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[041]

Revista de Arquitectura y Urbanismo

Revista del Colegio


de Arquitectos
de la Provincia de
Santa Fe, Distrito 2,
Rosario.

Presidente
Arq. José Florio

Vicepresidente
Arq. Susana Paganini

Secretario
Arq. Juan José Marrafini

Tesorero
Arq. José Saruá

Vocales titulares
Arq. Mariana Vallejos
Arq. Marta Ruarte
Arq. Alicia Ferreyra
Arq. Susana Basilio

Vocales suplentes
Arq. Manuel Ongaro
Arq. Adriana Manodoro
Arq. Pablo Rivera
Arq. Eduardo Fernández

Jueces del Tribunal


de Ética y Disciplina
Titular
Arq. Matilde Luetich
Suplente
Arq. Victorino Alvarez

Miembro de la Comisión
Revisora de Cuentas
Arq. Enrique Goldberg

Vocales del Colegio Distrital


al Directorio Superior
Provincial
Titular
Arq. José D’Angelo
Suplente
Arq. Marcelo Ponzellini

Las notas publicadas con la firma


de su autor no representan
necesariamente la opinión de la
Institución.
La inserción de publicidad no
implica vinculación con las
empresas anunciantes,
y la Institución no se siente obligada
a la defensa de los intereses
particulares de las mismas.
[041]
septiembre

5 octubre
noviembre

[041] 5
Esta nueva presentación de [041] supone un contraste en relación a la anterior,
Editor responsable en tanto la pequeña escala de lo que habíamos llamado «arquitecturas cotidianas»
Colegio de Arquitectos, ha cambiado a obras de gran escala, volumetría y presencia urbana.
Distrito 2, Av. Belgrano 650, Estas otras dimensiones detienen la mirada y dan lugar a reconocer mayor
2000 Rosario
ingerencia en el hacer de la ciudad, dadas su complejidad, presupuestos
Director y representatividad.
Marcelo E. Villafañe Este significado, en algunos casos institucional, en otros comerciales
Co Director o de servicios, comprometen a la arquitectura al atravesarla por la rigidez
Pedro Guillermo Viarengo de las demandas propias de esos programas, acuñados en intereses lejanos
a su cultura. El mérito de las obras que presentamos es precisamente ese:
Editor
Andrés Conti responder con arquitecturas de valor a estos programas.
Estos méritos no son fáciles de encontrar. Basta ver cuántas oportunidades
Comité Editor desperdiciadas en obras similares, tanto públicas o privadas, comerciales
Alejandro Beltramone
Gerardo Caballero o institucionales. Por eso es una satisfacción íntima para este comité editorial
Emilio Farruggia destacar el trabajo de colegas que no declinan el compromiso de la arquitectura
Pablo Florio ante dificultades ciertas y encuentran la ocasión para aportar al patrimonio cultural
Juan Blás Gastón
Víctor Cittá Giordano de la comunidad de la que forman parte.
Cinco obras que tratan diversos temas nos representan en esta entrega, elegidas
Colaboradores entre diferentes temas. En primer lugar el edificio de la Bolsa de Comercio, una
Jackie Monzón
Manuel Fernández de Luco obra iniciada quince años atrás y desarrollada en el tiempo, sin dejar de ser
Sergio Bertozzi contemporánea. En segundo lugar, presentamos una refuncionalización y cambio
Gustavo Cardón de fachada de dos edificios de Telecom.
Comisión de Urbanismo CAD2
Adrián Luchini A continuación, tres obras que tratan la imagen corporativa de una empresa
Javier Aguilar de supermercados. En estos trabajos vemos un ejemplo de arquitectura con cierto
Solano Benítez énfasis en lo comunicacional.
Diseño Luego, mostramos un hotel de cuatro estrellas en torre de gran volumetría que
Cosgaya, Diseño. marca claramente el punto de «gran escala» de las obras rosarinas.
Liliana Agnellini Finalmente, el Centro de Especialidades Médico Ambulatorias (CEMA), construido
Pablo Cosgaya
Marcela Romero sobre una estructura preexistente, que rescata de las ruinas un intento por años
Verónica Franco frustrado.
En este número, también iniciamos una sección sobre concursos, para tratar
Fotografía
Provista por los autores que tanto esfuerzo por parte de los profesionales se plasme al menos en una
publicación, ya que pocos certámenes llegan al objetivo final de la construcción.
Impresión Por el lado de los artículos internacionales, presentamos dos obras construidas
Imprenta Lux
a partir de concursos ganados: una de las cinco obras finalistas del premio Mies
Van der Rohe Latinoamericano 2000 —emplazada en Asunción del Paraguay—
y un proyecto en Valladolid del arquitecto catalán Javier Aguilar. Para concluir
mostramos la residencia para el headmaster en Estados Unidos del arquitecto
argentino Adrián Luchini, radicado en Missouri.
También en esta revista damos lugar a un artículo sobre la ciudad escrito y
debatido en el seno de la comisión de urbanismo del Colegio de Arquitectos
Distrito 2.
Para próximos números nos comprometemos a debatir temas que necesitan de un
gran desarrollo, como la propiedad horizontal, los espacios públicos y la vivienda
social.
[041]

Sumario
Revista de Arquitectura y Urbanismo 5
10 Nota de tapa

Otras dimensiones
Obras recientes

Imagen de tapa:
Edificio Telecom,
Drazen Juraga Asociados
4 ¿Las otras escalas o todas las escalas?
Manuel Fernández de Luco

10 5 obras

40 Concurso Escuela de Ingeniería Civil y auditorio UNR


Gustavo Cardón

60 La transformación urbanística de la ciudad


Isabel Martínez de San Vicente

70 Benítez Vargas, Marinoni Vargas, Ayala Vargas


Complejo SITRANDE, Paraguay

74 Adrián Luchini
Residencia para el headmaster, Missouri. USA

78 Aguilar, Campistrou, Queralt, Villacampa


Centro de Desarrollo Regional de Valladolid
1
Bolsa de Comercio de Rosario MARIO ROBERTO ALVAREZ Y ASOCIADOS

Supermercados «La Gallega» FAURE–MALAMUD–RIVEIRA


3

5
CEMA EQUIPO DE PROYECTO DE LA SECRETARIA DE PLANEAMIENTO

4]
Cinco obras

2 Telecom DRAZEN JURAGA ASOCIADOS

4 Hotel Holiday-Inn D’ANGELO–BOIX

5]
Las otras escalas… O todas

Foto 1 «Escena Cómica» Sebastiano Serlio Foto 2 «Escena Trágica» Sebastiano Serlio

6]
las escalas?
Desde este momento confundo solidariamente,
en una sola noción, Arquitectura y Urbanismo.
Arquitectura en todo, Urbanismo en todo.
Le Corbusier1

«Tratose de una combinación que contribuyó a la sustitución de la


fórmula de la Escena Cómica de Serlio por la de su Escena Trágica,
una convención que se insinuó en situaciones existentes a fin de
convertir un mundo del acontecer casual y medieval en una situación
mucho más integrada de serio y digno comportamiento»
Colin Rowe-Fred Koetter

Cuando se adoptan categorías clasificatorias, éstas ineludiblemente legitiman las opciones funcionales para
Texto: Manuel Fernández de Luco

el conocimiento del objeto de la clasificación. Es así que la construcción de series temáticas, dimensionales,
generacionales, constructivas, o de cualquier otro sesgo, aplicadas a las obras de arquitectura tiende a
fortalecer y priorizar algunos nodos particulares de interrelaciones que, por encima de las verificables
diferencias, constituye el soporte firme, tanto de las interpretaciones, como de las acciones de proyecto.
En la reciente publicación monográfica de [041], bajo la cita convocante de «Arquitecturas Cotidianas», se
agrupan una serie de obras arquitectónicas que más allá de la «incurable multiplicidad» (de temas y
concepciones) a la que se refiere la arquitecta Beatriz Chazarreta2 parecen aglutinadas en torno a una
cuestión distintiva en común: la reducida magnitud del objeto arquitectónico, o la pequeña escala. Así
quedan definidas desde esta perspectiva y por reacción complementaria equivalentes categorías para las
otras escalas —grande y media— que integran el caleidoscopio de la obra de arquitectura.
Esta opción clasificatoria de apariencia casi neutra conlleva, sin embargo, al extenderse a las dimensiones
programáticas y al campo de la técnica operativa, a falsos reduccionismos y fracturas inadmisibles en la
funcionalidad y efectividad del hacer proyectual y constructivo de la arquitectura.
El reencuentro de la «dimensión artística» en solo alguna de aquellas escalas y la resignada
extra-disciplinaridad otorgada a otras, la insatisfecha cuota de protagonismo «creativo» ante ciertos desafíos
programáticos de la urbanidad contemporánea y la creciente y valorada tendencia al experimentalismo
autobiográfico mayoritariamente concentrado en torno a las cuestiones perceptivas o de estilo que las
ocasiones de comitencia singularmente personalizada permite y en muchos casos demanda, hacen
finalmente de la integridad cultural entre edificio-ciudad-territorio, en cuanto evidencia de la condición
colectiva del ambiente construido y funcionante, una casual secuencia aditiva y discontinua en sus
motivaciones, en el espesor técnico de su resolución y en su valor referencial en el continuo histórico y
material de los asentamientos urbanos.

En síntesis, la sectorización y acentuación escalar del trabajo proyectual en arquitectura no difiere del
admitir y promover la creciente desarticulación entre individualismo y colectividad del espacio urbano,
haciendo base de validación en el primero.

7]
Las otras escalas… O todas
«La vida transcurre entre dos potencias magnéticas capaces, cada una de
alcanzar lo sublime. Uno de estos polos representa lo que hace el hombre solo:
lo excepcional, lo patético, lo divino de la creación individual.
El otro representa lo que hacen, lo que representan los hombres en sociedad,
los hombres organizados en grupos, ciudades o naciones: ciertas fuerzas,
ciertas corrientes específicas de la colectividad...
...Crear la visualidad de los acontecimientos, hacerlos interpretativos a la
mirada, casi instantáneamente, ha de haber un lugar para eso, unos métodos
de exposición y, en su caso, por lo tanto, unos edificios...» Le Corbusier

Foto 3 «La Ciudad Mundial» Le Corbusier Foto 4 «Plan para Río de Janeiro» Le Corbusier

Me parece oportuno en este punto tentar una nueva mirada sobre la colección de obras publicadas y a
publicarse. Mirada que, como señala L. Quaroni3, «supere el error de considerar que en la intervención
sobre el territorio sea importante una única de las muchas escalas a las cuales se debe intervenir —sobre
todo cuando se proyecta a una escala determinada— vislumbrando en cada proyecto, grande, medio o
pequeño que sea, la verificación de todo aquello proyectado en esa escala con las otras escalas mayores y/o
menores con las cuales se mide el proyecto, se trate de las circunstancias del medio urbano —cultural y
concreto— en el cual va colocado un edificio y con el cual reaccionará por consonancia o por contraste
intencionados; o se trate de un desarrollo de detalle que confirmará —y dará existencia— el proyecto de
escala mayor del que ha partido».
Así, la condición de grandeza de una obra queda liberada de atributos de entalladura: small, medium, large
—que por otra parte tampoco en la industria del vestido refieren valores diferenciales— y se le adjudica al
trabajo de construcción formal de un intensionado episodio en la construcción-transformación de las formas
de la ciudad, como parte inseparable de las formas sociales y culturales. La forma urbana, asumida como
dato registrable de fines y medios de la vida de una comunidad —creación del ambiente en que ésta
existe— constituye entonces el «objeto constante» de la creación arquitectónica en el sentido corbusierano
del arte: «producto de la ecuación razón-pasión, ...es el lugar de la felicidad humana»4.
La negación de la obra de arquitectura como obra de construcción urbana es un fenómeno relativamente
reciente en la historia de la humanidad. La preocupación del pensamiento griego por la organización de la
ciudad, o el interés en ella de los artistas del renacimiento, o las utopías social-urbanas del siglo XIX, son
una clara evidencia de que el valor social de la forma de la ciudad solo desaparece a partir de las primeras
décadas del siglo XX, cuando los problemas urbanos en su nueva dimensión metropolitana, pasan a ser
competencia creciente de la «técnica», mientras que la arquitectura gradualmente se repliega, haciéndolo
propio, al campo del «desing», «artificio que oculta la tontería y las perezas y el espíritu de lucro»5, y que
se orienta más recientemente, en muchos casos, a la búsqueda de la recompensa mediática
permanentemente alimentada con la idea de innovar a toda costa, interrumpiéndose por esta urgencia en
«la invención» toda relación con aquello que la rodea y la condición de servicio que tiene el «arte de
construir ciudades».

8]
las escalas?
Una equivocada interpretación del movimiento moderno a lo largo de la segunda mitad del siglo XX ha
llevado a esta paulatina negación —o abandono— de un ámbito moral para las formas de la ciudad y que,
como señalara R. Moneo, ha derivado la búsqueda de los referentes de la arquitectura «en los sistemas de
producción artística como el cine y el video» evitando preocuparse «si estos nuevos principios conforman
un sistema válido para representar nuestro mundo y si son política y socialmente responsables»6.
Pero no hay duda que el proyecto de arquitectura necesita de «la invención», invención que sólo se
legitimará aplicada a los problemas que la requieran; aquellos que desbordan las soluciones de calidad
probada y que por ser de carácter colectivo y cultural se producen en el interior de las formas urbanas y
sociales en evolución, necesariamente articuladas con lo pre-existente según una dinámica de proceso en el
tiempo.
Entre los múltiples balances de fin-principio de milenio en torno al estado de la arquitectura
contemporánea, y que tal vez liderara paradigmáticamente la Bienal de Venecia con su llamamiento: «más
ética menos estética», se refiere Vittorio Lampugnani7 a la necesidad del reconocimiento y aceptación de
«las diversas facetas de la ‘normalidad’ en que se basa la viabilidad de las ciudades... y la calidad de vida
urbana: la ‘normalidad’ de las cosas sencillas, pero no de la trivialidad; la ‘normalidad’ de las cosas
auténticas, pero no de la originalidad» ya que la ciudad necesita de pocas novedades, de pocos gestos
individualistas, por lo tanto «debería ser modesta y estar generosamente restringida si sus habitantes son
capaces de vivir su vida con libertad».
Surge de esta demanda de normalidad la necesidad y posibilidad de una nueva cotidianidad de los
acontecimientos, los valores y las esperanzas urbanas, y en ello está el programa proyectual y constructivo
de la arquitectura. Lo cotidiano —diario—, (según el diccionario Pequeño Larousse), recompone entonces
el sentido íntegro de la condición urbana y de su carácter de experiencia colectiva, compleja. Integra y
compleja como es la percepción y el accionar social e individual, como lo es el valor del progreso, como lo
son las formas ambientales (arquitectura) que demandan su existencia y representación.

