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LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA 77

LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA

Pedro Ibarra Güell


Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea
Departamento de Ciencia Política

Igor Ahedo Gurrutxaga


Universidad Complutense de Madrid
Departamento de Teoría Sociológica

La Comunidad Autónoma Vasca, la Comunidad Foral de Navarra y el País Vasco


Francés constituyen realidades institucionales diferenciadas. Como es obvio, sus
respectivos sistemas político-electivos se ven fuertemente condicionados por la línea de
fractura ideológica que diferencia las formaciones sobre el eje izquierda-derecha. Sin
embargo, además de éste, existe otro cleavage que hace aún más compleja la realidad
política: nos estamos refiriendo al conflicto identitario. Sobre estas bases, el objetivo de
este trabajo es presentar la evolución de los tres sistemas en las pasadas décadas,
tratando de apuntar las claves sobre las que podría pivotar la evolución de los próximos
años.
Palabras clave: Euskadi, sistema político, nacionalismo(s), conflicto identitario

The Basque Autonomous Community, the Foral Community of Navarre and the
French Basque Country constitute differentiated institutional realities. Obviously
enough, their respective political-elective systems are strongly conditioned by the line
of ideological fracture that differentiates formations along the left-right axis. Besides
this, however, there is another cleavage that makes the political reality even more
complex: the identitarian conflict. With this starting point, the aim of this paper is to
present the evolution of the three systems in recent decades, and to identify the axes
on which their evolution in coming years might be based.
Key words: Euskadi, political system, nationalism(s), identitarian conflict

La Enciclopedia Británica define vasco Bizkaia, Gipuzkoa y Alava (integradas en


como “member of a people who live in la Comunidad Autónoma del País Vasco),
both Spain and France in areas bordering Navarra (que constituye la Comunidad
the Bay of Biscay and encompassing the Foral de Navarra), y Lapurdi, Baja-Navarra
western foothills of the Pyrenees Moun- y Zuberoa (las tres provincias vascas de la
tains”. Para la mayoría de los vascos, Región de Aquitania y del Departamento
incluido el actual Presidente del Partido de los Pirineos Atlánticos). Las cuatro
Popular del País Vasco1, el término Euskal primeras son identificadas en el imagina-
Herria se delimita por las provincias de rio vasco como Hegoalde (el lado del sur),

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y las provincias francesas como Iparralde otras líneas de fractura, y entre ellas,
(el lado del norte) o Ipar Euskal Herria destaca la que viene determinada por la
(Euskal Herria norte). identidad nacional que asumen las dife-
rentes formaciones2. Será el cruce de estas
Tres realidades administrativas diferen-
dos dimensiones –clase e identidad– lo que
tes, integradas en dos estados europeos,
determina el multipartidismo extremo en
cuyos rasgos políticos y electivos tratare-
el sistema político de la CAPV y de Navarra.
mos de presentar de forma somera en este
Sin embargo, la importancia del conflicto
trabajo.
identitario fortalece las tendencias centrí-
petas, que aglutinan a las diferentes
formaciones en dos sectores claramente
1. EL SISTEMA POLÍTICO-ELECTIVO EN
delimitados: nacionalistas y no nacionalis-
LA COMUNIDAD AUTÓNOMA VASCA.
tas (vascos) (LLERA, 2000). Concretamente,
Entre las diferentes tipologías de siste- en la CAPV:
mas de partidos que permiten caracterizar
• El Partido Nacionalista Vasco (PNV)
las unidades políticas, una de las más
como formación de centro derecha
utilizadas es la propuesta por SARTORI
y Eusko Alkartasuna (EA) como
(1976). En base a la fuerza electoral y la
partido social-demócrata se dispu-
polarización existente -o distancia ideoló-
tan, junto al nacionalismo radical
gica que separa a las formaciones-, se
(HB), el espacio nacionalista;
establece un esquema que diferencia los
sistemas de partido único, los de partido • el Partido Socialista de Euskadi
hegemónico, los de partido predominan- (PSOE-PSE) como agrupación social-
te, el bipartidista, el de multipartidismo demócrata y el Partido Popular (PP)
limitado y moderado, y el de multipartidis- como grupo de centro-derecha se
mo extremo y polarizado. Así, mientras auto-ubican en el campo no nacio-
que el modelo español o el norteamerica- nalista (vasco).
no se caracteriza por una clara tendencia
En paralelo a estos dos ejes claramente
bipartidista entre socialdemócratas y libe-
delimitados en sucesivas coaliciones insti-
rales, y republicanos y demócratas respec-
tucionales, encontramos otras dos forma-
tivamente, por el contrario el sistema
ciones de izquierdas: la aludida Herri
político de la CAPV asume los rasgos del
Batasuna (HB) como agrupación represen-
modelo de multipartidismo extremo y
tativa del nacionalismo anti-sistema3, e
polarizado, ya que existen “seis partidos
Izquierda Unida (IU) como organización
relevantes, con considerable distancia ideo-
comunista que apuesta por un modelo de
lógica entre sí, que da lugar a oposiciones
Estado español federal. El siguiente cua-
bilaterales y a una competición multipolar
dro presenta la posición aproximada de
de tendencia centrípeta” (SARTORI, 1976:
estas formaciones en los ejes ideológicos e
124).
identitarios.
Derecha

PP
A) El sistema de partidos en la PNV
CAPV
Nacionalista
1-. En general, este modelo de multi-
No nacionalista
partidismo extremo y polarizado se carac- EA
teriza por la concentración de las diferen- HB PSOE
tes formaciones en torno al cleavage de
IU
clase. Pero, además de ésta, en la CAPV, la
Izquierda
CFN y el País Vasco francés también existen

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1. El Partido Nacionalista Vasco e historia vasca determina el nacimiento


(PNV) surge en 1898. Esta formación, tras de ETA en 1959. Este grupo comienza a
unos orígenes independentistas, modera practicar la violencia política desde 1968.
su discurso aceptando un Estatuto de Desde el punto de vista ideológico, al
Autonomía (Ley que regula el régimen menos en su origen, asume los postulados
regional) que se pone en marcha en plena marxistas, y exige la independencia y reu-
Guerra Civil (1937). A partir de ese momen- nificación de los territorios vasco- españo-
to la labor del PNV en el exilio se centra les y vasco-franceses. Pero su incapacidad
en la presión diplomática a fin de lograr –y falta de voluntad– para incidir directa-
la caída de la dictadura, abandonando la mente en política, explica el surgimiento
acción política en territorio español como de Herri Batasuna (Unidad Popular) en
consecuencia de la dura represión fran- 1978. Este partido se complementa con
quista (DE PABLO, MEES, RODRÍGUEZ: otros movimientos sociales –de defensa de
1999-2001). la lengua, anti-represivos– desarrollando
una labor electoral e institucional. El con-
Tras la muerte del dictador Franco
junto de estos colectivos constituye el
(1975), el PNV se aleja del proceso de
autodenominado Movimiento de Libera-
reforma del Estado español, promoviendo
ción Nacional Vasco (MLNV), y pronto se
la abstención en el referéndum constitu-
define un modelo organizativo piramidal
cional de 1978. Pero apoya con todas su
en la cúspide del cuál se situaría un núcleo
fuerzas la aprobación del Estatuto de
reducido de militantes, por debajo de ella
Autonomía de la CAPV (1979). Así, el PNV
diferentes organizaciones sociales, y en la
participa desde 1980 hasta la actualidad
base Herri Batasuna. A pesar de todo, ETA
en la gestión del Gobierno Vasco, en un
se erige en contra-estado al que se pliega
primer momento en solitario, y desde
la comunidad de legitimación del naciona-
mediados de los ochenta en coalición.
lismo anti-sistema, con lo que se establece
2. Esta formación ve como de sus filas una jerarquía simbólica que explica la
se escinde en 1986 un sector que configura incapacidad de Herri Batasuna para mar-
Eusko Alkartasuna (Solidaridad Vasca). car distancias respecto de ETA (LETAMEN-
Las razones de esta división se encuentran DIA: 2000).
en la posición sobre el modelo de organi-
4. El Partido Socialista ha sustentado
zación provincial de la CAPV, el enfrenta-
su histórica fortaleza en la CAPV en su
miento entre el anterior Lehendakari Ga-
presencia en ciertos enclaves que se vieron
raikoetxea y el Presidente del PNV Arza-
sometidos a una profunda industrializa-
llus, una serie de disputas internas, además
ción y a altas tasas de inmigración en la
del carácter social-demócrata y claramente
segunda mitad del pasado siglo. Si en un
autodeterminista de los sectores que cons-
primer momento mantiene un discurso
tituyen la formación saliente. Tras la supe-
que permite conectar su posición con las
ración de las diferencias originarias, y en
de los nacionalistas moderados (apoyan-
parte por la pérdida de peso de EA y el
do, por ejemplo, el derecho de autodeter-
refortalecimiento paulatino del PNV (ver
minación para Euskadi, o la unidad entre
tabla I), ambas formaciones se han coali-
Navarra y Euskadi4), desde finales de los 70
gado tras las diferentes contiendas para
apuesta por una vía autonomista que se ve
garantizar la hegemonía del nacionalismo
obligada a gestionar tras su ascenso al
en las instituciones de la Comunidad
gobierno de España en 1982. En el País
Autónoma Vasca.
vasco, la incorporación al PSE de la forma-
3. La imposibilidad del nacionalismo ción nacionalista Euskadiko-Ezkerra –en
tradicional para dar una respuesta a la sus orígenes ligada a una escisión de ETA,
represión franquista de la lengua, cultura concretamente ETA-político militar– (1992),

