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“La literatura produce en nosotros una metamorfosis: nuestra vida real se

expande y salimos a ser otros, a vivir experiencias que la ficción vuelve


nuestras”; “Las mentiras de la ficción no son gratuitas: llenan las insuficiencias
de la vida”.

Rebelión en la granja

Para entender la sátira de Orwell es importante conocer el contexto histórico


en el que se vivía. En 1917 se inicia la Revolución Rusa que llevó a la caída al Zar
Nicolás II y al establecimiento del comunismo en Rusia (La cual pasó a
denominarse Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas o URSS a partir de
1922), este régimen duró hasta 1991. Los líderes de esta revolución fueron
Vladímir Ilich Ulianov (Lenin) y León Trotsky, que tomaron el poder mediante
las armas y establecieron un Estado Obrero bajo la dictadura del proletariado,
basado en los ideales del Marxismo y la eliminación de la propiedad privada.
Tras la muerte de Lenin, Iósif Stalin asumió el control de la URSS y del Partido
Comunista de la Unión Soviética estableciendo un modelo de reformas desde
arriba y de “socialismo en un solo país” en detrimento de la teoría de la
revolución permanente de Trotsky. Esto significó un sistema de purgas
políticas, y Trotsky, sus simpatizantes y otros comunistas democráticos y
anarquistas fueron perseguidos, encarcelados y asesinados.

Orwell conocía de cerca el partido comunista y sus doctrinas y sabía lo que


estaba pasando en Rusia. Sin embargo, en aquella época las críticas al
comunismo soviético no eran populares, ya que la URSS se consideraba un
bastión contra el nazismo y mantenía buenas relaciones con el gobierno inglés.
Tuvo serios problemas de censura, ya que por aquella época Inglaterra era
aliada de la Unión Soviética, y la despiadada crítica al gobierno de Stalin que
suponía el libro no gustó al gobierno inglés que no quería tensiones con Rusia.

Es una fábula satírica escrita por George Orwell en 1945 acerca de una granja
donde los animales toman el poder y forman su propio gobierno, que acabará
convirtiéndose en una tiranía brutal.

Se considera una crítica velada de la revolución rusa y a la corrupción del


socialismo soviético en los tiempos de Stalin.

El tema principal de la obra es el abuso de poder, y cómo este corrompe a los


que lo poseen, llevando a la avaricia, la discriminación y la traición. Así, los
cerdos de Rebelión en la granja usan su poder para manipular y engañar a los
otros animales y afianzar su dominio sobre ellos.

Rebelión en la granja supone también una fuerte crítica al gobierno de la URSS


y generalmente se considera una fábula que describe los fallos del comunismo.

Después de la Segunda Guerra Mundial, el respeto hacia el comunismo ruso


como forma de gobierno había crecido considerablemente, y George Orwell
trató de mostrar a través de su libro que Rusia no era una sociedad socialista
verdadera, sino una tiranía despiadada.

A pesar de ello, dado el carácter abierto y universal de su mensaje, la fábula


trasciende ese marco y resulta una crítica efectiva a la corrupción que supone
el abuso de poder en cualquier sociedad.

Aborda también la crítica contra los totalitarismos de cualquier especie y


examina los desplazamientos y manipulaciones que sufre la verdad histórica en
los momentos de transformación política.
Otro tema presente es el uso de la fuerza y la violencia como medio de control
social, por ejemplo, en el capítulo VII donde se describen las persecuciones y el
exterminio de la oposición interna dentro de la granja.

El libro cuenta la historia de la granja Manor cuyo dueño, el señor Jones, es


aficionado a la bebida y descuida a los animales. Estos se reúnen a escucha el
discurso del que consideran el animal más sabio de la granja, el cerdo Viejo
Mayor.

Mayor les habla de su sueño de libertad donde todos los animales serán
iguales y tendrán los mismos derechos y les dice que para conseguir ese sueño
deben liberarse del yugo opresor de los humanos. En su discurso les enseña
una vieja canción de su infancia, “Bestias de Inglaterra” que habla de un mundo
en que los animales son libres y no tienen que trabajar para los humanos.