En esta cotidianidad las demandas se reiteran: la articulación de las esferas pública y privada, la dinámica
de construcción urbana y los momentos referentes de ese proceso, y las opciones «de parecerse» por ser
parte de una serie, o «de diferenciarse» por iniciar una nueva serie, ante la voluntad «de ser». La obra se
referenciará y significará en la arquitectura de la que hace su arquitectura, y en ello residirá su
trascendencia.
Detenerse en este número de [041] en un grupo de obras de mediana envergadura constituye una
estimulante oportunidad para tentar el ejercicio de aproximación a su «puesta en acto urbano». Tal vez más
distantes de la condición de clientelismo personalizado en la que mayoritariamente se desarrolla la
profesión de producir las obras de arquitectura en nuestro medio, estas ocasiones pueden constituirse en
estratégicas oportunidades de juicio e «invención» de construcción de piezas y episodios formales
relevantes, en la construcción y transformación de nuestras urbanidades formalmente aún inmaduras, y
capaces de «actualizar», a la manera de manifiesto concreto, la cotidianidad contemporánea de los
acontecimientos y de los valores de la vida en ciudad.

Notas
(1) Le Corbusier; ARQUITECTURA EN TODO-URBANISMO EN TODO.
Conferencia 8 de Octubre de 1929, Buenos Aires. En PRECISIONES Ed. Poseidón, Barcelona 1978.
(2) Beatriz Chazarreta; JUEGO DE ESPEJOS, en 041 número 4, CAD 2, Rosario, Julio-Agosto-Septiembre 2000.
(3) Ludovico Quaroni; PROGETTARE UN EDIFICIO, Ed. Mazzotta, Milán 1977.
(4) Le Corbusier; Op. Cit.
(5) Le Corbusier; Op. Cit.
(6) P. López y F. Moralejo; EL ULTIMO ANY, en SUMMA número 45, Buenos Aires, Octubre-Noviembre 2000.
(7) Vittorio Lampugnani; LA CIUDAD NORMAL, en ARQUITECTURA VIVA número 74, Madrid, Septiembre-Octubre 2000.

9]
1
5
Edificio Torre Bolsa
Mario Roberto Alvarez y Asociados
Superficie 21.000 m2
anteproyecto aprobado año 1983
Paraguay entre Santa Fe y Córdoba, Rosario

10]28]
11]
12]
La Bolsa de Comercio de Rosario Microcine. Se desarrolló en el 1er. Subsuelo, con acceso
Se partió del criterio de que el edificio de Córdoba y a través de una amplia escalera desde Planta Baja que
Corrientes, inaugurado el 11 de Noviembre de 1929, conduce al generoso Foyer en donde se localizan
magnífica creación del Arquitecto Raúl R. Rivera, no guardarropas, sanitarios, y un office destinado a apoyar
podía ser alterado en su estructura ni en sus detalles, sin funciones accesorias.
desmedro de su belleza y armonía, que lo constituyen en La Sala en sí cuenta con una superficie de 350 m2. con
uno de los justos motivos de orgullo rosarino en materia capacidad para albergar 300 butacas, y apoyada por
edilicia. Quedó intacto, pero está en conexión directa y servicios complementarios compuestos por 3 cabinas para
fluida con las nuevas instalaciones, lo cual, respetando traductores, camarines, depósitos, y salas de audio y
las características de cada concepción, da a los dos proyección, totalizan una superficie aproximada de 900
edificios una continuidad efectiva. Es la unidad en la m2. destinados a este Centro Cultural.
diversidad. Salón de la Bolsa de Cereales y Salón de Usos Múltiples.
Los Terrenos situados sobre la calle Paraguay entre Santa En el primero y segundo Piso del basamento han sido
Fe y Córdoba, frente a la plaza Pringles, los terrenos ubicados los espacios correspondientes a la actividad de
donde se realizó la obra integran un predio en forma de la Bolsa de Cereales y al Salón de Usos Múltiples. El
martillo, de 41 metros de frente, con una superficie total Salón de la Rueda de Cereales tiene 600 m2. Ambos, de
de aproximadamente 2.300 metros cuadrados. doble altura, están vinculados con un Foyer ó área de
El Proyecto. Decidida la construcción del Edificio, se movimiento, al cual llegan la escalera de acceso desde
procedió a la selección por antecedentes de una firma de Planta Baja y dos ascensores privados de la Bolsa. En el
arquitectos que llevara a efecto los estudios preliminares Hall se han previsto los sanitarios para público en general.
de la obra y la confección del Anteproyecto. Fueron En el 2º Piso se proyectó un Restaurant con visuales a la
invitadas diecisiete firmas del más reconocido prestigio, a doble altura del Salón de Operaciones, dividido en 2
criterio del Consejo Directivo, a saber: siete estudios de sectores, integrables para determinadas ocasiones.
Rosario, ocho de Buenos Aires y uno de Córdoba. Uno para los socios de la Bolsa y el restante para los
Efectuado un exhaustivo análisis, el Consejo Directivo usuarios del Edificio de Oficinas. Los socios de la Bolsa
resolvió designar al Arquitecto Mario Roberto Alvarez y acceden a forma independiente por 2 ascensores
Asociados, de la Capital Federal, para que se hiciera exclusivos o por una escalera que comunica a dicho
cargo de los Estudios Preliminares, el Anteproyecto, el sector del comedor con el Salón de Operaciones. Los
Proyecto y la Dirección. En el mes de Marzo de 1983, se usuarios del Edificio de Oficinas a través de los 4
aprobó el Anteproyecto de la obra, que consta de 2 ascensores de la Torre.
Subsuelos, Planta Baja, Basamento (Pisos 1º y 2º) Torre Como complemento del sector se proyectaron sanitarios
(Pisos 3º al 15º) y Remate (Pisos 16º y 17º) con un total para hombres, mujeres y discapacitados.
de 21.000 m2. La cocina que incluye cámaras de frío, tiene su acceso
El Proyecto comprende los siguientes sectores: en Planta independiente de mercadería a través del
Baja, los accesos y el gran hall, con locales para atención ascensor/montacargas y un palier de servicio
de socios y público en general (oficinas bancarias, postal, independiente.
Caja de Valores, etc.) y una amplia comunicación con el Se dotó al sector de Salones de Ruedas de un frente
actual Edificio; el Hall de Acceso a la Torre de Oficinas y opaco, en todo el ancho y la altura, no sólo pensando en
los servicios generales, que incluyen el estacionamiento, la fuerte expresión arquitectónica, sino para cumplir la
situado en los Subsuelos, para vehículos particulares, con premisa de aislación térmica y acústica. La luz natural
capacidad para 106 automóviles. será cenital a través de claraboyas circulares semi-
Plazoleta Cubierta. La Planta Baja, recedida esféricas, que en el caso de Salón de Usos Múltiples
aproximadamente 13 metros de la línea municipal de tienen previsto un sistema de oscurecimiento de
edificación, genera una plazoleta cubierta, exterior, con la accionamiento a control remoto.
inclusión de una escultura de la artista rosarina Sra. Nelly Torre de Oficinas. Doce de los trece pisos de la Torre
Giménez Vallana. Tan amplio retiro brinda un mayor serán para Oficinas.
desahogo al cumplimiento de las funciones propias del La torre se apoya sobre los linderos sur y oeste,
edificio y representa un aporte para embellecer el acceso, conformando un volumen de semiperímetro libre, que por
dándole amplitud. La transparencia y liviandad de la sobre los linderos cuenta con cuatro fachadas
fachada se logra con una carpintería de acero inoxidable y acristaladas. Carpintería de aluminio anodizado color con
cristal. cristales tonalizados.
Otros aspectos exteriores. Debido al retiro de la Planta Como la estructura resistente se resuelve con solo dos
Baja, se decidió ubicar con la mayor superficie, el 1er. columnas internas, es posible en las oficinas una gran
Piso, el Salón de Operaciones de la Bolsa de Cereales, y flexibilidad de armado.
un Salón de Usos Múltiples con capacidad para 700 Cuenta con cuatro ascensores de alta velocidad y un
personas. Además, para evitar que el volumen de la montacargas, que se agregan a los dos ascensores
construcción fuera agresivo al entorno, se dispuso retirar privados. Además, posee un alero perimetral que no solo

1
5
de frente y lateralmente el edificio de oficinas. brinda protección del sol y permite la fácil limpieza de las
Por lo demás, no habrá estructura de transición, lo que da ventanas, sino que servirá de eventual escape hacia una
una situación ideal de economía y síntesis. escalera de emergencia, externa.

13]
vacío s/microcine
cocheras

Planta 1er. subsuelo

Planta Baja Planta tipo oficinas 4º a 14º

14]
Corte transversal s/ PB, 1º y 2º pisos

foyer salón de usos múltiples

ascensores uso
exclusivo socios Bolsa (2)

salón rueda
de cereales

sanitarios
públicos

Planta piso 1

sanitarios

restaurant
p/socios

vacío s/
cocina salón usos múltiples

doble altura s/
salón operaciones

restaurant p/
oficinas

15]
Planta piso 2

1
5
2
5
Telecom Argentina
Proyecto y Dirección de obra Edificio Rioja 1479, Rosario
Proyecto y Dirección de obra Central Iriondo, Rosario
Drazen Juraga Asociados
Arquitectos Leonardo Gianolio, Sergio Bertozzi
Representante Técnico Arquitecto Miguel Torresi
Cálculo estructural Ingenieros Civiles Esteban Drinkovich,
Gonzalo Garibay

16]
18]
2
5

19]
20]
Edificios análogos. Análogo es algo parecido debían ser concebidos como sistemas abiertos, aptos para
pero que no es lo mismo. Pero no todas las analogías son ser repensados permanentemente y responder a una
Texto Sergio Bertozzi

evidentes, aún ante los ojos del observador más perspicaz. realidad indeterminada y mutable. En ambos casos, la
Las diferencias surgen con inmediatez, pero los elementos propia indeterminación programática devino en edificios
comunes —generalmente más sutiles—, requieren una no-terminados, en cajas contenedoras de programas en
mirada más curiosa y atenta. constante transformación, donde en sus respectivos
Rioja 1479, con su ligera piel de vidrio, y la Central internos coexisten indistintamente, en el espacio y en el
Iriondo, con la severidad de su fachada ciega de tiempo, centrales telefónicas con personas que, las unas y
hormigón, son edificios que no son tan diferentes en su las otras, desarrollan funciones en constante cambio. El
interno. Al menos no en la misma medida en que sus espacio interno muta permanentemente, pero la imagen
fachadas pretenden diferenciarlos. Y es que las externa permanece inalterada, expresando dos imágenes
intervenciones en ambos edificios operaron conforme a un diferentes pero envolviendo dispositivos análogos, en parte
programa en el que en tanto en el primero predominarían como producto de una concepción rigurosamente
los espacios para las personas, en el segundo el funcional, pero básicamente como necesidad figurativa.
protagonista sería el hardware comunicacional. El Las fachadas de ambos edificios mantienen inalterada
resultado, visto con la perspectiva del tiempo transcurrido, —en su expresión y en su materialidad— la imagen
es más parecido que lo que se pudo imaginar, puesto que buscada para cada edificio, pero independientemente de
lo que los autores buscaron enfatizar fue las diferencias. los sucesos internos. La estabilidad y previsibilidad dadas
El uno edificio corporativo. El otro central telefónica. El por el rigor geométrico de la trama de la piel de vidrio
primero hábitat del hombre. El segundo contenedor de la —reforzada por la escalera de escape— o por la
máquina. Pero la evolución tecnológica, y los composición cerrada de los paneles de hormigón,
consecuentes cambios de modalidades y estrategias contrastan con los dispositivos internos, dinámicos, en
operativas de la compañía, que se producían a la par de permanente mutación, en los que el mayor valor del
los proyectos y las obras, nunca permitieron disponer de proyecto reside, precisamente, en haberse comportado en
un programa completo y determinado, instrumento a la el tiempo como sistemas abiertos.
vez que producto clásico de los arquitectos formados Estos conceptos, que requerían ser enfocados desde una
en la lógica del proyecto que debe dar respuesta a un nueva lógica del proyecto, no resultaban entonces fáciles
programa-comitente. de asimilar y algunos datos demuestran hasta qué punto
A ocho años del prólogo de estos proyectos, la oportunidad el pensamiento de los proyectistas, por formación,
de reflexionar acerca de su comportamiento, permite continuaba siendo rígido. Un ejemplo de ello lo constituye
indagar hasta qué grado la respuesta fue acertada y hasta el logotipo de la compañía, esculpido en el hormigón a la
qué punto, por las limitaciones impuestas por la propia vista del plano de fondo del hall de recepción, pensado
formación profesional, resultaba posible interpretar la para perdurar en el tiempo. A pocos meses de acabado,
nueva lógica que requerían estos proyectos. En este caso, TELECOM modificó su logotipo. La solución revelaba una
el campo del análisis proyectual más revelador se concepción clásica para proveer una imagen de
encuadra en el de la relación entre el proyecto estabilidad y permanencia, en un ámbito que es mutable
contemporáneo y la realidad, la que a su vez parece haber e indeterminado. Pero entonces, asumir esta nueva lógica
alcanzado una dinámica propia que lo supera significaba para la convención de los autores, una
permanentemente. La lección es que no bastaba con contradicción mas que una forma de hacer arquitectura.
edificios dotados de espacios flexibles sino que estos

