Está en la página 1de 232

Fotos

Stills de la película fotografiada por Alejandro Coronado.


Fotos de producción tomadas por Rafael Santamaría y María Berns
Fotos de producción tomadas con Iphone por Sofía Tèllez.
Fotos de scouting y casting tomadas por María Berns.

Textos
Alicia Laguna, Sofía Téllez, Julia Mirón, Teresa Avendaño, Jesús Flores, Rosa Borrás y María Berns.
I started planning the trip when I was 4. I collected what I thought I needed for a long trip.
Once, for Christmas, my mom gave me a litttle suicase, the message was clear to me: you can leave. I kept all the items I have been collec-
ting for so long inside. When I went to the dining room to say goodbye, to my amazment, the table was set for three. My mom gave me the
wrong message. Defetated I returned to my room and decided that I´d leave the minute I could. That was 35 years later.
I don´t intend to go back.
Hay cosas que ya no tienen cabida en el vocabulario anterior que las palabras ya no alcanzan a decir y a formular...
Ese desprendimiento , alimentado por un fuerte deseo de ser alguien, alguien que no era,
inscrito como recordatorio en la piel, en ese animal ....
Lo que ya estoy siendo y lo que no puedo volver a ser...
Palabras que o salen, que ya no salen, 
Y si lo dijera tal vez no podría verme más en el lugar donde ahora estoy colocada....
miedo ....
soledad profunda...
certeza de que lo único que puede mantener este sueño es el desprendimiento...
(Alicia Laguna)
So LOng
(El diario de los itinerarios de la mujer peZ)
Nuevamente me encuentro en Toronto, llegué a fines del verano. Con las imágenes de la película fresca, después de terminar de calificar los
rushes en la ciudad de México, caminé por la ciudad durante las primeras semanas. Recogía pedazos de la ciudad que recordaba de viajes
anteriores que me servían para pensar texturas.
El viaje pensando para dos semanas, máximo tres, se ha extendido a casi un mes y medio y aun no sé cuando regreso a la mesa de edición en
México.
Las primeras semanas, revisé el material en la Universidad de York y empecé a poner clips sobre la línea de tiempo. Al mismo tiempo, em-
pecé a editar una versión en pequeño. No puedo quitarme de la cabeza la imagen del hombre originario de algún país asiático que grita en la
banqueta del café de la Merced, no reconozco su idioma, necesito encontrar a alguien que sepa qué lengua habla y me pueda dar una idea de
lo que dice. Por ahora me quedo con sus gestos, sus movimientos grandilocuentes de brazos, su ira, por lo que cuenta o porque no logra
comunicarlo, o su cuerpo es un puro grito, siendo la voz un manifestación parcial de algo material que noto pero seguramente no percibo en
su totalidad.
Me pregunto qué hay de bueno en racionalizar el proceso de realización de la película mientras demoro la edición. seguramente creo que
encontraré una clave, lo que en definitiva estructurará la edición, la que presumo una compleja combinación de imagen en movimiento, está-
tica, sonidos, texto sobre pantalla, cuadro vacío, en blanco, en negro, algo que será molesto de ver en una pantalla, y quizás sí en un museo o
una galería, regresar a este propósito, más bien retomar, de película.
Penelope duerme para no soñar con su regreso,
para no ser, no sentir, no creer...
Hace más de un año cuando me invitaron a un seminario en en Festival Internacional de Cine de Guadalajara, me crucé en una ambulancia,
una viaje de adolescentes desde la sede de la Fiesta Mexicana del festival al hotel donde se alojaban los invitados VIP con un argentino, al
día siguiente sabría que era un compatriota, quien era un vendedor de películas, un distribuidor que comprobaría, en el salón de la industria,
reconocido por sus colegas. Como típico argentino mostraba encanto y al primer intercambio la relación parecía la propia de grandes ami-
gos (así pasa entre argentinos, parecemos hermanos). Quedamos en hablar de mi proyecto, intercambiamos información sobre fiestas y me
acompañó al subsuelo para recoger mi entrada a la fiesta catalana. Cruzamos al Starbucks, el ambiente de amistad se tornaba a uno de ligue
en el que insistía de hablar de nuestros cuando se refería a su hijo y al mío. Me interesaba llegar al business y barboteé el pitch tratando de
aplicar las técnicas aprendidas en dos días de seminario. No quedaba claro en el pitchl la perspectiva de la mujer para tratar el asunto de la
migración y me preguntó por el mito que tenía en mente al pensar la historia. Fingí dudar pues el mito siempre lo tuve muy en claro: el
regreso de Ulises, o puesto desde la perspectiva correcta, la espera de Penélope.
Y agregaría hoy: el espacio que habitaba.
No volví a ver al argentino pues esa noche decidí viajar al norte, a la frontera entre México y Estados Unidos, la región, franja, hueco, desde
donde emergió la historia, la intuición, la primera hipótesis. La mañana siguiente me subí al Chihuahuense rumbo a Ciudad Juárez.
An estranged foreign territory
absent in the traditional maps and travel guides.
I need to draw that map.
I wonder where it leads.
Día 1.
Dije que escribiría todos los días y lo he olvidado desde el primero.
Quizás porque todos los días se parecen,
uno tras otro se suceden sin que yo me dé cuenta,
todo es un volver a empezar, todos los días son el primer día,
como si recién hubiera llegado.
La dificultad inicial
Empezamos con la escena del desayuno, la escena más difícil de grabar de la historia de Renata. Coordinar la llegada de Renata, la salida y
la entrada de Uscanga, la espera de los niños, orquestar el crew. Pienso en una primera toma no escrita en el guión, grabar la llegada de Re-
nata a quien nadie ha visto.  La noche anterior le comento a Alicia mi deseo de grabar su entrada, ella accede, es la primera modificación al
guión de los muchos que se sucederán en los siguientes 14 días de rodaje. El día anterior luego de preiluminar, decidimos que nos iríamos
con luz natural, me decide un still del cuarto de las muchachas, me seduce la oscuridad.

La señora Isaura pregunta por Renata, le respondo que llegará tal como lo indica le guión. Mientras tanto Alicia ha salido a pie del hotel,
cargando su maleta, que es la propia, da vueltas pues todavía no estamos preparados, para que llegue. La alejamos una vez, en la siguiente
Rafa se encargará que no se acerque. Sé que Alfonso está nervioso pero oculta su ansiedad, creo que él también quiere verla, saber quien es,
cómo es. El sábado habíamos hecho una mecánica, fue la oportunidad para que todos se conocieran y se incorporará Mercedes a la familia.
La mañana del sábado, llegan Alfonso, la señora Lupe un rato después, se perdió para llegar, se confundió de callejón, llega sudada, junto a
ella, Frida, Derek está casi junto a mí y no lo noto enseguida. Rápidamente, Alfonso y Derek se observan, y se entienden, Ana Paula se de-
mora en llegar junto a su papá y una señora mayor, es su abuela, yo me detengo a mirar más a la abuela que a festejar la llegada de Ana Pau-
la, explico a su papá lo que haremos y la hora para terminar. Aun esperamos a la señora que aceptó interpretarla, llegará con su sobrina,
quien hará a Juliana. 
Abuela y nieta se quedan. 

La abuela, quien se presentará como la señora Isaura, habla y habla, observa, se adelanta a Ana Paula cuando se le pregunta sobre la escuela,
expone sus logros y capacidades, sabe hablar perfectamente el inglés, hace deportes, juega al fútbol, su papá es campeón sudamericano del
2005 de físicoculturismo, Mr. América, no para de hablar, Ana Paula la mira divertida, ya está acostumbrada al show de la abuela. La señora
Isaura es Mercedes, sin dudar. 
El primer día Alfonso está nervioso, hemos estado trabajando juntos durante los últimos tres meses, desde que pensé en él para el persona-
je. Lo había visto conduciendo las danzas Mexicas en la explanada de la plaza de los Maestros y me había atraído su presencia, parecia un
resto del viejo mundo. Desde que leyó el guión y empezamos a hablar, su historia personal se empalmó con la historia de Uscanga.

Estamos listos, llega Renata.


Corremos la secuencia que es la cero, la que no existe; lo que prima es el destiempo, la incomodad, nadie sabe qué hacer, Ana Paula equivoca
su lugar en la mesa y el guión se descoloca. Por tan solo un detalle, la escena escrita en el guión se cae. Fantástico.

Alfonso observa a Alicia, ella conserva su indiferencia. Surge la complicidad entre Alfonso y Derek. Ana Paula es la gran observadora.
Culpa por irse, 
culpa por no estar
culpa por sentirse bien 
culpa por no  extrañar, por no tener un lugar en este espacio,
culpa por no desear desesperadamente.
culpa original
culpa de ver los paisajes blancos cristalinos como parte de mi amanecer,
por no levantar las paredes caídas
por una vagina que apenas se humedece,
la piel pintada.....
Cuándo llegaste, de dónde vienes, me dejarás entrar,
qué haces aquí, para qué viniste, no puedes estar aquí,
eres una buena mujer.
I don´t say that I´m good or bad. The most difficult thing here is to leave, it´s the
major problem, leaving the family, it feels bad, but as one owns nothing, what´s
the point in staying? Those who ignore how it is think that leaving is easy but
there is always the risk, of not coming back.
I was very excited because we were at home and I had arrived. The kids were very happy.
Well, once you´re there, you can only work.
Julia: I cleaned houses, worked at a hotel from 8 am to 12 pm, and at a kitchen
from 2 pm to 12 am. I started earning 120-130 dollars. Later, I earned 600-700
dollars per week.
And the same once again, every day is the same thing.
You are in limbo right now, very difficult.
El niño entra y me cuenta una historia, es un bosque, dice, y no recuerda más.
Yo pienso en lo nublado, el norte melancólico, imágenes de LA, la 5 que sigue hacia el norte,
mis sueños de Alaska.
You are invisible
Después de la comida: la escena del lavado de ropa: Isaura empieza ya desde la mecánica de la escena, señala cuan empapada está la ropa, la
retuerce con fuerza, le pido que espere para iniciar. Primera toma, se alarga pues se concentra, no ve a Renata y no le advierte sobre el piso
resbaloso. En la segunda toma, ya Renata está a su vista, pero Isaura no reacciona (el personaje aun no registra su presencia), en la tercera,
Renata necesita entrar a cuadro y entonces inicia el intercambio, Renata la ayuda a tender la ropa, reacomoda lo que Mercedes ya tendió.
Mercedes termina su trabajo y Renata queda con la ropa.

Una primera foto para póster y empiezo también a variar las escenas: Alicia abraza la ropa sucia en medio de la sala. Tírala, le ordeno, ella
la deja caer, corre a la puerta, se detiene, se vuelve, recoge la ropa y regresa al interior.

El guión se reescribía en el set. Tal como veía el ambiente, los actores, la luz, establecía los emplazamientos y el cuadro, el movimiento de
cámara o no. El cambiante ambiente del rodaje establecía los emplazamientos.

El guión era la referencia. Hacíamos un ensayo, se grababa, lo pensaba mientras lo observaba en el visor de la cámara para grabarlo la pri-
mera toma oficial. La segunda toma después de las correcciones solía darme ideas que incorporaba en la siguiente. Había escenas que no pa-
recían completas. Así las dejaba después de una cuarta toma.

Una conclusión de esos catorce días: prefiero grabar pocas escenas al día y tomar más tiempo para pensarlas, diseñarlas en el set.

La película se realiza con lo que hay en el momento, en el momento de iniciar una escena, se deciden emplazamientos, encuadre, guión, mo-
vimiento, desarrollo dramático. O en el cambio de un set a otro.

Cine que emerge de la realidad. Comosi fuera un documental, registra su propio movimiento.
Throw the dirty clothes on the floor and leave.
La Vidriera.
leyendo de nuevo el guión ,  te puedo decir que hay cosas que me provocan mucho...
esos momento en los que la realidad se disloca, y aparecen los anhelos o los deseos perdidos , los vacíos, los momentos en los que hay un
guiño a otro tiempo o a otro espacio....

Veo también a dos mujeres diferentes

Veo la migración como esa onda expansiva que invade la vida de mucha gente, que es la gente que forma un país...
pienso la película con varias alternativas, es como si colocáramos el ¨si como¨  en las mujeres
y  esto vuelve más abiertas las cosas, las dos caras, lo oculto ...
y una tercera mujer que es la que observa la que las ve a las dos
y se hace su propia historia con ambas...
Acitrón de un fandango:
Acitrón de un fandango
¡Sango!, ¡sango!, sarabe,
¡Sarabe de farandela!,
Con su triquitritran.
Grabamos el primer encuentro íntimo.

En una primera toma, Alfonso entra con la toalla anudada a la cintura y la suelta. Desnudo total, resulta más fácil que lo anticipado.
El ensayo lo grabamos, sale muy bien. Me pregunto si Renata no pudiera haber cedido por momentos, porque la mostré aterrorrizada.
El vacío es su territorio. ¿Cómo sera el sexo en el vacío?

Ella lo ataca, él se enfurece. Quedan exhaustos, Alfonso destruido, (¿lo estoy buscando destruir?) Luego, provocaré a Valentín, quiero de-
sarmarlo. Me enfurece que no le pregunta, no le puede preguntar nada a Natalia y lo obligo. Me pregunto cuánto Natalia quiere que le pre-
gunte, se compadezca de ella, quiera compartir con él su soledad. No mucho. Cuestiono mi presencia en la película.