En ese mundo los animales disfrutan del fruto de su trabajo y si hay


abundancia, es para todos, y ya no pasarían hambre ni frío. Después del
discurso los cerdos hacen una votación donde deciden que todos los animales
son amigos y el hombre enemigo.

Un día después que el señor Jones deje de darles de comer los animales se
rebelan y hay una pelea en la granja. Dirigidos por dos cerdos jóvenes
Snowball y Napoleón, los animales ganan y expulsan al granjero Jones y a sus
empleados de la granja. Sin embargo, el Viejo Mayor muere antes de ver el
triunfo.

Tras la victoria los animales se organizan bajo las ideas del Viejo Mayor, a las
que llaman “Animalismo” y los cerdos se establecen como líderes. Aprenden a
leer y a escribir y cambian el letrero de la granja por el de Granja de los
animales. En la pared escriben las 7 reglas que estableció el Viejo Mayor antes
de morir y que consideran los 7 mandamientos de la granja:

Todo lo que camina sobre dos pies es enemigo.

Todo lo que camina sobre cuatro patas, o tenga alas, es un amigo.

Ningún animal usará ropa.

Ningún animal beberá alcohol.

Ningún animal matará a otro animal.

Todos los animales son iguales.

Al principio todo funciona mejor que antes. Los animales trabajan más porque
no están esclavizados, saben que disfrutarán de los frutos de su trabajo y
tienen una buena cosecha. Sin embargo, pronto empiezan los problemas con
los cerdos, que se han autoerigido los líderes y empiezan a abusar de su poder.
Se quedan con lo mejor de la cosecha y se comen todas las manzanas y la
leche, diciendo que las necesitan para pensar.

Se produce un ataque a la granja por parte del Señor Jones, que quiere
recuperarla. Los animales se defienden y detienen el ataque. Boxer, el fuerte
caballo de tiro y Snowball reciben medallas por su valentía en la batalla. Sin
embargo, pronto comienzan las peleas por el poder entre Napoleón y
Snowball. Por un lado, Snowball quiere construir un molino de viento para que
haya electricidad en la granja. Napoleón se opone y durante la reunión que
organiza Snowball para explicar su plan a los otros animales, Napoleón, que ha
criado a los perros de la granja para obedecerle, los lanza sobre él con la
intención de matarlo, aunque Snowball logra escapar y huye de la granja.
En el siguiente año Napoleón se convierte en un auténtico dictador, utilizando
a los perros como su policía personal contra todo el que se le oponga y
rompiendo cada vez más los mandamientos que iniciaron la revolución.
Ordena construir el molino de viento que inventó Snowball y cuando una
tormenta lo destruye hace responsable a Snowball y lo culpa de lo sucedido
delante de todos los animales, acusándole de traidor. Napoleón ordena
reconstruir de nuevo el molino, tarea en la que resulta fundamental el caballo
Boxer y su fuerza.

La tiranía de Napoleón aumenta hasta el punto de forzar a animales inocentes


a “confesar” falsos delitos de traición y hacer que sus perros los maten delante
de toda la granja. Después él y los otros cerdos comienzan a dormir en camas
y a beber alcohol. Los mandamientos empiezan a ser modificados para
justificar el comportamiento de los cerdos, así “Ningún animal beberá alcohol”
se convierte en “Ningún animal beberá alcohol en exceso”.

Después de que el molino esté terminado, la granja sufre un ataque por parte
del granjero vecino Frederick, con el que Napoleón había estado comerciando.
Los animales ganan la batalla, pero el molino es nuevamente destruido. Boxer
ofrece de nuevo se fuerza para construir de nuevo el molino, pero el trabajo
agotador al que se somete le provoca un colapso y finalmente el excesivo
esfuerzo que ha realizado le provoca la muerte. Napoleón decide entonces
venderlo a una fábrica donde fabricarán pegamento con su cadáver. Ante las
protestas indignadas de los otros animales, el cerdo Squaler, portavoz de
Napoleón les cuenta que Boxer fue llevado a una clínica veterinaria donde
murió pacíficamente y todos deciden creerle.
Los años pasan y La Granja de los Animales se expande con la compra de
Napoleón de dos campos a otro granjero vecino, Pilkington. Sin embargo, la
vida para los animales que no sean cerdos es cada vez más dura, ya que estos
se llevan la mejor comida y todas las comodidades.