2 5

21]
3
5
Supermercados «La Gallega»
Faure, Malamud, Riveira / arquitectos
Avenida Pellegrini y Mitre, Rosario
Dorrego entre Rioja y San Luis, Rosario
Villa Gobernador Gálvez

Supermercado «La Gallega» sucursal Pellegrini


corte

Mitre
Av. Pellegrini

Sarmiento

planta baja

23]
24]
Italia

Dorrego

Supermercado «La Gallega» sucursal Dorrego

25]
planta baja

Supermercado «La Gallega» sucursal Villa Gobernador Gálvez

26]
Una esquina. Avenida tradicional y relevante, de Tres ámbitos. El del ingreso y circulaciones; abierto, con
alta densidad residencial y comercial. Calle de acometida gran continuidad visual con la calle, y los otros espacios
al centro de la ciudad, de alto caudal de tránsito. Frente interiores. El del mercado, cerrado, concentrado en si
urbano con perfil heterogéneo, entre edificios de vivienda mismo, con importante caudal de luz natural pero casi sin
de 10 pisos, y edificios comerciales de planta baja. visuales al exterior. El del restaurante, desmaterializado,
Un tema. Arquitectura comercial, para un emprendimiento como una bandeja que flota en un espacio mayor, con
trascendente de una reconocida empresa de la ciudad, grandes visuales a los demás espacios y al exterior.
Supermercados «La Gallega», en franca expansión. Dos estructuras. El hormigón premoldeado, sólido y
Un proyecto. Para dar respuesta a las necesidades de macizo, dando sustento desde la fundación hasta los
comercialización, crecimiento e impacto comercial del diferentes niveles de piso. El metal, frágil y liviano, como
cliente. Para resolver un lugar de la ciudad atendiendo a cubierta con distintos niveles y características.
las singulares condiciones del mismo. Dos recubrimientos. Afuera el aluminio compuesto,
Dos cajas. Una que aloja todas las actividades propias del aportando al diseño de las formas con su pureza, y
supermercado y el restaurante. Otra que contiene el acusando su condición modular. Adentro la tabiquería de
ingreso y el desenvolvimiento de los medios de tableros de yeso, resolviendo una superficie continua.
circulación que relacionan los diferentes niveles. Un símbolo. De la empresa en la ciudad. Asumiendo la
Dos escalas. La del edificio, que se relaciona con la altura capacidad de identificación de la arquitectura
media de las construcciones de carácter comercial sobre institucional. Potenciando la compleja relación entre el
ambas arterias, y la de la torre que resuelve la relación emprendimiento privado y el espacio público en la
con la altura de la propiedad horizontal, materializándola búsqueda de un crecimiento complementario y
con los linderos. equilibrado.
Una textura. Lisa, satinada, reflejante, alternando los dos Una reflexión. Que en los últimos años en el país, los
materiales que conforman la piel como parte de una edificios comerciales han sido y son uno de los temas más
misma superficie a veces opaca, a veces transparente. construidos, y paradójicamente uno de los menos
Cuatro colores. El blanco, a modo de continente. Los investigados proyectualmente. Los edificios comerciales
colores institucionales alternándose puntualmente, para han derivado predominantemente por el camino del
conseguir una imagen y una atmósfera limpia, luminosa, diseño globalizado, con pertenencia a diferentes
fresca, alegre. Algunos grises, solo para resaltar formas y contextos, con la sola identidad de la repetición de
proporciones y poner en valor a los cuatro colores. formas emblemáticas propias del tema. Los
supermercados, han sido concebidos habitualmente como
un lay-out u organigrama eficiente y posteriormente
elevados y ornamentados con rasgos repetitivos y escasa
diferenciación en la identidad de las empresas.
Finalmente, que esta obra se propone sumarse al camino
de un necesario giro en estas tendencias, que permitan
pensar a estos edificios como «un tema más de la
arquitectura», que no debe estar al margen de las
permanencias que presentan el desarrollo teórico sobre la
disciplina y la ciudad.

3 5

27]
4
5
Hotel Holiday-Inn
Proyecto y dirección
Arquitectos José María D’Angelo, Fernando Boix.
Comitencia Organización Panamericana SA
año 1997/2000
Dorrego 450, Rosario

1 5 10
28] FACHADA
29]
30]
EJE MEDIANERO

COCHERA ni
COCHERA ni
EJE MEDIANERO
4 5

1 5 10

CORTE

31]
1 1

1 5 10 1 10

PLANTA GIMNASIO Y SAUNA PISO 18 PLANT

1 1

3 2

1 5 10
1 10
PLANTA SUITES PISO 17 PLANTA PISOS 8 A 10

1 1

1 5 10 1

PLANTA PISOS 14 A 16 PLANTA 1 A 7

VACIO SOBRE INGRESO

TERRAZA

PILETA

CONFITERIA

1 5 10
PLANTA CONFITERIA

16 16

1 HABITACION
2 ESTAR
13 10 3 SUITE
4 SAUNA
5 GIMNASIO
6 COCINA
7 CONFITERIA
8 TERRAZA
9 PISCINA
15 14
11 LOBBY
11 12 ADMINISTRACION

14 COCHERA nivel A
15 COCHERA nivel B
16 SALA DE MAQUINAS
17 SALON
18 SALON DE NEGOCIOS
19 SALON
20 HALL

1 5 10
PLANTA BAJA / LOBBY
El edificio del Holiday-Inn cuenta con

4
5 veinte niveles en donde se distribuyen las habitaciones y las
funciones al servicio del pasajero, en una superficie de
aproximadamente diez mil metros cuadrados. En el subsuelo
se encuentran las actividades del mundo de los negocios y
un estacionamiento subterráneo de siete planchas. La
propuesta arquitectónica, la de un edificio con complejidad
tan particular, fue equipada con todos los adelantos de la
última tecnología, algunos de ellos denominados
inteligentes.
La presencia urbana es muy fuerte. Este edificio-estructura,
sin mayores adjetivaciones, sobrio, despojado, se percibe
desde distintos puntos de la geografía urbana de Rosario.
La expresión vertical es la dominante, sin concesiones.
La piel de vidrio enfatiza este concepto; en ella no sólo se
refleja el paisaje urbano sino que también permite que a
través de ella la ciudad está siempre presente.
Desde los altos, se percibe la presencia del río Paraná
y el avance de las obras del puente Rosario-Victoria.
Este último hecho hará de nuestra ciudad un lugar
emblemático, de paso, dedicado a los hombres de empresa
que son el principal cliente de este emprendimiento.
En los internos se encuentra un jardín seco en altura, con
piscina y lugares de estar, en un centro de manzana
inundado de sol y de silencio, tan difícil de conseguir en
plena área central de Rosario.
De fácil llegada, ubicado en el borde norte del centro
histórico y comercial, a pasos del Paseo del Siglo y la sede
del Gobierno provincial, el hotel hace de su ubicación un
privilegio, pero sin la típica agresividad ambiental y sonora
presente en las grandes ciudades.

1 5

CORTE

33]
5 5
CEMA
Centro de Especialidades Médicas
Ambulatorias
Superficie 17.500 m2
año 1996/2000
San Luis entre Balcarce y Moreno, Rosario

Equipo de proyecto de la Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario,


Dirección General del Plan Director y Departamento de Proyectos Urbano-Arquitectónicos
Arquitectos Augusto Pantarotto, Gerardo Caballero, Sabrina Cáceres, Sebastián
Rodríguez, Ariel Scaglione, Raul Utges
Asesores técnicos Ing. Marcelo Arca, Aire Acondicionado
Ing. Fermin Peña, Ing. Mario De Luca, Instalación eléctrica

MORENO

ANCLAJE

ANCLAJE ANCLAJE

BALCA RCE

34]
35]
36]
5 5

37]
38]
El proyecto del Centro de Especialidades
Médicas Ambulatorias (CEMA) utiliza una
estructura existente de hormigón armado, y la
adapta a las nuevas exigencias de uso.
El edificio se inscribe dentro del Programa de
Salud de la Municipalidad de Rosario e incorpora
6 5 4 3 2 1
un servicio de diagnóstico por imágenes,
laboratorios, cirugía ambulatoria, consultorios de
diferentes especialidades y oficinas para la
Secretaría de Salud Pública.
Con un mínimo de demoliciones, se han
aprovechado todas las posibilidades espaciales que
la estructura antigua ofrecía. Los nuevos
requerimientos programáticos llevaron a la
construcción de otro núcleo de ascensores
enfrentado al anterior, posibilitando así que las
áreas de espera y de circulación se desarrollen
sobre la fachada norte, beneficiándose con la
1 2 3 4 5 6
orientación y las visuales a la plaza.
El edificio se muestra con una piel de vidrio y
aluminio sobre la plaza, y un cerramiento de
mampostería enrazada en el resto de las fachadas.
Los núcleos de circulación vertical se conforman
en hormigón armado y desempeñan un papel
significativo en la composición arquitectónica.
En el interior, el uso de tabiquería liviana ofrece
flexibilidad a la planta, y son los núcleos sanitarios
los únicos construidos en mampostería.
El diseño del espacio público exterior, a través de
6 2
nuevas áreas verdes, de esparcimiento y de
circulación, ponen en relación a dicho edificio con
los otros existentes, logrando así un lugar en
común, con un tema en común, en tiempos
distintos.

7 8 9 10 11
MAMP OSTERIA DE 1 5cm
LAD COMUNES C /REVOQU
LAD.
GRUESO Y FINO
/REVOQUES
MAMP OSTERIA DE 1 5cm DOBLE
DE LADRI LLOS COMUNES
C/REVOQUES GRUESO Y FINO

11 7
5 9 8
5
7

CO.VE. S120
CONDUCTO 20x120

11 10 9 8 7 7 8 9 10 11 7 8 9 10 11

39]
concurso escuela de ingeniería

Agradezco la posibilidad de escribir sobre estos proyectos, y sobre todo de hacerlo públicamente. Soy
Texto Gustavo Cardón

consciente de que la potencialidad de ofensa a los autores que encierra el encargo es desproporcionada
respecto a la importancia de mis comentarios. Sin embargo el concurso y los proyectos producidos, no
necesariamente mis comentarios, son importantes por la naturaleza del encargo y el valor que la institución a
albergar debiera tener y por lo que señalan respecto al futuro de un fragmento importante de ciudad (el CUR).
Las coincidencias y disidencias técnicas y culturales que ponen de manifiesto son eminentemente locales, y
obligan a intentar comentarlas para que sean útiles en ese ámbito. Contrariamente a lo que pudiera pensarse a
priori, esta necesidad de evitar toda tentación de teorizar más allá de las preocupaciones locales hizo de la
escritura de estos comentarios una tarea aún mas difícil. He tratado de mirarlos como si me hubiese tocado
hacer los proyectos, tomar las decisiones que los construyeron y en el camino pensar acerca de su sentido,
elegir su viabilidad, decidir como hacerlos avanzar.
Lo que sigue es un conjunto de apuntes acerca de cada proyecto y de las posibilidades de reflexión que me
despertaron. Está claro que su tema no es coincidente en la medida en que cada proyecto es sugerente en
distintos sentidos. A pesar de ello los comentarios enfocan la relación entre el enunciado programático y el
pasaje a un enunciado arquitectónico como un tema recurrente. La cuestión es particularmente importante en
mi opinión y un modo de percibir y diferenciar proyectos. He tomado este conjunto de proyectos como una
oportunidad para mejorar mi propia capacidad de diferenciación al respecto, espero que esta motivación egoísta
despierte algún interés.
Al final de mis comentarios subrayo una coincidencia que creo de sustantiva importancia entre los tres
proyectos premiados y que tiene seguramente influencia sobre cuestiones más concretas del medio local.
1er. Premio: El aspecto que más me ha llamado la atención de este proyecto es la
inducción del programa en una estructura espacial simple pero con particularidades
bien definidas. La complejidad distributiva ha sido obviada y resumida en una única
serie de espacios de distinta altura alternados y unidos mediante un espacio de
relación en el que coinciden los recorridos y el significado de resumir en un único
espacio las relaciones.
La alternancia de espacios altos con bajos y la consiguiente posibilidad de articular la
entrada de luz da como resultado una construcción que constituye tempranamente
un edificio, superando en elaboración a un esquema distributivo. Se ha eludido la
definición a priori de partes del proyecto, el esfuerzo por dimensionar e inventar una

1
estructura cuya variedad siga al pie de la letra los subtítulos del programa. El interés
por las virtudes de los espacios proyectados se despega así de su destino funcional.
La adaptación funcional aparece así a través de la subdivisión dentro de esta
estructura espacial. Es este un modo de avanzar en el proyecto que se parece al de la
reforma de una estructura que encontrásemos ya construida. En este caso esta se ha
montado sabiendo de su aptitud para resolver las necesidades cuantitativas y
cualitativas contenidas en el programa, pero que no hace reverencias a las
particularidades que este sugiere mas allá de cierta medida.
Allí donde la reiteración de espacios hace lugar a correcciones funcionales es donde
el proyecto se debilita. Me refiero al punto de articulación del conjunto de espacios
reiterados de talleres y aulas con el que corresponde al auditorio. El patio conseguido
por la falta de algunos de estos «pabellones» es en cambio una alteración tanto más
poderosa cuanto más obsesiva es la reiteración en el construido.
Desconozco si el autor confeccionó el proyecto siguiendo este pensamiento, lo que parece evidente es que el
proyecto no ha quedado satisfecho en la corrección del esquema, y que lo interesante de la forma y el
espacio no es resultado de una adjetivación de este esquema a través del accidente, la composición de
fachada y todo el «detallado» ulterior del proyecto. Si este proyecto resulta distinto en algún sentido respecto
a los otros premiados es en relación con esta estabilidad de la forma de los espacios interiores que en
algunos momentos se manifiesta en tensión con la forma de subdividirlos en habitaciones menores.

