D ⎜ 2 + µ 2 ⎟ = 0
⎝ ∂x ∂y ⎠
Mx está dado por la ecuación B.12 (Apéndice B).
∂2 w
Ahora bien, los bordes x=0 y x=a permanecen rectos por hipótesis, de manera que
∂y 2 es nula a
lo largo de ellos, y las condiciones anteriores se reducen a

5
⎛ ∂2 w ⎞
(w)x=0,a = 0, ⎜ 2 ⎟ =0
⎝ ∂x ⎠ x=0,a
7.2
La ecuación diferencial 7.1 y las condiciones de borde (ecuaciones 7.2) son satisfechas por la
expresión (Ref. 7.3)
nπ x
w = Y sin
a , para n=1, 2, 3 … 7.3
en la que Y es una función de y exclusivamente, que no se conoce aún, y n, que es un entero
cualquiera, corresponde al número de semiondas que se forman en la dirección x al pandearse la placa.
Introduciendo la ecuación 7.3 en la 7.1, se obtiene la ecuación diferencial ordinaria de cuarto orden

⎛ nπ ⎞ d Y ⎡⎛ nπ ⎞ σ cr t ⎛ nπ ⎞ ⎤
2 4 2
d 4Y 2
− 2⎜ ⎟ + − ⎜ ⎟ ⎥Y = 0
dy 4 ⎝ a ⎠ dy 2 ⎢⎣⎜⎝ a ⎟⎠ D ⎝ a ⎠ ⎦
7.4
nπ x
sin
Para llegar a ella se han cancelado los factores a , que multiplican a todos los términos, y
se han sustituido las derivadas parciales de Y por derivadas ordinarias, puesto que Y es función de y
exclusivamente, y el esfuerzo sx por scr esfuerzo crítico longitudinal de pandeo, desconocido hasta ahora,
ya que la ecuación 7.4, lo mismo que la 7.1, es la ecuación de equilibrio de la placa ligeramente deformada
lateralmente, y ese estado sólo es posible cuando sx alcanza alguno de los valores críticos.
Empleando la notación
σ t⎛ a ⎞
2

ν = cr ⎜ ⎟
2

D ⎝ nπ ⎠ 7.5
la ecuación 7.4 toma la forma
⎛ nπ ⎞ d Y ⎛ nπ ⎞
2 4
d 4Y 2
− 2 ⎜⎝ ⎟⎠ + ⎜ ⎟ (1− ν 2 )Y = 0
dy 4
a dy ⎝ a ⎠
2
7.6
Esta ecuación diferencial define el valor del parámetro n y, una vez conocido éste, el esfuerzo
crítico se calcula con la ecuación 7.5:
⎛ nπ ⎞ D 2
2

σ cr = ⎜ ⎟ ν
⎝ a ⎠ t
7.7
La solución general de la ecuación 7.6 es (Ref. 7.3):
Y = C1 cosh ( k1 y ) + C2 senh ( k1 y ) + C3 cos ( k2 y ) + C4 sin ( k2 y )
7.8
en la que k1 y k2 valen
nπ nπ
k1 = ν + 1 k2 = ν −1
a , a 7.9
Por consiguiente la ecuación 7.3, solución general de la ecuación 7.1, toma finalmente la forma
nπ x
w = sin
a
(C1 cosh k1y + C2 sinh k1y + C3 cos k2 y + C4 sin k2 y )
7.10
En la obtención de este resultado se han tenido en cuenta únicamente las condiciones de apoyo en
los bordes cargados b, y las constantes C1 a C4 deben determinarse de manera que se satisfagan también las
condiciones de frontera en los bordes a.

6
A continuación se consideran casos especiales de apoyo a lo largo de esos bordes.

CASO I. Placa apoyada libremente en los bordes b y con restricciones elásticas en


los a (Fig. 7.4)
Este caso incluye como límites las placas libremente apoyadas y las empotradas en los bordes
descargados.

Fig. 7.4. Placa apoyada libremente en los borde b y con restricciones elásticas en los bordes a

En la Fig. 7.4 se muestra una sección longitudinal y otra transversal de la placa pandeada; en el
sentido longitudinal pueden formarse una o más semiondas, según la relación a/b, y si las restricciones
elásticas en los dos bordes son iguales, la configuración en el sentido transversal de la placa deformada es
siempre simétrica con respecto al eje de simetría paralelo a los bordes a (Refs. 7.3 y 7.4). Por consiguiente,
si se cambia el sistema de ejes de referencia que se utilizó para deducir la ecuación 7.10, llevando el origen
de coordenadas al punto medio de uno de los bordes b y haciendo que el eje x coincida con el de simetría
de la placa, la flecha w correspondiente al menor valor de scr se convierte en una función simétrica de y, y
los términos C2 senh(k1y) y C4 sen(k2y) desaparecen de la ecuación 7.10, con lo que la ecuación de la
superficie media deformada se reduce a
nπ x
w = sin
a
(C1 cosh k1y + C3 cos k2 y )
7.11
Para calcular las constantes C1 y C3 se utilizan las condiciones de frontera de los bordes
descargados a:
( w )y=± b = 0
2 7.12a
ϕ =ϕ 7.12b
La ecuación 7.12a expresa el hecho de que los bordes a permanecen rectos durante el pandeo,
mientras que la ecuación 7.12b es una condición de continuidad que indica que el ángulo de rotación j en
el borde de la placa que se pandea es igual al ángulo j1 que gira la placa adyacente, rígidamente conectada

7
a ella, que restringe el pandeo (Fig. 7.5).

Fig. 7.5. Pandeo de una placa restringida

Para introducir la solución dada por la ecuación 7.11 en la condición de borde 7.12b hay que
expresar previamente a j y j1 en función de las deflexiones w. Si se supone que los momentos flexionantes
My que aparecen a lo largo de los bordes a al deformarse la placa son proporcionales al ángulo j1, la
restricción elástica puede expresarse como
M y = −ξϕ
7.13
donde x es un factor de proporcionalidad que depende de las características de la estructura que restringe a
la placa en estudio, que se supone constante a lo largo de los bordes, y My, es el momento por unidad de
longitud de éstos.
⎛ ∂2 w ∂2 w ⎞
M y = −D ⎜ 2 + µ 2 ⎟
⎝ ∂y ∂x ⎠
∂2 w
=0
y puesto que ∂x
2
a todo lo largo de los bordes a, puede escribirse
⎛ ∂2 w ⎞
(M )y y=± b
2
= −D ⎜ 2 ⎟
⎝ ∂y ⎠ y=± b
2