Los cerdos pronto comienzan a andar a dos patas, imitando a los humanos y
llevan ropa humana. Los antiguos mandamientos han desaparecido y se han
reducido a una sola ley:

“Todos los animales son iguales, pero unos más iguales que otros”

La novela termina con Pilkington y los cerdos bebiendo en la casa de Jones.


Napoleón ha cambiado el nombre de la granja a Granja Manor y juega a las
cartas con Pilkington, ambos intentando hacerse trampas mutuamente. El resto
de los animales mira por la ventana y son incapaces de distinguir a los cerdos
de los humanos.

Personajes

Viejo Mayor: Es un cerdo sabio que deseaba un mundo donde los animales
vivieran dignamente. La Rebelión de los animales se basa en sus ideas, pero
muere antes de ver su triunfo. La figura de Mayor, el líder respetado por todos,
se ha asociado frecuentemente con Lenin, con referencias claras en la novela
como el relato del desentierro de cráneo de Mayor para su exposición pública,
en clara referencia a la momificación y exposición de Lenin. Su carácter afable y
en busca de un mundo más justo también ha hecho que se le relacione con
Karl Marx, el ideólogo del comunismo, cuyas ideas de igualdad y defensa del
proletariado fueron poco a poco degenerando bajo el gobierno de Stalin.
Snowball: Es el otro aspirante a líder de la granja, brillante, valiente y lleno de
proyectos, se le suele comparar con León Trotsky, que lideró al ejército rojo en
la URSS, al igual que Snowball lidera a los animales contra el granjero Jones. De
manera semejante a la huida de Snowball de los perros que Napoleón manda
tras él, Trotsky sufrió la persecución por parte de la policía de Stalin, acusado
de traidor, siendo finalmente asesinado en el exilio.

Napoleón: Es uno de los cerdos, de fuerte personalidad y que tiende a salirse


con la suya. Junto a Snowball lidera la rebelión contra Jones. Después del
triunfo de la revolución, comienza a controlar todos los aspectos de la granja
hasta que se convierte en un tirano despiadado. Orwell le da, incluido el
nombre, todas las características de los dictadores totalitarios, aunque su
semejanza con el dictador ruso Stalin es la más clara. Al igual que él, la falta de
Brillantez de Napoleón no le impide ser un gran conspirador y tener un
carácter fuerte y cruel, que finalmente le llevan al poder. A partir de ahí, como
haría Stalin, acomete una serie de medidas de planificación (similares los planes
quinquenales en Rusia) de la economía de la granja, personificadas sobre todo
en la construcción de un molino (idea de Snowball que Napoleón primero
rechaza y después se apropia), y persigue y asesina a los que considera un
peligro para su gobierno, como en las tristemente famosas purgas durante el
gobierno de Stalin.

Squaler: Uno de los cerdos que se convierte en el lugarteniente y portavoz de


Napoleón. A través del libro se muestra su habilidad para manipular a los
demás animales con su convincente retórica. Representa los mecanismos de
propaganda que solía utilizar el gobierno de Stalin, al que, al igual que a
napoleón, se le presentaba como un idealista buscando siempre el bien del
pueblo.
Boxer: Un caballo de tiro, trabajador, fuerte y dedicado, que sirve con todo su
ser a la revolución de los animales, solo para ser vendido por Napoleón a una
fábrica de pegamento tras morir de puro agotamiento trabajando para
reconstruir el molino. Boxer representaría al proletariado de Rusia, los
trabajadores que se suponía eran el alma de la revolución y que para Orwell
habrían sido engañados y traicionados por los líderes del partido comunista.

Mollie: Es la yegua que se encargaba de tirar del carro del señor Jones.
Presumida y superficial, prefiere lazos y azúcar antes que ideas revolucionarias
y finalmente abandona la granja con la promesa de una vida más agradable.
Representa a la clase media de Rusia, que aceptaron los excesos del gobierno
con tal de mantener una posición privilegiada.