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posibilita un acercamiento a los naciona- que la violencia debe resolverse por


listas que facilita la participación del PSE medios policiales combinados con
en el Gobierno Vasco. la política de reinserción para los
miembros de ETA que renuncien a
5. El Partido Popular comienza su
las armas.
andadura en la CAPV en 1990 de la mano
del que después sería Ministro del Interior Sobre la base de este doble compromi-
español, Jaime Mayor Oreja. Hasta esas so se entiende la participación del PSOE-
fechas, la derecha tradicionalista, deudora PSE en el Gobierno Vasco junto a los
de los postulados de franquismo, se había nacionalistas.
estructurado en torno a una Alianza
2. En cualquiera de los casos, desde
Popular apenas significativa electoralmen-
mediados de los 90 quiebran los dos
te. Sin embargo, la crisis de la formación
elementos sobre los que se asentaba este
centrista UCD, que aglutinaba un significa-
consenso:
tivo porcentaje del electorado vasco, sirve
de argamasa desde la que se recompone • El proceso de transferencia de com-
la derecha desde mediados de los 90 en petencias continúa bloqueado, y se
torno al PP. Desde el primer momento, su observa una cierta involución de las
objetivo es claro: acabar con la hegemonía posiciones del Gobierno Español
nacionalista. Un nuevo panorama que se respecto a la autonomía fiscal vas-
explica, además, por el alto grado de ca: el Concierto Económico;
crispación que se deriva de los atentados
• Desde el PNV comienzan a explorar-
de ETA, y a nivel nacional, por la profunda
se nuevas alternativas de pacifica-
crisis del Partido Socialista5.
ción, con lo que se va asumiendo
una nueva estrategia que pasaría
por la asunción del carácter político
B)1. Multipartidismo de consenso
–por tanto no solo policial– del
1. Desde mediados de los 80 hasta conflicto.
mediados de los noventa asistimos a un
Paralelamente, se profundizan los la-
consenso entre la totalidad de las forma-
zos entre los diferentes sectores del nacio-
ciones vascas, a excepción del nacionalis-
nalismo:
mo radical. Este consenso se asienta en dos
elementos: • Desde 1995, Eusko Alkartasuna
atempera su discurso, mientras que
• Promesa del gobierno socialista es-
el PNV va asumiendo parte de los
pañol de reconducción de un proce-
postulados soberanistas de la pri-
so de transferencia de competen- mera. Sobre la base de esta con-
cias a la Autonomía vasca -bloquea- fluencia estratégica se entiende la
do desde 1981-, y participación continuada de EA en
• Política de pacificación que pivota el Gobierno Vasco desde 1995, y la
sobre el denominado Pacto de Aju- concurrencia en coalición del PNV y
ria-Enea de 1988. Entre sus 10 EA a las elecciones desde 1998.
puntos, promovidos por el Lehen- • Esta política unitaria del nacionalis-
dakari nacionalista Ardanza y re- mo moderado se acompaña con la
frendados por todas las formacio- dinámica que protagonizan los dos
nes a excepción de Herri Batasuna, sindicatos nacionalistas, ELA y LAB,
se subraya que las cuestiones polí- ligados en menor y mayor medida
ticas deben ser tratadas únicamente con el PNV y HB respectivamente.
por los representantes políticos, y De esta forma, por primera vez en

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décadas se establece una alianza concejal de base del PP en la localidad de


entre los sectores moderados y anti- Ermua, y amenaza con asesinarlo 48 horas
sistema, que se concreta en 1998 si el Gobierno no acerca a los presos de ETA
cuando ambos proclaman la “muer- a cárceles vascas. El ejecutivo no acusa
te del Estatuto de Autonomía de recibo y Miguel Angel Blanco es asesinado
1978”, y afirman su apuesta por una de un tiro en la cabeza minutos después
nueva vía soberanista y pacífica. de cumplirse el plazo. La plural y contun-
dente respuesta social de indignación
3. La crisis del proceso estatutario se
contra uno de los crímenes que más ha
une en 1997 con un realineamiento de las
conmocionado a Euskadi da paso pronto al
formaciones no nacionalistas vascas (PSOE-
denominado “Espíritu de Ermua”, instru-
PSE y PP), condicionado fundamentalmen-
mentalizado rápidamente por un Partido
te por la política antiterrorista del Gobier-
Popular que extiende pronto sus críticas,
no Popular. Así, el debilitado Pacto de
no solo al nacionalismo radical, sino al
Ajuria-Enea no aguanta el envite de los
conjunto del nacionalismo.
Populares, que se niegan a continuar con
las medidas de reinserción para los presos 5. En un primer momento, la posición
de ETA, exigiendo una salida exclusiva- de esta formación pasa por vertebrar un
mente policial al conflicto, y apostando “proyecto común compartido” entre las
por una reforma del Código Penal que formaciones vascas -a excepción del nacio-
endureciese las penas en los delitos de nalismo radical- sobre la base del Estatuto
terrorismo. Por su parte, una serie de de Autonomía. Pero este planteamiento es
elementos explican el distanciamiento del abandonado ante el escaso eco que recibe
PSOE-PSE de su socio institucional, hasta de los sectores nacionalistas, que como
que abandone el Gobierno Vasco. Entre hemos apuntado, comenzaban a subrayar
ellos, y sin que su orden de presentación la necesidad de superación del Estatuto de
implique la más mínima jerarquía, podría- Autonomía. A su vez, los réditos electora-
mos destacar la quiebra del citado pacto les que el Partido Popular obtiene en
de Ajuria Enea, la creciente beligerancia España como consecuencia de la estigma-
anti-nacionalista de los Populares, la asun- tización del nacionalismo y de una política
ción de postulados más nacionalistas y alarmista sobre la hipotética desintegra-
menos pragmáticos por parte del PNV y ción de España, se unen a la apuesta
EA, el mantenimiento de la unidad de nacionalista española que abandera el
acción entre los sindicatos nacionalistas, y presidente Aznar en el XIV Congreso de su
la presión terrorista. formación.
4. Previamente, el Pacto de Ajuria-Enea En consecuencia, y legitimado a nivel
había ido debilitando paulatinamente al estatal por su papel de abanderado de la
nacionalismo anti-sistema (ver tabla I), el defensa de unas víctimas del terrorismo
cual lejos de reconducir su línea de actua- entre las que se encuentran muchos de sus
ción apartándose de ETA, radicaliza sus militantes –aunque también los del PSOE,
posiciones desde 1994. Así, Herri Batasuna PSE y el PNV–, el PP revalida en 1996 y 2000
asume una línea rupturista y de enfren- su posición preponderante en el parla-
tamiento dialéctico con el nacionalismo mento español, ante un PSOE que se
moderado. Mientras, ETA abre dos signifi- desangra por sus profundas crisis internas.
cativos nuevos “frentes”, atentando con- De la misma forma, la polarización del
tra cargos de la Policía Autónoma Vasca y discurso en la CAPV y el papel seguidista
contra responsables políticos y cargos elec- que asume el PSOE-PSE respecto de la
tos. El paroxismo, sin embargo, se alcanza cuestión vasca, permite que el PP aglutine
en julio de 1997, cuando ETA secuestra un en torno a sí a la mayor parte del voto no

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nacionalista (vasco), sustituyendo de esta las puertas a ningún escenario de futuro.


