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EL PROFESOR VIRTUAL EN EL E-LEARNING:

HACIA LA TRANSFORMACIÓN DEL PARADIGMA EN EL PROCESO

ENSEÑANZA APRENDIZAJE

JOHANNA RODRIGUEZ TARAZONA

Licenciada en Educación con énfasis en Tecnología e Informática

Especialistas en Gestión Educativa

MÓDULO: GESTIÓN DE PROCESOS DE DISEÑO Y DESARROLLO DE

PROGRAMAS EDUCATIVOS EN LÍNEA

Presentado a la profesora Zenith Chinchilla Ruedas

MAESTRÍA EN GESTIÓN DE LA TECNOLOGÍA EDUCATIVA

UNIVERSIDAD DE SANTANDER

2018
Prefacio

“El aprendizaje en línea puede que no se adapte a todo el mundo, pero puede ser una

oportunidad para que se obtenga la educación y el adiestramiento que necesitan”.

Stewart Marshall

En décadas pasadas, el proceso enseñanza aprendizaje propendía por una educación

tradicional donde el docente se limitaba a entregar sus conocimientos de forma magistral y, por

qué no decirlo, monótona. Ese “conocimiento”, de propiedad exclusiva del maestro, quedaba

plasmada en el tablero con el acompañamiento de un texto guía, si lo había, y de un taller escrito

diseñado por el tutor. La interacción docente – estudiante era mediada por las preguntas de corte

textual relegando el proceso inferencia del aprendiz. ¿Cómo se verificaba, entonces, el

aprendizaje? A través de una evaluación, del mismo estilo, con preguntas que solo dejaban

entrever el nivel de memorización de este.

No dista mucho este panorama presencial de la educación a distancia en aquella época. El

estudiante se valía de módulos adquiridos en los puestos de revista gracias a la programación

educativa y cultural del Ministerio de Educación como: “CAMINA”, los cuales eran resueltos

por los valientes educandos a través de la radio o de la televisión y cuyo título, adquirido por sus

esfuerzos, era llevado a casa gracias al correo humano. Hasta aquí llegaba la responsabilidad del

maestro traducida en la “satisfacción del alumno” al graduarse a distancia. Solo con ello bastaba

para llegar al mundo universitario.

En este siglo, la educación se está moviendo al ritmo propuesto por la tecnología. Y esta

globalización tecnológica ha hecho repensar ese modelo tradicional con el que se estaba

desenvolviendo el proceso enseñanza aprendizaje. Las tecnologías de la informática y las

telecomunicaciones han abierto una ventana hacia el futuro donde los contextos: social,
económico, político, cultural y educativo deben estar a la vanguardia de esas grandes

transformaciones. Todo proceso inicia con un tutor, con un guía, un moderador.

El ser humano, ávido de conocimiento, pero con un tiempo limitado, busca nuevas

alternativas de aprendizaje. Y estas las está brindando la educación virtual conceptualizada por el

Ministerio de Educación de Colombia (MEN) como: “… también llamada “Educación en línea”,

se refiere al desarrollo de programas de formación que tiene como escenario de enseñanza y

aprendizaje el ciberespacio”. En este orden de ideas, ¿cuál es la importancia del profesor virtual

en el e-learning? Es el actor vital y fundamental en todo proceso de formación que posee

habilidades y competencias académicas, sociales y tecnológicas para acompañar la experiencia

educativa de un estudiante.

Ahora debemos hacer referencia a la corresponsabilidad. Si bien, el docente virtual debe

cumplir un rol tal y como lo apunta Paulsen (1992):

El rol del formador se centra fundamentalmente en la dinamización del grupo y en asumir

funciones de organización de las actividades, de motivación y creación de un clima agradable de

aprendizaje y facilitador educativo, proporcionando experiencias para el autoaprendizaje y la

construcción del conocimiento.

También el educando debe estar en sintonía con lo propuesto por su orientador. En este

sentido, el educador se debe caracterizar, como dinamizador (Mason, 1991) bajo el siguiente

esquema:
F O R M A D O R E N E D U C A C IÓ N O N -L IN E (
ORGANIZATIVO
PLANEACIÓN
R O LES

RELACIÓN
SOCIAL
INTERPERSONAL

INTELECTUAL
FACILITADOR
EDUCATIVO

Si el docente organiza, define objetivos, explica parámetros, delega responsabilidades, da paso a

la participación, retroalimenta y acompaña el proceso, el estudiante virtual cumplirá con las

metas trazadas y el ambiente educativo incrementará sus metas.


NUESTRO ROL COMO ESTUDIANTES: ACIERTOS Y DIFICULTADES

“El estudiante pasa a ser el centro de formación (Duart y Sangra, 2000),

con destrezas y actitudes de comunicación autónomas”

Indiscutiblemente, la elección por la Maestría en Gestión de la Tecnología Educativa ha sido

todo un acierto.