Clover: Es una yegua de tiro, amiga de Boxer y que intenta ayudarle cuando
cae rendido de agotamiento.

Benjamín: Es un burro, amigo de Boxer. Cínico y pesimista, no cree en la


Revolución. Representa a los intelectuales. Se muestra siempre cáustico y muy
negativo respecto a las intenciones de los cerdos, pero al final no se opone a
ellos y consiente sus excesos.

Los perros: Al principio hay tres perros en la granja, Bluebell, Jessie y Pincher.
Napoleón se queda con sus cachorros y los cría y entrena para ser sus perros
guardianes. Los perros de Napoleon representan a la KGB, la policía secreta de
Stalin, que utilizó para perseguir y asesinar a la oposición.

Moisés, el cuervo: Era la mascota del señor jones y cuenta historias a los
animales acerca de una tierra paradisiaca llamada “Monte Azúcar”, al que van
los animales cuando mueren y donde no existe el sufrimiento. Representa a la
religión y sus promesas de un mundo mejor en la otra vida.
Las ovejas y las gallinas: Son la mayoría de la granja y representan al
campesinado ruso, el 85% de la población. Se caracterizan por ser estúpidas y
totalmente acríticas respecto a las medidas de los cerdos. Aunque no se pueda
considerar estúpido al campesinado ruso, sí que es cierto que en su mayoría
era una población analfabeta y desideologizada.

El señor Jones: El dueño de la granja Manor, bebedor y descuidado con la


granja, es expulsado de la misma por sus propios animales. Representaría al
Zar Nicolás II de Rusia, que, del mismo modo que el granjero Jones tenía
dominio completo sobre la granja, se consideraba el líder único de Rusia. En la
revolución de 1917 el pueblo se subleva contra él, culpándole del hambre y la
miseria que sufrían y de la destrucción provocada por la primera guerra
mundial.

Frederick y Pilkington: Son los otros granjeros, y representan a Adolf Hitler y a


Winston Churchill respectivamente. Al igual que los granjeros respetan a la
granja de los animales por su prosperidad y fuerza, pero en el fondo la odia, el
mundo alrededor de la URSS, admiraba su progreso económico y temían su
poder militar, aunque la mayor parte de Europa y EE.UU. se oponían al
comunismo.

La vida es sueño

Fue escrita durante el reinado de Felipe IV, perteneciente a la casa real de los
Austrias (o de Habsburgo), ejerciendo el gobierno efectivo su valido, el conde-
duque de Olivares. España entonces mantiene guerras en Flandes y otras
posesiones europeas contra Inglaterra y Francia y está perdiendo gran parte
del poderío territorial heredado de Carlos I o de Felipe II.
En ese contexto histórico de frentes bélicos y decadencia del imperio español,
de inmovilismo social, de vuelta a una religiosidad tenebrista, de bancarrota de
la Corona, asistimos al nacimiento del arte barroco, un movimiento artístico
deslumbrante que trastoca lo racional, lo sencillo y lo clásico del renacimiento
en un gusto por lo desmesurado, lo artificioso y lo recargado.

Las líneas del teatro Barroco español del siglo de oro, que se pueden adaptar a
La Vida es Sueño son:

Tiene una finalidad de entretenimiento

Confirma la regla de las tres unidades: unidad de acción, unidad de lugar y


unidad de tiempo

División del drama en tres actos o escenas (o jornadas), respondiendo al


esquema planteamiento, nudo y desenlace

El uso de la métrica: es un teatro en verso

El lenguaje ha de ser cuidado y decoroso, pero profuso en el uso de metáforas


y otras figuras retoricas

Los temas principales van a ser la honra y el amor, tocando a veces el tema
satírico.

Esta obra tiene una temática filosófica: La libertad del hombre o la


predestinación divina.

La concepción de la vida como un sueño es muy antigua, existiendo referencias


en el pensamiento hindú, la mística persa, la moral budista, la tradición
judeocristiana y la filosofía griega.
Según Platón el hombre vive en un mundo de sueños, de tinieblas, cautivo en
una cueva de la que sólo podrá liberarse tendiendo hacia el bien; únicamente
entonces el hombre desistirá de la materia y llegará a la luz.

