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“Era normal, solo lo volvimos un problema”

Por: Miguel Alonso Rodríguez


Pérez

“El abuso es algo horrible. Se


apega a ti. Te envenena. Pero
solo si tú lo dejas”.
Heather Brewer, escritor
estadounidense

Siempre me he preguntado qué es lo que sienten los abusadores cuando molestan a un chico, me lo
he preguntado desde hace muchos años, y simplemente la respuesta se torna cada vez más compleja.
No es la única pregunta qué me he hecho, también me he cuestionado acerca del por qué los
abusadores “abusan”, por qué denunciarlo te afecta, desde cuando ser diferente es algo malo,
inaceptable.
Ahora, planteemos una pregunta para entender el tema: -¿Qué es el “Bullying”?
El concepto refiere al acoso escolar y a toda forma de maltrato físico, verbal o psicológico que se
produce entre escolares, de forma reiterada y a lo largo del tiempo.
Puedo decir con total seguridad haber sido víctima de bullying durante aproximadamente 7 años,
bastante tiempo, diría yo.
Según lo que sabemos sobre el tema, el bullying suele tener lugar en el aula y en el patio de la escuela.
Este tipo de violencia por lo general afecta a niños y niñas adolescentes, aunque puede extenderse a
otras edades.
Aparte de eso, el tratamiento que se da a los alumnos es muy importante. La falta de respeto, la
humillación, las amenazas o la exclusión entre el personal docente y los alumnos llevan a un clima de
violencia y a situaciones de agresión.
El bullying puede darse en cualquier tipo de colegio, público o privado, pero según algunos expertos,
cuanto más grande es el centro escolar más riesgo existe de que haya acoso escolar.
En su artículo titulado Bullying: “Un miedo de muerte”, la psicóloga y periodista Henar L. Senovilla,
afirma que las causas que pueden hacer aparecer el acoso escolar son incalculables. El acoso escolar
tiene muchas formas de manifestarse y ocasiona perjuicios ilimitados.
En general, las causas o factores que provocan el acoso en los centros educativos suelen ser
personales, familiares y escolares.
Desde mi perspectiva, el acosador se ve superior dado a muchas cosas, puede que su apariencia
física lo haga lucir como alguien imponente, porque cuenta con el apoyo de otros atacantes, o porque
el acosado es alguien con muy poca capacidad de responder a las agresiones. En la mayoría de las
ocasiones, el acosador lo que quiere es ver que el acosado lo está pasando mal.
y sin embargo muchas personas toman al bullying como algo normal, como algo buen. Muchas
ocasiones he oído:
-Está bien, que aprenda a defenderse, si no le gusta que haga algo.
Me asombra el hecho de que consideren el hecho de que hacerle burla a una persona está bien, que
le ayuda a mejorar, que lo hace más fuerte, bien, aunque debo aceptar que llegan a tener cierta razón,
yo sé que no es la única forma de hacerlo: Rubén realizó mal un ejercicio de matemáticas, se equivocó
y él entenderá mejor si sus compañeros le dijeran de forma respetuosa: - Rubén, tu resultado es
erróneo, mira, lo que debes es hacer esto. Rubén sabrá que se equivocó y ya, corregirá su error y
punto final. Sin embargo no siempre es así, porque en la misma situación, muchos de sus compañeros
se hubieran empezado a reír, burlar y a insultar al chico por haberse equivocado, diciéndole tonto,
zopenco, y muchas más cosas por el estilo, y será contraproducente porque Rubén se sentirá inseguro,
se sentirá mortificado por el hecho de haberse equivocado, estará apenado, sólo por no haber
realizado un ejercicio de matemáticas.
Tu apariencia física
Durante muchos años me di cuenta de que a la apariencia física, se le da demasiada importancia, si
una persona es “gordita”, delgada, alta o de baja estatura, siempre hay un defecto a pesar de que
nosotros somos un conjunto de muchos de ellos, y siempre será relativo, porque siempre se juzga a
lo diferente, a lo que no combina, a lo que resalta entre los demás; alguien alto entre puras personas
de baja estatura es un fenómeno, una persona de baja estatura entre personas altas es un fenómeno,
y así con todo, pero ¿Qué pasaría si dejáramos de verlo así porque no debiese? porque si en un grupo
de cinco personas, una mide 170 cm, otra 170 cm, otra 170 cm, otra 170 cm y la otra 175 cm, tenemos
un fenómeno, ahora, ¿Qué pasaría si todas tuvieran la misma estatura?, ninguno sería el fenómeno,
es cuestión de aceptar de que todos somos iguales y cada quien es único, sin embargo, cinco
centímetros, cinco kilos demás, cinco tonos más de color de piel, cinco años más de edad, cinco pecas,
más, cualquier número de cosas que tengas más o menos, te definirán como un fenómeno.

