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Haciendo frente a la precariedad irremediable. Reseña libro de Remedios Zafra


"El entusiasmo". Revista Iglesia Viva, "Capital digital.Trabajo desigual".

Article · October 2018

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Montserrat Escribano-Cárcel
University of Valencia/ Facultad de Teología San Vicente Ferrer
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Iglesia Viva
Nº 275, julio-septiembre 2018
pp. 153-157
© Asociación Iglesia Viva
ISSN. 0210-1114

Haciendo frente a la precariedad


irremediable
LIBROS Remedios Zafra
– El entusiasmo. Precariedad y trabajo creativo en la era digital.
Anagrama, Barcelona 2017, 264 páginas

Montserrat Escribano Cárcel. Consejo de Dirección de Iglesia Viva.

Comenzamos a percibir cada vez más el impacto que las tec-


nologías tienen sobre nuestras vidas personales y sobre los traba-
jos que desempeñamos. Su presencia nos inquieta y el escepticis-
mo y la incertidumbre, junto con grandes dosis de preocupación,
acompañan, a modo de sombra, todo aquello que pone en rela-
ción la tríada: empleo, tecnologías y futuro. La modernidad, como
señalan Harmut Rosa y Judy Wacjam, ha supuesto una aceleración
tecnológica, de cambios y prácticas sociales que han apresurado
nuestros ritmos vitales1.
A menudo, cuando nombramos esta tríada, hablamos de
empleabilidad, de cifras, de índices de medición, de trabajos que
pronto van a evaporarse, de tecnologías que prometen acelerar
los procesos industriales o de futuros inciertos que poco tienen
de idílicos. Es como si las vidas, los cuerpos, las emociones de las
personas que trabajan y crean no tuvieran cabida en los análisis
hechos por “los expertos”. Entre sus informes, estudios, gráficas
y propuestas no encuentran por dónde colarse para hacer apari-
ción las emociones o los deseos. Tampoco el entusiasmo, la frus-

1 Hartmut Rosa. (2016). Alienación y aceleración. Hacia una teoría crítica de la


temporalidad en la modernidad tardía. Katz, Madrid; Judy Wacjman. (2017).
Esclavos del tiempo. Vidas aceleradas en la era del capitalismo digital. Paidós,
Barcelona.

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LIBROS Haciendo frente a la precariedad irremediable

tración, el fracaso o las expectativas son espacios que habitamos, nuestros cuer-
consideradas ítems relevantes para ser pos vulnerables y las preocupaciones: y
incluidos en sus análisis laborales. los gozos que las rodean. Entre esa coti-
Sin embargo, Remedios Zafra fija su dianidad aflora el entusiasmo que partici-
mirada y su reflexión en las emociones pa de una realidad económica donde
encarnadas de aquellos y aquellas que prima la lógica de la visibilidad y la acu-
comparten el deseo de crear y producir mulación exponencial.
cultura. Como ella dice: “No olvido que Muchas de las reflexiones de esta
quienes crean tienen cuerpo. Un cuerpo obra coinciden con algunas de las entre-
que habita lugares con identidad y que lazadas entre los artículos de este núme-
transita espacios” (p. 21). Por ello, en ro. Una es, por ejemplo, la comprensión
esta obra propone un acercamiento críti- que tenemos del tiempo que habitamos.
co y corporal a los modos actuales de Esta autora subraya que la instrumentali-
creación. Sitúa su reflexión tras la apari- zación del entusiasmo y de la pasión
ción de Internet y en cómo se tradujo en creadora queda definida por la caduci-
una ventana virtual que nos abriría a un dad que impregna la precariedad laboral
mundo de conocimiento y de infinitas contemporánea. En un tiempo en el que
posibilidades. se desdibuja lo que es la vida real de la
La protagonista es Sibila y toma el virtual, nuestra presencia en las redes se
nombre de aquellos personajes mitológi- define siempre como voluble. Pero esta
cos que tenían capacidad para predecir presencia que hace aparición en las pan-
el futuro. Ella comparte con otras muchas tallas siempre conectadas es una activi-
la motivación de un futuro menos condi- dad creciente que hipervisibiliza emocio-
cionado por la vulnerabilidad económica nes y estados de ánimo. Volcamos nues-
y sostenido por: “«unos ganan siempre y tra interioridad e incluso esperamos que,
otros se sirven del entusiasmo y la voca- de modo profesional, alguien descubra la
ción» justificando que se trabaje gratis o genialidad que mostramos y a cambio
se pague por trabajar” (p. 218). Buscan nos dé un like o una posibilidad que sos-
vivir de la investigación, de un trabajo tenga nuestros esfuerzos y desvelos.
remunerado que requiera creatividad o El exceso que condiciona la volatili-
que tenga que ver con la producción cul- dad de las redes crea también la predo-
tural. Y es que en el propio descubri- minancia de «lo mucho». El pago por
miento de aquello que siempre quisieron este exceso es ser visto e inscrito en la
hacer reside también su entusiasmo lógica de los criterios del mercado. Al
actuando a modo de motor. mismo tiempo, compartimos la ansiedad
Se trata de una fuerza emocional que que provoca el deseo de querer consu-
sostiene la angustia ante la proximidad mir glotonamente y que nos lleva, descri-
de los plazos de entrega, de las noches be Zafra, a guardar y a acumular en
sin dormir, del agotamiento travestido y nubes enormes cantidades de datos digi-
de una vida que se descubre en compe- tales.
tencia siempre con otras con un currícu- Mientras esto sucede, la exposición
lum parecido. El análisis de esa pasión de vidas siempre constante y siempre
recorre las páginas de la última obra de disponibles se convierte, en esta era digi-
Zafra que como dice, está atravesada, tal, en datos mesurables y cuantificables
como toda creación, por las cosas coti- por el mercado. El peligro, según el filó-
dianas de la vida como son el dinero, los sofo Byung-Chul Han, es que trasparen-