forma al PSE en la hegemonía de la Sobre la base de esta unidad de acción, e
“coalición constitucionalista” en Euskadi insuflada de ilusión por la tregua de ETA,
(ver tabla I). amplios sectores de la sociedad –no sólo
nacionalistas– consideran que Euskadi se
6. De hecho, y a pesar del giro del PSOE
encuentra a las puertas de una solución
que hemos comentado, las autonómicas
definitiva al problema de la violencia.
de 1994 suponen un varapalo a esta
posición (ver tabla I). Debido a ello, pero 2. El Partido Popular, tras acusar el
también al giro estratégico del PNV, la golpe provocado por la sorpresa del paso
nueva dirección de la sección vasca del dado por ETA, reacciona con un discurso
PSOE replantea su estrategia de coopera- asentado en tres elementos –no exentos
ción con el nacionalismo, abandonando de contradicción–: la tregua de ETA es una
primero el Gobierno Vasco, y asumiendo “tregua trampa” destinada a la recompo-
después los postulados del PP, que preten- sición de fuerzas de los terroristas; la
día una nueva mayoría no nacionalista en tregua de ETA es el resultado de la cesión
el ejecutivo autónomo sobre la base de un de los nacionalistas a las pretensiones
programa que se asienta en el respeto al terroristas; los nacionalistas moderados
Estatuto y la Constitución Española. han radicalizado su estrategia y caminan
hacia la soberanía. En consecuencia, el
Gobierno del Partido Popular actúa como
B) 2. Multipartidismo centrípeto: si la situación se mantuviese en los pará-
las vía “soberanista” y constituciona- metros anteriores a la tregua: se niega a
lista6 acercar a los presos de ETA dispersados por
toda la geografía española, rompe la
En definitiva, hasta finales de los 90, y
interlocución con la banda y detiene a
derivado del Acuerdo de Ajuria-Enea,
varios de sus dirigentes.
parecía existir un mayoritario consenso
entre las formaciones vascas para estable- 3. Esta, por su parte, pronto muestra
cer una clara barrera entre los denomina- una incomprensible impaciencia, exigien-
dos “demócratas” y los “violentos”, con- do al PNV que acelere “el proceso sobera-
cretada en la marginación de HB de la vida nista”, hasta que, no contenta con los
política vasca. resultados obtenidos durante poco más de
un año, rompe la tregua (ZALLO, 2001).
Sin embargo, los acontecimientos que
se precipitan desde 1998 visualizan una 4. En este contexto, los populares –y los
línea de fractura que, aunque siempre socialistas a la zaga– argumentan que la
había estado presente, determina la actual hipótesis de la tregua trampa “se confir-
polarización del sistema vasco en dos ma”, y teniendo en cuenta el pacto lle-
espacios centrípetos. gado por los nacionalistas moderados con
una organización que continúa atentan-
1. Por una parte, en septiembre de do, redoblan su discurso antinacionalista,
1998 se firma el Acuerdo de Lizarra entre esperando que el desgaste provocado por
las formaciones nacionalistas (PNV, EA, HB) el fracaso de la vía de Lizarra les alzase a
-a las que se une en primer momento la dirección del Gobierno Vasco. La virulen-
IU-, que es apoyado por ETA con una ta campaña mediática y la pública unidad
tregua indefinida7. En este acuerdo se de acción entre el PP y el PSOE, parece
apuesta por una definición política del abocar a un definitivo cambio de gobierno
conflicto vasco, y por una solución tam- en la CAPV. Sin embargo, los resultados de
bién política que debería ser refrendada las elecciones de mayo de 2001 se concre-
por la ciudadanía, y en la que no se cierra tan en una amplia mayoría de la coalición

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PNV-EA nacionalista (ver tabla I). Esta A este respecto, y una vez presentado
había sido capaz de atraer a muchos el articulado de la nueva propuesta de
abstencionistas, y a parte del nacionalismo Estatuto12 debemos destacar la paradoja
radical, muchos de cuyos votantes castigan ante la que se encuentra la sociedad vasca.
así a la dirección de HB por la incompren- Por una parte, resulta evidente, a la vista
sión ante su postura tras una ruptura de de la reacción de las autoridades españo-
la tregua por parte de ETA, que se niegan las, la dificultad para que este proceso
a criticar. llegue a buen puerto. A este respecto, el
Lehendakari ya ha manifestado que se
5. El nuevo Gobierno Vasco trata de
deberá respetar la voluntad de la sociedad
recomponerse acercando a Izquierda Uni-
vasca. En consecuencia, la metodología de
da8, lo que se logra el 19 de septiembre de
la reforma estatutaria parece adecuarse a
2001 con la entrada de esta formación en
los límites establecidos por la actual marco
el Gobierno. Los socialistas, debilitados por
jurídico político: aprobación por el Parla-
sus resultados electorales –ya que gran
mento vasco y proceso de negociación con
parte de su voto se desvía a los Populares–
las autoridades del Estado con el objeto de
(ver tabla I), y tras constatar el fracaso de
acordar la reforma. De la misma forma, el
su estrategia de “toma del poder”, se
Lehendakari ha manifestado que tanto si
enfrascan en una lucha intestina que se
existe acuerdo con la administración, como
salda con la salida de los sectores más
si no se alcanza, la propuesta que en su
antinacionalistas de su dirección. HB, que
caso estuviese en vigor tras el proceso de
pierde la mitad de su base electoral como
negociación, sería sometida a ratificación
castigo por la vuelta a las armas de ETA
por la ciudadanía de la CAPV vía referén-
(ver tabla I), ve cómo parte de su militancia
dum. Todo ello, en cualquier caso, en un
que rechaza la violencia se separa para
escenario de paz en la que no existiese
crear un nuevo partido, Aralar, y es aco-
como condicionante la presión o amenaza
sada en todos sus frentes, siendo incapaz
violenta de ETA. A su vez, se prevé que
de reaccionar ante su ilegalización.
todas las opciones políticas tuviesen la
6. En este contexto, el Gobierno Vasco posibilidad de verse representadas en este
retoma la iniciativa con la redacción del contexto (en clara referencia a la ilegaliza-
denominado Plan Ibarretxe, en el que se da HB).
plantea un proceso de reforma del Estatu- Si tras este referéndum, la propuesta
to de 1978, que debería concluir con la fuese aprobada por una mayoría cualifica-
modificación del marco constitucional para da de la ciudadanía, nuevamente se reto-
garantizar la inserción de Euskadi en maría el proceso negociador con las auto-
España por medio de un “estatus de libre ridades españolas. Se espera, en este
asociación”. Un modelo confederal9, o de sentido, que éstas manifiesten cierta sen-
federalismo asimétrico, que sin embargo, sibilidad democrática, habida cuenta de la
es identificado por los el Gobierno de voluntad ciudadana expresada democráti-
Aznar como “el definitivo salto del nacio- camente en un contexto sin exclusiones.
nalismo hacia la independencia”10, y que Como señala el propio Lehendakari “los
bien podría concretarse, como se apunta conflictos políticos deben solucionarse
mediante el pacto y la negociación. El
desde algunos medios, en la suspensión de
Estado español no podrá desoír el clamor
la autonomía vasca en virtud del artículo
de una mayoría de la sociedad vasca que
155 de la Constitución Española, o incluso le reclama un nuevo marco para la convi-
en el encarcelamiento del Presidente de la vencia. Si el Estado rechaza un pacto para
Comunidad Autónoma Vasca, Juan José la convivencia, será el Estado, y no la
Ibarretxe11. sociedad vasca, el que estará abogando

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por la ruptura y por la imposición y cia y viabilidad del discurso nacionalista


perderá toda la legitimidad democrática (HERRERO DE MIÑON, 2003), en la medida
no sólo ante la sociedad vasca, sino en que apuesta por ubicar la soberanía en
también en el ámbito europeo e interna- el pueblo vasco y no en el español, y sin
cional”13. embargo, acepta el encaje institucional de
Euskadi en España, cerrando un siglo de
En cualquiera de los casos, como deci-
reivindicación independentista. De la mis-
mos, este proyecto se enfrenta a graves
ma forma, la opinión de la ciudadanía
dificultades para su materialización. Por
vasca es clara a este respecto: el 87%
una parte, el actual Gobierno en minoría
considera que la sociedad vasca tiene
(por un escaño), necesitaría del apoyo de
derecho a ser consultada para decidir su
otra formación para que fuese ratificado
futuro, al 81% le parece bien que el
en el Parlamento Vasco; algo que en este
resultado de proceso de reforma sea
escenario no es previsible, ya que el PSOE-
refrendado por la ciudadanía, y el 83%
PSE condiciona cualquier diálogo con el
apoya la afirmación de que “el gobierno
PNV a la retirada del Plan, y la ilegalizada
español tiene que respetar lo que los
HB condiciona su apoyo a una salida
vascos y las vascas decidan” (GOBIERNO
política que posibilite a ETA una salida
VASCO, 2003). Por otra parte, hasta un
honrosa a 40 años de violencia. Por su
48% de los vascos considera recomendable
parte, el PP parece dispuesto a judicializar
la convocatoria de un referéndum sin
el proceso, incluso criminalizando a las
autorización, mientras que solo el 35%
autoridades autonómicas, incrementando
señala que sería desaconsejable. Finalmen-
la crispación en la ciudadanía vasca y
te, siete de cada diez vascos irían a votar
española, con el apoyo de algunos muy
a la consulta, y de ellos, el 50% votaría a
relevantes medios de comunicación que
favor de la propuesta (EUSKOBAROME-
difunden los postulados ultra-nacionalis-
TRO, 2003)14.
tas españoles del gobierno central.
Una inevitabilidad que se manifiesta
Pero, como apuntamos, a pesar de las
claramente en el hecho de que no sólo la
dificultades ante las que se encuentran las
ciudadanía vasca, sino también la mayoría
autoridades vascas, lo cierto es que cada
sindical y social considera que el actual
vez se manifiesta con más evidencia la
modelo se encuentra agotado. Algo que
inevitabilidad de la reforma. Sin entrar a
resulta aún más evidente si se observa
valorar el contenido de la propuesta,
hasta qué punto, actualmente, el debate
compartimos con Herrero de Miñón, uno
sobre la organización territorial se ha
de los redactores de la Constitución y
convertido en el centro de discurso político
militante del PP, cuando afirma la coheren-
a nivel estatal.

