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VEGUETA, Número 7, 2003 – ISSN: 1133-598X 135

LA INSTITUCIONALIZACIÓN DEL MODELO


TABAQUERO ESPAÑOL 1580-1636:
LA CREACIÓN DEL ESTANCO DEL TABACO
EN ESPAÑA. NOTA Y DISCUSIÓN

SANTIAGO DE LUXÁN MELÉNDEZ


ÓSCAR BERGASA PERDOMO
136 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

Resumen: La nota pretende analizar tura, el trabajo del historiador sevillano


el contexto histórico en el que se inicia la aporta una nueva visión al estudio especí-
economía tabaquera europea a princi- fico del tabaco en nuestro país, encuadran-
pios del siglo XVII.
Las decisiones sobre la producción,
do la creación del estanco en su marco pre-
el comercio y la fiscalidad que este nue- ciso (las Cortes de Castilla de 1632-1636) y,
vo producto provoca en los estados de la en consecuencia, dentro de la problemática
época vienen motivadas por su crecien- de la reforma fiscal que ensayó la Monar-
te importancia como fuente de recursos quía Española durante el reinado de Felipe
públicos ante el espectacular desarrollo IV, tratando de sustituir, o reformar, el Ser-
de su consumo. En un escenario de gue-
vicio de Millones, sin dejar de luchar con-
rra casi permanente (Guerra de los Trein-
ta Años, Guerras de Flandes, etc.), el ta- tra el fraude, que es uno de los campos en
baco proporciona unos ingresos fiscales los que se debate la lucha política en el An-
saneados a los gobiernos. tiguo Régimen2.
En este contexto se sitúa la aparición Tres grandes cuestiones quedan abier-
del primer monopolio fiscal moderno, el tas a la discusión y a la necesidad de nue-
estanco español del tabaco creado por
vas investigaciones, después del estudio
Real Cédula de 26-XII-1636 y las conse-
cuencias que la misma tuvo para el pos-
introductorio y la publicación de la Real
terior desarrollo de una economía del ta- Cédula de 26-XII-1636. En primer lugar, la
baco en España. problemática del cultivo de la planta en Es-
Palabras clave: tabaco, monopolio, paña. Se entiende, después de los primeros
fiscalidad, fraude y contrabando, aran- análisis pioneros de Pérez Vidal3, que con
celes, reforma fiscal, comercio interna- el estanco, la Monarquía española adopta
cional.
la división del trabajo colonial, reservando
Abstract: The note expect to analyse para la península el consumo; la metrópo-
the historical environment at the begin- li también se reservaría la manufactura-
ning of the XVII century when the to- ción, o el repaso para el mercado interior,
bacco is introduced into the European e incluso para el mercado americano4, de la
economy.
variedad de polvo aunque, desde un pri-
The production, trade and taxation
on the tobacco decisions take for the go- mer momento, en Cuba, se molture la ho-
vernments, was driving to become im- ja, y en la Nueva España5, se acabe desa-
portance of fiscal revenues produced by rrollando un importante renglón manufac-
the growing consumption of that one, turero relacionado con el tabaco. Nos falta
because the war needs expenditures dri- encontrar la justificación de la política eco-
ve the fiscal regulation.
nómica, o fiscal, de esta decisión, sobre to-
In this context the Spanish govern-
ment establish the first fiscal monopoly
do cuando sabemos que no fue la única
by Royal Act of 26-XII-1636. postura que adoptaron los estados mer-
Key-words: tobacco, monopoly, ta- cantilistas (recuérdese el modelo de gran-
xes, fraud and smuggling, tariffs, fiscal jas francesas). ¿Qué razones aconsejarán la
reform, International trade. prohibición de su cultivo en España? Des-
de luego la Real Cédula, tan cuidadosa en
En las líneas que siguen, vamos a reali- todos los aspectos del tabaco y del control
zar un ejercicio de contextualización del re- de su mercado, no se manifiesta en este as-
ciente estudio de J. M. Rodríguez Gordillo1, pecto. La respuesta de tener asegurada la
intentando valorar la pertinencia del esta- producción con los envíos cubanos y vene-
blecimiento del estanco del tabaco en Es- zolanos no parece suficiente6. Los france-
paña al final del primer tercio del siglo ses, en épocas parecidas, se inclinaron por
XVII. Vaya por delante que, en nuestra lec- la sustitución de la planta por la caña de
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azúcar y el algodón, cultivando la Nicotia- entramado de la nueva renta, que la Real


na Rústica en el territorio metropolitano. Cédula diseña, en sus manos? 7.
En segundo lugar, parece que el carác- La nota se ha estructurado en tres pun-
ter prematuro del monopolio fiscal espa- tos. En el primero, constatamos la existen-
ñol, con relación al desarrollo del mercado cia del tráfico de tabaco, de una manera re-
tabaquero metropolitano, que, sin embar- gular, desde fines del siglo XVI. En el se-
go, da la impresión de haber alcanzado un gundo, nos adentramos en el proceso de
nivel reexportador significativo con ante- regulación mercantilista del tabaco, pre-
rioridad a la Real Cédula de 1636, acogo- guntándonos por la posibilidad de la Mo-
tará el desenvolvimiento del mismo, ha- narquía española de mantener la exclusivi-
ciendo ineficiente la implantación del es- dad de la intermediación del tabaco o, en
tanco. Las pocas cifras de que disponemos, su defecto, el liderazgo, entre las Indias y
con relación a Inglaterra, Francia o Portu- Europa. Por último, nos ocupamos del pro-
gal, parecen avalar esta reflexión. Junto a ceso en el que se decide el establecimiento
este adelanto, hay que tener en cuenta, del estanco.
igualmente, el carácter geográfico del es-
tanco que, durante el siglo XVII, quedó re- 1. LA EXISTENCIA DE UN TRÁFICO
ducido al ámbito territorial de la Corona de TABAQUERO ENTRE SEVILLA Y
Castilla. Esta característica asimétrica del LAS INDIAS DESDE FINES DEL
monopolio fiscal (en el que no se incluye el SIGLO XVI
País Vasco, Navarra y la Corona de Ara- Los primeros datos de un comercio es-
gón), que responde a la estructura de la table, a través de la Casa de Contratación
Monarquía, incrementará la potencialidad de Sevilla, hay que remontarlos a fines del
del fraude y el contrabando, desde estos siglo XVI. Arcila Farias8, en su Economía co-
últimos territorios a la propia Corona de lonial de Venezuela, contabiliza desde la re-
Castilla. gión de Varinas unas 100.000 libras al año9.
Finalmente, en tercer lugar, el fraude y Para un período un poco posterior (1609-
el contrabando siguen siendo el gran argu- 1613) los datos aportados por Chaunu y
mento sobre el que se debe volver. ¿El es- Céspedes10, arrojan unas entradas anuales
tanco nacía para combatir el fraude y el cercanas a las 200.000 libras, si bien es cier-
contrabando, que principalmente estaba en to que lo que hay que valorar es el incre-
manos de los hombres de negocios portu- mento notable de las llegadas, especial-
gueses, como ha sugerido Céspedes, en su mente en los dos últimos ejercicios (entre
discurso de ingreso en la Real Academia de 1609 y 1613 las remesas se multiplican por
la Historia o, por el contrario, ponía el gran 26).
138 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

Cuadro 1
Tabaco en rama procedente de las Indias (1609-1613) en lbs.

