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EL LIBRO AZUL
PRÓLOGO DE
NICOLÁS MADURO MOROS
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Directorio
Nicolás Maduro Moros
Presidente de la República Bolivariana de Venezuela
Delcy Rodríguez
Ministra del Poder Popular para la Comunicación y la Información
Felipe Saldivia
Viceministro de Gestión Comunicacional
Mercedes Chacín
Viceministra de Estrategia Comunicacional
Odry Farnetano
Directora General de Prensa y Evaluación de Contenidos
Ramón Medero
Director de Publicaciones
Edición y corrección
Francisco Ávila, Ricardo Romero,
Michel Bonnefoy, Iris Yglesias
Foto portada
Gabriel Farías
el libro azul
p r ól o g o de
n ic ol á s m a du r o m or o s
ÍNDICE
El Libro Azul
Pensamientos 39
Preliminar 41
El Árbol de las Tres Raíces 43
El Sistema EBR 45
El Proyecto Nacional Simón Bolívar 55
El Sistema Ideológico EBR 79
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N ic ol á s M a d u r o m or o s
[11]
n ic ol á s m a du r o m o r o s p ó rt ic o a e l l i b r o a z u l
A propósito, y valga la digresión, creo que llegó la hora siempre que su vida se la dedicaría por entero a la resu-
de estudiar a fondo al MBR-200 y el papel determinan- rrección de la Patria, supo que un nuevo proyecto histó-
te que jugó en la historia contemporánea de Venezuela. rico digno de tal nombre debía partir del sustrato ético
Estimo que es un reto para los jóvenes historiadores e e ideológico de la inconclusa lucha heredada. Sólo res-
historiadoras, para quienes en filas militares se incorpo- catando el carácter afirmativo de la venezolanidad, para
raron a él y para quienes lo acompañaron desde el mundo decirlo con Augusto Mijares, y luchando sin tregua por
civil. Con todo y su importancia histórica determinante, la victoria final de todas las luchas de nuestro pasado, po-
allí está el 4 de febrero de 1992 para corroborarla, su de- dríamos tener real y verdaderamente Patria.
venir histórico tiene que ser mucho mejor conocido por Nos habíamos convertido a lo largo del siglo XX en un
nuestro Pueblo. Si queremos saber de dónde venimos, ne- Pueblo huérfano de nuestro glorioso pasado, de tal suer-
cesario es entender el papel que jugó el MBR-200 como te que perdimos toda forma de reconocimiento. Y eso
poderoso factor desencadenante de nuestra Revolución Chávez lo reconoció con soberana claridad, y nos lo hace
Bolivariana. saber a plenitud en El Libro Azul.
Al acercarnos al pensamiento y la obra del Comandante Podríamos decir que en el espíritu de Hugo Chávez, cuan-
Hugo Chávez advertimos que todo cuanto llevó a cabo do escribía estas páginas, latía el mismo desvelo de don Ma-
respondía a una doble condición histórica: contar con un rio Briceño-Iragorry cuando nos recordaba con dolor:
propósito claro y tener una profunda conciencia de sus
consecuencias en el tiempo. El Libro Azul no es una ex- Alejados de una lógica viva que persiga en nosotros mis-
cepción, también aquí lo descubrimos hundiéndose en la mos, es decir, en nuestro propio pasado nacional, la sus-
historia para trazarnos el horizonte filosófico y político tancia moral de nuestro ser social, hemos sufrido una
que imaginaba para el país al que condensó en el Proyecto ausencia de perfiles determinantes. Como corolario, no
Nacional Simón Bolívar. hemos llegado a la definición del ‘pueblo histórico’ que se
Como pocas veces en la historia venezolana, un hombre necesita para la fragua de la nacionalidad.1
ideó las bases de un sistema político, económico y social,
y se encargó de convertirlo en carne histórica. Y es que 1. Briceño-Iragorry, Mario (1952). Mensaje sin destino y otros ensayos.
Chávez, desde el mismo instante en que advirtió para Biblioteca Ayacucho. Caracas, 1988, p. 75.
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Chávez le dio fecunda concreción a esa lógica viva. Son las palabras del Padre Bolívar que nunca dejaron de
Desde un proyecto con raíces propias y respondiendo a pendular en la mente del joven oficial Hugo Chávez. El
la coyuntura sociopolítica de la Venezuela de finales del Libertador estaba transmitiéndole un mandato: era im-
siglo pasado, el objetivo trascendente era propiciar, otra postergable socavar por completo el derruido andamiaje
vez, el alumbramiento del pueblo histórico, el verdadero y de toda una sociedad que clamaba desde décadas atrás
olvidado, el que tantas veces se le negó su esencia y razón: por una real y verdadera transformación. Implícita estaba
el Pueblo que el Gigante hizo que renaciera de sus ceni- la visión en el genio del Comandante de que el Pueblo
zas para que pudiese hacerse Revolución, Patria, Patria venezolano debía agigantarse para hacerse de su destino,
ardiendo en llama sagrada. de su azimut histórico. Y ello dentro de una estrategia de
Hoy encarnamos plenamente la categoría de pueblo transformación que debía abarcar tanto el nivel fenomé-
histórico, y hemos venido cumpliendo colectivamente el nico como el genosituacional, enfrentando y confrontan-
más hermoso proceso de fragua de la nacionalidad. Y val- do a profundidad la contingencia histórica y sus deriva-
ga la reiteración: hoy tenemos Patria como nunca antes ciones, mientras se las abordaba integralmente, según el
en nuestra historia. planteamiento expuesto por nuestro Chávez.
En este sentido, El Libro Azul hizo de bitácora, y ha sido
II y es un sólido referente que refuta a quienes han insistido
y siguen insistiendo en que nuestro Gigante nunca tuvo
Nuestras leyes son funestas reliquias de todos los rumbo cierto o bien una vez hecho del Gobierno, en 1998,
despotismos antiguos y modernos, que este edificio traicionó sus propuestas iniciales al igual que al proyecto
monstruoso se derribe, caiga, y, apartando sus ruinas, nacional expuesto hasta en el último rincón de nuestro
elevemos el templo de la justicia y, bajo los auspicios territorio a todos los venezolanos, luego de que saliera de
de su santa inspiración, dictemos un Código de leyes la cárcel y hasta el día en que fuera electo Presidente por
venezolanas.2 primera vez. Convencido y claro, desde mucho antes del 4
de febrero de 1992, de la necesidad histórica y política de
una convocatoria nacional a una Asamblea Constituyente
2. Bolívar, Simón. Discurso de Angostura, 15 de febrero de 1819.
en el caso de que la rebelión triunfara. No en vano, con el
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devenir del tiempo, esta fue su única propuesta electoral lo original como punto nodal de las repúblicas a edificar.
en 1998 y la primera decisión que tomó tras ser investido Dice García Bacca: “Es, pues, transfinitud tipo originalísi-
con la primera magistratura nacional. mo de invento, originalísimo por secuela de invenciones”.3
De allí la génesis de una Revolución Bolivariana única
III e inédita, y por secuela los originalísimos procesos cons-
tituyente e instituyente que no sólo parieron una Carta
Para el filósofo Juan David García Bacca, gran estudioso Magna originalísima, sino que tales procesos siguen defi-
del pensamiento robinsoniano, tantas veces citado por niendo y transformando la realidad venezolana en la mis-
Chávez, definir consiste en hacer resaltar lo original que ma medida en que nuestros hombres y mujeres se han ido
las cosas tienen (diferencia específica) sobre un fondo co- reapropiando felizmente de la misma.
