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Poseen varias funciones: forman una estructura sólida para el sostenimiento del cuerpo,
protegen órganos muy sensibles como el cerebro, hacen posible el movimiento al servir como
lugar de inserción a los músculos y producen las células que forman parte de la sangre
(hematopoyesis). El conjunto organizado de las piezas óseas (huesos) forma el esqueleto o
sistema esquelético. Cada pieza cumple una función en particular y de conjunto en relación
con las piezas próximas a las que está articulada.
En el hueso existen diferentes variedades de tejido. El principal es el tejido óseo, un tipo
especializado de tejido conectivo firme, duro y resistente que está compuesto
por células (osteocitos) y componentes extracelulares calcificados que le proporciona gran
dureza. Los huesos poseen una cubierta superficial de tejido conectivo fibroso
llamado periostio y presentan superficies articulares que están revestidas por tejido
cartilaginoso. En el interior de los huesos se encuentra la médula ósea, formada por tejidos
blandos que incluyen el tejido hematopoyético que produce las células de la sangre y tejido
adiposo (grasa). Cuenta además con vasos sanguíneos y nervios que irrigan e inervan su
estructura.1
Índice
1Generalidades
2Estructura
3Tejido óseo
o 3.1Células
4Funciones
o 4.1Funciones mecánicas
o 4.2Hematopoyesis
o 4.3Funciones metabólicas
6Remodelación ósea
7Factores hormonales
8Clasificación
o 8.1Huesos largos
o 8.2Huesos cortos
o 8.3Huesos planos
o 8.4Huesos irregulares
o 8.5Huesos sesamoideos
10Médula ósea
o 11.1Osteocondrodisplasias
o 11.2Fracturas
o 11.3Osteomielitis
o 11.4Osteitis deformante
o 11.5Osteoporosis
o 11.6Dolor óseo
13Véase también
14Bibliografía
15Referencias
16Enlaces externos
Generalidades[editar]
El hueso es un órgano vivo que contiene células y vasos sanguíneos que le aportan oxígeno y
nutrientes. Se encuentra en constante proceso de remodelación, aumenta de tamaño tanto en
longitud como en grosor durante la infancia y la adolescencia, y es capaz de autoregenerarse
después de sufrir una fractura, proceso que se conoce como consolidación ósea. Responde a
la acción de diferentes hormonas circulantes, como la calcitonina, la parathormona y
la hormona del crecimiento.
La presencia de cristales de fosfato cálcico en la matriz extracelular y su disposición espacial
otorgan al tejido óseo unas propiedades físicas especiales de dureza, resistencia, ligereza y
cierta flexibilidad que lo hacen idóneo para cumplir su función estructural como sostén. Sin
embargo el hueso no es la sustancia de mayor dureza del organismo pues es superada por
el esmalte dental.
La idea de considerar al hueso como una estructura mineral inerte es errónea y está
condicionada por el hecho de que después de la muerte la matriz intercelular mineralizada
perdura, conservándose durante largo tiempo. Sin embargo estos restos óseos no son
verdaderos huesos aunque conserven la forma, pues han perdido los vasos sanguíneos, los
nervios, la médula ósea, todas las células vivas y carecen de capacidad de crecimiento y
regeneración. 1
Estructura[editar]
Fémur humano.
Epífisis. Se llama epífisis a cada uno de los extremos de los huesos largos.
Metáfisis. Se llama metáfisis a una zona intermedia de los huesos largos que está
situada entre la zona central (diáfisis) y los extremos (epífisis).
Cartílago articular. Es una estructura formada por tejido cartilaginoso que se interpone
entre los extremos de dos huesos adyacentes, permitiendo el deslizamiento de las
superficies en contacto gracias a que presenta un coeficiente de fricción muy bajo. No
tiene vasos sanguíneos y se nutre a través de las moléculas del líquido sinovial que
penetran en su superficie. Está formado por células especializadas llamadas condrocitos y
una matriz extracelular compuesta por fibras de colágeno tipo II. 4
Periostio. Membrana de tejido conectivo fibrosa y resistente que cubre los huesos por
su superficie externa.
Cavidad medular. Es un espacio sin tejido óseo ubicado en la zona central de la
diáfisis de los huesos largos. La cavidad medular esta rellena por médula ósea amarilla,
tejido formado por células adiposas que almacenan importantes cantidades
de triglicéridos que suponen una reserva energética. No debe confundirse la médula ósea
amarilla con la médula ósea roja, también presente en los huesos, que tiene la función de
producir las células sanguíneas.
Endostio. Membrana delgada del tejido conjuntivo que tapiza la superficie interior de la
cavidad medular de los huesos largos.56
Arteria nutricia. El hueso necesita sangre que le aporte a sus células oxígeno y
nutrientes. Por ello cada hueso esta irrigado por una arteria nutricia que penetra en su
estructura a través de un pequeño orificio llamado agujero nutricio, una vez en el interior
se divide en ramas progresivamente más pequeñas que se distribuyen por todas las áreas
del hueso.
