DICTADURA DE MIGUEL PRIMO DE RIVERA: CAUSAS Y DIRECTORIO
MILITAR
El golpe de estado de 1923 ratifica el fin de medio siglo de gobierno civil en
España. Los golpistas a penas encontraron oposición al levantamiento, como consecuencia de la indiferencia de la población ante el desprestigio en el que había caído el sistema de turnos canovista (pucherazo y corrupción). Por otro lado, los sectores más conservadores del país (alta burguesía, Iglesia, ejército...), fueron abiertamente favorables al pronunciamiento de Barcelona. Muchos temían un estallido revolucionario como el de Rusia en 1917 y veían en las propuestas de Primo, un remedio para contener la conflictividad social y evitar levantamientos.
La mala gestión de las posesiones españolas en Marruecos tras el tristemente
célebre desastre de Annual en 1921, fue otra de las causas del triunfo del golpe de Primo, ya que mucha gente entendía que en el prestigio militar del nuevo dictador podía encontrarse la solución al problema colonial.
Inspirándose en lo externo en el régimen fascista de Mussolini, y retomando
ciertas ideas regeneracionistas (necesidad de un cirujano de hierro), Primo de Rivera crea una dictadura sin un programa político definido, con la intención más bien, de acabar con lo que él consideraba que eran los males de la patria. El nuevo régimen, que rápidamente contó con el apoyo de la monarquía, se planteó más bien como un sistema transitorio, una especie de solución de urgencia que no pretendía un cambio radical (al estilo del fascismo por ejemplo), si no que se trataba más bien de un intento autoritario de poner orden.
Hasta 1925 se desarrolla la etapa conocida como Directorio Militar. Ocho
generales y un almirante ocupan los principales cargos del gobierno de la nación. Entre sus actuaciones políticas más inmediatas destacaron:
o Intento de erradicación del caciquismo. Se procesó a militares y
funcionarios corruptos; la intención no era crear un sistema nuevo, solo sanear el que había, nombrando directamente a los funcionarios desde Madrid (control autoritario no democrático del poder). o Restablecimiento del orden público tras años de violencia e inseguridad pública (pistolerismo, asesinatos intimidatorios, etc.). o Medidas contra el catalanismo político. Se prohibe el uso público de la lengua catalana. El régimen se muestra contrario a los nacionalismos periféricos, que entiende como un peligro para la desarticulación de España.
También se consigue la pacificación del Rif en Marruecos, tras la captura del
caudillo militar Abd-el-Krim: la exitosa colaboración franco-española en el conflicto se salda con el aumento de la popularidad y el prestigio político de Primo.