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TEORÍA Y TÉCNICA DEL ANÁLISIS POETICO

MARTHA LUCIA GALINDO ROJAS

CORPORACION UNIVERSITARIA UNIMINUTO


PROGRAMA DE LICENCIATURA EN EDUCACION BASICA CON ENFASIS EN
LENGUA CASTELLANA
TERCER SEMESTRE
VILLAVICENCIO
2012
TEORÍA Y TÉCNICA DEL ANÁLISIS POETICO

MARTHA LUCIA GALINDO ROJAS

Lic. YHON JAIRO PAEZ


Tutor

CORPORACION UNIVERSITARIA UNIMINUTO


PROGRAMA DE LICENCIATURA EN EDUCACION BASICA CON ENFASIS EN
LENGUA CASTELLANA
TERCER SEMESTRE
VILLAVICENCIO
2012
En un análisis de un texto poético se deberán tratar los siguientes puntos:

A.- Estructura externa


B.- Estructura interna
C.- Lenguaje poético

A.- ESTRUCTURA EXTERNA.

Generalmente, el poema se presentará en verso.

El primer cometido será el análisis métrico del poema, con la inclusión de un


comentario sobre todos los aspectos métricos: versos, pausas, acentos, rimas y
estrofas.

Se tendrá en cuenta que algunos poemas no presentan una métrica tradicional,


sino el verso libre.

En el verso, se indicara el nombre, clasificación y origen. (Ej: el verso alejandrino


es un verso de arte mayor, compuesto por dos hemistiquios heptasílabos, de
origen medieval. Fue utilizado por el llamado Mester de Clerecía, en el Libro de
Alexandre, obra anónima del siglo XIII, de donde recibió el nombre/).

Las pausas finales son las que marcan verdaderamente el verso. El elemento más
atractivo, para el comentario, es la presencia de encabalgamientos, motivado por
múltiples causas, según el autor y poema, y no se deben pasar por alto.

No se suele atender a los ritmos acentuales en el poema, aunque sea el elemento


primordial del mismo. Probablemente el tiempo del que se dispone no de lugar a
su estudio. No obstante, si se puede hacer alusión a ello en casos muy marcados.

En la rima se hará constar su tipo (asonante o consonante) y su esquema,


respetando las convenciones más extendidas: identificar la misma rima con la
misma letra, mayúscula o minúscula según sean los versos de arte mayor o
menor; y señalando con un guión los versos sueltos. No estaría de más señalar
los fonemas que formas la rima en cada caso, si no son muy abundantes.

Finalmente, se comentará la estrofa. Presenta, en algunos de los autores leídos,


una formulación tradicional: soneto, romance, cuartetos, serventesios, décimas,
etc... Pero en muchas otras, desde el Modernismo, aparecen esquemas métricos
novedosos, que no responden a ningún esquema fijo, sino a la libre creación del
poeta. Habrá que ver la adecuación de la misma al contenido que en ella se
expresa.
B.- ESTRUCTURA INTERNA.

En la estructura interna se reflejarán los diversos apartados en que podríamos


dividir el "contenido" del poema. Ello supone adelantar, en parte, el significado del
poema. No habrá más remedio que hacerlo así, pues el "contenido" de un poema
probablemente tiene mucho más que ver con estas cuestiones formales que con
las puramente significativas: en otras palabras: si es literatura lo es por la forma
externa que ha querido darle el poeta y por la organización de sus materiales
lingüísticos. Y no porque su significado sea poético por si mismo.

Hay que tener en cuenta, consecuentemente con lo dicho ahora, que la estructura
interna guarda relación, en muchas ocasiones, con la externa. La división en
determinadas estrofas puede indicar una división significativa.

Por otro lado, la estructura interna puede hallarse determinada en otras ocasiones
por la utilización de unos recursos expresivos diferentes en cada una de sus
partes. Si se encontraran estos recursos propios del lenguaje poético, facilitaría y
anticiparía, de nuevo, algunos elementos que se desarrollaran en el punto
siguiente.

C.- LENGUAJE POÉTICO.