Despejando j1 de la ecuación 7.13, y sustituyendo My por su valor, se obtiene


M D ⎛ ∂2 w ⎞
ϕ =− = ⎜ 2⎟
ξ ξ ⎝ ∂y ⎠ y=± b
2

Por último, puesto que


⎛ ∂w ⎞
ϕ = ±⎜ ⎟
⎝ ∂y ⎠ y=± b
2

la condición de borde (ecuación 7.12b) toma la forma

8
⎛ ∂w D ∂ 2 w ⎞
⎜⎝ ∂y ± ξ ∂y 2 ⎟⎠ b = 0
y=±
2 7.14
Conviene introducir un nuevo parámetro,
2D
ξ=
bξ 7.15
llamado coeficiente de restricción, que se supone constante a lo largo de los bordes a y que es función de
las dimensiones de la placa que se pandea y de las que restringen el fenómeno, puesto que j1 depende de
ellas. El coeficiente de restricción es un número sin dimensiones (ya que D/x1 tiene dimensiones de
longitud), cuyo valor se determina más adelante.
En función de x, la ecuación 7.14 se modifica a
⎛ ∂w b ∂ 2 w ⎞
⎜⎝ ∂y ± 2 ξ ∂y 2 ⎟⎠ b = 0
y=±
2 7.16
En función de x, la ecuación 7.14 se modifica a
Cuando la placa está fija por completo en los bordes a, x = 0, y cuando puede girar libremente
alrededor de ellos, x=¥, valores que corresponden respectivamente, x1=¥ y x1=0.
Introduciendo w dado por la ecuación 7.11 en las condiciones de borde (ecuaciones 7.12a y 7.16)
se obtienen las dos ecuaciones lineales y homogéneas
⎛ b⎞ ⎛ b⎞
C1 cosh ⎜ k1 ⎟ + C3 cos ⎜ k2 ⎟ = 0
⎝ 2⎠ ⎝ 2⎠
7.17
⎡ ⎛ b⎞ ⎛ b⎞ ⎤ b⎡ 2 ⎛ b⎞ ⎛ b⎞ ⎤
⎢C1k1senh ⎜⎝ k1 2 ⎟⎠ − C3k2 sen ⎜⎝ k2 2 ⎟⎠ ⎥ + ξ 2 ⎢C1k1 cosh ⎜⎝ k1 2 ⎟⎠ − C3k2 cos ⎜⎝ k2 2 ⎟⎠ ⎥ = 0
2

⎣ ⎦ ⎣ ⎦ 7.18
Para que C1 y C3 sean diferentes de cero debe anularse el determinante D del sistema; por
consiguiente, D=0 es el criterio de pandeo, que lleva a la condición de estabilidad
⎛ b⎞ ⎛ b⎞ b
(
k1 tanh ⎜ k1 ⎟ + k2 tan ⎜ k2 ⎟ + ξ k12 + k22 = 0
⎝ 2⎠ ⎝ 2⎠ 2
)
Si en las ecuaciones 7.7 y 7.9 se introduce la relación de aspecto a = a/b, toman la forma
1 ⎛ nπ ⎞ D 2
2

σ cr = 2 ⎜ ⎟ ν
b ⎝α ⎠ t 7.19
b nπ b nπ
k1 = ν +1 k2 = ν −1
2 2α ; 2 2α 7.20
y la condición de estabilidad se transforma en
⎛π n⎞ ⎛π n⎞ n
ν + 1 tanh ⎜ ν + 1 ⎟ + ν − 1 tan ⎜ ν − 1 ⎟ + πξν = 0
⎝2 α⎠ ⎝2 α⎠ α 7.21
Esta ecuación, que define la relación entre el parámetro n y el cociente n/a, permite calcular el
primero para valores dados del segundo, y conocido n es fácil determinar scr por medio de la ecuación 7.19.
Sin embargo, la ecuación 7.21 es poco adecuada para aplicaciones, y conviene sustituirla por la expresión
algebraica 7.22 que expresa, en forma aproximada, la relación entre v2 y a/n definida por ella:

9
⎛α⎞ ⎛α⎞
2 4

ν = 1+ p ⎜ ⎟ + q ⎜ ⎟
2
⎝ n⎠ ⎝ n⎠
7.22
2
Esta ecuación proporciona los valores de v con errores menores de 1 por ciento.
p y q, factores que dependen del coeficiente de restricción x, han sido calculados para distintos
valores de este coeficiente por medio de la condición de estabilidad exacta (ecuación 7.21); en la figura 7.6
(Ref. 7.3) se muestran las curvas que los relacionan con x.

Fig. 7.6. Valores de p y q en función del coeficiente de restricción x. (Los des bordes longitudinales están restringidos
elásticamente)

Llevando la ecuación 7.22 a la 7.19, y haciendo D = Et3/12(1-µ2) y a = ab, se obtiene la ecuación


7.23, con la que se calcula el esfuerzo scr para cualquier restricción elástica a lo largo de los bordes
descargados:
1 ⎛ nπ ⎞
2
Et 2 ⎡ ⎛α⎞
2
⎛α⎞ ⎤
4
π 2 E ⎛ t ⎞ ⎡⎛ n ⎞
2 2
⎛α⎞ ⎤
2

σ cr = 2 ⎜ ⎟ ⎢1+ p ⎜⎝ ⎟⎠ + q ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥ = ⎜ ⎟ ⎢⎜ ⎟ + p + q ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥
b ⎝ α ⎠ 12 1− µ 2 ( ) ⎣ n ( )
n ⎦ 12 1− µ 2 ⎝ b ⎠ ⎣⎝ α ⎠ n ⎦
7.23
Introduciendo la notación
⎡⎛ n ⎞ 2 ⎛α⎞ ⎤
2

k = ⎢⎜ ⎟ + p + q ⎜ ⎟ ⎥
⎣⎝ α ⎠ ⎝ n⎠ ⎦
7.24
la ecuación para scr adopta la forma convencional