Cuba, Centroamérica
Tierra firme Otros Totales
y Nueva España

1609 6.675 8.653 15.328


1610 44.683 14.849 3.869 63.401
1611 119.303 60.103 4.120 183.526
1612 128.973 186.084 12.161 327.218
1613 98.875 182.765 122.924 404.564
Totales 994.037
Promedio 198.807

Fuente: Chaunu (1955-56) y Céspedes (1992).

2. LA REGULACIÓN MERCANTILISTA todos a 4 rs/lb., excepción hecha de los in-


DEL TABACO feriores de Santo Domingo, que se cotizan
a 2 rs/lb.
Dentro de las prácticas habituales de los
El tabaco más apreciado será el de Va-
estados mercantilistas se gravarán las mer-
rinas (Venezuela), que también será el más
cancías, tanto a la entrada, como a la sali-
demandado en los mercados europeos, de
da.
modo especial por los holandeses, que
2.1. Derechos de entrada (1611) mantendrán el apego a este tipo de tabaco
durante el siglo XVIII.
La importancia creciente del comercio
tabaquero se constata con la imposición,
2.2. Derechos de salida (1616)
en 1611, de derechos de entrada a los ta-
bacos que vienen de las Indias11. La discri- El tabaco que llega a Sevilla se expende
minación en el porcentaje del valor que se a Francia, Inglaterra, Holanda, ciudades de
cobra en el puerto de Sevilla, nos indica la Italia e, incluso, a Berbería. Desde 1616, lo
diferente calidad del producto. De este que nos habla también del auge de este trá-
modo, a los tabacos procedentes de Tierra fico, se fijan unos derechos de salida de 1,5
Firme (Honduras, Caracas, etc.), se les rs/lb. (Real Cédula de 1/V/1616)12. Este ca-
aplica un 15%, a los trasegados desde Cu- non, según López Linage y Hernández An-
ba un 7% y, finalmente, a los de peor cali- dreu, era semejante al que el gobierno in-
dad, originarios de Santo Domingo, un glés aplicaba a los tabacos españoles, a su
2%. En el mercado de tabacos se venderán entrada en la Isla.
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 139

Cuadro 2
Exportaciones de tabaco de España (1611-1614) en lbs.

Libras Índice

1611 133.000 100


1612 270.000 203
1613 302.000 227
1614 500.000 376
Total 1.205.000
Promedio 301.250

Fuente: López Linage y Hernández Andreu (1990: 83), tomado de J. García Torres, Las rentas estan-
cadas, Madrid, 1884: 29.

O los datos de Céspedes y Chaunu, con 2.3. ¿Era posible mantener el monopolio
relación a las llegadas son muy bajos, o del tabaco en Europa y en América
bien desde el principio el contrabando y el por parte de la Monarquía Española?
fraude se han instalado en el mercado del
tabaco, aunque éste todavía no se haya de- 2.3.1 Los diversos modelos europeos:
sarrollado13, o, por último, podemos atre- impuestos aduaneros, impuestos de
vernos a afirmar las dos cosas. consumo, impuestos específicos y
El interés, en cualquier caso, que el ne- estancos
gocio tabaquero empezaba a representar, Como acabamos de plantear, desde la
propició que hasta al Consejo de Hacienda, perspectiva del estado mercantilista euro-
llegasen propuestas de arrendamiento de peo (Inglaterra, Francia, Holanda, España,
estos ingresos. Entre 1615-1630, que noso- las repúblicas italianas), el tabaco fue con-
tros sepamos, se presentaron dos solicitu- siderado como un producto más de los im-
des de arrendamiento de los derechos de portados desde las Indias, por supuesto a
salida, la de Juan Bautista Sobranes14 (1615) mucha distancia del oro y la plata, que
que intentó quedarse con los derechos de eran los recursos más preciados —el im-
exportación en 4.000 ducados, imponiendo perio español, en especial, fue sobre todo
una tarifa fija de 2 rs./lib., y la que resul- minero— al que se aplicaron aranceles
taría exitosa de Payo Rodríguez de Paz, aduaneros16, impuestos al consumo17, im-
que ofreció algo más de 32.000 ducados15. puestos específicos18 y, para finalizar, se
Parece evidente que la primera de las pro- reguló en forma de monopolio comercial
puestas debió de resultar poco atractiva al (Inglaterra19, Holanda, o el Ducado de
Consejo de Hacienda, por el amplio mar- Mantua) o monopolio fiscal o estanco (Es-
gen de beneficio que se reservaba el arren- paña en 1636); el caso francés podría ser
dador. Efectivamente, si aplicamos al pro- considerado en su primera etapa un mo-
medio del cuatrienio 1611-1614 (301.250 li- nopolio comercial y, a partir de 1674, fis-
bras), la tarifa de 2 rs, Sobranes debería cal. Los portugueses establecieron un mo-
haber obtenido 54.772 ducados, es decir, nopolio de la producción y del comercio
13,6 veces más que lo que ofrecía al erario entre Brasil y la Metrópoli20, pero no es-
público. La cantidad en que se remató en tancaron el tabaco en el suelo portugués;
1630, aplicando unos derechos de salida de en este sentido, estarían más cerca del sis-
1,5 reales, suponiendo que la cantidad ex- tema inglés.
portada fuese la misma, dejaban al arren- En la medida en que el cultivo del ta-
dador un margen de casi 9.000 ducados. baco (principalmente en las Indias, aunque
140 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

también en Francia y en el Palatinado), en les/100 libras; en segundo lugar, se excep-