40]
1 2 3
2do. Premio: Este proyecto se encuentra en cambio construido aparentemente con otra técnica. En él el inicio es
el esquema traducido en partes constituidas de habitaciones y cuartos correctamente proporcionados y
manipulados hasta alcanzar tanto una correcta asociación funcional. Estas partes del programa se sintetizan en
cuerpos alargados que conforman un patio, para lo cual hizo falta ajustar los tamaños de los lados, verificar la
altura resultante para los cuerpos edificados, decidir disposiciones de las alturas respecto a las orientaciones y
los otros elementos en el sitio.
En este caso la idea de «composición» —aún cuando las partes compuestas provengan de la tradición
moderna— es más evidente como modo de construcción del proyecto. La segregación funcional siguiendo una
definición de volúmenes edificados es una técnica que lleva las posibilidades expresivas de un proyecto al
campo del ajuste proporcional de las partes y a las alteraciones en su inmediata naturalidad, algo que Alvaro
Siza ha manipulado en muchos de sus proyectos. El otro terreno, algo más resbaladizo, es el del tratamiento
«estilístico» de los tratamientos.
La mesura de este proyecto en ambos canales de expresión es la que resalta la
simplicidad del esquema del que se parte, haciendo evidentes las intenciones. Sin
embargo en mi opinión el modo de moverse dentro del edificio ofrecía la oportunidad
de obtener algún grado de libertad respecto a las reglas dictadas por el esquema,

2
aunque sea para poner más énfasis en los espacios que relacionan que aquellos
relacionados.
El montaje de una estructura simple a través de una articulación de partes adquiere,
en mi opinión, un valor poético cuando la elementariedad se acentúa en la
construcción de la forma y en la precisión en el modo de aproximarnos y colocarnos
frente a su supuesta «naturalidad atemporal», a montar la escena para su apreciación
con los sentidos (cabe recordar nuevamente a Siza). De lo contrario tiendo a creer
que las razones de tal elementariedad se debilitan y dejan el esqueleto del montaje
tan a la vista que nuestra percepción del artefacto se empobrece. En este proyecto
justamente las maquetas nos muestran con más precisión esa posibilidad de
transmitirnos serenidad de la forma elemental del proyecto. Una aproximación a las
plantas y las elevaciones nos dejan algo más dubitativos...
3er. Premio: Aún sin conocer el programa en detalle este proyecto es casi una
descripción del mismo. Se ha dividido al edificado en dos partes al igual que en el

3
resto de las propuestas, sólo que en este caso la división implica una separación total
en dos cuerpos edificados. El edificio de aulas, oficinas, etc. se ha ordenado con una
rectitud tipológica inmediata en un cuerpo de doble crujía, a su vez seccionado por el
Hall de varias alturas que resume las opciones distributivas planteadas por las
principales «funciones» del edificio: a un lado las aulas y talleres, al otro la
administración y las autoridades.
Me detendré en la dificultad que nos plantea la fórmula que resuelve al auditorio en
dos partes. Esta que pretende ser elemental, se debilita cuando los sanitarios se
hacen rebeldes a la reducción del programa a las dos grandes unidades espaciales
sálas y foyer, transformándose en un volumen adosado que dificilmente pueda
escapar a su carácter de incómoda dependencia respecto al cuerpo mayor.
Esta dificultad nos pone por delante un obstáculo compositivo muy frecuente en el
montaje «moderno» de soluciones tipológicas que habián sido más estables en la arquitectura academica. El
uso de una version simplificada del teatro de siglos pasados plantea en los modos de componer y construir
modernos el problema de cómo ocultar aquello que en los edificios académicos se ubicaba en diminutos
espacios de servicio que daban la forma exterior precisa del edificio. Cuando los elementos portantes son
discretos, las formas de los espacios interiores tan rotundas y faltas de intersticios, la forma interior se
transmite inmediatamente al exterior.
Las soluciones a estos problemas están a la vista en los primeros proyectos modernos, es en mi opinión la

41]
1 2 3

resolución de estas dificultades de un modo paradigmático lo que los hace precisamente «magistrales». La
absorción de estas partes del programa en partes ocultas de la planta, a veces ubicadas en el centro cuando
en una visión lógica del programa son periféricos está presente en el caso de Mies. La segregación en partes
discretas adheridas pero expresivamente complementarias son otra solución. Se trata del momento en que el
moderno escapa y hace evidente todo lo que su primer aparato propagándístico oculta, la imposibilidad de la
inmediatez funcional como mero agregado de unidades espaciales dimensional y distributivamente correctas
en correspondencia con una interpretación esquemática de las funciones (usos).
Mención: En este caso la articulación en dos volúmenes obedece a otra
interpretación de su relación con el conjunto del CUR. Su posición
definitiva en el conjunto es poco importante, dado que la simetría axial

m
que sostiene el proyecto lo hace completamente autónomo respecto al
resto del conjunto, especialmente cuando es dificil pensar en una
axialidad pre-existente en el sitio donde debe ubicarse el edificio, o una
vastedad de vistas donde esta autonomía del edificio pueda percibirse
desde la distancia.
De alguna manera el edificio tiene una resonancia del fragmento de la
super-estructura que se había proyectado para el CUR que hoy ocupan la
facultad de Arquitectura y la de Ciencia Política, el uso de un primer piso
como plano noble y el destino casi exclusivamente infraestructural a que
el plano de suelo queda relegado hace pensar en edificios como «naves»
flotantes en un paisaje que se observa y aprehende sólo estando a bordo
de ellas. En este caso la disposición y el pequeño tamaño de la misma
dejas muchas dudas acerca de las intenciones del proyecto.
El énfasis puesto en una cierta ingeniosidad de la estructura hace pensar que la elaboración del proyecto se
centró en significar a través de ello a la institución. La simplicidad constructiva de los demás proyectos
denuncia la gratuidad de esta complejidad estructural.
En este proyecto resuena el uso de una manifestación visual de la estructura con un sentido propagandístico,
manifestaciones de un programa de promoción de la ingeniería como vanguardia en la solución de problemas
de infraestructura o de producción que ha ido debilitándose en la medida en que la ingeniosidad se ha
trasladado al terreno de las soluciones ambientales, la producción de dispositivos microscópicos, la
bio-ingeniería, etc. haciendo del heroismo de los puentes, las torres, diques, etc. un lugar común. Las
construcciones civiles son dificilmente un terreno de vanguardia hoy si se quita de ellas la agenda de la
conservación de la energía, la eficiencia económica y ambiental de las operaciones infraestructurales, los
efectos económicos de la inversión, etc. todas ellas con poco impacto en la «visualidad» de las estructuras.
Si esto es así —y ciertamente es sólo una opinión posible acerca del presente— el sentido representativo de
este edificio respecto a una Facultad de Ingeniería es más una acusación de anacronismo que un instrumento
de manifestación de la «actualidad» de su orientación académica.
Coincidencias: En todos estos proyectos el auditorio y el resto del edificio dan
lugar a dos volúmenes separados. Esta división en dos «tipos» de edificios
sería una interesante proposición para producir un campus, sólo que la
elementalidad de las partes del proyecto —los edificios— lleva la necesidad

c
de complejidad y sensibilidad al terreno de las relaciones entre ellas, tanto en
el modo de disponerlos sobre el terreno, como en la necesidad de producir
con estos materiales simples condiciones espaciales significativas en los
exteriores. Relaciones que deben desarrollarse a través de su caracterización
paisajística concreta.
Cuando imagino esta posibilidad me parece más clara la necesidad de
sospechar de la ilustración edénica del paisaje natural como plano
benevolente en la absorción y articulación de lo que se edifica que emana de
los panfletos corbusieranos. La combinación entre esta arquitectura de los
edificios y una construcción paisajística precisa como la anglosajona me
resulta ciertamente más confiable y enaltecedora de los valores de
simplicidad del edificio en una estructura dispersa. Desgraciadamente las
virtudes y técnicas de ese modo de proyectar el conjunto nos son cuanto
menos distantes cuando no desconocidas.

42]
premios | mención | coincidencias

En los proyectos premiados aparece un rasgo común que, dado que no se presenta de igual manera en el
proyecto que obtuvo mención, seguramente es producto de una toma de partido de los proyectistas, antes
que un requerimiento de las bases. Los tres proyectos dan forma a un vacío que articula los accesos al
edificio de la Facultad y el Auditorio con el espacio definido por los pabellones que albergan al IMAE, y las
Facultades de Arquitectura y Ciencia Política.
Esta coincidencia en la manipulación de las masas edificadas de modo de crear una suerte de trayecto a
través de un vacío o una plaza de acceso me ha llevado a interrogarme:
Si se hubiese llamado a concurso para elaborar ideas para el ordenamiento del CUR, ¿se hubiese obrado en
la misma dirección que este consenso manifiesta?
La respuesta es en realidad una serie de especulaciones y preguntas que encuentro particularmente
estimulantes para debatir.
Esta coincidencia en el tratamiento de la relación entre vacío y construido y respecto a los aspectos
funcionales más básicos del proyecto del edificio en relación con el conjunto al que busca construir (dado
que no parece apropiado hablar de la preexistencia de un conjunto al cual agregarse) podría haber sido un
rasgo grueso casi codificado de proyecto. Es decir algo que puede establecerse como regla en un plan de
masas, como definición temática y morfológica en un «master plan», o un espacio específico en un proyecto
que se abocase a definir la forma de las áreas exteriores del conjunto (territorio que en el reparto de
exclusividades disciplinares gusta adjudicársele a los «paisajistas»).
Adivino que los resultados de tal concurso no necesariamente hubieran tenido tal grado de coincidencia en
sus resultados, especialmente porque el sentido común que el encargo de un programa particular suele
arrancarnos a nosotros arquitectos, no es tan frecuente en los supuestamente permisivos concursos de ideas
para conjuntos de gran escala. En otros términos, la relativa cohesión cultural que se observa en el
tratamiento de un conjunto edilicio particular no me parece tan frecuente a la hora de abordar el mismo
problema desde la perspectiva de la totalidad de un proyecto de escala urbana.

Se hace patente en el sitio mismo la falta de una estrategia para la manufactura del CUR aunque más no
sea a través de las operaciones que sostenidas en su magro presupuesto de mantenimiento tengan efectos
sobre un ordenamiento de sus condiciones espaciales.
La falta de respuesta a las siguientes preguntas, al menos a través de información que sea de dominio
público motiva mi anterior afirmación.
¿De qué manera se determinó que esa era la ubicación y el perímetro catastral apropiado para agregar una
escuela de ingeniería?
Aunque la solución propuesta sea inobjetable, la pregunta no tiene una respuesta conocida.
¿Qué coherencia tiene este interesante resultado arquitectónico con las casuales construcciones que han
«florecido» en el acceso al CUR?
Es difícil tener un juicio favorable respecto a tales construcciones y a los modos de gestionar su «aparición»
en el interior de una institución que declara perseguir la calidad (me refiero a la Universidad…)
¿Existe efectivamente una acción de gestión para mejorar las condiciones de urbanidad del borde Oeste del
CUR como para justificar en todos los proyectos una apertura a la calle Beruti?

A menudo quienes conducen instituciones públicas manifiestan —aunque no públicamente— que los
proyectos que resultan de concursos se ajustan menos a las realidades de gestión y presupuestarias de las
instituciones que deben construirlos, que aquellos elaborados pro arquitectos «de planta». Sería interesante
invertir la perspectiva de la pregunta: ¿son capaces las instituciones públicas de producir convocatorias
precisas, articuladas en el tiempo, participativas y transparentes? Más aún ¿están legítimamente interesadas
en hacerlo?
Me temo que la respuesta es en general negativa. En el caso de la Universidad llama la atención que
mientras el edificio para una facultad que se construía e inauguraba era precisamente el que no se concursó,
se haya concursado aquel para el que parece no haber fondos. O que mientras se posee un posible campus
universitario, se inviertan sumas importantes de dinero en montar una sede administrativa en otra
localización. Ninguna de estas alternativas es probablemente incorrecta, lo que resulta infantil es la escasa
coherencia de los esfuerzos.
En este contexto, los costos y ajustes a la realidad de los proyectos producto de concursos son realmente
poco relevantes. Ciertamente parafraseando a Churchill, los concursos son el peor sistema para elegir
proyectos, exceptuando todos los demás conocidos.

43]
Arquitecto Gerardo Caballero Colaboradores en concurso Arquitecto Mario Antonio Antelo, Arquitecta Maite
Fernández, Gerardo Bordi y Ramón Herrera Ingeniería Ingeniero José Ramón Orengo 1er. Premio
Fotografía maqueta Gustavo Fritegotto

44]
de Ingeniería Civil y Auditorio
Concurso Nuevo Edificio Escuela
El proyecto ganador del concurso para la nueva sede de la Escuela de Ingeniería Civil y el Auditorio de la Ciudad Universitaria se genera a
partir de una serie de decisiones tendientes a vincular la escuela con los edificios existentes en la Ciudad Universitaria para que ésta se
sume al conjunto de una manera natural.
Las generosas dimensiones del terreno asignado propician la idea de un edificio en solo dos niveles, facilitando su organización y logrando
un ahorro en circulaciones que al unificarse permiten dimensiones mayores para convertirse así en ámbitos de encuentro dentro de la
Escuela.
La presencia en el lugar de siete magníficos ejemplares de palos borrachos alentó la idea de organizar el edificio en torno a ellos, creando
un patio exterior cerrado que servirá de recreación tanto para profesores como alumnos.
Los departamentos de investigación adoptan una sección tipo shed para proveerlos de luz natural del Sur y crear unos espacios de aspecto
fabril donde poder «generar» conocimiento.
Las aulas se orientan al este con visuales al río y protegidas con parasoles de piezas de hormigón prefabricado.
La planta en «L» se completa con la presencia del edificio del IMAE, con el cual conforma una plaza exterior, la posición del auditorio sirve
para delimitar dicho espacio al tiempo que por ser el Auditorio de la Ciudad Universitaria se ubica sobre el eje principal del campus. Hacia
la calle Riobamba, el edificio reduce su altura para adaptarse a la escala del barrio.
El edificio esta concebido con una estructura de hormigón y terminaciones de hormigón visto en su exterior, los lucernarios son de U. Glass.