10
π 2E ⎛ t ⎞
2

σ cr = ⎜ ⎟ k
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠
7.25
en la que k es un coeficiente adimensional que depende de la relación de aspecto a de la placa y de las
condiciones de apoyo en sus bordes descargados, puesto que es función de p y q que, a su vez, lo son del
coeficiente de restricción x; recibe el nombre de factor de placa.
El número de semiondas, n, que se forman en la dirección x al pandearse la placa, desconocido
hasta ahora, puede determinarse de la manera siguiente para una relación de aspecto a dada: en placas
suficientemente cortas, con relaciones a pequeñas, el pandeo se presenta en una sola semionda, pero arriba
de una cierta relación de aspecto se forman dos; por consiguiente, cuando ambos casos son igualmente
posibles bajo el mismo esfuerzo de pandeo scr es decir, cuando a tiene el valor límite que corresponde a la
transición de un estado a otro, la ecuación 7.25 proporciona resultados iguales si se introduce en ella n = 1
o n = 2. La relación de aspecto que separa el pandeo en dos y tres semiondas se puede determinar de una
manera análoga y, en general, la relación de aspecto límite a1 para la que pueden presentarse n o n+1
semiondas se obtiene de la ecuación
⎛α⎞ ⎛ n + 1⎞ ⎛ α ⎞
2 2 2 2
⎛ n⎞
⎜⎝ ⎟⎠ + p + q ⎜⎝ ⎟⎠ = ⎜⎝ ⎟⎠ + p + q ⎜⎝ ⎟
α n α n + 1⎠
que proviene de igualar los esfuerzos críticos, dados por la ecuación 7.25, correspondientes a la formación
de n y n+1 semiondas o, lo que es lo mismo, los coeficientes k de esos dos casos, ya que el resto de la
ecuación 7.25 es constante e independiente de n.
Simplificando y haciendo transformaciones algebraicas, se obtiene.
1
α 4 = n 2 ( n + 1)
2

q y, finalmente,
1
α= 4 n ( n + 1)
q
7.26
a1 es la relación de aspecto límite para la que el pandeo puede presentarse en n o n+1 semiondas, de manera
que haciendo n = 1 en la ecuación 7.26 se obtiene la relación de aspecto para la que pueden formarse
indistintamente una o dos semiondas, haciendo n = 2 la correspondiente a la formación de dos o tres
semiondas, etc.
De acuerdo con la Fig. 7.6, q varía entre 1 y 5; para q = 1 (bordes a libremente apoyados),
α = n ( n + 1) α = 0.669 n ( n + 1)
, y para q=5 (ambos bordes descargados empotrados), , lo que indica
que el empotramiento hace que disminuya apreciablemente la longitud de las semiondas de pandeo.
En placas largas, puede despreciarse el carácter entero de n, y la relación de aspecto a0 que hace
dσ cr
=0
que scr adquiera el valor mínimo, en el que debe basarse el diseño, se obtiene de la condición dα ,
dk
=0
que puede sustituirse por dα , puesto que k es el único término en la expresión de scr (ecuación 7.25)
que varía con a.
d ⎡⎛ n ⎞ ⎛α⎞ ⎤ 2α
2 2
dk 2n 2
= ⎢⎜⎝ ⎟⎠ + p + q ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥ = − 3 + q =0
dα dα ⎣ α n ⎦ α n

11
1
∴α = α 0 = n 4
q
7.26a
Sustituyendo a por a0 en la ecuación 7.24, se obtiene

n2 n2 1q
kmin = + p+q = p+2 q
n2 1q n2
7.27
Finalmente, llevando kmin a la ecuación 7.25, se llega a la ecuación para el cálculo del esfuerzo
crítico mínimo
π 2E ⎛ t ⎞ π 2E ⎛ t ⎞
(p + 2 q)
2 2

(σ cr )min = ⎜ ⎟ min
k = ⎜ ⎟
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ 12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠
7.28
Esta expresión es independiente de n y válida para placas largas de cualquier longitud y con
restricciones de cualquier tipo en los bordes longitudinales.
Hasta ahora se ha supuesto que las restricciones en los dos bordes no cargados son iguales entre
sí, lo que ha servido como base para todos los desarrollos matemáticos; cuando son diferentes puede
utilizarse un método aproximado (Ref. 7.3) que da resultados satisfactorios, muy cercanos a los exactos,
consistente en aplicar dos veces el procedimiento descrito, utilizando primero el coeficiente de restricción
x1 de un borde para encontrar, por medio de la ecuación 7.27, un factor de placa k1, después el coeficiente
x2 del otro borde, con el que se determina un segundo factor de placa, k2; el promedio k=(k1+k2)/2 representa
una buena aproximación del valor exacto, y puede utilizarse con la ecuación 7.25 para obtener el esfuerzo
crítico de la placa.
Cuando scr está arriba del límite de proporcionalidad, es decir , cuando el pandeo se inicia en el
intervalo inelástico, es preferible calcular dos esfuerzos críticos, correspondientes a k1 y k2 utilizando para
ello los métodos que se describen más adelante, y promediarlos.

CASO II. Placa apoyada libremente en los bordes b, con restricciones elásticas
en un borde a y libre en el otro (Fig, 7.7)

Fig. 7.7. Placa apoyada libremente en los bordes b, restringida elásticas en un borde a y libre en el otro

12
En este caso conviene hacer que el eje x coincida con el borde descargado que está restringido
elásticamente, y como no hay simetría debe utilizarse la solución general de la ecuación diferencial
(ecuación 7.10).
Siguiendo un camino análogo al empleado en el caso I, pero teniendo en cuenta las nuevas
condiciones de frontera en los bordes no cargados (w=0 y j=j1 para y=0, My=Vy =0 para y=b), se llega a
los resultados siguientes (Ref. 7.3):
π 2 E ⎛ t ⎞ ⎡⎛ n ⎞ ⎛α⎞ ⎤
2 2 2

σ cr = ⎜ ⎟ ⎢⎜ ⎟ + p + q ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ ⎣⎝ α ⎠ n ⎦
7.29
En forma condensada
π 2E ⎛ t ⎞
2

σ cr = ⎜ ⎟ k
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠
7.30
donde
⎡⎛ n ⎞ 2 ⎛α⎞ ⎤
2

k = ⎢⎜ ⎟ + p + q ⎜ ⎟ ⎥
⎣⎝ α ⎠ ⎝ n⎠ ⎦
7.31
Los parámetros p y q, que dependen del coeficiente x en el borde restringido, aparecen en la Fig.
7.8 (Ref. 7.3), en la que se han trazado las curvas p-x y q-x.

Fig. 7.8. Valores de p y q en función del coeficiente de restricción x. (Un borde longitudinales están restringido
elásticamente, el otro libre)

13
La relación de aspecto límite a1 para la que pueden formarse indistintamente n o n+1 semiondas
longitudinales está dada por
1
α= 4 n ( n + 1)
q
7.32
y el valor a0 correspondiente a (scr)min, es
1
α0 = n 4
q
7.33

Por consiguiente,
π 2E ⎛ t ⎞ π 2E ⎛ t ⎞
(p + 2 q)
2 2

(σ cr )min = ⎜ ⎟ kmin = ⎜ ⎟
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ 12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠
7.34
kmin = p + 2 q 7.34a
Todas estas ecuaciones tienen la misma forma que las del caso I, pero difieren de ellas en los
valores numéricos de p y q.
La ecuación 7.33 indica que al decrecer la restricción elástica y tender q hacia cero (Fig. 7.8), a0
crece indefinidamente. En el caso límite en que el borde está libremente apoyado q vale cero, y la relación
de aspecto a0 se hace infinita, lo que indica que la placa se pandea siempre en una semionda; al crecer a0 el
esfuerzo crítico mínimo decrece y tiende asintóticamente hacia
π 2E ⎛ t ⎞
2

(σ cr )min = ⎜ ⎟ p
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠
7.35
Por consiguiente, si un borde a puede girar libremente y el otro no está apoyado, la placa se pandea
en una sola semionda, cualquiera que sea su longitud, pero el esfuerzo crítico nunca es menor que el dado
por la ecuación 7.35. en la que el valor mínimo de p es 0.425; en cambio, si un borde está restringido
elásticamente, la ecuación 7.32 indica que se forman varias semiondas, si la longitud de la placa es suficiente
para ello.

