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Dialnet ElAutenticoMundoDeAlfredBinet 668634 PDF
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Alfred Binet *
Gilbert Voyat
Cib, University of New York
* «The real world of Alfred Binet» en RIEGEL, K. F. y MEACHAM, J. A. (Eds.): The developing individual
in a rhanging world, vol. I. La Haya, Mouton, pp. 16-26. Reproducción con autorización. © de esta traducción, 1-
Infanciaj Aprendizaje, 1983.
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sus propios intereses en lugar de definir rimentales . parciales y aisladas o ciertos da-
21 éstos a partir del propio paradigma experi-
mental.
Si comparamos el estado actual de la psi-
cología evolutiva y experimental con la situa-
tos socio-económicos que aportan los rasgos
sociales contrapuestos a los individuales. Hoy
son muy pocos los psicólogos evolutivos que
utilizan a su hijos como sujetos, y a veces se
ción en que se hallaba a comienzos de siglo, considera anacrónico a Piaget por haber
nos encontramos con que sucede todo lo utilizado, al principio de su carrera, a sus
contrario. Me estoy refiriendo aquí a una tres hijos como únicos sujetos. Sin embargo,
tendencia generalizada hacia la especializa- es importante señalar que cuando sus inves-
ción que se observa hoy en día en las dife- tigaciones, especialmente las relativas al de-
rentes áreas de la psicología, que no sólo se sarrollo sensoriomotor, se han repetido con
ocupan de temas específicos, tales como me- un mayor número de sujetos sus resultados
moria, percepción, inteligencia, etc., sino se han visto confirmados en sus aspectos
que también incurren en una especificidad fundamentales.
de método. Esta especialización ha venido Por lo que a las observaciones se refiere,
de la mano de una utilización masiva de los Binet desarrolló un nivel de descripción casi
métodos estadísticos en psicología. Como matemático. La precisión y la meticulosidad
señala Stevens (1964): «Cuando la descrip- de su lenguaje son un reflejo de su firme
ción cede el paso a la medición, el cálculo compromiso y su preocupación por la obje-
sustituye a la discusión» (p. 1). Puede obser- tividad. No puede decirse que su objetividad
varse también que el lenguaje de las obser- se basase en datos estadísticos, ya que la
vaciones ha cambiado durante este siglo. mayor parte dl las veces Binet sólo hacía
Mientras Binet se preocupaba por realizar referencia a porbentajes; pero sin duda pue-
cuidadosamente descripciones de las con- de apreciarse que recurría siempre a la
ductas en términos cualitativos, actualmente evidencia empírica, así como a las precau-
hay una tendencia a utilizar un gran número ciones que tomaba cuando se refería a la
de sujetos y a sustituir el lenguaje descripti- psicología comparada. En el artículo que
vo por el matemático. escribió sobre la percepción infantil decía
La consecuencia de todo ello es, en mi (1890):
opinión, un estado de la psicología que se «Con respecto a los números, vimos que
caracteriza más por los modelos y abstrac- los niños que aún no saben contar, no discri-
ciones que propone que por una preocupa- minan un número de objetos mayor de cinco
ción por los sujetos reales, individuales. Al o seis. Estos experimentos nos hacen tener
alejarse de la observación individual se ha en consideración los realizados con ciertos
producido un cambio con respecto al foco de animales superiores: por ejemplo, se ha con-
interés de la psicología. El hecho de que seguido con diversas artimañas que monos y
estemos tratando la mayor parte del tiempo osos discriminen un cierto número de obje-
con grandes poblaciones supone centrar tos. Dado que los animales más inteligentes
nuestra atención sobre los problemas más difícilmente superan lo que los niños peque-
que sobre los individuos. Se concibe al suje- ños son capaces de hacer, es con estos niños
to como una abstracción dentro del paradig- con quien debemos compararlos. Al igual
ma de un problema experimental bien defi- que ellos, los animales perciben sólo la tota-
nido. Con la excepción de una parte de la lidad de un grupo de objetos, mientras que
psicología clínica, la preocupación sin lugar los adultos humanos, gracias a la utilización
a dudas predoMinante en la actualidad viene del lenguaje, pueden contarlos, cosa que es
definida en gran medida por el uso de gran- totalmente distinta. Por lo tanto, cuando com-
des muestras tratadas estadísticamente. Efec- paramos al animal con el adulto, estamos
tivamente, se tiende a acentuar las semejan- incurriendo en un error» (p. 582).
zas o diferencias grupales obtenidas por Este comentario resulta de mucho interés,
procedimientos estadísticos, mientras que Bi- ya que arroja alguna luz sobre la perspectiva
net, por ejemplo, matizaba cuidadosamente diferencial de Binet en lo que se refiere a
las diferencias individuales destacando sus niños y adultos, así como sobre el problema
rasgos cualitativos. implícito de la generalización de los datos
Por poner un caso concreto, cuando Binet obtenidos en animales al funcionamiento psi-
describía la difeYencia de edad a la que sus cológico adulto. El isomorfismo no es inme-
dos hijas aprendieron a andar (1890), llegaba diato ni está justificado. El problema clásico
a comprender las razones del retraso de su del conductismo y la etología está ya antici-
hija pequeña insistiendo en ciertas diferen- pado aquí.
cias individuales que iban más allá de una Tanto la nitidez de sus observaciones co-
simple descripción de sus rasgos psicomo- mo su constante lucidez quedan patentes tras
trices. Señala lo siguiente: la lectura de los últimos párrafos de ese
«Por otra parte, la más 'pequeña era una mismo artículo: •
niña alegre y revoltosa; cuando se ponía de «...si volvemos la vista al camino que he-
pie, permanecía inmovil durante unos instan- mos recorrido nos quedaremos con los si-
tes y luego se lanzaba bruscamente hacia guientes hechos relativos a las dos niñas que
adelante movida por un ansia de avanzar... han estado bajo nuestra observación: (1) Ma-
gritaba, gesticulaba, resultaba muy divertido nifiestan una gran habilidad para comparar
verla; andaba tambaleándose como un borra- longitudes. (2) El rojo es el color que antes
cho y era incapaz de dar cuatro o cinco designan correctamente. (3) Interpretan con
pasos sin caerse. Por tanto, comenzó a andar facilidad un dibujo que representa la totali-
con cierto retraso; no consiguió andar sola dad de un objeto conocido. Pero encuentran
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