El influjo de esta concepción platónica en la obra es evidente: Segismundo vive


al principio dentro de una cárcel, de una caverna, donde permanece en la más
completa oscuridad por el desconocimiento de sí mismo; sólo cuando es capaz
de saber quién es consigue el triunfo, la luz.

Calderón adoptó la forma del drama filosófico para abordar un gran caudal de
temas confluyentes en este foco y en este tópico literario, platónico en su raíz
occidental:

Como drama religioso, aborda los problemas de caída o pecado original y


expiación

Como poema filosófico, resuelve el destino del hombre y la fuente del


conocimiento y los problemas aparejado del libre albedrio y la predestinación

Como lección moral propia del barroco y Contrarreforma, desengaña sobre las
ilusiones y las vanidades de este mundo

Como drama educativo y poético, instruye sobre lo que es el hombre sin el


freno de la educación

Como protesta revolucionaria, ataca el principio absolutista y ajurídico de la


orden reservada que sofoca la libertad bajo el pretexto de evitar sus extravíos

Como lección política “porque en batallas tales/ los que vencen son leales/ los
vencidos, los traidores”, enseña a los pueblos a lo que conduce el mal uso de la
libertad y las guerras civiles

Combate, además, la locura de los presagios y juicios de la astrología


Describe los progresos que realiza el hombre y la humanidad entre
desengaños y deseos

Prueba que las pasiones comprimidas por un ascetismo no libre, sino forzado,
estallan con tanta más fuerza cuanto mayor es la represión

Desde un criterio psicoanalítico, expresa la superación o sublimación de los


conflictos edípicos

Inspira a la filosofía del solipsismo que ha negado realidad al mundo exterior.


Todo esto y mucho más, si más se examina, es La vida es sueño

La obra consta de tres actos, la primera jornada tiene 8 escenas, se desempeña


como contextualizador, en la segunda que cuenta con 19 escenas aparece el
conflicto (nudo o problema) y en la tercera con 14 escenas tiene lugar el
desenlace o resolución.

Personajes

Segismundo: Personaje principal, pretexto de esta obra. En un principio como


hombre-fiera, se lo describe como alma reprimida, muy reflexivo, alterado por
su larga reclusión. A lo largo de la obra va evolucionando: al principio busca la
venganza, comportándose en forma cruel y despiadada, pero luego aparecen
en él ciertos rasgos de humanidad (al perdonarle la vida a Basilio demuestra
que ha cambiado y logra vencer su destino)

Rosaura: Personaje principal femenino, que une fuerzas con Segismundo para
impedir que Astolfo se convierta en rey y así evitar que se case con Estrella.
Cuando llega desde Moscovia a la corte, oculta su identidad haciéndose pasar
por un criado. Durante la obra descubre que es hija del lacayo de Segismundo,
Clotaldo. Finalmente, declarada noble puede casarse con Astolfo.
Basilio: rey de Polonia, padre de Segismundo. Es un hombre preocupado por lo
que pueda sucederle a su pueblo. Es débil e indeciso. Sus campos son las
matemáticas, las ciencias y la astrología, no demostrando realmente una
sabiduría orientada hacia el gobierno. Teme a Segismundo desde que ha
escuchado el oráculo que le dice el hado. Al final admite sus errores.

Clotaldo: Lacayo de Basilio. Es el único, aparte del rey, que puede ver a
Segismundo. Le ha enseñado todo lo que sabe. Se muestra como un personaje
anciano, que ha vivido anteriormente aventuras amorosas (es el padre secreto
de Rosaura). Como personaje-tipo representa la superstición.

Astolfo: Duque de Moscovia, con el que Basilio hace un trato para mantener el
trono de Polonia. Está dispuesto a casarse con Estrella a pesar de amar a
Rosaura.

Estrella: Bella y noble infanta de la corte de Basilio dispuesta a casarse con


Astolfo para heredar el trono (Astolfo y Estrella son primos y sobrinos de
Basilio)

Clarín: Compañero de Rosaura. Es muy ingenioso, responde al arquetipo del


cómico.