Universidad Nacional de Rosario

45]
46]
35.25
INGRESO EXISTENTE
6.75

47]
De la crítica del jurado
«...Implantación en el terreno y partido general: el proyecto ganador divide el terreno en dos franjas, una paralela a la espina Norte-Sur
de Centro Universitario Rosario, que se destina a espacios abiertos y dividido entre una plaza cívica haciendo cruz con la Plaza Canadá,
y un espacio más recoleto, expansión del bar en el extremo Sur. El cuerpo del Auditorio oficia de articulador entre estos dos espacios.
En la banda Oeste se desarrolla la totalidad de los locales de la Escuela y del Auditorio en planta baja, con excepción de las aulas de
grado que se ubicaron en la planta alta.
En el ángulo interior de la «L» formada entre la Escuela y el Auditorio, se producen los accesos a los halls de ambos edificios, los que a
su vez están comunicados entre sí. Con eso se pueden usar los multimedia y el bar directamente por la Escuela.
A su vez, el cuerpo de esta última se compone de dos bandas, una que contiene todas las aulas de clase, las de posgrado en planta
baja y las de grado en la alta.
Un segundo cuerpo de una planta baja profunda con luz cenital, contiene todos los departamentos e institutos, tratados como talleres,
con buenas posibilidades de flexibilidad. Esta banda se interrumpe para crear un jardín que contiene a los siete magníficos palos
borrachos, el que a su vez alegra el espacio de doble altura que conecta y sirve de expansión a las aulas de clase.
La ubicación de la Escuela permite su conexión con el edificio del IMAE.

Adecuación funcional: el desarrollo de casi todo el programa en planta baja, incluyendo el auditorio y las salas multimedia asegura un
funcionamiento muy simple y eficaz, con una óptima relación entre posgrado, departamentos, instituto y gobierno.
Cumplimiento del programa: el proyecto cumple con todos los requisitos del programa, con locales de buena proporción, calidad
ambiental y óptima orientación.
Criterios económicos: la tipología adoptada, los materiales propuestos y la mesura estructural aseguran que los estimables valores
señalados se lograrán con ponderable economía de medios...»

48]
49]
Arquitecto Diego Arraigada, Nicolás Campodónico, Arquitecto Mario Corea, Sebastián Guerrico, Ingeniero Gonzalo Garibay 2do. Premio
Colaboradores Arquitecta Alejandra Vazquez, Maria Soledad Amatrain, Natalia Cordaro y Florencia Bonaudo

50]
Facultad de Arquitectura

Fotomontaje
Fo t o m o n t a j Ciudad
e Ci u d aUnivercitaria
d Un i v e r c i t a r i a ( CUR
CUR )) Vista Este escala 1:200

Estacionamiento

Planta General de ubicación escala 1:200


IMAE

Plaza cívica

Claustro Academico

Auditorio del CUR

Facultad de Ingeniería

Ingreso al CUR
( Peatonal y Vehicular ) Atrio comun

Estacionamiento

Vista Norte escala 1:200

El Lugar es siempre el origen del proyecto. Este lugar es un área que si bien tiene un uso específico nunca fue proyectada con tal fin,
generándose conflictos de relación entre los edificios existentes y con el borde urbano. No obstante es posible reconocer una secuencia de
espacios abiertos que se han constituido como una espina articuladora en este sector del Centro Universitario Rosario (CUR).
El lugar, su geometría y topografía, la ortogonalidad y la planitud como elementos definitorios del proyecto.

El tema de proyectar una casa de estudio nos permite reflexionar sobre cuáles deberán ser las características de los espacios destinados; y
cómo será la producción de conocimientos, en el marco del desafío que encara la educación para el nuevo siglo.
Es así como se propone un edificio con una estructura clara y flexible a la vez, donde toda el área de formación se halla ubicada en la planta
baja, en una fluida relación horizontal y reunido entorno de un espacio común de un real uso cotidiano.

El Concepto. Un edificio con variedad programática como este, y de una extensión considerable, no puede ser reducido solo a una idea, sino
que se plantea a distintos niveles:
Nivel Metafórico. La idea del claustro como «El Lugar» de producción de conocimientos, un «claustro abierto» al que se accede libremente
sin perder la visión del cielo.
Nivel Programático. El programa queda claramente expresado en el desarrollo del proyecto, así toda el área de formación más la
institucional quedan en la planta baja y entorno al patio, mientras que el área de investigación queda en los niveles altos sobre el
decanato. El auditorio queda en relación con el cuerpo principal de ingeniería, pero sobre la plaza pública.
Nivel Urbano. El establecimiento de la relación entre espacio público, umbral, espacio privado, tanto a nivel de la ciudad, como en la
organización del propio edificio.
Nivel de Luz. La búsqueda de la luz natural y las visuales, fundamentalmente las del río, se consigue para todos los espacios de la Facultad
de Ingeniería.
La Conclusión. La aceptación de la complejidad y riqueza de un programa, interpretado con conceptos claros y materializado con austeridad
de recursos, dan por resultado no sólo un edificio que cumple con los requerimientos programáticos, sino que además propone recorridos,
espacios resguardados y riqueza de relaciones a quien los viva.

51]
52]
53]
Arquitecto Pablo Barese Arquitecto Norberto Massa Ingeniero Jorge Raúl Tosticarelli 3er. Premio
Colaboradores Leonardo Dalla Pace, Pedro Iacomuzzi, Marcelo Ottaviano, José Rebasedas, Eduardo Mauceri
Ingeniero Roberto Brussa

54]
De la estrategia general
La ocasión del concurso de proyectos de Auditorio y Escuela de Ingeniería permite —por sobre su necesidad— hacer evidente un futuro en
términos generales (relación entre el área y la ciudad) como así también valorar y clarificar con la ubicación de los nuevos edificios las
relaciones internas entre los mismos y los existentes, y así avanzar en la especificación de sectores asignados a las distintas facultades
que componen el Centro Universitario Rosario (CUR).
De este modo, y en el aspecto general, la calle Beruti reúne los dos ingresos principales, y se agrega uno nuevo por calle Ocampo hacia el
Sur del predio. En este aspecto de accesibilidad se valoró la equivalencia funcional entre ambos accesos, a modo de asegurar la eficiencia
de los mismos.
Internamente se propone cualificar la calle central del CUR en sentido Norte-Sur con la proyección de una nueva plaza, que integrada
linealmente con la existente entre las facultades de Arquitectura y Ciencia Política, y una futura deducida del crecimiento edilicio indicado
en las bases, permite ordenar y aclarar las relaciones entre edificios y espacios abiertos de acceso a los mismos.
Así, esta calle principal interna Norte-Sur reúne a las distintas facultades que integran el predio universitario estructurando de modo
general a todo el conjunto. La nueva plaza propuesta tiene el doble sentido de caracterizar la calle principal en su relación con los otros
espacios abiertos y es el marco donde se ubican los nuevos edificios vinculando —a modo de cierre espacial— el IMAE, el cuerpo de la
facultad de Arquitectura, la nueva Escuela de Ingeniería y el Auditorio del CUR. La Escuela de Ingeniería actúa de cierre a este nuevo
espacio, permitiendo contener al Auditorio.

55]
1

2
3

PLANTA BAJA

SECCION 1-1

SECCION 2-2.

SECCION 3-3 VISTA SUR AUDITORIO

56]
VISTA ESTE

VISTA ESTE

VISTA OESTE

VISTA SUR

VISTA NORTE SECTOR ESCUELA

57]
Arquitecto Guillermo Banchini Arquitecto Marcelo Spina Ingeniero Carlos Angel Geremia Ingeniero Jorge Fernández Milani
Colaboradores Maximiliano Spina, Matías Musacchio, Georgina Huljich Mención

58]
Planta Baja Gráficos Planta Primer Nivel Despiece estratos Planta Segundo Nivel Diagramas estructurales
Estructura general
Síntesis organización

Sistemas diferenciales

Superficie topología estructural

Cerramiento estructural auditorio


Logística contextual. Nuestra propuesta a nivel urbano intenta activar
el contexto urbano adyacente a través de la intensificación de los
movimientos y actividades relacionadas al uso del CUR. Reconociendo
los límites y diferencias que naturalmente existen entre el CUR y la
ciudad, nuestra propuesta intenta engendrar continuidad física y visual
entre ambos sistemas. El proyecto propone el nuevo ingreso por la
extensión de calle Viamonte hacia el CUR, logrando de esta manera una
relación urbana y vial mucho mas directa y eficiente a la vez entre los
edificios de la universidad ubicados en este sector (Facultad de
Arquitectura, Ciencias Políticas, IMAE y la nueva Escuela de Ingeniería)
con el contexto inmediato. Este movimiento tendería a equilibrar la
condición de centralidad extrema que hoy posee la entrada por calle
Riobamba.
El ingreso planteado por la extensión de calle Beruti se deja como
opcional, pudiendo utilizarse este como ingreso y Viamonte como salida
del CUR.
Nuestra propuesta rescata el problema circulatorio interno del CUR como
oportunidad e introduce una relación dinámica entre el automóvil y el
nuevo edificio, provocando un único momento de «cruce» entre
circulaciones peatonales y vehiculares en un lugar excepcional dentro
del CUR como el nuevo auditorio.
Infraestructura. La propuesta intenta involucrar a el Auditorio y la
Escuela de Ingeniería conjuntamente con el nuevo ingreso al CUR en una
serie de acontecimientos «infraestructurales». Nuestro interés fue
generar un edificio que posibilitara nuevas relaciones físicas con el
medio y con los usuarios, donde el potencial no residiera tanto en su
inevitable calidad como objeto, sino en su dinámica accesibilidad y
extensión desde y hacia la mayor cantidad de puntos adyacentes
posibles, logrando una multiplicidad de recorridos y situaciones
espaciales (arriba, abajo, dentro, fuera, cubierto, descubierto, cerrado,
abierto, transparente, opaco, macizo, esbelto, perpendicular, diagonal,
regular, singular, cartesiano, topológico, metálico, de hormigón armado,
etc.)
El Auditorio se posiciona montado sobre la extensión de calle Viamonte
conectando por medio de dos brazos con escaleras peatonales flujos
provenientes de las facultades, IMAE y del ingreso al CUR. El auditorio
posee flexibilidad suficiente para distintos tipos de usos y dualidad en
funcionamiento, evidenciada en las bases del concurso (podría
funcionar independiente o conjuntamente con la Escuela de Ingeniería).
Las trayectorias se invierten según el uso; entrada por el hall de
exposiciones hacia foyer y sala cuando se usa independiente, ingreso por
el foyer y cafetería cuando se usa mas informalmente dentro de la
Escuela de Ingeniería (el mismo recorrido sirve para las salas de
multimedia). Escaleras perimetrales vidriadas conectan el hall con el
foyer y la cafetería.

59]
La transformación urbanística de la ciudad:

Integrantes de la Comisión de Urbanismo del Colegio de Arquitectos Distrito 2:


Arquitectos Eduardo Basteri, Mirta Benedetto, Rubén del Canto, Guillermina Chachques,
Isabel Martínez de San Vicente, Gustavo Parets, Cristina Pradolini, Juan Carlos Viotti.

60]
¿Plan Estratégico o estrategia para la acción?
En los desafíos contemporáneos de la gestión urbanística en la región de Rosario

En octubre de 1997 se editó el primer número de la revista [041], cuyo contenido incluía una sección dedicada a políticas urbanas. Desde su espacio
Opinión Guillermina Chachques

editorial anticipamos que se acrecentarían en Rosario tiempos políticos e intelectuales referidos a la gestión urbanística, con una propuesta de
concertación y crecimiento para la ciudad. Con referencia a algunos enunciados formulados en aquel momento e incorporando el proceso de
transformaciones registrados en los últimos años, vale la pena realizar algunas reflexiones. Mantenemos la vigencia en el quehacer de los arquitectos
de conocer y debatir sobre los temas «macro» de la ciudad, preocupándonos por la obra de arquitectura así como por las propuestas de la gran escala
y el modelo de territorio. Nos convoca la propuesta de analizar los hechos físicos de la ciudad, la posibilidad de avizorar tendencias, perfilar
actuaciones en la escala urbana, contribuyendo de esta forma a la búsqueda de una identidad, que atienda a definir el proyecto de ciudad deseable,
comprendiendo sus particularidades, cuales son los proyectos generadores de cambios para la sociedad y los temas prioritarios aún por resolver. En la
actualidad nos encontramos en un escenario en el que por una parte comienza a reflejarse en la región el impacto del desarrollo de grandes obras de
infraestructura económico territorial, entre ellas: el puente Rosario-Victoria, la autopista Rosario-Córdoba, el desarrollo de nuevas terminales portuarias
agroexportadoras en la región norte, el impulso dado a la hidrovía y los proyectos aún pendientes del puerto y aeropuerto de Rosario.
Por otro lado debemos destacar que en los últimos años en la ciudad se ha llevado a cabo un desarrollo continuo en algunos planes de transformación
urbana: la recuperación de importantes extensiones de tierras ferroviarias o portuarias para usos urbanos, el desarrollo del proyecto ciudad-río con
sucesivas intervenciones en el frente costero, la transformación y mejoramiento del sistema vial, la propuesta municipal de descentralización con la
incorporación de nuevos centros de distrito y la puesta en escena de algunos proyectos especiales como los parques recreativos o temáticos. Atendiendo
a que en la actualidad las políticas de integración regional plantean un nuevo marco en los procesos de reestructuración política, institucional,
económica y social, con profundo impacto en los reordenamientos territoriales, es imprescindible avanzar en una concepción de desarrollo en el marco
de la región. Ubicar a Rosario en esa perspectiva significa plantear profundos cambios en los mecanismos de gestión y planificación existentes, es decir
se deberá proyectar para una ciudad donde sus límites se extienden por sobre los geográficos integrándose en diversos aspectos al resto de la región.
Pensar en escala metropolitana supone la incorporación permanente de este dato en el desarrollo de planes, previendo los modos de generar una
corriente favorable en pos de estos objetivos. Asumir el desafío de liderar este proceso en la región deberá generar nuevas formas de concertación,
ágiles y modernas, aquellas que priorizando el proyecto común también resulten atractivas para la iniciativa privada. Es importante también generar
cambios e innovaciones en las características de oferta y el perfil de los proyectos sectoriales que la ciudad puede ofrecer, con adecuadas políticas de
promoción. En este marco y como parte de los mecanismos de gestión que hacen al desarrollo de un proyecto político global deberán entenderse
también los proyectos urbanos, claros y precisos, capaces de producir cambios, generadores de nuevos modelos en las relaciones humanas, ya sean
sociales, culturales o económicas.
Desde la sección de urbanismo, es nuestro interés propiciar este diálogo, comprender el fenómeno de interacción regional, ubicándonos
disciplinariamente y desde allí aportar herramientas que ayuden a potenciar los cambios que nos involucran.