correlación con su consumo (Europa + las tuará de este arancel al procedente de la is-
Indias), se fue extendiendo, empezó a con- la de San Cristóbal u otras islas, pertene-
vertirse en una fuente de ingresos, cada cientes a la Compañía. De todos modos, es-
vez más interesante para el Estado. te privilegio durará poco, puesto que, en
Los franceses21, durante el reinado de 1632, se unificarán todas las tarifas de en-
Luis XIII, habían empezado a cultivar ta- trada. El sistema volverá a ser restablecido,
baco en sus colonias americanas (según sin embargo, en 1662, por el ministro pa-
Price, aunque las Antillas francesas fueron radigmático del mercantilismo francés,
en su origen colonias tabaqueras, el abas- Colbert. Hay que constatar, además, que la
tecimiento de tabaco indiano francés pro- Compañía tenía libres los derechos de re-
cedió, hasta el establecimiento del estanco exportación que, como veremos, será una
en 1674, mayoritariamente de Chesapeake, de las reivindicaciones de los cargadores
es decir, tabaco virginiano22), e, inmediata- sevillanos, cuando se establezca el estanco
mente, también en el propio suelo francés: en España. La nueva tarifa de 1664 signifi-
Alsacia (1618), Artois (1620) y Normandía có una discriminación arancelaria entre los
(1626). tabacos procedentes del extranjero (260 so-
Como en el caso español, el tabaco que les/100 libras), es decir, los que venían de
entraba en territorio francés era sometido a Venezuela, Brasil o Virginia, y los que eran
unos derechos de entrada (4 soles/100 li- propiedad de la Compañía (80 soles/100 li-
bras) y a otros más elevados de salida (6 so- bras)24. En resumen, un barrera proteccio-
les/100 libras). Richelieu llegará a conside- nista de mucho más calado.
rar —lo que sugiere que el mercado francés Lo que más nos interesa, y esta es una
del tabaco estaba en plena expansión— que diferencia fundamental con respecto al mo-
el establecimiento de un impuesto extraor- nopolio español, es que el impuesto adua-
dinario sobre el mismo, podría ser sufi- nero estimuló la producción propia france-
ciente para cubrir los costes de la Armada sa que, en 1670, en vísperas del estableci-
del Mediterráneo. Como puede apreciarse, miento del estanco, alcanzaba los 3.000.000
el paralelismo con el caso español es im- de libras25. Francia en el mercado interna-
portante. Hay que buscar nuevas fuentes de cional del tabaco había conseguido uno de
ingresos, y el tabaco lo es, para poder hacer los objetivos fundamentales del mercanti-
frente a los gastos de la guerra, que son los lismo (la sustitución de importaciones) y
prioritarios. aún tenía capacidad para exportar a los
La particularidad francesa, con respec- mercados mediterráneos e, incluso, a los
to a la Monarquía Española, hay que bus- del Norte de Europa. Mientras tanto, en las
carla en que aquélla entrará en la senda Antillas francesas (Guadalupe, Martinica
mercantilista del siglo XVII —como Ingla- etc.) el tabaco había ido siendo sustituido
terra y Holanda— creando compañías co- —desde 1639/1640— por el azúcar26. La
merciales, desarrollando, frente al imperio Monarquía francesa, en el ínterin, había in-
minero español, economías de plantación troducido un impuesto específico sobre el
muy ligadas, como es sabido, al tráfico es- tabaco propio, de 20 soles/libra (1660), re-
clavista. La creación, en 1623-423, de la bajado a 5 soles/libra, cuatro años después
Compañía de las Indias tendrá unas reper- (1664), reservando un canon superior, de 10
cusiones directas en el tráfico tabaquero, soles, para el brasileño. Finalmente, el es-
desde el punto de vista de la regulación del tanco sería establecido en 1674 (27/IX), de-
Estado. En primer lugar, las tarifas de en- jando los precios de la libra consumida en
trada del tabaco importado se multiplica- 20 soles, para la nacional, y en 40 soles pa-
rán casi por ocho, situándose en 30 so- ra el tabaco importado. Por lo que sabemos
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 141

la fase de transición al estanco fiscal no se libras27, el francés —ya lo hemos dicho—


hizo sin sobresaltos. mostraba, en vísperas de su estanco, un
Frente a las pobres cifras oficiales del montante cercano a los 3.000.000, mientras
estanco español —es cierto que nuestras que el tabaco del Brasil, que se descargaba
fuentes se refieren al período anterior al es- en el jardín de Lisboa, debía estar en torno
tanco y que además son datos fragmenta-
a los 3,5 millones de libras. Recordemos
rios— los principales países que competían
en este mercado presentan resultados que que unos años antes (1674), Pedro II había
parecen más satisfactorios. creado «La Junta da Aministraçâo do Ta-
El tabaco importado por el puerto de baco», con el objetivo de centralizar desde
Londres, por ejemplo, alcanzaba entre el Almacén de Lisboa, las compras y dis-
1637-1642, el promedio anual de 1.820.878 tribución en el mercado28.

Cuadro 3
Tabaco importado por el Puerto de Londres (1637-38/1641-42) en lbs.

Tipo 1637-1638 1638-1639 1639-1640 1641-1642

Virginia 1.080.827 2.361.999 1.102.773 1.044.554


Barbados 125.318 204.956 28.010 66.895
San Cristóbal 270.629 473.833 108.212 139.451
España 60.597 (3,94%) 93.306 (2,97%) 115.773 (8,54%) 6.379 (0,50%)
Totales 1.537.371 3.134.094 1.354.768 1.257.279

Fuente: Prince (1973: 75)

2.3.2. Los intentos frustrados de mantener se cultivaba el tabaco de «Paplanta». Debía


el monopolio del cultivo esta zona sus ventajas, además de las con-
diciones naturales, a su situación en el ca-
A) Regulación del cultivo y zonas mino de Veracruz a México (principal mer-
productoras para el mercado interno cado y centro de redistribución de Nueva
indiano y para la metrópoli España) y a las facilidades de transporte
Antes de que el cultivo se prohiba tem- (fletes baratos, arrieros y mulas desocupa-
poralmente (Real Cédula de 1606), debe- dos) que se le presentaban después de la
mos referirnos brevemente a que su plan- recolección de la planta y de la celebración
tación se había regulado, coincidiendo con de las ferias anuales, a la llegada de las flo-
la normalización del comercio entre las In- tas de Sevilla. Trinidad, en cuyas bahías,
dias y la Metrópoli. En Cuba, en Bayamo y franceses, holandeses e ingleses intercam-
Trinidad, entre 1580-1600; igualmente, los biaban, desde 1600, manufacturas europe-
primeros molinos de molturación de hoja as por tabaco31. Otras zonas serían Nicara-
de tabaco, que tienden a localizarse alre- gua; Jamaica; la región de Chapapoyas o
dedor de La Habana, también aparecen en Jaén de Bracamonte, ambas en el norte de
las últimas décadas del siglo XVI (Rivero Perú, al que hasta la prohibición de inter-
Muñiz, 1965)29. cambios por Felipe II pudo llegar algo de
Conocemos las zonas tabaqueras del Im- tabaco novohispano; Cumaná, Guayana y
perio español, gracias a la obra de Antonio Varinas, en Venezuela, lugar de aprovisio-
Vázquez de Espinosa, Compendio y descrip- namiento de los contrabandistas portugue-
ción de las Indias Occidentales30. Serían estas, ses; y, por supuesto, Cuba, que curiosa-
el norte de la región de Veracruz, donde mente, escribe Céspedes, no es menciona-
142 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

