Imagen y Arquitectura
¿Hacia una Comunidad Imaginada o Real?
La arquitectura colombiana de carácter público se
materializa, en su mayoría, gracias a una voluntad
política. Es entonces, cuando esta arquitectura
queda en manos del arquitecto, que este debe
procurar una composición objetiva y someter la
voluntad particular ante aquella intención políti-
ca, con el fin de poder tener una incidencia
profunda en la ciudad y en la sociedad, por medio
de la construcción de estos espacios Así pues, es
como el arquitecto se convierte en el encargado
de traducir las necesidades y posibles devenires
de una sociedad en espacio y materia, de un
estado político.
Si bien es cierto que todo proyecto es una posibili-
dad de crear espacios de calidad espacial y benefi-
cio para la ciudad, son los espacios públicos y
equipamientos, producto de la gestión y voluntad
política, los que conforman el tejido urbano. Pues,
como afirma el maestro y arquitecto Rogelio
Salmona: “La pérdida de poesía de las ciudades
Daniel Vergara y Daniel Meléndez
colombianas es consecuencia del abuso de los
tecnócratas, de su prepotencia, y de la avilantez de
algunos urbanizadores y la pésima gestión de los
administradores, que no han entendido, o no
quieren entender, que el espacio público, que
poco tienen en cuenta, es la esencia de la ciudad.“
Y es allí, cuando se convierten en elementos
pertenecientes a dicho tejido, por medio de la
apropiación, el momento en que las personas lo
llenan de alma; y la edificación se pone a prueba.
La apropiación y la búsqueda de esta, se convierte
en el objetivo político del arquitecto.
En este orden de ideas, es posible analizar dos
posturas opuestas, introducidas más adelante,
que buscan que la arquitectura sea apropiada por
la comunidad. Para realizar un marco conceptual
que apunte a la descripción de dichas posturas,
será expuesto el caso del mandato en Antioquia
del ex-gobernador, Sergio Fajardo y su progra-
ma“Antioquia la más educada”. Programa que
consiste en la construcción de 80 parques educati-
vos en los distintos municipios del departamento.
Esta intención pretende políticamente, mediante
la arquitectura, reforzar la identidad individual
regional y consolidar regiones alternas, para algu-
nos, olvidadas en Colombia. Lo anterior gracias al
conflicto armado colombiano, y el actual intento
de la “toma de conciencia del propio valor” (Wais-
man Marina, 1995).
Se partirá entonces, con el fin de exponer dicho
contraste, de un análisis de dos proyectos que
hacen parte del programa de Fajardo. Estos dos
proyectos se analizarán bajo el esquema propues-
to por Robert Venturi, Dennis Scott Brown y Chales
Izenour en el libro Learning from Las Vegas, en
donde se distinguen dos variantes opuestas,
mediante las cuales un edificio logra comunicar su
significado. Estas a su vez, serán contrastadas con
los conceptos de: Arquitectura del Espectáculo en
la obra del filósofo Michel Foucault, y el Espacio
Social de Henri Lefebvre. Por último, se verá cómo
el uso de cada una de estas variantes contrastadas
implican una forma de entender la comunidad, la
cual es evidente en el texto La Actualidad de lo
Bello del filósofo alemán Hans-Georg Gadamer.
“Antioquia, la más educada” es el programa, por
medio del cual Fajardo, tras sus mandatos que ya
suman más de 8 años entre la alcaldía de Medellín
y la gobernación de Antioquia, identifica, apropia
y resuelve los verdaderos problemas de su región:
la identidad, la conectividad, la carencia de educa-
ción, e incluso la violencia. Transformando la cara
de su región y la visión nacional e internacional
que se tuvo, durante décadas, a raíz de la época de
la violencia “cuando las mafias y los paramilitares
tenían el dominio en importantes zonas de Mede-
llín y de Antioquia y las guerrillas en declive aún
golpeaban en Urabá, en el nordeste, en el Bajo
par · Seminario De Arquitectura Latinoamericana
Cauca y en algunos barrios de la ciudad capital”
(Valencia, 2016).