Casos particulares

a) Placas apoyadas libremente en los dos bordes descargados

La ecuación 7.23, que se repite a continuación, proporciona el esfuerzo crítico de placas


comprimidas en una dirección, apoyadas libremente en los bordes cargados y con restricciones elásticas
en los descargados:
π 2 E ⎛ t ⎞ ⎡⎛ n ⎞ ⎛α⎞ ⎤
2 2 2

σ cr = ⎜ ⎟ ⎢⎜ ⎟ + p + q ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ ⎣⎝ α ⎠ n ⎦
7.23

Cuando los bordes descargados están también libremente apoyados los coeficientes p y q valen,
respectivamente, 2.0 y 1.0 (Fig. 7.6), y la ecuación 7.23 se reduce a

14
π 2 E ⎛ t ⎞ ⎡⎛ n ⎞ ⎛α⎞ ⎤ π 2E ⎛ t ⎞ ⎛ n α ⎞
2 2 2 2 2

σ cr = ⎜ ⎟ ⎢⎜ ⎟ + 2 + ⎜⎝ ⎟⎠ ⎥ = ⎜ ⎟ ⎜ + ⎟
12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ ⎣⎝ α ⎠ n ⎦ 12 (1− µ 2 ) ⎝ b ⎠ ⎝ α n ⎠
7.36
El factor de placa k vale
⎛ n α⎞
2

k=⎜ + ⎟
⎝α n⎠
7.37

Placas largas
El número n de semiondas que minimiza a k y a scr depende de la relación de aspecto a = a/b; si
la placa es suficientemente larga, de manera que pueda despreciarse el carácter entero de n, el valor mínimo
de k se obtiene derivando respecto a a la ecuación 7.37, e igualando a cero el resultado.
∂k ∂ ⎛ n2 α2 ⎞ 2n 2 2α 2n 2b 3 2a
= + 2 + = − + = − + 2 =0
∂α ∂α ⎜⎝ α 2 n 2 ⎟⎠ α 3 n2 a3 nb
De la expresión anterior,
a4 a
b4 = , b=
n4 n 7.38

Fig. 7.9. Pandeo de una placa larga comprimida; bordes longitudinales libremente apoyados

De acuerdo con este resultado, la carga crítica mínima de una placa larga, libremente apoyada en
los bordes descargados, corresponde a la formación, en sentido longitudinal, de n semiondas de longitud b,
y puesto que en sentido transversal se forma una sola semionda, el pandeo tiene lugar al deformarse la placa
en una serie de tableros cuadrados que se desplazan alternativamente a uno y otro lado del plano original
(Fig. 7.9).
Sustituyendo la ecuación 7.38 en la ecuación 7.37 se obtiene el factor de placa k mínimo:

15
⎛ n α⎞
2 2 2
⎛ nb a ⎞ ⎛ n a a n⎞
k=⎜ + ⎟ =⎜ + ⎟ =⎜ + = 4.0
⎝α n⎠ b=
a ⎝ a bn ⎠ b=
a ⎝ a n n a ⎟⎠
n n

El esfuerzo crítico mínimo de pandeo de una placa larga libremente apoyada y comprimida
longitudinalmente es:
4.0π 2 E ⎛ t ⎞
2

(σ cr )min = ⎜ ⎟
(
12 1− µ 2 ⎝ b ⎠ ) 7.39
Se llega a los mismos resultados llevando a las ecuaciones 7.26a y 7.27, deducidas para placas
largas con cualquier condición de apoyo en los bordes no cargados, los valores p = 2.0 y q = 1.0, que
corresponden a apoyos libres
De la ecuación 7.26a,
⎛ a⎞ a
α 0 = ⎜ ⎟ = n 4 1 = n∴b =
⎝ b⎠0 n
De la ecuación 7.27,
kmin = 2.0 + 2 1 = 4.0
Es interesante comparar el comportamiento de la placa con el de una columna articulada en los
extremos y cargada axialmente; para ello conviene modificar la ecuación 7.39, multiplicando sus dos
miembros por el grueso t, con lo que se obtiene
4π 2 E t 3 4π 2 D
σ cr t = ( N x )cr = =
(
12 1− µ 2 b 2 )
b2
Nx es la fuerza por unidad de longitud, y D=Et3/12(1-µ2) la rigidez a flexión de la placa.
Esta ecuación es análoga en forma a la de Euler, Pcr=p2EI/L2 pero a diferencia de la columna, que
siempre se pandea en una sola semionda de longitud igual a la total L, la placa lo hace en semiondas
cuadradas de dimensión bxb, debido a los soportes existentes a lo largo de los bordes descargados; además,
la carga crítica de la columna es inversamente proporcional al cuadrado de su longitud, mientras que la de
la placa lo es al cuadrado del ancho, e independiente de la longitud.

Placas cortas
Si las placas tienen una relación de aspecto reducida, no se puede proceder como cuando son muy
largas, ya que hay que tener en cuenta el carácter entero del coeficiente n de la ecuación 7.37 y sustituirlo
por l, 2, 3, etc., en esa ecuación, para estudiar cómo varía k, en función de a, en cada caso particular.
Sustituyendo a por a/b, la ecuación 7.27 toma la forma
2
⎡⎛ nb ⎞ ⎛ a ⎞ ⎤
k = ⎢⎜ ⎟ + ⎜ ⎟ ⎥ ,
⎣⎝ a ⎠ ⎝ nb ⎠ ⎦
y haciendo n=1 se convierte en
2
⎛ b a⎞
k=⎜ + ⎟
⎝ a b⎠
El valor mínimo de k, obtenido por tanteos, es 4.0, y corresponde a a/b=1; a uno y otro lado de
esa relación de aspecto, es decir, para a/b menor o mayor que 1.0, k aumenta, como se ve en la Fig. 7.10.
(Por ejemplo, si a/b = 0.5, k = 6.25, y si a/b = 1.5, k = 4.72).
De manera semejante, para n = 2 se obtiene

16
2
⎛ 2b a ⎞
k=⎜ +
⎝ a 2b ⎟⎠
cuyo mínimo es también 4.0, ahora para a/b=2; la curva correspondiente sube a uno y otro lado de esa
relación de aspecto, e intercepta a las deducidas para n=1 y n=3

Fig. 7.10. Variación del factor de placa k con la relación de aspecto a. Placas comprimidas libremente apoyadas.