Al terminar de apretar record, Alejandro, a la escena de intimidad primera, me mira y me dice muy fuerte, yo he estado atisbando desde
atrás de su hombro.
esa oscuridad dentro , pero no puede regresar, no puede echar marcha atrás...
solo puede verse fuera de, esa casa,
sin ese esposo,
sola tal vez
Contemplo el patio de baldosas verdes amarillas empapado, el limonero da sus flores blancas de rigor
aunque no alcanzo a olerlas. Las perras duermen bajo una de las viejas sillas de jardín
que posiblemente se usaron en el pasado para reuniones familiares de comidas y cumpleaños.
La lluvia cae inevitablemente, sin parar. El viento hace volar la sábana sujeta a a ventana
que nos separa del resto de la casa y nos crea una falsa intimidad,
por el hueco de la sábana entreveo el piso y el árbol muerto en el centro del patio.
Cordeles a los lados de la ventana revelan la ineficaz tramoya de una puesta en escena ...
ya no pertenece a ese lugar, a esa casa , a ese desayuno familiar,
a esas calles y casas derruidas,
que ya no puede tener sexo con él ...
todo en palabras que no puede decir... .
La Flores Magón
A las 9 de la mañana, las señoras en riguroso vestido estampado suelto, cuchichean en las esquinas como si
ocultaran un secreto o no quisiesen despertar a quienes aún duermen alentados por la brisa fresca después de
la noche de calor. Las señoras se deslizan de una casa a otra con la primicia del día o el recuento de
cómo pasaron la noche: “Lupita, Lupita, no me siento bien”, escucho a doña Pilar
mientras golpea en la ventana de mi vecina.
Flores Magón es una de las colonias que surgieron como una prolongación natural del centro hacia el sur. Ubicada entre los barrios popula-
res del Centro y los fraccionamientos desarrollados en los 60`s y 70`s de Reforma y Virginia donde se asentó la clase media, ahora rebasa-
das por los desarrollos urbanos de Boca del Río, cobijó a la emergente clase obrera creada a partir del desarrollo del puerto. Estibadores,
trabajadores de la construcción, dueños de pequeños negocios, fueron ocupando esta colonia, antigua sede del matadero de la ciudad en lo
que es hoy la Escuela de Naútica Mercante y del cementerio en el actual Parque Ecológico sobre la calle 20 de Noviembre.
A las 9 de la mañana, las señoras en riguroso vestido estampado suelto, cuchichean en las esquinas como si ocultaran un secreto o no qui-
siesen despertar a quienes aún duermen alentados por la brisa fresca que entra después de la noche de calor. Las señoras se deslizan de una
casa a otra con la primicia del día o el recuento de cómo pasaron la noche: “Lupita, Lupita, no me siento bien”, escucho a doña Pilar mien-
tras golpea en la ventana de mi vecina.
Todas las mañanas antes de las 8 en un loop imperturbable, la camioneta de El Atlántico recorre los callejones y calles de la Flores Magón
pregonando garrafas de gas con su canción pegadiza. Sometido a un ritmo aletargado, el barrio se despereza de un sueño que con los últi-
mos veinte años menos vecinos sueñan.
La crisis de empleo en la entidad ha empujado a miles de veracruzanos hacia los Estados Unidos. Calles aun bulliciosas en los ochentas
(Uribe, Paso y Troncoso, etc.), hoy lucen desiertas. “En esta esquina se reunían los vagos para platicar y jugar fútbol después del trabajo,
hoy nada mas queda la tiendita¨ afirma un antiguo vecino de la calle Uribe, el con su propia historia migratoria al hombro mientras observa
a unos adolescentes jugando una cascarita en el medio de la calle, “esto sucedía en todas las calles”, agrega.
En el campo la situación es similar. La zona de las sierras de los municipios de Zozocolco, Mecatlán, Platón Sánchez, Huayacocotla, Chicon-
tepec, Zongolica y Soteapan proveen mano de obra a los Estados Unidos, Canadá y los estados del norte del país, tales como Sonora y Du-
rango donde los campesinos trabajan en las cosechas como trabajadores temporales.
Así como están los que se van están quienes llegan, principalmente de entidades aledañas como Zacatecas y Oaxaca y de países centroame-
ricanos como Honduras y El Salvador; ambos países han abierto consulados en el puerto y en Boca del Río. Se escucha su tonada en las ca-
lles del Centro a donde llegan para trabajar en limpieza o servicios desde las colonias populares, muchas carentes de servicios básicos, con
viviendas de maderas y lámina.
También, Veracruz es el segundo estado de la Republica, después del Distrito Federal, en atraer población indígena, desplazada de sus luga-
res de origen por la baja en los precios de los productos agrícolas, la práctica de la ganadería intensiva y los efectos de los derrames petrole-
ros en el medio ambiente; son empleados como jornaleros agrícolas en la cosecha de caña de azúcar, café, y frutas y, en las ciudades, se dedi-
can al comercio informal.
Mientras camino hacia el centro, los ancianos se asoman por las ventanas de las viviendas sobre la calle Gómez Farías; la mayoría de sus
hijos y nietos han migrado a los Estados Unidos; sorpresivamente varios aun viven en Veracruz aunque no en el puerto. Las paredes de la-
drillos de las antiguas casonas dan paso a casas de madera en abierto deterioro; hablan de planes de renovación que remodelaría las casas de
madera pintadas en combinaciones azul, naranja, verde y amarillo y casas tipo closet que fueron las antiguas moradas de los trabajadores
temporales del puerto.
Son parte del famoso y popular barrio de La Huaca pegado al Centro Histórico, donde nació Toña La Negra y su hermano El Negro Pere-
grino, ambos afamados personajes del bolero, y donde encontró inspiración Agustín Lara. El son, la rumba, el danzón y el guaguancó son
algunos de los ritmos que durante los fines de semana se escuchan por los pasillos y pasajes que separan a las casas de madera pintadas de
celeste, rosado, naranja, amarillo. Es la ciudad tras la ciudad.
Sus modos han perdurado entre los callejones, en el interior de cuartos y viviendas, en los patios donde las mujeres lavan la ropa, los hom-
bres bromean, los niños juegan entre las sabanas colgadas cruzando los espacios públicos. La calle de Doblado es el corazón del barrio
uniendo el boulevard con el centro de Veracruz. Las casa de madera se mezclan con otras de ladrillo y concreto; algunas son accesorias,
otras en franca negociación con estilos arquitectónicos de los cincuentas y sesentas. Esta colección de patios es considerada la fuente de la
identidad del jarocho. En esa área, en las afueras de la ciudad amurallada, habitaron los esclavos africanos en el siglo XVII. Hacia fines del
siglo XVIII, allí vivían los jornaleros, pescadores, artesanos, músicos, los cargadores, las lavanderas y los trabajadores del puerto. En el si-
glo XIX, se convirtió en el barrio de los emigrantes que llegaban de otras partes del estado y de otros estados para trabajar en el puerto y
en el comercio. Los patios de San Nicolás y San Salvador datan del siglo XIX, según dictamen del INAH (Instituto Nacional de Antropolo-
gía e Historia) y La Favorita es uno de los patios más antiguos de toda América Latina.
ºEn costumbres, este barrio no ha cambiado. El ambiente es el mismo, antes no había mucha protección y era muy pesado. Acá vivió de
todo: profesionistas, deportistas, boxeadores profesionales, por ejemplo, Beto Cuarí. Había otro hermano Baby Cuarí, que peleó cuando el
Ratón Macías era una estrella, hubo grandes peloteros, grandes luchadores profesionales, entre ellos el Verdugo que filmó muchas películas
con Capulina y era trabajador de los muelles. Y también futbolistas de la liga profesional, salieron de este barrio: Fernando Blanco, le dicen
El Pipo, fue de los Tiburones cuando jugaban por la camiseta no tanto por lo económico. Luis de la Fuente, le decían El Pirata, el estadio de
fútbol lleva su nombre. Del Pirata se han tejido muchas fantasías, se decía que era un marrullero para entrar al área, daba codazos y patadas,
tenía mucha técnica para pegar sin que el árbitro se diera cuenta, no lo podía expulsar porque el tipo era muy astuto.
Fue muy grande. A mí me tocó verlo jugar, decían que ya iban a jugar y el tipo estaba en los Portales bien borrachote, dicen que el entrena-
dor lo iba a buscar, lo sacaba, lo bañaba y le daba café y que el tipo salía a jugar como si hubiera entrenado toda la semana. Era maravilloso
verlo, era hijo de españoles pero nació aquí en el puerto. Yo lo llegué a tratar mucho por la música. Me acuerdo una vez lo saludé en los
Portales, y le digo: Luis y ¡zas! me da un manazo en la panza, de cariño, pero qué manotazo y luego me sacudió las greñas: ¿qué pasó cha-
maco?
Y peloteros de béisbol, muchos. Lino Donoso era un gran pitcher, no había noche que no estuviera bien borrachote, podía tirar un jue-
go maravilloso, y luego un día desapareció, quien sabe que sería después de él. Martín Ligo, cubano, era una maravilla que podría haber es-
tado en las ligas mayoresº, cuenta Eduardo Aguirre, músico.
No sólo por su rica vida social y cultural La Huaca es un emblema de identidad, sus pobladores participaron en la invasión norteamericana
de 1914 y el movimiento inquilinario de 1922 que algunos describen como un proyecto netamente anarquista.
ºEs de alguna manera lógico que se hayan dado estos experimentos. En los últimos 25 años del siglo XIX se moderniza la ciudad con la
construcción del puerto, las obras públicas, el tendido de las líneas de ferrocarril y la explosión urbana por el derribamiento de la muralla
en 1879. El crecimiento es tal que de 1900 a 1910 la población crece de 29,164 personas a 48,633.
La situación no hace más que complicarse cuando el Presidente Carranza traslada la capital del país a Veracruz. Dada el alza de las
rentas, de 10 pesos el cuarto en 1910 aumenta a 30 y 40 pesos en 1920, se organizan los inquilinos para protestar por esta situación. Quie-
nes primeros se alzan dicen fueron las prostitutas quienes quemaron los colchones e las calles dando lugar a una proclama de “no vamos a
pagar renta”. Herón Proal se asomó como el líder de un movimiento que sería reprimido antes de pasar a un nuevo estadio de lucha. El líder
fue encarcelado y el movimiento disuelto, congelado. Hablaban de veinte a treinta muertos aunque los cadáveres se multiplicaban flotando
en las aguas de la bahía. Hay quienes ven el primer carnaval organizado en la vía publica como una distracción social a la destrucción del
movimientoº, termina de relatar el Licenciado Rodriguez Azueta, director del Museo de la Ciudad.
Los hombres deambulan en las ciudades americanas mientras las calles de Veracruz, vacías de hombres.
Un hombre cruza Gral Prim y canta sobre las mujeres que dejan a los niños.
Los muchachos viajan en un carro tirado por un caballo. Son tres. Uno grita: compramos fierros, aires acon-
dicionados, lo que tenga en el micrófono, otro busca señales de los potenciales vendedores y un tercero de
panza sobre un colchón atravesado en el carro, con las piernas cruzadas y la cabeza levantada se deleita en el
pasaje solitario de la una y media de la tarde, este domingo.
porque estoy aquí y no allá ?
Regreso con el recuerdo de otra persona que se parece a mí y creo haber conocido en otro lugar.
Sometimes, I imagine this other woman.
She has two girls, she takes care of her house while her husband is away. She imagines his return but
doesn´t desire it. However, everyday she gets ready to welcome him home.
It´s nice to think about her, me hace sentir bien. She makes me feel good.
Wednesday 20th,
morning,
started,
my goal, my dad´s house, my kids, great distress, called me inside, I cried, I didn´t want to leave, but were
bigger and crying my dad´s house, the trip moments later, two people, a car took us to the city, said goodbye,
we were three, a car, Cordoba, the longer trip, didn´t know, boarded to Elatar,
48 hours later.
Día 2.
Segunda jornada, sin mayores resultados...
El mejor día con crew completo, se cumple el plan de trabajo.
La incertidumbre sobre el regreso de Mercedes. Sofi y Danny hablaron con ella el lunes y no quiere continuar, su marido no la deja, el lunes
regresó muy tarde a su casa, pasada la hora de la comida, y cuando Isaura llegó, lo encontró lavando los platos. Por la noche yo hablé con su
hijo y me dijo que hablaría con ella. Confío en él.

Hotel Delfines: oficina de producción y data management el cuarto 102, el 104 lo ocupa Alicia, pruebas de vestuario.
Corte a comer. Antes Alicia se desliza por debajo de la colcha como si fuera un bicho. Juego.

Rafa y las chicas instalaron la oficina de producción en la casa de la señora Elisa, la casa es set y oficina, me encanta. Rafael organiza el tra-
bajo, saca planes de rodaje, yo sé que los cambiaremos, él reitera: es una propuesta, vos hacés lo que querés, sólo si sacas escenas y las cam-
biás, que sea yo el primero en saberlo. Fantástico productor, a quien necesito. 

Tema: el presupuesto. Intuyo a partir del primer fin de semana que el dinero no aguantará un rodaje de dos semanas, hacia el martes me
tranquilizo: disfrutaremos el rodaje de la primera historia y se cancelará la segunda, lo tenía previsto como el plan C desde antes que Rafa
me pidiera enumerar los planes.

No había storyboard, se decidía emplazamiento al cambiar de set, al iniciar una nueva escena. 
-  Hay una coherencia visual, encuadres que se repiten: el acuario y la lonchería, por ejemplo. 
- Hay escenas y encuadres de HMS: Renata contra la pared y el repiqueteo del martillo contra la pared, el OS de Mariana y vemos a Valen-
tín a lo lejos.