Tejido óseo[editar]
Artículo principal: Tejido óseo
El tejido óseo es el componente principal del hueso, está formado por células y sustancia
extracelular, también llamada matriz ósea. Las células representan únicamente el 2% del
tejido, mientras que la matriz extracelular es el 98%.
Células. Las células pueden ser de varios tipos: células osteoprogenitoras (células
madre), osteocitos, osteoblastos y osteoclastos.
Células óseas
Osteocitos. Representan más del 90% de las células del tejido óseo. Proceden de los
osteoblastos y su función principal es mantener y renovar la matriz ósea. Son residentes
fijos del hueso y su vida media es de alrededor de 25 años. 9
Funciones[editar]
La cadena de huesecillos situada en el oído medio tiene gran importancia en el proceso de audición.
Los huesos poseen varias funciones, entre ellas mecánicas, metabólicas y de síntesis de las
células sanguíneas.
Funciones mecánicas[editar]
Protección: Los huesos forman diversas cavidades que protegen a los órganos vitales
de posibles traumatismos. Por ejemplo, el cráneo o calota protege al cerebro de
traumatismos que pueden dañarlo, y la caja torácica (costillas y el esternón), protege los
pulmones y el corazón.2
Sostén: Los huesos forman una estructura rígida, que se encarga del sostén de los
órganos y tejidos blandos.2
Movimiento: Los músculos para generar los movimientos voluntarios se unen mediante
los tendones a la superficie de los huesos.2
En el periodo embrionario no existen huesos, las estructuras equivalentes están formadas por
un molde de tejido mesenquimal o por cartílago hialino. A medida que se produce el
crecimiento, tiene lugar de forma progresiva el proceso de osteogénesis (formación de hueso)
y osificación. Este se inicia en los puntos de osificación que son en realidad cúmulos de
células formadoras de hueso u osteoblastos.12
Existen dos tipos de osificación:
Remodelación ósea[editar]
El hueso es un tejido dinámico que se encuentra en un proceso continuo de renovación. Se ha
calculado que en un año se reemplaza alrededor del 5% del hueso cortical y un 20% del
trabecular, por lo que esqueleto se renueva totalmente cada 20 años por término medio. La
renovación del hueso es necesaria entre otros motivos para la reparación del daño tisular. 14
El proceso se inicia por la actividad de los osteoclastos que destruyen el hueso en pequeñas
áreas localizadas, a continuación los osteoblastos lo reparan creando nueva matriz intercelular
y facilitando la mineralización. El balance entre la reabsorción y la formación óseas es un
proceso complejo que está determinado en parte genéticamente y en el que influyen factores
nutricionales y hormonales. El remodelado óseo tiene lugar durante toda la vida de un
individuo, pero solo es positivo hasta los 30 años en la especia humana, edad en la que se
alcanza el máximo de masa ósea, la cual se mantiene bastante estable hasta los 50, momento
en que empieza a disminuir, lo que condiciona mayor tendencia a las fracturas. 14
Factores hormonales[editar]
Las hormonas son mensajeros químicos que actúan en un lugar del organismo diferente al
sitio en que se producen. Existen varias hormonas que desempeñan importantes funciones en
la fisiología ósea. Algunas de las más importantes son las siguientes:14
Calcitonina. Es producida por las células C del tiroides. Tiene un efecto contrario a la
parathormona, inhibe la reabsorción ósea y aumenta el nivel de calcio en sangre.
Vitamina D. Favorece la absorción de calcio y fosfato por el intestino y la
mineralización del hueso.
Clasificación[editar]
Huesos largos[editar]
Presentan una forma cilíndrica, predomina la longitud sobre el ancho y grosor, se dividen en
tres porciones un cuerpo y dos extremos (proximal y distal), generalmente se encuentran en
los miembros locomotores. Ejemplos: húmero, fémur, etc.
Huesos cortos[editar]
Presentan una forma cuboide, no predomina ninguna de sus dimensiones, su función es de
amortiguamiento. Ejemplos: huesos del carpo y tarso.
Huesos planos[editar]
Su principal característica es que son más anchos y largos que gruesos, su función es la de
proteger tejidos blandos e inserción de grandes masas musculares. Ejemplos: escápula u
omóplato, huesos del cráneo y coxal.
Huesos irregulares[editar]
No presentan forma o división predominante para su agrupación, son impares y se localizan
en la línea media, sus funciones son variables aunque la de mayor importancia es la
protección del sistema nervioso central. Ejemplo: vértebras.
Huesos sesamoideos[editar]
Son pequeñas estructuras de tejido óseo con forma más o menos ovaladas y número
inconstante que se localizan en las proximidades de los tendones. Su función es la de
disminuir la fricción y alteran la dirección en que se realiza la tracción muscular. Los más
importantes se localizan junto a la articulación metatarsofalángica del primer dedo del pie.
La rótula, aunque se estudia de forma independiente, está considerada un hueso sesamoideo
de gran tamaño. Pueden sufrir fracturas y presentar procesos inflamatorios que se conocen
como sesamoiditis.15