da por Vázquez de Espinosa, cuando esta- zando la disponibilidad de mano de obra


ba llamada a convertirse en el abastecedor esclava abundante y a bajo coste, para las
principal del mercado metropolitano. plantaciones tabaqueras incipientes, las ra-
Podemos escribir que, antes de que co- zones principales del fracaso español como
mience el siglo XVII32, con un cierto ade- proveedor del tabaco mundial. Esta insufi-
lanto al desarrollo tabaquero español, ya se ciencia del Imperio hispánico, sería apro-
estaba configurando el mercado interno in- vechada por los portugueses, convertidos
diano, especialmente en la Nueva España. en intermediarios principales entre Vene-
Según Céspedes, en esos momentos, pode- zuela e Inglaterra y Holanda.
mos reconocer de modo diferenciado a En definitiva, el alto precio del tabaco
productores, consumidores e intermedia- indiano español, unido a las restricciones
rios, independientemente de que existan temporales de su cultivo —estrategia que,
fumadores autosuficientes. Igualmente han por otro lado, también utilizarán los fran-
mejorado las técnicas de envasado y trans- ceses en las Antillas a fines de la década de
porte, es decir, añejamiento, almacenaje, 1630, para contener la bajada de precios—
preservación de humedades y malos olo- con objeto de aminorar el contrabando, da-
res, carga en mulas etcetera. rán como resultado que los portugueses se
La salida del tabaco indiano continen- tomen en serio su cultivo en Brasil donde
tal, excepción hecha del de Varinas, gracias había sido introducido desde 1548 —a co-
al interés mantenido de los holandeses, re- mienzos del siglo XVIII se convertirá en el
sultó frustrada desde el principio. Desde tercer renglón exportador, solo por detrás
México (Acapulco), se embarcaría algo ha- del azúcar y del algodón35— y que los in-
cia el Perú, tráfico legalmente cerrado des- gleses, extiendan su cultivo en la Bahía de
de 1587-159133 y, más adelante, con destino Chesapeake. En opinión de Céspedes, con
a Manila, dando lugar, en el siglo XVII, al el cambio en la oferta mundial de tabaco,
nacimiento del tabaco filipino34. A fines del España seguiría manteniendo un lugar re-
siglo XVI, de todas formas, el tabaco vera- levante, bien por los circuitos legalmente
cruzano era adquirido por marineros y sol- establecidos, bien a través del contraban-
dados para su propio uso y, hasta 1580, pa- do, por la superior calidad de su produc-
ra revenderlo en Sevilla. Según Céspedes, to.
desde esta última fecha, —que además,
añadimos nosotros, pudo significar una B) De la prohibición del cultivo en 1606 al
entrada más franca del tabaco brasileño desarrollo del cultivo en Virginia en 1612
por los puertos secos castellanos, con mo- Ante el fuerte contrabando que los co-
tivo de la unión entre las dos coronas— es- merciantes extranjeros practicaban en las
te «comercio de pobres» se centralizará en colonias españolas, cargando subrepticia-
La Habana, a cuyo puerto arribaba hoja de mente las hojas de aquellas tierras, con cla-
Jamaica, Nicaragua, Yucatán etc, que era ro perjuicio de la hacienda metropolitana36,
cargada en los bajeles, junto al tabaco cu- el gobierno de Felipe III (Real Cédula de El
bano, para emprender el viaje de retorno a Escorial de 26-III-160637) prohibirá las siem-
la metrópoli. Serían los costes de los fletes, bras en La Española, Puerto Rico, Cuba,
mucho menos onerosos desde la Habana, Venezuela, Cumaná y Nueva Andalucía.
que desde Veracruz, los que darían su pre- No parece, sin embargo que la medida pu-
eminencia al tabaco de Cuba. diese tener mucha continuidad.
Céspedes, encuentra en el sistema de Como estamos poniendo de manifiesto,
flotas, imposibilitando el libre tráfico entre el reconocimiento de la importancia eco-
productores y consumidores, y en el mo- nómica del tabaco, es un fenómeno de las
nopolio del tráfico de esclavos, obstaculi- últimas décadas del siglo XVI pero, sobre
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 143

todo, de los primeros compases del XVII, bería ser todo el que no se consumiese en
no sólo en España, sino también en Ingla- los territorios americanos. Las medidas pu-
terra, Francia, Holanda y Portugal. Pode- nitivas que de la norma emanan, son las
mos aducir como ejemplo, el caso del ta- habituales en las prácticas de los estados
baco virginiano. En el establecimiento bri- mercantilistas: pena de vida y perdimiento
tánico de Jamestown (Virginia)38, fundado de sus bienes para los defraudadores y pér-
en 1607, se cultivó tabaco con éxito —qui- dida de la mitad de su hacienda y priva-
zá como alternativa a la prohibición espa- ción perpetua de oficio para los adminis-
ñola de 1606— desde 1612, con semilla tra- tradores que no cumpliesen con su obliga-
ída de Trinidad. Según escribe Goodman, ción. Con posterioridad, el intento de
era el momento en que la colonia, por di- fomentar el cultivo, también dentro del es-
ficultades económicas, estaba a punto de píritu mercantilista, condujo, ésta vez, a
ser abandonada. Desde esa perspectiva, el conceder exenciones tributarias a los plan-
tabaco habría sido fundamental en la con- tíos de las islas y de la zona costera conti-
solidación de las colonias inglesas de nental. La Real Cédula de 21-XI-162542,
América del Norte. Las primeras exporta- otorgaba exenciones del pago de almojari-
ciones de tabaco virginiano a la metrópoli fazgos y alcabalas, a los vecinos de la Tri-
se iniciarían al año siguiente (1613), alcan- nidad y La Guayana, de los tabacos que en-
zándose en 1628 la cifra de 370.000 libras, viasen a Sevilla43.
volumen muy semejante —según los datos
que nos proporcionan Chaunu y Céspe- 2.4. El control de la actividad
des— al que se estaba descargando en la manufacturera en el territorio
Casa de Contratación de Sevilla. La opción peninsular. La identificación de los
productora de la hoja abría las vías a los portugueses como presuntos
imperios de plantación (Inglaterra, Fran- implicados de los fraudes, tanto en
cia, Holanda etc.), que al cuidado de las la producción como en el comercio
grandes compañías comerciales, competi- Se intentó mediante la concentración en
rán con el modelo español. Como hemos único establecimiento: la fábrica de San Pe-
puesto de manifiesto, hasta ese momento, dro de Sevilla (1620). El control de la pro-
la piratería y el contrabando habían sido la ducción (muchas veces repaso con el moli-
opción de las potencias europeas que aún no del polvomonte que venía de Cuba ya
no poseían imperios coloniales39. En con- molturado) pretendía evitar los fraudes y
clusión, Inglaterra, Francia, Holanda y los abusos que se cometían en su elabora-
Portugal —escribe Fisher40— durante la ción. De este modo, a la altura de 1634,
primera mitad del siglo XVII identificaron dentro del proceso de negociación que
las posibilidades de expansión colonial en condujo al estanco podemos leer:
el Caribe, el Orinoco o el Amazonas, con «Que mucho número de gente, y per-
la eventualidad de cultivar tabaco a esca- sonas del Reyno de Portugal, y no de otro,
la. tratantes en tabaco y en molerlo, han te-
Como es lógico, esta prohibición del nido y tienen por costumbre en la dicha
cultivo tuvo que abandonarse enseguida. ciudad [Sevilla]44 y otras partes mezclar
Este es el significado de la Real Cédula de con el dicho tabaco polvos de cáscara de
26-VIII-161441, con la que se intentaba re- pino, de corteza de encina, y de cepas de
servar —según Rodríguez Gordillo— el viñas, y de otras cosas semejantes, en gran
cultivo del tabaco colonial para la metró- daño de la salud, y fraude de los derechos
poli, desde donde, una vez manufacturado, reales»45.
se reexportaría al resto de Europa. Se en- Recordemos, escribe Rodríguez Gordi-
tiende que el tabaco remitido a Sevilla de- llo, que estos portugueses46 son factores y
144 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

