Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Objetivo general:
Objetivo específicos:
Justificación:
Esta investigación se realiza con el fin de determinar si el idioma inglés es un
lenguaje capaz de convertirse en la lengua universal que usaremos para distintos
ámbitos.
Antecedentes
Hace quinientos años, entre cinco y siete millones de personas hablaban inglés y
la mayoría de ellos vivían en las islas británicas. Actualmente, unos 1.8 billones de
personas alrededor del mundo hablan inglés.
El auge del inglés no tiene nada que ver con la estructura del idioma, o cualquiera
de sus cualidades inherentes, sino con la política y la historia.
La historia del Inglés puede ser descrita a partir de la llegada de tres tribus
Germánicas a las Islas Británicas en los años 500 A.C. Los Anglos, los Sajones y
los Jutos cruzaron el Mar del Norte desde lo que hoy conocemos como Dinamarca
y el norte de Alemania. Los Anglos recibieron ese nombre debido a su tierra de
origen Engle o Angels. Ellos llamaron a su propia lengua Englisc, palabra que
derivó en English o Inglés.
La muestra escrita más antigua del idioma Inglés es una inscripción Anglo-Sajona
que data entre los años 450 y 480 AC. Durante las siguientes centurias, y a
medida que las tribus germánicas se expandían por el país, se desarrollaron
cuatro dialectos:
Northumbrian en Northumbria, al norte del río Humber, Mercian en el reino de
Mercia en la parte central de la actual Inglaterra West Saxon en el reino de
Wessex, en la parte sudoccidental y Kentish en Kent, en el extremo sureste.
Durante los años 700 y 800, la cultura y el idioma de Northumbria dominó Gran
Bretaña. Las invasiones de los Vikingos en los años 900 pusieron fin a esa
dominación, y también trajeron la destrucción de Mercia. Solo Wessex permaneció
como un reino independiente.
El alfabeto Latino fue traído por misioneros cristianos desde Irlanda y es el que
sigue siendo en la actualidad el sistema de escritura del Inglés.
No fue sino hasta el siglo XIV que el Inglés volvió a ser la lengua dominante en
Gran Bretaña. En 1399, Henry IV se convirtió en el primer rey de Inglaterra, desde
la conquista normanda, cuya lengua materna era el Inglés. Por aquella época, el
dialecto de Londres había surgido como el dialecto estándar de lo que ahora se
llama Middle English, o Inglés Medieval.
Durante los últimos años del período medieval y los primeros del período moderno
(siglos XV al XVII), se observó un continuo proceso de estandarización del idioma
Inglés, en el territorio que se extiende al sur de la frontera con Escocia. El lenguaje
hablado y escrito en Londres (The London Standard) continuó evolucionando,
extendiéndose su uso entre los sectores elevados de la sociedad, especialmente
en contextos formales. Las otras variedades regionales fueron desplazadas, bajo
el estigma que indicaban falta de prestigio social y de educación.
A partir del siglo XVI, la expansión del imperio británico, conjuntamente con el
Renacimiento, trajo consigo muchas palabras de origen foráneo que se
incorporaron al Inglés, directa o indirectamente. Se crearon nuevas palabras a un
ritmo cada vez más intenso.
Incluso hoy en día, el inglés no es el idioma oficial de Estados Unidos, pero sin
duda es el idioma predominante en la práctica.
Y no solo fueron los Estados Unidos los que dijeron “hello” al inglés. A principios
del siglo XX, el Imperio británico se expandió a casi una cuarta parte de la
superficie de la Tierra, sin incluir a Estados Unidos. Según un dicho popular, “el sol
nunca se pone en el Imperio británico”.
En la mayor parte del imperio britanico, el principal objetivo era el comercio, por lo
que pocos británicos se instalaban definitivamente en las colonias. Esto explica
por qué el inglés no logró dominar las colonias de Asia y África, donde era la
lengua de los negocios, la administración y la educación, pero no el idioma de la
gente.
En los países donde se formaron las colonias más grandes, como Australia,
Canadá y EE.UU., las lenguas y las culturas nativas fueron conducidas a la casi
extinción por la preponderancia del inglés.
