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Doctor en Filosofia y Ciencias de la Palabras clave: puesta en acto; políti- Key words: enactment; educational
Educación. Profesor Titular Universidad cas; escuela secundaria policies; high school.
Nacional de Catamarca Investigador
Principal del CONICET. Argentina |
joseyuni@gmail.com
PRAXIS
Bajo licencia Creative Commons - Reconocimiento -
ISSN 0328-9702 / ISSN 2313-934X Facultad de Ciencias Humanas No comercial - 4.0 International (CC BY-NC 4.0)
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a escuela media ha cobrado un nuevo den pensarse al margen de la subjetividad de
protagonismo por la tendencia a la exten- los actores que las formulan, intermedian o
sión de la obligatoriedad escolar (Ruiz y son sus destinatarios. En su decurso la políti-
Shoo, 2014). Pero además en Argentina el fuerte ca llega a inscribirse en los cuerpos y produce
sesgo inclusivo de la política educativa, expre- posiciones particulares sobre el asunto que re-
sada en la Ley Nacional de Educación entra en gula. Toda política es el resultado de una lucha
tensión con la gramática escolar tradicional que en la que los actores competentes, disputan la
persiste unida a la lógica meritocrática. regulación de las relaciones sociales que están
Nuestro interés por comprender las marcas en juego en la definición de un problema o una
subjetivantes de las políticas educativas y so- cuestión social que se pretende resolver (Gluz,
ciales de inclusión sobre los sujetos, nos lleva 2006).Tal disputa no empieza ni termina en la
a considerar el ciclo de las políticas, desde su formulación de la política, sino que continúa
formulación hasta que éstas se encarnan en los en todo el decurso de la misma.
sujetos. El sentido común escolar piensa este La Política, pensada de esta forma, se sos-
proceso de modo mecánico y lineal, conocido tiene en la idea de proceso y más aún, de dis-
como la “bajada” de las prescripciones de las puta de significados. La continua codificación
políticas,(Montesinos, Schoo y Sinisi 2012). Sin y decodificación de significados y ámbitos de
embargo, desde nuestra perspectiva, en el pasa- disputa, se realiza con el telón de fondo com-
je del papel a las prácticas en ámbitos educativos puesto por un sistema de creencias y posiciones
las políticas son reconstruidas y recreadas por socio-profesionales al cual adscriben los suje-
los sujetos que intervienen en un proceso suma- tos que intervienen en este proceso-disputa.
mente complejo que excede la noción de imple- Si olvidamos el papel fundamental que
mentación (Pressman y Wildavsky, 1973). juegan los posicionamientos que devienen del
La investigación sobre este proceso pretende sistema de creencias de los actores que “hacen”
comprender el impacto de las políticas a niveles las políticas, caemos en la ingenuidad de pen-
subjetivos, porque si bien la concreción de las sar que las políticas por el solo hecho de estar
políticas y su impacto sobre los actores escola- escritas regulan las prácticas sociales sin inter-
res son procesos diferentes, ambos están inte- mediaciones, resistencias o cuestionamientos.
rrelacionados (Van Meter, D. y Van Horn 1993). De tal manera que nos estaríamos perdiendo
Los actores intervienen y actúan en esas tran- una parte importante de la vida de las escuelas
siciones y pasajes –desde la macroestructura al y subvalorando el papel que los actores juegan
nivel de las subjetividades y las prácticas que en tanto se agencian de sus posibilidades de
ellas generan– desde un sistema de creencias resistencia y/o de transformación de sus prác-
arraigado en posiciones de clase por un lado y ticas (Ball, 2012).
por la lógica de la gramática escolar tradicional, El autor afirma que la creencia en la nece-
que regula las disputas de sentidos. sariedad de la eficacia de la implementación
En este trabajo ponemos en diálogo las vo- de la prescripción del discurso de las políti-
ces de actores significativos en la gestión es- cas ocurre, en parte, porque el discurso de las
colar de las políticas sociales y educativas de políticas educativas refiere a aquello que sólo
inclusión en la provincia de Catamarca, Ar- existe en la febril imaginación de los políticos,
gentina, específicamente sobre la Asignación funcionarios o asesores, y que está en relación
Universal por Hijo (en adelante AUH) y el Co- con los contextos fantásticos sobre el posibilis-
nectar Igualdad. El propósito es analizar cómo mo escolar. En cambio, esas mismas políticas
son reelaboradas las políticas de inclusión por pueden ser interpretadas de diferentes mane-
actores que en el cotidiano escolar son respon- ras por los actores educativos en las diferen-
sables de su materialización. tes escuelas. Aún más, en una misma escuela
pueden existir tantos posicionamientos sobre
Un análisis de las políticas cómo ejecutar una política, como actores co-
en el ámbito escolar existan en la escuela.