mún (género próximo) de una realidad, única forma de Una de las formas para que tal reapropiación se haga
determinar lo que esa misma cosa está siendo. Mutatis efectiva ha sido la constante convocatoria al Pueblo Le-
mutandis, cambiando lo que hubiera que cambiar, algo pa- gislador, concepto este robinsoniano, para que el Pueblo
recido se presentaba en la sociedad venezolana en el tiem- pueda darse a sí mismo un Código de Leyes Venezolanas,
po en que estas páginas fueron escritas: la crisis terminal como lo pidiera Bolívar en Angostura. La Ley Habilitante
anunciaba un desenlace heroico, visto el coraje mostrado contra la corrupción y la Ley Habilitante para adecentar
y demostrado por nuestro Pueblo aquel 27 de febrero de las reglas del juego económico nos colocan ante la exigen-
1989 al colocar contra las cuerdas tanto a la tesis neolibe- cia insoslayable de legislar también sobre nuevos códigos
ral como a la tan cacareada “muerte de las ideologías”. morales; nos dan certeza de que ese mismo Pueblo Legis-
Retrataba fielmente El Libro Azul no sólo lo que en lador, ahora más que nunca está en las calles movilizado;
cuerpo y alma vivía y padecía la sociedad venezolana, lo es el Pueblo Legislador como expresión viva y efectiva del
que entonces estaba siendo, sino que pintaría por igual Poder Popular, participativo y protagónico, de la sociedad
el transfinito mundo de posibilidades a la que quedaría original a la que aspiramos.
abierta en el porvenir, para decirlo también con García
Bacca, asido este de la mano del Maestro Simón Rodrí- 3. García Bacca, Juan David. Infinito. Transfinito. Finito. Anthropos. Edi-
guez y su lapidaria frase de inventamos o erramos, esto es, torial del Hombre. Barcelona-España, 1984 p. 159.
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es, venezolanizar a Venezuela. A tal objetivo trascendente del Pueblo Soberano; referencia verdaderamente válida
responde la creación del árbol de las tres raíces en tanto y pertinente con el carácter socio-histórico del ser vene-
que audaz reivindicación y fecunda asunción de una me- zolano, que clama nuevamente por el espacio para sem-
moria histórica liberadora, plena de contemporaneidad y brarse en el alma nacional y conducir su marcha hacia la
preñada de porvenir. vigésimo primera centuria.
El clamor se hace indetenible por los caminos de Ve-
V nezuela. Se acerca, se hace torrente y se confunde en el
estremecimiento del pueblo venezolano.
Vamos a citar in extenso al Comandante. Oigamos su verbo Este proyecto ha renacido de entre los escombros y se
aclarando el panorama y trazando la ruta genuina hacia la levanta ahora, a finales del siglo XX, apoyado en un mo-
liberación nacional, hacia nuestra definitiva Independencia: delo teórico-político que condensa los elementos con-
ceptuales determinantes del pensamiento de aquellos
¿Cuál es la razón por la que estamos aquí y ahora anun- tres preclaros venezolanos, el cual se conocerá en ade-
ciando y promoviendo cambios profundos al comenzar lante como Sistema EBR, el Árbol de las Tres Raíces: la E,
la última década de este siglo “perdido”? de Ezequiel Zamora; la B, de Bolívar y la R, de Robinson.
Pudieran enunciarse infinidad de causas, pequeñas y Tal proyecto, siempre derrotado hasta ahora, tiene un
grandes, pasadas y presentes, estructurales y coyuntura- encuentro pendiente con la victoria.
les, para exponer a los hombres de esta hora tal razón. Nosotros, simplemente, vamos a provocar dicho en-
Sin embargo, todas las que aquí pudieran señalarse se- cuentro inevitable.5
rían tributarias de una misma corriente, cuyo cauce vie-
ne de muy lejos y cuyo lecho aparece y desaparece de ma- Al releer detenidamente estas palabras, quiero recordar
nera intermitente en los recovecos y vueltas, casi siempre algo que ya he dicho: a muchos de nosotros y nosotras, sus
oscuros, de la historia patria. hijos e hijas, sus colaboradores y colaboradoras, Chávez
Existe entonces, compatriotas, una sola y poderosa nos sacó de la enajenación exógena que lamentablemente
razón: es el proyecto de Simón Rodríguez, El Maestro;
Simón Bolívar, El Líder; y Ezequiel Zamora, El General 5. Páginas 43-44 de esta misma edición.
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marcó parte de la historia de la izquierda venezolana, y Qué portentosa manera tiene de descubrirnos el valor
que la alejó irremediablemente del palpitar y del sentir del fundacional de las ideas de Robinson, de revelarnos la
Pueblo. Chávez fue un auténtico maestro, un inigualable importancia decisiva de lo original robinsoniano. Para
pedagogo, a la hora de mostrarnos la necesidad urgente Chávez, Robinson no es el inspirado, sino el que inspi-
e irrenunciable de hacer cuerpo y conciencia de nuestra ra a través de la utopía concreta que se proyecta en su
historia, de sentirnos y sabernos herederos y herederas, pensamiento. Es por eso que el Comandante reivindica al
continuadores y continuadoras de todas nuestras luchas. Robinson audaz, al Robinson revolucionario, al Robinson
Gracias a sus enseñanzas, el Libertador, el Maestro y el descolonizador de las conciencias, de las mentalidades, al
General del Pueblo Soberano se convirtieron en nuestros Robinson que nos planteó el ineludible dilema existen-
grandes y ejemplares contemporáneos; los puso literal- cial y político de inventar o errar, al Robinson que puso
mente a batallar con nosotros en nuestro tiempo. Chávez todo el énfasis en la necesidad imperiosa de crear una
nos puso en la realidad, y para ponernos en la realidad, manera de gobernarnos que dejara de mirarse en espejos
nos abrió las sendas perdidas de la memoria histórica, de importados para comenzar a vernos a nosotros mismos.
su potencia y de su potencialidad; nos convocó a buscar y En realidad y en verdad, Chávez extrajo toda la potencia
encontrar los códigos que nos dan sentido y razón como emancipadora de su pensamiento.
venezolanas y venezolanos. Robinson encarna en Chávez cuando dice, por ejemplo:
Chávez rescató nuestras fuentes originarias: Simón Ro-
dríguez, Simón Bolívar y Ezequiel Zamora, las tres raíces Los hombres no están en sociedad para decirse que tie-
y las tres estrategias para la refundación de la República. nen necesidades, ni para aconsejarse cómo remediarlas,
ni para exhortarse a tener paciencia sino para consultarse
VI sobre los medios de satisfacer sus deseos porque no satis-
facerlos es padecer.6
Al recorrer nuevamente las páginas de El Libro Azul, he
vuelto a confirmar una certeza: Chávez no sólo es el ma-
yor reivindicador de Bolívar, también lo es de la figura y 6. Rodríguez, Simón (1828). Sociedades Americanas. Biblioteca Ayacu-
del pensamiento de Simón Rodríguez. cho. Caracas, 1990, p. 71.
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Se trata, entonces, de un Robinson que piensa la Revo- El Libro Azul se inscribe singular y plenamente en la
lución desde el deseo, desde los deseos, y esto hace que el corriente histórica, filosófica y política del bolivarianismo
Chávez que lo sigue, que se inspira en él, se aleje de cualquier contemporáneo: se trata de un bolivarianismo para el si-
tentación dogmática, de cualquier forma de dogmatismo. glo XXI según la feliz expresión del mismo Comandante.