61]
La transformación urbanística de la ciudad: ¿Plan Estratégico o estrategia para la acción?
¿De qué hablamos hoy cuando hablamos del Plan para una ciudad como la nuestra?
1

Plantearse esta pregunta puede resultar por una parte un tanto obvio y por lo tanto innecesario, y por otra poco
Texto Isabel Martínez de San Vicente

oportuno en un momento de dramática recesión, puesto que la idea misma de Plan está asociada a una dinámica de
recursos públicos y privados que en nuestro ámbito urbano se encuentra francamente detenida.
De hecho, su respuesta alienta a dos posiciones extremas, pero no por ello menos frecuentes en el actual debate sobre
la ciudad. Una presenta un diagnóstico de acentuado pesimismo, que si bien tiene ribetes de «lúcido realismo»
visualizado sólo desde el hoy, puede resultar falso al intentar extrapolar necesariamente de esa visión un panorama
carente de expectativas de futuro. La otra, construye sobre el camino de los «sueños» una visión de ciudad sin
conflictos, en armonía de intereses y participación colectiva del conjunto de sus ciudadanos, que por exceso de
optimismo resulta una utopía inalcanzable, generando con ella una nueva frustración. El artificio que subyace en esta
segunda visión ha provocado que palabras como desafíos, estrategias, desarrollo local, relación público-privado, se
hayan convertido en términos que se han alojado hoy en el discurso de comunicadores sociales, de operadores políticos
2
y de técnicos, mas como piezas de un dispositivo para la disuasión que para la construcción de alternativas ciertas de
transformación de las actuales condiciones de vida para la región. Por exceso de uso, corren el riesgo de perder su
capacidad de comunicar ideas nuevas y de convertirse en eslógans vacíos de significado, en expectativas imprecisas
que mágicamente van a cambiar desde afuera el panorama de nuestro devenir como ciudad.
Resulta necesario, en cambio, desenredar todo el potencial propositivo que contiene la noción de Plan sin convertirla en
una fórmula «cristalizada», y al mismo tiempo confrontarla con un sólido bagaje de reflexiones sobre la ciudad que han
ido sentando las bases interpretativas de nuestro propio fenómeno urbano, identificando las diferencias y las similitudes
con otras ciudades del país, y han permitido construir las bases teóricas y metodológicas para las intervenciones
presentes. Hace falta incorporar la idea de que la ausencia del poder político ha generado en el área metropolitana de
Rosario la propia fortaleza, ya que ella ha provocado la maduración de gobiernos municipales que, en sus distintas
escalas, tienen una presencia y una representatividad externa importante. Hace falta no perder de vista, tampoco, que
en el plano técnico-cultural, la ciudad y su región cuentan con una larga experiencia de reflexión sobre el valor y el
alcance de nuestros instrumentos de planificación, y por ello debe sustraerse a la tentación de recurrir acríticamente a
modelos provenientes de otras realidades económicas y urbanas, soslayando el abordaje de un auténtico conocimiento
de la realidad que nos circunda.
Tener presente la primer condición nos debería facilitar un acercamiento a las nuevas exigencias que nos plantea la
inserción de las ciudades en la economía mundial, porque la globalización de la economía no sólo se manifiesta –en lo
que compete al desarrollo local—, en el debilitamiento de los niveles supralocales del estado, en la necesidad de un
fortalecimiento transnacionalizado de las relaciones económicas y sociales entre ciudades y en la desaparición de las
modalidades tradicionales de infraestructuración y prestación de servicios en el territorio, sino también en una fuerte
necesidad de adecuación del cuerpo social. En este sentido, numerosos estudios han destacado el papel decisivo de las
comunidades locales, no solamente en la aceptación de los cambios, sino también y muy frecuentemente en el rechazo,
en el freno a la innovación. Poder navegar en el difícil equilibrio entre tradición e innovación resulta ser hoy tal vez el
único camino para encontrar un protagonismo cuya pérdida puede resultar irrecuperable si no se toma conciencia a
tiempo, y en este desafío es indudable el rol de las administraciones locales.
Reconocer y valorar la segunda cuestión, es decir la presencia de un bagaje y un entrenamiento particularmente rico en
lo que se refiere al desarrollo de los instrumentos, no implica negar la indudable necesidad de repensar el Plan a la luz
de las nuevas demandas. Muy por el contrario, las claves para repensar el aparato teórico y técnico del planeamiento
tradicional radican hoy, en primer lugar, en reivindicar la necesidad de obtener resultados verificables, porque la
planificación, —entendida como el uso de herramientas técnico-políticas para apoyar el desarrollo de una comunidad—,
resulta efectiva sólo si adecúa su marco teórico y sus métodos a las presiones que ejercen sobre el ámbito local la
necesidad de cambio y la necesidad de conservar una identidad con su propia historia: no basta la solidez de un marco
teórico y de los procedimientos aplicados si la planificación no produce resultados. En segundo lugar, se apoyan en la
aceptación de la crisis definitiva de los macro modelos verticales de la planificación que descansaban en la supuesta
coherencia entre la planificación nacional, la planificación regional y la planificación local, en tanto que ya no se
remiten a ningún macro modelo de organización social y política. Resulta evidente que esa coherencia hoy no es
posible, a partir de una modificación radical de las condiciones estructurales en las cuales se producen las demandas
de transformación. Estos modelos, a su vez, no se adecuan al dinamismo del sistema de alianzas entre los actores
sociales y políticos, al dinamismo de las demandas de localización de las inversiones económicas en un determinado
territorio, y a la aceleración de los tiempos en las cuales esas demandas se modifican.
Parafraseando a un conocido autor italiano3 cabe realizar nuevas preguntas ante estas constataciones: ¿Es
indispensable gobernar por planes? ¿Estamos hablando de algo que estamos seguros de que hace falta?

62]
Aunque parezca contradictorio con un contexto de cambio permanente, y con la consecuente dificultad de adecuación
de los instrumentos técnicos, hoy hay una demanda mucho más generalizada de instrumentos de planificación que
hace una década. Y esto sucede justamente para poder adecuar las estructuras físicas y las comunidades locales, en
tanto organizaciones complejas, a esta aceleración de cambios que difícilmente puedan asimilarse en tiempo rápido.
Se registra, en efecto, un cambio de expectativas acerca de la utilidad del planeamiento, sea en los administradores
locales, sea a partir de una toma conciencia colectiva acerca de la debilidad institucional de la intervención coyuntural
y fragmentaria. En particular, aparece como un instrumento que puede dar continuidad y legitimidad a las decisiones
públicas; como el instrumento que fortalece la relación público-privada y con el cual dar respuesta a lo que era un
compartimento estanco antes del período democrático: la opinión pública. La fuerza que ha adquirido la opinión
pública trae como consecuencia la necesidad de buscar consenso y el Plan comienza a ser en sus distintas escalas un
instrumento fundamental para organizar un debate, que necesariamente traerá una parte de disenso y una parte de
consenso.

¿Es indispensable gobenar por planes?


¿Estamos hablando de algo que estamos seguros que hace falta?

Puede responderse entonces que no es indispensable gobernar con planes, pero que existe hoy una demanda colectiva
de contar con estos instrumentos como garantía de legitimidad en la toma de decisiones. Como una manera de borrar la
arbitrariedad a la que está más expuesta la intervención coyuntural y fragmentaria. Aceptada esta necesidad del
planeamiento, y parafraseando nuevamente a Luiggi Mazza, gobernar con planes quiere decir gobernar con un sistema
de planes4 que ya no responden, sin embargo, a la estructura piramidal de hace unas décadas, pero que atienden a
diferentes aspectos del desarrollo local y regional. Respondida afirmativamente la pregunta, interesa analizar entonces
las diferencias y las posibilidades de una trilogía que nos acompaña desde hace un tiempo y sobre la cual se han ido
estableciendo algunas superposiciones que tornan confusas sus esferas y sus posibilidades de acción: el Plan
Estratégico, el Plan Director —que yo voy a llamar Plan Urbanístico—, el Plan Regulador.
El pensamiento estratégico aplicado a la planificación tiene varios orígenes. El empresarial, que si bien ha sido el más
difundido no es, a nuestro criterio, el que más ha aportado en relación con el tipo de organizaciones que hoy se están
dando en las ciudades. Resulta de más interés el desarrollo que ha tenido el planeamiento estratégico en el análisis
institucional, aplicado a instituciones muy cerradas como pueden ser las instituciones de la salud o la universidad:
empieza por primera vez a plantear la necesaria relación de una institución con el medio externo que es el que le da
sentido, el que explica su origen y su permanencia en el tiempo.

63]
Una definición muy precisa es la que da Gerard Arguin5 «La planificación estratégica podría definirse como un proceso
de gestión que permite visualizar de manera integrada el futuro de las decisiones institucionales que se derivan de la
filosofía de la institución. De su misión, de sus orientaciones, de sus metas, de sus objetivos, de sus programas». No
dice prever el futuro, que eran lo que querían los viejos planes reguladores. Dice construir, imaginar y visualizar el
futuro que se deriva del presente y de los objetivos presentes y de las metas que la institución se fija como tales. Y el
propósito de la planificación estratégica, dice el mismo Arguin, es el de concebir a la institución no como un hecho
cerrado y aislado, sino en relación estrecha con su medio ambiente. Instituciones y ciudades acostumbradas a recibir,
daban por sentado que mientras recibieran existían. Hoy la relación dinámica con el medio externo es la que explica la
permanencia de una institución en el tiempo o de una ciudad en el tiempo y en el territorio.

Lo que hemos dado en llamar planeamiento estratégico, en síntesis, no es otra cosa que un modo particular de afrontar
la formulación de un Plan que, reconociendo el debilitamiento de los niveles superiores del estado, otrora claramente
encargados del desarrollo económico y social de la comunidad en su conjunto y de la esfera local como parte de ese
conjunto, se hace cargo de planificar el desarrollo económico y social: un Plan de Desarrollo Económico y Social.

Existe, en cambio, una notoria falta de consenso entre distintos autores6 sobre la posibilidad de generar una
metodología de Planificación Estratégica7. Rovere adhiere la idea de que «resulta mas apropiado definir categorías,
instrumentos, conceptos para construir una metodología y que ésta debe desarrollarse en cada lugar concreto, en cada
circunstancia concreta, en cada correlación de fuerzas y por cada actor que se enfrenta con la necesidad de
planificar.»8 Señala, además, que «Si bien el pensamiento estratégico puede plasmarse en algunos instrumentos
concretos, no es cierto lo contrario, es decir que el uso de esos instrumentos nos permita asegurar que estamos
aplicando pensamiento estratégico. En otras palabras, es posible desnaturalizarlo introduciendo un uso normativo y
rígido de los instrumentos que se plantean»9.

64]
Se hace cada vez más necesario escapar del dogmatismo para descubrir
distintos modos de mirar una misma realidad urbano-metropolitana

Con respecto a los riesgos de un uso dogmático y excesivamente rígido de los instrumentos, resulta importante
puntualizar dos cuestiones esenciales. La primera es que los planes estratégicos de distintos lugares y de distintas
escalas de ciudad en nuestra región han ido adquiriendo una gran similitud, lo cual constituye una verdadera
contradicción: si realmente un Plan Estratégico se construye desde una perspectiva de profundo análisis de las
relaciones entre una particular comunidad local y un medio externo, no deberían ser todos iguales. Muy por el contrario,
deberían tener especificidades y objetivos propios y muy diversos entre sí. La segunda, es que la mayoría de los Planes
Estratégicos plantean una ciudad soñada: el hábito prolongado de depender sólo de recursos y decisiones externas
promueve que la comunidad se congregue para hacer una lista de demandas cuya plena satisfacción sólo puede
cumplirse en esa ciudad soñada tan lejana de la ciudad posible, que deja a menudo una profunda sensación de
frustración ante la ausencia de resultados.

El principal desafío es entonces el de lograr profundizar en el conocimiento de los problemas y posibilidades, y el de


compatibilizar las oportunidades con los recursos. Un Plan de Desarrollo Económico y Social concebido en forma
estratégica no puede ni debe soslayar hoy un atento y cuidadoso análisis de los recursos. Debe comprender un
escenario territorial que ofrece ciertos beneficios potenciales, pero ser consciente de los riesgos e intentar minimizarlos,
logrando un acuerdo ciudadano sobre como imaginar una nueva forma de desarrollar la ciudad.

Evidentemente la planificación estratégica requiere por una parte de una toma de conciencia de los problemas, que sólo
se produce en los momentos de ruptura, y por otra de una adecuación que es la que conlleva esfuerzos de modificación
de los sistemas de pensamiento de todos los actores involucrados. Requiere, a su vez, de la modificación de las
estructuras públicas, en las que hoy se percibe una gran voluntad y un gran esfuerzo de transformación: no es casual
que la mayoría de los municipios de ciudades intermedias están fortaleciendo sus secretarías de la producción y otros
aspectos del organigrama municipal que no existían o eran muy débiles. Y también requiere de una modificación de los
comportamientos de los actores privados, porque estos en general suelen ser muy eficientes, prácticos y concretos
cuando se trata de manejar sus propias actividades, pero no siempre actúan con la misma eficacia y pragmatismo
cuando se trata de vincularse con las estructuras públicas. En general esta idea de subsidiariedad del estado está
anclada aún en los actores privados, sobre todo cuando se debate la transformación de los ámbitos territoriales y de los
ámbitos donde se interrelaciona lo público con lo privado.