Analizando el avance y desarrollo de este último
periodo en curso de su Gobernación, Fajardo
parece haber apostado por la recuperación de los
espacios públicos, y el desarrollo regional por
medio de la implementación de políticas de
educación y la construcción de estos parques
educativos que resaltan dichas políticas. Estos
últimos, tienen como uno de los propósito
proyectuales, el convertirse en espacios públicos
de buena calidad, lugares de encuentro de la
sociedad, donde no solamente converjan sus
múltiples actividades (según la intención), sino
que, mediante el buen uso, facilitado por un buen
proceso de creación compositiva, también consti-
tuyen la esencia de la ciudad, el pueblo, o el barrio.
Para lograr el ideal, la gobernación antioqueña
adelanta la construcción de dichos parques
educativos, a lo que ha destinado más de un 70%
del presupuesto de la gobernación. Ochenta reco-
nocidos arquitectos colombianos fueron elegidos
para diseñar estos distintos parques con la respon-
sabilidad de que ese espacio se convierta en un
catalizador para la comunidad, en lugares de
encuentro para los municipios, lugares que la
gente puede apropiar y usar, según dice Fajardo.
De esta forma, el arquitecto se convierte en el
responsable de la materialización de ese esfuerzo,
de una apuesta que cuyo éxito depende una
sociedad que ha sido golpeada y olvidada.
Retomando pues el objetivo principal, se escogen
dos proyectos pertenecientes a “Antioquia la más
educada”, que a través de recursos diferentes,
buscan ser apropiados por la comunidad. Esto,
con el fin de ejemplificar dicha dialéctica existente
entre las dos variantes de comunicación en una
edificación. El primero de los proyectos a analizar,
es el Cantón Educativo Marinilla en Marinilla cons-
truido por El equipo Mazzanti. Este se asemeja a
una escultura, donde bajo una piel metálica que
parece abrazar una montaña se encuentran cuatro
volúmenes dispuestos de manera maclada, donde
dos de estos se enfrentan al paisaje y los otros dos
albergan en la parte posterior(.....). El proyecto se
eleva sobre columnas que sostienen una platafor-
ma longitudinal, esta se desarrolla siguiendo una
misma cota de nivel, de la colina a la cual parece
abrazar. La plataforma se extiende marcando un
eje unificador donde las aulas -volúmenes rojos-
se disponen. Dos de ellas se ubican como comien-
zo y remate del eje de la plataforma, mientras que
lo otros dos se enfrentan al paisaje de casas colo-
niales de Marinilla, cuya patrimonio llevó a ser
nombrado Monumento Nacional.
El segundo es el parque educativo Saberes Ances-
trales en Vigía del Fuerte construido por Taller
Sintesis. Vigía del fuerte es un pequeño municipio
del Urabá Antioqueño, ubicado en la rivera del Río
Atrato. Una antigua pista de aviones que es el
lugar más elevado del pueblo - y el último en inun-
darse - se ha convertido en el centro, alrededor del
cual se ubican los edificios de carácter estatal,
entre ellos, el parque educativo.
Taller sintesis opta por reinterpretar la vivienda del
lugar, siguiendo con la tipología de la vivienda
afro pacífica, presente en el municipio, y descrita
por Gilma Mosquera Torres, docente de Arquitec-
tura en La Universidad del Valle como “El albergue
humano más elemental que se encuentra en las
zonas selváticas de producción primaria, enrama-
da provisional construida con palos del monte y
hojas de palma sin trabajar, levantada del suelo o
del agua por pilotes de baja altura constituidos
por troncos gruesos.”(Mosquera Torres, 2010). Esto
con el fin de enfrentar el clima y la particular
Impar · Seminario De Arquitectura Latinoamericana
El parque educativo Saberes Ancestrales reinterpretando la tipología
de su contexto.
Maya, F. (2015). [Imagen]. Recuperado de Arquitecturaviva.com
ubicación, además de resaltar la identidad de la
arquitectura municipal.
De esta forma el proyecto se organiza en dos volú-
menes adosados a dos aguas, los cuales se alzan
sobre palafitos, no en madera como en el caso de
las casas populares, sino en concreto. Sobre esta
base, se elevan muros que permiten el paso del
viento, los cuales se abren completamente hacia la
plaza. Uno de los volúmenes actúa como un
balcón, mientras que el otro, más retrocedido, se
conecta con la plaza a través de una gran rampa
que se desprende de la totalidad del volumen.