Quiero atreverme a formular libremente una intuición: Ciertamente, en el Libertador nos encontramos todas y
en muchos y diversos sentidos, Robinson es para nosotros todos; Bolívar nos da sentido y nos interpela; su pensa-
mucho más importante que Carlos Marx, y lo es porque él miento es una invitación permanentemente abierta a re-
pensó desde nuestra realidad, enraizando su pensamien- pensarlo todo. Es así: de Bolívar venimos y hacia Bolívar
to, asimilando todas las ideas que había que asimilar de vamos. Esta Revolución no habría sido la misma y, más
Europa, pero pensando desde presupuestos nuestroame- aún, no habría sido posible, si no fuese Bolivariana.
ricanos, no europeos, teniendo el coraje de formular ideas Chávez entiende el ideario bolivariano de libertad,
propias, descolonizándose a la hora de forjar conceptos, igualdad y justicia como sustento primordial para en-
descolonizándonos en el pensar y en el hacer. No en vano carnar una ética republicana que respondiera a los desa-
el Maestro de Maestros de la Patria Grande escribió es- fíos de nuestro tiempo. Una ética republicana en el más
tas líneas que aún nos desafían, nos retan: “Más cuenta riguroso sentido, esto es, nada está por encima del bien
nos tiene, entender a un indio que a Ovidio”.7 Quienes común, del bienestar colectivo, de la suprema felicidad
sólo entienden a Ovidio, y no les importa entender a un social. Es el Libertador mostrándonos el rumbo cierto del
indio, tienen el colonialismo en la cabeza y actuarán en arte de gobernar: “…yo antepongo siempre la comunidad
consecuencia sin el menor sentido de pertenencia. Es lo a los individuos”.8 Todo lo contrario fue lo que hicieron
que ocurre con la colonizada oposición venezolana: el co- las clases dominantes desde 1830: anteponer el más feroz
lonialismo mental les hace despreciar a nuestro Pueblo individualismo y ejercer el poder contra cualquier posibi-
y ello significa despreciar a la Patria que los vio nacer, la lidad de realización comunitaria.
Patria que no sienten, que no aman. El proyecto de la oligarquía no fue otro que constituir
una “Nación”, entre comillas, sí, sin Pueblo, y mantener
7. Rodríguez, Simón (1845). “Consejos de amigo dados al Colegio Lata-
cunga” . En Obras completas, tomo II. Ediciones de la Presidencia de la 8. Bolívar, Simón. En carta al general Antonio José de Sucre desde Bo-
República. Caracas, 2001, p. 35. gotá, el 28 de octubre de 1828.
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a Venezuela en su condición de colonia. Y con la apari- Chávez trae al presente el espíritu zamorano en función
ción del oro negro, nos redujeron a ser una colonia pe- de que entendiéramos la continuidad de la lucha entre los
trolera yanqui: una extensión territorial sin libertad, sin desposeídos y los oligarcas que se adueñaron del poder,
soberanía, sin independencia. Desde todo punto de vis- acumulando los más groseros privilegios. Zamora es la
ta, fue necesaria la resurrección del bolivarianismo para batalla social que no termina: la batalla por la igualdad.
que resucitara la conciencia del Pueblo venezolano y así
recuperar el bien de los bienes, el bien que nos permite VII
alcanzar todos los otros bienes: la Independencia. Chávez
siempre estará junto a Bolívar en la gesta independentista Hoy estamos afrontando el reto de definir y esculpir en
que retomamos colectivamente en el siglo XXI y que aún la materia concreta de nuestra sociedad, el modo de exis-
no ha concluido. tir solidario tal y como nuestro Robinson lo avizoró para
Igualmente, Ezequiel Zamora encuentra en Chávez a su nuestras repúblicas:
gran reivindicador histórico. Siguiendo la huella dejada
por el maestro Federico Brito Figueroa en Tiempo de Eze- No es hacer cada uno su negocio, y pierda el que no esté
quiel Zamora, Chávez trae al General del Pueblo Sobera- alerta, sino pensar cada uno en todos, para que todos
no al presente para darle continuidad al combate social, piensen en él. Los hombres no están en el mundo para
a la batalla por la igualdad, por un país real y verdadera- entredestruirse, sino para ayudarse .9
mente de iguales. Incluso, en esta etapa de su pensamien-
to, Chávez piensa y proyecta el Estado nacional desde la De modo que no estamos tallando de cualquier mane-
raíz zamorana: su propuesta de aquel tiempo era la de ra: estamos partiendo del alma de nuestra sociedad, de la
un Estado federal zamorano. En fin, Zamora encarna en entraña personal de cada una y cada uno de nosotros en
Chávez como radicalismo: Zamora es un ir a la raíz del perfecta integración con el cuerpo social para levantar so-
conflicto social que nos determina desde 1830, es un ir a bre sólidas bases un real y verdadero Poder Moral. Esta es
fondo contra la injusticia, la exclusión y la desigualdad; es
un volver a nuestra identidad originaria que tiene como 9. Rodríguez, Simón (1828). “Sociedades Americanas”. Obras completas,
base fundamental la unidad cívico-militar, o si se prefiere, tomo II. Ediciones de la Presidencia de la República. Caracas, 2001, p. 326.
el Pueblo en Armas.
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la batalla más exigente que nos toca librar en el presente: Confío en que nuestro Pueblo va a encontrar muchas
ello explica las respuestas que como Gobierno Bolivaria- ideas fecundas a la hora de leer y releer El Libro Azul para
no estamos dando conjuntamente con nuestro Pueblo a la seguir ensanchando los caminos de la filosofía popular
actual guerra económica que factores foráneos en conchu- que abriera la Revolución Bolivariana. En realidad, estas
pancia con factores apátridas le han declarado a nuestra páginas continúan escribiéndose en la realidad venezola-
Patria; estamos respondiendo y seguiremos respondiendo na. Aquí brilla, con luz propia, el proyecto originario del
contundentemente a tantos abusos, tantas tropelías y tan- Comandante, el proyecto que nos constituye y al que siem-
tos crímenes contra un Pueblo que desea vivir en paz. pre debemos volver, del que siempre debemos nutrirnos.
Debemos actuar desde lo más profundo de nuestra subje-
tividad, pero en íntima consonancia hasta formar una mul- Nicolás Maduro Moros
tiplicidad de acordes con el sentir de los otros: no nos está Presidente de la República Bolivariana
permitida otra opción. No en vano ante una guerra inédita de Venezuela
contra nuestra Nación, nuestras respuestas han sido origi-
nalísimas y ello demuestra que vamos a conjurarla: somos Noviembre de 2013
un Pueblo que nació para vencer y venceremos. Seguire-
mos en el camino de inventar e inventarnos para salvar y
preservar la preciosa y fecunda vida de nuestra República
Bolivariana y Chavista, esbozada y proyectada luminosa-
mente por el Gigante en las páginas de El Libro Azul.
VIII
[28] [29]
c háv e z s o b r e e l l i b r o a z u l
[31]
h u g o c háv e z f r ía s e l l i b r o a z u l
Un documento que tiene tres partes: una introducción, La ideología, vean ustedes, este detallito, que yo estaba
la segunda parte que es el enfoque ideológico, el marco recordando esta madrugada del 21 de julio de 1992:
ideológico, el árbol de las tres raíces: Bolívar, Rodríguez y árbol de las tres raíces. Nosotros ahí dábamos clases,
Zamora ; y la tercera parte que es una línea estratégica muy nos dividíamos para dar clases y entonces estábamos
general del Proyecto Nacional Simón Bolívar, que luego estudiando sistemas filosóficos, políticos, EBR. El árbol de
se convirtió en Agenda Alternativa Bolivariana y luego las tres raíces: Ezequiel Zamora, Simón Bolívar y Simón
en el Proyecto Revolucionario que hoy está contenido, Rodríguez. Y hacíamos este gráfico, estas coordenadas
en buena parte, en la Constitución y en un conjunto para llevar a un gráfico el pensamiento de Bolívar y el de
de leyes, como la de Hidrocarburos, por ejemplo. Está Simón Rodríguez, buscar la coincidencia de las dos raíces,
desarrollado el proyecto (…) Esa madrugada yo estaba en torno sobre todo a la igualdad y las formas de gobierno.
muy feliz porque leía estas notas, humildes notas hechas Igualdad y formas de gobierno. Y aquí nos preguntábamos
por un teniente coronel por allá, apurado, de madrugada, cómo determinar el valor de cada variable. Estábamos
y un teniente pasando en la computadora muchas notas incursionando en la ciencia profunda, llevando las ideas
y estudios y recuerdos de discusiones de colectivo, pero a la matemática.
llevado a una pastilla (…) De 1992 para acá, veo la
Constitución, está aquí; y veo la Ley de Hidrocarburos y 17 de abril de 2005
está aquí; y veo el proyecto de gobierno 2001-2007 y está Aló, Presidente, Nº 219
aquí, aprobado por la Asamblea Nacional y en marcha,
con muchas dificultades, pero en marcha. Entonces digo: Nosotros, el 4 de febrero, traíamos ya lo que llamábamos
valió la pena todo aquello, valió la pena incluso el dolor El Libro Azul. Era un folleto muy modesto, pero ahí estaban
(… ) Estos cuadernitos se quedaron por allí. Este se quedó ya planteadas las líneas gruesas de lo que hoy es ya, ahora
en mi maletín y solo pocos oficiales lo teníamos. Sacamos sí, 20 años después, el Proyecto Nacional Simón Bolívar.
pocas copias por razones de seguridad.