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LIBROS Montserrat Escribano Cárcel

tar y exponer de modo continuo nuestra aspectos de no valor social, de flexibilidad


vida aliente nuevas formas de totalitaris- infinita, de invisibilidad”5 (p. 186). Esta
mo digital2. Del mismo modo es otra la modalidad histórica concuerda con una
filósofa que advierte que, en este siste- dura defensa ideológica de la responsabi-
ma liberalizador de instituciones, pero al lidad individual que exige a cada cual que
mismo tiempo de pensiones, hogares y maximice su valor de mercado como pro-
dificultades para conseguir empleos “nos pósito vital. Sibila, sabe que “existe una
enfrentamos de una manera novedosa a diferencia entre pagar con reconocimien-
la idea de que a ciertos sectores de la to a un rico que a un pobre” y “lo que
población se los considere desechables”3 para uno se convierte en prestigio para la
(p. 217). Este modo de comprender la otra es frustración” (p. 203).
realidad coincide también con la del papa El libro de Remedios Zafra no busca
Francisco y con sociólogas como Saskia solo describir críticamente la situación
Sassen4. Y es que la cadena que supone de muchas y muchos en estados de vida
para tantas Sibilas: formación, trabajo, precarios, tanto económicos como vita-
revisión, plazos de entrega y evaluación les aplazados, pretende alertar también
deja hueco solo para el «estar», «posicio- de que podemos estar normalizando
narse» y «tener». Estas cadenas que atan situaciones de desigualdad. Lo hace
se alargan en el tiempo frente a una “vida echando mano de un método necesario
real que se aplazó a un futuro que siem- y curioso: un antropológico juego de
pre se pospone, mientras los jóvenes lentes. Con las lentes observa con curio-
envejecen como becarios, interinos frus- sidad los conflictos y ambigüedades que
trados, cuidadoras, camareros y teleope- recorren nuestra vida entusiasta. Las
radoras” (p. 38). El entusiasmo alimenta lentes le permiten discernir entre un
así imaginaciones, pero a la vez puede entusiasmo fingido y otro íntimo y escon-
neutralizar movilizaciones, llevándonos a dido “que lucha por no claudicar y se
la confusión de que vida y trabajo son reclama libre” (p. 226).
intercambiables. Este último trabajo de Remedios Zafra
Sibila, según Cristina Morini, “pertene- se aproxima, sin saberlo quizá, a otras
ce a la misma modalidad histórica que ha tareas, como son las teologías contextua-
encarnado la explotación total de la per- les. Con frecuencia elaboradas por Sibilas
sona por parte del capitalismo, esta figura precarias e invisibilizadas que todavía
es femenina. La explotación ha sido siem- creen en la «búsqueda de la verdad»
pre y es una apropiación indiscriminada como aliento capaz de empoderar a la
de cansancio, tiempo, cuerpo y saberes ciudadanía y de espantar, aunque sea
individuales. […] tiene además fuertes momentáneamente, aquellos “que no
ocultan su corte fascista y dogmático,
capaces de apropiarse sin rubor de la voz
2 Byung-Chul Han. (2014). Psicopolítica. Neolibera- del pueblo y de la frustración, racistas,
lismo y nuevas técnicas de poder. Herder, Barce-
lona, pp. 85-100.
machistas y homófobos, les atemoriza la
novedad y azuzan de manera obsesiva la
3 Judith Butler. (2017). Cuerpos aliados y lucha po- idea de complot” (p. 231).
lítica. Hacia una teoría de la performativa de la
asamblea. Paidós, Barcelona.
4 Sassen, Saskia. (2017). "La pérdida masiva de 5 Cristina Morini. (2014). Por amor o a la fuerza.
hábitat. Nuevas motivaciones para la migración" Feminización del trabajo y biopolítica del cuerpo.
en Iglesia Viva, nº 270, pp. 15-17 principalmente. Traficantes de sueños, Madrid.

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En memoria de un jocista
LIBROS
que conjugó sindicalismo y cooperativismo

Compartimos el esfuerzo de recom- primera, la potencia de la imaginación. La


poner la solidaridad entre iguales y de segunda una transformación desde una
coser vínculos con otros y otras desde necesidad de profundización humana y,
una renovada responsabilidad social. En la última, la continua confianza en la
esta tarea común transitamos, al igual alianza. Por ello, ¡revisen sus entusias-
que Zafra, tres líneas compartidas. La mos!

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