Esta se puede entender como una reinterpreta-
ción de la pasarela de acceso a las viviendas, sólo
que en vez de tratarse de un pequeño puente de
madera que conecta con las calles elevadas que se
usan durante las inundaciones, lo hace a través de
una gran rampa que destaca el carácter público
del proyecto.
Para entender mejor estos dos proyectos, es
posible enmarcarlos dentro de las dos variables en
que un edificio comunica un significado, presen-
tes en el libro Learning from Las Vegas. El cual
parte como una reacción a la arquitectura funcio-
nalista, y propone que la arquitectura se debe
hacer teniendo en cuenta la sociedad para la cual
diseñan. Ya que el movimiento moderno, en la
transición de la arquitectura ecléctica, hacia una
arquitectura funcionalista y sin ornamentos, había
olvidado entender al hombre común.
Como método para entender la arquitectura de su
tiempo, los autores realizan un estudio del Strip de
Las Vegas, al ver en este la materialización de los
deseos del hombre común. A partir de este análi-
sis distinguen dos formas principales en que un
edificio se comunica y relaciona con el espectador,
estos son: el “edificio pato” y el “tinglado decora-
do”. Que consisten en:
1. Donde los sistemas arquitectónicos de espacio,
estructura y programa están sumergidos y distor-
sionados por una forma simbólica global. Este tipo
de building-becoming-sculpture que llamamos el
pato en honor del drive-in en forma de pato, " “The
Long Island Duckling ", ilustrado en God’s Own
Junkyard por Peter Blake.
2. Cuando los sistemas del espacio y la estructura
están directamente al servicio del programa, y el
ornamento se aplica independientemente de
ellos. Esto que llamamos el tinglado decorado
A la luz de estos dos conceptos nos acercamos
más a entender como los parques educativos a
analizar buscan comunicar su carácter a la comu-
nidad, para de esta forma poder ser apropiados
por ella. El primero de estos casos lo podemos ver
en el Cantón Educativo Marinilla. Para los autores,
la crítica al edificio pato se basa en que la arquitec-
tura funcionalista llegó al punto de construir un
lenguaje formal propio, pero un lenguaje no arrai-
gado en una memoria colectiva, sino a las inten-
ciones plásticas del arquitecto, bajo la excusa de
que la apariencia de un edificio obedece a su
forma. Esto último conduciendo a que “irónica-
mente, la arquitectura moderna de hoy, al recha-
zar el simbolismo explícito y la ornamentación, ha
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distorsionado la totalidad del edificio en un gran
ornamento” Sin embargo el camino escogido por
el arquitecto es ese, y no una forma inconsciente,
como en el caso de la arquitectura moderna, sino
consciente y parte central del proceso de diseño,
donde las intenciones del arquitecto son las de
comunicar un mensaje a través de la forma misma
de la obra.
Complementario a lo anterior, Foucault nos puede
ayudar a entender este tipo de arquitectura, en el
marco de lo que él denominó, en su círculo de
conferencias en Brasil en mayo de 1972, como
Arquitectura del Espectáculo. Aquella arquitectu-
ra actual que tiene la imagen como finalidad; nos
remitimos nuevamente al concepto de Pato de
Venturi, Brown y Izenour. Término comparable a lo
que describe también en su libro Les mots et les
choses (une archéologie des sciences humaines)
como Arquitectura de Vigilancia. Conceptos que
ligados, cobran importancia en tanto la sociedad
disciplinaria y puramente panóptica, avanza hacia
la transformación en una red de estúpidas luces
brillantes en las ciudades modernas (Vinegar,
2008), para Foucault la sociedad del espectáculo.
Las edificaciones estatales, como lo son las escue-
las, fábricas, cárceles y hospitales, entre otros,
cumplen con el fin de asistir las necesidades de los
habitantes del lugar, y del estado con relación a
estos. Dichas construcciones actualmente se
hacen “desde la más moderna arquitectura acrista-
lada y las nuevas tecnologías de visión”(Duran
Castro,2010) ¿Que tan propicias son estas técnicas
constructivas para dichas edificaciones?. Es allí
cuando el espacio público, o comunal cede, ante
la transformación de la sociedad disciplinaria o de
la sociedad espectáculo, ante la imagen pública.