22 de enero de 2012
9 de febrero de 2003 Entrevista con José Vicente Rangel
Aló, Presidente, Nº 138
[32] [33]
h u g o c háv e z f r ía s
2 de feberero de 2012
Celebración de 13 años de la Revolución Bolivariana
[34] [35]
el libro azul
Pensamientos
Rodríguez, Simón
[Sociedades Americanas, 1828]
Bolívar, Simón
Pativilca, 19 de enero de 1824
Al Señor Simón Rodríguez
[39]
h u g o c háv e z f r ía s
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h u g o c háv e z f r ía s
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h u g o c háv e z f r ía s
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h u g o c háv e z f r ía s e l l i b r o a z u l
pretextos a la risa. Sabe correrse a la burla. Su alegría no es Como todo sistema ideológico, el modelo está integra-
ocasional. Era su método de vivir y enseñar.1 do por un conjunto de elementos conceptuales fuerte-
mente interconectados entre sí, los cuales constituyen la
Dardo Cúneo estructura sistemática robinsoniana.
El estudio del modelo, desde su génesis hasta su desa-
En la historia de la filosofía política venezolana existe un rrollo, demuestra que tal estructura permanece inaltera-
modelo teórico primigenio, al cual vamos a llamar en ble y obedece a la misma disyuntiva de inventar nuevas
adelante “robinsoniano”, por haber emergido del pensa- instituciones para las nacientes repúblicas latinoameri-
miento y de la praxis de aquel compatriota que cambió canas o de errar el camino cayendo en el simplismo de
su nombre original de Simón Rodríguez por el de Samuel copiar modelos de otros tiempos, otras actitudes, otros
Robinson. hombres. Es decir, si no inventamos, caemos fatalmen-
El Modelo Robinsoniano fue construido en un lapso te en el error.
de poco más de medio siglo, desde la época de las mo- En Sociedades Americanas (1842), Simón Rodríguez se
cedades de Robinson, maestro de los niños caraqueños encarga de delinear la disyuntiva:
cuando escribe en 1794 sus reflexiones sobre los defec- “¿Dónde iremos a buscar modelos? La América espa-
tos que vician la Escuela de Primeras Letras de Caracas ñola es original. Originales han de ser sus instituciones
y los medios para lograr su transformación en “un nue- y su gobierno. Y originales, los medios de fundar uno y
vo establecimiento, hasta su propia ancianidad, cuando, otro. O inventamos o erramos”.2
en 1851, publica sus Consejos de Amigo, dados al Cole- Es en este modelo donde se inserta la raíz más pro-
gio de Latacunga”. funda del Sistema EBR, precisamente, en la R de la raíz
El modelo se fundamenta en un sistema de ideas que robinsoniana.
puede ser perfectamente enmarcado dentro de una pro-
funda disyuntiva existencial, en la cual se deslinda clara-
mente una dicotomía en movimiento arrollador: “inven-
tamos o erramos”.
1. [Del prólogo a la obra de Simón Rodríguez Inventamos o erramos, 2. [Rodríguez, Simón. Sociedades Americanas. Biblioteca Ayacucho,
Monte Ávila Editores Latinoamericana, 1980.] 1990, p. 88.]
[46] [47]
h u g o c háv e z f r ía s e l l i b r o a z u l
Segunda Raíz: Raíz Bolivariana discursos en 1811, cuando señala: “¡Que los grandes proyec-
tos deben prepararse con calma! Trescientos años de calma,
Así está Bolívar en el cielo de América (...) sentado aún ¿no bastan? (...) Pongamos sin temor la piedra fundamental
en la roca de crear, con el inca al lado y el haz de bande- de la libertad suramericana: vacilar es perdernos”.3
ras a los pies, así está él, calzadas aún las botas de campa- En su Discurso ante el Congreso de Angostura, el 15 de
ña, porque lo que él no dejó hecho, sin hacer está hasta febrero de 1819, señala: “Tengamos presente que nues-
hoy; porque Bolívar tiene que hacer en América todavía. tro pueblo no es el europeo ni el americano del norte, que
más bien es un compuesto de África y América, que una
José Martí emanación de la Europa”.
Más adelante continúa delineando el elemento central
El Modelo Robinsoniano trasciende, sin embargo, el perso- de la estructura conceptual del modelo:
naje, el maestro, para generar y servir de base a otro de ma-
yores dimensiones, no en lo filosófico, sino en su proyección Nuestras leyes son funestas reliquias de todos los despo-
histórica y geográfica: El Modelo Bolivariano. Éste se impul- tismos antiguos y modernos, que este edificio monstruoso
sa sobre aquél y se siembra en un extenso territorio con la se derribe, caiga y, apartando hasta sus ruinas, elevemos el
misma semilla dicotómica: inventar una nueva sociedad en templo a la justicia y, bajo los auspicios de su santa inspira-
la América Española o errar, tratando de copiar viejos mo- ción, dictemos un Código de leyes venezolanas.4
delos, impertinentes a nuestro escenario.
Los elementos conceptuales que forman el Modelo Bo- Ésta es la segunda raíz, por cuyo ápice libertario se ali-
livariano son más complicados, pero, no por ello es im- menta de los siglos el Sistema EBR: la B de la vertiente
posible identificar una estructura perfectamente homó- bolivariana.
loga con el modelo robinsoniano. Ambos son producto
de una época y resultan de un proceso de observación y
praxis sobre una misma situación fenoménica. 3. [Discurso pronunciado el 3 de julio de 1811 en la Sociedad Patriótica
Simón Bolívar, “El Líder”, escribe su doctrina en la dicoto- de Caracas.]
mía robinsoniana de manera reiterativa, desde sus primeros 4. [Discurso de Angostura, 15 de febrero de 1819.]
[48] [49]
h u g o c háv e z f r ía s e l l i b r o a z u l
“Tierras y hombres libres.” Sobre las ruinas de la dictadura que el 5 de marzo próximo
“Elección popular.” pasado nos impulsó Julián Castro, con la envejecida oli-
“Horror a la oligarquía.” garquía, levantaréis el Gobierno Federal que asegura para
He aquí la tercera vertiente ideológica que nutre nues- 5. [Dada en el Cuartel General de Barinas.]
tro proyecto político: La Raíz Zamorana, ubicada en un
tiempo histórico más cercano al presente e incorporada
[50] [51]
h u g o c háv e z f r ía s e l l i b r o a z u l
siempre la libertad, la igualdad y la fraternidad, dogma 2. Eliminación del sistema de cobro de arriendo por el
de la República genuina. uso de la tierra para fines agrícolas o pecuarios.