El análisis del lenguaje poético es el apartado más arduo de elaborar. Presenta


múltiples rasgos y es difícilmente delimitable, por cuanto los recursos son muy
variables, incluso en diferentes poemas de un mismo libro. Además, conviene ir
aunando estos rasgos con la estructura externa y con sus valores significativos,
pues una enumeración de elementos poéticos sin valor significativo carece de todo
interés. (Ejemplo: "el texto presenta muchas metáforas, repeticiones y
aliteraciones") Y esa explicación tampoco consiste en definir las figuras (Ejemplo:
"la aliteración es la repetición de fonemas") Para realizar un buen comentario se
deben evitar estas listas y explicaciones que no aportan nada sobre el texto.
Habrá siempre que buscar su valor poético.

Radicará en el uso de figuras literarias y en el valor expresivo que aporten los


materiales lingüísticos. En realidad no son dos aspectos distintos, sino que están
funcionando en el mismo plano. La distinción es puramente metodológica.

Sin pretender la exhaustividad, se pueden apuntar algunos elementos que tal vez
sirvan de guía, teniendo en cuenta que no todos aparecerán en un determinado
poema. Advertir también que cada poema impondrá el orden en que se comentan
estos materiales; por ello, el orden en que aparecen aquí sólo obedece a los
diferentes planos de la lengua.
Sintaxis.
Los recursos sintácticos más frecuentes son: paralelismo ( a veces acompañado
de repetición), hipérbaton, asíndeton y polisíndeton. Los tres últimos son recursos
escasos en la poesía del siglo XX. Por ello mismo, su aparición es muy
significativa. El paralelismo supone un detenimiento lírico y temporal, a veces en
acciones o sentimientos que se repiten.

Semántica.
La mayor complejidad de los textos poéticos podría radicar en que predominan los
valores connotativos frente a los denotativos. Remiten a determinados temas que
suelen ser constantes en cada poeta, traspasando en muchas ocasiones un libro y
abarcando la obra entera del poeta y hasta toda una época literaria.

Generalmente, no afectan solamente a una palabra, sino a un grupo de ellas que


mantienen un estrecha relación significativa. Estas reiteraciones léxico-semánticas
van referidas a significados "clave" que es necesario comentar

Las figuras literarias referidas al plano semántico son muy numerosas.

Figuras de pensamiento.

La personificación o prosopopeya generalmente le sirve al poeta para trasladar


sus sentimientos a todas las cosas. Aunque no muy presente en los textos
poéticos elegidos, hay dos figuras contrarias: cosificación y animalización: ambas
se pueden rastrear en los Poemas humanos de Vallejo; están muy frecuentes, con
otra intención, en el estilo esperpéntico que utilizan Valle-Inclán y Cela en sus
respectivas obras. En estos casos, se trata de rebajar la dignidad de los
personajes; en Vallejo, se parte de esa degradación del ser humano para
aceptarla casi con alegría.

La antítesis representa el contraste de ideas o pasiones (amor/odio,


realidad/deseo). Al ser la visión del poeta una visión subjetiva, es muy frecuente
que se vea alterada, sobredimensionada: aparecerá la hipérbole.

Tropos
El uso y la renovación expresiva de la metáfora es probablemente el rasgo más
característico de la poesía del Siglo XX. Arranca en el Modernismo para pasar a la
depuración expresiva de Juan Ramón Jiménez y llegar a la culminación con la
Generación del 27. Siempre pone en estrechísima relación dos términos (real e
imaginario), de donde proviene toda su fuerza expresiva. Se tratara siempre de
explicar esa relación y los nuevos significados que adquieren los dos términos. En
el Modernismo, la metáfora aparece vinculada con la sinestesia. Y en otras
ocasiones, se podría establecer relación con el símbolo: no podía ser de otra
forma, pues el Simbolismo francés es una de las fuentes de donde se nutre
nuestro Modernismo. También en relación con la metáfora, aparece el símil o
comparación, que mantiene el deslinde entre los dos elementos puestos en
relación.

La metonimia (Parece cada vez más inadecuado establecer la diferencia con la


sinécdoque) establece la relación entre el todo y la parte o viceversa. Establece
cambios significativos importantes, al reducir o ampliar la caracterización
semántica de las realidades a las que se refiere.

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