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Para conocer la historia del gas y el petróleo es necesario viajar millones de años atrás, a una
era geológica denominada mesozoico.
A lo largo del tiempo, los lechos de esos ambientes acuáticos recibieron enormes cantidades
de desechos orgánicos, restos orgánicos muertos de origen animal, así como también de algas
y plantas terrestres que se depositaron en el fondo junto con sedimentos minerales de
diferente composición.
Con el paso del tiempo, lo que alguna vez fue el fondo del mar o de un lago, quedó sepultado
por nuevos sedimentos minerales en ocasiones con nueva materia orgánica dependiendo de
los procesos que ocurrieron en la superficie. El peso de los nuevos sedimentos hundieron el
antiguo lecho cada vez más, este proceso produjo el aumento de la presión y la temperatura y
al alcanzar determinados valores de presión y temperatura y en ausencia de oxígeno la
materia orgánica contenida en el antiguo lecho acuático comenzó a transformarse en otras
sustancias en lo que se suele denominar una “cocina geológica”.
Millones de años después la materia orgánica original quedó convertida en gas y petróleo. Lo
que alguna vez fue un lecho marino o lacustre millones de años más tarde se transformó en
una roca generadora de hidrocarburos o roca madre, por tratarse de una roca impermeable
estos hidrocarburos quedaron atrapados en poros microscópicos aislados unos de otros sin
posibilidad de escapar de la formación que los generó.
Sin embargo en algunos casos el aumento de la presión y a veces los movimientos tectónicos
de la corteza terrestre abrieron pequeñas fisura en la roca generadora, aquellas que estaban
en contacto con formaciones permeables sirvieron de vía de escape para una parte del gas y
del petróleo en un proceso llamado migración. En ocasiones durante la migración los
hidrocarburos encontraron a su paso formaciones permeables.es decir cuyos poros estaban
interconectados entre sí. Y en este caso los fluídos pudieron continuar su lento viaje por el
interior de las rocas en general con dirección a la superficie.
A lo largo de millones de años, una pequeña parte del petróleo y gas formados en la roca
madre alcanzo la superficie, pero una parte de ellos se encontró a su paso con otras
formaciones permeables que funcionaron como barreras e impidieron continuar su viaje, en
estos casos los hidrocarburos quedaron atrapados en trampas geológicas, es decir acumulados
en formaciones permeables pero sin la posibilidad de seguir avanzando hacia la superficie
debido al sello impermeable.
Esto es lo que se llama un sistema petrolero y consta de una roca generadora impermeable
que alguna vez fue el lecho de un ambiente acuático y donde se generaron los hidrocarburos,
una roca reservorio permeable que recibió los hidrocarburos que migraron desde la roca
generadora y una roca sello que constituyó la trampa.