La vigilancia, la actividad cotidiana, el espacio y la
iluminación se transforman junto con esta socie-
 Imagen Opcional
Implantación del Cantón Educativo Marainilla, a forma de escultura sobre la colina.
dad, retirándose de las calles “en dirección a ese
terminal de recepción de anuncios a domicilio que
suple a la Ciudad, con lo que la esfera privada
continúa perdiendo su relativa autonomía.”(Virilio
and Antolín Rato, 1989).
Al analizar la obra de Mazzanti Arquitectos, en
Marinilla, encontramos plasmada la esencia de lo
descrito por Foucault en sus conferencias y Vine-
gar en su crítica hacia Lerning from Las Vegas. Una
arquitectura netamente formal, que rescatado la
autoridad gubernamental constructora, emplaza
en lo alto de una colina, un elemento singular, sin
bordes ni relación contextual. Un objeto escultóri-
co, puesto, levantado sobre columnas, y a su vez
sobre el municipio de Marinilla; donde predomina
el color rojo y una fachada grisacea que recubre
las cajas “de naturaleza cambiante”(Elequipomaz-
zanti.com, 2016). Llama la atención la forma casi
caprichosa escudada en proveer una vista de 360
grados, en “diálogo e intercambio entre las perso-
nas, el entorno construido y el paisaje natural.”...”
un contenedor permeable, pensando en promo-
ver modificaciones constantes por parte del
mismo usuario” (Elequipomazzanti.com, 2016), un
elemento fotogénico que se roba más de una
Impar · Seminario De Arquitecturavb Latinoamericana
Gómez, S. (2015). [Imagen]. Recuperado de Aasarchitecture.com
mirada. Lo anterior nos remite a una de las críticas
de Venturi, Scott Brown e Izenour, la arquitectura
parece estar siendo valorada y aprendida desde su
aparición en revistas y publicaciones arquitectóni-
cas, por su imagen llamativa y formal y no desde
las necesidades populares y cotidianas de las
personas, (Venturi, Scott Brown and Izenour,
1977). ¿Será entonce que esta arquitectura se
olvida del entendimiento del hombre?
Surgen entonces varias preguntas ¿Que tanto este
objeto escultórico emplazado, icónico, ornamen-
tal desde el punto de vista de Venturi, Dennis Scott
Brown y Chales Izenour, responde a un carácter
social?¿No es más bien un pato emplazado, arqui-
tectura del espectáculo, la presencia del estado en
la cima de un municipio? El maestro y arquitecto
Daniel Bermúdez apunta en una entrevista para El
Tiempo refiriéndose a Mazzanti: “Veo en sus obras
intenciones subjetivas muy imaginativas que a
veces ponen en peligro el verdadero cometido de
la arquitectura: generar espacios adecuados para
ser utilizados”. (eltiempo.com, 2016).¿Tiene razón
Bermúdez?¿Está en peligro la intención arquitec-
tónica que “debería” tener una obra de semejante
magnitud y significancia para Marinilla, para la

Interior del Cantón Educativo Marinilla. Vista de la circulación, con el
acceso a las aulas atrás.
Davila, R. (2015). [Imagen]. Recuperado de Archdaily.com
región de Antioquia?
En contraposición a la postura asumida por
Mazzanti Arquitectos, se propone y construye
alternamente, Saberes Ancestrales. Un parque
educativo que cabe enmarcar dentro de lo que
Venturi, Brown y Izenour definen bajo el término:
tinglado decorado. Por medio de esta definición,
es posible entender la forma como el Parque
Educativo Saberes Ancestrales se relaciona con su
entorno social. Para los autores, el tinglado deco-
rado es un edificio convencional, que, a través de
palabras, imágenes y letreros, como en el caso del
strip de Las Vegas, se dota de significado. Donde el
edificio tiene una función puramente útil, y su
función comunicativa queda relegada al letrero
superpuesto, que describe el carácter del edificio.