Acto I

Se inicia con Rosaura vestida de hombre y Clarín que llegan hasta la cueva. En
el momento en que entran Segismundo pronuncia su primer monologo. Y
cuando el preso se da cuenta que no está solo, intenta matar a Rosaura, pero
luego le perdona la vida. Irrumpe Clotaldo, seguidor de Basilio y Lacayo de
Segismundo y detiene a los dos viajeros por encontrarse en lugar prohibido.
Clotaldo entonces reconoce la espada que ciñe Rosaura: es la espada que
había dejado a la madre de Rosaura (Viola), abandonándola. Sin embargo,
Clotaldo no reconoce aún ante todos a quien cree ser su hijo y encubre lo
descubierto, diciendo llevar ante el rey a su hijo (Rosaura) y al gracioso, Clarín.

El rey Basilio, revela la existencia de su hijo, Segismundo, que había provocado


la muerte de la reina Clorilene al nacer. Cuenta el terrible nacimiento de su hijo
y explica lo que vaticinó al leer en las estrellas: Segismundo sería un rey tirano y
cruel. Basilio decidió hacer una prueba y dar una oportunidad a su hijo; lo
llevarían a palacio, pero de manera que si efectivamente resulta ser un tirano
su estancia en el palacio le parezca tan solo un sueño. Si Segismundo resulta
tener templanza y razón, será el heredero del trono; si no, lo serán Estrella y
Astolfo, unidos por matrimonio (los siguientes en línea de sucesión).

Tras confesar al pueblo la existencia de su hijo deja libres a Rosaura y a Clarín.


Pero Clotaldo quiere saber quién en el enemigo de Rosaura, quien vino a estas
tierras para vengas un agravio y preguntando averigua que es el sobrino del
rey, Astolfo, cuyo casamiento con Estrella quiere evitar Rosaura.

Acto II

Basilio ha ideado un engaño para ver si Segismundo es realmente cruel: lo


llevan dormido al palacio y le permiten ver cuál sería su destino, pero
guardándose la posibilidad de hacerle creer que todo fue un sueño, en caso de
que se demuestre malvado. Rosaura entra de dama de Estrella con el falso
nombre de Astrea. Segismundo se comporta como un príncipe déspota
lanzando un criado por la ventana al poco de despertar, intenta forzar a
Rosaura, hiere a Clotaldo que sale en ayuda de su hija y se enzarza en una
pelea a espada con Astolfo. En vista del comportamiento, el rey Basilio decide
volver a dormirlo y llevarlo de vuelta a la torre. Astolfo corteja a Estrella, pues
con su unión compartirían la sucesión en lugar de competir por ella, una vez
que Segismundo ha quedado fuera de juego. Astolfo descubre que Astrea es
en realidad Rosaura y rompen definitivamente.

La jornada termina con el monologo de Segismundo encerrado nuevamente


en la torre. Los últimos versos de este monologo son los que dan nombre a la
obra:

¿Qué es la vida? Un frenesí

¿Qué es la vida? Una ilusión,


una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,

Y los sueños, sueños son.

Acto III

El pueblo de Polonia, al saber que tiene un príncipe heredero, organiza una


revuelta y libera a Segismundo de su torre. Segismundo libera a Clotaldo
permitiéndole ir con el rey, demostrando que ha recapacitado sobre su
comportamiento.

Las tropas del rey y las del príncipe se enfrentan y vencen a las de Segismundo,
se encuentran ambos cara a cara y el rey se pone en manos de Segismundo,
pero este se postra ante los pies del rey, aceptando incluso el hecho de que el
rey, Basilio, quiera darle muerte debido a que se levantó contra él. Sin
embargo, en vista de la generosa actitud de Segismundo el Rey le deja el
trono.
Soliloquio de Segismundo está separado en siete décimas a excepción del
primer verso. Cada décima es octosílaba y en cada una de ellas se encuentra
un planteo filosófico de los grandes debates entre la reforma protestante y la
contrarreforma católica.