65]
El plan estratégico debe proponer e intentar llevar a cabo, en síntesis, una estrategia de desarrollo económico y social
propia de cada realidad urbana o microregional, que tiene consecuencias físicas que se reflejan en un plan urbanístico.
Esta es una visión que está instalada, pero que lo que ha quedado desfasado de esta conciencia es el debate sobre las
soluciones o sobre los procedimientos. Pasemos entonces brevemente al segundo tipo de plan, el plan urbanístico, que
hoy es llamado Plan Director. El Plan Director, en algunos desarrollos recientes, ha quedado anclado a ciertas
fijaciones, entre ellas a los ejes físico-espaciales como el origen y el destino de sus instrumentos y no como la expresión
que otros procesos adquieren sobre el territorio. Este anclaje ha limitado a la planificación a la solución de
problemáticas urbanísticas y de servicios públicos, que en el momento actual tampoco se adecuan a las condiciones
reales de prestación, ya que la privatización de las empresas y el concesionamiento de la prestación de los servicios y
las infraestructuras plantean nuevas formas de relación con los actores que el plan debe saber interpretar para aspirar a
resultados. Por otro lado, se ha valorado excesivamente el «producto-plan», mas como un documento proyectual y una
herramienta de comunicación mediática, que como un instrumento eficiente para provocar modificaciones sustanciales
en los desequilibrios urbanos.
El planeamiento urbanístico de hoy debe ser más programático y menos proyectual, en tanto que cualquiera de sus
herramientas está al servicio de un proyecto de transformación. Promueve procesos, define políticas de inversión
pública, tiene en cuenta una compleja ecuación de potencialidades y de problemas que se plantean en la ciudad de hoy
y no en la ciudad de dentro de 25 años, pero que no son simples respuestas a demandas existentes sin líneas
directrices de desarrollo. Vale la pena destacar que no debe ni puede haber una dicotomía o un antagonismo entre el
plan urbanístico y el plan estratégico, sino que son dos instrumentos que, en el caso de coexistir en una misma ciudad,
deben complementarse y apuntar a aspectos diferentes de una realidad común. Un proyecto de ciudad que incorpora
todos estos nuevos fenómenos y estas nuevas demandas debe partir de una visión de sustentabilidad de la ciudad en su
dimensión territorial, que no pueden estar hoy ausentes aun en un instrumento meramente urbanístico.

¿Qué puede ofrecer la ciudad?


¿Dónde intenta posicionarse?

66]
Poder navegar en el difícil equilibrio entre tradición e innovación…
…y en este desafío es indudable el rol de las administraciones locales

Los Planes Reguladores, en cambio, eran fundamentalmente herramientas de control de los procesos de construcción
de la ciudad promovidos desde la actividad privada: procesos cuyo control dependía de la voluntad pública pero que se
promovían desde la actividad privada entendida en su acepción inmobiliaria. Sus bases conceptuales eran las de la
zonificación, los usos, el control de la expansión, la restricción de la conversión de la tierra rural en tierra urbana y,
complementariamente, el ordenamiento del tránsito y del transporte mediante las operaciones sobre el sistema vial. El
plan miraba esos procesos desde lo urbano y no desde el territorio, es decir que los procesos se producían en el interior
del área urbana: cuando superaban lo que hasta un determinado momento se concebía como urbano, se extendía el
concepto de urbano, pero pocas veces se tomaba conciencia de que muchos de esos procesos o conflictos estaban
impulsados desde relaciones territoriales externas a la ciudad. Sus herramientas eran básicamente las ordenanzas de
edificación, de usos y de urbanización o de extensión de la planta urbana.
Este aparato normativo, sin embargo, no ha dejado ni debe dejar de tener vigencia. Los aspectos reguladores y
normativos de la planificación no deben desaparecer pero debe quedar claro que son una herramienta más de las tantas
que hoy deben predisponerse para ordenar el proceso de construcción de la ciudad. Lo que es claro es que no son
«El Plan» sino que son herramientas para controlar aspectos parciales de la transformación de la ciudad que se
producen en determinadas áreas más o menos aceleradamente en función de un proyecto de ciudad que es el que se
determina a los efectos de una verdadera transformación en el sentido positivo del término.
Gobernar con un sistema de planes implica entonces, que si bien no puede ni debe afirmarse que el Plan Urbanístico
no es una mera consecuencia del Plan Estratégico, ni el Plan Regulador del Plan Urbanístico, es esencial establecer
entre ellos una relación dialéctica intensa: un trabajo técnico y un trabajo estratégico son dos aspectos insoslayables en
los cuáles, seguramente, durante su proceso de elaboración aparecerán algunos de los elementos tradicionales de la
regulación urbana que son aquéllos que pueden neutralizar o equilibrar impactos positivos o negativos de nuevos
emprendimientos urbanos o de nuevas dinámicas urbanas.
Se ha intentado, con este breve desarrollo, presentar algunas reflexiones sobre los instrumentos de planificación
disponibles, para construir nuevas interpretaciones, capaces de abrir nuevas respuestas. Debe insistirse, sin embargo,
que se hace cada vez más necesario escapar del dogmatismo para descubrir distintos modos de mirar una misma
realidad urbano-metropolitana, un mismo ámbito de conocimiento y de acción, para construir nuevos lugares y nuevos
ámbitos.
Algunas de las cuestiones que definen los escenarios futuros de las ciudades intermedias quedan esbozados como
preguntas, porque si las respuestas ya estuvieran todas no habrían necesidad de ámbitos de reflexión. Pero también
algunas de esas preguntas pueden encontrar respuestas muy diferentes en función del punto de vista que se adopte:
¿Cuál es el impacto económico y espacial, presente y futuro de este nuevo modelo económico, en la realidad territorial
concreta? ¿Qué puede ofrecer la ciudad y dónde intenta posicionarse?

67]
Uno de los aspectos que aparece como frustrante cuando se buscan respuestas a estos interrogantes es la dificultad en
admitir que no todas las ciudades pueden ni deben posicionarse del mismo modo. No todas las ciudades pueden ser el
eje geoestratégico del Mercosur, pero sí pueden construir redes que les permitan posicionarse: desprenderse de estos
«clichés» puede resultar estimulante para imaginar y construir proyectos que sean absolutamente innovadores.
A su vez, si bien parece resultar más que obvio que ya no puede mirarse a Rosario como la ciudad «del centro», más
allá del cual están los «barrios», no resulta tan cierto que esa concepción haya sido superada desde distintos ángulos
de la cultura local. Tampoco parece posible seguir afirmando que es esa abstracta ciudad «madre» con una serie de
«ejes policéntricos» a que se la intentó reducir en los años setenta, concepción, sin embargo, que todavía aparece
enquistada en algunos ámbitos técnicos y políticos. Un análisis más comprometido con su propia naturaleza nos la
muestra como una mucho más compleja mezcla de lo natural y lo artificial, lo urbanizado y lo no urbanizado, lo
productivo y lo improductivo, el flujo, el movimiento, la conexión. Se hace evidente que en el territorio metropolitano
conviven estructuras sociales y productivas arcaicas con espacios de producción y consumo de altos niveles de
especialización: la agricultura, la pesca, los centros comerciales, el mundo de la información y de la imagen.

Cualquier proyecto debe ser único, tiene que abarcar los


inconvenientes y las necesidades de toda el área metropolitana.

Resulta interesante al respecto, presentar una visión proporcionada por un intendente de un municipio del área
metropolitana, cuando se le pregunta: ¿Cómo creen los habitantes del área metropolitana ser vistos desde el centro?
Para responderte necesito, tal vez, hacer una caracterización del «espíritu rosarino», tal como lo vemos
desde aquí. Yo creo que el rosarino habla de lo metropolitano, pero cuando hay que ejercerlo, su ciudad
termina en la Avenida de Circunvalación. Tomo un solo ejemplo: el puente Rosario-Victoria. Los rosarinos
creyeron que si el puente salía fuera de la Circunvalación no iba a ser de Rosario. Siempre cuestionan al
centralismo de los porteños y de los santafesinos, y ellos hacen exactamente lo mismo cuando se trata de
defender una obra de interés netamente regional.

68]
Otra cuestión que evidencia la dificultad que se tiene desde el centro en visualizar las profundas interacciones que ya
existen en el funcionamiento del Área Metropolitana, se pone en evidencia cuando se afirma que la salud es deficitaria en
Rosario porque los hospitales municipales atienden la salud a la gente de afuera, sin tener en cuenta que el Área
Metropolitana no sólo es dadora de trabajo, sino que también sus habitantes somos contribuyentes de la propia ciudad de
Rosario, es decir que con lo mucho que consumimos y compramos en Rosario aportamos a solventar la salud que
usamos. Y sin embargo, los intendentes de Rosario se quejan de toda la gente que tienen que atender de las localidades
cercanas. Es lo razonable, lo mismo que nosotros atendemos y damos trabajo a otras ciudades. En todo caso, si hay
alguna discriminación presupuestaria entre Rosario y Santa Fe, la pelea la tenemos que llevar adelante juntos, y no
utilizando como argumento ante la provincia al Área Metropolitana, porque ella ya le provoca los suficientes beneficios a
Rosario como para poder hacerse cargo no sólo de la salud sino de otro montón de cosas, como el tránsito. Por ejemplo,
todas las terminales de embarque de nuestros municipios, cuyas transacciones se concentran en la Bolsa de Comercio y
en los Bancos de Rosario.
En el tema ferroviario, en el tema vial, Rosario con frecuencia proyecta y lidera las soluciones de manera tal de solucionar
todos sus problemas y deja de lado muchas concepciones necesarias para solucionar los problemas de ciudades muy
conflictivas, como Villa Gobernador Gálvez, Puerto San Martín, San Lorenzo. Cuando se plantean este tipo de
discusiones, siempre aparecen los dos extremos: los que quieren armarlo de afuera y luego decirle a Rosario éste es el
proyecto, y los que quieren armarlo desde Rosario y decirle a los de afuera cuál es el proyecto. La salida es una sola:
cualquier proyecto debe ser único, y realmente metropolitano, tiene que abarcar los inconvenientes y las necesidades de
toda el área metropolitana.
El problema son los intereses en conflicto, porque mientras Rosario pretenda tener los beneficios de ser una gran ciudad
y no las desventajas de la gran ciudad... No quiere tener villas miseria, ni el hospital donde le caiga toda la gente de
alrededor... Pero también tiene la Universidad, los Tribunales, oficinas administrativas de las empresas del
conglomerado, sedes bancarias importantes, medicina privada, todas actividades generadoras de recursos, que tal vez no
tendría sino poseyera un «hinterland» tan dinámico y poblado. ¿Dónde estaba escrito que la Universidad con su voluminoso
presupuesto proveniente de recursos nacionales, debía estar en Rosario, y no descentralizada en toda el área metropolitana?
Este es uno de los múltiples puntos de vista con los que cabría observar las transformaciones: una ciudad que ha
tomado conciencia de que está en un momento de necesaria construcción de un posicionamiento nuevo respecto de los
roles que históricamente venía cumpliendo en una red territorial, debe hacerlo mediante un instrumento abarcativo de
las distintas componentes y las distintas dimensiones de su propio desarrollo. Seguir mirando la ciudad desde el centro
supone recaer necesariamente en la interpretación «clásica» de ciertos problemas: aparecen, esencialmente, visiones y
proyectos que afectan sólo relaciones de subordinación de los «centros periféricos» a la «ciudad central». Cambiar la
mirada, en cambio, permite superar ciertas categorías clásicas, utilizadas para representar ancestrales antinomias
—ciudad-campo, centro-periferia, concentración-dispersión—.
Parece casi innecesario reiterar, para finalizar, que estas iniciativas deberían convocar no solamente a urbanistas, si no
a los responsables políticos de cada una de las ciudades para darle un tratamiento serio a los problemas
metropolitanos, que no son otra cosa que los problemas de todos, en todos los ítems: desarrollo económico, empleo,
políticas impositivas, transporte, urbanización, etc. Sin ese espacio de debate permanente desde lo urbanístico y desde
lo político —entendido no en un sentido partidario sino en un sentido regional—, no vamos a poder construir nuevas
interpretaciones ni nuevos instrumentos urbanísticos, ni vamos a poder crecer como región.

(1) El presente artículo ha sido elaborado sobre la base del material preparado para el ciclo de actualización organizado por el IDR y el Colegio de
Arquitectos de Rosario y auspiciado por el Centro de Estudios Interdisciplinarios de la UNR, denominado JORNADAS DE ACTUALIZACIÓN: GESTIÓN
URBANA Y DESARROLLO. Rosario, 2000.
(2) Define Baudrillard a la «disuasión» como una forma muy particular de acción que domina nuestra época: la que hace que algo no se
produzca. Y agrega: «da lugar a unos acontecimientos extraños, que no hacen avanzar la historia en absoluto, sino que la vuelven a pasar al
revés, adoptan su curvatura inversa». BAUDRILLARD, Jean. La ilusión del fin. La huelga de los acontecimientos. París, 1992, c, edit. Anagrama,
Barcelona, 1992. Pag. 32
(3) Luiggi Mazza «Governare per piani», en Casabella Nº 626. septiembre de 1995.
(4) Ibidem
(5) ARGUIN, Gerard, La planeación estratégica en la Universidad. Presses de L’Université du Québec, 1988.
(6) Parte de estos conceptos han sido desarrollados en el programa de investigación inédito Nuevos escenarios de diagnóstico proyectivo. El
espacio urbano como un eje de desarrollo económico. Autora: I. M. de San Vicente. Asesoría y coordinación. Dr. Héctor Lazzarini. Institución:
Fundación Litoral. 1996-97, y en la ponencia titulada El enfoque estratégico como forma de lectura de nuevos escenarios de inserción regional
Autores: A. Caballero, I. M. de San Vicente, M. C. Tamburrini, G. Baglione. IV Congreso Arquisur, La Plata, octubre de 2000.
(7) ROVERE, Mario R. Planificación Estratégica de Recursos Humanos en Salud, Programa de Desarrollos de Recursos Humanos en Salud,
Organización Panamericana de Salud. octubre de 1992
(8) Señala Rovere que «mientras M. Testa afirma que tal cosa es imposible, siendo lo estratégico posible de desarrollar como enfoque o
pensamiento, Matus señala que la planificación estratégica no sólo puede existir sino que es un imperativo.» (citados por Rovere,op.cit., pag 91)
(9) Ibidem, pag. 92.