3. Fijar los jornales de los peones de acuerdo con las
Los elementos conceptuales del modelo ideológico za- labores.
morano guardan estrecha relación con la invención ro- 4. Que los amos de hatos empotreren diez vacas pari-
binsoniana y la grandeza de visión geopolítica del mo- das de modo permanente en las tierras del común para
delo bolivariano. Dichos elementos se reflejan en la gran suministrar diariamente, y de modo gratuito, una bote-
cantidad de documentos producidos por el General del lla de leche a los hogares pobres.
Pueblo Soberano. Veamos como muestra la Protesta a
los ciudadanos cónsules extranjeros residentes en Puerto
Nutrias, el 9 de junio de 1859:
[52] [53]
El Proyecto Nacional
Simón Bolívar
- Sub-estructura económico-social.
- Sub-estructura político-jurídica.
- Sub-estructura ideológica.
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Allí están las líneas fundamentales de la utopía concreta b) El fin supremo de la sociedad es “satisfacer los de-
robinsoniana, en el marco de un tipo de sociedad soli- seos” de los hombres pero con el condicionante de la
daria donde el ser humano sea el elemento fundamental consulta previa y general sobre los medios de lograr tal
con la trascendencia social ya señalada. fin. Profundizando en el concepto, tenemos que la acción
Profundizando en el pensamiento del maestro, intenta- de satisfacer implica “pagar enteramente lo que debe ser”
mos señalar un nivel más allá del objetivo estratégico del y el deseo viene dado por un movimiento enérgico de la
Proyecto Nacional Simón Bolívar, un nivel donde se en- voluntad hacia el conocimiento, posesión o disfrute de
cuentra la razón de ser del proceso: un estadio superior una cosa”. Y la voluntad radica en “la potencia del alma,
de sociedad donde los seres humanos puedan “consul- que mueve a hacer o no hacer una cosa”.9
tarse sobre los medios de satisfacer sus deseos” y evitar el
padecimiento individual y social. Tal situación no puede Es decir, la sociedad existe para abrir a los hombres el
imaginarse fuera del ámbito de una sociedad profunda- cauce hacia la liberación de sus fuerzas internas, de ma-
mente democrática y solidaria. nera tal que salga de lo meramente individual, para po-
Enfoquemos con mayor precisión los conceptos del tenciar su capacidad de pensar, de inventar y de crear sus
maestro para definir con la máxima claridad posible la propios modos de existir, en interacción constante y soli-
utopía concreta robinsoniana: daria con sus semejantes.
El desarrollo de su capacidad creadora le permitirá, en ese
a) La idea de consultarse es completamente democráti- estadio futuro de sociedad, comprenderse a sí mismo y di-
ca, con una concepción profundamente participativa del namizar su propia cultura, con lo cual se asienta en los te-
término: rrenos de la racionalidad, en la búsqueda del fin existencial.
La utopía concreta robinsoniana constituye el escena-
Para tratar de su bienestar, no deben perder consultores, ni rio más alejado, en la perspectiva de la trayectoria estraté-
medios de consultar, cada hombre excluido del consejo es un gica de transformación. Por tal razón, sus contornos, sus
voto de menos i un perjuicio, porque hai que pensar en él componentes situacionales apenas pueden ser vislum-
para que no ofenda, y por él cuando lo necesitan.8 brados, alargando la proyección más allá del horizonte.
8. Transcripción textual del escrito de Simón Rodíguez. [“Sociedades
Americanas en 1828”. En Obras completas. Tomo I. Ediciones de la Uni- 9. [Rodríguez, Simón. Inventamos o erramos. Ob. cit., p. 130]
versidad Simón Rodríguez, 1975, p. 324]
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A medida que el proyecto avance hacia la situación-ob- América Latina: “¿Dónde iremos a buscar modelos? La
jetivo y los planes se vayan transformando en historia, la América española es original. Original han de ser sus ins-
utopía concreta podrá ser definida con claridad crecien- tituciones y su gobierno. Y originales, los medios de fun-
te, producto de la visión de los actores y la eficacia de las dar unas y otro. O inventamos o erramos”.10
acciones. Y, solidario porque de esa manera conceptualizaba, El
En la actual situación, la utopía concreta robinsoniana Maestro, el modo de vida a llevar por los hombres en so-
permite a los venezolanos tomar el azimut histórico, de- ciedad. Veamos la exactitud de su proyecto:
finir el rumbo y comenzar la larga jornada que le corres-
ponderá conducir hacia destinos superiores. No es hacer cada uno su negocio, i pierda el que no esté
alerta, sino pensar cada uno en todos, para que todos
piensen en él. Los hombres no están en el mundo para
La Situación-objetivo entredestruirse, sino para ayudarse.11
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través de la promoción y libre desarrollo de la creativi- transforma, a través de la Constitución, en Poder Esta-
dad, recogida de la dicotomía existencial robinsoniana: tal. Por tanto, la Constitución ocupa rango de primer or-
“Inventamos o erramos”. den en los elementos estructurales, político-jurídicos de
El individuo concreto es resultado de la interacción con un Estado concreto.
los dos componentes situacionales señalados, proceso en La Constitución Nacional del modelo de sociedad ori-
el cual la estructura social determina en alto grado los ca- ginal debe ser pertinente y perfectamente compatible con
racteres individuales. los demás componentes de la estructura estatal y social,
El individuo como actor social ejerce, sin embargo, in- especialmente en el orden económico, social, cultural y
fluencia de significación variable sobre el sistema social. El geopolítico.
modelo de sociedad original debe potenciar la capacidad y Ello sólo podrá lograrse a partir de una Asamblea Nacio-
su relativa autonomía creadora dentro de la situación. nal Constituyente de carácter plenipotenciario, la cual debe
Dentro del marco teórico anterior, el Proyecto Nacio- elaborar la Carta Magna en la situación de provisionalidad,
nal Simón Bolívar aborda el modelo de sociedad origi- en el marco de una profunda participación de la sociedad ci-
nal, con un enfoque de globalidad definido por la inte- vil, a través de diversos mecanismos de democracia directa.
racción del sistema social de la cultura y los factores indi-
viduales, visualizando en perspectiva la situación- objeti- 1. El Estado
vo del proceso de transformación a un nivel principista,
en el cual serán definidos los criterios generales que con- El Estado Federal responde a varias necesidades (...):
forman cada elemento estratégico del modelo, es decir, el En primer lugar, hace posible la organización política ra-
sistema social, la cultura y los factores individuales. cional de grandes espacios bajo el supuesto de relaciones
de paridad entre las partes componentes.
El Sistema Social ...
La estructura político- jurídica Puede responder también a un principio de organización
estatal que tenga como objeto la máxima autonomía de
Todas las fuerzas contenidas y actuantes en la sociedad las unidades componentes, sea ello por motivos de ín-
conforman el poder social. Ahora bien, el Poder Social se dole técnica (mejor funcionamiento de la organización)
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(...) sea ello por motivos de índole axiológica, como el 2. Las normas jurídicas de alcance y competencia federal.
reconocimiento y el respeto a entidades de ámbito lo- 3. Las constituciones de los estados que integran la Fe-
cal, y como vía para la realización del ideal de la libertad, deración, limitadas y enmarcadas por la Constitución
que del plano de la persona individual se traslada ahora Nacional.
a personalidades colectivas, aunque no constituyan na-
ciones culturales.16 La unidad total, independiente y soberana de la Nación,
residirá en la síntesis dialéctica de los ámbitos nacional y
Las necesidades geopolíticas internas de la Venezuela del estatal. Es decir, el todo trasciende la simple sumatoria de
siglo XX requieren de una equilibrada y policéntrica ar- las partes.
quitectura de poder. El Estado funciona como una “uni-
dad de poder”. Unidad que no debe ser confundida con la 2. Los Poderes del Estado
concentración. Y “poder” que necesita ser desempeñado,
ejercido de manera armónica y bien distribuida en todo El peor enemigo de la libertad, dice Montesquieu, es el
el territorio nacional. poder, ya que “es una experiencia eterna que todo hom-
El Estado Federal, que así se constituya, recibirá el nom- bre que tiene poder tiende a su abuso”; mas, como el po-
bre de Estado Federal Zamorano, en homenaje al General der es necesario, sólo existe un medio para garantizar la
del Pueblo Soberano, Ezequiel Zamora, cuyo proyecto de libertad, a saber: encontrar una “disposición de cosas” en
Federación fue tergiversado por quienes traicionaron los la que “el poder detenga al poder”, y ello sólo puede lo-
postulados de la Revolución Federal. grarse según su división.17
El Estado Federal Zamorano tendrá la siguiente estruc-
tura jurídica: La división de poderes del Estado se encuentra dentro de
1. La Constitución Nacional, soberana por sí sola y un proceso de racionalización de doble vertiente:
norma fundamental de las constituciones de los estados a) La racionalidad técnica, la cual provee a los compo-
miembros. nentes y las acciones del Estado, un alto nivel de coordi-
nación y eficacia operacional.
16. García-Pelayo, Manuel. Derecho constitucional comparado, pp. 216-
217 [Alianza Editorial, Madrid, 1984.] 17. Ob. cit. p. 155.
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esta representación participará de los derechos de que go- Los consejos electorales de cada municipio se congre-
zan los gobiernos particulares de los Estados Federados. garán para conformar el Consejo Electoral del Estado.
De este modo, se ha puesto nuevo peso a la balanza con- El Consejo Electoral de cada Estado elegirá a sus repre-
tra el Ejecutivo y el gobierno ha adquirido más garantías, sentantes al Consejo Federal Electoral, organismo que
más popularidad y nuevos títulos, para que sobresalga en- tendrá competencia a nivel nacional.
tre los más democráticos. 19 Los ciudadanos que integren los diferentes consejos
electorales serán total y absolutamente independientes
El Poder Electoral del Estado Federal será el componen- de los partidos políticos.
te político-jurídico que permita a los ciudadanos ser au- Los consejos electorales tendrán toda la responsabili-
ténticos depositarios de la soberanía, cuyo ejercicio esta- dad inherente a los procesos eleccionarios, tanto a nivel
rá realmente, entonces, en manos del pueblo. local, como estatal y nacional. Al mismo tiempo, fiscali-
El Poder Electoral se extenderá por todo el sistema so- zarán permanentemente el desempeño de los funciona-
cio-político de la Nación, estableciendo los cauces para rios electos por el pueblo y podrán iniciar, promover y
una verdadera distribución policéntrica del poder, des- decidir consultas populares directas (referendums, ple-
plazando fuerzas hacia la periferia e incrementando la ca- biscitos, etc.) para revocar o aprobar cargos y/o actos pú-
pacidad de decisión y la autonomía en las comunidades y blicos locales y/o nacionales, según su jurisdicción.
en los municipios. El Poder Electoral permitirá a todos los electores vene-
El Poder Electoral será ejercido por los ciudadanos de zolanos escoger los funcionarios públicos de los poderes
manera directa a través de las asambleas electorales, en Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Moral, desde el ámbito
las cuales participarán libremente todos los venezolanos local hasta el nacional.
en edad electoral (electores). Esta escogencia debe ser uninominal, universal, direc-
La Asamblea Electoral Municipal elegirá los miembros ta y secreta.
del Consejo Electoral del municipio, en número propor-
cional a la población del mismo.
19. Bolívar, Simón. Mensaje al Congreso Constituyente de Bolivia, 25 de
mayo de 1826.
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Cada uno de estos órganos tendrá sus respectivas ins- A la política corresponde la definición de metas y pro-
tancias regionales (estatales y municipales), las cuales se- pósitos de la sociedad. Al Gobierno corresponde la for-
rán autónomas en su organización y funciones, reguladas mulación de políticas, es decir, la toma de decisiones que
éstas por las correspondientes constituciones estatales. afectan a la sociedad. Por tanto, el sistema de gobierno
Los máximos funcionarios nacionales, estatales y loca- debe contar con los mecanismos, los cauces, los organis-
les de los organismos componentes del Poder Moral se- mos y los procedimientos para permitir a las mayorías
rán electos de manera uninominal, universal, directa y nacionales ejercer control, participar y protagonizar el
secreta por los electores venezolanos, según lo establez- proceso de toma de decisiones políticas. Y no solamente
can las respectivas constituciones y leyes electorales. a las mayorías; sino, de la misma forma, a las minorías, lo
El fiscal federal, el procurador federal y el contralor fe- cual precisamente constituye un rasgo inseparable de la
deral constituirán el Consejo Moral de la Nación, total- sociedad democrática.
mente independiente de los demás órganos del Poder Pú- El modelo de la sociedad original de la Venezuela del
blico y con la misión constitucional de fiscalizar y posibi- siglo XXI está concebido con el criterio de un sistema de
litar el adecuado funcionamiento de los demás poderes. gobierno que abra con amplitud ilimitada los espacios
En cada Estado de la República, funcionará el Consejo necesarios donde los pueblos, la masa popular, se des-
Moral Estatal y en cada municipio, el Concejo Moral Mu- plieguen creativa y eficazmente, y obtengan el control del
nicipal, constituido por el fiscal, el contralor y el procura- poder para tomar las decisiones que afectan su vida dia-
dor de cada instancia correspondiente. ria y su destino histórico.
Se trata, entonces, de un verdadero y auténtico sistema
3. El Sistema de Gobierno. democrático, cuyas instituciones y procedimientos tras-
La democracia participativa y protagónica ciendan con creces la minusvalía y el estado de sobrevi-
vencia al que los gobiernos populistas llevaron la demo-
La política se ocupa del interrogante clásico de Harold cracia en América Latina. “Todo el Poder para el pueblo”
Lasswell: “¿Quién obtiene qué, cuándo, cómo?”. El go- es una consigna perfectamente válida que debe orientar
bierno se ocupa del interrogante: “¿Quién controla qué, el proceso democratizador hacia la sociedad proyectada
cuándo y cómo?”. en el horizonte objetivo.
Karl Deutsch
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Desde esta perspectiva, la llamada “democracia repre- ne qué, cuándo, cómo”. Como consecuencia de esto, los
sentativa” no ha sido más que un artificio a través del cual pueblos no pueden tomar parte en el diseño y/o selección
se ha dominado a nuestros pueblos. Ya lo señalaba el Li- de planes y proyectos que jalonan su marcha histórica.
bertador: “Por el engaño se nos ha dominado más que De esta manera, nuestros pueblos han sido condenados
por la fuerza”. a “participar” en su propia destrucción, en el manejo de
El Proyecto Nacional Simón Bolívar debe romper los su miseria creciente, en el “control” de las hambrunas y
límites de la farsa representativa, para avanzar hacia la las enfermedades que azotan a casi 300 millones de lati-
conquista de nuevos espacios participativos en una pri- noamericanos. Han participando cavando la tumba his-
mera fase de su desarrollo. tórica en la cual pretenden los sectores dominantes ente-
Pero el objetivo estratégico debe ser la democracia po- rrar las esperanzas de la América morena.
pular bolivariana como sistema de gobierno. Y más aún, La democracia popular bolivariana rompe con este esque-
como expresión de vida económica, social y cultural del ma de engaño y vasallaje, para llevar los límites de la acción
modelo de sociedad original robinsoniano. hasta el nivel de protagonización en la toma de decisiones.
El protagonismo, señala Víctor Martín, “implica una li-
La Democracia Popular Bolivariana bertad y una capacidad más fuerte y autónoma acerca de
Protagonismo y Autogobierno cambiar, incluso, las mismas reglas iniciales”. Es decir, el
pueblo como depositario concreto de la soberanía debe
Desde el punto de vista de las democracias formales, re- mantener su fuerza potencial lista para ser empleada en
gidas por gobiernos populistas, la participación ha sido cualquier momento y en cualquier segmento del tejido
ideologizada y utilizada por los sectores dominantes político, para reparar daños a tiempo, para reforzar al-
como señuelo, tras el cual pierden el rumbo no pocos es- gún desajuste o para producir transformaciones que per-
fuerzos de intención transformadora. mitan el avance del cuerpo social en la dirección estraté-
En efecto, los gobiernos y los partidos populistas predi- gica autoimpuesta.
can la participación con el concepto de “propina”, de for- Para ello, el sistema político debe instrumentar los cana-
ma tal que la condenan a ser fin de sí misma, con límites les necesarios, tanto a nivel local como regional y nacional.
tan estrechos y rígidos que impiden a la sociedad civil in- Canales por los cuales corra el poder popular protagónico.
tervenir en la toma de decisiones de política, “quién obtie-
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naturaleza. Ya la veo sentada sobre el trono de la liber- El maestro bosqueja en Sociedades Americanas (1842)
tad, empuñando el cetro de la Justicia, coronada por la la terrible realidad imperante:
gloria, mostrar al mundo antiguo la majestad del mun-
do moderno. Figurémonos viendo, desde una altura, la sociedad en
Bolívar, Simón que vivimos: no sabremos por dónde empezar a obser-
Discurso ante el Congreso de Angostura var. El tiempo se nos irá en escoger, entre los caracteres
15 de febrero de 1819 sobresalientes, los que sobresalen más, y, todos sobresa-
len a un tiempo, porque todo es exterioridad —una con-
En el pensamiento bolivariano ocupa lugar relevante una fianza general afecta todas las clases— unas a otras se te-
visión teleológica, es decir, de largo alcance, cuyo enfoque men, sin poder determinar la causa, y no es otra que el
trasciende el tiempo y se ubica en el fin último de conquis- egoísmo, propio de la ignorancia en que yacen millones
tar un modelo de sociedad distinta a la entonces existente. de hombres, por la falsa idea que tienen de la sociedad
Bolívar habla de “las próximas edades”, “los siglos futu- los pocos que la suerte ha puesto a gobernarla.21
ros”. Juega con el tiempo y coloca en el otro polo de su vi-
sión al “antiguo universo”, al “mundo antiguo”. Al igual que Bolívar, Rodríguez lanza a los hombres de su
He aquí el primer vestigio de un Proyecto Nacional ve- tiempo la idea clara de un Proyecto Nacional, a través del
nezolano. Bolívar parte del enfoque de la realidad que le cual las sociedades deberían llegar a estadios superiores
circunda (el mundo antiguo) y dibuja en un horizonte le- de vida: “El mérito de los proyectos está en la previsión.
jano la imagen de la situación futura o sociedad anhelada: Donde no hay previsión no hay mérito”.22
“prosperidad, esplendor, emporio de la familia humana”; La compatibilidad de su proyecto con la idea bolivaria-
una sociedad en donde impere “la libertad, la justicia, la na es precisada por él mismo cuando señala con meridia-
gloria, la majestad”. na claridad política transformadora:
Esta visión se transforma en elemento filosófico co-
21. Rodríguez, Simón. Sociedades Americanas. [En Obras completas.
mún, también, presente en el pensamiento de Rodríguez, Tomo I. Ediciones de la Universidad Simón Rodríguez, 1975, p. 331]
en torno al cual se va conformando el sistema ideológico 22. [Ob. cit., p. 321]
y robinsoniano.
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Napoleón quería gobernar al género humano, Bolívar amos ni tutores, quieren ser dueños de sus personas, de
quería que se gobernara por sí, y yo quiero que apren- sus bienes y de su voluntad.26
dan a gobernarse.23
En la misma figuración teleológica de Bolívar, cuando
En la sociedad futura, El Maestro construye, junto al con- preconcibe a “la vasta región sentada sobre el trono de la
cepto bolivariano, la idea política del autogobierno, colo- libertad, empuñando el cetro”.
cando al aprendizaje como vehículo para lograrlo, a través Ambos pensadores trascienden con creces el enfoque,
de su Proyecto de Educación Popular: “No nos alucinemos: mucho más reciente, según el cual un proyecto de socie-
sin educación popular, no habrá verdadera sociedad”.24 dad debe buscar metas “desarrollistas” sujetas a simples
Y con su visión de constructor, Rodríguez modela a mediciones econométricas.
grandes rasgos las sociedades americanas y su razón de ser: Bolívar y Rodríguez fijan la utopía realizable en el ám-
bito de la razón humana, de la realización de las fuerzas
Los hombres no están en sociedad para decirse que tie- creadoras del hombre y su cultura:
nen necesidades —ni para aconsejarse que busquen
cómo remediarlas —ni para exhortarse a tener pacien- Se nos verá de acuerdo cultivar las virtudes y los talentos
cia; sino para consultarse sobre los medios de satisfacer que conducen a la gloria; entonces seguiremos la mar-
sus deseos, porque no satisfacerlos es padecer.25 cha majestuosa hacia las grandes prosperidades a que
está destinada la América Meridional; entonces las cien-
Va mucho más allá, sin embargo, la proyección de su cias y las artes que nacieron en el Oriente, y han ilustra-
pensamiento, al asignar un carácter profundamente hu- do la Europa, volarán a Colombia libre, que las convida-
manista al fin último de la sociedad: rá con un asilo.27
Las sociedades tienden a un modo de existir muy diferen- Los hombres se juntan y se entreayudan; pero, entreayu-
te del que han tenido y del que se pretende que tengan. Los darse para adquirir cosas no es fin social. Entreayudarse
hombres de estos últimos tiempos (...) no quieren tener para proporcionarse medios de adquirir no es fin social
23. [Ob. cit., p. 313.]
26. [Ob. cit., p. 322.]
24. [Ob. cit., p. 333.]
27. Bolívar, Simón. Carta de Jamaica, 1815.
25. [Ob. cit., p. 324.]
[82] [83]
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tampoco. Proyectos de riqueza, de preponderancia, de A pesar del ritmo fulgurante de la guerra y las innumera-
sabiduría, de engrandecimiento, cualquiera los forma y bles tareas y actividades que debía cumplir como jefe mi-
los propone; pero no son proyectos sociales. ¡Ilustración! litar, Zamora no pierde el enfoque estratégico y político
¡Civilización!28 del objetivo revolucionario de transformar radicalmente
la sociedad. En junio de 1859, desde Barinas, señala:
En el pensamiento del General del Pueblo Soberano, Eze-
quiel Zamora, confluye el mismo elemento donde se pro- Han abierto la era del gobierno propio de este pueblo,
yecta el fin último del Sistema Ideológico Bolivariano, para que dependa de sí mismo en la dirección y manejo
Robinsoniano y Zamorano. de sus propios intereses, han merecido bien la patria.
En mayo de 1859 Zamora trata la situación-objetivo del
esfuerzo revolucionario: Y junto a Bolívar y Rodríguez, invoca al tiempo como factor
determinante en el movimiento libertador de los pueblos:
Levantaréis el Gobierno Federal que asegure para siem-
pre la libertad, igualdad, fraternidad, dogma de la repú- Pero el tiempo que mira lo pasado, mira lo futuro, y por su
blica genuina, que proclamaron los patriarcas de vuestra mano pasa lo presente, los confundirá en el abismo de la
independencia.29 eternidad y sólo quedará en la memoria de la compasión
Y veréis abierta la nueva era de la federación colombia- de los que fueron en el movimiento destinado por Dios a
na; que fueron los últimos votos de nuestro Libertador, la regeneración y progreso de mi pueblo.
el Gran Bolívar.30
La trilogía de pensamientos se hace evidente, conforma
un todo coherente, un componente doctrinario, perfec-
28. Rodríguez, Simón, Sociedades Americanas. [En Obras completas. tamente definido y homogéneo, que señala el objetivo úl-
Tomo I. Ediciones de la Universidad Simón Rodríguez, 1975, p. 228.]
29. Zamora, E. A los barineses y apureños, 21 de mayo de 1859.
timo del Sistema Ideológico EBR: alcanzar un nuevo mo-
30. Palabras ilegibles, original, p. 36. [Carta a Benito Urdaneta. Dada en delo de sociedad (participativa, protagónica y solidaria).
el Cuartel General de Barinas, 19 de mayo de 1859.]
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Todo era extranjero en este suelo. Religión, leyes, costum- En Angostura (1819) ratifica su conciencia del proceso y
bres, alimentos, vestidos, eran de Europa; ni nada debía- su proyecto transformador de estructuras:
mos imitar. Como seres pasivos, nuestro destino se limi-
taba a llevar dócilmente el freno que con violencia y rigor Un hombre, ¡y un hombre como yo! ¿Qué diques po-
manejaban nuestros dueños. Igualados a las bestias salva- dría oponer al ímpetu de estas devastaciones? En medio
jes, la irresistible fuerza de la naturaleza no más ha sido ca- de este piélago de angustias, no he sido más que un vil ju-
paz de reponernos en la esfera de los hombres; y aunque, guete del huracán revolucionario, que me arrebataba como
todavía débiles en razón, hemos dado ya principio a los una débil paja. Por otra parte, siendo vuestras funciones
ensayos de la carrera a que somos predestinados.33 la creación de un cuerpo político y aún se podría dejar la
creación de una sociedad entera rodeada de todos los in-
Desde Kingston, Jamaica, señala, el 6 de septiembre de convenientes que presenta una situación, la más singu-
1815, la necesidad de conducir “nuestra revolución” ha- lar y difícil, quizás el grito de un ciudadano pueda adver-
cia la trasformación de las estructuras políticas y jurídicas tir la presencia de un pe1igro encubierto o desconocido.
del “sistema español que está en vigor”:
Y en Bolivia (1825) recoge su angustia vital en un men-
Por último, inciertos sobre nuestro destino futuro, y saje de alerta a sus contemporáneos:
amenazados por la anarquía, a causa de la falta de un go-
bierno legítimo, justo y liberal, nos precipitamos en el ¡Legisladores! Vuestro deber os llama a resistir el cho-
caos de la revolución. Se establecieron autoridades que que de dos monstruosos enemigos que recíprocamen-
sustituimos a las que acabábamos de deponer, encarga- te se combaten, y ambos se atacarán a la vez, la tiranía
dos de dirigir el curso de nuestra revolución, y de apro- y la anarquía forman un inmenso océano de opresión
vechar la coyuntura feliz en que nos fue posible fundar que rodea una pequeña isla de libertad, embatida per-
un Gobierno Constitucional, digno del presente siglo y petuamente por la violencia de las olas y de los huraca-
adecuado a nuestra situación. nes, que la arrastra sin cesar a sumergirla. Mirad el mar
que vais a surcar con una frágil barca, cuyo piloto es tan
inexperto.34
33. [Bolívar, Simón. Discurso de instalación del gobierno de las Provin-
cias Unidas de Nueva Granada, 23 de enero de 1815, Bogotá.] 34. Discurso ante el Congreso Constituyente de Bolivia.
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Para proponer seguidamente líneas estratégicas orien- obstáculos que oponen las preocupaciones a la segunda
tadas hacia la metamorfosis estructural, tanto en el ámbi- son enormes. El general Bolívar emprende removerlos, y
to jurídico y político, así como en el económico y social: algunos sujetos, a nombre de los pueblos, le hacen resis-
tencia en lugar de ayudarlo.35
Se han establecido las garantías más perfectas: la liber-
tad civil es la verdadera libertad; las demás son nomina- No hay otra vía, sostiene El Maestro, para construir repúbli-
les, o de poca influencia con respecto a los ciudadanos. cas y sociedades, que llevar adelante un amplio y avanzado
Se ha garantizado la seguridad personal, que es el fin de proceso revolucionario. Entendió la revolución en el sentido
la sociedad, y de la cual emanan las demás. En cuanto a lato del término y la dejó pendiente en su utopía concreta:
la propiedad, ella depende del Código Civil que vuestra
sabiduría debiera componer luego, para la dicha de vues- Una revolución política pide una revolución económica.
tros ciudadanos. He conservado intacta la Ley de las le- ...
yes —la igualdad—, sin ella perecen todas las garantías, Si los americanos quieren que la revolución política,
todos los derechos. A ella debemos hacer los sacrificios. que el peso de las cosas ha hecho y que las circunstan-
A sus pies he puesto, cubierta de humillación, a la infa- cias han protegido, les traiga bienes, hagan una revo-
me esclavitud. lución económica y empiécenla por los campos.36
En el modelo de pensamiento de Bolívar encaja el com- Lleva en su mente, además, la idea del arquitecto social.
ponente robinsoniano del Sistema Ideológico de las tres En 1850, cuando ya Ezequiel Zamora andaba por los lla-
raíces. En 1830, desde Arequipa, El Maestro viene en de- nos de Venezuela invocando la Revolución Bolivariana
fensa de su alumno, incrustado su pensamiento con el traicionada, el viejo Simón escribía en Latacunga: “Em-
mismo perfil revolucionario: piécese el edificio social por los cimientos, no por el techo,
como aconsejan los más: los niños son las piedras”.
La América española pedía dos revoluciones a un tiem-
po, la pública y la económica. Las dificultades que pre- 35. [Rodríguez, Simón. “Defensa de Bolívar” (1830). En Obras completas.
sentaba la primera eran grandes, el general Bolívar las ha Tomo II. Ediciones de la Universidad Simón Rodríguez, 1975, p. 206.]
vencido, ha enseñado o excitado a otros ha vencerla. Los 36.[Rodríguez, Simón. “Sociedades Americanas”. Ob. cit., t.I., p. 469.]
[90] [91]
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En efecto, ya en 1846, Ezequiel Zamora era el líder de su bien y es dueño de su suerte, y que de hoy en adelan-
la insurrección campesina contra e1 gobierno de Carlos te, Venezuela no será más patrimonio de ninguna fami-
Soublette, perfilándose como un auténtico revolucionario: lia ni persona, siendo la mayor recompensa de las victo-
rias alcanzadas contra el centralismo, el establecimiento
Como sabemos que ustedes están defendiendo la mis- del Gobierno Federal que da todos los bienes que ema-
ma causa que nosotros, tienen un denodado patriotismo nan de la magnífica institución, aunque la Patria, llena
y deseos de sacar a la patria de la salvaje y brutal domi- de munificencia, premia los buenos y leales servidores.
nación en la que la tienen los godos oligarcas, sostenidos Así hagamos el postrer esfuerzo que pueda necesitar de
por el gobierno faccioso y ladrón de Soublette. Allí dire- nosotros para dejar cumplida la gran misión que nos ha
mos con orgullo y bizarría: viva la libertad, viva el pue- confiado, y veréis abierta la nueva era de la Federación
blo soberano, elección popular, horror a la oligarquía, Colombiana, que fueron los últimos votos de nuestro
tierras y hombres libres.37 Libertador, el Gran Bolívar.38
37. [Zamora, Ezequiel. Estado Mayor, 19 de septiembre de 1846.] 38. [Zamora, Ezequiel. Cuartel General de Barinas, 19 de mayo de 1859.]
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Este libro se terminó de imprimir en diciembre
de 2013, en los talleres del Servicio Autónomo
Imprenta Nacional, La Hoyada, Caracas.
República Bolivariana de Venezuela.
El tiraje fue de 5.000 ejemplares.
h u g o c háv e z f r ía s
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