hombres de negocios que se han incorpo- 3.1 La primera propuesta de estanco


rado al grupo de financieros que Olivares (1618). Otros antecedentes (la
utilizará, a partir de 1628, como alternati- Pimienta, 160548; la Sal, 1631)
va a los banqueros genoveses.
Ya hemos visto como, en 1615, en mo-
Según Rodríguez Gordillo, a través de
mentos de expansión de las importaciones
una importante red comercial, serán los legales de tabaco del Nuevo Mundo
principales responsables del contrabando: (404.037 lbs. en 1613) y de las exportacio-
sustraen tabaco directamente de las colo- nes, igualmente registradas, a Inglaterra,
nias, lo introducen en Amsterdam, Londres Francia, Holanda, Italia, Berbería (302.000
y otros mercados europeos y, al mismo lbs. en 1613, por 500.000 lbs en 1614), hubo
tiempo, realizan fraudes y adulteraciones una propuesta fallida al Consejo de Ha-
en su elaboración. cienda, para arrendar los derechos de ex-
portación, por parte de Juan Bautista de
3. EL ESTABLECIMIENTO DEL Sobranes, y otra exitosa, en 1630, de Payo
ESTANCO DEL TABACO EN Rodríguez de Paz49.
ESPAÑA (REAL CÉDULA DE Igualmente, hay que destacar que en es-
28-XII-1636) tas décadas iniciales del siglo XVII, en cu-
yo conocimiento conviene, sin duda, pro-
El núcleo principal del nuevo libro de
fundizar, hubo un intento más directamen-
Rodríguez Gordillo, está constituido por el
te relacionado con la Real Cédula de 1636,
apartado que consagra al estudio del esta-
que fue el de Duarte Eustacio (1618) de ob-
blecimiento del Estanco en el proceso de
tener en arrendamiento el estanco del ta-
las Cortes de 1632-1636, que concluye con
baco para todo el territorio de Castilla, pro-
la Real Cédula de 28-XII-1636, que se trans- puesta que no fue considerada por el Con-
cribe, que nosotros sepamos por primera sejo de Hacienda50.
vez, íntegramente47. La secuencia que con- Igualmente, la historiografía america-
duce al estanco y su posterior arrenda- nista ha defendido la implantación del es-
miento, puede ser esta: 1) primeras pro- tanco en América, incluso, con anteriori-
puestas de estanco (1618) y otros antece- dad al de la metrópoli. Es el caso de Gil
dentes 2) los imperativos fiscales como Bermejo (Puerto Rico en 1632) y Vila Vilar
consecuencia de la guerra, el servicio de (también Puerto Rico, 1621)51. Para Rodrí-
millones y las Cortes de 1632-1636, en las guez Gordillo más que del establecimiento
que el tabaco y su estanco aparecen como de un monopolio fiscal, estamos ante un
un medio más con el fin de satisfacer el ser- arancel específico para ser aplicado por la
vicio de 2,5 millones de ducados, pagade- administración colonial en obras públicas,
ros en seis años, al que la asamblea caste- o en gastos de defensa. Cuando, a lo largo
llana se compromete 3) El arrendamiento y de la segunda mitad del XVIII, se genera-
remate del estanco, cuyo montante —y so- lice la formula del estanco en América, se
bre todo sus sucesivas pujas— son un buen hará siguiendo el modelo español (reglas
indicador de la importancia económica del generales de 1740)52. No obstante, después
mercado interno y externo del tabaco, tan- del establecimiento del estanco español,
to para los hombres de negocios, como pa- hubo propuestas para implantar el mismo
ra la Hacienda 4) finalmente, la Real Cé- en el territorio americano. Céspedes, por
dula de 1636, que venía a institucionalizar ejemplo, anotó el proyecto de un particu-
el modelo español del tabaco, bajo la for- lar, en 1647, que abarcaría a las Indias en
mula de monopolio fiscal. su totalidad. Aún habría otro, en 1684, es-
ta vez planteado por funcionarios de la Ha-
cienda central, para abastecer desde Sevi-
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 145

lla el territorio colonial con tabaco elabora- 3.2. Las Cortes de 1632-1636: el tabaco un
do por la fábrica de San Pedro53. medio más para satisfacer el servicio
Otro antecedente «especial» de estanco de 2 millones y medio de ducados.
ha sido aducido, más recientemente, por Propuesta de estanco (septiembre de
Alonso Acero, en su estudio sobre la Ren- 1633)
ta del tabaco en Orán y Mazalquivir. Para
Este es uno de los apartados del libro en
esta autora la entrada del tabaco en el do-
los que el autor ha puesto más empeño58 y,
ble presidio norteafricano estaría interve-
según podemos comprobar, aporta una vi-
nida desde 1619, siendo libre su venta y co-
sión nueva a la perspectiva del estanco, al
mercialización, una vez traspasada la ba-
tratar de desvelar los intereses que mueven
rrera aduanera. El asunto merece interés,
a las ciudades (de modo significativo, en el
además, por dos razones. En primer lugar
tabaco, la de Sevilla) en su proceso de ne-
la cantidad que desde Sevilla se envía a
gociación con el Rey. Rodríguez Gordillo
Orán para su consumo interno, o su venta
realiza un repaso a la historiografía del ul-
posterior a la tierra de Argel, alcanzaba, en
timo tercio del siglo XX59, con el objetivo de
1623, la respetable cifra de 55.000 libras54.
tratar de contextualizar la decisión de in-
En segundo lugar, dejando a un lado los
troducir el tabaco, como uno de los arbi-
pleitos por la titularidad de la Renta entre
trios con los que se haría frente al nuevo
el Cabildo de Orán y Doña Juana de Ocam-
servicio de Millones, que venía a sustituir
po (familiar del Conde Duque de Olivares),
al fallido estanco de la sal (escritura de 25-
a quien le fue concedida en 1623, amplian-
XI-1632). El Rey solicitó 9 millones de du-
do el estanco al tabaco de hoja, conviene
cados y solamente pudo obtener del Reino
anotar que el declive de la misma tuvo un
2,5 millones, además de tener que renun-
efecto perverso importante para el futuro
ciar a la subida del impuesto de la sal. Jun-
estanco español. La planta introducida
to al azúcar (180.000 ducados) y el papel
clandestinamente en Argel (¿por los portu-
(200.000), el tabaco, que tenía que llegar a
gueses?), dejó de ser demandada desde es-
50.000 ducados60, sería el tercer medio ge-
ta tierra y, lo que es peor, los argelinos se
neral con el que habría que satisfacer los
convirtieron en productores de tabaco, des-
416.500 ducados anuales, que era el com-
bancando al tabaco importado de Sevilla, y
promiso adquirido por los representantes
en intermediarios del Jardín de Lisboa en
de la ciudades.
Berbería55. A la altura de 1632 el ensayo de
En el segundo año de las Cortes (sep-
Orán había fracasado.
tiembre de 1633), quedó encima de la me-
Más importancia tuvo, como antece-
sa la primera propuesta de creación del es-
dente directo, el fracaso del estanco de la
tanco de tabaco, que se entendía beneficia-
sal56, que se intentó en 1631 y que tuvo co-
ría, tanto a la Corona (que mantendría los
mo principal repercusión el levantamiento
derechos de entrada y salida del tabaco),
de Vizcaya hasta 1634. Puede ser aducido
como a los cargadores sevillanos (el co-
como argumento de que la corona buscaba
mercio exterior seguiría siendo libre). Ro-
un medio general y duradero que sortease
dríguez Gordillo añade, que las ciudades
los engorrosos procesos de negociación en-
con voto en Cortes que tuvieron la iniciati-
tre el Rey y las Cortes que traía consigo el
va de la propuesta del medio del tabaco,
servicio de Millones, y solventase los ago-
fueron Sevilla, Murcia, Madrid y Toledo.
bios financieros de la Monarquía57.
Siguiendo con la secuencia cronológica
del proceso, a mediados de octubre de
1633, el rey aceptaba la propuesta del es-
tanco y su arrendamiento en 50.000 duca-
dos.
146 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