Decima uno y dos: La primera jornada ocurre en la torre de Segismundo a


donde llegan Rosaura y Clarín después de una travesía por un monte. La
segunda jornada se desarrolla en el palacio de Basilio y es donde Segismundo
toma el poder sobre Polonia, al final de esta jornada es devuelto a la torre por
su padre. Este manejo de los sitios construye una oposición simétrica que es
quebrantada en la última jornada cuando surge el campo de batalla donde se
enfrentan padre e hijo en una fervorosa batalla por el poder, donde termina
victorioso el hijo y persona a su padre.

Religión: Calderón plantea los problemas surgidos en su tiempo, los de libre


albedrio, que es sustentado por la iglesia, y predestinación, sustentado por los
reformistas protestantes. Ambas tesis tienen una postura bíblica. La resolución
de la tragedia indicaría la posición del autor a favor del grupo
contrarreformista. Se lo presenta a Segismundo como una bestia, pero en los
soliloquios deja ver su intelecto, debido a que Clotaldo era el encargado de
educarlo. Se hace referencia al minotauro de la mitología griega a través de la
alusión mitológica, en la cual nunca menciona el nombre del monstruo, sino
que se refiere a donde estaba encerrado: el laberinto. Ambos se encuentran
prisioneros y se los presenta como bestias. Menciona al volcán Etna cuando
quiere mostrar la magnitud de su desilusión y enojo.

Dualidad: La representación de la civilización y la barbarie en Segismundo es la


dualidad, un tema típico del barroco.
Decima tres: En el monologo el tema más importante es la libertad y el libre
albedrio, el autor lo trata haciendo que el personaje se compare con los
animales y haciendo mención de los 4 elementos.

Decima cuatro: En esta Segismundo se compara con un animal al que


denomina bruto. Comienza con una metáfora, luego hace referencia a Dios
mencionándolo como “docto pincel”. Cierra la décima con la pregunta retórica
¿Y yo, con mejor instinto/ tengo menos libertad? Está cuestionando a los cielos
por qué razón él que es un ser humano el cual según Segismundo tienen más
alma y más instinto que un animal no puede tener libertad.

Decima cinco: Se compara con un pez, insignificantes animalitos que viven en


el inmenso océano, siendo él la antítesis, una persona tan grande como una
bestia encerrada en un espacio tan reducido.

Decima seis: Hace alusión al arroyo, el cual contiene el elemento vital de todos
los seres, el agua. Se refiere a este como una culebra que serpentea las
planicies en busca de su fin, está destinado a su cauce durante toda su historia
y no tiene vida, tiene más libertad que él.

Decima siete: Última décima, utiliza la diseminación y recolección para concluir


y cerrar este soliloquio el cual va a dar a conocer la relación entre Segismundo,
Rosaura y Clarín. En esta no enteramos que Segismundo cree que todos los
hombres de la tierra están en la misma situación que él porque se pregunta
“¿Qué ley, justicia o razón/ negar a los hombres sabe/ privilegio tan suave/
excepción tan principal, / que Dios le ha dado a un cristal, / a un pez, a un
bruto y a un ave?” en esta última pregunta el personaje plantea un privilegio, el
cual se convierte en derecho cuando una persona nace, del cual él fue privado,
la libertad.
Elogio de la locura

Es un ensayo escrito por Erasmo Róterdam, está inspirado en “De triumpho


stultitiae” del italiano Faustino Perisauli.

Comienza con una loa satírica (un fragmento de virtuosa locura). Tras esto el
tono se ensombrece con una serie de discursos solemnes, en los que la
estulticia (ignorancia, necedad o estupidez de una persona) hace un elogio de
la ceguera y la demencia y en los que se realiza un examen satírico de las
supersticiones y de las practicas piadosas y corruptas de la iglesia católica, así
como de la locura de los pedantes (entre los que se incluye el propio Erasmo).

En la obra se hace una relación puntual de las “ventajas” de la Estulticia sobre la


razón; señala cuan felices son los hombres cuando viven arropados por la
necedad, situación de la que no escapan ni siquiera los Gramáticos, los
filósofos, los teólogos, los papas, los obispos germánicos, los reyes, ni los
príncipes. La estulticia se presenta ante un auditorio donde desarrolla un elogio
de sí misma, logrando que su sola presencia desarrugue entrecejos y produzca
cálidas sonrisas. Enumera una por una sus cualidades, vanagloriándose de que
sus muchos beneficios se reparten entre todo tipo de personas: desde el vulgo
que se contenta con pláticas de viejas, hasta los reyes y eclesiásticos que se
embriagan con toda clase de diversiones.