69]
Obra seleccionada finalista para el Premio Mies Van der Rohe,
Barcelona, 2000

Solano Benítez Vargas, Alberto Marinoni Vargas y José Luis Ayala Vargas

Complejo Vacacional del Sindicato de Trabajadores de la Administración Nacional de Electricidad


(SITRANDE). Ytá, Paraguay

Colaboradores del estudio Silvio Vazquez, Silvia Ortiz, Giovanna


Pederzani, Carlos Diaz Meyer, Sergio Fanego, Rosa Sarubbi,
Mirna Cruz, Alejandra Sanchez, Claudia Fleitas, Jazmin Chilavert,
Gonzalo Meza.Consultores Ing. Gilberto Calderoli, Ing. Alberto Espinola,
Diego Peóa, Alfonso Avalos

70]
Emplazamiento Ytá, Paraguay
Superficie 10 hectáreas
Proyecto 1997 Primer premio Concurso Nacional
organizado por el Colegio de Arquitectos del Paraguay

71]
CASA DEL CUIDADOR

CANCHAS

TALUD

CORTE
CANCHAS
H

72]
Tras la revolución de febrero de 1989 en Además, está comprometido con una profunda austeridad,
Paraguay, se otorga a los trabajadores de los monopolios habrá de rehacerse repitiendo el gesto en cada parte.
estatales el derecho a integrar sociedades sindicales. La construcción es la del límite, lo más cercana a refugios
En ese contexto, el estudio Solano resulta ganador de un de distintas escalas, que se entretejen con árboles, que
concurso organizado por el Sindicato de Trabajadores de copian la silueta de los cerros, que inauguran topografías
la Administración Nacional de Electricidad, que integra a que se clavan o emergen del suelo, donde se encuentran
toda la plantilla de funcionarios, desde encargados de con la intensidad del sol y la generosidad de las sombras,
aseo hasta las complejas gerencias técnicas, y que operan la lluvia, los vientos, sus sonidos y olores. Sólo el lugar
en plantas de escenarios muy distintos, asentadas en la determina el adentro y el afuera.
capital del país, en zonas periféricas y en diminutas La idea, entonces, pretende el desarrollo de una
comunidades rurales. modernidad sensible, que nos permita poner en tren de
El sitio del proyecto, Ytû, se encuentra a 50 kilómetros de superación el aprovechamiento de nuestros recursos y
Asunción. Serranías, montes y un arroyo integran las 10 potencialidades, de materiales y procedimientos.
hectáreas del conjunto, sobrevivientes de los La cestería da la clave de esfuerzos y contraesfuerzos a los
parcelamientos de lotes de especulación inmobiliaria en que se somete la madera de baja densidad para evitar su
los que se hallan inscriptas. libre deformación a la intemperie. La paja utilizada como
El lugar ya estaba contado, pervive en recuerdos futuros, aislante térmico sobre los techos. La tierra como
la propuesta es sólo una estrategia de intervención. Un encausador y contenedor de los raudales de la sierra, etc;
proyecto extensible y transformable, hecho de marcas son algunos recursos constructivos explorados por esta
fundacionales en la necesidad de nombrar el lugar. propuesta.

PLANTA

A
2.4

O
ALZAD
REFERENCIAS
1 RAMPA DE MADERA
2 POZO DE ARENA 7
3 TALUD DE ARENA
6
5 LABERINTO
6 CANTINA
7 VESTUARIOS

3
4
2

73] SECCION A-A


Adrián Luchini
Residencia para el headmaster
Principia School Campus

Adrian Luchini AD, Arquitecto


Fabian Llonch
Gisela Vidalle
Thassiff Ruanglek
Xi-Meng
Jen Chuang
Wilaluck Waffanasiriwade, Asistentes
Mac Ginnis Associates, Ingeniero estructural
Metropolitan Design-Build, Arquitecto Asociado y Constructor
Texto Adrián Luchini

74]
Emplazamiento Saint Louis, Missouri, USA
Superficie 640 m2
Proyecto 1999
Construcción 2000

75]
76]
Situada al pie de una colina dentro de un campus
de una escuela privada, la residencia para el director del Principal
School es visible desde varios ángulos, dada la apertura del lugar y la
característica de la topografía. Pese a este dato, el borde sur del sitio
corre a lo largo de un camino que conecta a dos dormitorios, siendo por
ende público y expuesto. Por otro lado, el borde norte es más íntimo y
privado, ya que está demarcado por un arco de árboles altos que
protegen la vista. Se pensó en completar el paisaje poniendo el perfil
de un pájaro en el horizonte, como aquellos que aparecen en tantas
imágenes perfectas. Se hizo pues, el proyectista cree que a veces la
arquitectura enriquece un lugar y simplemente corroborarlo no le
pareció adecuado, quería agregar algo que fuera simultáneamente una
intrusión y un recuerdo. Este pájaro de cobre es el techo de la casa.
Se sostiene por paredes que en el lado sur se ondulan y son portantes.
Fue como congregar la línea del suelo y arrugarla, anticipando lo que
la vista sin duda dibujaría. Hacia el norte, las paredes son livianas y
blancas, pues intentan acompañar el sentido de ligereza que la
geometría del techo inclinado sugiere. Casi nada.
Este arreglo provoca una tensión, en donde no es seguro si este pájaro
acaba de llegar o está a punto de despegar. Alguien después dijo que
servía como una metáfora acerca de los estudiantes que ocupan el
campus, jóvenes a punto de partir hacia otros capítulos de sus vidas.
El autor, por su lado, no dejó de pensar en los atardeceres del campo
de su Argentina, en ese momento misterioso donde los rayos del sol
se confunden con el canto de los teros, ya dispuestos a pernoctar.

77]
Javier Aguilar Borràs, Yolanda Nadal Campistrou,

Centro de Desarrollo Regional de Castilla y León en el Parque Tecnológico de Boecillo.

Valladolid Valladolid, España. Promotor: Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Organismo


Autónomo del Estado. Proyecto: 1999. Finalización de obras: Junio 2001-05-25.
Superficie construida: 4.987 m2. Costo total, con urbanización exterior: 588.000.000 ptas.

78]
Sonia Miguel Queralt, Rosa Torras Villacampa
Este edificio está situado dentro del Parque Tecnológico abrir la totalidad del gran patio (26 x 26 m) a la calle
de Boecillo, junto a la ciudad de Valladolid, capital posterior, al tener en cuenta la propia regulación del
administrativa de Castilla y León, y es, como en teoría son Parque Tecnológico que impide la construcción de
todos los edificios promovidos por la Administración cercados, vallas, o cualquier tipo de separación con las
Pública española, el resultado de un concurso público y calles o con las parcelas vecinas, a menos que sea de
abierto a todos los profesionales titulados. En este altura muy reducida y de naturaleza vegetal. El mismo
concurso nacional se valoró además de la propuesta vestíbulo comunica espacialmente los tres niveles del
económica, la experiencia previa del concursante y del edificio. En el sótano se ubican dos salas de actos de
equipo de colaboradores tanto para el proyecto, como para diferente capacidad y los locales de servicio. En la planta
la construcción, el programa de trabajo, y los plazos de baja se sitúan los órganos de administración gerencial y
ejecución. Pero por sobre todo, se evaluó la resolución del dirección, además del servicio de documentación y los
anteproyecto, tanto en lo que respecta al cumplimiento del archivos, y la biblioteca que puede ser accesible desde el
programa funcional, como a la propia calidad exterior, fuera del horario laboral. En la planta superior se
arquitectónica de la propuesta. sitúan los despachos de los investigadores, los espacios
En este caso, la propuesta del anteproyecto del estudio didácticos, las aulas especiales y las salas de reunión.
Aguilar, Nadal, Campistrou, Queralt, Villacampa, la Todavía existe una pequeña planta superior para albergar
realizaron cuatro personas durante tres semanas en forma los equipos de climatización, las bombas de impulsión y
intensiva, mientras que el proyecto de ejecución para la retorno, y los repartidores de las telecomunicaciones,
subasta y la posterior ejecución se realizó durante once además de las instalaciones especiales.
semanas contando con la ayuda de tres equipos externos La concepción espacial es muy clara partiendo de la base
(cálculo de estructuras, cálculo de instalaciones y de consumir la menor cantidad de espacio para cumplir
mediciones y determinaciones de obra). un programa predeterminado. Los núcleos se sitúan en los
La ejecución de la obra ha demorado trece meses, debido vértices de la U y del vestíbulo arrancan los pasillos, que
a las inundaciones que sufrió la región durante noviembre además de iluminarse en su pared final, toman la luz de
y diciembre de 2000, y el control fue realizado por un los propios despachos por medio de una fenestración que
equipo local en Valladolid y los redactores del proyecto se repite en el interior lo que sucede en el exterior. Se ha
que se desplazaban desde Barcelona, durante toda la construido una pasarela externa al nivel del primer piso,
dirección de las obras, cada semana. que sirve para facilitar la evacuación del conjunto en caso
La superficie edificada roza los 5.000 m2 y el coste de una emergencia, para evitar la radiación solar directa
sobrepasa ligeramente los tres millones de dólares, lo cual sobre los vidrios de los despachos y para impedir que la
es bastante inferior al previsto originalmente. conducción de las aguas pluviales penetre en el interior.
En un solar perfectamente plano y sin accidentes, situado Por encima de cualquier otra consideración funcional,
entre dos calles que no son paralelas sin razón, se sitúa un también se trata de un espacio de contemplación y de
cuerpo de edificación que prefiere resultar del todo descanso al que abocan una gran mayoría de los
indiferente al entorno que le rodea, configurado por ambientes de trabajo. Tanto el suelo como las barandas
grandes edificios dedicados a empresas de servicios de de protección de esta pasarela están realizados en un
alta tecnología y laboratorios de investigación que entramado de acero galvanizado que pretende lograr la
pretenden, con su apariencia exterior, ocultar sus máxima transparencia.
actividades desde el exterior y afirmar al mismo tiempo la El edificio se cierra a la orientación Oeste, puesto que el
importancia, el poder y la majestuosidad de las firmas sol resulta muy duro en los veranos de la meseta
implicadas. castellana, y el patio que adquiere una forma muy
Por el contrario, el Centro de Desarrollo Regional, realizado claustral se modifica espacialmente por medio de la gran
con fondos públicos, pretende, como la mayoría de las escalera exterior de acceso al sótano y la escalera de
realizaciones de este despacho, hacer transparentes las acceso al piso superior, a la manera de un pequeño
actividades que se desarrollan en el interior para mostrar anfiteatro al aire libre. De esta forma, la complejidad
al ciudadano la manera en la que ha sido empleado su espacial del conjunto sustituye a la modestia de los
esfuerzo. De esta manera, el vestíbulo es perfectamente materiales que se han empleado para las fachadas
transparente y comunica visualmente los dos espacios interiores de este patio.
exteriores. La misma estructura en forma de U permite Otra cosa bien diferente son las fachadas en las que se ha

79]
empleado como material de referencia la plancha de planas fachadas laterales. Es cierto que no se justifica la
cobre de 0,68 milímetros de espesor, colocada sobre alteración del plano límite que permite la seriación de los
rastreles de madera tratada, engatillando los bordes de las espacios. Por eso es en la fachada a la calle principal en
piezas entre sí para permitir los movimientos de donde un vuelo de dos metros permite en primer lugar
contracción y dilatación que sufren los materiales en una evitar la radiación solar directa sobre los cristales y
tierra en donde los inviernos son extremadamente fríos y señalar con absoluta precisión el lugar de la entrada, en
los veranos enormemente calurosos. segunda instancia. La fachada posterior que abre a la
El cobre es un material de construcción de altísima calle de atrás queda configurada por dos enormes bloques
calidad que se ha utilizado tradicionalmente como que actúan a la manera de los propileos y que dan paso al
material de cubierta. Su brillo, su tono de color y sobre espacio ajardinado en la totalidad de su ámbito interior.
todo sus irisaciones cambian no sólo con la cantidad de La intención de todo este esfuerzo ha sido la de tratar de
luz diurna sino con el propio paso del tiempo. Su demostrar que siempre es posible encontrar recursos para
superficie se altera sin deterioro con mucha facilidad, y si trabajar con aquellos elementos que nos son propios y
se realizan los engatillados con los medios habituales, las específicos en el oficio de la arquitectura, y que en este
huellas de los dedos de los operarios quedan marcadas en caso pueden resumirse, en los ritmos, la composición, la
la superficie, a la manera que los canteros de la edad textura de los materiales, con sus colores y sus formas,
media esculpían las iniciales de sus nombres en la piedra todo ello dentro de un contexto de trabajo en espacio, que
labrada. Su estanqueidad es inmejorable y resulta muy es donde realmente se plasma el trabajo de un arquitecto.
fácil de trabajar y de modelar. Al colocarlo sobre un alto
zócalo de protección, el agua de la lluvia deja una huella
indeleble de color azul verdoso sobre el pulido del
hormigón armado. La textura del conjunto se va alterando,
e incluso el aspecto del conjunto presenta imágenes muy
diferentes entre las de un día con el sol restallante que se
refleja sobre esta piel metálica y los días de lluvia que
resaltan las diferentes coloraciones irisadas.
Un esfuerzo de la composición se ha realizado sobre las

80]
81]

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