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Amatista – Una piedra especial de sanación.

Las astrogemas son casas de poder concentrado de rayos cósmicos. Un tipo de


rayo en particular esta siempre siendo emitido de la gema específica, de forma
permanente. Los nueve planetas están relacionados a las nueve astrogemas y nueve tipos
de vibraciones de color se producen por usar tales gemas. Una de ellas es la popular
amatista la cual se usa para curar enfermedades crónicas. El amatista emite rayos
cósmicos violetas cuya onda de longitud es la más pequeña en comparación con los otros
rayos cósmicos. Se origina en el grupo de cuarzos violáceos. La longitud de onda corta le
da el poder de penetración profunda en los objetos que entran en contacto con ella.

Enfermedades, incomodidades y sufrimiento doloroso entran al cuerpo cuando


estos rayos violetas son disminuidos debido a las aflicciones de Saturno. Este rayo cósmico
es responsable de la excreción de venenos fuera del cuerpo en forma de sudor, orina,
heces, saliva y pus. Cuando hay una carencia de este rayo en el cerebro te sientes
cansado, fatigado y deprimido debido a la contaminación de los venenos en la sangre.

Estos venenos son la base de la formación de las enfermedades. El cuerpo produce


18 tipos de toxinas y si no se expulsan de forma apropiada se depositan en los varios
centros nerviosos o plexos.

El amatista exuda rayos violetas de alta calidad para el cuerpo y de esa manera es
capaz de expulsar esos venenos que han sido acumulados en el cerebro. Amatista produce
las mismas vibraciones cósmicas (rayos alfa) que están disponibles en el crepúsculo tanto
del amanecer como del atardecer en los cuales la mente se purifica y se calma. Prana
extra es provisto para curar las enfermedades. La agitación mental se detiene a medida
que la mente se interioriza. Las amatistas pueden usar todo tipo de adicciones.

La amatista es una gran piedra curativa para las enfermedades, evitar adicciones,
traer paz y armonía en los desordenes psicosomaáticos y aumentar el poder
inmunológico. Los rayos violetas incrementados en las células de nuestro cuerpo y cerebro
también aumentan la longevidad.

Tomado de: Folleto Trinidad Hanuman Datta Mala volumen 2


julio 2005 Nro 2

Enseñanzas de Sri Ganapati Sachchidananda Swamiji

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