Sin embargo, Venturi, Brown y Izenour optan
proponer también una variante del tinglado, en
donde son los elementos arquitectónicos,
dispuestos como ornamentos con función simbó-
lica, son los que se encargan de comunicar el
carácter del edificio.
Este último es el recurso al que apelan los arqui-
tectos de Taller Sintesis. En donde, a través de la
reinterpretación de los elementos arquitectónicos
a los cuales recurre la comunidad, el proyecta
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busca evocar experiencias pasadas, y poder ser
apropiado al insertarse dentro de la cotidianidad
de la comunidad. De esta forma elementos que ya
hacen parte de la tradición de los usuarios, como
el tallado de una puerta, al ser implementado en
una obra nueva, debe parecer, y si no, al menos
evocar la tradición, en vez de un tallado creado de
la nada, escudado bajo el rótulo de creación artís-
tica.
Los aspectos anteriormente mencionados, intro-
ducen vagamente algunos de los conceptos
gracias a los cuales Saberes Ancestrales se puede
comprender como el antagonista al Proyecto del
parque educativo en Marinilla, en tanto este
primero se describa también bajo los lineamien-
tos teóricos de Henri Lefebvre en la introducción
conceptual al Espacio Social en su libro The
production of the space, postura opuesta a la
Arquitectura del Espectaculo en Foucault. En
primera instancia, cabe describir un poco más
dicha teoría lefebvriana, que “introduce el espacio
y la ciudad como un elemento producido activa-
mente por sí mismo” (Baringo Ezquerra, 2013).
Una construcción social, socialista.
Lefebvre plantea en su libro la teoría del desarrollo
de un espacio como producto de su contexto e
impulsor social del mismo. En donde las diferen-
cias y las capas sociales yuxtapuestas convergen
en un solo punto, la creación del espacio y la
búsqueda de la identidad, problemática primor-
dial en Saberes Ancestrales, resuelta mediante la
reapropiación por medio de la intervención del
espacio, ese espacio motor del que habla, un
espacio diferencial y comunitario (Lefebvre,
1991:456-457), en donde el nexo entre espacio y
“sociedad” juega un papel primordial derivado de
la “ relación con varias ciencias: la economía políti-
ca, la sociología, la tecnología”(Lefebvre, 1991).
Como ejemplo de esta yuxtaposición Lefebvre nos
narra el caso de los flujos : “Hay flujos de energía,
materias primas, flujos de productos acabados,
flujos de mano de obra, flujo de capitales, sin
contar pequeños flujos como los flujos de los
automóviles. Es una nueva relación de la econo-
mía política al espacio que se forma. Un flujo tiene
un origen, un recorrido y un terminal, y todo esto
recrea, y enriquece el espacio su creación” (Lefeb-
vre, 1991)“En esta perspectiva es un cierto aspecto
del socialismo lo que se presenta al observador: el
socialismo se define como gestión colectiva del
espacio”. Entonces, ¿Es Saberes Ancestrales un
espacio socialista?
Una vez analizados cada uno de los proyectos,
vemos como estos logran comunicarse su carácter
por medio de métodos distintos. En el fondo, la
dialéctica entre el edificio pato y el tinglado deco-
rado no se limita a su mera expresión. Sino que de
esta depende la aceptación y apropiación de la
comunidad . Comunidad ajena al entorno cercano
del arquitecto, el cual por medio de la elaboración
compositiva, proyecta desde afuera, la ventana
social. Por lo que surge la pregunta, ¿Cómo entien-
den los arquitectos a esta comunidad? ¿Es la
comunidad una variable que influya en la defini-
ción del proyecto? Para explicar esto , y concluir,
vamos a recurrir al concepto de comunidad según
es entendido por el filósofo alemán Hans-Georg
Gadamer en La Actualidad de lo bello.
El ensayo busca unificar bajo un mismo concepto
el arte clásico - que cobija desde la Grecia Antigua
al cristianismo hasta el siglo XIX- con el arte
moderno. La escisión se da hacia mediados del
siglo XIX, periodo en que aún había una comunión
entre el artista, la comunidad y lo divino, pero que
en medio de la cantidad de complejos cambios
sociales llevó a que desapareciera esa “autocom-
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prensión colectiva” del artista. Donde el este ya no
se siente parte de la comunidad, sino ajeno a ella.