La escena de la discusión se va armando momentos antes, unas horas antes, siempre supe que no quería que fuera una típica discusión entre
dos, sí que se sintiera como una de las tantas discusiones que pudieron tener antes de que Renata partiera a los EU, rutinaria. Pero quise re-
írme de esa discusión, pues en el nuevo contexto no tiene sentido: los dos son otros, los dos no están interesados en repetir lo anterior, ya
no están interesados en ser una pareja.
la escena de la discusión, resolución fársica. Renata y Uscanga entran y salen de los cuartos, para cruzarse en el comedor, mientras tanto los
niños dibujan sobre la mesa.
Aprovechando la distribución del espacio de la casa de la señora Elisa (el espacio determina el conflicto, lo crea, el establecimiento, la arqui-
tectura del drama, del enfrentamiento), los cuartos desembocan en el comedor sala y pensé en una dinámica circular, el comedor como el es-
cenario y el resto de la casa como el backstage de donde emergen los actores para encontrase en el escenario donde los niños dibujan ajenos
a la discusión de sus padres. Entradas y salidas. Como en un escenario teatral.
Empiezo a pensar en el elemento de burla, dudo en pedírselo a los actores, me llegan ideas: burla al carnaval de él, a los viajes de ella. Se los
propongo, ellos también dudan pero sí es lo que quieres lo hacemos. Haremos una seria. Pero ya en la primera toma sale el humor. Y Alicia
y Alfonso lo incorporan en las siguientes tomas, me río.
La señora Elisa y su tía siguen con su vida cotidiana en el medio del rodaje,
con sus comidas, lavado de ropa y de platos, ni se inmutaron con nuestra presencia.
Día 3.
Nonplace as as a space and a mental state, the apparition of strange characters in unusual spaces, places we
have lived in and left behind, the ultimate quest to find companionship.
The program is a reflection on the notion of ideal and unconventional spaces, spaces occupied by memories
and resistant to boundaries.
(AUTHOR?)
sand everywhere,
it was a river of stone.
It´s Monday,
I´m at the corner of Main and the Fourth, I´ll know that later, I got the tip of a job. It should be good. I
wrote an email to my kids, Iet them know I plan to visit them as soon as I save a little money.
Llevo un registro de todo.
Caminar por Paso y Troncoso se vuelve una experiencia novedosa: es lo nublado, el viento, el que sea martes
y se sienta domingo, como una experiencia traspapelada, así me siento, una vez más, fuera de lugar, ocupando
un tiempo que no sé si ya pasó o se avecina.
El miércoles la producción hace crisis: el plan de trabajo se cubre hasta la mitad. 
Para la mañana del miércoles Rafa estableció callejones. Yo, no muy de acuerdo, eso lo podemos hacer Alejandro, un staff y yo, no todo el
crew. Rafael se ve estresado, da órdenes, trato de calmarlo sin éxito. Empezamos por el callejón 21 de marzo (¿o febrero?) Rafael quiere se-
guirnos en su camioneta, demasiado, desiste, queda el carro de Gustavo. Empezamos a caminar hacia Mina, detalles que crean abstraccio-
nes: azulejos, huecos, se graba sonido, hay buen ambiente en el crew, Alicia nos sigue, Sofi carga el vestuario, son caminatas de días diferen-
tes, el calor inicia fuerte más temprano hoy. Seguimos con el 12 de octubre, Alicia recorre con su mano una pared con ladrillos a la vista, y
cal, imagen que se repite de HMS, la que haremos unas horas más tarde frente a los murales de Galí también replica el juego de la falda de
la niña contra la pared de HMS. Alicia mira hacia arriba, se escucha el repiqueteo de un martillo, posible seducción. Mira hacia arriba, a la
caza de la mirada del hombre. Insiste y el repiqueteo continúa. Sigue por el callejón hasta la casa en obras, cerrada, no hay trabajadores, in-
tenta entrar varias veces, pero rebota en la casa y dale una y otra vez. El gusanito de su dedo se desliza por una puerta.  El sol calienta de-
masiado, calcina. Nos detenemos en la esquina del callejón 12 de octubre y Paso y Troncoso, las muchas esquinas, la tiendita que ya abrió,
Alicia necesita cambiarse de vestuario, no la dejan en la tiendita, sí el señor que vende fruta. 
Antes pasamos por la carnicería, Alejandro paneó por el barandal del balcón del primer piso, Alicia esperó y luego entró a la carnicería y
salió, no permanece en ningún sitio. Pasamos por la casa antigua abandonada, hago correr y saltar a Alicia. Se veía ridícula, ésa era la idea.
El sol creaba más contraste.
Tengo ahora que entender porque estoy aquí ahora...
las mujeres, ocasionalmente y en los días de mucho calor, acomodan las sillas en las banquetas para platicar
mientras esperan que el calor al interior de sus casas ceda e hilvanan historias a partir de rumores, de lo que
ven en la televisión, de los chismes que traen otro que han regresado.
I am here at the border, the biggest
border of the world, the biggest border
of the soul, the biggest hole in the body.
I have been here for a couple of days,
perhaps even more days. But the guy
over there I told me that I have been
here for two days. He asked me some questions.
I can’t see him now, he was here
right here, just a minutes ago.
it can be pretty lonely.
Not all the time, but, sometimes it is,
it really is.
I’m almost sure that I once had a life, a normal life. Somewhere.
Are you in the film? What´s the film about?
A happily married housewife with Two beautiful children. But she changes.
Are you an actress?
I am but you cannot pronounce my name. You get a facade, one of my pretences,
your creation, not me, and yes me. But it is not me.
What’s your name?
De allí vamos a los murales de Galí, sobre 16 de setiembre casi Uribe. Esas mujeres grandotas, de labios gruesos, ojos aumentados, aretes
colgantes, turbantes, mostrando sus senos. Elegimos tres ubicadas bajo la sombra, en el tercero, Alicia mueve su cuerpo y encoge la pierna
como la niña de mi primer corto Historía Mínima de una Seducción.

El calor nos ha afectado. Hay una nueva escena planeada que no logra hacerse pues Chedraui ha negado el permiso. 
Escena en la esquina de Gómez Farías e Iturbide: la escena de Margo, Mili es la única que respondió al llamado de casting publicado en el
periódico.

Una semana antes me había conectado con Cony del periódico Notiver. Ella había cubierto la inauguración de Visit as Art.
El mismo día de la publiccaión en el periódico.
El anuncio tenía dos objetivos: uno el casting, y el otro quizás más importante, comunicar a la opinión pública que estaríamos grabando una
película, así todos entenderían el propósito de la cámara en las calles, era una forma de crearnos un escudo de seguridad.

Cambiamos escenas, locaciones, noche por día, para adecuarnos a la realidad de violencia de esos días. Al fn de la primera escena iniciaron
los bombazos. Grabamos en los callejones y así evitamos las calles principales, estar en evidencia, aunque sí lo estuvimos. No había plan, no
sabíamos donde estaríamos al día siguiente, por una cuestión creativa y de seguidad.
pienso en pájaros
loneliness, la solitude, soledad
me siento exactamente fuera de lugar....
Cortamos a comer. 
No me siento bien, mi estómago y luego la cabeza me empiezan a doler. 
Agencia de viajes, el lugar no ofrece dificultades. Nos demoramos en montarla, el calor, mi cabeza me duele, Gustavo o Ruben me dice que
Jaime quiere hablar conmigo, lo siento como malos presagios, tardo en ver la escena.

De allí al callejón: me duele la cabeza, mi estómago, podría vomitar, pido unos minutos, pienso en todo el rodaje, prefiero perder lo que resta
de la tarde, Alejandro me apura, armamos la escena, él empieza a tomar el juego de la piedrita, la luz cae y cae, grabamos pobremente la es-
cena, no servirá tan oscura, corramos. Frustración y cansancio, Rafa francamente preocupado, no vamos a cubrir el guión. 
Terminamos temprano. 
Me lleva a casa con muchas advertencias.
Rafa: la película no es sólo tuya, es del de la cámara, el sonido, skuadra, Alicia, Alfonso, es tu responsabilidad, tu decides.

Era cuestión de regresar al punto de partida y a las reglas que habíamos establecido:
- Si la conversación de las señoras interesante, nos vamos con ellas.
- Se graba con la luz que hay, en el lugar que hay, con le vestuario que hay.
- Si llueve seguimos y nos acomodamos.
- Se graban las escenas esenciales.
la lluvia se llevaba con su trepidar los recuerdos que había acumulado durante el día, así en unas horas, o
quizás menos, los gritos de los venededores, la mirada desconfiada del señor de bigote en V, el choque inmi-
nente en la esquina de Iturbide y 16 de septiembre, el olor a lavandina a las 10 de la mañana, la mirada triste
de la perra legendaria, el roce del aire que a mi lado lanzaba el ventilador, iban perdiendo materialidad o más
bien adquirían una nueva, líquida, y como tal se desparramaban por los patios y las calles hasta caer por las
alcantarillas.
Tanto lluvia pero impotente para borrarlo todo, pedazos de historias quedaban pegadas y emergían al día si-
guiente mientras iniciaba lo que suponía un nuevo día, with a clean slate, mi andar manchado de imagenes
antiguas obstruían todo intento por empezar de nuevo. un puñado de vidrios rotos, que destrozaban ocultas
en los bolsillos ..
Día 4.
Hola pequeños.... me desperté con ganas de escribirles y decirles que me gustaría que estuvieran acá que me acompañaran en la mañana que
me levanto , me arreglo , camino a la parada y tomo el bus para ir al trabajo, todos los días pasa a la hora que yo necesito, solo tengo que es-
tar a tiempo. Me lleva al downtown así se llama , al centro, en donde hay muchas tiendas hay joyerías, tiendas de ropa muchas cosas, yo voy
a la cafetería a atender la cafetería de los señores para los que trabajo, ahí mismo me puedo tomar un café con un pan , ellos mis jefes lo to-
man muy dulce porque ellos son cubanos  y así les gusta, a mi no, y también puedo comerme un pan todos los días. 
Me gustaría que vieran que conocieran la cafetería, ahí atiendo a toda la gente que va a diario y se toma su café con pan o se comen algún
sandwish o alguna ensalada, es lo que servimos me quedo hasta las cuatro, después vuelvo a tomar el BUS de regreso pero me voy más lejos
de mi departamento de donde vivo, voy a otro Barrio muy bonito en donde dos veces a la semana hago la limpieza de una casa muy bonita. 
Hace mucho calor y el calor se parece al de Veracruz, como pegajoso ¡ con mucha humedad. 
Pero aquí hay aire acondicionado en todas partes. 
Hoy vi una cadenita de oro con unos ositos que me hizo pensar en ustedes, quiero comprarla ¡  quiero traerla en mi cuello para sentir que
siempre estan conmigo en mi cuerpo...
Claro que sus fotos las tengo muy cerquita y las veo todos los días...

Bueno espero que estén muy bien y contentos... les mando abrazos de oso y besos de oso

Los quiere Mamá


Abro los ojos, el Norte entra por las ranuras de las persianas, mueve la cortina y revela un trozo de patio, no
me muevo, temo romper esta rudimentaria fundación. Escucho en el baño al hombre y su rutina, no para mí
aunque lo sea para él, no creo que haya modificado su ritual matutino por mi presencia inédita en su cama,
nuestra cama desde anoche, y mezclo estas imágenes de especulación con las mías de los primeros minutos;
sin embargo, el viento ahora hinca sus dientes invisibles en mi piel aun caliente tras los recorridos de su len-
gua trazando los mapas que conducen a los tesoros que ocultó después de escarbar
Truenan persianas y puertas, objetos caen al piso, estantes se aflojan con el empujar del viento. Como un
trabajo de parto, el mundo antiguo protesta, su resistencia, a esta nueva fundacion.
Un amor en el medio de los vientos entre puertas y ventanas azotándose.

La luz adentro de las sábanas cuando él ya se ha ido, no porque hubiese iluminado el hueco, el hueco es la
mujer que se ha abierto sin mayores protestas, pero las hubo, y la luz brota desde las sábanas que se han con-
vertido en la piel de un animal que se revolcó sobre el colchón, y como crisálida se transformó en …
Escena de los niños en la calle, la piedrita. Nos tardamos en empezar, Ana Paula no llega. 
Realizamos la escena tal como la planeamos Derek tiene momentos magníficos, la ayuda a Alicia a arrancar unos gestos de afecto, Ana Pau-
la medida, justa, su desinterés es dramático. 

A Renata le cuesta expresar sus emociones, los niños le son ajenos. El esposo también. Todo está tan planteado en el empresarial mode. En
el trabajo. No se quiebra, no se quebró. Hasta ahora, cuando la película sigue actuando. Sobre ella.
perdida como esa mujer con mi cuerpo perdido, con mi alma perdida
Sé que la película no cuenta una anecdota intrigante, Renata arriba y parte y, quizás, ni siquiera llegó al barrio Flores Magón.
Los vecinos recuerdan que hubo una grabación y un grupo de gente y yo que por tres años recorrí el barrio, tomé fotos y hablé con las se-
ñoras.
¿Y Renata? Es un personaje inventado, nadie puede recordarla, tendrá que esperar al estreno de la película para que la gente la conozca, pa-
ra después reconocerla.

La presencia del migrante se limita al sonido o la imagen que llega por el teléfono, el chat o el correo o un email. Entonces, la gente podrá
notar: qué cambiada está, ya no se la reconoce, está igualita pero se ve cansada, su corte de pelo no es el mismo, ha engordado un poco, y
después de tantos señalamientos, es una persona diferente a la que la gente conoce. No la reconoce. Y guarda la foto o la coloca en un porta-
retratos y la observa con cuidado para que la persona retratada no cambie nuevamente. Sin embargo, la persona retratada sigue moviéndo-
se, lejos, sin que pueda ser testigos, partícipes del cambio.

También es posible rehacer la persona, y hay quienes recortan la fotografía, y pegan los pedazos para crear una persona ajustada a las nece-
sidades del momento. O, agregar elementos del paisaje, creando un híbrido persona y lugar, al no poner manipular a ambos, lo que nos que-
da es crear su simulacro, una mapa, bidimensional, como los antiguos códices en los que se registraban caminatas y asentamientos. Mapas
de caminatas, de itinerarios.
Tengo la escena desde antes, tanto calor, es dificil la coordinación, resolver la escena, no la veo, Mili está bien casteada, tiene un algo de va-
cío, es blanca, parece no tener historia, los niños están cansados. No entienden esta parte de la historia. No saben qué decir.
Demoliciones y baldíos.
esas calles, esas bardas, esa cama con ese hombre,
en todo está eso de estar perdida
Mis zandalias de tacon bajo repiqueteaban en forma desordenada, mas desprolijo era el ascenso de el, como si no lo hubiera preparado a de-
talle, como si le hubieran puesto esta escalera a ultimo momento. De hecho, ya habiamos sido rechazados en el hotel de la esquina anterior,
tres de la tarde y lleno. Llegamos a la puerta, cuarto 28, segundo piso, mire por el hueco de la escalera y conte tres pisos mas hacia arriba.
El silencio era absoluto, hasta creaba cierta ansiedad que se rompio facilmente con el crac de la puerta al abrir y un leve chillido que venia
del piso de abajo.
El no me miraba, evitaba rotundamente mis ojos, quizas no queria perderse enseguida sino dejarse perder. Seguia cada uno de sus movi-
mientos, torpes, sin ritmo, aparentemente inocuos. Como si el cuerpo de el hubiera equivocado el tipo de cita que lo convocaba al hotel Pa-
lomas. Me pregunte si pasaba lo mismo con las demas, e imaginé haber visto otras veces su cuerpo, manos, piernas, recortado en una coreo-
grafia sin ritmo. La habitacion estaba un poco fria, el no quiso correr las cortinas y descuide el cuerpo de el, para adelantarme y dejar entrar
el aire. Era imposible cualquier intimidad en un cuarto a oscuras, sin aire, el amor, si es que de eso se trataba el encuentro, esta reñido con el
encierro. Claro, el no lo entendia. Los colectivos se deslizaron primero con un suave ronroneo y luego, la hora y el calor apuraron el acele-
rador y el hizo un gesto espantoso, con sus ojos, con todo el cuerpo, inventando la pared de cristal que nos separaria por el resto de la tarde.
Sabia que ni las caricias que el habia planeado durante meses, las pieles entrelazadas, la oscuridad de las esquinas, la risa de los cabellos,
pueden hacer nada cuando los cristales se atraviezan, como esa tarde.
La cama no era grande, bien pequenia, y eso me molesto, darme cuenta del tamanio de la cama, y por eso no recuerdo aun el primer beso
que el me dio, detras de la oreja mientras levantaba su cabello. Ya no quise mirarlo, los ojos continuaban sobre la cama que era pequeña. Mis
manos, las mias, se movian buscando excusas, y encontraron el cuerpo de el, en el medio, entre la cama y yo. Y el siguio un rato arrastrando
sus labios desde mi cuello hacia mis pechos. Una brisita movio los cabellos de el, y los vi y me dio tristeza, mientras mi mano se deslizaba
por la espalda del hombre que ya bajaba su falda y yo lo miraba como si fuera una pelicula, pero yo no era la actriz, ni el personaje, sino al-
guien que trabajaba alli y el director me dijo, ve ahi, necesitamos ensayar y la actriz descansa ahora.
El mostraba un oren como si no hubiera olvidado el guion.
Acaríciame despacio.
Salida de sonidista y asistente de cámara. 
A la anotación de Gustavo de la película no está saliendo, mi asombro, ésta no es una película con un plan de rodaje fijo, cambia, las escenas
se resuelven en el set, así es y cambian y se anulan y se reemplazan por otras mejores, más justas, las que tienen que ser.
Día 5.
Son dos días los que ha llovido y no para. Contemplo el patio de baldosas verdes amarillas empapado, el li-
monero da sus flores blancas de rigor aunque no alcanzo a olerlas. Las perras duermen bajo una de las sillas
de jardín que posiblemente se usaron en el pasado para reuniones familiares de comidas y cumpleaños. El
agua suena e inevitablemente se escucha sin parar. El viento hace volar la sábana sujeta a a ventana que nos
separa de la casa y nos crea una falsa intimidad, por debajo entreveo el piso y la lluvia el árbol muerto en el
centro del patio. Cordeles a los lados revelan parte de la ineficaz tramoya de una puesta en escena ...
Súper, queda Ruben, la noche anterior llena de dudas, me pregunto cómo reaccionará Alejandro a la falta de asistente. 
El Alba de Lerdo. 

El super es el único lugar para ir por la noche.


hoy tuve tiempo de entender más cosas de la computadora que me compré y desde la que les escribo.. tiene
una pequeña camarita arriba con la que me pude hacer una foto y quería madarselas para que me vieran,  me
gustaría tanto que ustedes me mandaran también una foto así del día ... les dejo muchos abrazos y besos
grandes , grandes  los quiero
El audio para la comunicación interna del súper se transmite a una frecuencia
que sólo yo puedo escuchar.
La mujer me cuenta que está cansada, lleva horas tratando de vender algo, pero no ha tenido mucha suerte, y
ahora tiene hambre y hace tanto calor, quiere descansar antes de regresar a su casa. Yo pienso, le propondré
entrar al supermercado y robaremos, como en las películas, ellos me debe algo, yo también tengo las manos
vacías, no puedo regresar así sin nada a casa. Ok, lo haremos, me parece bien que me acompañe, muy bien,
ellos tienen todos, galletas, refrescos, y la cajera con su cara de niña grandota, qué se cree, y ese hombre, ya
no estará, mejor, quien sabe cómo pueda reaccionar.
Bien, entramos y usted entretiene al encargado, le da conversación,
y yo me acerco a la cajera, la de cara de boba, y la amenazo, le exijo que me dé el dinero, le digo que lo que
pienso de ella, la desarmo, ella se pondrá a llorar, no soportará la verdad, no me ayudó, desgraciada, si no lo
es, yo le quitaré las pocas gracias que le restan. Usted entretenga al encargado, así es, propóngale algo que él
no pueda rechazar. Necesitamos una televisión prendida para entretener a los demás, el empleado que repone
la mercancía no hará nada, ya lo vi, él me ayudó y lo hará nuevamente. La vieja que llevó el carro al fondo, a
esa la obligaré a golpes que lo rellene con lo mismito que cargaba, pobre de ella si no recuerda. Usted siga
con el encargado, sí pregúntele lo que quiera. Usted ya entendió, me da gusto haberla encontrado, cómo se
dan las cosas, ¿no? Me sentía tan mal, usted no se imagina. Lo hacemos, de una vez, nadie espera nada a esta
hora. No me diga que no quiere, y por qué, no tiene nada, yo tampoco nada para llevar.
Un hombre antiguo.
te voy a sacar el corazón
Escena en las escaleras del hotel: Falta la parejita. Sofi y yo salimos a buscarla por el mercado de artesanías, encontramos una pareja, es per-
fecta pero no tienen tiempo. No hay mucha gente y no vemos parejitas, cruzamos al café de la Parroquia. 
Los veo.
Día 6.
Estoy en downtown.
Sentados en las bancas de los paraderos, las mujeres y los hombres no esperan el bus, no me esperan a mí,
camino a la plaza y hablan entre ellos aun cuando no me conozcan.
Salieron el domingo a almorzar afuera. Comen en contra esquina del Zócalo (mientras ella recordaba un do-
mingo similar en Tampa dos años antes cuando escribía unos artículos sobre pueblos desconocidos de Flori-
da y se encontró con el inmigrante griego quien le propuso similar proyecto, te voy a contar una historia, al
que hoy la retiene, por unos meses, en Veracruz), como perfectos desconocidos, sin tomarse de la mano, ni él
pone su brazo sobre los hombros de ella, ni la toma del brazo, ni siquiera la mira, tampoco hablan durante el
almuerzo, como si hubieran ocupado dos mesas distintas, hasta pidieron cuentas separadas, ella argumentan-
do que podría presentar los recibos para su reembolso al periódico, de todas maneras, el mesero los miró con
extrañeza, le disgustan esos pedidos y no sólo por la duplicación de su trabajo, él es un conservador y un
romántico y gusta de inventarse sus cuentos con los clientes y a esos dos les inventó una apasionada historia
de amor que el guiño desde el otro extremo del salón de la morenita de trenzas recientemente contratada
como galopín y también su novia desde hacía dos días interrumpió como un punto y aparte.
Cruzan la plaza de armas, son las tres y el sol aleja hacia los portales a los pocos que toleran el bochorno. Es
un día de festival, otro más inventado por la autoridad municipal, es casi fin del verano y los asistentes de los
regidores y funcionarios se avienen con nuevas formas para extraer los últimos pesos que lleva el turista.
Buscan una sombra para descargar la modorra que le sigue al almuerzo. A ella le divierte verlo balancearse
en la silla del restaurante donde logra mantener un equilibrio hasta que la perpendicular vence su cuerpo
erecto y se quiebra para recobrar la vigilia y otros dos más momentos de sueño que ella ya no contempla
como si fueran crecimientos espurios, ramificaciones que necesitarán ser recortadas.
Una pareja, que como ellos sumidos en el letargo del inicio de la tarde, hablaban sin quererlo, ocupaban la
única sombra del pequeño parque Álvaro Obregón. Una vez que se levantaron, ocuparon su lugar. Y actua-
ron una escena similar, sin propósito más que el de dejar pasar la tarde que se presentaba con un vacío, simi-
lar al de su relación. Como era de esperar, una vez que él se sentó, y sin mirarla, cerró sus ojos y se sumió en
el sueño y traspasó las capas de una arqueología desconocida hacia la oscuridad de un vientre que nostálgi-
camente sólo es posible acceder en el sueño.
Pensó que no despertaría, era un sueño profundo que no deja lugar al sueño. Prefería creer que no los tendría
a cultivar la curiosidad por conocerlos, no soporta la ignorancia, inevitable porque nunca se recuerda todo lo
que se sueña ni se cuenta todo lo que se recuerda y aún menos de un sueño. La tranquilizaba engañarse con
un conjunto vacío.
Frente a ellos, se elevaba un promontorio. Una familia quitaba las mantas e iba descubriendo la forma trape-
zoide de una batería, los stands de los micrófonos, desamarraban nudos, tendían las sogas que sujetaban una
fiesta antigua e irrepetible.
Las chanclas de plástico de la mujer la distrajeron y pensó en los días de playa en los mares del sur y en las
tardes aburridas bajo los naranjos cuando ya no daban más fruta, y estériles creaban el techo para la especu-
lación mientras acababa la hora de la siesta y los chicos regresaban a la alberca para continuar los juegos:
quien aguantaba más tiempo debajo del agua, quien nadaba más rápido de un lado a otro, quien salpicaba más
batiendo los pies contra el agua.
De eso hacía ya muchos años.
Empezamos en el callejón Clavijero. Son las 8 de la mañana. Nos adelantamos Alicia, Sofi, Alejandro, Ruben y yo, Alfonso está en camino.
salen, entran, se acercan, se alejan, se intentan abrazar, besar, piensan, se agarran.
Do you remember that street? Fourth
Street. We met there. That was a long
time ago. Do you remember? I
remember evrything about you. Your dress,
the bosom sligthly shown, the three
fisrt butttons undone. I undid the rest.
But that was afterwards. Later that
Evening.
What I am telling, happened early
In the afternoon when the senoras
Sleep their siesta and the kids do their
Things.

MR. L (VO)
Do you remember how you looked?
MR. L (OS)
You know I wasn’t waiting for
you, oh, no! I wasn’t. You might
think I was, but no… mistake…
a mistake. That’s life, my sweetheart,
things happen when you expect them
the least.
MR. L (OS)
In this street, I declared my love
To you. And you rejected me. You
didn’t know me back there. You were
bad, bad to me. But things have changed,
really changed. Look at you now,
you’re so silent and so acquiescent.
Walking by me and listening to every
one and each of my words.
MR. L
You taste so good, so good. As
your kisses do. Tasty kisses. Do
you remember our first kiss?
MR. L
I keep no grudge on you.
Por los callejones del centro, los helicópteros.  

El ambiente anunciaba una guerra. Los helicópteros sobrevolaban el centro histórico de la ciudad. A lo lejos se escuchaban las sirenas de
ambulancias. Al día siguiente, el clima de violencia se instalaría rotudamente en el rodaje.

Mientras tanto, los dos caminan.

Restaurante. Llegamos a Pescadería, inmediatamente los empleados me abordan ofreciéndome menúes y precios.


Llegamos a la lonchería de Germán, no lo veo inmediatamente pero ahí estás, se acuerda. Está muy oscuro y adivino la preocupación de
Alejandro avanza hacia una mesa cercana al cubo de luz, no en el territorio de Gustavo. Tendrá que iluminar.
Mientras Alicia, Alfonso y los demás se acomodan en las mesas. Le digo a Alejandro que me acompañe. Salimos, las loncherías sobre Lande-
ro y Coss podrían funcionar, en especial una, cruzamos al restaurante de la vereda opuesta, mesas con manteles de tela y plástico transpa-
rente, una rocola, fotos de Veracruz, sillas con logo de cerveza, el lugar es deprimente y decadente. Hablo con el encargado quien necesita
consultar con el dueño en persona, será una hora más tarde.
Ok, pero seguimos por la vereda hasta el restaurante sobre Zaragoza, es el cochinito de oro, lo había considerado pero descarté por su ubi-
cación junto a una avenida demasiado trantransitada. Al entrar me encanta el lugar, se ve siente de provincia, la cocina es hermosa, los mo-
vimientos de las cocineras es de felicidad y la luz inunda los colores pasteles. Me acerco al mostrador, una señor mayor de mirada y sonrisa
amigable me recibe, me estrecha la mano, ¿qué deseas m´hija? Le explico, inmediato sí. Yo feliz, su esposa más discreta me tiende la mano el
señor la anima.

El beso de Alfonso en la primera toma en el restaurante. Alfonso me confiesa: algo tengo que hacer, ya no doy más. 

Pero Renata no quiere, ver.


Tarde en el zócalo. 6 de la tarde. Un poco de todo: locales, turistas, vendedores,
empleados del Ayuntamiento, artistas, viejos, marineros, indígenas.
Un hombre joven se sienta enfrente de la banca sobre la calle e intenta, inútilmente, un juego con unas pie-
dras negras que suenan al chocarse y al caer al piso, un acto de incierto malabarismo que, por sus errores,
empuja al hombre de su posición original a pararse, agacharse, acostarse, reclinarse para recuperar la piedra
desobediente que se resiste a continuar el circuito propuesto por el hombre.
El hombre ríe de su desventura personal, busca con los ojos un cómplice y me mira, yo me resisto a unirme
a la línea que traza desde el otro lado mientras que los pocos turistas la quiebran y arrastran mi mirada ha-
cia su pasado y su futuro próximo: se detendrán en los puestos, comprarán unos aretes, regresarán al hotel, o
quedarán atrapados en el circuito de la plaza; el hombre no interrumpe su juego, no le agrega ni mayor entu-
siasmo ni frustación, como el mecanismo de una maquinaria sigue y sigue sin que su impericia lo afecte.
Tarde noche de comparsa.
Es domingo de carnaval.
Lo llevo a pasear por el Malecón, es de noche. La gente nos mira. Me mira, quiere algo de mí.
Ellos se van, ¿se los llevan? Estoy sola nuevamente.
Main Street, semáforo en rojo, todos esperamos. Hay un policía, verde, la gente cruza, yo entre ellos,
el policía me mira sólo a mí.
Trato de explicarle que no robé, que lo del súper fue sólo plática sin sentido, para pasar el tiempo,
hacía tanto calor.
Ella estaba cansada. Entienda usted, él, que no se repita.
Adriana quiere ser parte de una comparsa, con lentejuelas y olanes.
Día 7.
realidad no lo real
Día de descanso.

por la tarde grabamos a Renata en Miami, por el restaurant Mardel. Cuando pasa un carrito de chamoyadas, Alejandro señala: se nos cayó
Miami. Finalmente sale lo más Miami posible, se escucha un estruendo... 

La comparsa y la granada, grabamos lo que consideramos será la última toma de la peli. Escuchamos un estallido, más como si un gran ta-
blón se hubiera caído sobre el piso, previamente, vimos pasar carros armados, militares, armada. Ya Alicia había partido, nosotros buscába-
mos una palmera, y su bamboleo. 
Por la noche, Rafa la nombrará nuestra corresponsal de guerra.

Ya en el hotel, sorpresivamente estamos preparando la segunda semana, la amabilidad de María Elena al ofrecerse a cocinar y tener su casa
como base de operaciones resolverá varios de nuestros problemas.

Los meses y los casi tres años trabajando en este proyecto me convierten en una experimentada navegante de la cultura veracruzana. Desde
el trabajo para Notimex que me empujó a conocer la cultura del area metropolitana del Puerto, el proyecto de Visit as Art que me introdujo
a las señoras del barrio Flores Magón, la investigación que inicié en Comapa con el apoyo de National Geographic, escribir el guión con las
cuatro historias originales en los últimos meses del 2009 en el taller de IMCINE.
El Médano: un mundo de insectos, orugas, mosquitos, quemadores, plantas, árboles.
Sweet dreams.
He says that he won´t leave again.
To move is to be alive, is to forge a future.
We need to roll.
He won´t leave.
I don´t know what to feel.
tengo que poder entrar en un proceso si de aceptación para ir hacia otro lado.....
Día 8.
Iniciamos la historia de Natalia.

Desde meses atrás contaba contaba con la posibilidad de que el real Valentín llegara, no un actor, no alguien que pudiera representarlo, no
alguien que había trabajado en los Estados, el real, regresara. Lo comenté con Lola mientras recorríamos el Médano dos semanas antes de
iniciar el rodaje. Ella mostró sus reservas, comentó acerca de su tío quien había regresado años atrás, un tipo fuerte que ella no recordaba
con claridad.

Un domingo busqué a Fito, me interesó su condición de fantasma. Porque ésa es la consición de Valentín. Preguntando al dueño de tlapale-
ría frente a la Iglesia,
o a quien interpretará a Valentín.
The habit of being together is lost now that he leaves, he returns. One doesn´t get
used to the life as it was in the beginning.
I didn´t feel joyous when I saw him, I didn´t run to him because I was happy for
his arrival. Perhaps because he misbehaved badly as a husband.
My kids were at school. it was November 20th, so I needed and wanted to be with
them at the parade, But he asked me to stay because he was coming back.
I wanted to leave and be with my daughters, but he insisted against it. I couldn´t
be with my kids for the sake of him. But I was not excited at his arrival.
One gets so used to be alone, with the problems, that I didn´t need him to... the
truth is that he wasn´t needed any more. He told me: I want to leave as I am not
feeling well up there. But the house wasn´t completed, it lacked protectors, the
windows were covered with plastic, no light.
When he left, it was difficult because of my six kids who were at school, I was the
one in charge. I believed he was coming back in 2 years but he delayed his return.
It was a long time to be without him but when the sadness from his departure re-
ceded, I got used to being alone, with my kids. When he came back, it was no lon-
ger the same, I got used to be alone. I changed and he changed.
I wanted to meet him on the road but he didn´t want me to. I don´t know why. He
said he was near and was about to arrive. I didn´t go out to greet him. He stepped
into the house and said hello. I told him: be welcome, this is your house, come in-
side.
alguien habla por teléfono una comunicación que se pierde en el espacio
(qué comiste, qué hiciste hoy, cómo estás)
Pero Valentín no llegó, no regresó.

Alfonso, Uscanga es un hombre antiguo, un Mexica que baila en las playas del Puerto.

El hombre que Renata ha dejado atrás. No es quien Natalia espera. Busca.


Rafa y las chicas casteaban posibles valentines en las locaciones: en el taller mecánico a una cuadra de Miguel Alemán, un amigo de Daniela,
otro de Sofi, aquel con experiencia actoral en Estados Unidos. Pensé en Alfonso, también Rafa jugó con la idea, los dos la descartamos. Ne-
cesitábamos a un hombre diferente, nuevo, así como estaba planteado el personaje. Alfonso representaba el pasado, lo que no había cambia-
do.

Necesitaba pensar en actores, en especial por los pocos días que teníamos para terminar el rodaje. Busqué un video de la obra Náufragos en
youtube, afortunadamente habían subido uno, muy oscuro, entreví a dos de los actores, posibles. Llamé a Daniel Domínguez, pedí sus telé-
fonos, los llamé, ambos se mostraron entusiasmados. Al día siguiente solo llegó Salatiel, desconocía el qué, para qué. Solo tenía en claro que
era el sobreviviente de un naufragio, no solo por la obra en la que trabajaba , sin también de la vida, me gustó su condición, encajaba, como
encajó la de Alfonso a la historia de Uscanga.

Lo llamo por la mañana, ¿podrá estar a las 11 en la esquina de Constituyentes y Beethoven? Allí llegarán Dani y Aylin. Los espero en la
farmacia, papelería, a las 11 veo a Salatiel caminar por la vereda opuesta, pasadas las 11:30, las niñas no llegan, llamo a Dani y responde su
mamá. ya salió, llamo a la abuela de Aylín, no sabe del llamado, comunicaciones rápidas con Sofi y Dani, la abuela está en camino.
Yo me quedo en la esquina de Constituyentes y Beethoven, espero a Aylín, Dani y Salatiel, con él hablé por la mañana temprano,  

Grabamos la coreografía de la escena 33. La última llegada, o la única real. La última escena es la única real, válida, todo lo demás es un de-
seo, un sueño, una ficción, una nada.

Al día siguiente, Salatiel me comentará que no sabía qué hacer, qué pensar.
quiero ir a Japón. quiero correr por un campo violeta, quiero, quiero.
¿Falta mucho?
los niños jugaban en la calle,
ese verano tocó monopolio,
ellos competían por más casas, había quienes hasta 8 juntaban. las niñas los observábamos,
claro nos hubiera gustado jugar pero ellos se veían demasiado entusiasamdos para dejarnos.
no sé por qué.
como todos los días jugábamos con los muñecos. una salida humillante. como tontitas nos enganchábamos en peleas inútiles
que no lograban ni casas, ni nada como los niños
If he leaves, I´ll go with him.
Por la noche terminamos en el hotel: Renata se transforma en el bicho.

Renata se come, muerde a Uscanga, está rabiosa, Uscanga cae y Renata se desliza como si fuera un animal
Nada que agregar.
Día 9.
Había una vez, un pez que vivía en la piel de una mujer y una vez al año la mujer lo llevaba al mar para que
recordase su procedencia. Un día mientras lo visitaban, el pez se hizo más y más grande
y cubrió toda la piel de la mujer.
Ella olvidó su procedencia y vivió en el mar para siempre.
Acuario por la mañana, es una mañana mágica, Alfonso, Derek y Ana Paula parecen una familia, se han integrado tan bien, en especial Al-
fonso y Derek. Derek lo llama Waki dado que su personaje sólo tiene apellido, le da un nombre. Esa noche, Derek le pide que lo lleve al
acuario, Alfonso admite que el niño se le ha metido en su vida. Parecen padre e hijo.

Regresamos al Médano del Perro. 

Valentín, Salatiel, el primer y segundo día, teme que lo perciban como grosero pues no saluda a nadie.
Valentín y Patricia llegan al Medano, cruzan el baldío y la cancha de basketball.
PATRICIA
Where is mommy?
Are you going on a trip?
VALENTIN
The two of us are going on a trip.
PATRICIA
And mommy?
VALENTIN
She already left.
PATRICIA
Why didn’t she wait for us?
VALENTIN
She need to buy a dress, a pink dress.
PATRICIA
I like to see mommy in pink.
VALENTIN
Me too.
Valentín empieza a trabajar como una forma de forzar a la gente para que lo contrate, ya empezó el trabajo.

Valentín es un trabajador, así se maneja, así espera ser tratado.


Por la tarde vamos a la explanada de entrada a la torre de PEMEX. Fondo de puerto, se ve, se siente cálido, revela actividad.
Mis niños en el medio de tanto desconocido,
necesito sacarlos de aquí.
I AM NOT AN ALIEN.
Continuamos hasta playa Martí. A un costado del asta bandera, Alejandro encuentra un espacio con luz, allí haremos la escena de la playa,
el juego de Renata y los niños, dejo a Alejandro con ellos y me alejo, los observo desde lejos, los cuatro juegan, Alejandro como un padre
sustituto que trata de atrapar a esa familia repentinamente formada que se desvanece, se escurre en la oscuridad, en el juego y en los movi-
mientos de cámara, parece un animal. El padre real está perdido.
está bastante desierto. le da tristeza la inmovilidad y ensaya una danza
Con esa escena, cerramos la historia de Renata.
Eleven o´clock, journey,
before, my dad waiting for me,
say goodbye to my dad.
he soñado , soñado , soñado mucho desde que regresé,
es como si me hubiese escapado algo en mi cerebro,
allá, nada, pero ahora
Día 10.
What’s your name?
go along very quietly
hoy tuve tiempo de entender más cosas de la computadora que me compré y desde la que les escribo.. tiene
una pequeña camarita arriba con la que me pude hacer una foto y quería madarselas para que me vieran,  me
gustaría tanto que ustedes me mandaran también una foto así del día ... les dejo muchos abrazos y besos
grandes , grandes 
los quiero.
Las niñas quieren actuar. Preguntan si ya van a estar en la siguiente escena. 
Cómo trabajé con las niñas: primero les explicaba la escena, la grabábamos una primera vez siguiendo el guión o las marcas establecidas,
entonces, mientras nos tomábamos el tiempo para reflexionar y pensarla nuevamente, las niñas empezaban a jugar a partir de la escena y
entonces empezábamos a grabarlas, y yo les daba indicaciones, dirigiendo su juego. 
También lo hice con Alicia, cuando era ella y no Renata, en realidad creo que la filmamos a Alicia, escasamente a Renata y Natalia, quienes
se le asomaban a ratos. 

Preciosa Aylín en la escena en la que le dice que la niña ha molestado a Patricia.

Karime llama a Salatiel: mi segundo papá. 

Danny me cuenta que Karime hizo un señor berrinche, quería irse, no continuar con la peli, Sofi y Danny obraron de niñeras, inventaron
actividades a las niñas.

Las abuelas y mamás intercambian sus conocimientos de las plantas.


Este es un cine social, comenta María Elena, un cine con la gente, con el cine conocemos gente y hacemos nuevos amigos. Y agrega: te con-
sidera mi amiga aunque tú no lo quieras.
Karime preparó la comida para todos. Mientras hacíamos la toma de las niñas jugando. La grabamos. Preparó una comida completa con so-
pa y guisado. La preparó en las tapitas de agua y refresco. Divino, el cuidado con que lo hizo.

Me doy cuenta que muchos de los personajes aparecen de espaldas. Recuerdo a María Agalsoff protestar porque en La Novia se veía de es-
paldas.
En Toronto conocí a una artista, sus dibujos de desnudos
por qué dibuja las figuras humanas de espalda: la cara contiene mucha infomación y distrae la atención del placer por las líneas, the depic-
tion of the back enables that kind of contemplation.
SITIO ARQUEOLOGICO.
Dia 11.
Buscan empezar una nueva vida y olvidar.
Yo, Valentín Martínez, 38 años, mexicano, casado.
the real problem
you´ll die.

hereafter you´re on your own

All day and night

were new to me

a surveillance post

was too high for me

can´t you reach it?

expelled

So, now?

it can be pretty lonely

Loneliness
Natalia y Valentín hablan en el comedor de la casa de Alicia.

en la casa una escena en la que una mujer y un hombre


hablan como si se conocieran
y también como si no se conocieran
mientras ella cocina
y nos damos cuenta que se conocen y que no se conocen
que podrían estar juntos
y que no podrían

de una manera tranquila


sin que discutan
que todos los aleja y los acerca

juan:  los camera angles should be interesting


 me:  tenés razón
eso es algo importantísimo en esta escena
Touch me.

Call me.

Nada que agregar.

Pienso en pájaros.

Go along very quietly.

You´re the agressive

I´m the king crawling snake

Renata was here for a short time

hate, darkness,

Strenous circumstances
La historia que no se puede contar.
One gets so used to being alone, with the problems, that I didn´t need him to... the truth is that he
wasn´t needed any more.

It was a long time to be without him but when the sadness from his departure receded, I got used
to being alone, with my kids. When he came back, it was no longer the same, I got used to be alo-
ne. I changed and he changed.

I didn´t go out to greet him.

I didn´t feel joyous when I saw him, I didn´t run to him because I was happy for his arrival.

The habit of being together is lost now that he leaves, he returns. One doesn´t get used to the life
as it was in the beginning.

He stepped into the house and said hello. I told him: be welcome, this is your house, come inside.
No encuentra la formulación.
La casa que gime.
Grabación de la escena del encuentro, originalmente a filmar en una placita, la del dif, el área de juegos del Médano del Perro, somos un
blanco, comento casualmente rafael al pasar la noche anterior a la grabación. O durante el día o después que pasamos. Cambiamos la loca-
ción a la esquina de la casa de María Elena.
Un hombre llora y una mujer simula llorar, no puede. Natalia repite la pregunta clave: ¿quién eres? ¿quién soy?
Día 12.
Alicia regresa al Distrito Federal.

Alicia y su iphone, estaba y no estaba, no podía mejor actuación para el personaje de Renata.
Ya como señora de la casa, como Natalia, su apego al iphone cedió.

Grabamos la escena de Mariana busca a Valentín después del castigo a Patricia. Hay escenas y encuadres de HMS: Renata contra la pared y
el repiqueteo del martillo contra la pared, el OS de Mariana y vemos a Valentín a lo lejos.
Las niñas: Aylín: ¿cuándo nos van a llamar? No quiero que termine, quiero filmar con María. Tania: en la siguiente película yo quiero ser la
hermana.

Natalia, Adriana, Gaby, Mariana, Rafa: me encantan los nombres de todos los personajes, desde que lo leí me encantaron, los nombres son
divinos.

Gaby y Patricia se van por el barrio cargando la valija.


La toma que diseñó Rafa.
casa vacía
Un señor llegó, con una niña, se puso a arreglar la casa de Natalia, supongo que quería que lo contratara,
pero si no tiene dinero, las niñas, en especial la chiquita, se llevaba bien con la hijita del hombre, la mayor lo
ayudaba, creo que a Natalia le gustaba, tanto tiempo que se ha pasado sola, dicen que su marido ya tiene mu-
jer allá, una vecina le dijo, su marido también está allá y lo vio, lo dejó entrar a la casa, parecían una familia,
la verdad, pero el hombre quien sabe qué tenía en la cabeza porque comieron todos juntos en el patiecito, una
tarde, se veían contentos, la hijita estaba muy feliz y bailaba y reía, quería jugar y de pronto el hombre se
enojó y golpeó a la niña como si la odiara. Entonces la niña de Natalia y la hijita se fueron. Natalia y el hom-
bre las buscaron por todo el barrio toda la noche y no aparecían.
Todo se desparramó. Aunque dicen que los volvieron a ver a todos entrar a la casa pero ya no salieron.
ella regresó después de estar en los eu, quien sabe si los niños la recordaban, anduvo caminando por el ba-
rrio, era claro que no se hallaba, se había acostumbrado allá, se peleaban, no quería estar, hasta que un día
dicen que se volvió a ir, quizás hasta nunca vino porque yo nunca la vi.
¿Estás perdida? ¿Dónde está tu mamá? No sabes. ¿Cómo te llamas?
A lo mejor no escucha.
Tan linda que se ve, así guerita.
Qué lindo el vestidito, ¿te lo cosió tu mamá?
Día 13.
Quiero decirte a ti que estoy arreglando todo para poder ir a verlos, no se cuanto tiempo me lleve.
Te pido que con el dinero que llegue les compres a los niños lo que me pidieron , bueno los patines
para Miguel que me lo pidió desde hace tiempo y
para Adriana pues lo que ella quiera porque ya ves que no me dice nada...
Quiero hacer las entrevistas o conversaciones. Pienso en la esposa del señor Isidro, el herrero. no contaba que me esperaría el jueves para su
entrevista, le había dicho que regresaría el jueves y ella se había arreglado, me había esperado, ahora estoy de fachas me dice cuando llega-
mos por la mañana. LLeva una blusa parecida a la que usó Alicia para el segundo día de Renata, con un diseño de curvas en blanco, negro y
fucsia. Dice que se va a cambiar, pero su playera simple oscura la apaga y es una mujer muy guapa, le pido que vuelva a ponerse la blusa que
llevaba antes, insiste que está de fachas, y con todo lo que se había arreglado el jueves. 

Antes, iniciamos una caminata por el barrio, para registrar vida cotidiana siguiendo palabras de Rafa o para encontrar tres casas diferentes
y bonitas que nos conduzcan a la casa de Alicia, siguiendo la sugerencia de Alejandro. Yo sigo pensando en conversaciones, dejamos a Rafa
en la camioneta y caminamos hacia Beethoven , minutos antes una señora lavaba el patio con la manguera, al llegar ya había terminado. Ale-
jandro toma a una señora que merodeo detrás de un cerco de barrotes gruesos y blancos. Menciona a una señora en la parte de arriba de la
calle, ya la había notado, estás preparando su puesto de picadas. Subimos, la señora nos cuenta su historia de migración. 
Bajamos, Rafa nos conduce con doña Concha, Ermeleinda la había mencionado antes. 
Soy como las plantitas, me gusta la vida, tengo 82 años. Doña Conchita.

Con cigarrillo en mano izquierda sostenido por índice y mayor y manguera en la derecha, doña Concha nos recibe con su ceño fruncido, la
señora parece sacada de una calle parisina, de 82 años, se encarga esta mañana de las plantas, rosales, aprovechando que aun el calor no se
ha hecho insoportable, soy como las plantistas, me gusta la vida. 

Regresamos a la casa de don Isidro y encontramos a Ermelinda, nos cuenta su historia de migración, el viaje tardío de don Isidro. Se ve se-
gura y hermosa.  

Rafa y Alejandro insisten en las tomas de los rincones de oscuridad de la casa de Barragán. 
Me dejan en el centro y ellos se encargarán de empezar. Ya no los dejan entrar. 
Epílogo.
La película fue encontrando su forma durante el rodaje. Alicia bromeaba acerca de los estilos que se sucedían, como si se tratara de diferen-
tes films: empezamos con no David Lynch y terminamos con Harnecke, pasando por Wim Wenders y un Tarkovsky tropical.

La película sigue, Alicia me escribió, tiene sueños, vive so long, en so long.


Sigo soñando la película. Habito el set de So Long, no puedo despegarme de la película. La idea que después que termina la película, queda
el set y la gente que vive allí continúa la película, espera a los personajes. 
Convertí la ciudad en un set, vivir en el set, sigo viviendo en el set.

Pero el lunes recorrí el centro, perdida, como si la ciudad hubiera perdido sentido, le hubieran arrebatado sus personajes, los que me permi-
tieron acceder a ella en los dos últimos años.

Sofi habla de la peli como un monstruo que tiene vida propia.

El consejo de Víctor: piensa en los cortes y no transformes el set y la grabación en algo personal. Sé de qué habla, la película es personal,
más no el set ni la grabación, es casi un proceso de laboratorio. 

Al iniciar la edición en Canadá, JA me ha comentado: el sentimiento de otoño con sus hojas puede darte percepciones de proyecto y peli que
en lo tropical no ves.

Encuentro nuevas películas. Los stills cuentan otra historia: de violencia, por ejemplo, en el supermercado, os de renata s ve mano de hom-
bre con garrafón y la cara de desesperación de renata, hay varios stills así, la violencia oculta. Si se pausa la vida cotidiana, se revelan otras
cosas, quizás las verdaderas razones.
clean slate
tratando de entender esas todas las mujeres que podemos ser y que sería bueno reconocer, perdonar,
y querer, ese es mi proceso.
WHERE DOES THE MAP THE WOMEN DRAW LEAD?
WHERE DO THEY ARRIVE?
¿A DÓNDE SE LLEGA DESPUÉS DE TANTO VIAJE?
Edición:

La historia se transforma en la edición. Escenas que tenían sentido en el momento del rodaje, ciertos emplazamientos, pierden fuerza, signi-
ficado, cuando los incluyo en la línea de tiempo de la edición. Un ejemplo es la escena de mariana ayuda a Valentín a limpiar el patio y Rena-
ta se entromete para detenerlo. La toma abierta, el emplzamiento detrás de las sabanas que cuelgan de la linea parecía contar la complejidad
de una relación que no se desea ver, aceptar, que es fragmentada. Al incluirla en la edición, se pierde la parte emotiva, es decir, no está pre-
sente el momento central de esa secuencia que es el acercamiento entre Mariana y Valentín.
Their home no longer exists. The characters only exist in their own narration.
Accordingly, the flm starts with an abstract voice over describing an estranged foreign territory absent in the maps and travel guides. The
camera takes a participative role in the narrative as the characters´accomplice, it stands by her, doesn´t stop recording in wait for new ac-
tion (mirroring the characters who wait for a new answer).
I worked with no actors, neighbors from the community who also had their input in the scriptwriting and in the production itself. Against
traditional film storytelling, I don´t force the creation of the drama, it reveals as I follow the rhytm of everyday life.

Este mapa del espacio intermedio fragmenta el cuerpo y la casa o los muestra fragmentados.
Al regresar, Renata erige al interior de la frontera de la casa la alteridad que conoció en el extranjero, en el interior se encuentra el territo-
rio que el viajero buscó al partir y encontró afuera. La extrañeza está adentro. ºEn el interior de las fronteras, el extranjero estaría ya del
otro lado.º
cada personaje completa lo que siente el otros, es un coro de una misma voz: misma actriz. ¿Cómo se da esa composición? ¿Qué encarna
ella? Ella está en un proceso de separación, de pareja y proyecto.
Sobre la integración del rodaje a a narración de la película: usar la disrupción del rodaje como la que provoca el regreso, miradas, gestos,
movimientos extraños.
El ambiente crea a personaje: La destrucción del barrio es la destrucción de Renata. crear un personaje-ambiente (cómo percibe el ambien-
te). ciudad en destrucción y en renovación. en ausencia y presencia como ella, está y no está. el conflicto interno de renata entre el allá y el
acá.
La destrucción del barrio es la destrucción de Renata. crear un personaje-ambiente (cómo percibe el ambiente). ciudad en destrucción y en
renovación. en ausencia y presencia como ella, está y no está. el conflicto interno de renata entre el allá y el acá.

Renata observa la realidad que se revela descuadrada, mal encuadrado, observa los intersticios, lo que no se ve cotidianamente, huecos, esos
lugares donde quedan perdidas las cosas.

Grabar no lo que ocurre sino lo que no ocurre. Lo estático, lo en el medio, lo suspendido, lo cancelado.
La película es un registro y una creación de su territorio, el viaje es el territorio y la película es el territorio. (película=viaje) la película es el
territorio donde no quiere estar, quiere estar en la vida, por eso Alicia se incomoda con la camara, no quiere estar en la película. Y ella se
molesta. Pero la cámara es su aliada.
Una cámara curiosa, ávida de encontrar mensajes, regalos, vida, hacen hermosas analogías con el paisaje QUE SE METE EN LOS HUE-
COS, QUE ESPERA, QUE NO QUIERE CORTAR ESPERANDO QUE PASE ALGO, O NO. QUE LOS PERSONAJES HAGAN ALGO.
(como si fuera el personaje o su aliado, hace lo que hace el personaje).
LA CAMARA ES LA ALIADA DE RENATA PARA REGISTRAR EL LUGAR, PARA EXPLORARLO, PARA TENER UNA CONE-
XION CON EL LUGAR.
The film is transformed into their country because their home no longer exists. The characters only exist in their own narration.
Accordingly, the flm starts with an abstract voice over describing an estranged foreign territory absent in the traditional maps and travel
guides. The camera takes a participative role in the narrative as the characters´accomplice, it stands by her, doesn´t stop recording in wait
for new action (mirroring the characters who wait for a new answer).
Ningún mapa sigue mi itinerario o no puede encontrar mi itinerario en ningún mapa. Personal maps and public maps.
En el mapa de Renata hay manifestaciones desiderativas, demandas, sueños. Se va armando el tercer país, el paisito, con sus itinerarios.
Renata no quiere regresar. Pero, ha regresado y da vueltas por la ciudad.

- I can´t home again

- British therapist: they don´t know how it´s life, to live far away, in another country no matter how much I tell them about it).

El diario de viaje funciona como guía de viaje (como las cartas en las que se cuentan recorridos, visitas, lugares que se necesitan visitar y
otros evitar, hay sorpresa, desinterés, etc. )

El exilio, el movimiento como estructura cognitiva. (María Zambrano).


El guión resulta la primera interpretación de la historia, durante el rodaje se escribe o escriben varios guio-
nes. EL GUION SE ARMA EN LA PRODUCCION. El qué hacer en ese momento más del documntal, lo
aplico a la ficción. El GUION ES COMO LA INVESTIGACION, necesaria pero no es la película.
El cine como sociología.
El cine y la construcción de la identidad del migrante
TODOS SON REFUGIADOS.
La propuesta es repensar la práctica sociológica desde la práctica cinematográfica. La cuestión no es realizar una análisis sociológico del ci-
ne sino un análisis cinematográfico de la sociedad y de uno de sus expresiones: la migración. Al percibir al migrante como un tipo de viaje-
ro, consideramos que el cine, su teoría y su práctica nos brindan las herramientas para entender su construcción identataria a partir de su
movimento en el espacio, el diseño de sus estrategias de supervivencia y su interpretación emotiva e intelectual de su experiencia de tránsi-
to.

Siempre hemos sabido que hay datos, como aquellos relacionados con las emociones y las percepciones, que escapan a las metodologías tra-
dicionales de investigación social, en especial cuando esas emociones y percepciones cambian muy rápidamente como consecuencia de mo-
vimientos sociales vertiginosos y radicales como es el caso de la migración.

Ejemplo: Conocí a Julia el 10 de mayo del 2009 en una camioneta acondicionada para transportar pasajeros de Boca del Monte a Soledad de
Doblado en el Estado de Veracruz. Después de vivir y trabajar como indocumentada por dos años en Los Ángeles, Julia regresó con su ma-
rido y su bebé a Veracruz pues había dejado a su hijo mayor con su abuela. A la pregunta de cómo describiría Los Angeles, ella buscaba las
palabras adecuadas, pero su gestualidad entre la sonrisa abierta, sus ojos que deambulaban por la sala vacía de su casa comprada con dinero
ganado en los Estados Unidos, sus manos ondeando en el aire eran más elocuentes, hasta que encontró una palabra: grande. ¿Qué más ex-
presó Julia que la verbalidad no registró?

Siguiendo la lógica del viaje, el migrante necesita multiplicar la colocación de su mirada en espacios discontinuos, la mayoría inéditos, pro-
duciendo con ese movimiento narraciones dispares que edita naturalmente creando así el artificio de que se trata de una misma película con
cortes de una a otra escena o de una secuencia que es presentada desde varios puntos de vista o narrada con diferentes tamaños de cuadro o
desde diferentes posiciones, angulaciones y movimientos de cámara.

En su percepción y acción cotidiana, el migrante fragmenta paisajes, objetos, eventos, caracteres, momentos de su viaje para reeditarlos al
intentar una reflexión o diseñar una nueva estrategia. Crea películas en las que se inscribe incorporando elementos del mundo real, del pre-
sente y del pasado, imágenes producidas por él, por otros, estereotipos, noticias, fragmentos de conversaciones, ejecuta ediciones móviles
siguiendo una lógica pragmática, instintiva e intuitiva. Sus relatos también incluyen elipsis y agujeros; hay muchos vacíos y ausencias, em-
pezando por la propia.
¿Cómo investigar este viajero, cuyos referentes cambian velozmente para adquirir, por momentos, una estabilidad cercana a la del hogar,
que se ve obligado a transitar por comunidades efímeras ubicadas en espacios públicos, las cuales le confirman sus propósitos y sus motivos,
y a las que abandona para entrar a una nueva igualmente efímera y transitoria. Este viajero desarrolla un sistema de significados que le
permitan entender su circunstancia, la linea de su biografía, los paisajes sociales que transita, desarrolla esrategias segun la geografia y las
oportunidades laborales. Es una máquina de respuestas inéditas a su propia biografía.
¿Cómo acercarnos a esta identidad múltiple en escenarios efímeros? ¿Cómo investigamos esa subjetividad diversa y cambiante? Aun más,
¿qué sistema mediátco ofrece un espacio que permita al migrante articular sus experiencias diversas en una identidad, cambiante, efímera y
múltiple y crear significados igualmente móbiles? ¿Puede el cine crear una comunidad cuando la experiencia de mobilidad le niega un terri-
torio de referencia cotidiana al migrante?

Los cuatro momentos de vinculación


1- El cine como generador de la pregunta de investigación.
2- El Cine como método para la posible resolución del problema de investigación.
3- La edición cinematográfica como posible análisis sociológico.
4- El cine para la comunicación de los avances y los resultados de la investigación.

1- El cine genera la pregunta de investigación


El mundo de la migración no es algo ajeno para mí. En primer lugar, soy una argenmex, luego me convertí en migrante mexicana a la fron-
tera norte. En Tijuana conocí y viví de cerca la experiencia de los mexicanos y ciudadanos de otros países en su paso a los Estados Unidos.
También viví en el lado americano, tanto el californiano como el texano, en los vecindarios donde los migrantes trabajan y transitan.
De regreso a Veracruz, he recorrido las calles vacías de hombres que hoy ocupan las mujeres quienes acomodan las sillas en las banquetas
para platicar mientras esperan que el calor al interior de sus casas ceda e hilvanan historias a partir de rumores, de lo que ven en la televi-
sión, de los chismes que traen otro que han regresado. Imaginan su vida migrando. Imaginan el regreso del hombre, lo anticipan.
Cuando los migrantes regresan de los Estados Unidos, sus vidas se dividen entre el mundo que se dejó del otro lado y el mundo que en-
cuentran en el lugar del que originalmente partieron. Por años, quienes partieron y quienes se quedaron viven en mundos separados que
parecen comunicarse a través de llamadas telefónicas, chateo, las noticias, las películas.
Unos y otros transforman en ficción sus vidas personales y la de quien partió o de quien se quedó. El hogar se transforma en un concepto
ubicuo que carga más preguntas que respuestas. Y el regreso no resuelve el dilema: el migrante permanece como ausencia, como si no hu-
biera llegado, continúa viajando mientras se negocian los nuevos espacios de convivencia y la nueva identidad de mujeres y hombres. El de-
seado reencuentro familiar requerirá de inesperados ajustes.

Hace dos años en un periódico regional del Estado de Veracruz, se publicó la noticia sobre 300 migrantes que habían regresado desde los
Estados Unidos para reintegrarse con felicidad a su comunidad de Comapa. Al acercarme al pueblo, me fui adentrando en la experiencia
femenina de la la migración; en este contexto inédito, el del regreso del migrante, la mujer, quien había sido relegada a una situación de es-
pera, lograba un protagonismo para redefinir el espacio del encuentro y los nuevos roles. Su vida de ficción cruzaba la frontera a la realidad.

Jesús partió al norte, seguró que era por un año. Teresa se quedó, Jesús no regresó al año, sus deudas no se lo permitían ni tampoco la dis-
continuidad de sus varios trabajos, sino cinco años más tarde. Teresa ya no lo esperaba aun cuando él construyó la casa y regresó con ca-
mioneta y un proyecto empresarial a pequeña escala.

Jesús: Yo no quiero mirar hacia atrás, lo que hice, sea bueno o malo, está en el pasado, ésa es mi mentalidad. Necesitamos seguir moviéndo-
nos, no hay de otra.
Teresa: La confianzá se perdió, es la verdad, ya no confío en él, no estoy mintiendo.
Jesus: Yo sé que no mientes.
Teresa: Se perdió.
Jesus: Algunas veces creemos que no podemos cambiar. Esa es la cosa de estar lejos que no se puede entender.
Teresa: El estar lejos te hace valorar lo que tienes. Por eso yo no puedo confiar en él. La verdad se perdió. Yo confiaba en mi marido pero ya
no. (Jesús y Teresa Flores, 2010)

A partir de esas conversaciones, que fueron muchas, grabé un documental. En esta película mientras Teresa cuestiona el propósito y los lo-
gros de su marido, Julia reflexiona sobre su estrategia para evitar que su marido regrese al norte. Ambas se resisten a aceptar los cambios
que la migración ha provocado en sus familias. Este documental ha funcionado como base de datos y como primer análisis para plantear va-
rias preguntas de investigación, por ejemplo:
- Teresa ha perdido no sólo la confianza sino el interés en su marido (ya ni era necesario que volviera, dice) dado que la familia tal como ella
la pensó ya no existe. ¿Cuál es la nueva familia?
- En una secuencia del documental, Jesús muestra la casa que construyó con el dinero que ganó en Estados Unidos (similar al tour que los
americanos onducen en su casa cuando alguien los visita por primera vez), Jesús cuidadosamente describe la casa y el terreno, Teresa lo si-
gue en silencio, en una misma toma, con imagen, accion y diálogo y una cámara en movimiento, tenemos dos visiones de la casa, de quien se
fue y de quien se quedó. Jesús la relata, Teresa la vive. ¿Cómo se reformula el hogar en este contexto transnacional y de tránsito?
A partir de estas y otras preguntas (¿Cuál es el lugar del migrante en la comunidad transnacional creada a partir de sus itinerarios y rela-
ciones familiares a distancia?
¿Cuál es su identidad en las distintas etapas del viaje? ¿Qué le da identidad?), escribí un guión de ficción. El guión se transforma en un mo-
delo, una referencia para realizar la investigación, o lo que es lo mismo, para grabar o filmar la peli.
El documental no sólo planteó preguntas sino también procedimientos de investigación. Así, como los migrantes arman sus propia histo-
rias, que cambien y editan en nuevas versiones, yo también construyo una historia, es decir, reflexiono, vuelvo a pensar. Las películas graba-
das o filmadas se transfoman en objeto de estudio, en parte del proceso de migración y de sus dimensions: el viaje es también su relato (la
segunda historia presente en cada relato al decir de Jorge Luis Borges).

Así, la identidad del migrante es la narración de su viaje. La narración no sólo lo construye sino también le permite compartir su experien-
cia: no podemos seguir al viajero, escuchamos sus historias, sus dificultades, descubrimientos, planes, desviaciones. Y dado que a través de
las narrativas el viajero construye su identidad, la cuenta y la cuenta. El viaje no es una metáfora de la vida, es la vida. Y también es su re-
gistro.

Este espacio de creación de narraciones transnacionales incluye memorias personales, referencias políticas, reflexiones sobre el mundo y la
vida. Se crea un paisito intermedio cada día de su vida en los Estados Unidos. Cada día es el primer día. Las referencias son las historias que
se cuenta en la intimidad, las que escucha de los demás y las que le cuentan de casa, de México. Porque el migrante se deshace de todo lo
que carga salvo su vida que transforma en narración. En el viaje, el migrante genera formas de percepción, itinerarios, prácticas, hábitos,
reflexiones, relaciones sociales, formas identatarias, rituales hasta el momento ignoradas por él o ella.
2- El Cine como método para resolver el problema de investigación
So Long es un proyecto de largometraje que aborda el tema del regreso del exilio mexicano. Es una película sobre el desarraigo individual
y el deseo del reencuentro familiar de tres migrantes que regresan a su pueblo después de trabajar por muchos años en los Estados Unidos.
Me interesa explorar cómo la migración afecta la intimidad de las familias en México y cuáles son las nuevas relaciones familiares que se
establecen a partir la experiencia de la migración.
En este proyecto, me concentro en el regreso del exilio, de nuevo a partir de mi experiencia personal de regreso no a mi segundo país y a
una ciudad de la cual no tengo referencias biográficas personales pero lejanamente familiares. Como los migrantes que regresan, yo tam-
bién necesito redefinir el significado del hogar.
En la película, las mujeres, las que se quedaron y la que migró, expresan sus
emociones contradictorias, sus expectativas basadas en promesas realizadas cuando el hombre partió, sus deseos muchas veces contradicto-
rios, sus arrepentimientos que saben inútiles, sus enfados interminables porque los esposos les reclaman que la casa que construyeron no
era la que él tenía en mente al mandarle el dinero, la conflictiva reinserción del hombre, o de la mujer, las negociaciones de los espacios de
convivencia.
Me interesa explorar el desencuentro en el encuentro, explorar cómo el espacio que los separó por años, la distancia al norte, y los sigue se-
parando; esa distancia física permanece como una distancia emocional la cual se muestra grabando los espacios entre, los vacios en la casa y
en el barrio, lo que los separa. La cámara registrará esa interacción llena de lejanías, los emplazamientos buscarán encuadrar los vacíos.
En la primera historia, Natalia ha reconstruido la casa siguiendo las indicaciones que su marido le comunicaba por teléfono desde los Esta-
dos Unidos, donde ha trabajado ilegalmente por los últimos ocho años. Pero, las inundaciones destruyeron la casa. Cuando Valentín quien
ha llegado del norte acompañado de su hija americana, se presenta en la casa donde Natalia temporalmente se aloja, ella no lo reconoce co-
mo su esposo aun cuando él insista que sí lo es. A regañadientes, Natalia recibe la ayuda de Valentín para reparar la casa porque ella segura
que su marido trabaja en los Estados Unidos. La hija menor de Natalia toma a Patricia como su muñeca mientras que Mariana, su hermana,
busca relacionarse con Valentín.
Aun cuando mantiene una nueva relación con Germán, Violeta guarda la esperanza del regreso de Camilo quien partió al Norte 6 años
atrás. Su hija Gloria espera al padre ahora que va a cumplir 15 años. Un día, Emily, una americana embarazada, llega al hotel de Violeta. Re-
sulta difícil imaginar para qué ha llegado al barrio. Cuando Emily revela a Violeta que su esposo ha muerto y ella carga su bebé, Violeta
continua con los preparativos de la fiesta como si esperara el regreso. Mientras tanto, ante la falta de noticias del padre, Gloria se prepara
para partir al Norte para buscarlo. Los preparativos crearán la oportunidad para que las dos mujeres negocien una nueva familia.
Renata ha regresado a Veracruz después de trabajar durante cinco años en losEstados Unidos. Allí la esperan Uscanga, su marido, y sus dos
hijos. Renata se ve cercada por un ambiente hostil: su suegra la margina en su propia casa y su familia la acusa de haber abandonado a su
madre. Cuando Renata le propone a Uscanga la separación, él buscará convencerla de lo contrario y evitar que se lleve de regreso a los ni-
ños quienes van aceptando la idea de irse con su madre. De una manera inesperada, Renata y a su familia tendrán la oportunidad de estar
juntos.
La película se encuentra en etapa de preproducción la cual , desde su desarrollo, incluye procedimientos que tomo de las ciencias sociales:
a- El lugar genera la historia, parto del lugar y de su observación, de la investigación del espacio emerge la historia.
b- Habito el espacio de la película en construcción como un miembro provisional de la comunidad.
c- Involucro a la comunidad en la grabación.
Hay conversaciones a partir del guión. y a partir de ese intercambio con actores profesionales y actores naturales, es decir gente de la co-
munidad, los observo.
La gente habla y, al hablar, ficionaliza sus experiencias que eventualmente actuarán. La gente se transforma en escritores y actores de su
propia vida y entran a una nueva comunidad efímera: el set de grabación o filmación. Así, los actores se transforman en observadores de su
propia experiencia y reflexionan. Crean.
Es un poco preguntarse, ¿cuántas peliculas hay en una pelicula? ¿cuántas historias en una historia? Siempre me pregunté que me habia lle-
vado a filmar a Agafia Rogoff en Valle de Guadalupe, Baja California, dos horas al sur de Tijuana, sentada junto a una mesa con un mantel
blanco en el medio del desierto a un lado de la casa que construyeron sus padres, donde vivió Dunia, la última rusa inmigrada del Kars, ro-
deada de moscas. Una mujer vieja, esperando, ¿esperando qué, a quién? Esperando el grito de accion para iniciar su propia historia, una que
no estaba en mi guion, pero sí en el suyo. Cuando se filma, se sueltan otras peliculas que el director no controla.
El cine crea una comunidad de observación, acción y reflexión, un laboratorio efímero en el que el director, que obra de sociólogo y vice-
veersa, y los actores se reúnen para intercambiar percepciones y reflexiones. La comunidad participa en la creación de la obra conformando
un nuevo objeto de investigación.
Asimismo, el cine provoca el encuentro de quienes se fueron y quienes se quedaron, un ámbito de diálogo y posible entendimiento. Metodo-
lógicamente, se trata de un estudio circunstancial, las circunstancias concretas de la experiencia, en este caso del regreso de los migrantes,
crean el estudio (nuevamente el espacio). No se trata de grabar la migración, sino grabar o filmar películas que migran. Así, al filmar al mi-
grante, se cruzarán los espacios, editando, pasaremos de la hora pico en el df en la estación Indios Verdes del metro a la misma hora en
Playas de Tijuana, solitario, solo, clausurado, esperado, hasta la cocina de un restaurante en el centro de Los Ángeles.
3- La edición como análisis

La edición es el momento de generar análisis y síntesis, reflexiones que podrán crear teoría, es decir, lenguaje. Así como hay varias formas
de filmar el guión, hay varias ediciones, es decir interpretaciones posibles de la información indexada en los rushes o material gradabo o
filmado.
Durante la edición, la película se desdobla y se recompone incluyendo los puntos de vista que se expresan en los diferentes encuadres, angu-
laciones y posiciones de cámara. Se profundiza la puesta en relación de las diferencias iniciada en el momento de generación de la pregunta
de investigación. Se entremezcla el discurso de la imagen, con el sonido incluyendo el relato del narrador en off, los diálogos, los sonidos
ambientales, la música, y el texto como intertítulos y créditos, todos implicando voces distintas de una misma y multiplicada narración.

La edición misma homologa nuevamente el lenguaje del viaje, y en particular de la acción del migrante y aun más en la región de Veracruz,
en el municipio de Comapa, en la que inicié esta investigación al consistir en un movimiento que va y viene entre los rushes y sucesivas ver-
siones de la edición

En este proceso se renueva la identificación de las áreas de interés sociológico en el caso de la migración:
- la construcción del tiempo y del espacio transnacional.
- Identidad transnacional y multitemporal
- Nuevas familias.
- Migración y espacios públicos.
- El viaje como base de construcción identataria. Identidad que se construye en los itinerarios. (ejemplo, Julia, abrió un acuario lo llamó Los
Angeles).
- Formación de nuevos territorios.
- Comunidades efímeras.
- La frontera.

La película se encuentra en proceso de rodaje por lo que no puedo hablar de conclusiones.