Siguiendo caminos análogos pueden obtenerse las curvas que relacionan a k con a/b para
coeficientes n enteros y mayores de 2; en todos los casos el factor k mínimo es 4.0, y corresponde al pandeo
de la placa en semiondas cuadradas, forma de pandeo que se presenta cuando la relación de aspecto es un
número entero (1, 2, 3, etc.) ; si la placa se pandea en una sola semionda (n - 1); k adquiere su valor más
pequeño posible en el caso en que a/b=1.0, o sea cuando la placa es cuadrada (a placas rectangulares muy
cortas, con a/b<1, les corresponden coeficientes k más grandes); si el número de semiondas es dos, k es
mínimo cuando a/b=2, es decir, cuando la placa tiene una longitud doble que el ancho y se pandea, de nuevo,
en semiondas cuadradas, dos en este caso, y así sucesivamente.
Para relaciones de aspecto diferentes de las correspondientes a k=4.0 el factor de placa crece (Fig.
7.10); si a está comprendida entre 1 y 2, por ejemplo, k sube a lo largo de la curva n=1, y la placa se pandea
en una semionda hasta la intersección con n=2; más allá de este punto el pandeo se presenta al formarse dos
semiondas, y k disminuye hasta el mínimo, 4.0, correspondiente a a=2, para volver a aumentar después,
hasta llegar a la intersección con n=3; si las relaciones de aspecto crecen el proceso se repite y como una
consecuencia, para determinar el esfuerzo crítico de pandeo de placas rectangulares comprimidas,
libremente apoyadas, deben utilizarse los valores de k dados por la envolvente inferior de las curvas,
dibujada con línea continua en la Fig. 7.10, en conjunción con la ecuación 7.30.
Las abscisas de los puntos de intersección de las distintas curvas de la Fig. 7.10 se determinan con
α = n ( n + 1)
la ecuación 7.32, que para placas libremente apoyadas se reduce a , sí en esta expresión se
hace n+1, 2, etc., se obtienen respectivamente las abscisas de las intersecciones entre las curvas n=1 y n=2,
α 1,2 = 2 = 1.414, α 2,3 = 6 = 2.449
n=2 y n=3, etc., que son , y así sucesivamente.
Las curvas n=2, 3, etc., se obtienen multiplicando las abscisas de la n=1 por 2, 3, etc., mientras las
ordenadas no cambian
En las curvas de la Fig. 7.10 se ve que la diferencia entre los valores máximo y mínimo de k
disminuye al aumentar la relación a, y como en muchos miembros estructurales, por ejemplo en las

17
columnas, interesan nada más las placas largas y angostas, el diseño puede basarse en el factor k más
pequeño, que es constante para todas las relaciones de aspecto, con lo que el problema se simplifica
considerablemente.
En la tabla 7.1 se presentan los factores k correspondientes a la envolvente inferior de las curvas
de la Fig. 7.10, en función de las relaciones de aspecto a=a/b; aumentan considerablemente por encima del
mínimo sólo cuando las relaciones de aspecto son muy reducidas, de manera que si se quisiera aumentar la
resistencia al pandeo de una placa comprimida larga, libremente apoyada, por medio de atiesadores
transversales que la obligasen a pandearse en semiondas de longitud determinada, sería necesario colocarlos
con separaciones muy pequeñas; los atiesadores longitudinales son más eficientes, pues hacen que aumente
la relación t/b.

Tabla 7.1. Valores del factor k para placas rectangulares comprimidas, libremente apoyadas

a/b 0.20 0.30 0.40 0.50 0.60 0.70 0.80


k 27.0 13.2 8.41 6.25 5.14 4.53 4.2

a/b 0.90 1.0 1.10 1.20 1.30 1.40 1.41


k 4.04 4.00 4.04 4.13 4.28 4.47 4.49

b) Placas empotradas en los dos bordes descargados


Los coeficientes p y q de la ecuación 7.23 valen ahora 2.50 y 5.00, respectivamente (Fig. 7.6), y
el factor de placa adopta la forma
⎡⎛ n ⎞ 2 ⎛α⎞ ⎤
2

k = ⎢⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ ⎟ ⎥
⎣⎝ α ⎠ ⎝ n⎠ ⎦
7.40
Si la pieza es larga, el valor mínimo de k puede obtenerse de nuevo derivando la ecuación 7.40
con respecto a a e igualando el resultado a cero:
∂k n2 α 2n 2b 3 a
= −2 3 + 10 2 = − 3 + 10 2 = 0
∂α α n a bn
a4 a a
∴b 4 = 5 4
; b = 1.495 ; = 0.669b
n n n
La carga crítica mínima corresponde a la formación de semiondas de longitud igual a 0:669b,
bastante más cortas que las que aparecen cuando los bordes longitudinales están libremente apoyados.
Sustituyendo en la ecuación 7.40 a por a/b, se obtiene
2 2
⎛ nb ⎞ ⎛ a⎞
k = ⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ ⎟
⎝ a⎠ ⎝ nb ⎠
2 2
⎛ b ⎞ ⎛ 0.669b ⎞
=⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ = 6.97
⎝ b ⎟⎠
kmin
⎝ 0.669b ⎠
Las restricciones en los bordes llevan a kmín y, por consiguiente, a (scr)mín, a valores
considerablemente mayores que los obtenidos en el caso anterior.
En placas cortas, en las que no puede ignorarse el carácter entero de n, los factores k se obtienen
siguiendo un proceso análogo al empleado para las libremente apoyadas:

18
2 2
⎛ b⎞ ⎛ a⎞
k = ⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ ⎟
⎝ a⎠ ⎝ b⎠
Si n=1,
Para a/b=0.5, 0.669 y 1.0, k vale, respectivamente, 7.75, 6.97 y 8.5.
2 2
⎛ 2b ⎞ ⎛ a⎞
k = ⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ ⎟
⎝ a⎠ ⎝ 2b ⎠
Si n=2, , y los valores correspondientes a a/b=1.0, 1.338 y 2.0 son,
de nuevo, 7.75, 6.97 y 8.5.
2 2
⎛ 3b ⎞ ⎛ a⎞
k = ⎜ ⎟ + 2.5 + 5.0 ⎜ ⎟
⎝ a⎠ ⎝ 3b ⎠
Si n=3, , y vuelve a obtenerse k= 7.75, 6.97 y 8.5 si se hace
a/b=1.5, 2.0 y 3.0.
Para n=4, 5, etc., se llega a resultados semejantes.
La relación entre el factor k y el cociente a/b está dada también en este caso por una familia de
curvas, todas con la misma ordenada mínima, kmin=6.97 (Fig. 7.11). Las abscisas de las intersecciones se
obtienen con la ecuación 7.26, que ahora es
1
α= 4 n ( n + 1) = 0.669 n ( n + 1)
5

Por consiguiente, si n=1,


α 1,2 = 0.669 2 = 0.956 , si n=2, α 2,3 = 0.669 6 = 1.638 , etc.