Así que algo tuvo que ocurrir más recientemente para que el inglés ganara su
estatus internacional… y fue el ascenso de Estados Unidos en el siglo XX. Sin
esto, el panorama lingüístico mundial se vería muy diferente hoy en día.
Además de enviar dinero al otro lado del Atlántico, Estados Unidos aportó la banda
sonora a través del rock and roll, el jazz, el disco y el hip hop, posteriormente. Las
películas de Hollywood se convirtieron en una sensación global y las series
estadounidenses en una referencia cultural. La cultura estadounidense estaba en
todas partes, irradiando confianza y éxito: justo lo que el mundo necesitaba
después de la devastación de la guerra.
El inglés es “cool”
Muchos ejemplos del uso del inglés en la publicidad provienen de las compañías
multinacionales, que desean mantener su mensaje consistente a través de todos
sus mercados. Mientras que otros ejemplos vienen de empresas locales, que
buscan ese elemento de glamour que el inglés puede darles. Por supuesto, esto
también sucede con otros idiomas: haute couture yEau de Toilette suenan mucho
más atractivos en francés.
Ciencia y tecnología
Asimismo, lo que sucede dentro de los dispositivos también está dominado por el
inglés. Estados Unidos sigue siendo la nación más innovadora en tecnología y,
gracias a la política lingüística de los fundadores de la nación, el inglés es el
idioma rey.
Los idiomas y las fronteras cambian con el tiempo, pero es muy probable que el
inglés siga siendo el number one durante nuestras vidas.
Capitulo 1
Espacio Geográfico
También es la lengua primaria en: Belice (además del español), Canadá (con el
francés), India (con el Hindi y otras 21 lenguas de los estados), Irlanda (además
del irlandés), Singapure (junto con el Malayo, Mandarín, Tamilo y otras lenguas de
Asia) y Sudáfrica (con el Zulú, Xhosa, Africáams y Sotho del norte)
También es lengua oficial, aunque no nativa en, Camerún, Fidji, Los Estados
Federales de Micronesia, Ghana, Gambia, Kiribati, Lesoto, Liberia, Kenia,
Namibia, Nigeria, Malta, Islas Marshall, Pakistán, Papúa Nueva Guinea, Filipinas,
Ruanda, Islas Solomón, Samoa, Sierra Leona, Swazilandia, Tanzania, Zambia y
Zimbawe.
Así, la importancia de esta lengua sigue creciendo día a día a medida que cada
vez más gente quiere o necesita comunicarse en inglés. Según Kachru y Nelson
(2001), no hay duda de que el inglés es la lengua que más se enseña, se lee y se
habla en estos momentos mundialmente. Su condición de lengua internacional
(Bhatia, 1997a; Widdowson, 1997; Brutt-Griffler, 1998; Flowerdew y Peacock,
2001; Fishman, 2002) o, como se viene acuñando últimamente por muchos
autores, lengua global (Graddol, 1997; De Lotbinière, 2001; Kachru y Nelson;
2001; Seidlhofer, 2001; Yano, 2001) ha impulsado, en las últimas décadas, la
importancia de su enseñanza y aprendizaje.
Según Alcaraz Varó (2000: 14), el inglés como lengua extranjera "ocupa el puesto
número uno en los planes de estudios de la educación primaria y secundaria de
casi todos los países del mundo". Particularmente en la America Latina, es hoy por
hoy la lengua extranjera que más se estudia y predomina (Graddol, 1997;
Phillipson, 2001; Fishman, 2002) y de momento, al menos en un futuro inmediato,
parece que su predominio en el programa educativo de lenguas en Europa no se
ve amenazado en absoluto: "It is a dominance unlikely to be challenged in the
immediate future" (Graddol, 1997: 44). Según House (2001), el inglés como lengua
franca en Europa es una ventaja porque facilita una flexibilidad funcional por su
amplia extensión internacional, convirtiéndose en un instrumento muy útil de unión
entre diversas regiones e identidades culturales distintas que pueden tener en el
inglés un medio de comunicación común.
