CCUADERNOS DEL CIO
SERIES TEMATICA,
NUMERO 3
suse 2009
Principios trastocados:
una sociedad que intimida
LAURENCIA BARRAZA BARRAZA
Profesora investigadora del Centro de
Adtualizacién del Magisterio en Durango |
No robaras”, es un principio no solamente religioso, sino que esta estipulado en
la legislacién mexicana, ademés de que se establecen sanciones para quienes
deciden no acatar el mandato.
En este articulo deseo plantear la facilidad con que se rompen principios como éste y
las consecuencias que una decisién de este tipo tiene; algunas de ellas imperceptibles pero
no por ello menos dafiinas.
Considerar las consecuencias también nos lleva a indagar las causas por las que el
principio ‘no robards” se mal entiende o simplemente se minimiza; para descubrir ésto,
hace falta revisar las practicas de cardcter individual y colectivo adoptadas por la sociedad.
La intencién no es ofrecer lecciones de moral; no se tiene como propésito juzgar, sino
reflexionar en tomo a lo que implica asumir un principio fundamental para fortalecer 0
resquebrajar a una sociedad como la nuestra.
Ladrén, hurto y robo
Se tiende a pensar que un ladrén es una persona con caracteristicas singulares, y mu:
has veces hasta estereotipadas; es decir, pensamos que un ladrén es una persona que se
distingue del resto, por su indumentaria, por su aspecto 0 por su forma de actuar y que
ademas, es facil de identificar, dado que sus caracteristicas son visibles; sin embargo, los
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hechos han dejado claro que los ladrones también se visten de honorabilidad, que incluso
tienen reconocimiento y que en ocasiones hasta se les rinde pleitesia; lo cual nos conduce
a reflexionar que: en estos tiempos no es facil identificar las caracteristicas de un ladrén,
pues los estereotipos se han roto. Lo que si queda claro es que sus principios éticos han
sido trastocados, su conciencia se ha cauterizado, que hizo de la sociedad su negocio y,
frecuentemente, utiliza una doble moral como la pantalla protectora que le permite conti-
nuar los hurtos sin que se sospeche que Io hace.
La palabra ladron se asocia con la palabra robo, la cual de acuerdo con el diccionario
Wikipedia (2009):
..e8 un delito contra el patrimonio, consistente en el apoderamiento de
bienes ajenos, con intencién de lucrarse, empleando para ello fuerza en as
cosas o bien violencia o intimidacién en la persona fisica. Son precisamente
estas dos modalidades de ejecucién de la conducta las que la diferencia del
hurto, que exige Unicamente el acto de apoderamiento.
Consiste el delito de hurto en el apoderamiento ilegitimo de una cosa mue-
ble, ajena en todo 0 en parte, realizado sin fuerza en las cosas, ni violencia
6 intimidacién en las personas. El hurto requiere siempre apoderamiento,
sin usar de formas 0 modos especiales, como la fuerza sobre las cosas 0 la
violencia fisica en las personas, caracteristicas del robo, 0 como la intimida-
in para obligar a la entrega (Internet).
La sociedad relaciona la palabra robo con una serie de acciones, las cuales puede de-
cirse que son distintivos de éste; una, es la violencia; otro, el despojo; uno mas, puede ser
‘el temor que causa una accién como el robo; también se asocia con la delincuencia, esto
es, cuando se habla de los ladrones y de los robos, la sociedad presenta signos de rechazo
hacia este tipo de acciones y conductas porque las considera fuera de los principios mora-
les y legales establecidos para una convivencia armonica.
Sin embargo, quiero abordar una clasificacién del robo o tal vez seria més prudente
hablar del hurto, ya que para algunos autores existen diferencias entre estos conceptos;
al primero le atribuyen aspectos que remiten a la violencia; mientras que al segundo se le
atribuye la apropiacién de algtin bien pero sin acciones violentas de por medio; es decir,
los hurtadores se apropian de “cosas” que no son de su pertenencia pero no agreden de
manera fisica a los propietarios de éstas. Aun asi, el que roba como el que hurta cabe en la
categoria de ladrén y la linea que separa a estos conceptos es muy delgada, por lo que en
este articulo se utilizaré el término ladrén tanto para referirse al hurto como al robo.
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PRINCIPIOS TRASTOCADOS: UNA SOCIEDAD QUE INTMIOA CCUADERNS DEL aD
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Quiero hacer una reflexién en torno a la vida cotidiana tuya y mia; quiero que revise-
‘mos qué pasa con nuestro diario vivir, porque es ahi donde los seres humanos mostramos
nuestros principios éticos, nuestra formacién y los valores que hemos construido alo largo
de nuestra vida. Esas conductas, acciones y actitudes que afloran en la convivencia diaria
con los otros; en las relaciones que establecemos: con el medio ambiente, con los anima:
les, en fin, con todo lo que estamos en contacto.
Es complicado hablar de principios morales, de valores éticos, porque tienen grandes
dosis de subjetividad, porque no son tangibles pero si observables; ademas porque son
juicios que hacemos los seres humanos sobre otros seres iguales 0 semejantes a nosotros:
incompletos e inacabados y que esa incompletitud nos lleva 2 actuar de diferente forma
ante situaciones similares, pero que ademés, como lo sefiala Rosas (2003) lo inacabado y
lo incompleto nos lleva a formarnos con los otros, y, a medida que vamos interrelacionan-
donos y compartiendo nuestra experiencia, nuestro conocimiento, nos formamos dialéc
ticamente; es decir, yo contribuyo a la formacién del otro a la vez que el otro influye en
ta mia y asi, en este ir y venir, la espiral se ensancha y perfecciona la formacién de ese ser
incompleto e inacabado.
En este articulo no se trata de ofrecer una disertaclén respecto de lo que son los va:
lores y los principios morales y éticos; los entenderemos como practicas cotidianas, que
se reflejan y se perciben en las acciones, actitudes y conductas que manifestamos ante
determinados hechos.
El principio “no robarés”
Para poder explicarme ante quienes lean este escrito, deseo plantear una reflexién,
que hace un buen tiempo realicé con unos nifios de primaria durante la clase; hablabamos
del principio “no robards”. Al hacer la pregunta: —zustedes roban?, la respuesta inmediata
fue —jno! La reaccién de los nifios fue tipica, la mayor parte de los seres humanos, aunque
en algdn momento se incurra en esta falta, no lo reconocen, tendemos a negarlo. Insist:
—znunca se han quedado con algo que no les pertenezca? En este momento, algunos em-
pezaron a dudar; iniciaron un recorrido mental para buscar en el recuerdo si alguna vez se
habian quedado con algo que no les perteneciera; otros iniciaron sus relatos diciendo que
‘cuando se habian encontrado algo tirado y no sabjan de quién era, se lo quedaron; unos
aceptaron que en ocasiones, aunque sabfan quién era el duefio de lo que encontraron, de
todas formas habfan decidido quedarse con el objeto.
Cuidé que mi expresién no denotara asombro, juicio 0 sancién, de to contrario los
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