Optar por un proceso formativo virtual me a generado, muchos interrogantes que me han

conducido a investigar sobre los siguientes aspectos: identificación de la universidad,

posicionamiento académico en el país, programas ofrecidos, homologación, costos, seriedad en

la oferta educativa, reconocimiento de los estudiantes, idoneidad de los docentes, entre otros

aspectos.

Clarificadas entonces estas inquietudes, di ese paso definitivo hacia ese entorno educativo,

nuevo para mí, puesto que fui formada en una educación presencial y tradicional. En el

transcurso de la Maestría e podido identificar los siguientes componentes traducidos en aciertos

y debilidades.

ACIERTOS DEBILIDADES
 Manejo autónomo del tiempo.  Si bien el programa da un tiempo

 Programa académico amplio y estipulado para la entrega de un

novedoso. trabajo específico, la

 Pertinencia de los temas propuestos. retroalimentación no se da en términos

 Amplio conocimiento de los temas por reales y ágiles sino en estimados.

parte de los docentes.  No estar acostumbrado al sistema de

 Adecuada y completa plataforma trabajo virtual en tanto el estudiante

virtual educativa. no tiene un horario establecido de

 Actividades coherentes y dinámicas. trabajo que lo obligue, diariamente, a


 Aplicabilidad en el área específica. cumplir con una tarea específica. En

 Trabajo colaborativo. un tipo de educación presencial, el

 Implementación y aplicación total de docente tiene encuentros constantes

las TIC. donde solicita avances paulatinos de

 Costes adecuados. las actividades propuestas.

 Excelente reputación académica.  El estudiante debe estar familiarizado

 Interacción docente – estudiante. con la tecnología a emplearse y poseer

los medios para acceder a las

videoconferencias, foros y asesorías

virtuales.

 Dificultad en programas de Software

para desarrollar las actividades. Si

bien, se presentan algunos de carácter

“libre”, otros necesitan ser comprados

o poseer una computadora muy

avanzada para descargarlo.

 No hay presencia de un delegado de la

universidad en la ciudad de Medellín.

Lo concerniente al proceso de

matrícula y apertura del sistema para

iniciar los módulos se realizó vía

celular y gracias al número de teléfono

aportado por una de las compañeras de


trabajo.

 Dificultad para acceder al Campus

Virtual desde la página oficial de la

universidad. Esta se presentó al iniciar

la Maestría.

En el rol de docente virtual y teniendo en cuenta que la deserción educativa se da por

problemáticas tales como: escasez de tiempo, apatía por el curso elegido, alta expectativa

académica, presupuesto que sobrepasa sus costes económicos, poca o nula accesibilidad al

programa, consideramos pertinente que:

- Se agilice el análisis de las tareas asignadas a los estudiantes para entregar una

retroalimentación que le facilite a este último hacer los cambios requeridos en la

actividad.

- Se propongan actividades de sensibilización de la materia que el estudiante inicia. Es

fundamental exponer: el qué, el por qué, el para qué y la relevancia de esta en el área

específica.

- Se diversifiquen más las actividades propuestas; es decir, dividir las tareas por semanas a

fin de que el estudiante cree un horario de estudio como si cumpliese una jornada de

educación presencial.

- Se creen grupos de encuentro virtuales semanales para compartir experiencias, material

de trabajo, despejar dudas. El trabajo será mucho más colaborativo.

Conclusión
Son innegables las dificultades que puede atravesar un estudiante en el contexto virtual:

de conexión, equipos deteriorados, falta de preparación, entre otros. Consideramos que, a

pesar de todos estos problemas, hay tres actores que luchan y se esfuerzan incansablemente

para que la meta propuesta se logre: el mismo estudiante, el docente y la institución. El

primero, debe ser consciente que solo se alcanza el objetivo si se prepara a diario, si se es

responsable de su propio aprendizaje, si investiga, analiza, propone, crea y expone; el

docente, si se esfuerza porque sus estudiantes logren ese vínculo académico, que tengan la

empatía por el conocimiento para su crecimiento personal y profesional; y la universidad, si

proporciona todos las herramientas tecnológicas y pedagógicas para la formación integral de

sus estudiantes.

Si se logra este equilibrio, ya no estaremos hablando de frustraciones sino de cómo la

universidad, repensando la educación, logró enamorar a muchos profesionales en el contexto

del aprendizaje virtual.

Bibliografía
Borges, F (2005) La frustración del estudiante en línea. Causas y acciones preventivas.

Cap_1_frutraestudiante.pdf.

Libro electrónico multimedial: Gestión de procesos de diseño y desarrollo de

programas educativos en línea. Capítulo 1: Docencia en la virtualidad.

Marshall. S. Las tecnologías en la información y la comunicación TIC: el uso de la Web

2.0 en la educación a distancia. En: www.iesalc.unesco.org.ve

Ministerio de Educación de Colombia.

Osorio Benito, D (2009) La figura del moderador en el entorno e-learning.

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