Por último, cuando todavía no se había ción de la escritura final del arriendo, es
rematado el estanco, se puso en marcha el fiel reflejo, de un lado, de la pugna que en-
cobro de un nuevo derecho, a los tabacos frentó a los hombres de negocios —espe-
que entraban en el Reino, de 3 rs/lib, con cialmente portugueses— por quedarse con
el objetivo de poder hacer frente al pago el negocio del tabaco, y de otro, pese al en-
del servicio. La oposición cerrada de los se- sanchamiento del mercado tabaquero que
villanos que, recuérdese, habían sido los las cifras reflejan, el escaso tamaño legal
principales impulsores del medio del taba- del mercado español, o lo que es lo mismo,
co, consiguió que los tabacos de reexporta- la importante cantidad de tabaco que que-
ción no fuesen comprendidos en el nuevo daba fuera del mismo, aspecto, éste último,
impuesto61 (Real Cédula de 3-VII-1635). que solo puede ser valorado si lo compa-
ramos con otros espacios europeos. La pre-
3.3. El remate del estanco del tabaco gunta qué queda sin responder —haciendo
como indicador de la importancia la salvedad de que el estanco fue un pro-
económica del mercado interno y cedimiento sencillo y poco costoso para re-
caudar medios urgentes con que hacer
externo, tanto para los hombres de
frente al gasto de la guerra— es, si con
negocios, como para la Hacienda
otros procedimientos, el mercado legal y la
El cuadro siguiente, en el que recoge- capacidad recaudatoria de la hacienda es-
mos el proceso que condujo a la formaliza- pañola hubiese sido mayor.

Cuadro 4
Procedimiento que condujo al remate de la renta del tabaco

1) 17-VII-1636: pliego de condiciones de Felipe Lobo por 43.500 ducados (478.500 rs.).
2) Puja inmediata del propio Felipe Lobo por 47.500 ducados (522.500 rs.) con un afianza-
miento de 4 juros.
3) 26-IX-1636: nueva puja de Felipe Lobo por 53.000 ducados (583.000 rs.).
4) 1-X-1636: puja definitiva de Francisco Rodríguez Cardoso por 61.300 ducados (674.300 rs.).
5) 4-X-1636: escritura por la que se traspasaba el arriendo del tabaco a Antonio Soria.
6) Remate definitivo del arriendo el 10-XII-1636 por Antonio Soria62.

Fuente: Rodríguez Gordillo (2002: 124-135).

3.4. La Real Cédula de 28-XII-1636: cados pagaderos en 6 años, era el estanco


Institucionalización del sistema del tabaco. En segundo lugar, el estanco era
fiscal aplicado al tabaco de aplicación exclusiva al consumo del ta-
baco en estos reinos, tanto al por mayor,
Una de las características del modelo como al por menor, y no se cargaría impo-
tabaquero español fue, de un lado, la for- sición, ni a la entrada, ni a la salida de los
mula fiscal de estanco en el mercado me- mismos.
tropolitano y, de otro, su carácter prematu- El estanco se arrendaba, enajenando (en
ro (38 años antes que el francés). La Real teoría) el control absoluto del mismo, en la
Cedula de 28-XII-1636, escribe Rodríguez persona del concesionario. Dispondría és-
Gordillo63, significó, en primer lugar, el re- te, en primer lugar, de facultades fiscales:
conocimiento de que uno de los «medios poder de requisa e inmovilización del pro-
generales» elegido por el Reino para hacer ducto; control de entrada y salida del ta-
frente al servicio de los 2,5 millones de du- baco por las fronteras del territorio del es-
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 147

tanco; potestad de inspección de todas las 3.5. Conclusiones: precios, beneficios y


actividades relacionadas con el producto; fraude. ¿Cómo creció el mercado del
posibilidad de someter a registro a los tabaco español con el régimen del
agentes operadores; facultad de imponer estanco?
sanciones; amparo ante posibles embargos;
La implantación del estanco del tabaco
y de modo muy importante control y deci-
tuvo repercusiones de varios tipos. En pri-
sión sobre los precios.
mer lugar, afectó de modo directo a los
En segundo lugar, la necesidad de ga-
cargadores de Sevilla que se movían en los
rantizar los suministros a todo el territorio mercados externos, reexportando tabaco.
estancado le daba el control de los abaste- El texto de Rodríguez Gordillo nos aclara
cimientos, es decir del mercado: el tabaco que los comerciantes (Consulado) y la ciu-
existente en Castilla y León en el momen- dad de Sevilla —ésta última una de las pri-
to de la creación del estanco, debería ser meras promotoras del medio del tabaco
entregado al arrendador —escribe Rodrí- para hacer frente al servicio de Millones—
guez Gordillo— que, en condiciones ven- se opusieron frontalmente a la Real Cédu-
tajosas de pago64; tendría capacidad para la de 28-XII-1636. El problema fundamen-
controlar los fraudes, exigiendo que el ta- tal, para los hombres de negocios sevilla-
baco existente, en el momento de la crea- nos, es que veían recortada la disposición
ción del estanco, fuese registrado, bajo pe- de género a favor del arrendador, perjudi-
nas de decomisos y multas de cuatro veces cándose de modo manifiesto su margen de
su valor; igualmente sometería a registro el maniobra en los mercados exteriores. A Se-
tabaco procedente de las Indias antes de villa, ya lo hemos indicado, acudían mer-
descargarse; la prohibición de traginar ta- caderes italianos, alemanes, holandeses,
baco por el Reino; finalmente, el arrenda- franceses, ingleses y de Berbería, buscan-
dor podía retener almacenada, aspecto és- do el tabaco de más calidad y, por consi-
te de la máxima trascendencia, la cantidad guiente, de mayor valor. El otro tabaco que
de tabaco necesaria para el gasto de un quedaba afectado por el estanco, era el ro-
año, pagando el género de acuerdo con la llo del Brasil, que entraba libremente por
tasación de la comisión de Millones. la frontera terrestre a Castilla, desde los
Por último, el arrendador era dotado de primeros compases de la unión de las dos
facultades administrativas: era de su com- Coronas. De este género existía, además,
petencia el nombramiento de administra- un importante comercio de contrabando,
dores, estanqueros, ejecutores, guardas tanto terrestre como marítimo. En la pro-
etc.; igualmente se le concedía facultad pa- testa que los sevillanos presentaron se ha-
ra traspasar, ceder o arrendar la renta en su ce mención expresa al capital circulante
integridad, en partidos, o al por menor; no (existencias de tabaco) que tenían inmovi-
eran menos importantes, por último, el go- lizado (en el momento de promulgación
ce de las preeminencias, libertades y fran- de la Real Cédula, por encima de los
quezas reservadas a los ministros del ser- 200.000 ducados), y que ahora, en condi-
vicio de Millones, con los que se les equi- ciones ventajosas podía pasar a disposi-
paraba (llevar armas, vara de justicia, ción del arrendador. La cifra es importan-
poder contar con apoyo en las causas civi- te y según el precio que apliquemos (6 rs.,
les y criminales y no poder ser embargados 5 rs., ó 4rs./lib.) estaríamos hablando de
a no ser que fuera por deudas de la Renta 366.666, 440.000 ó 550.000 libras de tabaco,
de millones). es decir más de tres veces el tabaco que
con esta misma cotización suponía el
arriendo65.
En segundo lugar, repercutió en los
148 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

consumidores intensificando de modo sig- mar, de un lado el grave problema del con-
nificativo el abastecimiento de contraban- trabando que generó el establecimiento del
do, si consideramos la demanda rígida o estanco, independientemente de que aquel
inelástica. Efectivamente la implantación fuera una realidad, desde el mismo mo-
del estanco supuso un incremento de los mento del comienzo de la comercialización
precios de un 233% para el polvo y de un del tabaco. Y de otro, la existencia de una
250% para la hoja66. Si echamos la vista ha- importante bolsa de fraude relacionado
cia delante, no hacemos más que confir- con el mismo.