TABLA I: Evolución electoral de la C. A. del País Vasco en las elecciones


autonómicas, 1980-2001 (% sobre votos válidos)
1980 1984 1986 1990 1994 1998 2001
PNV 31.1 42.0 23.6 28.5 29.3 27.5 —
EA — — 15.8 11.4 10.1 8.6 —
PNV-EA — — — — — — 42.4
HB 16.5 14.7 17.4 18.3 16.0 17.7 10.0
PSOE-PSE 14.2 23.0 22.0 19.9 16.8 17.3 17.8
PP 4,8 9.4 4.8 8.2 14.2 19.8 22.9
Izquierda Unida 4 1.4 1 1.4 9 5.6 5.5
Fuente: Dpto. Ciencia Política UPV/EHU a partir de los datos de las Juntas Electorales.

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2. LA EVOLUCIÓN DEL SISTEMA POLÍ- resultado fue el Estatuto de las Gestoras:


TICO-ELECTIVO EN NAVARRA. texto sometido de nuevo a los ayunta-
mientos de las cuatro provincias, siendo
Al igual que sucede en la Comunidad
rechazado por los apoderados navarros
Autónoma Vasca, el sistema político elec-
porque muchos de ellos cambiaron el
tivo de Navarra se caracteriza por un
sentido de voto encomendado por sus
multipartidismo resultante del cruce de la
respectivos ayuntamientos. De esta forma,
dimensión ideológica y la identitaria. Pero,
el Estatuto sigue adelante, poniéndose en
sin embargo, en este caso surge un espacio
marcha la autonomía vasca en las provin-
intermedio entre las identidades vasca y
cias de Vizcaya, Alava y Guipúzcoa en
española: una navarridad que reclama la
plena Guerra Civil española en 1936. Por su
especificidad navarra, pero asume ciertos
parte, Navarra se queda fuera (JIMERO
componentes vascos presentes en la cultu-
JURIO, 1997).
ra de esta comunidad autónoma, como
por ejemplo el euskera. Por su parte, como Tras la caída de la dictadura franquista
veremos, el españolismo se manifiesta en (que deroga el régimen regional, conside-
la CFN en forma de regionalismo reactivo rando a Bizkaia y Gipuzkoa “provincias
al nacionalismo vasco. traidoras”), el Estado de las Autonomías
de 1978 se concreta en el caso vasco-
navarro en la puesta en marcha de dos
A) Las relaciones vasco-navarras comunidades autónomas diferenciadas,
siguiendo el modelo anterior a la Guerra
El Estado de la Autonomías que se
Civil. En cualquiera de los casos, habida
edifica en España desde 1978 establece un
cuenta de la demanda de integración de
modelo que diferencia institucionalmente
ciertos sectores navarros y vascos, se incor-
las provincias de Bizkaia, Alava y Guipúz-
pora en los Estatutos de la CFN y de la
coa de Navarra. Dos realidades que se
CAPV un artículo que posibilitaría su
estructuran en dos realidades instituciona-
unificación. De la misma forma, la Consti-
les: la Comunidad Autónoma Vasca y la
tución Española establece la Disposición
Comunidad Foral de Navarra.
Transitoria Cuarta según la cual Navarra
Sin embargo, no será ésta la primera podría unirse a la CAPV bajo tres condicio-
experiencia autonómica en España. De nes: pronunciamiento del Parlamento de
hecho, en 1931, con el advenimiento de la Navarra, referéndum de ratificación o
II República, los alcaldes de las cuatro rechazo, y segundo referéndum de apro-
provincias redactan el Estatuto de Estella, bación del nuevo estatuto conjunto de
que señalaba en su artículo 1º que “el País autonomía.
Vasco, integrado por las provincias de
Alava, Guipúzcoa, Vizcaya y Navarra, cons-
tituye una entidad natural y jurídica con B) El sistema político navarro
personalidad propia, y se le reconoce el
Los primeros años del proceso autonó-
derecho a regirse por sí mismo dentro del
mico asistimos a un panorama político
Estado Español”. Este estatuto fue aproba-
fuertemente fragmentado en diferentes
do en los cuatro territorios, pero no fue
familias.
aceptado por la Presidencia de la Repúbli-
ca de España. • El centro derecha se articula en
torno a la formación que heredará
Un año después, el Gobierno español
en España el PP, la UCD, con un
acordó que se retomara el proceso por
32,40% de los votos en las legisla-
parte de los ejecutivos provinciales. Su
tivas de marzo de 1979.

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86 PEDRO IBARRA GÜELL / IGOR AHEDO GURRUTXAGA

• Por su parte, el PSOE se convierte en identidad navarrista va perdiendo


la segunda fuerza, con un 21%, su ligazón sentimental con los com-
gracias a su presencia en determi- ponentes culturales vascos existen-
nados territorios con gran tradición tes en Navarra, buscando acomodo
industrial. en la identidad española, vertebra-
da hasta ese momento por el Parti-
• Finalmente, encontramos otros dos
do Popular. Esta cuestión explica
tipos de colectivos: de un lado, la
finalmente el pacto PP-UPN, que
formación regionalista Unión del
lleva a Juan Cruz Alli a la Presiden-
Pueblo Navarro (UPN), que obtiene
cia del Gobierno de Navarra en
el 10% de los votos, y por otra
1991, y supone finalmente la fusión
parte, el nacionalismo vasco mode-
entre UPN y el PP.
rado del PNV y el radical del HB, que
alcanzan respectivamente el 8%. • Esta coalición regionalista de dere-
chas pone fin al control socialista de
En un primer momento, el debate
la Comunidad Foral de Navarra. El
político no solo va a estar condicionado
socialismo navarro, como hemos
por cuestiones ideológicas, sino por la
visto, apoya en un primer momento
posición de las diferentes formaciones en
la integración de Navarra en la
torno a la integración de Navarra a las
CAPV. Sin embargo, poco a poco, va
instituciones vascas: los nacionalistas del
asumiendo posiciones más ambi-
PNV o HB la apoyan sin condiciones, los
guas, hasta defender finalmente la
socialistas comienzan en los 80 a matizar
autonomía de esta comunidad fren-
su primera posición integracionista, y la
te a la vasca. A pesar de todo, el
UCD, como UPN, rechaza esta propuesta.
PSOE-PSN mantiene relaciones cor-
diales con el Gobierno Vasco, po-
niéndose en marcha en ese periodo
B) 1. El navarrismo como “periferia
una serie de programas de coopera-
de la periferia”15
ción inter-regionales. Sin embargo,
A pesar de todo, con el paso del los socialistas serán incapaces de
tiempo, las diferentes formaciones modifi- recuperarse a comienzos de 1990 de
can sustancialmente sus posturas y su una serie de escándalos de corrup-
papel en el sistema político. ción; situación que será aprovecha-
da por los regionalistas y los popu-
• Por una parte, la formación regio- lares para su mencionado ascenso al
nalista UPN comienza a fortalecerse poder.
en Navarra como consecuencia de
un cierto sentimiento de agravio
hacia los vascos16, que es instrumen-
B) 2. El fracaso de la vía de “la
talizado por las elites de identidad
navarridad”.
española. Así, se pone en marcha el
discurso de “la periferia de la peri- A pesar de todo, la estabilidad en la
feria” (LINZ, 1986), de forma que derecha navarrista se mantiene por poco
desde algunos círculos navarros se tiempo. Efectivamente, la postura tradicio-
mimetiza el discurso del nacionalis- nalista de las elites de la UPN, impregnadas
mo respecto al centro estatal. Pero, por el españolismo del PP, incomoda a
a diferencia del primero, convierte ciertos sectores de la formación regionalis-
al propio nacionalismo en centro ta, que si bien mantienen un discurso
“colonizador y opresor” de la peri- favorable a la autonomía de Navarra con
feria navarra. Poco a poco, esta respecto a la CAPV, también asumen

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LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA 87

determinados componentes de la cultura de la coalición PP/UPN encuentra una


vasca presentes en la Comunidad Foral de estructura de oportunidad optima para
Navarra. refortalecer el discurso de la “periferia de
la periferia” entre la población navarra.
• En definitiva, como consecuencia
De esta forma, se utiliza el recurso del
de la radicalización españolista,
miedo al expansionismo nacionalista para
provocada por la incorporación del
pasar factura a aquellos que habían man-
discurso del PP a la UPN, eclosiona
tenido una posición “tibia”. Así, en las
políticamente una alternativa, que
elecciones de 1999 (ver tabla II), el CDN
es abanderada por el Presidente del
pierde un 12% del electorado. Por su
Gobierno Navarro, Juan Cruz Alli,
parte, los socialistas, a pesar de estar
que se escinde de su formación
desacreditados por sucesivos escándalos,
matriz, constituyendo el Centro de
se mantienen en torno al 20%. Sin embar-
Demócratas Navarros (CDN). Así,
go, UPN arrasa con un 41% de los votos,
ante un navarrismo españolista exa-
formando un nuevo gobierno de mayoría.
cerbado, se opone una navarridad
De esta forma, la ruptura de la tregua por
que asume determinados vectores
parte de ETA a finales de 1999 es aprove-
de la cultura vasca. Una propuesta
chada para acabar con la última forma de
que es apoyada por una parte
relación existente entre las dos comunida-
importante del electorado (ver ta-
des: el Gobierno Navarro rompe el acuer-
bla II).
do de colaboración que mantenía desde
Esta nueva coyuntura es aprovechada 1992 con Región francesa de Aquitania y
en las elecciones regionales de 1995 por los la CAPV, y establece relaciones particulares
socialistas, que se coaligan con el CDN y los con los socios franceses.
nacionalistas moderados, logrando el Go-
A pesar de todo, las elecciones de 1999
bierno Foral. Resultado de las buenas
habían supuesto el mejor resultado para el
relaciones entre los socialistas y el Gobier-
nacionalismo anti-sistema desde la transi-
no Vasco, y de la visión aperturista del
CDN, será la firma, en 1996, de un Proto- ción: HB suma el 15.5%, al verse fortale-
colo con el objetivo de profundizar la cido por la tregua de ETA. Por su parte el
cooperación entre las dos comunidades. nacionalismo moderado alcanza el 5.5%.
Sin embargo, esta propuesta no llega a En cualquiera de los casos, a partir de ese
concretarse por dos motivos. El primer momento, y legitimados por el apoyo
lugar, será bloqueada en Madrid por el incondicional del Partido Popular en Espa-
Partido Popular. En segundo lugar, nueva- ña, por la cruzada de los medios de
mente, los casos de corrupción en los que comunicación españoles contra el nacio-
se veían inmersos los socialistas provoca- nalismo vasco (IDOIAGA, 2003), y por sus
rán la dimisión del Presidente de Navarra resultados electorales, UPN diseña una
J. Otano en septiembre de 1996. De esta estrategia que pasa por la ruptura de
forma, el candidato de UPN, Miguel Sanz, consensos previos sobre la cultura y
se convierte en nuevo jefe del ejecutivo lenguas vascas. Así, se modifica la legisla-
navarro. Un cambio de coyuntura que ción lingüística de forma que se retiran las
pone fin a la estrategia de cooperación señales viarias y carteles en euskera de las
con la CAPV. calles navarras, se deja de valorar el
conocimiento del euskera para obtener un
puesto en la administración, con lo que los
B) 3. La ruptura con la CAPV y la vascófonos pierden de facto la posibilidad
exclusión de “lo vasco” de comunicarse en su lengua con cualquier
Dos años después, con la firma del funcionario, se retiran las subvenciones a
acuerdo de Lizarra, la derecha regionalista las escuelas que enseñan en euskera...17 Un

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88 PEDRO IBARRA GÜELL / IGOR AHEDO GURRUTXAGA

elemento que se une a la ilegalización del para las elecciones legislativas de 2004,
nacionalismo anti-sistema, que como he- capitaneada por una independiente, pe-
mos visto, era la fuerza abertzale más riodista de ETB. Una estrategia que se
importante. De esta forma, parecía redu- asienta en un nacionalismo de carácter
cirse de forma significativa la posibilidad menos cultural y más cívico, que se espera
de que el nacionalismo estuviese represen- que pueda atraer a sectores de izquierdas
tado en Navarra. cercanos al PSOE y a la navarridad de la
casi extinta CDN. De esta forma, el nacio-
A pesar de todo, previamente, un
nalismo vasco pretende aglutinar en torno
sector importante de HB que rechazaba la
a sí a importantes sectores de la población
violencia se había escindido formando
navarra que rechazan la política anti-vasca
Aralar. Esta formación, junto al PNV, Eusko
de sus dirigentes.
Alkartasuna y otras agrupaciones de iz-
quierda acaban de constituir una coalición

TABLA II: Evolución electoral de la Comunidad Foral de Navarra en las


elecciones autonómicas 1977-2003 (% sobre votos válidos)
1977 1983 1987 1991 1995 1999 2003
UPN 16.06 23.51 24.84 34.95 31.34 41.37 41.43
PP o CDS 26.80 14.20 11.81
PSOE/PSN 19.02 35.87 28.07 33.36 20.86 20.28 21.14
CDN 18.55 6.86 7.66
Izquierda Unida 0.65 1.36 4.07 9.43 6.88 8.77
Herri Batasuna 11.12 10.62 13.65 11.20 9.22 15.58
EA+PNV 5.06 6.88 7.1+1 5.52+1,12 4.56 5.44 7.63
Otros
nacionalistas
de izquierdas 2.11 2.38 2.19 2.58+7.5
Fuente: Gobierno de Navarra

Asistimos, en consecuencia, a un doble asume, desde el centro-derecha (CDN) y la


proceso aparentemente contradictorio en izquierda (Izquierda Unida) el contenido
la Comunidad Foral de Navarra. Por una vasco de la cultura navarra, que se explicita
parte, se observa cómo el sistema tiende en una horquilla de votos que va del 25 al
hacia un modelo hegemónico como conse- 15% del electorado; finalmente, el PSOE-
cuencia de la fusión entre el regionalismo PSN, que trata de presentar una alternati-
navarrista de UPN y el españolismo del PP, va progresista al gobierno de la UPN,
y por la pérdida de peso del Partido manifestando una cierta posición apertu-
Socialista. Sin embargo, este modelo de rista con respecto a la colaboración con la
aparente hegemonía, contrasta con una CAPV y la promoción de la cultura vasca.
atomización extrema de la oposición, con
En definitiva, este modelo hegemónico
tres tendencias claramente delimitadas:
por una parte, el nacionalismo, consolida- aparente esconde un sistema fuertemente
do en torno al 20% de los votos; por otra fraccionado con hasta cuatro o cinco
parte, un regionalismo navarro que tendencias claramente diferenciadas entre

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LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA 89

sí. En cualquiera de los casos, este panora- de 1792, y reafirmada cíclicamente en


