La ciudad de Huarmey es una ciudad portuaria del centro-noroeste del Perú,
capital de la provincia homónima (Región Ancash), ubicado a 297.70 km de Lima, a orillas del Río Huarmey, frente al litoral peruano y su clasificación geográfica es de "desierto sub-tropical" y "maleza desértica sub- tropical". Huarmey está ubicada paralelamente a la falla de la placa oceánica, que está parcialmente activa sísmicamente; además, por ubicarse frente al Océano Pacífico, es afectada por la corriente del Niño. Esta ciudad destaca por tener una gran variedad de playas (Corralones- Tuquillo), que compiten dentro de las mejores diez del país, bosques de piedras que forman distintas figuras y complejos arqueológicos.1 En Huarmey, aún se preservan las ruinas de una fosa común de la época precolombina perteneciente a la cultura chimú, datada hacia el siglo XIV.2 Pero sin duda su mayor sitio arqueológico lo constituye el Castillo de Huarmey, imponente construcción de la cultura huari, donde recientemente se puso al descubierto 63 tumbas intactas, con osamentas asociadas con 1.200 objetos, entre joyas de oro y plata, fina cerámica y utensilios de madera. El desdoblamiento de la calzada existente en el Tramo IV se inició en noviembre del 2012, desde el km 216+020 (Pativilca y Paramonga) hasta el km 292+120, en las inmediaciones de la localidad de Huarmey. De esta manera, sumándose a la segunda calzada del Tramo III: Casma- Huarmey, que se inauguró en mayo de 2013, ya se cuenta con unos 160 km de autopista con doble calzada. La población directamente beneficiada será de 744,000 personas, de las provincias de Barranca, Huarmey, Casma y Chimbote, de las regiones de Lima y Áncash. Con la culminación de obras en el Tramo IV, la construcción de la segunda calzada en toda la Red Vial 4 tiene un avance del 45%. En tanto, la red tiene una longitud de 356 km. Esta importante obra permitirá a los transportistas de carga, interprovinciales y particulares transitar por una carretera de primer orden, moderna y segura, reduciendo notablemente el tiempo de viaje, el consumo de combustible en los vehículos y el riesgo de accidentes frontales. Destaca en el Tramo IV la presencia de una estructura tipo pérgola, de 185 metros de largo, única en el Perú, y que permitirá el paso de la nueva calzada sobre la actual. Se trata de una solución de ingeniería moderna y creativa que es resultado de la colaboración entre las empresas privadas y el Estado para beneficio de todos, en especial de los usuarios de la vía.