Fig. 7.11. Variación del factor de placa k con la relación de aspecto a/b. Placas empotradas en los bordes longitudinales

Lo mismo que en las placas libremente apoyadas, las curvas correspondientes a n=2, 3, 4, ..., se
obtienen duplicando, triplicando, etc., las abscisas de la n=1, mientras las ordenadas se mantienen
constantes, y k crece apreciablemente sólo en piezas muy cortas, de manera que en el diseño de placas largas
y angostas puede tomarse k=kmin=6.97; tampoco son eficientes los atiesadores transversales, pero sí lo son
los longitudinales.

c) Placas empotradas en un borde descargados, libres en el otro.

Las ecuaciones aplicables ahora son las del caso II. placas restringidas elásticamente en un borde

19
longitudinal y libres en el otro, con p y q iguales a 0.570 y 0.125 (Fig. 7.8); de la ecuación 7.31,
⎡⎛ n ⎞ 2 ⎛ α ⎞ ⎤ ⎡⎛ nb ⎞
2 2
⎛ a⎞ ⎤
2

k = ⎢⎜ ⎟ + 0.570 + 0.125 ⎜ ⎟ ⎥ = ⎢⎜ ⎟ + 0.570 + 0.125 ⎜ ⎟ ⎥


⎣⎝ α ⎠ ⎝ n ⎠ ⎦ ⎣⎝ a ⎠ ⎝ bn ⎠ ⎦
Si las placas son largas,
∂k 2n 2 α n 2b 3 a
= − 3 + 0.250 2 = −2 3 + 0.250 2 = 0
∂α α n a bn
a4 a a
∴b 4 = 0.125 4
; b = 0.594 ; = 1.684b
n n n
La carga crítica corresponde a la formación de semiondas de longitud 1.684 b, y
2
⎛ 1 ⎞
+ 0.570 + 0.125 (1.684 ) = 1.277
2
kmin =⎜ ⎟
⎝ 1.684 ⎠
(Puede calcularse también con la ecuación 7.37: kmin=p+2Öq=0.570+2Ö0.125=1.277).
Los coeficientes k para placas cortas se obtienen siguiendo caminos análogos a los utilizados en
los casos anteriores:
2 2
⎛ b⎞ ⎛ a⎞
n = 1, k = ⎜ ⎟ + 0.570 + 0.125 ⎜ ⎟ = 1.695, 1.277 y 1.320, para a b = 1.000, 1.684 y 2.000
⎝ a⎠ ⎝ b⎠
2 2
⎛ b⎞ 0.125 ⎛ a ⎞
n = 2, k = 4 ⎜ ⎟ + 0.570 +
⎝ a⎠ ⎜⎝ ⎟⎠ = 1.695, 1.277 y 1.320, para a b = 2.000, 3.368 y 4.000
4 b
Para n = 3, 4. etc., se obtienen resultados semejantes. El valor mínimo de k es siempre 1.277,
correspondiente a una semionda de longitud 1.6846 multiplicada por 3, 4, etc. de manera que relación entre
k y a/b está dada por una familia de curvas (Fig. 7.12), todas con la misma ordenada mínima, 1.277, y que
suben a uno y otro lado de ella; las abscisas delas intersecciones se determinan con la ecuación 7.32, que
reduce a
1
α= 4 n ( n + 1) = 1.681 n ( n + 1)
0.125
y da 2.377, 4.117, 5.823, etc., para n = 1, 2, 3...

Fig. 7.12. Variación del factor de placa k en función de la relación de aspecto a/b. Placas empotradas en un borde
longitudinal, libres en el otro
Como en casos anteriores las curvas de los modos superiores de pandeo se obtienen conservando

20
las ordenadas correspondientes a n=1 y multiplicando las abscisas por 2,3 etc.

d) Placas libremente apoyadas en un borde descargardo, libres en el otro

2
⎛ n⎞
k = ⎜ ⎟ + 0.425, ya que q = 0, p = 0.425 (Fig. 7.8).
⎝α⎠
En Placas largas
∂k n2
= −2 2 = 0
∂α α
lo que se cumple únicamente si a=¥ es decir, si la placa se pandea en una semionda, y
kmin = 0.425, puesto que n α = 0
Para placas cortas se obtienen los factores k que se indican en la tabla 7.2 y se representan en
forma gráfica en la Fig. 7.13

Tabla 7.2. Valores del factor k para placas rectangulares comprimidas, libremente apoyadas en los bordes cargados y en
uno descargado, libres en el otro.

a/b 0.250 0.500 1.000 2.000 5.000 10.000 ¥


(k)n=1 16.425 4.425 1.425 0.675 0.465 0.435 0.425
(k)n=2 64.425 16.425 4.425 1.425 0.585 0.465 0.425
(k)n=3 144.425 36.425 9.425 2.675 0.785 0.515 0.425

Fig. 7.13. Variación del factor de placa k en función de la relación de aspecto a/b. Placas libremente apoyadas en un borde
longitudinal, libres en el otro
En este caso las curvas no se cortan, sino la correspondiente a n=1 se encuentra por debajo de las
demás para todos los valores de a/b, lo que indica que la placa se pandea siempre en una semionda,

21
cualquiera que sea su relación de aspecto; todas tienden asintóticamente hacia kmín, 0.425, cuando a=a/b
tiende hacia infinito. (Si se emplea la ecuación 7.32, se obtiene
1
α= 4 n ( n + 1) = ∞
0
independientemente de n, lo que indica que todas las curvas se cortan en el infinito).
En la Fig. 7.14 (Ref. 7.2) se presenta un resumen de los resultados obtenidos hasta ahora para
placas con distintas condiciones de apoyo, comprimidas en una sola dirección; las curvas mostradas son las
envolventes inferiores de las familias que corresponden a cada caso. Se han trazado también las curvas que
se obtienen cuando los bordes cargados están empotrados; el tipo de apoyo en estos bordes influye
notablemente en k tan sólo cuando las placas son muy cortas, y su influencia disminuye al aumentar la
longitud, desapareciendo casi por completo en placas largas.