Otra de las causas que provoco que el inglés cobrara tanta importancia es la
globalización.
Decir hoy que el inglés es la lengua más hablada del mundo sería falso, pero decir
que es una de las más habladas y, además, la más relevante por su uso, quizá
sea correcto, tal y como se ve en la siguiente tabla. En ella vemos cómo la única
lengua que supera en número de hablantes nativos al inglés es el chino,
principalmente por la superpoblación del país.
Tanto Graddol (1997) como Crystal (1995, 1997) muestran cómo la lengua inglesa
se expandió a partir de la colonización de los países africanos y asiáticos por parte
principalmente de los británicos, posteriormente continuado por el dominio
económico ejercido por los EE.UU.. Lo cierto es que la lengua inglesa se habla en
más de 60 países como lengua oficial y en 20 más es una de las principales
(Johnson, 1996). De hecho, McArthur (1998), Graddol et al. (1999) y Crystal
(1999) destacan el crecimiento del inglés como lengua híbrida, es decir, mezcla de
la lengua estándar con otros tipos de inglés y otras lenguas, causado por la
coexistencia de las mismas, y provocando la existencia de diversas variedades
lingüísticas de este idioma.
Crystal (1997: 53) explica en su obra que el estatus actual de la lengua inglesa se
debe a dos causas: la expansión del poder colonial británico finalizado con el siglo
XIX, y la emergencia en el siglo XX de los EE.UU. como poder económico
mundial. Su trabajo trata de ejemplificar el desarrollo histórico de la lengua inglesa
en el mundo y su estatus actual, no entrando en juicios de valor, pero sí aceptando
la posición del inglés como lengua de comunicación mundial. En este sentido
creemos que la obra de Graddol (1997) es una continuación de esta misma
tendencia, con datos propios, e incluso de carácter más completo que la de
Crystal, tratando la lengua inglesa dentro de diferentes ámbitos del mundo actual y
prediciendo la posición de la lengua inglesa en el futuro. Por su parte, Phillipson y
Skutnabb-Kangas (1999: 20), dos de los autores más reivindicativos en este tema,
también aceptan al menos la idea de que “English is involved in ongoing
processes of globalisation and localisation”. Partiendo de esta premisa, estos
autores establecen una idea contraria a la lengua inglesa como lengua franca o
lengua única del mundo. Su principal argumento es que el inglés se pueda erigir
como una lengua dominante y acabe, tal y como ya lo está haciendo, con la
existencia de otras lenguas minoritarias
Graddol (1997: 63) indica que el nivel adquirido por el inglés necesita de una
rápida adaptación ética por parte de la enseñanza de esta lengua. Warschauer
(2000) relaciona la enseñanza del inglés con el desarrollo de las tecnologías de la
información y de la comunicación (TIC) y del contexto social (como apunta
Markee, 2000: 570-571). Desde esta perspectiva, da una visión del conjunto de
aspectos que se han de tener en cuenta en estos momentos dentro de la
enseñanza/aprendizaje de la lengua inglesa.
- no deba entenderse la expansión del inglés como algo malo, ni bueno, sino como
algo neutro, cuya positividad recaerá en las posibilidades comunicativas que
aporta.
- Escritura/Autoría: Warschauer (2000: 522) afirma que “in much of the world,
writing has been given little emphasis in English language courses and, if
emphasized at all, is seen as synonymous with putting grammatical correct
sentences on paper”. El informacionalismo y el mayor uso del ordenador e Internet
hace imperiosa la necesidad de ser efectivos en nuestra comunicación escrita
(refiriéndonos a American Management Association International, 1998). Así pues,
dando relevancia a la pragmática de la interacción escrita, a las destrezas de
autoría (authoring) y publicación necesarias para la presentación efectiva del
material, según Warschauer (2000: 523), las nuevas destrezas dentro de este
campo que destaca son:
Hasman (2000: 3-4) añade además que la lengua inglesa no ha parado todavía de
extenderse y apunta a tres factores que hacen del inglés una lengua útil para los
ciudadanos del mundo: