Fernando Lerma Blanco

¿ES POSIBLE UNA MORAL UNIVERSAL?

Creo que, como sociedad, nunca nos habíamos encontrado en una situación tan compleja en
toda la historia de la humanidad como la que estamos viviendo actualmente: “La era digital.

Podría dedicar todo este ensayo a argumentar el hecho de que esta era (la era digital) es
diferente cualquier otra época que haya vivido la humanidad, pero no es el tema de este
ensayo. Además, ese trabajo ya lo han hecho otros autores como Alvin Toffler, en su libro
titulado “El shock del futuro”. Pero una de las cosas que me interesa resaltar en este
periodo que vino como consecuencia de la era digital y de la información, es el libre acceso
a la información.

Nunca en toda la historia de la humanidad las personas habían tenido tal acceso a la
información como lo tenemos hoy en día. De hecho, tal vez ese exceso de información sea
mas un problema que una ayuda. Ahora, que tiene que ver todo esto de la era digital y la
información con la posibilidad de que exista una moral universal:

El acceso a todo este conocimiento hace posible que cada persona crea que puede
argumentar sus propias creencias. Por ejemplo: el tema de la ideología de género, que esta
de moda en esta época. Como especie humana ni siquiera podemos ponernos de acuerdo en
si la homosexualidad es moralmente aceptable o no. Hay toda una cantidad de posturas,
tesis y documentos que argumentan a favor y en contra de esto, y con el libre acceso a la
información cada persona puede tomar lo que le convenga para argumentar lo que bien le
parezca (a favor o en contra de la ideológica de genero). Desde luego que esto no quiere
decir que todos los argumentos sean completamente válidos. Pero hay veces en los que se
vuelve muy complicado distinguir la validez de dichas argumentaciones.

Este problema no solo ocurre con la ideología de género, sino con muchas otras cosas más.
Parece que vivimos en el siglo de la relatividad, donde todo puede ser cuestionable y
respaldado con supuestos estudios o investigaciones que ahora están al alcance de todos y
que además nos bombardean por medio de las redes sociales y otros medios de
comunicación. Entonces aquí es donde verdaderamente empieza lo interesante: Si como
Fernando Lerma Blanco

sociedad no hemos podido ponernos de acuerdo en cosas tan insignificantes como la

ideología de genero o el aborto, ¿Cómo podríamos argumentar una moralidad universal?

Muchos de los más grandes filósofos han intentado establecer un código moral universal,
pero hasta la fecha no han tenido éxito, pero supongamos por un momento que una persona
con una mentalidad extraordinaria pudiera argumentar una moralidad universal perfecta y
sin error alguno (lo cual no existe) y que además todos los seres humanos aceptaran esa
moralidad como parte de su cultura. ¿Qué pasaría?

En primer lugar, para aceptar dicha moralidad, la humanidad debió haber renunciado a sus
propias creencias y aceptado las de alguien más, y de hecho esta sería la única posibilidad
de que dicha moral exista (una renuncia universal al poder de pensamiento propio para
aceptar el de alguien que parece tener mejores argumentos), pero aquí es donde comienza el
verdadero problema, por que el ser humano posee voluntad propia y por mas que se le
intente someter, parece que hay una naturaleza intrínseca en su propio ser que lo hace
cuestionarse el mundo que lo rodea (gracias a eso hemos logrado evolucionar como
humanidad) y la probabilidad de que millones de personas renuncien a sus propias
costumbres, creencias, argumentos y tradiciones para aceptar los de otro humano igual de
imperfecto que ellos, es prácticamente nula. Pero vamos a otro escenario un poco mas
adecuado para esta moralidad universal que intentamos buscar:

Imaginemos por un momento que todos los seres humanos desaparecen de la tierra y solo
quedan vivos dos. Un hombre y una mujer capaces de procrear vida. Esta pareja procrearía
hijos y les transmitirían sus propias costumbres y creencias (a todos lo mismo), tendrían la
libertad de enseñarles y someterlos a su antojo, enseñarles lo que ellos quisieran sin
ninguna restricción. Pero con el pasar de los años, esos niños se convertirán en adultos y
empezaran a explorar la vida por su propia cuenta y aprenderán por ellos mismos y ellos a
su vez procrearan hijos y así sucesivamente, incluso la pareja que quedo viva originalmente
morirá, y las enseñanzas originales se irán perdiendo con el paso de los años, porque ¿Qué
posibilidad existirá de que miles de años después, la moral original de la pareja siga intacta
en toda la descendencia que procrearon?

En conclusión, yo pienso que no es posible que exista una moral universal. Tal vez
teóricamente si, si todos los seres humanos renunciaran a su propia moral para adoptar la de
Fernando Lerma Blanco

alguien más, esto podría durar un tiempo hasta que lleguen las nuevas generaciones, pero
en la practica es muy improbable que suceda. Sin embargo, si es necesario encontrar algo
similar a una moral universal, por que como especie humana hemos demostrado ser los
seres más dañinos para nuestro planeta y nos urge encontrar una manera de poder tratarnos
con respeto unos a otros.