Figura 7.14. Resumen de valores del factor de placa k

Esfuerzos críticos mínimos y longitudes de las semiondas de pandeo en placas largas comprimidas, con
los bordes longitudinales libremente apoyados o empotrados.

En la tabla 7.3 se indican los factores de placa k mínimos y los coeficientes b necesarios para
calcular el esfuerzo crítico más pequeño y la longitud l de las semiondas de pandeo correspondientes, en
placas largas comprimidas en una sola dirección y con condiciones de apoyo extremas en los bordes largos
no cargados (apoyos libres, x=¥, o empotrados, x=0); esos valores de k y b deben llevarse, respectivamente,
a las ecuaciones 7.41 y 7.42
Tabla 7.3. Valores mínimos de k y coeficientes b correspondientes.

22
π 2E ⎛ t ⎞
2 2
⎛t⎞
(σ cr )min = 2 ⎜ ⎟ kmin = 1843000 ⎜ ⎟ kmin
12 (1− µ ) ⎝ b ⎠ ⎝ b⎠
7.41

(El valor numérico del coeficiente p2E/12(1-µ2) corresponde a µ=0.3 y E=2,039,000 kg/cm2;
(scr)mín se obtiene en kg/cm2).
λ = βb 7.42
Las ecuaciones 7.41 y 7.42 son válidas en todos los casos, variando solamente kmín y b, de acuerdo
con las condiciones de apoyo de los bordes descargados; lo mismo puede decirse de la ecuación 7.25, la
que, como se ve más adelante, conserva la misma forma aun cuando las condiciones de carga de las placas
son diferentes de las estudiadas hasta ahora, siendo k la única cantidad que cambia de unos casos a otros.
En la pág. 321 se describió un método para obtener valores aproximados del factor k en placas
apoyadas en los dos bordes no cargados, cuando las restricciones elásticas que hay en ellos difieren de uno
a otro; aplicándolo al caso 2 de la tabla 7.3, tomando los resultados de 1 y 3, se obtiene
4.00 + 6.97
k! = 5.485,
2
que es casi igual al que aparece en la tabla.

7.3.2 Interacción de los elementos planos que forman una sección

Hasta ahora se ha estudiado exclusivamente el pandeo de placas comprimidas aisladas, pero los
miembros que componen las estructuras de acero están formados casi siempre por un conjunto de elementos
planos que constituyen el alma y los patines de las secciones I, H, T, las paredes de las secciones en cajón,
etc., y la carga crítica de pandeo de cada uno de esos elementos no depende tan sólo de sus características
propias, sino también, y en forma muy importante, de las propiedades de los restantes, ya que el
comportamiento de conjunto y la interacción de todas las placas son los que fijan el grado de restricción

23
existente en los bordes longitudinales de cada una de ellas y, por consiguiente, el valor de su factor k.
El pandeo local tiende a presentarse primero en la placa de menor rigidez, pero su iniciación se
retrasa por las restricciones que imponen las demás sobre las rotaciones de sus bordes, por lo que en general
no se pandea una sola placa, sino es todo el conjunto el que entra eventualmente en un estado de
inestabilidad, caracterizado por una distorsión de la sección transversal completa, excepto, como se ve más
adelante, cuando las placas que lo componen tienen rigideces muy diferentes unas de otras.
Escribiendo la ecuación 7.25 en la forma

⎡ π 2E ⎤ ⎡ k ⎤
σ cr = ⎢ ⎥⎢ ⎥
⎢⎣ 12 (1− µ ) ⎥⎦ ⎢⎢ b
( ) ⎥
2 2

⎣ t ⎥⎦
se advierte que el esfuerzo crítico es función exclusivamente del coeficiente de rigidez k/ (b/t)2, ya que la
cantidad encerrada en el primer paréntesis es constante para un material dado.
b/t depende de la geometría de cada una de las placas, pero k es función de las restricciones que
las demás producen en sus bordes, de manera que la simple inspección de la sección transversal de una barra
no permite determinar cuál placa tiene el factor de rigidez mínimo.
Si se supone que cada uno de los elementos planos que forman la sección está libremente apoyado
a lo largo de los bordes ligados con otras placas, y se toma como esfuerzo crítico de pandeo local del
conjunto el correspondiente al elemento que tenga, en esas condiciones, el coeficiente de rigidez menor, se
obtiene un resultado que suele ser conservador, ya que el factor de rigidez real de la placa menos resistente
es mayor que el calculado puesto que las restantes restringen, en mayor o menor grado, las rotaciones de
sus bordes longitudinales. (La única excepción se presenta cuando todas las placas que componen el perfil
se pandean al mismo tiempo, pues en ese caso ninguna de ellas restringe a las demás, y el esfuerzo crítico
calculado es el real).
Si en una sección H, por ejemplo, se supone que el alma está libremente apoyada en los dos bordes,
y que cada patín está formado por dos placas, libremente apoyadas también en el borde en contacto con el
alma y sin ningún apoyo en el otro, se calculan sus esfuerzos críticos con la ecuación 7.25, haciendo en ella
k=4.0 para el alma y k=0.425 para los patines, valores correspondientes a placas largas con las condiciones
de apoyo supuestas, y se toma como esfuerzo crítico de pandeo local del conjunto el menor de los dos, el
resultado obtenido es conservador.

Figura 7.15. Interacción de los elementos planos de una columna de sección transversal en cajón
Sin embargo, si se desea calcular los esfuerzos críticos con mayor exactitud, debe tenerse en cuenta
la interacción de las diversas placas que forman cada perfil, para obtener los factores k reales

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correspondientes a cada una de ellas.
E1 fenómeno de la interacción de los elementos planos que constituyen una pieza comprimida
puede ilustrarse estudiando el comportamiento de una columna de sección transversal cuadrada hueca,
formada por cuatro placas, sometida a esfuerzos uniformes de compresión que hacen que se pandee
localmente (Fig. 7.15).
Si las cuatro placas tienen el mismo grueso, las secciones transversales de la columna se deforman
como se muestra en la Fig. 7.15c: como todas tienen la misma rigidez, ninguna se opone al pandeo de las
demás, y todos los bordes giran libremente alrededor de ejes longitudinales que pasan por las esquinas de
la sección; las cuatro placas actúan como si estuvieran apoyadas en los dos bordes longitudinales, y k vale
realmente 4.00 para cada una de ellas.