ma podría dar paso a un sistema biparti- 1836, 1945, 1963, 1981, 1999 y 2003
dista si la oposición fuese capaz de articu- (AHEDO, 2003).
lar una alternativa progresista, asentada
en la navarridad y abierta a la cultura
vasca. Una posición, por ahora imposible, B) Cambios en el sistema político.
por la incapacidad del PSOE para distan-
B) 1. Un modelo bipolar con ten-
ciarse de la estrategia definida por el PP
dencias hegemónicas
para el nacionalismo, y por la debilidad de
la formación centrista CDN. Tas la instauración de la IV República
las tradicionales relaciones de poder se
trasforman: de anteriores “familias de
3. CAMBIOS EN EL SISTEMA POLÍTICO- notables” que se apoyaban en la identidad
ELECTIVO DEL PAÍS VASCO DE FRAN- vasca para mantener su dominio en la
CIA sociedad, se pasa a una estructura centra-
da en “partidos de notables” que tratan
A) La inserción del País Vasco norte
de movilizar a la población a partir de
en Francia
principios ideológicos y políticos que aho-
El País Vasco Francés se sitúa en el ra se explican en clave estatal –y por tanto
extremo sur-oriental de Francia y cuenta no-local–. De esta forma, conectando con
con una población cercana a los 260.000 la tradición católico-conservadora ante-
habitantes, de los cuáles aproximadamen- rior, el País Vasco Francés se convierte en
te la mitad se distribuyen en municipios de un terreno abonado para las opciones de
la costa atlántica. Carece de reconocimien- derechas: fundamentalmente el gaullismo
to administrativo al formar parte del (RPR) y la democracia-cristiana (UDF) (IZ-
Departamento de los Pirineos Atlánticos, QUIERDO, 1998).
junto a los territorios del Béarn (de cultura
En este sentido, la histórica fortaleza
occitana).
del catolicismo en Iparralde deja su im-
Sin embargo, este territorio presenta pronta en las relaciones de poder, expli-
una fuerte personalidad que se refleja en cando la mayor fortaleza de la UDF en
la bicefalia del departamento en el que se comparación con otros territorios de Fran-
inserta. Los elementos más característicos cia en los que el centro-derecha se aglutina
de Iparralde, y diferenciadores respecto de en torno al RPR. Por contra, en nuestro
la parte bearnesa del Departamento de los caso, la fuerza de esta última formación
Pirineos Atlánticos serían 1) una autono- está muy vinculada a la influencia de
mía local concretada en la existencia de determinadas figuras de Iparralde, como
tres asambleas provinciales en Lapurdi, Inchauspé -ex-ministro de De Gaulle-, o
Baja-Navarra y Zuberoa hasta 1789, fecha Michelle Alliot Marie -ex–Presidenta del
en la que son abolidas tras la Revolución; RPR y actual Ministra de Defensa-.
2) una lengua propia, el euskera, frente a
Finalmente, el débil desarrollo indus-
la presencia histórica del gascón en el
Béarn; 3) un tardío proceso de industriali- trial impide el surgimiento de una clase
zación que impide la consolidación de la obrera que haga eclosionar el cleavage
clase obrera, y permite que el sistema económico por la parte del trabajo, de
político sea dominado por el centro- forma que es comprensible la dificultad de
derecha, frente al poder socialista en el las formaciones comunistas y socialistas
Béarn; 4) una histórica demanda de reco- para consolidarse en el sistema vasco
nocimiento institucional (o creación de un francés18. De esta forma, la socialdemocra-
Departamento Pays Basque), presente des- cia trata de asentarse seduciendo a otros

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90 PEDRO IBARRA GÜELL / IGOR AHEDO GURRUTXAGA

sectores con gran peso social, pero sin cantones del Béarn) estarán siempre en
expresión política efectiva o eficaz: la manos de la derecha, gracias a la influen-
burguesía modernizante y los sectores cia de los mencionados Michelle Alliot
ligados a la cultura vasca (lo que explica los Marie en Biarritz, y de Inchauspé en el
sucesivos compromisos del PS, nunca cum- entorno de Garazi.
plidos por otra parte, a favor de la
Este modelo bipolar con tendencias
institucionalización vasca, por medio de la
hegemónicas se amplifica como conse-
creación de un Departamento Pays Bas-
cuencia del sistema electoral, mayoritario
que19).
a dos vueltas, de forma que “el ganador
En cualquier caso, a pesar del sesgo se lo lleva todo”. Así, al igual que en el
favorable al centro-derecha, la evolución caso de las elecciones legislativas, en las
del sistema político-electivo de Iparralde cantonales, el electorado prima la capaci-
ha sido deudor de macro-tendencias fran- dad de los candidatos para acceder a los
cesas. De esta forma, los candidatos de círculos de decisión, lo que unido a la
izquierdas sólo obtendrán puestos de di- competencia UDF-RPR en la primera vuel-
putado20 en la circunscripción de Baiona en ta, y a su posterior unidad de acción en la
los periodos de expansión socialista (Des- segunda vuelta contra un posible candida-
trade en 1981 y Nicole Pery en 1997), to del PSF que hubiera superado el límite
gracias a la mayor presencia de la clase del 10%, explica la absoluta ventaja del
obrera en la margen derecha del río centro derecha entre los 21 escaños vascos
Adour, y gracias al apoyo de los sectores del Consejo General de los Pirineos Atlán-
pro institucionalización del Pays Basque. ticos (órgano ejecutivo de la institución
Por el contrario, la otra circunscripción departamental en la que, junto al Béarn,
costera y la del interior (que se une a varios se inserta Iparralde).

TABLA III: Resultados de la 1º vuelta de las legislativas en el Pays Basque


IV circunscripción V circunscrip. VI circunscrip. Iparralde
2 3 4
1997 2002 2002 1997 2002 1997 2002 1997 2002
AB 12.97 5.36 10.63 2.56 3.64 6.60 5.64 6.42 5.91
EA 1.46 0.83 1.50 1.91 1.14 4.51 1.85 2.88 1.51
PCF 5.63 4.69 4.71 8.24 4.38 6.03 2.66 6.78 3.73
PSF 22.36 25.51 21.86 29.06 29.45 27.09 22.85 25.86 25.20
Vert 1.56 2.05 1.53 4.94 4.32 4.20 2.21 3.69
1
UMP 47.33 47 48.65 37.12 42.19 39.81 49.00 40.34 42.20
FN 4.66 3.53 2.79 8.98 6.13 8.72 5.74 7.99 5.28
Fuente: Elaboración propia
1
Coalición RPR y UDF
2
Datos para el Pays Basque
3
Datos junto a los cantones del Béarn
4
Resultados en el Pays Basque

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LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA 91

B) 2. ¿Hacia un modelo tripolar? propuestas de ordenación surgidas, casi


siempre, desde estos sectores nacionalistas
En cualquiera de los casos, actualmente
o favorables a la cultura vasca, con lo que
estamos asistiendo a la aparición de un
se genera una sinergia que cobra vida
nuevo actor en el sistema político-electivo,
propia, transformando exponencialmente
que a pesar de asomar la cabeza tímida y
muchos de los consensos previos, fuerte-
lentamente, podría llegar a convertirse a
mente jacobinistas, del cuerpo electivo. En
medio plazo en una tercera arista que
consecuencia, el sentimiento de pertenen-
transmutase el actual modelo bipolar en
cia y la identidad vasca pasa a ser activada
otro nuevo de carácter triangular: nos
como factor de regeneración local, siendo
estamos refiriendo al nacionalismo organi-
sus interlocutores más privilegiados los
zado en torno a Abertzaleen Batasuna
sectores abertzales, al estar fuertemente
(Unidad Nacionalista).
relacionados con el mundo cultural vasco.
El proceso de construcción del Estado, Por otra parte, la crisis de la política de
que genera una profunda crisis del senti- desarrollo conecta en el tiempo con una
miento de pertenencia y de la identidad estrategia predefinida por la formación
vasca explica, así mismo, el surgimiento nacionalista más importante, Abertzaleen
tardío del nacionalismo. De esta forma, la Batasuna (Unidad Nacionalista), que pre-
primera expresión abertzale conecta con tende erigirse en el centro de la reivindi-
la tercera ola de respuestas periféricas en cación de creación de un Departamento
Europa occidental, de marcado carácter Pays Basque (algo que logra de forma
progresista: con lo que no debe extrañar indudable, convirtiendo a los abertzales
el importante componente de izquierdas en el referente de la dinámica más impor-
que asume Enbata desde su creación en tante de la pasada década). Finalmente, la
1963. Finalmente, el fraccionalismo inter- apuesta de este grupo por la solución
no derivado de la expansión sobre Iparral- política del conflicto vasco, explicitado
de de pautas de acción y discursos defini- mucho antes del acuerdo de Lizarra, la
dos en Hegoalde determinará su debilidad asunción militante de una estrategia de
estructural en el espacio electoral (AHEDO, desobediencia civil frente a la vía violenta,
2003). y la salida de sus sectores más radicalizados
tras la escisión provocada por la extensión
Esta fragilidad, sin embargo, siempre
de Herri Batasuna a Iparralde, se ha con-
ha contrastado con su fortaleza en el
cretado recientemente en la petición de
campo cultural y económico, lo que se
una tregua a ETA. De esta forma, AB se
manifiesta con la elección de Ramuntxo
libra de los prejuicios que vinculaban al
Camblong como primer Presidente del
nacionalismo de izquierdas con la violen-
organismo encargado de la dinamización
cia.
de las políticas de ordenación del territorio
en Iparralde: el Consejo de Desarrollo. De ahí que no sorprenda el escenario
Pero entre 1992 y 2002 asistimos a una que se abre tras las elecciones municipales
serie de cambios que sitúan a los abertza- y cantonales de marzo de 2001: por
les en una nueva situación. Destaca, en primera vez en los últimos treinta años, un
primer lugar, el papel jugado a nivel nacionalista ha resultado elegido en el
individual por muchos de sus representan- Consejo General de los Pirineos Atlánticos
tes en las políticas de desarrollo, pilotan- (será la única ocasión en la historia en la
do, dinamizando e invirtiendo ingentes que gane una lista abertzale en algún
esfuerzos en la puesta en marcha de cantón); también es inédito el que otro
dinámicas de regeneración del territorio. miembro de AB logre la alcaldía de una de
A su vez, debemos subrayar la subordina- la pocas poblaciones de más de 3.500
ción del resto de los electos a unas habitantes; esta formación obtiene