Cuadro 5
Importaciones de Tabaco de América, según origen (libras)

Decenios Cuba Venezuela Total

1650-59 6.188,84 251.489,98 306.838,00


1600-69 43.727,67 25.258,60 89.178,32
1670-79 9.584,89 40.034,43 58.952,39
1680-89 357.592,13 78.321,81 461.098,96
1690-99 346.535,98 33.819,45 415.722,09
Totales 763.629,51 428.934,37 1.331.275,47
% 57,3 32,21 100

Fuente: Elaboración sobre un cuadro de López Linage, J. y Hernández Andreu, J. (1990: 83). Tomado
de L. García Fuentes (1980): El comercio español con América 1650-1700, Diputación Provincial de Sevi-
lla y Escuela de Estudios Hispanoamericanos de Sevilla, pp. 369, 371 y 377.

Efectivamente las cifras legales de prin- valor de 1.283.707 rs. vn. La libra de taba-
cipio (cf. cuadros 1 y 2) y fin de siglo, po- co se pagaría entonces a 2,59 rs.vn. Además
nen de manifiesto la insignificancia del co- los agentes de la renta encontraron gran
mercio de importación de tabaco, una vez acopio de tabaco en manos de la marinería.
que la renta se estanca. Según López Lina- Por si fuera poco, Lutgardo García Fuentes
ge esto quiere decir que los registros ofi- añade que en la misma flota llegó también
ciales durante la larga época en que la ren- tabaco de Virginia, cuyo comercio no esta-
ta estuvo arrendada no reflejan la realidad. ba autorizado. Si consideramos que los pe-
Cuatro años de exportaciones (1611-1614) ríodos de tiempo con registros menores, se
representarían el 90% de lo importado du- corresponderían con etapas de mayor co-
rante 50 años. mercio clandestino, la década de 1670-1679
En 169767 —y este es un argumento que debió ser la de máxima defraudación y
refuerza lo irreal del cuadro 5— la flota condujo, en consecuencia, a que, entre
procedente de la Nueva España (mandada 1684-1687, se estableciese la administración
por Ignacio Barrios Leal) registró en la Ca- directa.
sa de Contratación de Sevilla solamente A la importancia del tabaco que viene
unos centenares de arrobas de tabaco de sin registrar de América, escribe Sánchez
carga, mientras que, en esa misma arriba- Belén, que no puede ser confiscado porque
da, Pedro Paradas, arrendatario de la ren- sus propietarios se acogen a indultos, hay
ta del tabaco, compró 19.764 arrobas (227,2 que añadir las partidas que entran de ex-
Tm.), o lo que es lo mismo, para poder tranjis por las aduanas interiores de Valen-
comparar con los datos de los cuadros an- cia, Aragón, Navarra y Vizcaya (Consulta
teriores, 223.333 kgs. (494.100 libras) por del Consejo de Hacienda de 29-VII-1690),
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 149

cuyo montante es estimado en un millón tener el arrendador, como consecuencia de


de libras68. De este modo, hemos sacado a los nuevos precios. Como hemos señalado,
relucir otro problema —como apuntába- solo necesitaba vender 134.860 libras, que
mos al principio— que hay que valorar, a representaban la mitad de lo que descar-
la hora de estudiar la Real Cédula, es de- gaba la Casa de Contratación, por término
cir, la reducción del ámbito territorial del medio, entre 1612-1613, si nos referimos a
estanco a la Corona de Castilla. la cotización anterior al estanco. Con un
Con relación al fraude, Sánchez Belén precio medio de 15 rs, una vez puesto en
ha recogido ejemplos significativos de la marcha éste último, solamente necesitaría
represión del mismo, durante el reinado de unas ventas entre 30.000 y 37.000 libras70.
Carlos II, que culminan con la creación de En definitiva el arrendador necesitaba 3,5
la Junta de fraudes del tabaco (1683-1687)69. veces menos tabaco en 1637 que en 1634.
En tercer lugar, como recapitulación fi- La brecha entre el mercado legal y el real
nal, realicemos una breve reflexión sobre no podía ser más manifiesta.
los beneficios a corto plazo que podía ob-

NOTAS

1 Reflexiones en torno al libro de J.M. Rodrí- más brillante del estudio introductorio de
guez Gordillo, La creación del estanco del ta- Rodríguez Gordillo.
baco en España. Madrid, Fundación Altadis, 8 Arcila Farias (1973), cit. por Rodríguez Gor-
2002, 205 p. con ilustraciones. dillo (2002:37).
2 Véase al respecto el sugestivo estudio, en el 9 La libra de Castilla equivale a 460 grs.
que se hace una valoración general de la his- 10 Céspedes (1992: 43) se refiere a un docu-
toriografía europea, de B. Cárceles de Cea mento de la Casa de Contratación (AGI,
(1994 y 1995). Contratación, 4334) y completa las proce-
3 Pérez Vidal (1956). dencias con el libro de Chaunu (1955-1956,
4 Rodríguez Gordillo (1977) puso de mani- vol. VI-2: 1033)
fiesto, como en la etapa de la administración 11 García de Torres (1875), cit. por López Lina-
directa (1684-1687), el ideario del «pacto co- ge y Hernández Andreu (1990). Las figuras
lonial» contemplaba la posibilidad del re- arancelarias eran los almojarifazgos (el ma-
torno hacia las Indias del polvo sevillano. yor de Sevilla suponía un 5% y el de Indias,
5 Céspedes (1992). variaba según la procedencia del tabaco).
6 En la Instrucción de 3-V-1684, que intentaba Véase igualmente C. Albiñana (1984).
potenciar el cultivo del tabaco en las Indias, 12 Rodríguez Gordillo (2002: 38).
podemos encontrar un documento explícito 13 Esta es la tesis defendida por J.M. Rodríguez
de la restricción de su cultivo en la Corona Gordillo (1994: 63).
de Castilla, junto a las seguridades dadas a 14 López Linage y Hernández Andreu (1990).
los cosecheros de Cuba, Guayana, Santo Do- 15 Con las cifras de Payo Rodríguez de Paz, ne-
mingo y Puerto Rico de la compra de lo que cesitarían exportarse 234666 libras (el cálcu-
sembraren, pues únicamente se abastecerá lo es nuestro). Cf. J. García de Torres (1875:
Castilla de estas provincias y del tabaco del 13), citado por Rodríguez Gordillo (2002:
Brasil para hoja (Cf. Rodríguez Gordillo 89).
(1977: 538-541). 16 Jacobo I (Bergasa, 2002, en prensa) se había
7 El análisis de contenido de la Real Cédula adelantado al resto de los estados mercanti-
es, desde nuestro punto de vista, la parte listas europeos, gravando con 6 chelines y 5
150 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