Desde la perspectiva que asume que las
Nuestro posicionamiento acerca de las po- políticas educativas constituyen un campo de
líticas que regulan la vida de las escuelas, así disputa de significados (cuyo despliegue no se
como toda otra política, es que ellas no pue- puede limitar a considerarlas en función de su
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las políticas sociales y educativas de inclusión do de que venga a la escuela, sino que está
en las instituciones que dirigen; 2) las creen- preocupado que no le saquen la asignación.
cias sobre la desigualdad en la escuela; 3) las (Directora escuela céntrica departamento
valoraciones sobre las políticas sociales y sus Capital)
beneficiarios. Hay chicos que vuelven a la escuela por la
computadora y resulta que abandonan. Des-
Formas y variantes de la pués tenemos que estar buscando un profe-
puesta en acto de las políticas sor que vaya a la casa a retirar la computado-
ra, porque un chico que deja la escuela no se
Los directivos cumplen una función cen- puede llevar la netbook, es patrimonio de la
tral en la administración de las políticas que escuela. (Directora escuela céntrica departa-
hemos indagado. Ellos certifican la asistencia mento Capital)
de los beneficiarios, dirimen si se certifica o
no la condición de alumno regular, incluso Las decisiones que toman los directivos,
qué hacer ante los “vacíos” existentes en la ante la existencia de situaciones percibidas
normativa. A continuación presentamos dos como “irregulares”, exceden su función admi-
fragmentos en los que los entrevistados descri- nistrativa, entre otras cosas, deciden realizar
ben sus acciones que serían expresiones de la acuerdos con los padres para que se compro-
puesta en acto. metan a cumplir con la escolarización de sus
hijos. Estas circunstancias singulares, los po-
Nosotros lo único que hacemos es firmar sicionan en un rol complejo a la hora de eva-
porque el padre trae la libreta y se le firma. luar la legitimidad del acto de certificar o no
Por ahí sí hemos tenido dos casos de chiqui- la libreta; y eventualmente de interrumpir la
tos que no venían a la escuela y no le firma- condición del beneficiario, con todos los efec-
mos. Una de las chiquitas volvió a la escuela tos que esta decisión implica.
y la otra se le firmó pero con el compromiso En los discursos de los directivos se advierte
de que venga a la escuela y no volvió más (...) la presencia de criterios de sentido diferentes a
Si bien es bueno y sirve un poquito de algo, los que promueve el texto de la AUH. Esos cri-
pero es un arma de doble filo porque los chi- terios se apoyan tanto en posicionamientos de
cos o el padre no es que está tan preocupa- clase, como en la adhesión a una lógica escolar
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meritocrática. En los discursos se deja entrever Los discursos precedentes ejemplifican las
una sospecha sobre los padres, poniendo en críticas más difundidas hacia los programas de
duda el interés genuino de ellos en la escolari- transferencias condicionadas: Desincentivo al
zación de los jóvenes. Esta sospecha marca una trabajo; Incentivo a la informalidad; Incenti-
distancia entre el beneficiario y el actor escolar; vo a la fecundidad (Kliksberg y Novacovsky,
que expresa en el plano educativo la diferencia- 2015). El posicionamiento de las personas
ción entre pobres merecedores de la asistencia y entrevistadas se configura en torno a la valo-
pobres que no merecen la asistencia porque no ración del trabajo, el esfuerzo individual y el
tienen un interés genuino por la educación. Esa imaginario de la movilidad social basada en el
diferenciación revela la adhesión de los directi- mérito y sacrificio personal.
vos a lógicas meritocráticas, tales como la valo- El discurso de las profesionales, permite
ración positiva del sistema de becas de períodos trazar una analogía entre el orden social y el
anteriores –en tanto que la beca es un premio al orden escolar, alterado por la presencia de los
esfuerzo y al rendimiento– frente al carácter es- sujetos pobres y sus familias. Señalan como
tigmatizante que le adscriben a la condición de una debilidad de las políticas –consideradas
beneficiario. Sobre este presupuesto que cues- asistenciales– que no regulen las condiciones
tiona a los beneficiarios se toman otras decisio- de escolarización de los estudiantes, en cuanto
nes. Comenta una directora: a inasistencias o rendimiento. En ese contexto
discursivo emerge una lógica eficientista que
Dentro del comunicado que les estamos equipara el rendimiento del estudiante con
mandando a los chicos yo les pongo a los “hacer rendir bien” el dinero que reciben las
padres que en caso de no cumplimentar la familias. Estas críticas al diseño de la política
documentación que es básica en el legajo de socio-educativa se sostienen en una valoración
ellos para el título, no se extenderá ningu- negativa del conjunto de políticas y programas
na constancia de alumno regular; para ver si inclusivos, sobre la base de un posicionamien-
uno los moviliza.” (Directora escuela céntri- to estigmatizante de los sujetos de sectores
ca departamento Capital). vulnerables y desconociendo los fundamentos
y legitimidad de la acción estatal orientada al
Este tipo de decisiones no están contempla- aseguramiento de derechos.