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92 PEDRO IBARRA GÜELL / IGOR AHEDO GURRUTXAGA

también por primera vez representantes mento de votos iniciada en la pasada


en municipios de gran simbolismo, y hasta década, lo que se ha reflejado en el
este momento vetados, como es el caso de aumento de concejales (de 96 se ha pasado
Baiona; el nacionalismo, y A.B. en concre- a unos 120-130 electos abertzales).
to, ha mantenido la tendencia de incre-

TABLA IV: Evolución del voto abertzale


1967 1978 1986 1988 1993 1997 2001 2002
Legislativas Legislativas Legislativas Legislativas Legislativas Municipales Legislativas

Enbata EHAS EMA EB-EMA AB-EA AB-EA-PNB AB-EA-PNB AB+PNB


4,63% 3,59% 3,77% 5,65 6,65 9,30 7.42
5.035 votos 4.924 5,081 6.756 8.179 11.297 11.94421 9.50322
Fuente: Elaboración propia

Se abren, por lo tanto, una serie de prioritaria la defensa de la cultura y


oportunidades para los abertzales. Sin lenguas vascas. Recientemente, estos sec-
embargo, no debemos caer en un mecani- tores se han constituido en una nueva
cismo simplista. En este sentido, si bien es formación, Elgar-Ensemble (Unidos), que
cierto de que está consolidándose en concurre a las elecciones cantonales, dan-
Iparralde un sentimiento de pertenencia, do cuerpo a un nuevo sentimiento identi-
un cierto vasquismo, todavía estamos lejos tario, que denominamos vasquista para
de que éste de paso a un amplio compro- diferenciarlo del vasco (dinamizado por los
miso político en clave abertzale. De la nacionalistas) y que se concreta en la
misma forma, esta exposición obvia otras máxima “Vascos en Francia, Franceses en
variables determinantes que pueden con- Euskadi”.
dicionar la consolidación de estas forma-
ciones y de Abertzaleen Batasuna en con-
creto (entre ellas podríamos subrayar los A MODO DE CONCLUSIÓN
efectos de la extensión de la violencia a
1. El sistema en la Comunidad Autóno-
estos territorios o situaciones electorales
ma Vasca refleja un modelo multiparti-
excepcionales a nivel nacional como suce-
dista derivado del cruce de las dimensio-
dió tras las pasadas Presidenciales,...). Sin
nes ideológicas e identitarias, y parece
embargo, de lo que no cabe duda es que
recomponerse paulatinamente en torno a
en estos comienzos del siglo XX nos
dos coaliciones centrípetas determina-
encontramos con un panorama cualitati-
das por el modelo de encaje de Euskadi en
vamente diferente al de la década pasada,
el Estado Español. Dos coaliciones que
cuyo elemento más significativo es el
embarcadas en un tira y afloja que parecen
hecho de que el nacionalismo se ha
estar a punto de enfrascar a la sociedad
ganado un lugar privilegiado en el sistema
vasca en un conflicto desestructurante en
político-electivo.
el que todas las puertas, incluidas las de la
Finalmente, y como consecuencia de las involución del modelo autonómico, pare-
políticas de desarrollo y de la demanda de cen abiertas. Dos apuestas centrípetas
institucionalización de Iparralde, ha resur- atrapadas por la estrategia autista de
gido un sentimiento de pertenencia de quienes se niegan a escuchar a la sociedad
quienes, sintiéndose franceses, consideran vasca y continúan con su estrategia vio-

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LOS SISTEMAS POLÍTICOS DE EUSKAL HERRIA 93

lenta, y la de quienes están dispuestos a 3. El sistema político electivo del País


transgredir los mínimos principios demo- Vasco Francés es deudor de su propia
cráticos, no solo a ilegalizando formacio- historia. El peso del clero en estas provin-
nes apoyadas por más de 150.000 votan- cias determina una cultura política que
tes23, disponiéndose a encarcelar a la favorece la implantación de la democracia
máxima institución vasca por consultar a cristiana (UDF) y el Gaullismo (RPR). Esta
sus ciudadanos, sino –como ha sucedido apertura de la ciudadanía vasca a forma-
con el cierre del único medio de comuni- ciones de centro-derecha se acompaña de
cación escrito en euskera, Egunkaria– vin- la lógica de desarrollo exógeno, que posi-
culando también cualquier expresión cul- bilita un sistema notabiliar que dificulta la
tural vasca con el terrorismo. implantación de los partidos de masas.
Además, el débil peso de la industria difi-
2. Aparentemente, el sistema político-
culta la expansión del Partido Socialista.
electivo navarro se caracteriza por la
hegemonía del navarrismo de la UPN. Por esta razón, esta formación necesita
Estas posiciones se sustentan en un discur- del apoyo de los nacionalistas y de la
so del miedo vertebrado en torno a una burguesía modernizante. De esta forma,
identidad navarra incompatible con la los socialistas reactivan en los ochenta la
vasca, y que se cobija en la española. A demanda de institucionalización del terri-
pesar de todo, existía a finales de los 70 torio vasco, a pesar de que tras su ascenso
una masa mayoritaria que apostaba por la al poder, olvidan el compromiso.
especificidad foral, pero sin negar sus lazos
Esta cuestión, unida a las estrategias de
y su adhesión a una cultura que se asienta
desarrollo que se ponen en marcha desde
en una lengua que, no lo olvidemos, se
1992, ofrece oportunidades a un naciona-
denomina en latín “lingua navarrorum”
(lengua de los navarros). Esta navarridad lismo ausente de la vida política, pero muy
fue articulada a mediados de los 90 por la poderoso en el ámbito cultural y económi-
escisión del CDN. Sin embargo, la retórica co. Asumiendo, pues, una estrategia posi-
de las autoridades navarras y españolas se bilista, se convierte en el centro de las dos
sirve de históricos errores del nacionalismo dinámicas, lo que le erige potencialmente
vasco -que ha sido incapaz de diseñar un en la tercera arista del sistema electivo.
discurso propio, adecuado a la realidad 4. En definitiva, asistimos en los tres
navarra- para hacer tierra quemada, aglu- ámbitos administrativos a un complejo
tinando a la mayor parte del electorado. juego de alianzas entre actores en base a
A pesar de todo, en los últimos tiempos su posición en el doble cleavage de clase
parece que las formaciones minoritarias e identitario. Cuando menos, se observa
están reaccionando a la lógica excluyente que, en lo que a la segunda dimensión
de la coalición PP-UPN. Buena prueba de respecta, existen cuatro tipos de identida-
ello son los acuerdos municipales en algu- des: la española/francesa/navarrista, la
nos ayuntamientos entre socialistas y na- vasca, la de la navarridad y el vasquismo
cionalistas vascos. Finalmente, la unidad en el País Vasco norte. Mientras que las dos
de acción de estas formaciones cara a las primeras son identidades polares, las dos
legislativas de 2004 parece asentarse sobre segundas integran componentes estatales,
una reflexión crítica de los errores históri- regionales y vascos. La clave está en saber
cos cometidos por el nacionalismo en este cual es el proyecto de futuro para este
territorio, lo que podría servir para atraer país, capaz de jugar con todas las piezas de
a sectores ausentes de la vida política este complejo puzzle. Y, mientras tanto,
navarra, que no ven incompatible su solo se nos ocurre una salida, por otra
identidad regional con el sustrato cultural parte ya explorada con éxito en innume-
que comparten con la CAPV . rables conflictos de este tipo: el diálogo.