peniques la libra del tabaco que entraba en cia do Brasil (1711), citado por Céspedes
el país, lo que significó un incremento de su (1992).
precio del 4000%. La Monarquía española, 36 J. Gil Bermejo García (1983: 70).
según Rodríguez Gordillo (2002: 100), crea- 37 J. M. Rodríguez Gordillo (2002: 38; AGI, San-
rá antes del remate del estanco, en julio to Domingo 869, libro 6).
1634, un nuevo gravamen arancelario, al car- 38 Goodman (1994). Citado por R. Fisher (1999:
gar con tres reales la libra el tabaco que en- 39).
trase en el reino. 39 Sobre el caso británico con relación a las An-
17 En el caso español, la alcabala, equivalente tillas, ver J. Lorimer (1973).
al 10%. 40 Fisher (1999:39).
18 El primer impuesto específico sobre el taba- 41 Ventosilla, 26-VIII-1614, Real Cédula levan-
co parece ser que fue el francés de 1621, que tando la prohibición del cultivo del tabaco
en 1660 y 1664 introduciría nuevos impues- en Tierra Firme e Islas de Barlovento. Re-
tos ad hoc. En las colonias inglesas parece producida por J.M. Rodríguez Gordillo
que se estableció un impuesto específico so- (1994: 63), que la toma de Rivero Muñiz
bre el tabaco en 1676. (1965).
19 El monopolio comercial inglés sería estable- 42 AGI, Contaduría, 239. En Rodríguez Gordi-
cido en 1624. Por él, la Corona concedía li- llo (2002: 38).
cencias de importación a los comerciantes 43 Véase L. García Fuentes (1980: 361).
ingleses. 44 Sobre los portugueses en Sevilla véase: S.
20 C. Lugar (1977). Luxán (1993).
21 Las notas sobre Francia proceden de Price 45 J. M. Rodríguez Gordillo (1994: 64): [AGS,
(1973: 3-16). DGT, Inv. 4, leg. 29].
22 Cit. por Céspedes (1992: 44). 46 Sobre la identificación de los arrendadores
23 Para Price (1973: 73) uno de los primeros ob- del tabaco, después del establecimiento del
jetivos de la Compañía sería el tabaco. estanco, con los hombres de nación portu-
24 Que en unos años, se redujeron a 40 so- guesa, véase S. Lizana Fernández (1999: 289-
les/100 libras. 318).
25 Si estos datos son correctos, teniendo en 47 Rodríguez Gordillo (2002: 43-158).
cuenta que el consumo interno de tabaco en 48 Fue instituido en 1605 por Felipe III y estu-
Francia estaba en torno 1,5 millones de li- vo en manos portuguesas. Cf. Domínguez
bras (Price, 1973: 11), tendrían un excedente Ortíz (1960: 220-221).
para la exportación equivalente al mercado 49 Otra de las incertidumbres que se nos abren
interior. es la de seguir la pista a este arrendamiento
26 Price (1973: 75). y a sus resultados.
27 Price (1973: 75). 50 J. García de Torres (1875: 13). Citado por Ro-
28 Torres (1999: 419). dríguez Gordillo (2002: 44). Insisto en lo
29 J. Rivero Muñiz (1965). Cit por Rodríguez aducido en la nota anterior. Es muy conve-
Gordillo (2002: 34). niente volver a rastrear en los papeles del
30 Céspedes (1992: 36). Consejo de Hacienda para encontrar esta do-
31 Price (1973: 73). En esta obra se cita que Sir cumentación que, al menos de modo indi-
Thomas Roe vio en 1611, como, al mismo recto, puede proporcionarnos datos sobre el
tiempo, cargaban tabaco hasta 15 barcos de mercado de tabaco.
pabellón francés, holandés y británico. 51 J. Gil Bermejo (1970: 158) y E. Vila Vilar
32 Céspedes (1992: 38-43). (1974: 21). Citados por Rodríguez Gordillo
33 Perú era zona de coca y, en cualquier caso, (2002: 44).
el tabaco de Chapapoyas y Jaén de Braca- 52 Rodríguez Gordillo (2002: 44).
monte, hubiese sido un serio contratiempo 53 Céspedes (1954: 138); igualmente Rodríguez
para este comercio. La liberalización del trá- Gordillo (1977).
fico en 1774 no tuvo repercusiones sobre es- 54 Alonso Acero (1996: 25-29).
te mercado. 55 Ídem (1996: 38-39).
34 E. C. de Jesús (1980); J. M. Fradera (1998) y 56 F. Comín y P. Martín Aceña (1999: 43). Estos
L. Alonso Álvarez (1999). autores consideran que el monopolio del ta-
35 André Joao Antoniz, en su Cultura e opulen- baco frente al de la sal (que además de ser un
La institucionalización del modelo tabaquero español 1580-1636: la creación del estanco... 151

bien de primera necesidad, tuvo impuesta la Renta de Granada. En total 616474 mrvds
obligatoriedad de su consumo) nunca obligó (1648 ducados) que representaban el 2,68%
a demandar el producto. Estamos ante un del remate definitivo.
producto de demanda inelástica. 63 Rodríguez Gordillo (2002: 137-158).
57 Al respecto, es imprecindible J. I. Gelabert 64 Pagaría el precio al que los comerciantes lo
(2001). hubiesen adquirido, sin exceder las 100 li-
58 Nos consta que en su versión original el ma- bras al contado y el resto seis meses des-
nuscrito era mucho más extenso. pués.
59 De la reivindicación del control parlamenta- 65 Rodríguez Gordillo establece el precio final
rio de la Monarquía (Thompson, Jago, For- antes del estanco, sumando los aranceles de
tea, Fernández Albadalejo, Castellano, Gela- entrada en Sevilla (1, 2 y 2,5 rs./lib.), y el
bert) hemos pasado a una versión mucho nuevo impuesto de 3 rs./lib. Estaríamos an-
más matizada, que el autor ejemplifica en J.I. te un precio medio antes del estanco de 5
Andrés Ucendo (1999), en la que las ciuda- rs./lib. El de más calidad era el tabaco de
des aparecían alineadas al lado del Rey, sin Varinas, que casi en su totalidad se reexpe-
apenas capacidad para controlar el gasto, ac- día para el exterior, reservándose para el
tuando principalmente de recolectoras de mercado interno el de peor calidad.
fondos. 66 Los nuevos precios pasaron de 6rs./lib de
60 Si consideramos un precio de 4 rs/lb. El con- polvo a 20 rs y de 4 rs./lib. de hoja a 14 rs.
sumo interno de tabaco que se necesitaba 67 La información procede de L. García Fuen-
para justificar esa cantidad era de 137500 tes (1980: 369, 371 y 377).
lbs. 68 Sánchez Belén (1996: 186).
61 Rodríguez Gordillo (2002: 110-112). 69 Sánchez Belén (1996: 141-142 y 177-189).
62 Soria afianzó su puja con 4 juros de renta si- 70 Según Rodríguez Gordillo el remate final del
tuada en los Millones de Murcia y Salaman- estanco quedó reducido de 23000000 a
ca; en la sosa y barrilla de Murcia y en la 19000000 de mrvds (558832 rs.).
152 Santiago de Luxán Meléndez / Óscar Bergasa Perdomo

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