Tu preferencia sexual termina siendo motivo de burla para los demás

El bullying que sufren los homosexuales, aún en pleno siglo XXI, o sea, desde mi punto de vista es
como un:
- ¡Heyyyy, quien se va a enamorar no eres tú, es él o ella, qué te importa si le gustan las
personas de su mismo sexo, ¿en qué te afecta?, ponte en sus zapatos y dime! ¿te gustaría
que te juzguen por tus referencias?, ¿qué pasaría si tus hijos llegaran a ser homosexuales,
los negarías, te burlarías de ellos, los aislarías de la sociedad, qué sentirías si se burlan de
ellos?

Sinceramente creo que si buscamos ser una sociedad que viva en paz no es necesario construir
muros, no es necesario aislar a lo que no sea normal, no necesitamos etiquetarnos por una
nacionalidad, por un color de piel, por un acento, el único obstáculo que no nos permite abrir las puertas
de una sociedad pacífica es que cerramos las puertas de nuestra mente.

Al enemigo más vale tenerlo cerca…, no lo creo


Muchas veces las personas en que nosotros confiamos, terminan traicionándonos por la amistad de
alguien “mejor”, con un mejor estatus social, con mejor apariencia física, con un mejor nivel económico,
lo que más me sorprende de ellos es que nunca se tientan el corazón.

“Primero te ignoran
A continuación se ríen de ti
Después te atacan
Y luego ganas tú”

Pero al fin y al cabo, esas personas siempre serán importantes, porque más allá del daño que te
puedan hacer está la fuerza que te dan y es que en la vida todos llegamos a ser boxeadores, siempre
empezaremos golpeando un costal y nos sentiremos cómodos haciéndolo, hasta que llegué el
momento en que el sparring termina y debes subir al ring, donde no hay un costal, sino una persona
que te enfrentará, te dará golpes, te hará trisas o bien podrás contra él y triunfarás, pero siempre habrá
uno más fuerte que él, y los golpes te harán más fuerte, te harán de una manera “INSENSIBLE” al
dolor.

Así se torna la vida cuando debemos sobrevivir, cuando la ley del más fuerte retoma las riendas de la
civilización.
Finalmente

Quizá haber sido víctima de bullying te hace entender este problema desde otra perspectiva, porque
ese fenómeno es así, consta de cazadores, presas y videntes, donde los cazadores matan por deporte,
las víctimas sufren y los videntes en su mayoría siguen al más fuerte.

Las diferencias entre todas las personas abundan, todos somos diferentes, inclusive aunque existan
gemelos, cada uno de ellos es muy diferente al otro, nunca sentirán lo mismo, nunca pensarán los
mismo, etc.
Nuestra sociedad avanzará sólo hasta el día en que aceptemos a los demás por lo que son: personas,
personas como tú, como yo, que sienten, piensan, entienden, porque nadie es igual, porque todos
somos diferentes, porque sólo son diferencias, porque ser diferente era normal, solo lo volvimos un
problema.

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