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un nuevo pacto político para la convi- pág.10.
vencia. Gabinete de prospección socio- 2. Siguiendo la propuesta de ROKKAN
lógica. ftp://gvas.euskadi.net/pub/gv/ (1970) y SEILER (1980) este cleavage centro/peri-
feria opone a las familias de partidos centra-
estudios_sociologicos/t034_c.pdf
listas de las de los regionalistas, autonomistas,
HERRERO DE MIÑON, M. (2003): “España federalistas o independentistas.
y Vasconia: Presente y futuro (conside- 3. Como veremos a continuación, este
raciones en torno al Plan Ibarretxe”, en colectivo ha sido ilegalizado por las autoridades
VV.AA: Estudios sobre la propuesta judiciales previa reforma legislativa, y frente a
política para la convivencia del Lehen- la opinión mayoritaria de la ciudadanía de la
dakari Ibarretxe, Oñate: IVAP. CAPV (EUSKOBAROMETRO, 2003)
IDOIAGA, P. (2003): Al filo de la incomuni- 4. De hecho, hasta los 80, la estructura
federal del PSOE era la misma para Bizkaia,
cación. Prensa y conflicto vasco. Ma-
Alava, Guipúzcoa y Navarra.
drid: Fundamentos. 5. El PSOE ve a comienzos de los 90 cómo
IZQUIERDO, J. M. (1998): Le Pays Basque, varios altos cargos del Ministerio de Interior son
la difficile maduration d´un sentiment encarcelados por corrupción o por participar en
nationaliste. Bordeaux: Memoiré, IEP. la guerra sucia contra ETA. Finalmente, la crisis
JAMES, E. J. (1994): Hills of Conflict, Basque de legitimidad derivada, tanto de estos hechos,
nationalism in France. Reno: University como del desgaste político provocado por las
of Nevada Press. políticas sociales, la necesidad de hacer frente
a la reconversión industrial, etc... son determi-
JIMENO JURIO, J. M. (1997): Navarra jamás nantes en la pérdida de la mayoría a nivel
dijo no al Estatuto Vasco. Tafalla: español, que da paso a un nuevo Gobierno del
Txalaparta. Partido Popular, bajo la dirección de José María
LETAMENDIA, F. (2000): Game of Mirrors: Aznar.
Centre-Periphery National Conflicts. 6. LLERA (2000) ofrece una interpretación
Londres: Ashgate. distinta de esta fase. En ella se responsabiliza
LINZ, J. J. (1986): Conflicto en Euskadi, casi exclusivamente al giro soberanista del PNV
Madrid: Espasa. el desenlace de misma. Creemos, sin embargo,
que hay que apuntar mas variables, tal como
LLERA, F (2000): “Basque Polarization: hacemos en este texto, para comprender este
Between Autonomy and Independen- punto de inflexión en el sistema político vasco.
ce”, en SAFRAN y MÁIZ, eds.: Identity 7. Entre los elementos que explican este
an territorial autonomy in plural socie- acuerdo debería destacarse (a) el fracaso del
ties. Boulder Co., Frank Cass Publ. último de los intentos del Lehendakari Ardanza
pp.101-120. por recomponer la fractura provocada por la
ROKKAN (1970): Citizens, election, par- ruptura del Pacto de Ajuria-Enea. Este propone
ties. Oslo: Universitetsforlaget y un plan, el Plan Ardanza, que plantea una
negociación entre todas las fuerzas políticas

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(incluida HB) que concluiría en un acuerdo que incorporar al Código Penal una pena de cuatro
debería ser refrendado por el Estado y la años de prisión para quien convoque un refe-
sociedad vasca. Sin embargo, la propuesta es réndum sin autorización gubernamental. Una
rechazada de plano por el PP, y con matices por medida que, como ha manifestado el Ministro
el PSOE-PSE y por HB. Además, debemos añadir de Justicia, tiene un claro destinatario: el PNV
a este, otros elementos colaterales que explican y el presidente del Gobierno Vasco.
la firma del Acuerdo de Lizarra: (b) la configu- 12. Ver el texto íntegro en http://www.nuevo
ración de un tercer espacio en torno a determi- estatutodeeuskadi.net/
nados movimientos políticos, económicos y 13. En http://www.nuevoestatutodeeuskadi.
sociales no alineados ni con las formaciones en net/preguntas.asp?hizk=esp#05.
el gobierno, ni con la oposición, ni con el 14. A fecha de hoy, una parte importante
nacionalismo radical. Una serie de grupos que del electorado de HB rechaza la propuesta de
se oponían a las lógicas rupturistas y fagocitan- reforma del Estatuto. Sin embargo, el grupo
tes del PP y ETA; (c) el mantenimiento de la parlamentario ha presentado recientemente
unidad de acción entre los sindicatos naciona- una enmienda en el Parlamento Vasco, por lo
listas, mostrando beneficios materiales de una que sería previsible que, llegado el caso de un
estrategia unitaria (ascenso de representación), acuerdo, la militancia que ahora rechaza la
así como réditos simbólicos para ambos (salida propuesta pudiera apoyarla. Por otra parte,
del aislamiento para LAB, referencialidad en parece que una propuesta similar consensuada
una nueva estrategia del nacionalismo para con una formación como el PSOE-PSE lograría
ELA); (d) la asunción de la marginalidad política bastantes más apoyos.
por parte de un nacionalismo-antisistema aco- 15. Creemos necesario diferenciar dos for-
sado (procesamiento y encarcelamiento de la mas de entender el sentimiento de pertenencia
dirección en diciembre de 1997, cierre de su en la Comunidad Foral de Navarra, además de
medio de comunicación en julio de 1997). la vasca y la española, para matizar una cuestión
8. Esta formación va asumiendo paulatina- que en ocasiones se simplifica demasiado. Así,
mente un significativo papel, que se concreta en entendemos por navarrismo la auto-identifica-
un incremento prolongado de votos. Entre las ción de aquellos navarros que niegan toda
razones que explican su importancia en el relación política, e incluso cultural, de su
sistema electivo vasco podríamos destacar: (a) su comunidad con la CAV. Por el contrario, enten-
posición de mediadora entre los dos bloques, demos por navarridad la identidad de aquellos
rechazando una vía nacionalista-independentis- que, aunque resaltan la autonomía política de
ta, pero apostando por la reacomodación de su territorio con respecto de la CAV, y sin
Euskadi en España a través de una nueva forma embargo, consideran que existen nexos de
de organización federal del Estado español; (b) unión entre la cultura e historia navarra y de la
el papel legitimador que juega en el Gobierno CAV, apoyando la promoción del euskera y la
Vasco, al romper su componente monocolor cultura vasca.
nacionalista, y a dotar a la gestión autonómica 16. Reflejo de este sentimiento será la
de un sesgo progresista. polémica que se suscita como consecuencia del
9. Sustentado en la idea de pacto, apuesta lema nacionalista “Nafarroa Euskadi da” (Nava-
por un nuevo marco de relaciones entre España rra es Euskadi). Una consigna ante la que
y Euskadi similar en algunas materias al de los muchos navarros reaccionan señalando que, en
Länder y la Federación alemana. Pero en ningún todo caso, Euskadi sería parte de Navarra,
caso puede definirse como independentista, ya recordando la existencia del Reino de Navarra
que en palabras del Ponente Constitucional hasta 1512, al que en determinados momentos
Miguel Herrero de Miñón “su evidente preten- se sometieron las provincias de Bizkaia, Alava y
sión es insertar a Euskadi en él (Estado demo- Guipúzcoa.
crático y de derecho Español)” (2003:450). 17. Una política lingüística que ha llevado
10. Utilizando para ello un simple -aunque a la Oficina de las Lenguas Minoritarias de
falso– juego de palabras al confundir “estatus Europa a considerar que el Gobierno navarro es
de libre asociación” con “Estado Libre Asocia- la única institución política de Europa que está
do”. llevando a cabo una estrategia premeditada de
11. De hecho, el Gobierno del PP ha extinción de un idioma.
modificado la legislación por un procedimiento 18. En contraste, allá donde exista una
extraordinario rechazado en las Cortes Españo- mayor presencia industrial, como puede ser en
las por el resto de los partidos políticos, para el norte de Baiona, se observa una clara

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hegemonía del PSF y del PCF en las diferentes 21. Resultados absolutos en la primera
contiendas electorales. vuelta para 11 de los 21 cantones en los que se
19. Destaca así la inclusión de la reivindica- celebraban los comicios, con lo que el número
ción departamental en el compromiso nº 54 de devotos habría sido significativamente superior
las 110 propositions pour la France de Mitte- si se hubiesen celebrado las elecciones en las 10
rrand en 1981, o el compromiso de Jospin en demarcaciones restantes.
1995. 22. El PNB pierde 1.421 votos respecto a los
20. El Departamento de los Pirineos Atlán- anteriores comicios legislativos, y Abertzaleen
ticos en los que se inserta -junto al Bearn- Batasuna se mantiene a pesar de la consigna de
Iparralde, cuenta con seis circunscripciones le- voto de blanco de Batasuna.
gislativas, de las que dos se sitúan en la costa 23. Lo que, como refleja el estudio Eusko-
vasca, y una tercera elige su diputado en barómetro (2003), es rechazado mayoritaria-
poblaciones del interior del País Vasco y del mente por la ciudadanía vasca.
Béarn. Los otros tres se eligen exclusivamente
en municipios bearneses.

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