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Tejido óseo

El tejido óseo es un tejido especializado del tejido conjuntivo, constituyente


principal de los huesos en los vertebrados. Está compuesto por células y
componentes extracelulares calcificados que forman la matriz ósea. Se
caracteriza por su rigidez y su gran resistencia a la tracción, compresión y a las
lesiones.
Se encuentra en la capa externa de los huesos largos formando la diáfisis, en el
exterior y en el interior de los huesos planos y en distintas zonas en los huesos
cortos, según cada hueso en concreto. Es un tejido duro, denso y frágil.
Características
 Es un tipo de tejido cuya matriz extracelular se halla mineralizada en su
mayor parte.
 El tejido óseo se caracteriza por su gran dureza y consistencia
 El tejido representa la parte más importante del esqueleto y a pesar de su
dureza y resistencia posee cierta elasticidad.
 Es uno de los tejidos del ser humano.
 Constituyente principal del esqueleto.
 Sirve para la protección de órganos.
 Sus células son osteoprogenitoras, osteoblastos, osteoclastos y
osteocitos
 Le da soporte estructural al cuerpo.

Clasificación
El tejido óseo se organiza de dos formas diferentes: tejido óseo esponjoso y
tejido óseo compacto. (En los huesos largos, la diáfisis está compuesta por tejido
óseo compacto; por el contrario, la epífisis está compuesta por el hueso
esponjoso).
 Hueso esponjoso o areolar: Están formados por delgadas trabéculas que
en los huesos ya formados, corresponden al tejido óseo laminillar
rodeadas por células de revestimiento óseo. Este se localiza en el interior
de los huesos del cráneo, vértebras, esternón y pelvis y también al final
de los huesos largos.
 Hueso compacto o denso: Este se localiza en porciones externas de todos
los huesos y ramificaciones de los huesos largos. Poseen una estructura
dura y predominan matriz ósea. Aquí se localizan los osteocitos dentro de
las lagunas alrededor de los conductos de Havers u osteón.
Funciones
Los huesos cumplen tres funciones fundamentales: proporcionar sostén al
organismo, constituir los segmentos móviles del sistema de palancas
configurado junto a las articulaciones y músculos, brindar protección a los
órganos y tejidos internos:
 Soporte: los huesos proveen un cuadro rígido de soporte para los
músculos y tejidos blandos.
 Protección: los huesos forman varias cavidades que protegen los órganos
internos de posibles traumatismos. Por ejemplo, el cráneo protege el
cerebro frente a los golpes, y la caja torácica, formada por costillas y
esternón protege los pulmones y el corazón.
 Movimiento: gracias a los músculos que se insertan en los huesos a través
de los tendones y su contracción sincronizada, se produce el movimiento.
 Homeostasis mineral: el tejido óseo almacena una serie de minerales,
especialmente calcio y fósforo, necesarios para la contracción muscular y
otras muchas funciones. Cuando son necesarios, el hueso libera dichos
minerales en la sangre que los distribuye a otras partes del organismo.
 Producción de células sanguíneas: dentro de cavidades situadas en
ciertos huesos, un tejido conectivo denominado médula ósea roja produce
las células sanguíneas rojas o hematíes mediante el proceso denominado
hematopoyesis.
 Almacén de grasas de reserva: la médula amarilla consiste principalmente
en adipocitos con unos pocos hematíes dispersos. Es una importante
reserva de energía química.

Enfermedades que se pueden presentar en el tejido óseo


 Cáncer de huesos: Este padecimiento se divide en dos tipos, el que se
origina en la médula (mieloma) y el sarcoma, el cual crece sobre el tejido
duro del hueso. Se caracteriza por dolor e inflamación en la zona,
debilidad (fractura), entumecimiento y hormigueo.
 Artritis: Puede presentarse a cualquier edad y se distingue por causar
dolor e inflamación en las articulaciones (las más afectadas son las que
componen las manos y los pies). Esta enfermedad va acompañada de
rigidez y pérdida del movimiento.
 Osteoporosis: En ésta el hueso se hace más delgado y poroso; además,
en sus primeras etapas es asintomática (no es evidente o fácil de
detectar). Sin embargo, sí es posible prevenirla a través de la práctica
constante de ejercicio y una nutrición adecuada.
 Paget: Es un trastorno que se produce en las células osteoblastos y
osteoclastos, las cuales se encargan de la reconstrucción del tejido
óseo. Esta enfermedad hace que los huesos se vuelvan gruesos y
amplios.
 Raquitismo: Es más frecuente en niños y es causada por una deficiencia
de vitamina D. El raquitismo evita que el sistema óseo adquiera
nutrientes, por consiguiente, éstos se vuelven débiles, lo que a la larga
puede generar dolor.
Tejido óseo

Daniela Chica Wehdeking


Ivanna Marrugo Pérez
Lya Patricia Reales Castellón
Karelis Paola Sayas Torres
Febrero 2019

Institución Educativa Soledad Acosta de Samper


Cartagena de Indias DTC, Bolívar, Colombia
Biología

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