En el segundo caso, ilustrado en la Fig. 7.15d, el grueso tt de las placas horizontales es mayor que
el de las laterales, t. Suponiendo que están libremente apoyadas en los bordes, k vale 4.00 para todas, pero
(b/t)2 es mayor en las laterales que en las horizontales, de manera que éstas son más rígidas y el pandeo
tiende a iniciarse en aquellas. Las placas superior e inferior tratan de impedir el giro de los bordes de las
laterales, lo que ocasiona la aparición de momentos a lo largo de las aristas de la sección que restringen la
rotación de los elementos planos de menor rigidez y producen en ellos una condición intermedia entre el
apoyo libre y el empotrado, al mismo tiempo que tratan de hacer girar a los elementos más rígidos; como
resultado, el factor k de las placas laterales crece por encima de 4.00 mientras que el de las horizontales
disminuye, los coeficientes de rigidez k/(b/t)2 tienden a igualarse, y la sección alcanza un estado de equilibrio
inestable cuando los dos pares de placas se pandean simultáneamente
El fenómeno que se acaba de describir se presenta tan sólo cuando las rigideces de las placas que
componen la sección son del mismo orden de magnitud; si unas son mucho más rígidas que otras (Fig. 7.15),
se pandean únicamente las más esbeltas, que tienen un comportamiento cercano al de placas empotradas en
los bordes, ya que su carga crítica se alcanza antes que la de los elementos más rígidos, sin que lleguen a
igualarse los coeficientes de rigidez.
El comportamiento de otras secciones, tales como viguetas, canales, zetas, etc., es semejante al de
las secciones en cajón.
En resumen, cuando el pandeo local se presenta antes que el de conjunto del miembro, la placa en
la que se inicia el fenómeno necesita las restricciones que le proporcionan las contiguas para seguir siendo
capaz de soportar incrementos de carga; el conjunto es estable hasta que se igualan los coeficientes de rigidez
de todas las placas que lo componen, en cuyo caso todas ellas se pandean simultáneamente, o hasta que se
alcanza un estado de equilibrio inestable en la placa o placas más flexibles, a pesar de las restricciones
impuestas por las demás.
El fenómeno del pandeo local de secciones compuestas por varias placas se complica cuando los
esfuerzos normales no son iguales en todas, ya que la rigidez no depende exclusivamente de la geometría y
de las condiciones de apoyo, sino también de la magnitud del esfuerzo existente en cada una; así, por
ejemplo, si en la sección de la Fig. 7.15c, en la que las cuatro placas son iguales, dos de ellas estuviesen
sometidas a esfuerzos de compresión mayores que las otras, éstas les darían un cierto soporte que dependería
de la relación entre los esfuerzos, pues la rigidez disminuye al crecer los esfuerzos normales.
La solución exacta del problema, considerando la estabilidad del conjunto completo de placas, es
posible, ya que la ecuación general 7.10 puede aplicarse a cualquier combinación de elementos planos; sin
embargo. este procedimiento lleva a cálculos matemáticos muy laboriosos y de difícil aplicación a
problemas prácticos, por lo que se han buscado soluciones aproximadas utilizando procedimientos más
directos (Ref. 7.3).
Las secciones que se usan en estructuras de acero están compuestas por pocos elementos planos
y, además, suelen tener dos ejes de simetría, lo que hace que se puedan deducir fórmulas aproximadas para
calcular el coeficiente de restricción x que determina el valor del factor k de cada una de las placas; como,
además, se conoce la solución exacta de algunos de los problemas de inestabilidad local de columnas, es
posible determinar el grado de aproximación de las fórmulas simplificadas de diseño.

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Determinación del coeficiente de restricción x

Se ha obtenido ya la solución del problema del pandeo de placas rectangulares largas, comprimidas
en una dirección, en función de un coeficiente de restricción x que es constante a lo largo de los bordes no
cargados, y que depende de las dimensiones de la placa que se pandea y de las que retrasan la iniciación del
fenómeno, así como de los esfuerzos normales existentes en ellas, y se han estudiado los casos extremos en
que x es nulo (bordes de la placa empotrados) o infinito (bordes libremente apoyados), pero no se ha visto
todavía cómo calcular el coeficiente de restricción en casos de apoyo intermedios, como los de los elementos
planos que forman parte de perfiles estructurales laminados o soldados, que no están empotrados ni
libremente apoyados en los bordes.
En la Ref. 7.3 se presenta un método aproximado para determinar los coeficientes x
correspondientes a almas y patines de varias secciones de importancia práctica, que se basa en la suposición
original de que x es independiente de la magnitud de los esfuerzos normales longitudinales y en la
introducción posterior del efecto de esos esfuerzos, así como en las dos hipótesis siguientes:
1. La inestabilidad local de las placas que componen el elemento estructural se presenta antes que
el pandeo de conjunto de éste.
2. Las aristas a lo largo de las que se unen las placas que forman el conjunto permanecen rectas, y
no se distorsionan antes de que se origine la falla por pandeo local.
Las expresiones deducidas en la Ref. 7.3 para calcular los coeficientes de restricción x se resumen
en la segunda columna de la tabla 7.4, que se ha tomado de esa referencia; conocido x, las curvas de las
Figs. 7.6 y 7.8 proporcionan p y q para placas con los dos bordes longitudinales restringidos elásticamente
o con uno restringido y el otro libre y, por último, llevando p y q a la ecuación 7.27 o a la 7.34a se obtiene
el factor k del caso en estudio.
Este último paso puede simplificarse expresando Ök en forma aproximada, como una función
algebraica de x mediante las ecuaciones siguientes:

Caso I. Los dos bordes longitudinales restringidos elásticamente:


2
k = 2+
10ξ + 3 7.43
Caso II. Los dos bordes longitudinales restringidos elásticamente, el otro libre:
2
k = 0.65 +
3ξ + 4 7.44
En la tabla 7.4 se indicado también el valor de Ök que debe utilizarse en cada caso.
Las ecuaciones 7.43 y 7.44 no tiene ninguna base teórica, pues se han obtenido trazando Ök como
función de x, utilizando para ello la ecuación k=p+2q y las curvas de las Figs. 7.6 y 7.8, y seleccionando
expresiones que dan resultados suficientemente aproximados.
Los nomogramas de las Figs. 7.16 a 7.18, tomados de la Ref. 7.5, son soluciones gráficas de la
mayor parte de los casos incluidos en la tabla 7.4.

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Tabla 7.4 Formulas para determinar el factor k de placas que forman parte de la columna.

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Figura 7.16. Nomograma para determinar el factor de placa k de
almas de sección en cajón

Figura 7.18. Nomograma para determinar el factor de placa k en almas


de canales y secciones I

Figura 7.17. Nomograma para determinar el factor de placa k en patines


de canales y secciones I y en almas de sección U y T en cajón
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