Sin embargo, no es que para el artista moderno la
comunidad haya desaparecido del todo, o haya
perdido importancia. Para este, la comunidad
sigue presente, manifestandose de una forma
distinta. En palabras de Gadamer “el artista ya no
pronuncia el lenguaje de la comunidad, sino que
se construye su propia comunidad al pronunciarse
en lo más íntimo de sí mismo. A pesar de ello, se
construye justamente su comunidad, y su inten-
ción es que esa comunidad se extienda a la oiku-
mene, a todo el mundo habitado, que sea de
verdad universal”. (Gadamer,1991)
En el caso particular de los parques educativos
podemos partir del hecho que ninguno de los dos
encargados de proyectar hacen parte de la comu-
nidad para la cual están diseñando, sin embargo,
sus estrategias son distintas. A Partir de las dos
nociones de artista descritas por Gadame, se
puede ver cómo operan los dos arquitectos en los
proyectos. Mientras que el proyecto de Taller
Sintesis trata de pronunciar el lenguaje de la
comunidad, un lenguaje que ellos no hablan, pero
cuya escritura se puede leer en el pequeño muni-
cipio de Vigía del Fuerte, el Equipo de Mazzanti no
busca entender a la comunidad del lugar para la
cual hace el proyecto, sino que al igual que el artis-
ta moderno construye su propia comunidad, una
comunidad universal.
Como ya vimos anteriormente, el parque educati-
vo para Vigía del Fuerte se compone a partir de los
elementos arquitectónicos que ya son parte de la
comunidad. De esta forma es que el proyecto no
se propone confrontar al habitante del lugar, sino
que busca insertarse tranquilamente en su
cotidianidad y tradicion a través de evocar expe-
riencias pasadas. Por el contrario Mazzanti apela a
una comunidad imaginada, donde, en lugar de
evocar experiencias pasadas, las confronta con
nuevas nociones; así pues, la búsqueda formal se
convierte en el vehículo que propicia un choque
con el usuario, donde la arquitectura se presenta
como una antítesis de los tradicional, como una
invitación a experimentar. Esto lo podemos enten-
der mejor desde declaraciones del propio arqui-
tecto donde dice “Si, de pronto presupongo que
todos tienen ganas de conocer el mundo de
manera diferente. Posiblemente no todos, pero
creo que existe esa condición del juego. Explora-
mos el mundo, y de una forma u otra rompemos
con lo establecido. Si repetimos el mismo modelo
de construcción, estamos condenados a hacer
siempre lo mismo.” (El Tiempo, 2014) Es decir, ve
en el juego y en la exploración, la posibilidad para
que la comunidad se apropie del edificio, del espa-
cio y le dé alma al contenedor.
De esta forma podemos ver como las categorías
mencionadas en Learning from Las Vegas, y los
conceptos de Espacio Social y Arquitectura del
espectáculo aún se mantienen vigentes. La
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categoría del edificio pato aún permite entender
perfectamente las intenciones de un arquitecto
como Mazzanti, en el cual el edificio completo
busca exhibirse, ser un símbolo en sí mismo, que a
través de la experimentación y el juego busca ser
apropiado por la comunidad, convirtiéndose en
primer plano en Arquitectura del Espectáculo. Por
otro lado, a partir de un edificio inspirado por la
tipología y los elementos constructivos del lugar
(Tinglado decorado) Taller Sintesis busca desper-
tar el valor de las experiencias pasadas, busca la
configuración de un Espacio Social.
Sin embargo, a pesar de que el método formal del
edificio pato puede ser muy efectivo para pensar
en un devenir distinto de una sociedad, es
también un riesgo.Mientras que una obra de arte
incapaz de comunicarse con la comunidad imagi-
nada no tiene repercusiones, la arquitectura debe
ser habitada y padecida por un pueblo. Sin embar-
go surge la pregunta ¿Es posible pensar una forma
distinta de habitar en el mundo que no se arries-
gue a confrontarnos como lo hace la arquitectura
Mazzanti?
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