das en el diseño de la política ni en los instructi- Los actores escolares entrevistados natura-
vos para su implementación pero surgen en los lizan su propia posición de clase y el sistema
intersticios de indefinición y como expresión de de valores adscripto a ella, y lo proyectan como
pre-supuestos de los actores que median entre horizonte deseable para el conjunto de las fa-
el discurso y su práctica singular. Estas decisio- milias escolarizadas pertenecientes a sectores
nes se sostienen en adhesiones a principios es- vulnerables. Por el contrario, las condiciones
colares tradicionales, tales como la meritocracia de vulnerabilidad en las que viven los sujetos
y en las representaciones sobre las políticas y los destinatarios de las políticas están atravesadas
beneficiarios, como es el caso de una profesio- por fenómenos complejos que no dependen
nal del equipo técnico de una institución. solo de su voluntarismo para superar su pre-
cariedad. Desde ese horizonte de comprensión
Estoy en contra de lo que es asignaciones los gestores invisibilizan las dificultades de ac-
familiares y todo (...).Creo que hay que con- ceso a oportunidades laborales que afectan a
cientizar desde otro lado. No premiarlos para las familias pobres, en las que buena parte del
que tengan hijos. Porque desgraciadamente trabajo doméstico y del cuidado de los niños es
hay muchos que no cumplen con los requi- realizado por los hermanos mayores; quienes
sitos de lo que es realmente la AUH. Porque además se ocupan de otras tareas para aumen-
vos tenés que llevarlo al chico al médico, ve- tar los ingresos familiares, lo que los aleja de la
nir y que el chico estudie o sea que esa plata escuela por temporadas (Rausky, 2009).
rinda. Tenés chicos que te faltan 50 días al Los discursos develan disidencia y resisten-
año o 30. No es que vos le das la AUH y sí o cia respecto a las políticas de inclusión socio-
sí, el padre todos los días lo trae a las escuela, educativa. Desde esos sentidos, ellos mismos
no tiene que tener faltas. (Psicopedagoga es- arbitran medidas y establecen condiciones
cuela zona norte departamento Capital) orientadas a la re-escolarización de las fami-
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Nuestra investigación, revela que las actua- Entendemos que la interpelación de las
ciones de los directivos van más allá del guión políticas de inclusión social a la gramática
prescripto por las políticas y que en la puesta en escolar de la escuela secundaria es producida
acto, resignifican el discurso a partir de un he- por el cambio de enfoque que se registró en las
terogéneo grupo de creencias que guardan con- políticas educativas de la década pasada. Ellas
tinuidad con los paradigmas raíces de la gramá- instalaron en el interior de la vida de las escue-
tica escolar y los posicionamientos de clase de las una fuerte disputa de sentidos en torno a la
los sujetos. Nuestros hallazgos muestran que meritocracia, el asistencialismo y las políticas
las mediaciones e interpretaciones de los acto- de reconocimiento de derechos. Los imagina-
res escolares respecto al texto y el discurso de rios subyacentes en la lógica escolar y las di-
las políticas, no se apoyan en un conocimiento ferentes concepciones sobre los beneficiarios
técnico-profesional, sino en una suerte de sen- de políticas sociales se basan en una represen-
tido común escolar que organiza el sistema dis- tación discursiva dicotómica de la identidad
posicional de directivos y profesionales, a la vez social, que cuestiona la legitimidad de las polí-
que da sentido a sus prácticas cotidianas. En tal ticas y sus beneficiarios.
sentido, este trabajo ofrece evidencia de cómo Las instituciones escolares y los agentes que
las políticas educativas interpelan la gramática las construyen en su cotidianeidad, adquieren
escolar, a través de la circulación de una ideo- relevancia en la materialización de los manda-
logía educativa que naturaliza la lógica del dis- tos de las políticas socio-educativas en tanto
positivo y su producción de efectos de sentidos que pueden mediar los procesos identificato-
sociales y subjetivos. La circulación del discurso rios, reforzando las nominaciones y atributos
de las políticas socio-educativas interpela a los estigmatizantes o contribuyendo al reconoci-
actores escolares en tanto que al imponerles un miento de derechos de los sujetos. La experien-
mandato de acción, los obliga a responder a ese cia de los beneficiarios de políticas sociales de
requerimiento. No obstante, en su actuación los su condición de sujetos de las políticas públicas,
sujetos no se pliegan a la repetición del texto o a depende en gran medida de las condiciones
la traducción del discurso a su campo de prácti- institucionales y de las mediaciones que los ac-
cas, sino que resignifican creativamente su prác- tores escolares significativos introducen en la
tica, reestructurando el propio discurso con el administración de la política. Esas mediaciones
objeto de estabilizar su sistema de creencias. direccionan la puesta en acto de las políticas a
Nuestros hallazgos dan cuenta de la per- través de los discursos y prácticas educativas en
sistencia en las creencias de directivos y pro- los que se escenifica su actuación como hacedo-
fesionales de los elementos estructuradores de res del sentido político de la escolarización.
la gramática escolar tradicional, basada en la
naturalización de las desigualdades, el estable-
cimiento de jerarquías, la lógica meritocrática
y la configuración de una moral individualista
basada en el éxito escolar. Las variantes que Bibliografía
adopta la actuación de los directivos y profe-
sionales en la puesta en acto de la AUH, se fun- Avelar, M. (2016). Entrevista con Stephen J. Ball: Su con-
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chivosanalíticos de políticaseducativas.Volumen 24
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