La estulticia da razón de sus orígenes (Las islas Afortunadas), de sus padres


(Pluto y Hebe) y del cortejo que la acompaña en su tarea de hacer más
agradable la vida del género humano (La Adulación, el amor propio, la
demencia, la pereza, la Molicie (comodidad y regalo moralmente excesivos en
la manera de vivir), el olvido y la voluptuosidad); se lamenta de quienes
reniegan de su nombre, pese a ser grandes beneficiarios de sus dones; efectúa
una sátira de los leguleyos y de los médicos; de los estudiosos exhibe su
desdén y patanerías, dejando en claro que las mujeres prefieren la compañía
de los necios; exhibe a los comerciantes, describiendo cómo son sus
indulgencias la llave para seguir cometiendo sus fechorías; del clero, desde los
mendicantes hasta el papa, muestra qué tan cerca están de la vanidad como
lejos de Jesucristo.

La locura se presenta como una diosa, hija de Pluto y de la juventud (Hebe),


criada por ebriedad y la ignorancia; entre sus compañeros fieles se encuentran
Philautia (el narcisismo), Kolakia (la adulación), Leteo (el olvido), Misoponia (la
pereza), Hedone (el placer), Anoia (la demencia), Tryphé (la irreflexión), Komos
(la intemperancia) y Eegretos Hypnos (el sueño profundo).

Rebelión en la granja, La vida es sueño y Elogio de la locura

“La literatura produce en nosotros una metamorfosis: nuestra vida real se


expande y salimos a ser otros, a vivir experiencias que la ficción vuelve
nuestras”; “Las mentiras de la ficción no son gratuitas: llenan las insuficiencias
de la vida”.

Un libro nos puede cambiar, llevar a nuestras mentes a lugares impensados,


abrir nuestros ojos a cosas que desconocíamos, cambiar nuestra forma de
pensar o ver el mundo. En el caso de estas tres obras fueron como un
despertar para un montón de gente cada uno en su tiempo y en su contexto
socio/histórico.

En rebelión en la granja Orwell critica un nuevo régimen, todo un nuevo grupo


que muchos consideraban un cambio favorable, expreso su punto de vista y le
mostro a la sociedad una cara distinta de lo que estaba aconteciendo en Rusia.
Se puede estar de acuerdo o no, pero no deja de ser una apertura más del
amplio abanico de ese hecho que estaba sucediendo. Con la vida es sueño
sucede algo similar, aproximadamente 300 años antes, también un conflicto
social/religioso, Calderón de la barca muestra su punto de vista y deja por
sentado de qué lado está, cuál es su ideología, su parecer. Y en Elogio la
Locura Róterdam glorifica lo que para la sociedad son pecados.

Los tres autores muestran en sus obras que las cosas no tienen que ser así
como nos son impuestas, que no todo es blanco o negro, abren nuestras
mentes para elegir lo que nos parece correcto, para tomar el camino que a
nosotros nos parezca mejor, sin miedo al repudio de la sociedad, que somos
libres de elegir y de pensar y que eso que para todos está bien no tiene serlo
para nosotros también por mandato cultural, así como lo que la sociedad
considera mal.

Los libros nos invitan a volar, a explorar nuevos mundos a vivir las historias
como si nosotros fuésemos los protagonistas, a vivir en carne propia lo que
pasa entre esas páginas, ya sea una aventura por el amazonas, un viaje del
alma por el infierno, un paseo por un pueblo fantasma o una granja que
satiriza la situación política de una región en el mundo (o fuera de él).
Enriquecen nuestras almas y nuestras mentes.

Nos hacen compañía en la soledad, nos llenan de esperanzas, de sueños, de


ideales, de experiencias, de fantasía, nos dan lo que no tenemos o incrementan
lo que sí.

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