4- El cine como comunicación de los resultados de la investigación
El cine nos da otra forma de aproximarnos a la observación y al análisis sociológico. En lugar de escribir sobre la sociedad, con el cine ve-
mos, sentimos, escuchamos la sociedad.
En este sentido, Lucien Castaing-Taylor afirma que el cine, en su caso se trata del específico etnografico, indexa la información de una for-
ma abierta, no concluyente, y ello facilita la producción de mútiples interpretaciones, lo cual la escritura limita y hasta anula al presentar
sólo una.
Es decir, el cine abre la oportunidad de registrar, y al mismo tiempo y con el mismo gesto, interpretar un evento, espacio, actor social con la
complejidad que la diversidad de percepciones, emociones, reflexiones que la representación exige, impone y abre a un público no exclusi-
vamente académico.
Por otro lado, las nuevas tecnologías nos dan herramientas para mostrar y compartir la investigación sociológica con audiencias múltiples.
Youtube y facebook, blogs y las aplicaciones para subir sonidos y fotografías a la red propician ámbitos de encuentro con una capacidad per-
sonalizada de impacto mayor que las tradicionales exhibiciones en cines y espacios públicos.
Al crear un espacio transdiciplinario desde el que generamos, desarrollamos y diseminamos la investigación sociológica no restringiéndola
a la publicación académica, básicamente estamos regresando la investigación a la comunidad, colocando la actividad académica en la vida de
nuestras comunidades y barrios.
Conclusiones
- Podemos concebir la investigación sociológica como un quehacer cinematográfico.
- El lenguaje y el quehacer cinematográfico pueden realizar una interesante mancuerna con el lenguaje y la práctica academicos no sólo pa-
ra la comunicación de los resultados y avances de la investigación si no también para el desarrollo de la misma investigación.
Al establecer una identidad mobil, trans y multinacional tal como la que se desarrolla en el viaje enfatizando no los puntos de arribo sino
los itinerarios, el cine permite explorar identidades, en especial, la identidad del migrante.
- Al constituirse como viaje, la experiencia del migrante se homologa con la experiencia cinematográfica la cual incluye múltiples puntos de
vista, inicios alternativos, ediciones sucesivas e incluyentes, versiones contradictorias. La identidad se narra de la misma manera que se na-
rra el viaje. El migrante es su viaje.
- El migrante se mueve en una lógica cinematográfica para crear e interperar su identidad, crea mundos intermedios.
- El cine permite incorporar diferentes puntos de vista (del que migra y de quien se queda y de quien los recibe y de quien les da trabajo),
los cuales se homologan con la diversidad de encuadres, tamaños de cuadro, angulaciones, movimientos de cámara propios de la lógica de la
realización cinematográfica.
- La película revelará los cambios en la percepción de ese viaje.
- El cine permite representar la emotividad, eso intangible que son las percepciones, emociones, afectos, de lo que menos se habla, si no es
usando términos altisonantes tomados de las telenovelas: extraño, recuerdo, allá es muy duro; nos permite conocer el detalle del mundo in-
terior del otro.
- El cine crea una sintesis, una interpretación posible.
- El cine crea un ambiente total, un laboratorio en el que el sociologo pude intervenir y también tomar distancia. La propuesta es realizar
un análisis cinematográfico de la sociedad y no analizar el cine para entender la sociedad.
- El cine no sólo registra la investigación, sino también realiza, es la investigación.
El pensamiento sociologico no se limita sólo a palabras sino también incluye imágenes, al provocar la migración del lenguaje y la práctica
cinematográfica a las ciencias sociales se busca explicar con imágenes.
- En lo particular, la migración es una maquinaria narrativa y el migrante es su viaje y la narrativa que cuenta de él, es una película que se
realiza como un rodaje. Y mientras la percepción se resuelve diversa y simultánea, la experiencia del migrante se desarrolla en los intersti-
cios del tejido social transnacional, en el viaje. Si bien la migración es consecuencia de situaciones de descomposición social y económica
también genera procesos de recomposición social, cultural y económico creando nuevas comunidades, cercanas y a la distancia, nuevos pa-
trones de relación social, nuevas aculturaciones, nuevas formas de familia, nuevas identidades, nuevas percepciones, escribe un nuevo guión.
Inglewood (2010)
Overimpressed text: 300 Mexican migrants have returned from United States to Comapa.
Overimpressed text: They are happy, the Major assures.
Mrs. Felicia: When she left I wondered about her, thought about her a lot, the kid was crying, her son, when she left. We accompany her to
the place where she boarded the bus to leave from Huatusco North.
Julia: I´d leave.
Rogelio Reyes: In the Municipality of Comapa there are many migrants buy they go and come back, go and come back, go and come back.
Lo que es Municipio de Comapa sí tiene muchos, muchos migrantes pero van y vienen, van y vienen, van y vienen.
Some people talk about 25,000 to 30,000 pesos. Where can you earn that kind of money?
Por ahí hablan de 25,000 a 30,000 pesos y ¿a dónde los agarra uno?
He is considering leaving again and sometimes I tell him I´ll follow him. It´s tempting.
Y él también está ahorita con ese afán que a lo mejor otra vez se lanza. Y a veces yo también le digo: si tú te vas compadre yo me voy de-
trás de ti
Ahora sí, da la tentación.
You won´t find him at home now, he´s at the religious celebration.
Ahora sí no los va a encontrar, nos encontramos en fiesta patronal todo el mundo está allá.
Jesús: I don´t say that I´m good or bad.
Jesús: The most difficcult thing here is to leave, it´s the major problem, leaving the family, it feels bad, but as one owns nothing, what´s the
point in staying?
Jesús: Those who ignore how it is think that leaving is easy but there is always the risk, of not coming back.
Señora Felicia: Julia doesn´t live here anymore. It has been two months since she left, two months and 15 days, she came back but she left
again.
Overimpressed text: I harbour no thoughs.
I don´t know what to feel.
Julia: No kid, don´t walk away. I hate the ants, aren´t there ants at your house?
Here, everything is too expensive, prices have soared.
The truck is under my name because if he leaves he doesn´t want to come back. Come back!
Overimpressed text: The aquarium she opened in Mexico is called Los Angeles.
We even brought the name of the city.
Julia: I can´t tell that biz is good, it doesn´t fly. Sometimes it plummets to 300, 200, 150 pesos the day.
He wants to leave, another year or two. But I tell him not to, we´ll manage here, step by step.
Señora Romero: Many people is up there, the majority, now those who return cannot cross back. Recently, a friend of us passed away and
her sons, who are indocumented migrants even though they have been up there for years, couldn´t come because if they did, they wouldn´t
be able to go back.
The situation is very difficult for Mexico, very difficult.
Jesús: I brought many things. That is a brush, that is a press which I bought at a flea market.
(To Teresa) Can you? And here is another tool and this is the tool box and all these machines.
I guess I brought worth 30,000 pesos in tools and the truck, that is what I saved in 4 years and for her, her house and her land, it is not
much but it is something.
Would you like to see more?
There is the fence, our land extends from this to that pole. The neighbors don´t trespass the fence nor we do.
We also own a parrot, it talked to me when I was North.
When it is hungry, it talks to them and to Teresa.
Yes, we have telephone, it was useful when I was faraway, it worked.
Teresa: This way. It is muddy, there is no light bulb here.
Julia: We came back on May 3rd. Here? No, on March 3rd. We left the last day at night... no, on the first day of March and we arrived on
the 4th at dawn. We travelled three days. That was four months ago. But he wants to leave again.
Overimpressed text: I crossed the desert three times.
Pirata truck driver: We´re only coping, managing not too well.
Two brothers of mine are up there. I hardly speak with them, they were with my uncle, he came back and they stayed.
Jesús: It might look easy to be apart for four years but it´s something.
Teresa: Yes, one gets so used to be alone, with the problems, that I didn´t need him to... the truth is that he wasn´t needed any more. He
told me: I want to leave as I am not feeling well up there. But the house wasn´t completed, it lacked protectors, the windows were covered
with plastic, no light.
Overimpressed text: To move is to be alive, is to forge a future.
We need to roll.
Julia: Three months later he brought me to the US, it was really hard hor him to save the money because he was jobless, he worked one day
and not the next one, three days, he just earned for the food, and up there as you earn you spend the money. Finally, he collected 2,000 do-
llars.
Jesús: When we crossed, we left on May 20th, we boarded a car in Cordoba and made 30 hours to Altar, Sonora.
Julia: When we left, we made three days by car, left Friday and arrived Sunday at 5 pm at Altar Sonora.
Jesús: We were taken to a hotel so we could get ready.
I bought a white Bimbo, apples, mayonnaise, and other things I kept in my backpack. And one gallon of water.
Overimpressed text: They did a picnic on the desert.
Jesús: When we arrived, the guide told us: hereafter you´re on your own, there is US ad here is Mexico, that´s the line. It was a wire fence,
some passed under and others over it. We were 51. Oh, my God! The real problem starts as you trek the desert.
Overimpressed text: They played hide and seek.
Julia: To the left was the wrong direction.
We walked 3, no, 4 days.
Jesus: From 5 pm until 7 am, all night, not resting at all.
Julia: Sand everywhere.
Jesus: We needed to cross a road, the men running was heard.
We arrived where we rested.
At 5 pm we left again.
Don´t waste the water, if you run out of water, you´ll die.
Julia: Ahead there was a water fountain, but for cows.
Jesus: It was a river of stone.
Julia: It was the only water available.
Jesús: All day and night until 1 am when we arrived at...
Julia: We arrived at Tucson at...
Jesús: We were fed with hamburgers which were new to me.
As we ascended, there was a surveillance post of immigration.
We were dressed in orange, as carrots.
The counter where we signed was too high for me, the policeman joked: can´t you reach it?
They hand us and expelled us.
Julia: To Los Angeles.
Jesus: Tijuana. They sent us to Tijuana.
And everything all over again.
Julia: My hair was dusty, I arrived as a blondy.
He had clean but oversized clothes for me.
Jesus: So, now?
Julia: He went out! The kid! Did he go out? I´ll close the door.
Julia: He wants to leave on January 1st. I hope he doesn´t insist on leaving. I have tried to explain that we are doing fine, to convince him
I...I...
Me: What do you like from the road?
Driver: The job, we need to work here.
Julia: He won´t leave.
Julia´s mother: Don´t cry, she´ll come back , not right now because she just left. But the boy insisted that she wasn´t coming back, she left
me, I won´t love her when she comes. You say that now but when she arrives and gives you money, you´ll love her.
Jesus: Well, once you´re there, you can only work.
Julia: I cleaned houses, worked at a hotel from 8 am to 12 pm, and at a kitchen from 2 pm to 12 am. I started earning 120-130 dollars. Later,
I earned 600-700 dollars per week.
I saved to come back as soon as possible because my other son was waiting for me.
But he didn´t want to come back.
Bartola: When I was little, didn´t feel anything , when I grew up I asked about my dad.
We asked him when he was coming back, he said tomorrow, but he was lying.
I missed when I played with him. I hid and he tried to find me.
He says that he won´t leave again.
Jesus: The houses up there are not adequately grounded, they are in the air.
They don´t use bricks because it is very cold and the walls freeze. Wood is better as walls are insulated. Otherwise one wouldn´t tolerate
the cold.
María Cristina: Before we played with them.
Me: How do you like that house, Bartola?
Bartola: It´s nice. It looks like wood but it´s made of stone.
María Cristina: The chimney is broken.
Bartola: This kind of houses are not built around here.
Teresa: Food is easier to make in this stove, but the fireholders are broken.
Overimpressed text: In the US, Julia lived in Inglewood.
Teresa: When he left, it was difficult because of my six kids who were at school, I was the one in charge. I believed he was coming back in
2 years but he delayed his return. It was a long time to be without him but when the sadness from his departure receded, I got used to be-
ing alone, with my kids. When he came back, it was no longer the same, I got used to be alone. I changed and he changed.
Julia´s mother: I hardly go out, only from Boca del Monte to my home, I don´t feel like leaving.
Julia: I liked the US, I dont want to go back but perhaps some time I do. Because of my kids.
If somebody takes care of the kids, we leave them, if not we take them with us.
If he decides to stay here, we´ll sell stuff, it is not a job to be ashamed of. And that is no job at all.
That way he won´t leave. I don´t want us to be separated again.
Overimpressed text: Now, Julia lives in the neighborhood Two Roads.
Teresa: You need to ask for permission to your dad, kid, or do you only have a mom?
Julia: I´d like him to stay but also that we leave, the two and so the four of us can be there. Because there the four can eat with 50 dollars
which it´s not much, here 500 pesos is big money.
We are undecsive, to leave or not to leave.
If he leaves, I´ll go with him.
Teresa: I wanted to meet him on the road but he didn´t want me to. I don´t know why. He said he was near and was about to arrive.
Julia: The decision is in us. Basicaly, he is the one to make up his mind because he is a man and he can take his own decisions. If he says I´ll
leave this weekend, I can´t argue.
Teresa: I didn´t go out to greet him. He stepped into the house and said hello. I told him: be welcome, this is your house, come inside.
Jesus: I realized that this was the house. I was very excited because we were at home and I had arrived. The kids were very happy, when I
stepped out to watch them arrive, they were coming and one of the girls exclaimed: there is my dad and they all run to me.
Teresa: The habit of being together is lost now that he leaves, he returns. One doesn´t get used to the life as it was in the beginning.
I didn´t feel joyous when I saw him, I didn´t run to him because I was happy for his arrival. Perhaps because he misbehaved badly as a hus-
band.
My kids were at school. it was November 20th, so I needed and wanted to be with them at the parade, But he asked me to stay because he
was coming back.
I wanted to leave and be with my daughters, but he insisted against it. I couldn´t be with my kids for the sake of him. But I was not excited
at his arrival.
Teresa: Even they told me: my dad is not coming back, as if they didn´t want him to come back.
Overimpressed text: There are no regrets.
Teresa: I know that they will follow me. They won´t let me leave alone. Once, I was about to leave. My oldest son told me we all go with
you, he´ll stay here alone with his house, I work and support you and my siblings. But I told him that it wouldn´t be the same.
Jesus: What´s the point in leaving if I did all this for them? Better I leave and they stay. I go to work somewhere else.
Julia: It´s not possible to make it here with two kids. It´s quite certain we´ll leave.
Jesus: There was a bill of 20,000 pesos from the money I was loaned here, how can I come back? And I owed 10,000 to the guy who
crossed me.
Then I bought the land, if I came back I would be able to do nothing.
Julia: And the same once again, every day is the same thing.
Jesus: You may not believe it, but there were times when I cried up there.
Julia´s mother: Julia is not coming because she stayed at the store. But I thought: how can she if she doesn´t know how to sum? She needs
to read and write, but she doesn´t know how to.
Julia: We were separated four months and he called me once a week or every 15 days or I called him mid week.
I never went out. Every time he called, he warned me not to act naughty, drink, go partying with your friends.
I asked him if he was acting crazy with the gals. Men don´t restrain themselves if they are faraway from their wives. They don´t care.
That was the way until a Sunday when he told that he had sent the money for my trip.
The champaderas ended.
Silent driver: From the 80´s and earlier, all the Datsuns that you see on the road.
Jesús: Once I was invited to study English but it turned out difficult.
My dad take us to work on the fields and I never knew what school was about.
Up there we went to see a lady, a teacher and she taught us a little.
But I didn´t know how to read and my memory failed. She explained that after learning, everthing turns nice.
It is fun to understand at least a little of what other people talk. But when I started to learn a bit, I wanted to go back.
Text on screen: Wednesday 20th, May, got started, mi goal was United States, went to my dad´s house, my wife, my kids, great distress, say
goodbye, inside.
Eleven o´clock, journey, before, my dad waiting for me, my brothers, say goodbye to my dad.
Wednesday 20th, morning, started, my goal, my dad´s house, my wife and kids, great distress, called me inside, the altar, what they taught
me, his blessing, that is the biggest thing, I cried, I didn´t want to leave, but were bigger and crying my dad´s house, the trip moments la-
ter, two people, a car took us to the city, said goodbye to my brother, we were three, a car, Cordoba, the longer trip, didn´t know, boarded to
Elatar, 48 hours later.
Julia: I miss the US a lot, truly I miss the people, the job, the money, I would be hypocrite if I said I don´t miss the US as I was faraway
from my family. I was faraway but I was doing well. I could find a way to have money to live and send to my son and my mom.
Bartola: Hello? Who´s that? Yes, is here.
Jesús: I don´t want to look back, what I did, either it was good or bad, is in the past, that´s my mentality.
We need to keep going, there´s no other way.
Teresa: He´s not accountable, that´s the truth, I don´t trust him no more. I´m not lying.
Jesus: I know you´re not.
Teresa: It´s lost.
Jesus: Sometimes we think that we can´t change. That´s the thing from being faraway which can´t be understood.
Teresa: Being faraway makes you value what you have.
Up there but when you come back, he persists in the same habits.
That´s why I can´t rely on him.
I talked with my family and my mom, the trust is lost. It is not the one I had, I trusted my husband but not any more.
I have suffered a lot but with the help of God and...
Bartola: A Christmas tree. I made two. I´ll decorate it with spheres and I´ll hang ribbons. I´ll put a star on the top and lights around.
Or, I´ll put a star, two stars that dad brought from the US.
Julia: One has to make a serious effort to suceed, otherwise it is impossible to achieve anything. If I leave it is better, if I stay it is the same.
If I stay, I need to work, if I leave I need to work too, it´s the same.
Overimpressed text: It didn´t remove not even a little piece, it left me undivided.
Jesus: He is the one who gets moving, he collects the money, makes the sums, and the other one drives, the two manage the work.
It is important that they learn how to work. If some day they appreciate what I did and do for them, that´s fine if not...
I tell them to polish the wood, to fetch and bring back a client.
Get smart because we won´t be here forever.
I am worried for them thinking about God forbid. That´s what we don´t think about.
Jesus: If I didn´t love her and my kids, what´s the point in coming back, in sending them money? If I didn´t love my family as much as I
do, I, being in the US the way it is, the security...
If you live alone, the money is more than enough. But my goal was to go and return, to die in my homeland.
Julia´s mom: I don´t like the port, my daughter Mari urges me to go and set up the store there. I don´t find myself in Veracruz.
My middle kids live there and they like it even though legitimately they belong here. I don´t know how they stand it.
Julia: It was very nice to be in United States, very dangerous in the desert, but very gratifying off, because I learnt many things. My mom
always insisted: if you don´t leave the house, there is no way to know what is there outside.
Bartola: I already told dad.
Jesús: Are you going to...?
Bartola: Two. Three chairs are missing.
Do I place your chair here, dad?
Jesus: There is a soda in the fridge.
Bartola: A coke?
Jesus: No, the one in the upper compartment.
Glasses?
Bartola: Six glasses.
Jesus: Is there any ice?
Bartola: Lunch is ready!
Teresa: Your dad is leaving too.
María Cristina: The Holy Kings brought us little dishes. Those belong to my sister Bartola. Dad brought Fati a little dog, to me too, Fati´s
is blue, mine is green but my mom made me give it a to a girl who was having her birthday. Dad didn´t realize anything because he was up
there. Only Bartola´s and Fati´s are left.

También podría gustarte